La frecuencia (f) es la medida del número de ciclos o
repeticiones de la onda por unidad de tiempo. Por
ejemplo, si una onda se repite diez veces por segundo, significa que tiene una frecuencia de diez ciclos por segundo. Esto puede expresarse como una frecuencia de 10 hercios o 10 Hz. Periodo: el periodo de onda es la cantidad de tiempo que cuesta finalizar una revolución completa de un ciclo de onda. Cuanto más elevada y rápida sea la frecuencia, más corto será el periodo de la onda. Fase: la fase compara el tiempo entre las ondas y se mide en grados, de 0 a 360. La amplitud indica la magnitud de las variaciones de presión de una onda sonora. Es decir, la diferencia entre los valores máximos y mínimos del movimiento ondulatorio en un punto concreto, representando la variación de presión existente. Distancia entre dos crestas consecutivas de una onda, en particular también de una onda electromagnética. La longitud de onda es inversamente proporcional a la frecuencia y, por lo tanto, a la energía de la onda. La velocidad de propagación de una onda, se puede medir como el tiempo que transcurre desde que es emitida hasta que se recibe. Todas las ondas electromagnéticas se propagan en el vacío a una velocidad constante de 300.000.000 m/s, la velocidad de la luz.