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CAUSAS DE CONDUCTA ANTISOCIAL:

La conducta antisocial es un fenómeno complejo y preocupante que desafía tanto a las

personas como a la sociedad en su conjunto. Mayormente se manifiesta a través de una serie de

comportamientos que van en contra de las normas sociales y a menudo implican violar los derechos

de los demás. Para comprender y abordar este fenómeno, es esencial explorar las diversas causas

que contribuyen a su aparición.

Los factores psicológicos pueden contribuir a la conducta antisocial. A nivel psicológico, la

falta de empatía, la impulsividad, la baja autoestima son factores que pueden llevar a una mayor

propensión a involucrarse en actividades delictivas, (Squillace 2011) Menciona que “En los últimos

años la impulsividad ha sido motivo de innumerable cantidad de trabajos en psicología”. Ya que

existen varios motivos por lo que las personas son impulsivas, pero este factor psicológico siempre

conlleva a perjudicar las relaciones personales y laborales.

De igual manera otro factor Importante para la manifestación de la conducta antisocial son los

factores ambientales. Los entornos desfavorecidos, la exposición a la violencia y el abuso infantil

pueden aumentar el riesgo de desarrollar comportamientos antisociales. “Las consecuencias

psicológicas que se han relacionado con la experiencia de abuso sexual infantil pueden perdurar a lo

largo del ciclo evolutivo y configurar, en la edad adulta, los llamados efectos a largo plazo del abuso

infantil” (Echeburúa y Guerricaechevarría, 2000). También la falta de supervisión de los padres y la

carencia de apoyo emocional pueden ser factores desencadenantes.

La conducta antisocial es un fenómeno complejo y multifacético, impulsado por una

interacción compleja de varios factores o causas como las mencionadas anteriormente, aunque
existen muchos más. comprender estas causas es esencial para abordar eficazmente este problema.

Las intervenciones y estrategias de prevención deben ser diseñadas para abordar estos múltiples

factores, adaptándose a las necesidades individuales y proporcionando apoyo a aquellos en riesgo de

desarrollar conducta antisocial.

Referencias

Squillace, M., Picón Janeiro, J., & Schmidt, V. (2011). El concepto de impulsividad y su ubicación en

las teorías psicobiológicas de la personalidad. Revista Neuropsicología Latinoamericana, Québec,

Canadá, 3(1), 8-18. Disponible en : https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=439542494002

Echeburúa, E. y Guerricaechevarría, C. (2000). Abuso sexual en la infancia, víctimas y agresores. Un

enfoque clínico. Barcelona. Disponible en: https://www.casadellibro.com/libro-abuso-sexual-en-la-

infancia-victimas-y-agresores-un-enfoque-cli-nico/9788434474697/685549