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VIOLENCIA PSICOLÓGICA

La violencia psicológica, una forma de maltrato que no deja marcas

físicas visibles, tiene el poder de infligir cicatrices profundas en el bienestar

emocional de sus víctimas. A menudo minimizada o pasada por alto, esta

modalidad de abuso posee el potencial de tener un impacto devastador en la

salud mental y emocional de quienes la sufren.

Naturaleza de la Violencia Psicológica

La violencia psicológica se manifiesta a través de una amplia variedad

de comportamientos y actitudes cuyo objetivo primordial es el control, la

manipulación y la infligencia de daño emocional en una persona. Algunos

ejemplos de tales comportamientos, como la humillación, las amenazas, el

control y la intimidación, sirven de muestra de la violencia psicológica. Con

frecuencia, esta forma de violencia se desarrolla en el contexto de relaciones

de pareja, familiares o laborales, donde la víctima queda atrapada en un ciclo

de abuso. (Rodríguez, 2011)

Efectos de la Violencia Psicológica

A pesar de que no causa lesiones físicas evidentes, la violencia psicológica

engendra consecuencias igualmente perjudiciales. Aquellas personas que son

víctimas de este tipo de abuso a menudo experimentan una serie de resultados

adversos, tales como:

Lesiones emocionales: La autoestima de la víctima se ve erosionada,

desembocando en sentimientos de inutilidad y depresión.


Aislamiento social: La víctima puede sentirse aprisionada y aislada, ya

que el agresor frecuentemente intenta controlar su acceso a amigos y

familiares.

Trastornos de ansiedad y estrés postraumático: La violencia

psicológica puede desencadenar problemas de salud mental, como trastornos

de ansiedad y estrés postraumático.

Impacto en los niños: Cuando la violencia psicológica acontece en

relaciones familiares, los niños que son testigos de este comportamiento

pueden experimentar traumas y problemas en su desarrollo.

Ciclo de abuso: Las víctimas pueden quedar atrapadas en un ciclo de

abuso, en el cual el agresor oscila entre actos de violencia psicológica y

momentos de disculpas y afecto, tornando difícil para la víctima abandonar la

relación. (González, 2008)

Importancia de la Concienciación y Prevención

La violencia psicológica constituye un problema grave que afecta a

millones de personas en todo el mundo. Es imperativo fomentar la

concienciación sobre esta modalidad de abuso y tomar medidas para

prevenirla. Algunas acciones esenciales engloban:

Educación y sensibilización: Es crucial instruir a la sociedad acerca de

la violencia psicológica y sus consecuencias. La sensibilización puede ayudar a

las personas a reconocer los signos del abuso y buscar ayuda.


Apoyo a las víctimas: Aquellas personas que son víctimas necesitan

apoyo emocional, asesoramiento y recursos para escapar de relaciones

abusivas y sanar.

Legislación y políticas de prevención: Gobiernos y organizaciones

deben establecer y aplicar leyes y políticas que salvaguarden a las víctimas y

sancionen a los agresores. (Bancroft, 2004)

Intervención temprana: La detección precoz y la intervención son

esenciales para prevenir la escalada de la violencia psicológica

Actualmente, la violencia en cualquiera de sus formas se considera un

delito en Ecuador, la violencia psicológica está tipificada en la Ley Orgánica

Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia de Género contra las Mujeres

(Ley Orgánica 103-03). Esta evolución legal, que incluye la tipificación de la

violencia psicológica y el femicidio como delitos, representa un avance

significativo hacia la erradicación de la violencia contra las mujeres, ya que

permite que estos delitos sean tratados legalmente. Sin embargo, la aplicación

de sanciones se enfoca en proporcionar una aparente reparación a las

víctimas, sin necesariamente abordar la reeducación del agresor

En conlusión, la violencia psicológica es una forma de abuso que no

debe ser subestimada. Sus consecuencias pueden ser devastadoras y

duraderas, dejando cicatrices invisibles en el alma de las víctimas. La

concienciación, la educación y la acción son esenciales para prevenir y abordar

este problema. De manera colaborativa, debemos trabajar hacia la creación de

un mundo en el que todas las personas puedan vivir libres de violencia

psicológica y sanar las heridas que esta causa en su trayecto.


Bibliografía
Bancroft, L. (2004). ¿Por qué le pega? Cómo vencer la violencia doméstica. Ediciones Cátedra.

González, A. (2008). Violencia de género y educación social: Diseño de intervenciones


psicoeducativas para la prevención de la violencia. Editorial Popular.

Rodríguez, M. (2011). Violencia de género: Aspectos psicológicos y jurídicos. El Nuevo Herald.

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