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1. DESPARASITACIÓN ENERGÉTICA.
Posible sintomatología:
-Picazón, ronchas. (Puedes usar manzanilla, fécula de maíz o lavanda para la picazón)
-Puede que nos duela la cabeza.
Tomar harta agua durante la limpia
Emociones: Genera irritabilidad y rechazo de personas o situaciones parasitarias.
Puedes tomar ajo común, ajo negro o también tintura madre de ajo.
Este proceso es parte de una limpia profunda para los órganos menstruales creada por Zulma
Moreyra. Sólo emplearemos el ajo como desparasitante físico y energético. Si deseas realizar
una limpia más profunda puedes contactarte para diagramarla juntas.
Níspero
También puede usarse el níspero para acompañar estos procesos. En este caso no utilizaremos
el fruto si no las hojas. Si bien no será parte de la limpia propuesta no podía dejar de
nombrarlo ya que lo he utilizado en casos en los que se rechaza el ajo profundamente.
El árbol del níspero es el nisperero. Alcanza hasta 18 metros de altura y cuenta con un tronco
grueso, alto y cilíndrico que crece erecto y elegante. Las hojas, elípticas y brillantes, son muy
ornamentales.
Las flores son blancas, pequeñas y nacen de finos tallos en la base de las hojas.
Sus hojas en infusión se utilizan cortar viejos vínculos ( 10 g de hojas seca por litro) Se realiza
una infusión Y se toma unos días para acompañar el proceso.
Sahumo:
Acompañaremos el proceso de un autosahumo personal con plantas de corte y gran poder
mágico. Una combinación de incienso en grano, laurel de cocina medicinal (Laurus Nobilis),
artemisa (Artemisia vulgaris) o ajenjo (Atemisia absinthium) y caléndula (C. Officinalis) todos
los días o día por medio.
El incienso abre tu campo espiritual para permitirte la limpieza, el laurel y la artemisa o ajenjo
trabajan limpiando y purificando además de desparasitar y la caléndula es una flor amorosa
que estimula tu energía solar, acompañándote en el accionar y en la purificación de tu plexo.
Para realizar el autosahumo debes estar tranquila y preparar todo lo necesario. Te sugiero que
abras el espacio sagrado de la manera que sepas o sientas, pidiendo asistencia y considerando
este acto como una ceremonia. Recuerda cerrar el espacio.
Necesitarás una manta que te cubrirá por completo a modo de carpa y cuidadosamente
colocarás la sahumadora por debajo SOLO unos minutos. Luego retiras la sahumadora y
permaneces con el humo unos minutos más. Si tienes calor puedes repetir el proceso
(abriendo la carpa para descansar, dejando entrar más humo y luego retirando la
sahumadora). Es importante que tengas mucha precaución y no permanezcas en estado de
meditación con la sahumadora debajo de la carpa ya que el humo intenso o el fuego muchos
minutos pueden hacerte mal.
2. GEMAS
Otras herramientas que podemos usar para acompañar el proceso son las gemas. Es conocido
el uso de la obsidiana para ver nuestras propias oscuridades. Si bien es sumamente
recomendable para estos casos no nos adentraremos en su uso, si no en otro cristal que
también es eficiente y un poco más amoroso en el proceso ya que podés usarlo sin
acompañamiento terapeútico. De todas maneras, puedes consultarme lo que necesites por
supuesto. Lo que quiero decir es que la obsidiana es una piedra mucho más reveladora y
profunda.
Existen varias piedras a las que se las llama piedra del sol. Algunas son de laboratorio. Es decir
artificiales. Su intenso color dorado y su brillo nos recuerdan a sol del atardecer o amanecer.
Tiene un fuerte contacto con los arcángeles.
Aporta luz interior. Emite energía estimuladora. Es una piedra alegre. Permite que el
verdadero yo brille.
Es una piedra ideal para retirar lazos con otras personas. Ya que al fortalecer la luz interior nos
aleja de relaciones de dependencia y sumisión. Es muy útil para cortar vínculos perjudiciales o
negativos.
Al darnos vitalidad y optimismo elimina la depresión. Actúa en tercer chakra (plexo solar) y
resuena en segundo chakra (sexual) estimulando nuestra energía sexual. Tiene energía
masculina, de acción e individualidad.
ANEXOS
Recapitulación de parejas
Si bien hay muchas técnicas de recapitulación y que forman parte de una sabiduría ancestral,
yo te voy a proponer un ejercicio simple y maravilloso que te permitirá conectar con tus
emociones y sentires en relación a parejas pasadas.
Para ello debes tomar una hoja y lapiz y escribir los nombres ( o una manera de identificarlos,
ejemplo compañero de Universidad) a todas tus parejas sexuales. A todas. Y cada vez que lo
haces vas tomando consciencia de que sentís, escuchas tu cuerpo, tus sensaciones, recuerdos.
Volves a traer a tu cuerpo templo lo que quiera venir, lo que recuerdes. Una vez que terminas
la lista intentá llevar amor a cada nombre. Entendiendo que es llevar amor a ti misma.
Puedes hacer este proceso por partes, aunque es recomendable que lo hagas de una vez.
Incluso se puede considerar, una vez que lo hayas hecho completo, visualizar el proceso y a las
personas delante de ti por lo menos 14 días. De esta manera se afianza el trabajo y corte
energético. También podemos decirles lo que sentimos hablandoles (cuando visualizamos) o a
través de una carta.
A través de la vida hemos podido recibir caricias y heridas, relaciones que nos
nutrieron y otras que nos intoxicaron, o quizás las dos cosas en una. La vida misma nos
fue dejando heridas, y nuestros amantes sus energías personales y karma, las cuales
duran dentro de nuestro cuerpo durante 7 años y viceversa. Particularmente se dice
que absorbemos el 50% de estas energías, y a su vez, dentro de ello, la de les amantes
de nuestros amante, por lo cual podemos llegar a creer que tenemos una verdadera
comunidad aposentada dentro de nuestro vientre como morada… Sumado a nuestras
emociones, pensamientos y otros factores que pueden no reciclarse del todo,
podemos deducir que necesitamos una muy buena limpieza, pero más que eso quizás,
una trasformación profunda, un rito donde expremos nuestro verdadero amor propio
y la soberanía sobre nuestro cuerpo, nuestra útero.
Por ello te propongo que realices este poderoso rito, y lo practiques todas las veces
que quieras, todas las que necesites, no para limpiarte de la energía de cada amante
nuevo que tengas, si no por un sentido de pertenencia propio, de pertenencia a ti
misma, porque en cada rito te re-descubres en cada rostro de la mujer salvaje que eres
en esencia.
INGREDIENTES
-Sal gruesa
-Esencia de jazmín o loto
-Aceite vehicular
-Miel pura
-Rosas o jazmines
(Llevar 3 cuencos, uno para la sal y aceite, otro para la miel y otro para las flores)
Comenzá a recordar a todos tus amantes, no hace falta que sean todos (algunos quizás
se te hayan olvidado ya) y dejá que las emociones afloren: amor, cólera, tristeza,
angustia, bronca. Permitete sentir todo e incluso llorar si lo necesitas, desahogate y
purificate, mira el pasado y tu presente sin juzgar.
Cuando te sientas lista, alza los brazos y recita la siguiente invocación: "Yo (tu nombre)
regreso a cada uno de los que fueron mis amantes, toda su energía, liberando mi
útero, mi templo sagrado y les despido con amor"
Cuando te sientas lista sumergete en el agua o metete bajo la ducha, o dentro del
cuerpo de agua y sientete morir y renacer, dejando que la vieja piel se vaya mientras te
trasformas en una Diosa. En este momento liberate y siente profundamente el relax
que provoca el agua, es tu ritual personal, no pienses, siente.
Cuando decidas que es el momento toma el cuenco-útero con miel y untalo en todo tu
cuerpo, masajeando por sobre todo la zona de los senos, el útero y un poco la frente.
Elevando los brazos al cielo, expresa en voz alta: "Que esta sanación amorosa, esta
nueva vida, esta nueva piel, me sea dada por el mayor bien divino y de acuerdo al
amor divino"
Agradece profundamente la dulzura que la madre tierra te ha otorgado, que vos
misma te has dado y permitido recibir, y sientete una con la Diosa. Acariciate, canta,
danza, siente o imagina una vibración dorada expresarse desde la tierra subiendo hacia
tu útero y bañando todo tu ser desde dentro. Este es tu nuevo yo luminoso.
Para completar el regalo, toma los pétalos de las flores y ponlos sobre tu cuerpo:
Bendigo mi mente, para generar pensamientos luminosos (pétalos en la frente)
Bendigo mi garganta, para solo expresar belleza (pétalos en la garganta)
Bendigo mis senos, para nutrir el amor en mi y en el mundo (pétalos en los senos)
Bendigo mi plexo, para expresar mi verdad (pétalos en la boca del estómago)
Bendigo mi útero, para traer luz y amor a mi vida (pétalos en el vientre)
Bendigo mi sexo, para estimular el placer y la dulzura (pétalos en la vulva)
Bendigo mis muslos, para contener las sagradas energías que compartiré con mis
amantes (pétalos en los muslos)
Bendigo mis pies, y todo mi camino, para transitar una senda de amor, paz y belleza
(pétalos en los pies)
Si lo deseas puedes cambiar las frases. Son solo una sugerencia, puedes anotar otra
cosa o dejar que las palabras fluyan en el momento.
Cuando te sientas plena y radiante sumergete de nuevo en las aguas, ahora como un
ser puro lleno de amor y prosigue la ceremonia como más lo gustes. Quizás puedas
secarte al calor de una hoguera, danzar bajo las estrellas, entonar canticos con tu
tambor o escoger un nuevo nombre para tu nuevo ser.