ItESEfiAS BIBLIOGRAFICAS 199

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SAYACUOS
LASO,Enrique: Tratado d e Dereciio Ad+izirti.~frntivo,vol. r. Alontevideo,
1953, 688 pp.

Cori ocasiúri dc la Seccióri XVII <le la Constituci6n uruguaya, que entró en

vigor el 1" dc riiarru de 1952, el profesor Sayagués ptiblfcó en la "Re\,istñ de la
Faciiltad clc Dereclio y Cieiiciac Socialrs de Moiitevideo" (aíio 111, níriii. 1 ) la versión
tagiigrjficn dcl ciiisillo pava pioiecioiiales dictado eii aquella Faciiltnd. El sobretiro
de ccic trabajo, ronstit<lin tina logradn rnonograiia, de eitensiÍ>n consider:dile (142
p p ) , cri la que Sayaguts manejaba, con soltura poro frecuente entre los adrninis-
trativist:is <le Iiabki eqrañoki, los conceptos ccntralcs del Derecho admitiirtrativo. y,
lo qrie cc aiiii nicrioc frecuente, sabia exporierloc con uii lenxuaje asequible a los
"profesionales".
L J l i :iíio niás Inrdc, InyngiiCs iios i l n a sorprender roti el l>riirier toii:o de iiri

Tnitado d c Llcrecho ild>ninistr<itiwn,del que se llego a afirmar en Espníin ( c i r . rc-

sena <le Garrida, eii "Revista de Admiriistr;ici<>tiPública", niim. 13, 1). 286) (lile estaba
desti!ia<l<i;i colocarse a I:i cabez:~-ciiie~idii.iiclosc tal aiiriiinciriii eii toda 511 literal¡-
d a d dc la producci6n juridico-adniiiiistratirn co Iciiguii espaíioln. Uesdc luego.
que esi:rmos cii prcsriici:i de uiin de Lis obras mis logradas de Dercclio :idniiiiistrn-
tivo, q i i e poe<Ie co<lenrse con los tradiciunalrs tratados fraricescs r ilnli;inos. es :iljio
incuestioii:iblc. Porqur el autor ha snbidc adopt;ir uiin correcta ~~asicii,ii iiiet<jdica, no
ulvid~iidoeri motlierito algurio que el Derrclio admiiiistrativo es uiin raiiia del Ueieclio,
por lo que el úiiicu metodo liciti~es el jiiridico y iio esa mercla (le coiisii1er:icioncs
politic;is, suciuligicas y dc indalc diversa t:iii usuales entre iiosotros. 1s: cierto qiie
la Adiiiiiii-traci6ii 1,íiblica pueile scr coiijidcrii<h desde niug diversos puiilos de
vista ( y :ilii cclá la iiiagiiiiicn producci6ti i~orteaniericana sobre <irgaiiiznciú~iy
técnica adniiiiistr;itiva); pero a1 jurista, al ecliidioso del Dcrcrlio ;idiriiiiiilrntiva
tio Ic corrcspotide estudiar In Adniinictrariúii pítlilica niás quc dcsrlc i i i i i~iiiito de
vista: el jurídico. I I e aquí, por taiilo, el primer iiririlo del iiiievo tr:itndo. l'orcliie
eri él se Ira partiilu dc esta idea iuiidanietital, aun cuaiiclo iiii i:icuiiir cii 1::s cxage-
rnciolies iiiet<idirnc <le cierto sector de la rrcieiile docti-ilin ilali:;iin, cluc culiiiin;iii
eti 1;ia obr:ii dc Gnspnrri y M. S. Giaiiniiii.
O t r o acierto geiicr:il de la obr:i Ir> i-uiistitiiye l:i select:r !,ililiogr:iii:i iitilira<ia,
con prc<!oiniiiio de Iii itzliaria, pero siii ulviiiar In i ~ i i i c c i n . Siii cirib:tr::o, rluizis
fucse lioiililc una ol>jeci<)iia Sa,aguis c ~ :vste i > i i i ~ t ael: iio 1i:ilier lier!iii i i r u :i!>erins
dc i;i bibliografía eii leiigiin eslxiiiola (cspliíioi;~ y aiiieric:tlin). E s cicstc ~ L I C cl
nivel general de la ~ir<:ducciÚiiIiis~iáiiirn ~ i oes riiuy clevadi>. TJcro exislrii obrns
gcticiales g iiioiio,qr:ili:is riiriy c:ir:icterii;id;is. dc las qiie iio se ~itirclciii se ilcbe pres-
cindir, iiu -a por re:erirsc ii «rdr<i;inrieritoi j~iri<licos<,\,e rri hucii:i parte c r ins-
pir:iii cii iiiivs ~>riiicil>ioscotiiutics, sino por su valor ¡!,ti-inieco. 1;s I;iiijeiital>lc ci:c
descoi~ol-iiiiieiito u i>lvi<l:>que existe ciilre los adl~lii~istrativiitns de los distititr,~pite-
blos Iiiapiiiicos, resliecto de la ~,rodiicci¿n de otros paises. Por ello. runrido se
acoiiictc una obrn de la talla de la de Sayagufs debe procurarse, en In mayar medida
posible, esta labor de diiusió~ide lo tiiicclro, cntie otras razones, Iiorqiic es pociblc
encontrar en niiestra producción obras que están a la altura de las cxtr;rnjeras.
Eii orden n In sisteiiiática g c n c ~ i lde la obrn, crecriios necesario Iincer alguna
obseivaciiin. Say:igu&s dicti~igiicuna parte gciieral y una parte espcci:il, :;iguiciido un
plai~nioy geiicr;iiiia<io. En la priiiicra se estudia In Administración dcsde uii putito
de vista unitario, tanto eii cl aspecto orgánico. como en el iuncional, gatrimonial y
contencioso, y cainprendc los ~iuiitos siguientes : nociones fundamentales, orgaiiiza-
ción administrativa, fliiicioiinrios públicos. actividad admiiiistratira, res.oticabilidad
de la Adiniriistración, las distintas Administraciones ~~úblicac, régimcii patrimonial,
coritrnlor o fiscalización y contencioso-administrativo.
El roluiiieri aparecido estudia únicamente las nocioncs generales, la arganiza-
cióri ndniiiiistrativ:i, los funcionarios públicos, la actividad administrativa y la res-
poiis3bili<i;id de la Adniinistración. Par tanto, quedan todavía por estudiar proble
mas iiriportaiitec de la parte general dcl Dereciio administrativo.
La parte ccpccial -según nos indica Sayagués- coinprendcrá el estudio de
los diversos conietidos estales y ias .\dministracioiics que los tienen a su cargo,
para después cerrar la obra con un estudio del gobierno miinicipal, que constituirá
el contenido de la segunda mitad del volumeii iv. En esta parte especial adquiere
toda su importancia la distinción de Sayagués entre iuncioncs -las tres clásicas
y In caiictituyentc- y cometidos estatales; estos últimos son las diversas actividades
o tareas que rcalizan los órgarias públicos conforme a las normas del Derecho obje-
tivo; a diferecrcia de las l~iiiciones,que con las misniac en iodos los Estados -nos
dice en la pázina 11-, "los cometidas varían según el grado de iritervencionisiiio".
Ahora bien, cuando se refiere a la sistematización de la parte especial, cuyo conte-
nido, como lietnos dicho, se concreta al estudio de los cometidos estatales, un;i especie
de los mismos soii denoniinados por el autor funciones es~ncialcs, adquiriendo la
palabra un sentido especifico: "cometidos del Estado inherentes ;i su calidad dc tal",
entre las que incluye las relaciones exteriores, la dcfensa nacional, la actividad fi-
nanciera. . . Y al sistematizar los cometidos, en sentido estricto, se refierc a los
fines del Estado. E s cierto que una corriente doctririnl, que Ilegb a ser mriy aciisada
en Espaiia, trató de reaccionar contra cste intento de sistematizar el Tlcrocho ad-
miiiistratiro, creycndo preferible adoptar como principio sistematirador las fornias
que adopta la actividad administrativa. En este sentido, Rallbé (en Sisfemáfica del
Derpciio Administrafiuo, Barcelona, 1947), Jordana de Pozas 2, Garrido Falla. Sin
embargo, coiiviene meditar las consideraciones hecliac recietiterncnle por Zanabini
(en Crirrrii di c/ess¡fi~~s¡one delle vorie nionifeslaziorii del? azione adnzittistratiua, en
"Rivist;i trimestrale di diritto pubblica, IV, 1954, PP. 529 Y SS.) y pensar en si no
parece prudente conservar el criterio tradicional de sistematiracibn de la parte
especial, en bacc a la materia o esfera social a que se refiere la interveiicióii ad-
ministrativa.
1.0s temas tratadas en el volumen ponen de manifiesto la afirniación
inicial acerca del modo de trnb;ij;ir de Sayagués. Cualquiera qiie sea la posición que
se adapte ante los mismos, hay que rccanocer su correcto plante~mielito. Si en los