ll , 3

Cap|tu|o
Las disciplinas sociales de la Antropología
UI
Introduccion
La otra gran área antropológica que agrupa, a su vez, varias disciplinas
especializadas -que giran fundamentalmente en torno a Sociedad y Cultura-
es la que podemos caracterizar bajo el nombre genérico de Antropología Cul-
tural o Social también llamada Etnología. Esta se preocupa, en esencia, de la
evolución supra-orgánica del hombre y la realidad socio-cultural de las pobla-
ciones humanas. Pretende estudiar comparativamente, en el espacio y en el
tiempo, a las sociedades humanas y sus creaciones culturales, con el objeto de
establecer sus orígenes, funcionamiento y los procesos de cambio de sus com-
plejos culturales e instituciones sociales (R. M. Keesing, 1981; Haviland, 1994).
Antropología socio-cultural
Esta área antropológica intenta establecer tanto secuencias culturales
para determinar cambios en el tiempo en una o más poblaciones continuadas,
como también estudiar las poblaciones aisladas o conectadas en el espacio.
Pretende descubrir el grado de interdependencia de sus instituciones socio-
culturales, como también entre ellas y condiciones extra-sociales. En el primer
caso, consideramos que actúa como disciplina histórica (historia cultural, bá-
sicamente) y en el segundo, como típica disciplina social.
Naturalmente, ambas tendencias investigativas, tanto la de un estudio
diacrónico de las culturas, como la de su estudio sincrónico, están
orgánicamente relacionadas entre sí; como también, ligadas a las tendencias
filéticas y taxonómicas de la antropología física. Esto es válido, especialmente,
en la intención antropológica común a todas estas disciplinas de esclarecer la
evolución humana total, tanto natural como social. Igualmente, explicar las
relaciones permanentes entre lo biológico y lo socio-cultural.
59
-
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t di Como hemqs indicado, la antropología socio-cultural es el campo de los Sin embargo, la antropología cultural no ha renunciado, de ninguna ma-
É; Él 108 antrppologicos que trata propiamente con la sociedad y su cultura. nera, al estudio de las sociedades complejas, socialmente estratificadas. Por el
_ onvenien e, en este sentido y antes de seguir adelante en nuestras explica- contrario, en los últimos tiempos se ha notado una tendencia creciente a aplicar
pionqs, iräcerlitar previamente una escueta definición de Cultura. Esto es, como los métodos y técnicas de investigación, desarrollados en el estudio de las socie-
Ta 1en ien e a mayoria ' de los antropologos,
' - » - Edward B.
desde que el britanico dades simples, al campo de las sociedades complejas. En dicho campo se ha
y or -uno de los padres de la antropología moderna- diera por primera vez operado ya un contacto estrecho y un fecundo intercambio metodológico entre
su definicion en 1871 (Tylor, 1958:1). la antropología cultural y las restantes disciplinas del area de estudios sociales.
al comEn Ortla actu '
_ qlidadylcon ' ' amplio,
un criterio ' debe entenderse por cultura En ese sentido se puede mencionar, de preferencia, la serie de investiga-
ción a po amilen o socia y todo lo creado por la actividad
- - humana, en oposi-_ ciones antropológicas o sociológicas sobre diversas comunidades y subculturas
que a natura_eza nos da generosamente, sin exigir mayor esfuerzo de las sociedades complejas, como por ejemplo, las realizadas con comunida-
por nuestra parte. Precisando mas, debemos entender la cultura como el con- des campesinas o con colectividades religiosas o minorías étnicas. Igualmente,
junto o totalidad de las estructuras, más o menos coherentes, tanto de conceptos los problemas de la integración cultural de los inmigrantes a sus nuevos hoga-
I I I I I I I
Íãilïilmientos y valårels, como de mecanismos e instituciones del comportamien- res urbanos, ya provengan éstos de otros países o de la propia comunidad
S ililiano y au; e os propios artefactos, productos de la acción social de los rural. También pueden mencionarse los estudios sobre etnicidad, tanto a un
eres umanos. odo esto condiciona, ya sea explícita o implícitamente el com-
nivel regional como nacional; como igualmente estudios sobre pueblos y co-
portamiento y la conducta de los miembros de un grupo human@ çgncreto de
munidades nacionales enteras y sus culturas; y sobre subculturas de clases
una comunidad o sociedad. I
sociales, urbanas, rurales, etc.
de unaEste. con' f ° de aprehenderse y ser transmitido
d jciiinto presenta la caracteristica . _
Estas tendencias más modernas de la antropología socio-cultural la han
ci I soqied a a otra, de una generacion a la siguiente, en forma de una tradi-
obligado, a su vez, a realizar estudios interdisciplinarios, en especial con otras
heqfllålïo-Cia ,de iånalherencia cultural, que no es herencia biológica ni tampoco
disciplinas sociales, como la sociología, la psicología social, la economía y aun la
_ $12 11`lh1V1 UH , Sino que, eminentemente social. Ella se transmite en las politología y la historia. Sin embargo, hay diferencias entre el enfoque
socie1 a es _ umanas debido ' a la capacidad
- - -
de simbolismo . y
que las caracteriza
antropológico y el de las otras disciplinas sociales. Se distingue éste, por ejem-
que as distingue, justamente, de las sociedades animales. En especial es trans-
. . 1 plo, de la historia como se entiende corrientemente, no por la exclusión de estudios
mitida por ese extraordinario vehículo simbólico constituido por el len ua`e en
históricos de pueblos, instituciones, creencias o costumbres, sino por usar, tanto
cualesquiera de sus variadas formas. La cultura se halla sometida a un cänslaiite
como sea posible, la observación directa de los seres humanos, de sus activida-
cambi do y sus elementos estan ' organicamente
f - -
correlacionados. De aqui, se des-
des y sus productos, más que de los datos documentales. También, por ver los
pren e que la cultura es un producto de la sociedad humana y no existe sin ella
resultados de cualesquiera de estos estudios como parte del registro huinano
O fueraTdecplla. (Pìira una explicacion mas amplia, vease el capitulo siguiente.)
- . I I ' ›' 1 - .
total y como una contribución a la mejor comprensión de los complejos procesos
de la raIt icioiciìa ìnente, åqs antropologos ' -
socio-culturales se han preocupado
involucrados en la evolución biológicay social de la humanidad.
U _ s _cua uras H eI o s pue os no- literarios,
' ' los llamados vulgarinente pueblos Además de esas semejanzas y diferencias, algunas disciplinas
primitivos o mas correctamente sociedades tribales. Se han dedicado a estu-
antropológicas, como la arqueología y sobre todo la etnohistoria, entran en
diar esas sociedades pequeñas, sin clases, más exóticas, más simples, con muy
contacto directo con la historia. La antropología socio-cultural entabla, tam-
poco o casi nada de datos escritos. Este hecho les ha permitido comprender
bién, cada vez más estrechas relaciones con las disciplinas sociales típicas.
todos
I los as _ p e ctos '
estas sociedades -
simples, , .
como ser, tecnologicos, econo- , Habría que agregar aquí que, con un criterio amplio y post-moderno, debe-
(išiåggs, pqciales, esteticos, etc. Cada uno de estos aspectos en las sociedades de mos considerar hoy entre las disciplinas sociales no solo a las clásicas ya
.Si 1 Grarias complejas, por el contrario, constituyen objetos de estudio mencionadas, sino también a la misma historia, como igualmente a la propia
de diferentes disciplinas. Estas provienen tanto de los estudios sociales como
I antropología cultural. Como dijimos antes, se trata en última instancia, de una
de las humanidades, a saber, la sociología, la economía, la estética, etc. integración interdisciplinaria de todos los estudios sociales en el análisis de las
formaciones sociales concretas. p
'il 60 61
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En el estudio de la esfera material de la cultura y de las tecnologías, la
antropologia necesita el aporte de la economía. Por otro lado en ese campo de
. if
estudào de la antropologia que se refiere a cultura y personalidad y que ha
toilna ƒ o tanto auge en los ultimos anos, el aporte y la colaboración con la psi-
coiogia ylpsicologia social son fundamentales. Es indudable que la conexión
mas amp ia y.mas importante de la antropología con los estudios sociales es a
traves de la disciplina madre de estos, la sociología.
Sabemps que en la sociedad humana, lo social y lo cultural son insepa-
rables entre si y estan íntimamente entrelazados y,-por lo tanto ninguna de las
- . . . f
šlisciplinas sociales puede en verdad separar los dos aspectos de esa unidad.
in embargo, para el objeto de la penetración de la realidad social por medio
del conocimiento sistemático se hace necesario didácticamente , si no separar__
105, POE lo menos hacer mayor hincapie en uno o en el otro de dichos aspectos.
1 s en ese enfoque distinto en donde radica, justamente, la diferencia
eptre. Ia alritropologia y la sociologia. La primera dirige, principalmente, su
a encion acia el comportamiento humano y todas las creaciones culturales
que lo moldean y conforman, es decir, la cultura propiamente tal. La segunda
se preocupa, en cambio, fundamentalmente de las relaciones humanas y las
interconexionesentre
' -
los ,seres humanos. Ellas provocan los procesos sociales
y las formas de mtegracion social y sus funciones, con sus respectivas estruc-
turas sociales, o seâ, la sociedad misma. (Volveremos más adelante a esta
com_ paracion, cuan o tratemos la antropologia f social
- en particular.)
- Ambas
disciplinas tienden ahora a aplicar en el estudio de los fenómenos socio-cultu-
rales el analisis inductivo y la prueba de las hipótesis en forma crítica, que han
sido los canones científicos en los tiempos modernos
,Debemospresuponen al igual que en las ciencias naturales y biológicas,
el caracter cientifico que presentan también los estudios sociales Solo existe
entre estos dos grupos de disciplinas, una diferencia de grado en la aplicación
I I 1 _ - .
deåuiåietodo ciiïntifico, mas no de contenido. Pero la distinción está en que los
1es '
ios socia es deben estar ligados - historica
a la praxis - › - de la sociedad
- y, por
o tanto, son inseparables de las manifestaciones ideológicas de ésta. En el com-
portamiento social debe tomarse en cuenta el elemento conciencia, el que no
. t . ,
exis e en el âomportamiento de los fenomenos naturales. Esto conduce, a ve-
C
es, a una icotornia en las disciplinas sociales entre el estudio externo
I n g ¡ . '
objetivante y positivista y la observación interna participante y comprometida
del humanismo antropologico. Todo esto ha hecho que en los últimos tiempos
ge reqmplace, cada vez más, el nombre de Ciencias Sociales por el de Estudios
ocia es.
1 62
' "i . . . . --__ _ _ . . . . .._ ._........................................ _ ._
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Tanto la dispersión de los intereses de estudio -las distintas áreas cultu-
rales y la aplicación de diversas técnicas o métodos- como el desarrollo histórico
de las disciplinas, ha empujado a la especialización y separación de campos de
estudio en el análisis de los fenómenos culturales. Así, podemos dividir la an-
tropología socio-cultural, tomada en su sentido más amplio, en varias
disciplinas. Usamos aquí ese término en un sentido genérico, que aglutina a
todas las disciplinas culturológicas de la antropología (Hoebel, 1961).
Divisiones de la antropología socio-cultural
Dentro de la antropología socio-cultural así entendida debemos, sin lu-
gar a dudas, anotar a la Etnografía como la disciplina más antigua de este
campo. Ella se ha dedicado a la descripción sistemática de las así llamadas
culturas “primitivas”, o mejor dicho aborígenes. Constituyen ellas sistemas
socio-económicos y heredades culturales de los pueblos con sociedades de ni-
veles tecnológicos simples y sin clases sociales. En otras palabras, es el estudio
de las formaciones económico-sociales no-clasistas o también llamadas tribales.
Es una relación descriptiva de pueblos particulares e históricamente concre-
tos. Más tarde, el método etnográfico, surgido de esta disciplina básica, se ha
aplicado al estudio de cualquier tipo de comunidad.
La etnología, que surgió como un desarrollo de la anterior, se preocupa
del análisis de los sistemas socioeconómicos y heredades culturales, de prefe-
rencia también de los pueblos y sociedades simples, tribales y de bajos niveles
tecnológicos. Su estudio se basa en la etnografía y pretende revelar el origen,
funcionamiento y procesos de cambio de los complejos culturales e institucio-
nes sociales de dichos pueblos. En un sentido amplio es el estudio de la historia
I
de pueblos y culturas (Birket-Smith, 1952). En su análisis ha enfatizado la ne-
cesidad de considerar problemas particulares de las distintas sociedades, con
enfoque comparativo, que abarque la especie humana como un todo.
Actualmente, el énfasis de la etnología está puesto en el .estudio de co-
mimidades. Estas pueden ser tanto tribales, como comunidades y subculturas
de sociedades clasistas, del tipo de minorías nacionales y étnicas o aun nacio-
nes enteras y pueblos modernos completos. La etnología estudia las culturas
de los distintos pueblos vivientes distribuidos sobre la faz de la tierra. Se pre-
ocupa también de culturas de pueblos desaparecidos, pero de los cuales han
sobrevivido documentos históricos, en este caso entramos ya al terreno de la
disciplina denominada Etnohistoria (Véase Cuadro 2). `
63
"T l
La arqueología, en cambio, es una disciplina que estudia expresamente - ' 'eSta_ to
las culturas pasadas en base, casi exclusivamente, a la documentación ofrecida vez, Por parte de la arqueolpgia, ' en Íu deseo _ Culturas de incrementar materiales su conocimien
Trata de
sobre a uellas anonimas ' ' y ragmen arias Í ' _ j -_ _ _ a
por los restos materiales de dichas culturas que han subsistido a través del
tiempo. Sii finalidad es reconstruir las sociedades pasadas y estudiar sus cam- blecer -cion ayuda de la antropología fisica- su aspecto biologiflfì Y/ aïfjìfflad
bios, movimientos e influencias mutuas. Estudia el pasado de la humanidad y por las comparaci- ones etnologicas _f ' _ e Ihistoricas,
_' ' ' descubrir su caracter e ico y
se preocupa tanto de su historia cultural como de la reconstitución de su vida si- es osible ' su nominación' ' historica. I _
diaria y cultura en un período determinado. En los últimos tiempos, algunos aun E tlf: indica ue la investigación arqueologicã, El SU 'fL11`1'10f no GXCIUYE un
' S' " ` lille las culturas pasadas Ella pretende también, E1110 P0S1b1e/
autores consideran a la etnografía como un simple método de observación de esmdlo Slìlcrolllco ' t n un momento dado de una formación social, como
la etnología o como su nivel descriptivo. No así la arqueología, que se ha cons- ocer e funcionamien o e
tituido de hecho en disciplina independiente (Cuadro 2). coll
asimismo, ' además de la esfera material de_ _la cultura, _ COHOCGT SUS estructuras ridad Y
funciones- -
sociales '
e inclusive ' su vi'da espiritual. Sin _ embarg0, GS C011 Segu
Los datos de la arqueología permiten confirmar las hipótesis sobre las
grandes etapas o hitos de la evolución social de la humanidad. Esto va desde en l 0 que se refiere al descubrimiento de regularidades -f 'y, tal1 vez,1 de d nde193795laque ar-
. -» de evolucion socio-cu tura 0
las sociedades de recolectores de alimentos hasta aquellas de cultivadores dicen relacion con las etapas y proceso I 1/ _ (Berdichewsky
tribales sedentarios. Después, a las sociedades de civilizaciones literarias ur- ' h dado importantes aportes a la teoria antropo ogica _ f
banas, organizadas en estados, con profesiones especializadas y estructuras queojloìjla a ` lmente válido en el análisis del paS0 C1@ 1215 f01'maC10neS
1965 ,' - sto es -especla - ' ' as a otras sobre todo en e 1 es clareci-
clasistas estratificadas. i C economico sociales prehistoricas de un _ _ _ alâti uas
Se ha comprobado que estas han sido fases consecutivas en la historia de '
miento de las primeras sociedades complejas y_ C1V111ZE1C101`1e5 _ - 8- ' d -
la humanidad, pero, al mismo tiempo, se ha refutado cualquier idea de que ha ' ' alidades interrelaciona as.
habido una tendencia inevitable para todos los pueblos de pasar, autónoma y En resumen, las
1) establecer la arqueologla
secuencias ' cronlo t1enelt're`S
ogicad fmd s e 3) sociedades
fundamentar pasadas' f 2) esta-
y esclarecer
sucesivamente, a través de tales etapas. El crecimiento de la cultura humana ha - os e vi a'
sido en realidad un inmenso y complejo proceso de descubrimientos, innova- blecer Y reconstrulr sus íjulturas l eâll ocio culfural de la sociedad humana
de desarro o evo ucion s - j
ciones, difusiones y adaptaciones, en un proceso de evolución social multilineal. los genera
en pmceslolì _ n es te sentido la arqueología _ ha ido _derivando, - cada - 1- vez mas, »S des- de
La arqueología es, indudablemente, la disciplina culturológica de la antropolo- , f ir de una disci ina ma
una arqueografia a una arqueologia SOCIHL GS C190 .« P
gía que más hincapié hace en las categorías temporales. Ella constituye criptiva a una más analítica (Berdichewsky, 1995)- b _ I _ d a
igualmente, como está dicho, uno de los lazos de unión entre la antropología y la f - ' ola versión ritanica m0 em
La Antrop0108181 Soclal “ene a âer Acnotlld lo ía Cultural norteamerica_
1 a 0 O
historia. Su preocupación central es, justamente, establecer las secuencias tem- de la Etnologia europea o dela llama _ 1 ,
porales de las culturas pasadas, tanto en el orden local, como universal. a En las últimas cuatro o cinco décadas se ha ido imponiendoen OS. P211595
Es necesario insistir aquí que la propia etnología pretende, a su vez, n l 1osa ` ones e inclusive en Latinoamérica. Es difícil precisar _ las diferencias
- - que_
aunque con posibilidades menores y alcance más limitado que la disciplina íaïfšsentá ahora con la moderna etnología europea. Es posiblâ, tal vez, mql1Câ1è ¿ala
- - , . La antropologia ' social, ' ` tintamen e
is
anterior realizar, además del estudio sincrónico de las culturas que la caracte- gunas dl ferencias metodologicas. V _ _
riza, un estudio diacrónico de ellas. Es decir, intenta también establecer etnologia, › no se preocupa mal/Ofm ente de un ana'1'isis _
` h'is t'rico0 , de sociedades
- ›f- En
y
- -f
ie en el uso mas ' estricto del metodo cienti ico. _
secuencias culturales de sociedades vivientes contemporáneas, pero en dife-
culturas Y hïejgran hmcapl modernas tendencias cientifistas de los estudios
esto marcha e a mario con aS _ _ . _, 11 S
rentes grados de desarrollo. Desde luego, que en esta intención se hace
- _
- ha mcorpora do varios - metodos f ' J
y tecniCaS de investigacion de aque a
indispensable un confrontamiento de los resultados de la etnología con los de sociales, _ , _ H
. - ' écrucas antro olo icas en e as.
la arqueología, en el deseo de construir un cuadro veraz y correcto de la evolu- Y ha mtmducldo' a su Vez' metodosfy t 1 tn lo Iía âr el estudio de comu-
ción de las sociedades humanas (véase Cuadro 9). Se ha preocupadü, mi-1Ch0 mas que a e 0 'P _ ,Í
Este mismo afán debe traer un intercambio de datos con la filética hu- Hidãdes Y sub Cu 1*;uras d e las sociedades . complejas - - y cuando' ' realiza
or aniza-es os
- - ' análisis de sus instituciones y g
mana o paleoantropología, como también naturalmente, con los datos y estudlos
-f
cion social. ' Se Interesa! enloespeclall
Lea sìntropo S ía sociaell el
tán al'tG del PrinciPio
intärelacionados Y porfuncional
lo tanto, de que todos
para Conocer
resultados de la historia. Estas relaciones interdisciplinarias se continúan, a su
los aspectos e a cu ura es f
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64 65
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bien uno de ellos es necesario estudiar también los otros' sin embarg 1 datos y penetrar en la realidad socio-cultural. Mientras que la sociología usa
_ o es e
comåì ortamiento
d 1 so cial
` el que mas ' le interesa.
' Se halla preocupada I por la bus- , técnicas extensivas de recolección de datos, la antropología social prefiere las
que a e eyes generales del comportamiento social humano y por la definieión técnicas intensivas, empleando métodos de observación en profrmdidad y hasta
de tipos de organización social. individual. La sociología prefiere la observación externa, la antropología la ob-
La etnolo ía a t ' - - - servación desde adentro, participante. Estos métodos conducen a la sociología a
en todos loscongo
económica as ìcty d os clfelopfflcdgladculturalƒ
fes u io e la cultura, en cambloƒ
tanto deSesu mteresan
esfera material por Igual . y descubrir, talvez, los subyacentes abstractos del comportamiento social, mien-
e S . . 1
ñadas no ¿O10 u -era social o del mundo espiritual. Ellas estan empe- tras que la antropología logra un conocimiento más íntimo y concreto de éste.
d f . en _ un_ ana isis cientifico ' ' de la cultura y sociedad - actual, objeto _ Naturalmente, que estos métodos son diferentes, como producto de un
e su estudio, sino, igualmente, en establecer su historia. enfoque distinto, pero, en ningún caso, deben ser excluyentes. Por el contra-
_ La antro p olo g ía social, ` en cambio, ' ha llegado incluso - a cuestionar _ el rio, ambos enfoques y sus respectivas tendencias investigativas permitirán,
propio concepto tradicional de cultura, el que ha sido siempre herramienta combinados, obtener un conocimiento más cabal y acabado de la compleja
conce P tual fundame _ ntal,de analisis ' ' ' de las escuelas etnologicas, › - tanto euro- realidad socio-cultural. Así lo comprenden ya las nuevas generaciones, tanto
peas como americanas (vease mas adelante la crítica del concepto cultura) Los de antropólogos sociales, como de sociólogos. De aquí que se han hecho, en la
grupos sociales y culturas que estudia la etnología, como dijimos se refieren segunda mitad del siglo XX, cada vez menos raros los intentos sociológicos y
- _ f
especialmente a comunidades, ya sea tribales, minorías étnicas pueblos y na antropológicos de realizar programas conjuntos de investigación, desde Evans-
ciones ãnteras o cualquier otro tipo de e0mumdad_
. " 1 . _ I _
Pritchard (1957) y Nadel (1955) hasta la actualidad (Durham, 1999). Esto es
1 I omosecomr _ ' '-
p enderafacilmente, . _ . del campo de la antro-
la disciplina _ más necesario aun si aceptamos el principio de alguna forma de integración
po ogia socio-cultural que esta mas relacionada y más cerca de la sociología es de las así llamadas ciencias sociales.
sin duda
con ella išn la Verdantro já olo gia ' social.' Para algunos llega inclusive - - -
a identificarse - - ' Integración no excluye, obviamente, diferenciación ni tampoco especia-
ambas En - este a tues cas i iinposibleiestablecer ' una separacion -› tajante - entre lización; esto es válido para el propio campo integrado de la antropología
cho más arriba Sep 1 (1), es valida aqui la comparacion general que hemos he- socio-cultural, donde se han generado especialidades. Así, por ejemplo, han
1 T en re ei campo de la antropologia f socio-cultural
- y la sociologia - , surgido en las últimas cuatro o cinco décadas importantes especialidades de la
genera _ al vez podriamos agregar aun que la antropología social eojncjde antropología social. Ellas son la Antropología Económica y la Antropología
con cuales
ella la sociolo ušría en f el est
_ I udio ' de la estructura y comportamiento - -
sociales. Para Política, como también la Antropología Urbana y los Estudios Etnicos o
da como grte d a uncion t d o estructura social ' investigada
' ' esta› mirada - y enfoca- antropología de las relaciones “raciales” y étnicas e inclusive una Antropolo-
está cOmP dde un o o socio_ cultural y cada comportamiento - o actitud . social _ gía del Desarrollo.
E pren -1. o como formando parte de un contexto cultural. Naturalmente, estas especialidades, a la vez de diferenciar a la antro-
1 I s esa vision del conjunto cultural, holística, lo que impide que la anh-0_ pología socio-cultural y hacerla más profunda y compleja, establecen también
po ogia social se confunda totalmente con la sociología. Pero, este mismo hecho un puente real con otras disciplinas sociales, como la economía, politología y
conduce a otra consecuencia diferencial entre estas disciplinas. Estos conjun: sociología (Berdichewsky, 1998). Una más reciente especialidad es la Antropo-
tos socio-culturales orgánicos que estudia la antropología social son pe "' l logia Pedagógica (Nohl, 1950). Ella, según Paulo Freire, se convierte más y
_ _ _ quenos
ya se trate de las reducidas sociedades simples o de comunidades y subculmraš más en la práctica misma, como la reflección y la acción de hombres y mujeres
dentro
damenïã '
las Íociedades complejas. ' Asif pues, la antropologia , social _ trata, fun- sobre su mundo social circundante para transformarlo (Freire, 1970).
bien con men e , con t microestructuras,- mientras ' -
que la sociologia , lo hace, mas , La Antropología Económica, que no se remonta más allá de unos sesen-
t , IIIEICIOBS ructuras y esto conduce, por ultimo, a una nueva diferencia ta años con los trabajos de Richard Thurnwald (1950), Raymond Firth (1939)
en re aãagas, ahora en el ambito de la metodología. y Melville Herskovitz (1954), en las décadas de los '30 y '40- ha crecido en
J 1 ienÍ e S_C1@1"f0, ` 1301110 11911105 d1Ch0, ' que ha habido - -
un intercambio _ de importancia de manera notoria, a partir de la década de los '60. Trata de descu-
metodos y tecnicas de investigación entre las dos disciplinas' sin emb brir y analizar los diferentes sistemas y procesos de producción, circulación y
subsisten las diferencias en las tendencias metodológicas para obtener
artigo,
os consumo, particularmente al nivel comunitario, tanto de las sociedades tribales
" ii 66 67
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como _ c,ampesinas
' Igualmente estudia _
s - _
poracion y articulación a las 'ec onomias ' U5de
PÍOCGSOS y mecanismos de incor-
mercado _, tant 0 de sociedades
'
Un capítulo de la etnología o de la antropología cultural que se refiere a
pre-capitalistas, como capitalistas a ' ' _ los estudios sobre Cultura y Personalidad ha obtenido, en los últimos años,
también con la ____eS__ón del ___eS_______)_;__i(._1_n socialistas. En este sentido se enfrenta carta de ciudadanía convirtiéndose, prácticamente, en una disciplina más del
La antropología del desarrollo e i campo de la antropología socio-cultural. Ella se esfuerza por identificar las
nado aparecen así com 0 una extensión ' Suälmente los estudios del cam P esi-
d (-2 la antropologia » economica. , _
relaciones entre las culturas y las personalidades de los individuos que las
Naturalmente, estas dos L1'ltimas, tambien -f estan › muy ligadas a la sociol ' constituyen. De qué manera el contexto cultural condiciona la formación de la
del desarrollo y sociolo ' - 0313 personalidad y cómo son internalizados los valores culturales del ambiente
819 1'U1"H1, respectivamente (Leclair y Schneider '
M. Godelier, 1970; B. Berdichewsky 1979) ' 1968'' social circundante en las personalidades individuales. Igualmente, cómo las
personalidades individuales fuertes (líderes naturales, etc.) influyen y afectan,
_ La antropología P olítica es o igra de las relativamente - recientes especiali- a su vez, en cierto grado la marcha de la cultura. Aquí se combinan las técnicas
zaciones en la antropolo ' gia social ' - - -
, la que Se micia formalmente solo en la decad ,
de investigación, teorías y hasta personal con la psicología, psiquiatría y la
de los '40 Desde esa é oca s h
. f _ . a
P G a e ectuado una variedad de estudios, tante psicología social. (Linton, 1942, 1959). Esta rama suele llamarse también an-
etnográficos como etnohis toricos ' ' aun reh` ' ' - -
Y p istoricos de distintos as ectos d 1 tropología psicológica y tiende a ligarse con la antropología pedagógica.
poder e instituciones políticas en sociedades ' '
tribales " Pel origen - e
mismo de esas instituciones oliticas. ' ' , com o tambien El estudio del folklore se convierte, cada vez más, en una disciplina de la
Este ' - antropología socio-cultural. Ya no se puede estudiar el folklore en un sentido
con respecto al origen d l E t Pd ha Sldo el C350, _ particularmente
, _ f
(M. Fried, 1973; Berdichìwsìïç 1099/5e)l desarrollo de la Sociedad polmca estatal anecdótico y superficial; se impone, necesariamente, su análisis sistemático y,
También ha habid o variados ' ' sobre mo ' ' especialmente, su comprensión como una parte orgánica y funcional del todo
análisis vimientos campesinos
los pueblos nativ OS, Como igualmente ' y de cultural. Solo el enfoque antropológico da su verdadera dimensión al folklore.
sobre corrientes ' ' » -
ideologicas en comuni- No se puede estudiar las artesanías populares, por ejemplo, sin enfocar-
dades del tercer mund o _ A si' pues, la antropologia , politica , _ se preocupa de 105
movimientos políticos y 1 as ideologias ' f que sur las dentro del conjunto de la esfera material, ergológica de la cultura en sus
' -
nes económico sociales que tratan las distintas disc' gen en ` 1218 principales formacio- conexiones con el resto de ella. Igualmente, no se puede entender bien una
iplinas antropológicas. Estudia danza popular o los dichos populares sin comprenderlos dentro del contexto
la naturaleza del poder en ell , t - - - ., _ _ _
ciones olíti' 11'd as au Ondad _ Y1eS1'f1maC1011,]unto con las institu- de una subcultura de nuestras sociedades complejas, ya sea de una comuni-
P cas Y e erazgo (G'Ba1and1e1`f 1969; T.C. Lewellen' 1983). dad indígena rural, de una clase social o de otra categoría estructural. La
1 La antropologia urbana se preocupa del proceso de urbanización, tam@ folklorología debe estar, indudablemente, muy relacionada, en primer lugar
en as ciudades pre-o no ind - ustriales'
, como en su relacion " con el desarrollo in- _
con la etnología. Sin embargo, el folklore, en especial el literario, se liga de
dustrial - También analiza ' la estratifi - - '' ' 1
f _ _ _ cacion social de la urbe, no solo clasista, sing, hecho y más, tal vez, a la literatura (Carvalho-Neto, 1969; R. Corso, 1966; L. M.
undamentalmente etmea
tos_ estratos en barrios y cordones f como 1 8ualmente f -
l a diferenciación 'f -
horizontal de es- Lombardi Satriani, 1978). Ultimamente se trata de establecer relaciones entre
ecologico-culturales . Igualmente, estudia - las
migraciones a la ciudad no s l - o literatura y etnografía (Borofsky, 1997).
, 0 o de ultramar smol '
los barrios proletarios ' o cordones oblacionalf ” '
as internas
' -
que van a gestar La lingüística antropológica debe considerarse, igualmente, como otra
1 os sectores mformales
_ y las egfl-¿teP _ es de villas miserias", los ghettos, disciplina de la antropología socio-cultural, pero que, debido a sus métodos tan
gias de sobrevivencia en l ' propios y a su desarrollo histórico, constituye prácticamente una disciplina au-
Ella Se preocu _ _ a economia urbana.
d __ pa, inclusi_ve, _ d e 1 problema del poder municipal _ _ _
y ciuda-
ano en relacion a los sectores md icados. Obviamente, la antropologia tónoma. No debemos olvidar que el lenguaje es una parte de la cultura y, además
, urbana
se relaciona en muchos as de ser el medio de comunicación fundamental entre los seres humanos es, a la
P ectos , tanto con la antropologia f economica» - y políti-
vez, el vehículo principal a través del cual se transmite la tradición cultural.
ca, como étnica y del d esarro11o(A_ Southall,1973,P_ _ Worsley 1984). Los Estudios
Etnicos aunque también tema d e a antropologia social y la' etnologia, las tras-
I 1 1 . ,
Sabemos que la estructura del lenguaje está constituida por fonemas y
cienden, habiéndose co i~t'e1 1 - morfemas, cuyos conjuntos constituyen los distintos modos de hablar que
(Berdichewsk)/› 1997)- nve 1 O en a actuahdad en un Campo mU1fidÍSCÍP1Íflfl1'Í0 prevalecen en las niunerošas sociedades. Si el cambio permanente a que está so-
metida la estructura del lenguaje obedece a ciertas leyes propias, relativamente
1 68 69
;-
_ _ _
 . ' 1 l -_ . ._ ._ _ _ _
_______ __ _________________________________________________ ___ I _ _=ì-= __ ' _ - _ ____¡¡_____1¡¡¡¡¡ä䦦¡¡¡¦¦¡¡:¦¿¡¡.:¿É¿:::¡_ÉÍ_:É_:__.:::55::¦§:ÉiÉ::::i:::¦:im:¦:¦u::É:i_:z::¦§i:E:::::::::::¦::::§::::Í::§§:::::i:::::::::;::::::::::::::::L1::::::EnEE:::H"::m:É:::-Lifiñiii¦¦iiii:fr:¦ÃiildI:iiiI=Ii'I"Í'-555I1"!!§:¦'=r'Éii:É=:==Í==::-:::É:É--::É::;:-É:--::--::ÉÉ:: -:ÉÉÉÉ _É::: É-E3* :É:É- Eli --3 --ïï
independientes del camb'io cu 1tural, no sucede lo mismo
mán__Ca_ ~ con respecto a la se- La etnología clásica se preocupaba de esos aspectos teóricos de una
manera un poco abstracta, buscando leyes generales y desembocando, más
Eseas tdll` ' --- bien, en una filosofía de la cultura que en una ciencia culturológica. La antro-
de la estructura (fO_;0_OCl ía __; lga 0 con su contexto cultural. El estudio pología social ha constituido, en cambio, una especie de reacción o renovación,
tratando de convertirse en una ciencia de los fenómenos culturales. En ese
mántica) de los modos åe hšbl allclll Vocablllallol' cflm? del Slgnlficado (Se` sentido, ha llegado a considerar a la teoría como un cuerpo de hipótesis pues-
Uno descriptivo trata del an'lllll (ds lllllellll hacer la lmglllsllca ll dos lllvelesl tos a prueba por la investigación y factibles de verificación práctica. La
histórico› busca las_ relacionesllj-lll?,
_ _ is oricas .e enguas en lln momento
y secuenciales entre lasdado Y el Olmf
distintas len- antropología social debe verse como parte de la revolución modernista que se
guas y sus respectivas familias y troncos lingüístieos ha operado durante el siglo XX en el campo de los estudios sociales al insistir
En el rim ' l- _ en el uso del método científico, no solo en la esfera de la teoría, sino que, con-
ra, siendo elstas lifilililliililašeiiìïrlucila lïllllo lenguas escllllls como las Slll escllllll secuentemente también, en la metodología.
antr0PolÓ8ica
_ _ _ _ _ _ oetnolin_guis t-ica es ylga aS_' de pllelellenllla'
las primeras por Con
por la Filología. la Lingüística
respecto al La etnología moderna ha incorporado muchos de los nuevos principios
analisis historico, sus tecnicas y metodos se desarrollar ' aportados por la corriente científica de la antropología social británica. Tam-
relación a las lenguas escritas y eran preferentemente dellldi)eSlle`Clll:;illl1ellfl(jll1en bién ha influenciando a ésta en el sentido de limarle un poco su sectarismo y
_ , _ _ mmio _
_gia. En los ultimos tiempos se estudian también por lingüistas antrltliplólbglols de no rechazar, a su vez, una visión amplia e histórica del fenómeno socio-
as relaciones
__ _ genea 1'ogicas' '
y la historia - de las lenguas
I .
de puebles 11e±1-a¿1OS_ ' cultural. En su énfasis en la teoría de la cultura, las disciplinas antropológicas
a g otocronologia es, precisamente, una nueva técnica de la lingüísti contribuyen al mejor conocimiento de las superestructuras de la sociedad, en
ca antro oló ic t _, ` especial de las estructuras sociales y sobre todo ideológicas.
aguasÉmpìreìåïíseìiïllïìir lasileihas de SePa“`“°“r“te 1” mS*f°S de
_ _ - men e, os resultados obtenidos por medio de Al desarrollo de la teoría socio-cultural han contribuido, además de la
esta tecnica deben complementarse con datos etnohistóricos 1' ' etnología, la antropología cultural y la antropología social, otras disciplinas.
cos.
__ Al_ _gunos ll aman H ESG estudio
' lmguistico-arqueológico.
- - , _ Y aun arqueo Og1`
Actualmente la Igualmente, habría que agregar la etnografía, la arqueología, la lingüística y
e ectividad de la glotocronologia se ha puesto un oco e d d prácticamente todas las ramas culturológicas de la antropología e inclusive la
resultašlos åiïeben considerarse con reserva. ll ll ll al por lo que sus propia antropología física. A finales del siglo XX, con el paso a una etapa post-
ina t , ' 1 ' ' - modernista, se ha cuestionado tanto la insistencia en el cientifismo de los
F.__Sánchez-M§il'i:ól
d f l19e7lóll -_ allllsllda
es _ e al-lllcada (.l` Blllìlnl' 1961;
siglo la lmguistica M' Swadeshf
antropológica ha1966?
am- estudios sociales, como el uso de categorías estructurales.
p a o su campo al estudiar la relacion entre las descripciones etnográficas y 1 Estas tendencias renovadoras, así como el propio conocimiento y la ma-
icción litera ria ' , como t ambien ' ' el discurso
- ~ a las expresionesa
que acompana durez de estas disciplinas, ha incrementado y enriquecido enormemente su
socio-cult
__ía_1___E_________l_-ga l es ( W0 (1 ak y Reisigl,
' ' -
1999), reafirmando _, etnogra-
la relacion metodología. Son muy variados los métodos y numerosas las técnicas emplea-
Làl
das por estas disciplinas culturológicas. Aunque era específico en la antropologia
socio-cultural y lo sigue siendo, el uso de métodos de tipo cualitativo, en los
últimos tiempos ha aumentado enorinemente la utilización de métodos y técni-
Teoría y práctica social de la antropología cas de tipo cuantitativo. Sin embargo, la tendencia actual no es reemplazar a
unos por los otros, sino que utilizarlos de manera complementaria.
blemasLa antro l ' ' _
p____ameP_9_e0_šÉ1rÍ_ìï0pC_prLtEåal se pre_i_oqup__a -, -
tamlåiep, en _
especial, de los pro- La finalidad es, principalmente, la de resolver por medio de la investi-
_ f armene a eoría e aCultu .V1 ' gación problemas teóricos, pero no solo generales, sino más bien concretos,
propio concepto de cultura, la naturaleza del cambio cultural y la lélil/olulrlrilóililÍilrillltilill específicos. Se pretende verificar las hipótesis, es decir, realizar investigacio-
ral. Tambiénl
e_ _ __ a d`fus`
i ion ' el ela cultura, los contactos culturales y la transculturación;_
nes tras problemas y no solo para acumular conocimientos. En consecuencia,
para e ismo cultural, las relaciones entre cultura y hábitat etc
cualquier método apropiado para estas verificaciones será útil y lo que abun-
da no daña.
70 71
 análisisSi losCumétodos ' '
H ta y tecnicas ' '
cuantitativos pueden complementar los datos dialéctica de la teoría antropológica. Más aun, es la manera como la antropolo-
ã/010 Seh h la i a ivos, ,tanto mejor! Pero, la antropología pogtmedema no gía socio-cultural se realiza a si misma, es decir, cómo se logra llevar a la práctica
_ la 'ec o maslconcreta y ha logrado unir lo empírico con lo teórico, sino el diagnóstico social que esta hace y, a la vez, cómo se puede probar y corregir
que, inc usive, se ha mteresado cada vez más por contribuir, de un modo prác- dicho diagnóstico.
tico_.- aima. acción
I ' soci o - cultural. Ha retomado asi,f en parte, el papel de practica
, . En esta relación metodológica orgánica, entre la antropología social teó-
social e historica y el humanismo que le corresponde en cuanto disci lin rica y la antropología aplicada, se puede llevar a la práctica el compromiso
. . as ue
estudian la realidad social de manera más comprometida P q social inherente a la antropología socio-cultural, en cuanto disciplina social.
C01 b La antro 1 p ologia
' aplicada
' '
es, justamente, - 1 -
esa disciplma que pretende Este compromiso social de la Antropología debe reflejarse en su preocupación
a orar con a accion social, ya sea en aspectos gubernamentales (anterior- por el destino y el mejoramiento de las condiciones de vida de los pueblos y
mente incluso coloniales), educativos o en las diversas ramas de la asistencia comunidades que ella estudia. Es en este sentido que se prueba el humanismo
social. Naturalmente, la colaboración técnica del antropólogo puede d de la antropología, el que es condición inseparable de su propia existencia
.
nivel
arse a
Cia dede
uncomunidades
Conïmt '
o aurì de sociedades - frente _a la existen-
enteras, es decir, _ (Wolf, 1964).
de C _ d_l _d 0 50C10"CU tural, 911 ningun caso, o muy difícilmente, a nivel Como ejemplo podemos indicar al Indigenismo, como una forma de
asos in ivi uales o de grupos 50e1a1e5_ antropología aplicada, que debe estudiar y analizar sistemáticamente a los gru-
S impprtante que la antropologia aplicada constituya una disciplina que pos y comunidades indígenas de América para diagnosticar su real situación
se preocupe, undamentalmente, de estudiar e investigar el proceso de cambie socio-cultural. Esto puede promover una acción que efectivamente contribuya
socio-culturalest
íntimamente en situaciones
` ' -
concretas y particulares. -
Su fmalidad- es conocer a liberar a los indígenas de la explotación, alienación y frustración económica,
1 _f_ _ I e proceso y poder diagnosticar su tendencia e, inclusive, indicar social y cultural en que se encuentran -naturalmente dentro de todo un con-
ima p ani icacion racional y positiva para la actuación de los agentes de cambio
texto de acción y cambio social más amplio-. En último análisis, sin embargo,
h Los antropologos ' podran ' participar
' ' o no en la accion -» social . posterior, . `
es obvio que esta liberación de los indígenas será, en primer lugar, tarea de los
que acen en sus diagnósticos y planes. En esencia la acción social puede ba-
propios pueblos aborígenes, con la ayuda de los sectores y fuerzas progresis-
sarse
La ammenlaO1an flppollogiaiaplicada,
' ' -
pero no es necesariamente _
realizada por ella. tas de la sociedad mayor y no realmente de los indigenistas (Berdichewsky,
tes Contrlãbugigïa ap lìïa El ppede por otra- parte aportar, justamente, importan- 1987 y 2000).
U pnes a a,teoria antropológica del cambio cultural y social.
Por desgracia, la antropología aplicada, la mayoría de las veces -en con-
_ na an ropo ogia aplicada ' para que sea efectiva- y operacional - debe Con-
tradicción con el compromiso social inherente al humanismo antropológico-
âelširse no como un simple programa de asistencia social y de pai-ehe5_ Efla
ha servido, más bien, como instrumento para la dominación y explotación de
e e _ ser un -instrumento efectivo - .
para diagnosticar _ _ .
situaciones de cambio _ y
los llamados pueblos “primitivos” o “subdesarrollados”, tanto en Africa y
conflicto socio-cultural, en el marco de transformaciones profundas del
as es- Asia, como también en América. De aquí que para recuperar la verdadera faz
tr ucturas sociioecon-omicas
' ' ' - -
tradicionales, para promover su desarrollo y
que le corresponde a la antropología aplicada, como nexo entre la teoría y la
progreso. En ultima instancia, la antropología aplicada no puede ni debe estar
práctica del estudio antropológico y como instrumento de liberación humana,
separada de las disciplinas antropo-sociales, sino que debe ser el reflejo de la
preferimos denominarla Antropología de Acción, con el sentido que le hemos
praxis historica de aquéllas y por lo tanto su concomitante inseparable Solo dado más arriba. Ella no debe ser paternalista, sino más bien colaborar con la
en esta
ral teófforma1 se produce la unidad ' I - entre la antropologia
organica , socio-cultu-
. ' acción de las propias comunidades interesadas y que viven el problema. Véase
J
|
šca yt a antïopolägia aplicada practica ( E. Chambers, 1985). mi crítica a la antropología aplicada y al indigenismo en mi libro sobre Lipschutz
antro O10 n esÍ e pl' un od se ace necesario ' hacer una aclaracion -» metodologica. , . La (Berdichewsky, 2002).
P 8 El ap ica a no es o por lo menos no debería ser, como muchas veces En resumen, podemos decir que las distintas disciplinas culturológicas
parece aparente, una disciplina diferente y separada de las anteriores No Se se integran dentro del campo de una antropología socio-cultural en su sentido
trata ,de
ción en medid
realidad , de una disciplma
' ' ' practicista ' ' -
que se refiere solo a la 'aplica-
- amplio. En conjunto, colaboran y permiten un más efectivo y completo análi-
as COHCYGÍHS, 51110 que, por el contrario, es la contrapartida sis de la cultura y la sociedad en sus aspectos y correlaciones tanto sincrónicas
72 73
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 ` --------15:------1-L-'-3"-3L"2:::siii51222iii;-==¦¦¦¦=¢=555¦¦>-1111""15¡ii-¿ii¡ii¦=¦¡ii5:15¡ii:j¡jjii:iiiii:=-¡iii¡ï'ì:¡iìììì:iiiiìì'ìiiiìíiiìijiiiiiììii¦:tuiiiì_ÍiiiEüffiiiiiììiiiiìIiìiEìE§.:짧iE;:.":::¦:;::::.¦::;::;;.¦:¦:;g ;;::;;;:,.:::;,;::¦:=2,¦:¿-_; -;:-¦'5 5;;--;=5;--;;_-;¦=. ;=-;=;..;;;-=-...:--¿¿,;¡:::: ;;¡;___-;:;;;¡__==;;;;__;;;;;=_ .;;;='; ,¡;±...;;.,_-===...:¡. =.=_...=.
como diacrónicas. En esencia, entonces, la antropología socio-cultural, en toda antropología física la arqueología, la lingüística antropológica, la folklorologia
I
su amplitud y a través de sus diversas disciplinas, dirige sus esfuerzos al estu- y la antropología social o etnologia. _ Í 1 Or lo tanto su
dio y análisis de los fenómenos culturales y sociales y sus conexiones mutuas, Cada día, aquellas son disciplinas mas autonoënas y,1p Sultadoš de
es decir, la relación e interdependencia entre cultura y sociedad. Pero este -
proceso epistemologico f - es independiente.
- ' Pero, S111 ` em ar8 o 1 os re d 1
binomio, además de ser estudiado en sí mismo es tratado también, por la an- sus análisis son los que pueden y Clebefl C0mPa1"a1`Se Y» Søbre to 0' OS que
tropología en sus conexiones con los fenómenos biopsíquicos de los individuos deben contribuir - - al desarrollo de una Teoria ' Antrop oló g ica. te las Enformaciones
estudios so-
que los constituyen, o sea las interrelaciones entre cultura y personalidad. . - ' icamen
ciales integrados que pretendan analizar organ I _ ' d
Pero la cultura, como núcleo central del estudio antropológico -además sociales , las disciplinas antropológicas socio-culturales deberan contribuir, . e
de enfocarse en sus relaciones mutuas con la sociedad (sin la cual no podría preferencia, - al esclarecimiento - - de los niveles' siìperes tructurales de dichas for-
existir ni entenderse) y con la personalidad de sus individuos integrantes e maciones y tambien al origen y evolucionide el as. _ ue las dnd alas
interactuantes- es analizada también en su interdependencia con el lenguaje. Es necesario hacer notar, en relacion a. o anteïiorcq h Pa Vaäabí
Este es el principal vehículo de su transmisión y es igualmente estudiado por - -
especialidades de la antropologia ' fisica,
' ' cpm@ Se r1 evo t ucionesaruman de SL; notable-
la antropología en su contenido cultural. -
lidad humana, antropometria, ' ' '
genetica umana,d. e c. , aIp S índe endientes
No menos importante en el estudio de la cultura y sus interconexiones - -
especialización - » no han llegado a constituirse ' ' en iscip ina _ _ P_ -
es el análisis de su relación con el medio. De aquí se desprende también la Deben ser consideradas solo como especializaciones de una disciplina may01",
ecología humana o mejor dicho Ecología Cultural, como rama de la antropo- que sigue - -
siendo la antropologia ' ' '
fisica o ' ' ' . No1 es Ieste
biollogica el caso
dìcadas más conal-ri
las
logía socio-cultural, preocupada fundamentalmente con la relación integral . - - f - mo as in '
disciplinas culturologicas, algunas de lãs cua GS, _C0 _ d endìentes (Véase
de la sociedad humana con la naturaleza (Netting, 1986). Pero, en todas estas ba, han llegado a convertirse ' en estu '
ios propios e in ep
áreas de estudio de la antropología se verifican modificaciones permanen- Cuadro 2). _ _ _ .
tes, produciéndose los cambios socio-culturales. Este proceso debe estudiarse, La antropología socio-cultural es un campo disciplinario dispar y hete-
naturalmente, en todas las áreas indicadas, pero, por su importancia intrínse- rogéneo que se rehace constantemente en cada generación. Debemos revisar y
ca, ha llegado a constituir también un área propia de estudio. repensar los diversos - aspectos y enfoques de lafeülolo Sdá ía antro
taflolš olo ía cultu-
Cošveniente
De aquí que, ramas como la antropología social y en especial la antropo- ral y antropologia » social,
- incluyendo
- la etnogra iâ y rea P conce tual dife-
logía aplicada, se dedican fundamentalmente al análisis del Cambio y orgánicamente con un nuevo enfoque dentro e un iìarco mm Polo ía de
Socio-Cultural. Los procesos de cambio, además de sus conexiones sincróni- rente. Esto llevará tal vez a una nueva disciplina, ya se ame a P _S 1 _
cas y funcionales, enfocadas en su dimensión temporal conducen, en última acción antropología de transferencia, de formas sociales emergentes o simp e
I
instancia, a tratar de comprender la evolución misma de los rasgos culturales. mente antropologia A f -
socio-cultural, mas ' a tono con la ' oca actual ostinoderna.
eph t diaão las ìnstitu
Sobre todo, el de los propios sistemas socio-culturales y formaciones socio- 1
La antropologia social, en el pasado reciente, a-es
"
1 roducto
u _
económicas, como lo pretenden la arqueología y la etnología. . . - ' res
ciones sociales de una sociedad o comunidad y sus ïree3C1¿ìS yšflhïciefn1210 Si no
Cultura y sociedad, cultura e individuo o cultura y personalidad, len- de su cultura comun, f o sea, su organizacion' '' socia e i eo o i
d_ g mu endo ¿U im-
gua y cultura, cultura y medio, cambio socio-cultural y evolución social abstracción de su estructura economica, por lo menos, isrn y,
constituyen las principales áreas de estudio de la antropología socio-cultural. portancia Esa antropología social tradicional ha pretendido asi separar, en
Esta, junto con la antropología física, nos permiten obtener un cuadro cada vez parte , la organización social de la infraestructura económica y de . la ideoåogllãf
más cabal y objetivo de la historia natural y socio-cultural de la humanidad a _ ., - - - ' minante e os
convirtiéndola en un sistema casi independiente y hasta deter '
lo largo del espacio y a través del tiempo. otros dos Con esto ha caído en un determinismo o reduccionismo no muy
Dichas áreas son estudiadas y analizadas por las distintas disciplinas . ' - - ' ' ' ' de al unas tendencias
diferente al determinismo o reduccionismo economicä, t gnismos ue en la
de la antropología, la mayoría de las cuales -sin perjuicio de la relación y pa- marxistas, que ha pretendido combatir (Barret,-1984), e erm q
rentesco entre ellas, más arriba indicadas- han llegado a convertirse en actualidad postmodernista se.-tratan de corregir.
verdaderas disciplinas independientes. Este es el caso, por lo menos, con la
74 75
L
 _...... ....._ ... . .._. ..... .-¬› ¿JU ................................................................... ..
En este sentido hay que ver las propias tendencias teóricas y obviamente con el estudio del concepto de Cultura y sus diversas formas y
metodológicas de la antropología -como ser, las de la etnología europea conti- expresiones. _ _
nental, de la antropología social británica y de la antropología cultural
Al iniciarse el nuevo milenio, la Antropologia Social-Culturalsigue sien-
anglo-americana- como surgidas de los distintos intereses de cada uno de
do una disciplina en fermento creativo. Los etnografos en particular, que
esos centros culturales. Todas ellas, sin embargo, son enfoques mancomuna-
describen las culturas, continúan tras métodos mas efectivos de recoleccion de
dos, en cuanto producto de ideologías de sociedades industriales expansivas,
datos, en su deseo de definir las fuentes de informacion mas productivas, in-
primero de carácter colonialista, después imperialista, actualmente
cluyendo las redes de Internet. Muchos debaten los méritos relativos de la
globalizantes y las más de las veces etnocéntricas.
observación directa del trabajo de terreno sobre los datos escritos otros me-
Una Antropología de Acción debe ser un producto del estudio e ideolo-
todos, 0 si las tradicionales sociedades tribales representan mejor que las
gía de los propios pueblos como un instrumento de su propia liberación y para
sociedades complejas urbanas su objeto básico de estudio. Otros, tratan .de
obtener un cabal y profundo conocimiento de sus sociedades. Esto permitirá
encontrar métodos más significativos para analizar e interpretar las descrip-
convertir y transformar el estudio del Hombre en sí -en cuanto una empresa ciones etnográficas, ya sea basándose en metodos cientificos o en las
externa con una visión objetivada, empiricista y cientifista- a un estudio del humanidades, incluyendo la literatura y análisis literario (v. Grumet, 2000;
| i Hombre para sí mismo. Mirado desde adentro, visto dinámicamente, como Priest, 2001).
J
un ente social e históricamente concreto -en cuanto individuos y sociedades
reales y humanas en busca de su propio y genuino progreso y desarrollo.
Se trata, en fin, de pasar de la “observación participante” a la “partici-
pación activa" del compromiso social, inherente en el humanismo
antropológico, en que el ser humano no solo hace su propia historia, sino que
es el centro y el fin mismo de la práctica histórica y social de cada sociedad en
particular, como de la humanidad en su totalidad. El ser humano es, a la vez,
un ente social y una personalidad individual, por lo que la realización del hu-
.II-i
| manismo y de los derechos humanos es, al mismo tiempo, la igualdad social y
.¡|
la libertad y dignidad del individuo (E. From, 1965).
Esto no significa necesariamente una acción política, militante y/ o sub-
versiva de parte del antropólogo, como malamente lo han entendido ciertos
`
c Ii-|
Ill
antropólogos del Medio Oriente y aun algunos latinoamericanos que inclusi-
ve, han llegado a formar parte de grupos guerrilleros foquistas. Ni siquiera
significa actuar como principal agente de cambio. El papel de la antropología
no es ni uno ni el otro. Su contribución teórica no es tanto política, sino más
bien ideológica y su aporte es meramente colaborar en el proceso de cambio,
particularmente, en la acción de las propias comunidades, la que obviamente
es política también, pero, en un sentido amplio no-partidista ni paternalista
(Berdichewsky, 1992).
Hasta aquí, en estos tres capítulos iniciales, hemos presentado más bien
una visión de lo que se entiende por Antropología General; es decir, un análi-
|] li"
,. H
|
sis y caracterización de lo que es la antropología y sus diversas disciplinas y
subdisciplinas. Los capítulos restantes del libro explicarán en detalle las dis-
tintas áreas y subdisciplinas de la moderna Antropología Social, comenzando
~^ i 76 77
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