Bien, en síntesis…la casa contraria…afirma…Ellos afirman que la
inseguridad ciudadana dejó de ser un problema social para convertirse y ser considerada como una nueva amenaza para el control del orden público, En primer lugar por la situación agravante que se presenta como las significativas pérdidas económicas entre la población, el aumento de la pobreza, la falta de oportunidades, la corrupción. En segundo lugar mencionan que cada vez son más frecuentes los reclamos por acciones más efectivas para eliminarla ya que genera miedo e incertidumbre lo cual viene afligiendo a las poblaciones y a las grandes ciudades. En tercer lugar mencionan que la intervención del ejército no implicaria reemplazar a las fuerzas de seguridad civiles, sino trabajar en colaboración con ellas, logrando así enfrentar la inseguridad ciudadana de manera óptima. Pero entendamos de que Las fuerzas armadas no están capacitadas para atender asuntos de seguridad pública por lo que, desde un enfoque de derechos humanos, esta autorización resulta cuestionable debido a los abusos que originaron en los años 1980 y 2000. En estos pronunciamientos, la Corte Interamericana de Derechos Humanos hace referencia en su |informe sobre seguridad ciudadana y derechos humanos,[5] en el cual señaló que las fuerzas armadas carecen del entrenamiento adecuado para el control de la seguridad ciudadana, la cual le corresponde a la fuerza policial civil. En el mismo informe, se señaló a las fuerzas armadas les compete la defensa de la soberanía nacional, mientras que la seguridad ciudadana es un asunto exclusivo de las fuerzas policiales. Por otro lado, la CIDH también ha observado que las fuerzas armadas continúan actuando en campos que corresponden estrictamente a la policía, como el combate al narcotráfico y el crimen organizado, el control migratorio y las tareas de inteligencia civil. Por lo tanto, nuestra refutación debe prevalecer sobre el argumento original de nuestros contrincantes, por estar respaldado por datos y evidencias más sólidas. Hemos destacado la importancia de un enfoque civil en la prevención de la inseguridad ciudadana, señalando los riesgos de la militarización y destacando la necesidad de soluciones a largo plazo. Además, hemos demostrado que la intervención militar puede tener impactos negativos en la sociedad y en la imagen internacional del país. En última instancia, creemos que nuestra posición promueve una estrategia más efectiva y respetuosa de los derechos humanos para abordar este problema complejo….esta casa imppugna……mi casa debe vencer por tal razon