Árbol de fallos

El árbol de fallos es una técnica utilizada para analizar los posibles fallos de un
sistema y determinar las causas raíz de esos fallos. Esta metodología se basa en
la construcción de un diagrama que representa los diferentes eventos y
condiciones que pueden llevar a un fallo. El árbol de fallos es especialmente útil
para identificar las causas fundamentales de un problema y desarrollar estrategias
para abortarlo.

Antecedentes:
La técnica del Árbol de Fallos se originó en la década de 1960 como parte del
programa espacial de los Estados Unidos y se utilizó inicialmente en la NASA y en
la industria aeroespacial. Su desarrollo se basó en la necesidad de evaluar y
garantizar la seguridad y la confiabilidad en sistemas y componentes críticos
utilizados en cohetes y naves espaciales, donde las consecuencias de un fallo
podrían ser catastróficas.

Desarrollo:

El Árbol de Fallos es una herramienta gráfica que ayuda a los ingenieros y

profesionales de gestión de riesgos a comprender las posibles combinaciones de
eventos o fallos que pueden llevar a un evento no deseado. A continuación, se
describe el proceso de desarrollo del tema:

Identificación del evento no deseado: Se comienza por identificar claramente el

evento no deseado o el fallo que se desea analizar. Este evento podría ser un
accidente, una falla en un sistema, una interrupción en un proceso industrial, etc.

Diseño del árbol: Se crea un diagrama de árbol invertido con el evento no deseado
en la parte superior, representado como un óvalo o rectángulo. A partir de este
evento, se dibujan ramas que representan las diferentes causas o fallos
potenciales que podrían contribuir al evento no deseado.

Eventos y puertas lógicas: Cada rama del árbol representa un evento o fallo
específico. Estos eventos pueden estar conectados mediante puertas lógicas,
como "Y" (conjunción) o "O" (disyunción), para indicar cómo se combinan los
eventos o fallos para contribuir al evento no deseado. Las puertas "Y" indican que
todos los eventos deben ocurrir para que se produzca el evento no deseado,
mientras que las puertas "O" indican que al menos uno de los eventos debe
ocurrir.

Asignación de probabilidades: Se asignan probabilidades a cada evento en el

árbol para representar la probabilidad de que ocurran. Estas probabilidades
pueden basarse en datos históricos, análisis de expertos o estimaciones.

Análisis de consecuencias: Se evalúan las consecuencias de cada evento en el

árbol en términos de su impacto en el evento no deseado. Esto puede incluir
impactos económicos, de seguridad, ambientales, entre otros.

Evaluación de riesgos: Se realiza una evaluación de riesgos al considerar todas

las combinaciones posibles de eventos que podrían llevar al evento no deseado.
Esto ayuda a identificar las combinaciones de eventos que tienen un mayor riesgo
y que requieren atención especial.

Planificación de mitigación: Con la comprensión de los eventos críticos y las

combinaciones de eventos de alto riesgo, se pueden desarrollar estrategias de
mitigación para reducir la probabilidad o el impacto del evento no deseado. Esto
podría implicar mejoras en diseño, procedimientos de seguridad, redundancia de
sistemas, entre otros.

Conclusión:
En conclusión, el Árbol de Fallos es una herramienta esencial para el análisis y la
gestión de riesgos en sistemas y procesos complejos. Se utiliza en una variedad
de industrias, incluyendo la aeroespacial, la energía, la industria química, y
muchas otras, para garantizar la confiabilidad y la seguridad de los sistemas y
procesos. Podremos evitar a mayor medida los accidentes en las empresas o
industrias con esta herramienta, ayudando a gestionar las fallas que se
encuentren.