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• La condición humana de poseer un cuerpo físico y biológico guiado por las redes
neuronales del cerebro es la condición material que nos hace capaces de
emocionarnos, actuar, pensar, hablar y relacionarnos con otras personas y con el
medio ambiente.
• Aunque todos los seres humanos poseen un cuerpo, no todos lo viven de la misma
manera.
• El cuerpo vivido es el órgano de la percepción y a la vez objeto de la misma;
• (…) diríamos que la “única“ manera de conocer la música es vivirla, confundirse
con ella.
• La inmediatez, la realidad fenoménica y la situacionalidad espacio-temporal de la
percepción corporal son rasgos de una experiencia musical cuyo privilegio es el de
preceder y fundar el conocimiento musical tanto en su racionalidad como en su
funcionalidad.
• Para comprender mejor cómo participan la corporalidad y la corporeidad en la
cognición musical es necesario precisar las conexiones entre sensación,
percepción (o experiencia perceptiva) y conceptualización.
REFLEXIÓN .Los Cuerpos de la Música. López-Cano. Inma de la Rosa Rojas
Me gustaría exponer una de mis mejores etapas como instrumentista en las que
sentía verdadera conexión y “danza” entre cuerpo y música (y mente): me centraba en
transmitir con el instrumento aquellas imágenes y sensaciones que la música que tocaba
despertaban en mi. Allí no había ni miedo escénico ni nada que se le pareciera. Sólo
quería comunicar al público aquello que tanto me gustaba por medio del fagot, creando
entre receptor y emisor un canal de comunicación no verbal. Y ahí entendí y, lo que es
más importante, sentí que la música es un lenguaje, que se crea y se interpreta para
expresar algo personal (o no) a la vez que lo compartes con un público al que quieres
llegar transmitiéndole una o varias ideas, sensaciones, experiencias, etc. y del que, en
cierta medida, buscas un feedback, como viene sucediendo en las interacciones sociales.
Respecto a la forma de llevar a cabo mis clases, estas las quiero impartir de forma
diferente a como las recibí. Señalo aquí algunos de los primeros aprendizajes que deseo
transmitir a mis futuros alumnos:
Acabo esta reflexión con unas líneas del presente artículo (página 19) que
significan mucho para mí ya que después de muchos años de dedicación al instrumento y
a la música, sentí que:
(…) la música ya no es para el individuo una serie de objetos sonoros que poseen una
vida propia fuera de él, sino una suerte de prolongación de su yo, de su aquí y ahora, de
su ser, de su cuerpo. En este momento, el sujeto hace de una música un modo de
expresión, de organización de sus propios deseos, aspiraciones, emociones, modos de
entender la vida, un modo de producir estados de ánimo. Ahora existe un ensamblaje
firme entre música y sujeto que le permitirá producir más y más significaciones, ya sean
contingentes o trascendentes, estables o efímeras, vagas o concretas. La música se ha
vuelto entonces significativa para él.