Está en la página 1de 6

I.

El cuasicontrato como fuente de las obligaciones


El cuasicontrato se diferencia también de los delitos en el elemento de licitud cuando
genera una obligación y el hecho propiamente tal es lícito estamos en presencia de un
cuasicontrato, cuando el hecho que genera una obligación es ilícito estamos en
presencia de un delito civil.

El cuasicontrato se diferencia de los contratos en el elemento voluntario que debe


concurrir en el contrato, o sea, en el cuasicontrato no interviene un acuerdo de
voluntades entre los contratantes.
Los juristas romanos pudieron observar que existían obligaciones que no nacían del
contrato ni tampoco del delito por lo que a estas instituciones se les denominó
cuasicontrato.

El cuasicontrato constituye una de las fuentes de las obligaciones. Es un hecho


voluntario lícito y no convencional entre dos o más personas con el objetivo de crear
vínculos de obligaciones.

 Características

Se caracteriza por que, realizando una persona actos que tampoco constituyen contratos
y no sean ilícitos, le ocasionan un empobrecimiento en su patrimonio y otra y otra
persona, que se ve favorecida, está obligada a darle una contraprestación.

En el código civil panameño sólo se regulan modalidades de cuasicontrato la gestión del


negocio ajeno sin mandato, el cobro de lo indebido y el enriquecimiento sin causa.

 Elementos para la existencia del cuasicontrato:


1. Que sean hechos jurídicos lícito.
2. Quetzales hechos sean puramente voluntarios.
3. Que no exista conv

 Principales cuasicontrato:
1. La gestión de negocios ajenos
2. El pago de los indebido
3. Enriquecimiento sin causa.

A. La gestión de negocios ajenos.

La gestión de negocios ajeno o agencia oficiosa es un cuasicontrato dado que presupone


que quien administra los negocios de una persona, lo hace sin mandato.

Esta administración sin mandato es elemento principal que lo diferencia del mandato
propiamente tal, dado que la gestión de negocios o agencia oficiosa actúa sin existir un
acuerdo entre las partes.

Ejemplo: una persona se ausentado de un denominado lugar sin tomar las medidas
necesarias para el resguardo de sus intereses, otra persona (Gerente) asume la tarea de
resguardar los intereses de la persona ausente, sin necesidad de que exista una
aprobación por parte de la persona que se ausenta.
Características:
 Es un cuasicontrato
 La administración debe ser acuerdo de voluntades o espontánea
 El gerente debe obrar sin mandato por lo que supone la intromisión en el
negocio debe ser espontánea
 El gerente se obliga para con el interesado sólo en ciertos casos establecido por
la ley.

La principal diferencia que existe entre el mandato y la gestión de negocios ajeno recae
en que la agencia oficiosa se actúa sin que intervenga un acuerdo de voluntades entre el
gerente y el interesado. Como un segundo. Hay que establecer que según su naturaleza
jurídica, el mandato es un contrato consensual porque siempre supone un acuerdo de
voluntades entre el mandante y el mandatario, por el contrario en la gestión de negocios
ajenos no existe un acuerdo de voluntades por lo tanto esta institución es un
cuasicontrato porque primero es un hecho no convencional (no existe acuerdo de
voluntades), es lícito porque efectivamente está regulado y amparado en la ley y que
genera obligaciones solo en ciertos casos.

B. El pago indebido

Aquel acto por el cual una persona paga una deuda suponiendo que la debe pero que en
la realidad no existía tal obligación de pago.

El pago de una deuda supone siempre de una obligación la cual debe cumplir, sin
embargo puede que una persona realice un pago sin que medie una obligación que
justifique jurídicamente el pago.

Requisitos para que exista pago de lo no debido:


 Qué no exista obligación
 Qué el pago se haya hecho por error

Para determinar los efectos del pago de los no debido, hay que distinguir si el que recibe
el pago estaba de buena fe o mala fe.

Si estaba de buena fe el que recibe el pago está obligado a la restitución de otro tanto el
del mismo género y calidad si se trata de dinero tú otra cosa fungible. Si vende la
especie que se dio como de vida, Deberá restituir el precio de la venta. No es
responsable de los deterioros la pérdida de la cosa que se le dio como debida.

Si estaba de mala fe, el que recibe el pago, está obligado a restituir de otro tanto del
mismo género y calidad además de los intereses.

C. Enriquecimiento sin causa o ilegítimo

Para los romanos, el enriquecimiento sin causa provenía directamente de las


obligaciones cuasi contractuales, la que suponía un enriquecimiento del patrimonio de
un sujeto en desmedro de otro sujeto. En otras palabras, el enriquecimiento sin causa es
aquel enriquecimiento en el patrimonio de una persona que proviene de un hecho que
empobrece el patrimonio de otra persona.
Los romanos ya en conocimiento de esta situación tan injusta crear un remedio
mediante la jurisprudencia a las cuál es el el dominó “Condictios”:
1. Los Condictio ob iniustam causam: era cuando alguien se enriquecía a
expensas de otro por una causa ilícita, por ejemplo, cuando se hubiera lucrado
mediante el cobro de intereses usuarios.
2. La condictio furtiva: era la que podría intentar la víctima de un fortuna, o sea
quien había sido desapoderado sin derecho de una cosa mueble contra su
voluntad.
3. La Condictio Indebiti: se usaba cuando se había pagado por error de hecho o de
derecho, excusable. Por ejemplo, si se pagará una deuda inexistente por error
excusable.
4. La Condictio Sine Causa: incluía el resto de los casos no incluidos en las
condictios anteriores, por ejemplo, acaba algo en virtud de una causa algún
momento existió, pero ya no subsistía.

D. La comunidad o división
La comunidad de una cosa universal o singular, entre dos o más personas sin que
ninguna de ellas haya contratado sociedad o celebrado otra convención relativa a la
misma cosa, es una especie de cuasicontrato.

La comunidad súbele originarse Thinking medio ninguna convención entre los Cup
participantes, como por ejemplo la comunidad que no hace en herederos de un causante
una vez muerto o la comunidad que nace entre los delegatarios de una misma cosa.

En el derecho civil los antecedentes del llamado cuasicontrato enriquecimiento sin


causa se remontan a Roma. Justiniano, siguiendo una simplificación de Gayo, considera
que todo convenio obligación es un contrato, por lo que distinguen las obligaciones
provenientes de un contrato de las que no entran en ninguno de los dos conceptos en
cuasicontrato sales o cuasi delictual, según la mayor similitud con uno y otro grupo.
Pothier define el cuasicontrato como el hecho de una persona, permitido por la ley, que
obliga para contra u obliga a otra persona para con ella, entre ambas intervenga
convención alguna.

La doctrina moderna tiene simplificar clasificaciones reduciendo las fuentes de las


obligaciones a la voluntad (contratos y, para quién es Miten, la voluntad unilateral) y la
ley (delitos, cuasi delitos, enriquecimiento sin causa y otras obligaciones que surgen de
la ley). Se podría llegar a la ley como única fuente de todas las obligaciones puesto que
la convención de las partes no tiene fuerza obligatoria si no porque la ley le presta su
apoyo.

El código civil para menos establece que “ las obligaciones nacen de la ley, de los
contratos y cuasi contratos y de los actos ilícitos intervenga cualquier género de culpa o
negligencia” (ley número dos, 1916, Art. 974).
Es decir, que las obligaciones surgen de la ley, los contratos, contratos, acciones y
omisiones de las partes, dentro de la clasificación aceptada como norma por los códigos
inspirados en el francés. Las mencionadas fuentes no son otras cosas que ellos actos
derivados de la autonomía privada entendida como poder del individuo de constituir sus
propias relaciones jurídica; y, en el segundo lugar, proviene de la soberanía del Estado,
creando entre los particulares relaciones obligatorias.
Son fuente de obligaciones según nuestro ordenamiento jurídico:

1. La ley,
2. Los contratos,
3. Los cuasi contratos,
4. Los delitos y
5. Los cuasi delitos

II. Los Cuasicontratos en Panamá


En nuestro código civil hay tres principales cuasicontratos: la gestión de negocios
ajenos, el cobro de lo debido y él enriquece sin causa (Libro Cuarto, Título
XVI,Capítulo 1).

Los cuasicontratos están contenidos en el código civil de Panam, libro cuarto, título
XVI, donde define que los cuasi contratos son hechos y puramente voluntarios, de lo
que resulta obligado su autor como un tercero y a veces una obligación recíproca entre
los interesados, Art. 1629

Cómo lo dice el libro Cuarto del código civil capítulo uno los cuasicontratos no son más
que obligaciones que se contraen sin convenio, por ejemplo, se daña algo porque no lo
cuidaste bien, un equipo. Yo puedo demandarte diciendo que tenemos un cuasicontrato
ya que yo dejé que gestionaras mi negocio y el cual debías de hacerlo cuidándolo de él y
de los bienes que en el estaban. En el código civil a eso se le conoce como gestor de
negocios.

A. Gestión de negocios ajenos sin mandato:

Según establece el artículo 1630 del código civil de Panamá., “ el que se encarga
voluntariamente de la agencia o administración de los negocios, sin mandato de este
está obligado a continuar su gestión hasta el término del asunto y sus incidencias, o a
requerir al interesado para que les sustituya en la gestión, hay hace en estado de poder
hacerlo así”.

 Nuestro código distingue claramente dos supuestos:

1. Si el titular principal o “Dominus” ratifica el contrato, se produce los efectos del


mandato, obligaciones propias del mandante.
2. Si no ratifica el contrato, el dueño de bienes o negocios que aprovechen las
ventajas de esta será responsable de las obligaciones contraídas, e indemnizará al
gestor de los gastos necesarios y útiles que hubiese hecho y los perjuicios que
hubiese sufrido en el desempeño de su cargo.

En ambos casos, las obligaciones del dueño serán frente a terceros el responder de las
obligaciones contraídas en su interés. Y frente al gestor indemnizarle los gastos
necesarios y útiles que hubiese hecho, y cubrirlo perjuicio que hubiese sufrido éste en el
desempeño de su cargo.

B. Cobro de los indebido:


El pago o cobro del indebido consiste en la relación o vínculo jurídico que se establece
entre la persona que recibe lo que no tenía derecho a recibir y aquella que paga por
error, en cuya virtud el cobrador se constituye en la obligación de restituirlo
indebidamente recibido.

La regulación de nuestro código civil distingue claramente los efectos en caso de qué el
que cobran un debido lo haga de buena fe o mala fe.

Según el artículo 1637, “cuando se recibe alguna cosa que no había derecho a cobrar, y
que por error ha sido debidamente entregada surge la obligación de restituirla”.
Ahora de acuerdo con el artículo 1639, “ el que de buena fe hubiera aceptado un pago
indebido de cosa cierta y determinada, sólo responderá de las de mejoras o pérdida de
esta y de sus accesiones, en cuanto por ellas se hubiese enriquecido. Si la hubiese en la
enajenado, restituirá el precio o se verá la acción para hacerlo efectivo.
En otras palabras, si una persona recibe un bien o dinero que no le pertenece, ya sea por
un error o de manera indebida, está legalmente obligada a devolverlo a su legítimo
propietario.
En el caso del Art. 1639, la persona que recibió el pago indebido solo será responsable
por las mejoras o pérdidas de esa cosa y de sus accesiones (cualquier cosa que se haya
añadido a la cosa original, como mejoras o mejoras en su valor) en la medida en que se
haya enriquecido por esas mejoras o pérdidas. Si la persona ha vendido la cosa, estará
obligada a restituir el precio de venta o se podrá ejercer una acción legal para recuperar
ese precio.

C. Enriquecimiento sin causa:

Según los artículos 1643-a a, 1643-B, y 1643-C; se establece para determinar quién es
hay enriquecido sin causa, a costa de otro, por lo cual está obligado a indemnizar a este
por la correlativa disminución patrimonial. Sin embargo, esta causa no puede ejercitarse
cuando el afectado tiene otra acción para hacerse indemnizar. Esta acción prescribe a los
cinco años de producidos hechos.

Esto explica que alguien ha obtenido un beneficio o ganancia a costa de alguien más sin
una base legal o justificación adecuada.
Cuando se determina que una persona se ha enriquecido sin causa a expensas de otra, se
establece una obligación legal para la persona enriquecida injustamente de indemnizar a
la persona cuyo patrimonio se ha visto disminuido como resultado de este
enriquecimiento.
ARTÍCULO 1009
La facultad de resolver las obligaciones se entiende implícita en las recíprocas,
para el caso de que uno de los obligados no cumpliere lo que le incumbe.
El perjudicado podrá escoger entre exigir el cumplimiento o la resolución de la
obligación, con el resarcimiento de daños y abono de intereses en ambos casos.
También podrá pedir la resolución, aún después de haber optado por el
cumplimiento, cuando éste resultare imposible.
El tribunal decretará la resolución que se reclame, a no haber causas
justificadas que lo autoricen para señalar plazo.
Esto se entiende sin perjuicio de los derechos de terceros adquirentes, con
arreglo a los Artículos 1159, 1160 y 1161, y a las disposiciones contenidas en el
Título del Registro Público.
No se puede presentar esta demanda si la persona afectada tiene otro recurso legal
disponible para obtener una indemnización por el mismo asunto.

También podría gustarte