Está en la página 1de 6

UNIDAD 18: Unidad y pluralidad delictivas

1. Pluralidad delictiva

Los problemas aparecen cuando a un sujeto se le atribuyen varios hechos descriptos en varios tipos y que prevén penas
diferentes. En esa situación hay que establecer si se utilizarán todos los tipos, solo algunos, cual o cuales y la penalidad
que se aplicará. Para solucionar tales cuestiones se encuentran las reglas del concurso de delitos.

Concurso de delitos y unidad de proceso

La expresión “concurso de delitos” refiere a la concurrencia o conjunción de varios delitos en la imputación que se efectúa
a una misma persona en una misma ocasión. La concurrencia en cuestión debe estar presente al momento en que se
dicta la resolución judicial estableciendo una respuesta punitiva para los hechos atribuidos al imputado, ya que en ese
momento debe decidirse sobre la calificación jurídica de los hechos y sobre la pena. A esto se hace referencia con “unidad
de proceso”.

Diferencia con la reincidencia

Reincidencia  el sujeto ha sido juzgado, condenado y cumplido pena por un delito, y luego, en un momento posterior,
comete otro delito por el que debe ser juzgado, y si es condenado, se lo declarará reincidente si se da ciertos requisitos.

Concursos  una persona que presumiblemente ha cometido varios delitos, debe ser juzgado por ellos en un único
proceso. Aquí la persona no ha sido condenada con anterioridad (o si lo fue, pasaron los años necesarios para que ese
antecedente no sea tenido en cuenta.

Unidad y pluralidad de acciones

Nuestro CP no registra una sola forma de concurso de delitos sino varias, atendiendo a si se está en presencia de la
comisión de un solo delito, o si se han cometido varios y en ese caso si se lo concretó a través de una acción o de varias.
Nos podemos encontrar así ante el “concurso aparente de delitos”, el “concurso ideal de delitos” y el “concurso real de
delitos”.

-Desde el aula-

Unidad de hecho: teorías para su determinación, es decir, saber si hay pluralidad o unidad de hecho.

1) Unidad de hecho (o unidad de resultado)  la unidad de hecho depende de la unidad de resultado material de la
conducta del delincuente, sea que lo haga con una o varias acciones, persiga uno o varios fines. Crítica: se aparta del
criterio óntico (Zaffaroni). Es inconstitucional porque el art. 18 CN aluda a la acción y no al resultado cuando dice “sin
juicio previo –ley previa- fundado en ley anterior al hecho del proceso” (Caramutti). Ej: A mata a B para heredar y
casarse con su viuda.
2) Unidad de acción en sentido natural  se tiene en cuenta solo si la conducta es material o corporalmente unitaria,
dejando de lado el resultado material causado. Críticas: no se aclara si la unidad natural de la acción consistía en uno
o en varios actos o comprendía, además de los actos realizados por el autor, el efecto real que producía, es decir, los
resultados como modificaciones del mundo exterior.
3) Unidad de acción fundada subjetivamente. Engloba 3 teorías.
a. Unidad del fin, propósito o designio del autor  hay unidad de hecho –y concurso ideal- si el autor de varios delitos
los comete con un único fin, propósito o designio. Esa unidad anímica unifica los delitos. Críticas: 1) la pluralidad de
delitos se unifica por el ánimo del autor y no por los elementos objetivos y subjetivos del delito; 2) la capacidad
unificadora del ánimo no tiene límites. Ej: empleado judicial roba boletos premiados, los cobra y luego destruye
pruebas.
b. Teoría del nexo ideológico de “medio a fin”  la unidad de hecho se funda en que el autor utiliza un delito como
medio para cometer otro delito. Crítica: la punición del concurso ideal corresponde al delito más grave, y a menudo
del delito medio es más grave que el delito fin, lo que resulta incoherente. Ej: alguien roba un auto para poder privar
de la libertad a otra persona.

1
c. Teoría de la regla del exceso del dolo (inseparabilidad natural o jurídica de las lesiones)  según Soler, hay
concurso ideal cuando las lesiones producidas por el autor son natural o jurídicamente inseparables, de modo que
queriendo el autor producir una debe producir necesariamente la otra y queriendo producir ambas no ha de
producir más daño que el causado queriendo una sola. Crítica: la tesis no surge del art. 54 CP, ni del concepto natural
de hecho (Núñez). Ej: homicidio a una mujer embarazada y le produce un aborto.
--

2. Concurso aparente de delitos

Concepto: Situación que se presenta cuando un mismo hecho parece que puede ser atrapado por varios tipos penales,
aunque ello no sucede porque uno desplaza al otro.

En numerosas oportunidades una misma conducta encuentra ubicación en varios tipos penales sin dejar por ello de ser
una sola acción. Ej: quien roba se apodera de cosas ajenas (art. 164 CP) pero también podría entenderse que hurta (art.
162 CP). No hay concurrencia de delitos sino solo apariencia de que ello ocurre, porque ni se cometieron dos hechos ni
se podría castigar dos veces la misma conducta (se estaría violando el principio constitucional de culpabilidad del hecho).

El concurso aparente de delitos no está legislado específicamente en el Código Penal, seguramente porque, en definitiva
los problemas que estudia deben ser resueltos a través de una correcta interpretación de la ley.

-Desde el aula-

Relaciones de los tipos penales entre sí. Dos posturas:


- Doctrina española: el concurso aparente supone que todos los preceptos en juego concurren efectivamente y de
hecho cabe en todos ellos, aun cuando solo uno de dichos preceptos será aplicable. (Mir Puig).
- Otra postura: la concurrencia es tan solo aparente, ya que una correcta interpretación de los mismos pone de
manifiesto, que desde un principio, en realidad solo concurre uno de ellos. (mayoritaria – Olazábal).
--

Principios de exclusión entre sí de los tipos. Se coincide en la utilización de los siguientes principios como dirimentes del
desplazamiento de los tipos penales entre sí:

- Especialidad  Se presenta cuando una misma conducta se encuentra incluida en dos tipos (ej: la acción de
apoderamiento está tanto en el hurto como en el robo) pero en uno de ellos se ha añadido alguna circunstancia que
le otorga especificidad. Por imperio del principio según el cual la ley especial deroga a la general, hay que aplicar el
último (el robo desplazará al hurto porque es un hurto especial por la utilización de fuerza o violencia). Esta relación
se da generalmente entre los tipos básicos y los calificados. El tipo esencial desplaza al tipo general.
- Alternatividad  La aplicación de un tipo excluye la aplicación de otro. Un tipo que refiere a la misma acción que otro
lo desplaza cuando se dan las particulares circunstancias que él enuncia respecto de dicha acción Ej: apropiación
indebida (art. 175 inc. 1 CP) y hurto (art. 162 CP). Para Creus y Zaffaroni este principio carece de autonomía.
- Subsidiariedad  Se presenta cuando un tipo penal está subordinado a otro, más grave, que lo desplaza. En estos
supuestos nos encontramos ante un tipo principal y uno secundario, cuya aplicación queda supeditada a la no
aplicación del primero, que es más grave. La subsidiariedad puede ser expresa, cuando la misma ley la establece (ej;
violación de domicilio, se aplica a la respectiva figura del art. 150 solamente si de la acción “no resultare otro delito
más severamente penado”), pero también puede ser tácita (ej: portación de armas llevadas para robar y el
subsiguiente robo con la misma arma). Deja supeditada la aplicación de un tipo penal a que no exista otro tipo con
pena mayor. El delito considerado subsidiario se aplica en cuanto no se de otro distinto que se refiere a acciones de la
misma naturaleza. Puede ser expresa o tácita.
- Consumación (o consunción)  Se da cuando un tipo contiene todas las fases de realización de otro (ej: el delito
consumado absorbe el delito tentado). La acción de un tipo, queda englobada en la más amplia de otro tipo, o bien,
una acción perfecta lograda como desarrollo dentro de aquella (Creus). Incluye “hechos acompañantes
caracteristicos” y otros autores agregan “hechos posteriores copenados”.

2
3. Concurso de delitos

Dejando de lado al concurso aparente porque precisamente no es concurso, nuestro CP regula expresamente dos
hipótesis de concurso de delitos, que son el concurso ideal (o formal) y el concurso real (o material). La diferencia
fundamental entre ambos es que en el concurso ideal se presenta una unidad de hecho con pluralidad de
encuadramientos típicos y, en cambio, en el concurso real se da una pluralidad de hechos con pluralidad de
encuadramientos típicos.

Concursos homogéneos y heterogéneos. La multiplicidad de subsunciones típicas puede producirse porque la o las
acciones realizan hechos distintos y lesiona diferentes bienes jurídicos, lo que nos colocaría ante concursos heterogéneos
(ej: robo y violación sexual), o bien porque reitera un mismo hecho o realiza hechos que afectan bienes jurídicos de la
misma naturaleza, lo que nos ubicaría ante concursos homogéneos (varios homicidios configurarían tantos homicidios
como hubo).

A. Concurso ideal
ARTICULO 54.- Cuando un hecho cayere bajo más de una sanción penal, se aplicará solamente la que fijare pena mayor.

Se presenta una unidad de hecho que da lugar a la multiplicidad de encuadramientos jurídicos. El primer problema que
se presenta para interpretar correctamente el precepto es el relativo a qué debe entenderse por “hecho”. Pese a que se
lo ha entendido como “movimiento”, como “resultado” o incluso como “fin” o “fines” perseguidos por el autor, ninguna
de esas ideas es acertada.

Recordando que la expresión “hecho” tiene raigambre constitucional (art 18 CN: “ningún habitante de la Nación puede
ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior al HECHO del proceso”), y también que se entiende por tal a la
conducta exteriorizada que mereció reprobación legal al ser incluida en un tipo penal, “hecho” es la conducta o
comportamiento tipificado penalmente. Resulta conveniente complementarla con un criterio de unidad témporo-
espacial que permita circunscribir la idea de “hecho” a lo ocurrido en un mismo lugar y en un mismo tiempo.

La expresión “…cayere bajo más de una sanción penal…” que utiliza el art. 54 del CP, se reconoce que debe ser
interpretada como “cayere bajo más de un tipo penal”, hipótesis ante la cual deben tenerse presente todos los tipos
tenidos en concurso ideal, pero la pena será única.

Punición del concurso ideal

Establece el art. 54 que la pena que se aplicará cuando un hecho cayere bajo más de una sanción penal es la “pena mayor”
de entre las previstas para los varios tipos penales que concursaron. Utiliza en esta oportunidad el Código un sistema de
pena unitaria en el cual la pena mayor absorbe a las menores. Elige una sola pena impidiendo la suma de otras (procede
de este modo en razón de que solo hubo una acción).

Si los distintos tipos penales que convergen en concurso ideal tienen establecida la misma especie de pena, la
determinación de la “pena mayor” se realizará comprobando cuál de las penas parciales es la más cuantiosa en su máximo
(o en su mínimo si los máximos son iguales); si, en cambio, los tipos penales contemplan penas de distinta especie, la
gravedad la determina el artículo 5° del CP (reclusión, prisión, multa e inhabilitación, en ese orden).

B. Concurso real
ARTICULO 55.- Cuando concurrieren varios hechos independientes reprimidos con una misma especie de pena, la pena
aplicable al reo tendrá como mínimo, el mínimo mayor y como máximo, la suma aritmética de las penas máximas
correspondientes a los diversos hechos.
Sin embargo, esta suma no podrá exceder de (50) cincuenta años de reclusión o prisión.

Se diferencia del concurso ideal en que no se produce por “un hecho” sino por varios, aunque ambos concursos son
iguales en cuanto presentan una pluralidad de encuadramientos jurídicos y en que la concurrencia de delitos se ha de
comprobar al momento de imputación contra una persona y la individualización de la pena.

La concurrencia de delitos propia del concurso real puede ocurrir tanto si los mismos han sido cometidos en forma más
o menos simultánea (en una misma oportunidad y contexto) o si lo fueron en forma separada. En cualquier caso, es

3
exigencia del art. 55 del CP que los hechos sean “independientes” entre sí, la independencia de los delitos significa que
ninguno de ellos está subordinado al otro, ni su existencia está sujeta a las condiciones de él. La independencia
desaparece por ejemplo cuando objetivamente los hechos se realizan en un mismo contexto delictivo (ej, el ladrón que
penetra a una vivienda y se apodera en la misma ocasión de distintos elementos –estaría cometiendo un solo hurto-); lo
mismo cuando los hechos son ejecutables en distintos momentos pero subjetivamente constituyen una misma trama
(delito continuado, ej del collar de perlas –De Olazabal-).

Punición del concurso real

Como en el concurso real de delitos cada uno de ellos tiene autonomía, sería posible que la pena se estableciese a través
de una acumulación de penas individuales, es decir sumando las penas previstas para cada delito en particular. Sim
embargo esto puede conducir a extremos absurdos como penas que excedan el tiempo razonable de vida de los
humanos.

Para evitar esto, nuestro Código, si bien admite en uno de sus supuestos –art. 55- un sistema de acumulación de penas
(“…la pena aplicable al reo tendrá… como máximo, la suma aritmética de las penas máximas correspondientes a los
diversos hechos..”), le fija topes (“sin embargo, esta suma no podrá exceder de cincuenta años de reclusión o prisión”).
Estos cincuenta años de reclusión o prisión constituyen el máximo legalmente posible en nuestro país de penas divisibles
en razón del tiempo, más allá del cual solo puede pensarse en las penas perpetuas (reclusión o prisión), a cuya aplicación
no puede llegarse sumando penas divisibles sino que deben estar expresamente establecidas en el tipo legal que se utilice
(ej: homicidios calificados –art 80-).

En el concurso real, la pena será diferente según las penas particulares de cada delito sean o no de la misma especie y
sean o no divisibles:

- Si todas las penas son divisibles y de la misma especie, el mínimo aplicable es el mínimo mayor y el máximo se fija
sumando los distintos máximos (sin exceder el tope de cincuenta años) –art 55 CP-
- Si concurren penas divisibles de reclusión o prisión, se aplicará la pena más grave teniendo en cuenta los delitos de
pena menor –art 56.1 CP-
- Si alguna de las penas no fuera divisible (como la inhabilitación absoluta del art. 19), se aplicará solamente la misma,
salvo que concurran reclusión y prisión perpetua, en cuyo caso se aplicará la prisión perpetua –art 56.2 CP-
- Las penas de inhabilitación y de multa se aplican siempre, con prescindencia de las reglas anteriores, esto es, se
agregarán en todos los casos a las demás penas.

La gravedad de las penas de distinta naturaleza se determinará por el orden en que se hallan enumeradas en el art. 5:
reclusión, prisión, multa e inhabilitación.

4. Unificación de las penas. Concepto

ARTICULO 58.- Las reglas precedentes se aplicarán también en el caso en que después de una condena pronunciada por
sentencia firme se deba juzgar a la misma persona que esté cumpliendo pena por otro hecho distinto; o cuando se
hubieren dictado dos o más sentencias firmes con violación de dichas reglas. Corresponderá al juez que haya aplicado la
pena mayor dictar, a pedido de parte, su única sentencia, sin alterar las declaraciones de hechos contenidas en las otras.
Cuando por cualquier causa la justicia federal, en autos en que ella haya intervenido, no pueda aplicar esta regla, lo hará
la justicia ordinaria nacional o provincial que conoció de la infracción penal, según sea el caso.

En principio, para habilitar la aplicación de las reglas del concurso de delitos, el CP requiere que la multiplicidad de
encuadramientos típicos se verifique al momento de dictarse fallo definitivo en un único proceso. Sin embargo, puede
ocurrir que por distintas circunstancias (ej, juzgamiento de varias imputaciones pero algunas por la justicia federal y otros
por las provincial, juzgamiento de varios hechos pero ante distintos tribunales de una misma provincia, etc), supuestos
en que debieron aplicarse los mandamientos del concurso de delitos pero que no recibieron ese trato, produciéndose
así, una especie de desigualdad ante la ley. Para evitar que ello genere perjuicios al afectado, el CP regula la denominada
“unificación de penas”; indicando en el artículo 58 que “Las reglas precedentes (las reglas del concurso ideal y real) se
aplicarán…” a los casos que describe y que merecían esos tratamientos, pero no los recibieron.

4
Casos de unificación de penas:
1. Juzgamiento de una persona que ya está cumpliendo condena  Situación de una persona que habiendo sido
condenada por sentencia firme y estando aun cumpliendo la pena impuesta en ella (en cualquier etapa y bajo
cualquier modalidad, pero nunca habiendo completado su ejecución), debe ser juzgada por otro hecho distinto. Una
vez comprobado, al dictar la nueva sentencia por el nuevo y distinto hecho, el juez debe proceder a unificar la pena
vieja y la nueva haciendo una pena única o total, atendiendo a las pautas del concurso ideal o concurso real, según
corresponda.
2. Dictado de dos sentencias sin cumplir reglas del concurso  Un individuo ya ha sido condenado por dos o más
sentencias firmes pero se omitió aplicar las reglas del concurso pese a que correspondía hacerlo. Ante tal situación,
se impone la unificación de todas las penas, pero solo si alguna de las partes procesales constituidas en la causa lo
requiere porque tiene algún interés legítimo (no es en este caso necesario que alguna pena todavía se esté
cumpliendo). Luego, intervendrá el juez que impuso la pena mayor, dictando una única sentencia referida
exclusivamente a la cuestión de la punición sin poder modificar otro aspecto que contengan los anteriores
pronunciamientos judiciales.
En ambos casos se debe proceder a la unificación de las penas. La nueva pena absorbe a las anteriores. No se debe
simplemente sumar las penas a los hechos anteriores sino que se debe practicar una razonable y adecuada composición
aplicando las reglas del concurso.

5. El delito continuado

Aquel en que con el cumplimiento de dos o más acciones un individuo infringe una misma norma jurídica y realiza un solo
delito (ej: bajo la única decisión de hurtar una máquina, y con el afán de no ser descubierto en el intento, alguien la
desarma y sucesivamente se apodera de sus distintos elementos hasta completar el apoderamiento total, cometiendo
así el único delito de hurto de esa máquina). Es esencial que los distintos hechos que se concreten sean llevados a cabo
con unidad de propósito delictivo (ligada a la importancia que se otorga al desvalor de la intención, permite fundamentar
la existencia de esta especie de delito).

No es lo mismo delito continuado que delito permanente, ya que en el primero se presenta una multiplicidad de acciones
separadas entre sí, y en el segundo una misma acción que se extiende en el tiempo. En el delito continuado existe una
pluralidad de acciones que configuran un solo delito (es decir, una situación inversa a la de los concursos de delitos).

Delito continuado y principio de legalidad

Existe aún hoy una discusión relativa a si el delito continuado está o no legislado en nuestro CP. Quienes piensan que no
está previsto indican que la sola mención del art 63 a un impreciso “delito continuo” es insuficiente porque no indica qué
ha de entenderse por tal, dejando lugar a interpretaciones que más bien son integraciones doctrinarias o
jurisprudenciales, que pueden incluso perjudicar al imputado. Quienes por el contrario sostienen que sí está incluido
(Olazábal), rescatan la mención del art 63 a un “delito continuo”, anotando que no se lo puede dejar sin sentido alguno,
y que la complementación que se hace para darle contenido al concepto no deja de ser similar a la que se lleva adelante
para los tipos penales abiertos. Sin embargo, desde una perspectiva político-criminal resulta difícil sostener la atenuación
de la punibilidad que termina recibiendo el delito continuado, razón por la cual mundialmente existe un fuerte
movimiento en favor de su abolición.

Requisitos del delito continuado

Se debe ser exigente en los elementos constitutivos para evitar que bajo su manto se amparen múltiples delitos
independientes que deberían ser reprimidos bajo las reglas del concurso de delitos. Los requisitos exigibles son:

 Pluralidad de hechos  Deben presentarse varios hechos, materialmente diferenciables entre sí, cada uno de los
cuales considerado aisladamente tiene su propia tipicidad. Los hechos pueden consistir en acciones propiamente
dichas o en omisiones. NOTA: si no existieran los restantes requisitos, cada uno de esos hechos podría ser punido
junto a los demás bajo las reglas del concurso real.
 Unidad de propósito delictivo  Los múltiples hechos son realizados dolosamente bajo un designio único y final que
comprende a todos. Debe consistir en un hecho típico y no una finalidad extra típica (robar para ser millonario). El

5
autor, no debe necesariamente conocer cuántos hechos parciales deberá emplear para el propósito. Pese a que cada
hecho es típico, son todos dependientes entre sí.
 Homogeneidad de bienes jurídicos ofendidos  Los bienes jurídicos afectados por los distintos hechos deben ser de
la misma especie (deben merecer igual tratamiento jurídico-penal). No importa si los ataques tuvieron o no la misma
intensidad (ej, si todos llegaron al grado de consumación o alguno quedó en tentativa).
 Homogeneidad de los modos de comisión del delito  La forma o modalidad de los ataques al bien jurídico debe ser
similar, lo que surgirá de los tipos penales bajo los que encuadren los hechos.
 Unidad de víctima  La victima de los distintos hechos debe ser única. Este es un requisito que no se exige sin
embargo en todos los casos, pero si cuando se trata de bienes personales (ej, integridad sexual).
 Cierta conexión témporo-espacial  Pese a que los hechos ocurren separadamente, deben mantener una relación
de proximidad en cuanto al tiempo y al espacio, que permita al menos sostener que no existieron varios propósitos
delictivos sino uno solo.

Pena del delito continuado

No existe en nuestro ordenamiento penal ninguna disposición particular relativa a la pena correspondiente al delito
continuado. Deberán aplicarse las penas de los tipos penales que correspondan al hecho y a los criterios
individualizadores considerados en los arts. 40 y 41 del CP.

También podría gustarte