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Layla El Khattabi

Geografía e Historia y Relaciones Internacionales


Historia del Arte, EPD 12

CABEZA VERDE DE BERLÍN

La obra de la Cabeza Verde es una de las obras egipcias más destacadas. Su fecha de
realización se data en el año 350 a.C. aproximadamente, pues se sabe que fue realizada
durante la XXX dinastía, de la ciudad de Sebennitos. Estos fueron los que se rebelaron
contra los persas en Egipto y conquistaron Judea. Actualmente se encuentra en el Museo
Egipcio de Berlín, de ahí el nombre convencional de “la cabeza verde de Berlín”.

A pesar de que no se sabe mucho de la obra, se puede deducir que se trata de la


representación de un sacerdote egipcio, ya que la cabeza rapada era símbolo de estos,
para mantener la pureza y limpieza corporal. Lo más innovador de este ejemplar no es
lo que representa, sino cómo lo representa. Hasta el momento, las esculturas egipcias no
mostraban interés por el realismo, sino al contrario. Las esculturas contaban con gran
rigidez y hieratismo.

Sin embargo, esta obra tiene un elemento diferenciador: las arrugas y las curvas. Es una
obra con mucho más realismo, que representa la vejez del sacerdote, a pesar de que esto
era un tabú para los egipcios, pues la vida después de la muerte estaba muy contemplada
y aceptada de manera que la vejez no estaba normalizada. Las marcas de las arrugas se
puede observar sobre todo en los ojos, ya que presentan patas de gallo, párpado caído y
bolsas. Algunos estudios señalan que el realismo en esta obra se debe a la cercanía que
tiene de Grecia, ya que los griego tendían a representar al ser humano con un grado de
realismo más marcado.

Fuente: Museo Egipcio de Berlín


Layla El Khattabi
Geografía e Historia y Relaciones Internacionales
Historia del Arte, EPD 12

Fuente: Museo Egipcio de Berlín

LA REINA DE LA NOCHE

Este altorrelieve, denominado La Reina de la Noche o Relieve de Burney fue hallado en


Iraq y se remonta a los años 1800-1750 a.C. es decir, pertenece al periodo Babilónico
antiguo. A principios de los años 30, la obra fue prestada al Museo Británico, con el
objetivo de realizar un estudio científico para comprobar su autenticidad. Sin embargo,
estos la adquirieron después a partir de un ente privado.

Tiene una altura de 49,5 cm y está hecha a partir de terracota, sobre un panel
rectangular. Se trata de una figura femenina con alas y garras. En sus manos tiene un
símbolo de vara y anillo, que significa justicia. Además, lleva una corona de cuatro
cuernos (de ahí la designación de “la reina de la noche”). Finalmente, a sus pies se
encuentran un león y un búho. Llama especialmente la atención el hecho de que, a pesar
de que la escultura mesopotámica destaca por su rigidez y ausencia de curvaturas,
podemos observar como en esta obra se resaltan las curvas femeninas e incluso las
magnifican.

Toda esta simbología nos ayuda a entender de


quien puede tratarse la representación. L corona
manifiesta que se trata de una divinidad. La vara
y el anillo, así como los búhos indican que
podría tratarse de la diosa de la guerra y el amor,
Ishtar. Sin embargo, las alas, los cuernos y las
garras podrían sugerir que se trata de la diosa
mesopotámica del inframundo, Ereshkigal.
Según la historiadora Vázquez, incluso se puede
concluir que se trata de Lilith1, una demonio
según el Torá, pues su fecha coincide con la
diáspora judía después de su exilio de Palestina.

Fuente: Museo Británico.

1
VÁZQUEZ, Ana M. (2005). «La reina de la noche. Placa Burney». uned.es

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