Está en la página 1de 23

LO PRINCIPAL: Interpone Denuncia de Tutela Laboral por vulneración de derechos

fundamentales vigente la relación laboral; PRIMER OTROSI: Patrocinio y poder; SEGUNDO


OTROSI:Forma de notificación.

S. J. L. y GARANTÍA DE AYSÉN.
Silvia Graciela Espinoza Vera, Rut: 15.516.496-4, Profesora. Domiciliada en
Humberto García # 590 en la Ciudad de Puerto Aysén, Región de Aysén, Chile, a US.
Respetuosamente digo:
Que encontrándome dentro de plazo y de conformidad al artículo 485 del Código
del Trabajo y artículo 19 N° 1 de la Constitución Política, vengo en interponer, denuncia por
vulneración de derechos fundamentales con relación laboral vigente, en contra de la Ilustre
Municipalidad de Puerto Aysén, Rut.
69.240.100-k, servicio público descentralizado, dotado de personalidad jurídica y
patrimonio propio, representado por su alcalde don Julio Esteban Confucio Uribe
Alvarado, o quien haga sus veces al momento de la notificación de la presente denuncia,
ambos domiciliados en calle Esmeralda N° 607, Comuna de Puerto Aysén, Región de Aysén,
a fin de que se declare la existencia de la lesión de derechos fundamentales que se
denuncian, disponiendo su cese inmediato, más la indicación concreta de las medidas que
deberá adoptar el infractor, dirigidas a obtener la reparación de las consecuencias derivadas
de dicha vulneración incluidas las indemnizaciones que correspondan y la aplicación de las
multas a que hubiere lugar.
Todo ello, de acuerdo a los siguientes fundamentos de hecho y derecho que paso a exponer:

I.- CONSIDERACIONES PREVIAS.


a) COMPETENCIA DE ESTE TRIBUNAL PARA CONOCER DE LA PRESENTE DENUNCIA.
Sin perjuicio que esta materia parece suficientemente zanjada por nuestra Excma. Corte
Suprema y previsto una posible alegación de la demandada en este sentido, vale la pena
hacer una breve argumentación a si el Juzgado de Letras del Trabajo de S.S. sería
incompetente para conocer de las acciones de tutela laboral reguladas en el Código del
Trabajo, atendido que soy funcionaria pública regida por el Estatuto Administrativo Ley
18.834.
Tal como ha señalado nuestro máximo tribunal (Recurso de Unificación de Jurisprudencia
Rol Nº 3515-2014) la Tutela Laboral es un procedimiento nuevo y especial, introducido por
la Ley N° 20.087, con el objeto específico de proteger los derechos fundamentales del
trabajador (en estricto rigor no es un procedimiento especial, puesto que su tramitación se
efectúa conforme al procedimiento de aplicación general). Se trata, en definitiva, de un
mecanismo o conjunto de reglas que permite al trabajador reclamar el resguardo y la
protección jurisdiccional de sus derechos fundamentales en el ámbito de la relación laboral,
cuando aquellos se aprecien lesionados por el ejercicio de las facultades del empleador.
Dicha nueva modalidad, aparece como la culminación de un proceso tendiente a introducir
reglas sustantivas, orientadas a explicitar y reforzar la vigencia de los derechos
fundamentales en el ámbito de las relaciones laborales, como las relativas a la prohibición
de las discriminaciones (artículo 2° del Código del Trabajo) y las que consagraron la idea de
ciudadanía laboral en la empresa (artículo 5° del mismo cuerpo legal), en cuanto se
reconoce la función limitadora de los derechos fundamentales respecto de los poderes
empresariales, en el seno de la relación de trabajo. En ese contexto y en busca de la vigencia
efectiva en el ejercicio de los derechos fundamentales del trabajador, las normas de tutela
vienen a colmar ese vacío, al establecer una acción específica para salvaguardarlos,
abriendo un espacio a lo que se ha denominado la eficacia horizontal de esa clase de
derechos.
Así lo destacaba el Mensaje Presidencial que acompañó al proyecto de ley que dio origen a
la modificación legal analizada, señalando que “uno de los pilares centrales del proyecto
apunta a potenciar la vigencia plena, en el ámbito jurídico laboral, de los derechos que el
trabajador tiene no solo en cuanto trabajador sino en cuanto persona (derecho a la
intimidad y vida privada, el honor y la propia imagen, el pensamiento político o religioso, la
libertad de expresión, el derecho a no ser discriminado, etc.)”.
Se trata, en definitiva, del posicionamiento de los derechos fundamentales como ejes
vertebradores de unas relaciones laborales plenamente democráticas. Dicha vigencia
requiere, como condición necesaria, no sólo de un reconocimiento material, sino que
también y, ante todo, de mecanismos de tutela jurisdiccional eficaces e idóneos. A su turno,
en el debate parlamentario quedó de manifiesto que se trata de derechos fundamentales
que exceden los que se han considerado tradicionalmente como derechos propiamente
laborales (como el derecho a la sindicalización, negociación colectiva, entre otros) y que la
nueva modalidad busca salvaguardar el ejercicio de los derechos de las personas, los cuales
se estiman “inviolables en cualquier circunstancia”, incluso al interior de la micro sociedad
que es la empresa, y están garantizados para todos los habitantes en la Constitución
Política. (Cámara de Diputados, Legislatura 352, Sesión 51, 16 de marzo de 2005).
Que El Estatuto Administrativo no concede una acción de tutela directa a los funcionarios
de la administración en caso de vulneración de sus derechos fundamentales por parte de
sus respectivos empleadores. Por lo que resulta procedente la aplicación supletoria de las
normas del Código de Trabajo de acuerdo a lo dispuesto en su art. 1.
Esto aun cuando el Consejo de Defensa del Estado en otras causas semejantes ha solicitado
la incompetencia del Tribunal, intentado equiparar la acción de tutela a la reclamación de
ilegalidad administrativa, señalada en el art. 160 de la Ley 18.834, que establece:
''Artículo 160. Los funcionarios tendrán derecho a reclamar ante Contraloría General de la
República, cuando se hubieren producido vicios de legalidad que afectaren los derechos
que les confiere el presente Estatuto."
Claramente se trata de materias diversas, pues la disposición del CT concede tutela efectiva
para la protección de un derecho fundamental conculcado o amenazado, que se promueve
ante los Tribunales de Justicia de nuestro país, en tanto que el segundo se refiere
únicamente a vicios de legalidad de los que podría adolecer un determinado acto
administrativo.
Adicionalmente, la Contraloría carece de la competencia necesaria para resolver sobre la
tutela de derechos fundamentales, debido a que sus pronunciamientos determinan
exclusivamente si determinado órgano de la administración se ajustó o no a la legalidad
vigente en el cumplimiento del Estatuto Administrativo.
Otro argumento que se utiliza por dicho Consejo para desconocer la competencia del
Tribunal Laboral, es que los términos ''funcionario público" y ''trabajador" no son
asimilables.
No concuerdo con esta interpretación, atendido el claro sentido del artículo 1º del Código
del Trabajo que considera ambos conceptos como análogos, pues refiere que las normas
del Código del Trabajo no se aplicarán a los funcionarios públicos siempre que dichos
funcionarios o trabajadores se encuentren sometidos por ley a un estatuto especial. La
conjunción "o" ha sido utilizada claramente para enlazar a dos conceptos similares, sin
excluir a ninguno de ellos.
Adicionalmente, el art. 1° dice que los ''trabajadores" de las entidades señaladas en el inciso
precedente (funcionarios de la administración del Estado, centralizada o descentralizada),
se sujetarán a las normas de este Código en los aspectos o materias no regulados en sus
respectivos estatutos, siempre que ellas no fueren contrarias a estos últimos.
Naturalmente, las normas relativas a tutela laboral no se contraponen a las contenidas en
el Estatuto Administrativo y se refiere a materias no recogidas en él, por lo que el Tribunal
de SS. posee competencia plena para conocer de la presente denuncia.

II.- ANTECEDENTES DE HECHO


a.- Antecedentes laborales.
1.- En el mes de abril del año 2008 hago ingreso a la Educación Municipal de Puerto Aysén,
ejerciendo el cargo de docente de aula en la Escuela Poetisa Gabriela Mistral en función de
reemplazo a un colega que se encontraba con licencia médica por un periodo de 6 meses.
El Director de ese entonces, Don Juana Carrasco, me entrega toda la información y
lineamientos necesarios para poder cumplir de manera optima con mis deberes y
responsabilidades, especialmente como Profesora Jefe del Tercero Básico, además de
otorgarme talleres para realizar con los y las estudiantes de 1ero a 8vo año básico ligado al
área artísticos-cultural e informática, los cuales se realizaban después de clases.
Rápidamente comencé a destacarme entre mis pares por mi gran compromiso para con mi
labor docente. Entregando grandes aportes en el desarrollo personal, cognitivo y afectivo a
mis Estudiantes y Comunidad Educativa en General. Logrando mejorar de manera
significativa los aspectos conductuales y motivacionales de mis estudiantes, los cuales eran
valorados por sus familias, colegas y en especial por el Director del Establecimiento.
Durante este periodo, también, comencé a generar lazos afectivos con mis compañeros y
compañeras de trabajo (la gran mayoría, profesores normalistas, con gran trayectoria en el
área educativa lo cual me ayudó a complementar mi visión sobre la educación), logrando
adaptarme rápidamente al sentirme querida y valorada entre mis pares, aportando así a la
buena y sana convivencia.
Antes de terminar el tiempo de reemplazo, Don Juan Carrasco me llama a su oficina para
manifestarme lo contento y conforme que estaba con mi trabajo y es por eso que me ofrece
prolongar mi labor, en el Establecimiento, hasta el mes de diciembre, lo cual accedí con
mucho gusto.
En el mes de diciembre, del mismo año, fue la ceremonia formal de mi titulación como
Profesora en Educación General Básica y Licenciada en Educación con Distinción Máxima en
la Universidad de Los Lagos Campus Coyhaique por ende tuve que ausentarme a mis
funciones para asistir a recibir dicho Diploma. Al día siguiente, al volver al Establecimiento,
me encuentro con la gran sorpresa de que toda la comunidad educativa (estudiantes,
familias, Profesores y Profesoras, Asistentes de la Educación y Directivos me tenían un acto
Solemne en virtud al gran paso Profesional en mi vida. Entregándome palabras y gestos de
cariño lo cual aún recuerdo como un momento hermoso, importante y significativo,
además porque fue el primer Establecimiento en donde inicie mi labor como Educadora. Y
es así como continué por un año más trabajando como docente en esta Escuela.
En el año 2010, el Director de la Escuela Almirante Simpson de Puerto Chacabuco, Don José
Arredondo me ofrece un puesto laboral, como Docente de Aula, con mayor cantidad de
horas y mejor remuneración (como “A contrata”). Esto debido a que conoció mi trabajo
realizado en la Escuela antes mencionada, y deseaba contar con mis habilidades,
conocimientos, capacidades sociales, artísticas-culturales, etc. Para resaltar aun más el
Establecimiento, entregándole a sus estudiantes otras herramientas para desenvolverse
mejor en su vida diaria. A lo cual accedí con mucho gusto abriéndome a nuevos desafíos
personales y profesionales. Es desde ese entonces que he desempeñado funciones
educativas en este Establecimiento, participando en diversos ámbitos como: Gestión
Educacional, Liderazgo Escolar, Jefa de Unidad Técnica Educativa, Jefatura de diversos
cursos (de 1ero a 8vo básico), Coordinadora de Primer ciclo Básico, Monitora de Taller de
Teatro, Arte Terapia, Yoga Infantil, Expresión corporal, entre otros.
En el año 2014 Rendí por primera vez la Evaluación Docente, instrumento de medición que
debemos realizar todos los docentes de Chile cada cuatro años, obteniendo como resultado
COMPETENTE.
En mayo del 2015, por vigencia de la ley 20.804 mi contrato Laboral cambia a Titularidad
Docente con 44 horas.
En el año 2018 vuelvo a rendir la Evaluación Docente y Evaluación de Conocimientos
Específicos y Pedagógicos, y por el buen resultado obtenido, quedo Encasillada en el Tramo
de AVANZADO (El docente consolida su identidad profesional, logrando un nivel esperado
de saberes y competencias profesionales, de acuerdo con los criterios señalados en
el Marco para la Buena Enseñanza. El docente que se encuentra en este tramo demuestra
no solamente habilidades para la enseñanza en el aula, sino que es capaz de hacer una
reflexión profunda sobre su práctica y asumir progresivamente nuevas responsabilidades
profesionales relacionadas con el acompañamiento y liderazgo pedagógico, y con los planes
de mejoramiento escolar), siendo la primera docente del Establecimiento en alcanzar este
resultado alto.
Actualmente, desempeño funciones como Profesora de Educación Artística, realizando
clases de Arte y Música desde 1ero a 8vo año Básico y Expresión Oral de 5to a 8vo año
Básico. A demás, desde el año 2015, pertenezco a la Mesa Regional de Educación Artística
(MREA), programa Nacional de Desarrollo Artístico en la Educación del Ministerio de las
Culturas, las Artes y el Patrimonio. Participando periódicamente en diversas reuniones,
presentaciones artísticos-culturales, entre otros.
Mi remuneración mensual asciende a la suma de $1.920.000 (un millón novecientos veinte
mil) aproximadamente.
Siempre me ha gustado el Área de Liderazgo Positivo, por naturaleza innata, ejerciendo
roles importantes desde mi etapa de Educación Básica, siendo escogida en varias
oportunidades como mejor compañera, en Educación Media fui presidenta de curso en 3ro
y 4to medio y Miembro de la Directiva del Centro General de Alumnos, en mis inicios como
Profesional de la Educación, Participé de manera activa como miembro del Colegio de
Profesores Comunal. Es por esto que en diciembre 2016 inicio Magíster en Educación con
Mención en Gestión de Calidad terminando el 2018 con Distinción Máxima. El fin de este
perfeccionamiento es que, de tener la oportunidad, poder postular a Concurso de Alta
Dirección Pública en Algún Establecimiento Educacional Municipal.
b.- HECHOS VULNERATORIOS.
1. En el mes de marzo del año 2021, aún estando con licencia médica por Postnatal, la Jefa
De Unidad Técnica Pedagógica de mi establecimiento, Karina Ortiz, me llama por teléfono
solicitando realizar clases remotas (de arte y música) para estudiantes de 1ero a 8vo año
básico, a lo cual le menciono que “no me corresponde por estar con licencia”. Ella me dice:-
“sé que tienes buena voluntad y no queremos dejar a los estudiantes sin estas asignaturas
ya que no tienes reemplazo”. Pensando que solo serán algunas actividades, y por tiempos
breves, accedí. De inmediato comencé a aprender a usar Aplicaciones para grabar y editar
videos, adquirir herramientas tecnológicas básicas para trabajar y realizar clases remotas
atractivas y entretenidas para mis niños y niñas desde mi casa.
De un comienzo no tuve mayor problema ya que solo debía enviar 2 cápsulas por semana,
además lo realizaba con mucho entusiasmo ya que las artes me apasionan y me servía como
terapia también. Al pasar de los días se me envío un calendario de actividades por curso, en
donde me exigía trabajar todos los días, cabe señalar que realizar cada cápsula lleva mucho
tiempo y yo soy muy detallista. Esto me significó comenzar a trabajar en horarios “no
saludables”. Debía esperar a que mis hijas se durmieran para poder comenzar a planificar,
reunir los materiales, hacer las actividades, grabar mis clases y editar los videos. Esto era
desde las 22:30 hrs. a 03:00 A.M hrs. (y hasta 06:00 A.M hrs. en algunas ocasiones) de lunes
a domingo. Estas cápsulas se las enviaba a Karina vía mail para que ella las revise y luego
reenviaba a los cursos correspondientes y a su vez, las publicaba en el canal de Youtube del
Establecimiento. Para ser más expedito el traspaso de información, se me sugiere crear
Grupos de Whatsapp con cada curso ya que como establecimiento, es uno de los medios
de comunicación que utilizamos para con las familias (utilizando teléfonos y recursos
personales).
Vista y considerando que tenía una muy buena participación de mis estudiantes y sus
familias para con mis asignaturas, en cada curso (reportando periódicamente las
actividades realizadas en casa) sentí un compromiso mayor para con ellos puesto que
constantemente manifestaban agrado, entusiasmo y motivación por realizar las actividades
que les encomendaba. Es por esto que sostuve este estilo de trabajo y de vida hasta el mes
de julio. Cabe mencionar que siempre he sido una mujer integra, con una gran fuerza mental
y emocional para sobrellevar todo tipo de inconvenientes que se presenten en los diversos
ámbitos, ya sea personal como profesional.
2. Que, ingreso a mis labores de manera presencial, en el establecimiento, el día lunes 16
de agosto de 2021, ya que se terminó mi Licencia Postnatal. Fui recibida con mucho cariño
por parte de mis compañeros de trabajo y mis estudiantes. Acudo a conversar con Jefa de
U.T.P para solicitar mi horario y carga laboral. Me menciona que por protocolo y medidas
de seguridad contra el COVI-19 los funcionarios solo trabajan media jornada (mañana o
tarde). Se me señaló, verbalmente, que mi horario de trabajo seria en jornada de la mañana
(de 09:00 a 12:40 hrs. Respetando mi horario de lactancia, pero al recibir mi nuevo horario
me doy cuenta que, en el papel, los horarios otorgados para dar de lactar fueron designados
de manera arbitraria por la Directiva del Establecimiento, priorizando las necesidades del
empleador y no la mía ni mucho menos de mi hija (faltando a la ley). Además, los días lunes
no tengo horario de lactancia (faltando a La Ley Nº 20.761 para padres y madres
trabajadores), ya que me las designaron en el mismo horario de mi colación y eso también
es un atentado a nuestros derechos. Los días miércoles, en donde tengo clases en jornada
de la tarde, no tengo atención de Jardín Infantil (faltando al artículo 203 del código del
trabajo) aun cuando el Jardín, al cual asiste mi hija, está dentro del mismo establecimiento
Educacional donde trabajo y este solo prestan servicios hasta las 13:40 hrs.
Imposibilitándome a desempeñar mis funciones de manera tranquila y segura.
No tengo a ninguna persona de confianza ni redes de apoyo quien pueda cuidar a mi hija
en las tardes. Traté de dejarla con mi suegra el día miércoles 16 de agosto de 2021. Ella es
una persona adulta mayor con problemas de salud crónica y aun sabiendo esto no tuve otra
opción. Al volver a casa, en la tarde, me encuentro con la triste noticia de que mi hija tuvo
un accidente en su “andador” ya que mi suegra no estaba pendiente al 100% de la niña.
Obviamente me angustie mucho y me culpe por esto. Envío un mail a la Directora del
establecimiento contando lo difícil e insostenible no contar con el cuidado necesario para
mi hija mientras realizo mis funciones. Al no tener respuesta de este escrito, solicito
conversar personalmente con ella y Jefa de U.T.P. Reitero mi preocupación por la poca
empatía al crear mi carga horaria, sin considerar mi opinión y mis necesidades legales a lo
que me responden que no me pueden cambiar el horario, además Karina Ortiz me cuestiona
mi manera de resolver este tema a lo que me manifiesta textualmente: “Tu deberías tratar
de buscar a alguien que te cuide a tu hija, tienes que poner de tu parte también y resolverlo
como familia, yo tengo dos hijos (mayores de 5 años) y como familia tuvimos que tomar la
decisión de que mi marido renuncie a su trabajo para quedarse a cargo del cuidado de
nuestros hijos”, a lo cual respondo que de ningún punto de vista su realidad no se asemeja
a la mía. De todas maneras se comprometieron conversar con la Directora del jardín para
solicitar apoyo en la tarde de los días miércoles. Al terminar la reunión quedé esperanzada
a que pronto tendría respuesta favorable.
Quiero dejar en manifiesto que a pesar de realizar mis clases de manera presencial en las
mañanas, en la tarde debía llegar a trabajar en mi casa para preparar cápsulas de
actividades para aquellos estudiantes que trabajaban de manera remota, además de
cumplir roles de madre, apoderada y dueña de casa.
3. Que, el día jueves 26 de agosto 2021, en la noche, recibo una llamada de una colega del
Establecimiento informándome que otras dos docentes, del mismo recinto, redactan una
carta cada una, exponiendo sus quejas por “Malos tratos y Menoscabo a la profesión”
ejercida por los docentes de la Escuela, en especial de parte de Silvia Espinoza (yo) y otros
tres colegas más llevando estas cartas al Departamento de Educación Municipal. Este vil
acto fue “la gota que rebalso el vaso”. De inmediato brotaron sentimientos de impotencia,
pena, desilusión, angustia, entre otros. No podía creer que estaba siendo objeto de
acusaciones sin fundamentos ni pruebas, más aún, cuando estuve casi un año fuera del
establecimiento (solo trabajando desde casa). Lo más extraño es que a una de ellas ni
siquiera la conocía bien ya que se integró a la planta docente en marzo de este año. Solicité
copia de dichas cartas para poder tomar acciones legales por injurias y calumnias. La
encargada de Convivencia Escolar solo me dio la oportunidad de leerlas desde su
computador personal comprometiéndose a entregarme las copias una vez que ellas hayan
entrevistado a todos los involucrados. Al iniciar la lectura me percato que las cartas están
con fecha 18 de agosto de 2021 y que están dirigida a Camila Redlich (Directora del
Establecimiento) siendo que, al preguntarle a Camila por esta situación nos menciona que
“se había enterado de esto hace pocos días atrás y que dichas cartas nunca pasaron por sus
manos ya que las colegas fueron directamente a entregárselas al Jefe del DEM saltándose
todo conducto regular”. Es ahí en donde descubro su mentira ya que ella supo, de un
comienzo, de esta acusación infundada y no activó oportunamente el protocolo de
Convivencia Escolar. Por lo demás aun no me hacen entrega de esas cartas.
Cabe señalar que una de las Docentes quienes me acusaron (Sra. Soledad Ubilla), en la
actualidad, está separada de sus funciones por acusaciones de maltrato verbal y emocional
hacia varios estudiantes de 1ero Básico. Repitiendo conductas agresivas y malas prácticas
que ha cometido en diversas Escuelas de la Región en donde ha cumplido funciones
docentes (en cada una de ellas no dura más de un año)
Llevo trabajando en este establecimiento casi 14 años y jamás he vivido una situación así,
en donde me sienta tan vulnerada, poco valorada y respetada, menos en el otro
establecimiento en donde trabaje anteriormente.
4. Que, existe una disconformidad general de parte del personal del establecimiento,
especialmente por los Docentes y algunos Asistentes de la Educación, por las malas
prácticas, poca empatía, imponer acciones sin consensuar en conjunto como Unidad
Educativa, no respetar acuerdos tratados en Consejo de Profesores, abuso de poder entre
otras malas prácticas, cometidas por la Directiva del Establecimiento, especialmente por la
Directora, quien lleva menos de un año en el cargo (Designada por su tío el ex Alcalde Luis
Martínez quien la deja como Subrogante y no por Concurso de Alta Dirección Pública como
debería ser), generando un ambiente realmente tóxico y destructivo emocionalmente. A
raíz de esto, el día 18 de agosto de 2021, se redactó una carta formal dirigida al Jefe DEM
de ese entonces Sr. Fredy Moraga y al Alcalde Sr. Julio Uribe, adjuntando firmas, del
personal docente señalando todas las disconformidades y malas prácticas señaladas
anteriormente a lo cual nunca tuvimos respuestas formales.
Es por todo, lo anteriormente expuesto, que mis fuerzas y energías físicas, mentales y
emocionales se vieron alteradas y sobrepasadas llegando a tomar la determinación de pedir
ayuda profesional, y así encontrar la estabilidad que siempre he tenido. Es así como, el día
lunes 30 de agosto de 2021, acudí a la Mutual de la comuna para solicitar atención médica
por ESTRÉS LABORAL. He estado con licencia médica desde ese día y asistiendo a todas las
atenciones correspondientes con los especialistas. Arrastro esta tensión física y emocional
desde marzo de DEL AÑO 2021, LO CUAL se ha mantenido a la fecha. A través de esta
Institución de Salud es que realizo una demanda por Agobio y Estrés Laboral la cual, según
los antecedentes, evidencias y pruebas sustentables recaudadas por la MUTUAL resuelven
APROBAR mi demanda calificando mi patología como ENFERMEDAD PROFESIONAL CUYO
FACTOR DE RIESGO ES: LIDERAZGO DISFUNCIONAL O MENOSCABO. Esta entidad me otorga
licencia médica por 2 meses apoyándome con atención con Psicólogo y Psiquiatra.
5. Que, el día lunes 27 de agosto de 2021 solicitamos audiencia con el alcalde para
conversar sobre los hechos que aquejan a nuestra Comunidad Educativa, para lo cual nos
cita a las 13:00 hrs. El alcalde manifiesta que efectivamente Camila Redlich ya no
continuaría como Directora y que prontamente se realizará un concurso de Alta Dirección
Pública para elegir nuevo Director y además se comprometió a indagar más en el asunto y
que nos daría pronta respuesta a lo cual de inmediato manifestamos nuestra felicidad y
tranquilidad. Llama, a la brevedad a Tamara Villegas, nueva Jefa DEM para que tome todos
los accedentes del caso y resuelva prontamente. Ese mismo día en la tarde, me llama la Sra.
Tamara para invitarme a una reunión en su oficina a efectuare el día miércoles 29 de agosto
de 2021. Me solicita todos los antecedentes del caso además le entrego la carta de
resolución de la Mutual prestando todo su apoyo para lograr terminar esta situación y
mejorar nuestro aspecto laboral.
6. Que, el día 27 de septiembre de 2021 el Sr. Alcalde en conjunto con Jefa de DEM Sra.
Tamara Villegas, cita a docentes del establecimiento a una reunión para volver a pedir
mayor antecedentes y para reiterar que “estamos tranquilos porque Camila ya no seguirá
en el cargo. Muy pronto cambiaremos de personal”. Nos sugirió algunos nombres a lo cual
propusimos a un colega que ya ha cumplido cargos de Director de otras Escuelas y tiene
larga experiencia. En fin, Nos reiteró su apoyo. El mismo día en la noche me envían una
información en donde aparece en la página de Transparencia Municipal que Camila Redlich
Alvarado renueva contrato desde el 01 de septiembre al 28 de febrero del 2022 lo cual fue
como un “balde de agua fría para todos”, ya presenciamos varias reuniones en donde nos
manifestaron cambios y mejoras en nuestros ambiente laboral y sin embargo ya la tenían
contratada semanas antes a nuestra última reunión. Mentiras tras mentiras. Esa noche me
vino una crisis de angustia ya que reviví aquellos hechos y episodios que me dañaban
psíquica y emocionalmente a demás de sentir la sensación de desamparo e injusticia. El
llanto insaciable se apoderó de mí debiendo ser contenida por mi marido.
7. Que el día 18 de noviembre de 2021, me reintegro a mis funciones en la escuela. En
donde nadie me entrega los calendarios de actividades, horario laboral (modificado). Si
puedo rescatar el gran cariño y recibimiento de gran parte de mis compañeros y
estudiantes. Esto fue muy gratificante. Por parte de la Directora, solo me miró y siguió en
sus funciones. Ignorándome por completo.
8. Que, el día 09 de noviembre de 2021, solicito reunión con el nuevo Jefe de UTP Don
Cristian Álvarez para pedirle mi nueva carga horaria lo cual me informa que se me otorga
las horas de lactancia diarias, además de la atención de Sala Cuna los días miércoles en la
tarde, todo esto gracias a su gestión.
9.- De acuerdo a lo relatado precedentemente, hay una discriminación claramente por
ser mamá, cambio drásticamente el trato que mantiene la directora y el sostenedor hacia
mi persona, lo cual trae aparejado que se declare la enfermedad profesional por la Mutual
de Seguridad, por lo que también se esta vulnerando la garantía constitucional contemplada
en el artículo 19 N° 16, esto es, la libertad del trabajo y su protección, particularmente en
cuanto a su inciso tercero, que “prohíbe cualquier discriminación, que no se base en la
capacidad o idoneidad personal, sin perjuicio que la ley pueda exigir nacionalidad chilena o
límites de edad para determinados casos".
10.- Pese a múltiples reuniones sostenidas entre el sostenedor, esto es ilustre
Municipalidad de Puerto Aysén, no tomaron ninguna tipo de medida para proteger mi
integridad psiquica, mi maternidad. A pesar de tener un amplia trayectroria en la educación
municipal de la comuna Puerto.
11.- A pesar de las conversaciones sostenidas con el sostenedor y la Directora de
Educación Municipal, el día 23 de Diciembre de 2021 me llama la directora del colegio en el
que desempeño funciones para darme mi carga horario para el año 2022 y señalándole que
pasaría con mis horas de lactancia, envuelven un silencio, lo cual me trajo aparejado una
nueva crisis de angustia.
12.- Que, al inicio escolar 2022, concretamente el día 01 de marzo de 2022, me hacen
entrega de mi carga laboral, adjunto los horarios de mis asignaturas por curso. Aquí queda
en manifiesto la designación de horas laborales otorgadas sin consensuar horario de
lactancia ni coincidencia en horario compatible con el Jardín infantil de mi hija lactante, (ya
que ellos reciben a los niños desde las 08:30 hrs. y yo tengo ingreso a las 08:15 hrs. el día
viernes)

El día martes y jueves no tengo recreo en la jornada de la mañana ya que tengo dos bloque
de trabajo en aula de manera consecutiva.

Los días viernes tengo clases desde las 08:15 hrs. hasta las 14:15 siendo que todos los
colegas docentes trabajan hasta las 13:30 hrs (este fue un acuerdo tomado desde hace 14
años atrás, de dejar la tarde del viernes libre para realizar trámites personales debido a que
permanecemos de lunes a jueves en horario completo en el establecimiento conviniendo
que está en la localidad de Puerto Chacabuco).

A este horario aún falta que me incluyan las asignaturas de artes y música de prekinder y
kinder, además del consejo de profesores, horario de planificación, y talleres
extraprogramáticas.
Lo anterior sigue provocando que mis derechos y garantías antes referidos, resultaron
lesionados por la demandada y sus colaboradoras, por cuanto el ejercicio de las facultades
que la ley le reconoce al empleador le ha limitado el pleno ejercicio de los mismos, sin
justificación suficiente, en forma arbitraria, desproporcionada y sin respeto a su contenido
esencial. Revela una forma de proceder, prepotente, desproporcionada e irreflexiva, al
accionar en una forma abusiva y en desconocimiento de mis derechos fundamentales. Lo
anterior, demuestra un absoluto desprecio a las garantías constitucionales antes descritas
y a las normas de orden público que regulan su existencia y ejercicio. Se estaría vulnerando
mi derecho a lactancia, regulado en el artículo Respecto del derecho que establece
el artículo 206 del Código del Trabajo, sobre el derecho que tienen las trabajadoras de
disponer a lo menos, de una hora al día, para dar alimentos a sus hijos menores de dos años.

2. Resultado lesivo.
Que las situaciones vividas me han provocado un gran daño emocional, profesional y
familiar. Si bien actualmente, no estoy con licencia médica, si estoy siendo tratada por
Profesionales de la Mutual (Psicólogo y Psiquiatra).
El obrar vejatorio de parte de mi jefatura quien sabiendo de la vulneración de cual fui
víctima, me sigue vulnerando obligándome a permanecer en el establecimiento,
compartiendo espacios y actividades con la Señora Camila Redlich. Quien es una de las
principales causantes de mi malestar emocional.
A raíz de lo anterior, mi salud mental y física sufrió un grave perjuicio, comenzó a somatizar
todo lo que me estaba ocurriendo en el trabajo, sintiéndome mal tratada, enjuiciada
públicamente, perseguida, hostigada, no pude conciliar el sueño por varios meses,
permaneciendo sin ganas de levantarse. Viviendo en constante angustia e incertidumbre.
Los vejámenes indicados precedentemente, en ningún caso han sido redactados en
términos taxativos, solo ejemplifican la abundante y sistemática cantidad de abusos de que
he sido víctima en el ejercicio de mis funciones. Es necesario señalar, que estamos ante un
conjunto de actos y omisiones ejercidos en mi contra, que han sido tolerados y amparados
por mi empleador que aisladamente pudieran ser desestimados por su gravedad, pero que,
en su conjunto, me han dañado profundamente.
III.- ANTECEDENTES DE DERECHO
Que, según se desprende de la exposición de los hechos, la demandada ha vulnerado
manifiestamente los derechos fundamentales de mi representada, específicamente, el
derecho a la vida y a la integridad física y psíquica expresamente reconocidos en la
Constitución Política de la República en el artículo 19 N° 1 inciso 1º del Capítulo III de la
Carta Fundamental. En efecto, las últimas conductas vulneratorias de la denunciada se
verificaron el día 01 de marzo de 2022 en particular y la denegación posterior mis horas de
lactancia, lesionó gravemente el derecho a la integridad psíquica, por haber efectuado la
demandada, en la ejecución de la relación laboral y a propósito de su condición de superior
jerárquico, conductas indebidas que perjudicaron gravemente sus condiciones laborales,
atentando en contra de mi dignidad personal y mi salud física y mental.
a) Derecho a la Integridad Física y Psíquica de la Persona.
El derecho a la integridad personal es aquel derecho humano fundamental y absoluto que
tiene su origen en el respeto debido a la vida y sano desarrollo de ésta. Es el derecho al
resguardo de la persona, en toda su extensión, bien sea en su aspecto físico como mental.
El ser humano por el hecho de ser tal tiene derecho a mantener y conservar su integridad
física, psíquica y moral. La Integridad física implica la preservación de todas las partes y
tejidos del cuerpo, lo que conlleva al estado de salud de las personas. La integridad psíquica,
por su parte, es la conservación de todas las habilidades motrices, emocionales e
intelectuales. La integridad moral hace referencia al derecho de cada ser humano a
desarrollar su vida de acuerdo con sus convicciones.
El reconocimiento de este derecho implica, que nadie puede ser lesionado o agredido
físicamente, ni ser víctima de daños mentales o morales que le impidan conservar su
estabilidad psicológica, tanto por acción como por omisión.
El derecho a la integridad física y sicológica de toda persona y en consecuencia de todo
trabajador, exige que el empleador en el ejercicio de las facultades que la ley le reconoce
en su carácter de tal, debe respetar los derechos fundamentales, en los términos
establecidos en el artículo 5 inciso 1º del Código del Trabajo, siendo uno de los límites de
sus prerrogativas el respeto por el derecho en análisis. Es más, el derecho a la dignidad
humana constituye la base para analizar y comprender el alcance y contenido de la
indemnidad sicológica de todo trabajador. Por ello, en atención a los efectos que deriven
del actuar del empleador podrá establecerse si con ello se han afectado o no un derecho
fundamental especifico del trabajador, pudiendo ser de un aparente contenido neutro y
que, no obstante, ello afecte o prive de alguno de los derechos de que es titular el
trabajador en su carácter de persona.
La integridad física y síquica expresamente reconocida en el artículo 19 N.º 1 de nuestra
Constitución Política, en el ámbito laboral, tiene su consagración legal en el denominado
deber de protección, consagrado en el artículo 184 del Código del Trabajo, que obliga al
empleador a tomar todas las medidas necesarias para proteger eficazmente la vida y la
salud de sus trabajadores. Esta obligación se constituye en la prohibición del empleador de
realizar actos que impliquen un atentado a este derecho, como la presión física y sicológica
de la cual fui objeto.
Además, Este deber no sólo dice relación con actos directos, esto es, de mantener
condiciones de higiene y seguridad en los lugares de trabajo, sino que, además, una
obligación de hacer, esto es, actuar de manera oportuna y eficaz a fin de evitar que las
condiciones de trabajo permitan afectar la integridad física y síquica del trabajador.
b) Vulneración al derecho a la vida y a la integridad física y psíquica, establecida en el
artículo 19 Nº 1 de la Constitución Política de la República de Chile.
La citada garantía se encuentra establecida en la Constitución Política de la República de
Chile, en el artículo 19 Nº 1 inciso 1°: “La Constitución asegura a todas las personas: N° 1: El
derecho a la vida y a la integridad física y psíquica de la persona.”
Por integridad física de la persona debemos entender la preservación y funcionamiento de
todos los miembros y órganos que le permiten manifestarse como tal, y en todas las
expresiones que conforman su específica naturaleza, potencialidad y aptitudes, de acuerdo
con lo expresado por Silva Bascuñán.
Respecto a la integridad psíquica, consta en las actas de la Comisión Ortúzar, en la sesión
89, que la inclusión de este elemento fue debatido, y al efecto, se consultó la opinión del
doctor Armando Roa, quien en la sesión 93 expresó: “hay elementos categóricamente
psíquicos que son absolutamente irreductibles a lo físico, y que escapan a lo físico, y que
por lo tanto podría haber una perturbación de la integridad física sin que estos elementos
sean directamente tocados, porque escapan realmente del plano conceptual”. Agrega que
“defender sólo la integridad física es incompleto (…) Esto no significa que estén separados,
como lo están la esposa y el esposo. Están unidos, pero no son iguales, no son totalmente
idénticos; están unidos, pero no son idénticos bajo todos los aspectos”.
Ahora bien, desde el punto de vista del Derecho del Trabajo, en lo que concierne al alcance
de esta garantía, el propio Código del Trabajo establece en el artículo 485 y siguientes que
constituye vulneración a esta garantía aquella que sea consecuencia directa de actos
ocurridos en la relación laboral.
Entonces, debemos entender que una vulneración al derecho a la integridad física y psíquica
en materia laboral, consistiría en que con ocasión del cumplimiento del contrato de trabajo,
la integridad física del trabajador pudiera ser trastocada a tal punto que su cuerpo físico no
pudiera desarrollar todas sus potencialidades o su pleno funcionamiento; o que respecto
de la integridad psíquica, el trabajador pudiera ver afectada aquella faceta interna que lo
separa de la mera materialidad, de tal forma que ocurriría un grave desmoronamiento al
interior de su ser.
En la especie es posible determinar que los problemas a su salud mental son consecuencia
de la constante situación de estrés laboral dado al hostigamiento constante recibido
mediante la instrucción de un procedimiento sancionatorio.
Esto, de acuerdo al texto constitucional, y a su remisión que realiza el artículo 485 del
Código del Trabajo, es una gravísima vulneración al derecho a la vida y a la integridad física
y psíquica a mi persona, ya que el cúmulo de conductas que han sido descritas.
c) Prohibición del acoso laboral y de actos de discriminación.
El artículo 2° incisos 2° y 3° del Código del Trabajo, en relación con el artículo 486 del mismo
cuerpo legal establecen la protección a través del procedimiento de tutela de derechos
fundamentales del trabajador en las materias concernientes a actos discriminatorios y la
prohibición del acoso laboral.
Disponen las normas citadas: Art. 2° (…) Las relaciones laborales deberán siempre fundarse
en un trato compatible con la dignidad de la persona. Es contrario a ella, entre otras
conductas, el acoso sexual, entendiéndose por tal el que una persona realice en forma
indebida, por cualquier medio, requerimientos de carácter sexual, no consentidos por quien
los recibe y que amenacen o perjudiquen su situación laboral o sus oportunidades en el
empleo. Asimismo, es contrario a la dignidad de la persona el acoso laboral, entendiéndose
por tal toda conducta que constituya agresión u hostigamiento reiterados, ejercida por el
empleador o por uno o más trabajadores, en contra de otro u otros trabajadores, por
cualquier medio, y que tenga como resultado para el o los afectados su menoscabo,
maltrato o humillación, o bien que amenace o perjudique su situación laboral o sus
oportunidades en el empleo. Son contrarios a los principios de las leyes laborales los actos
de discriminación. Los actos de discriminación son las distinciones, exclusiones o
preferencias basadas en motivos de raza, color, sexo, edad, estado civil, sindicación,
religión, opinión política, nacionalidad, ascendencia nacional u origen social, que tengan por
objeto anular o alterar la igualdad de oportunidades o de trato en el empleo y la ocupación.
El inciso segundo del artículo 2 del Código del Trabajo prescribe que Las relaciones laborales
deberán siempre fundarse en un trato compatible con la dignidad de la persona y recoge la
interdicción al trato discriminatorio no amparado en razones justificadas que consagra con
mayor jerarquía por el inciso tercero del número 16 del artículo 19 de la Carta Fundamental.
NOGUEIRA ALCALÁ anota que “la dignidad de la persona es el rasgo distintivo de los seres
humanos respecto de los demás seres vivos, la que constituye a la persona como un fin en
sí mismo, impidiendo que sea considerada un instrumento o medio para otro fin, además
de dotarlo de capacidad de autodeterminación y de realización del libre desarrollo de la
personalidad. La dignidad es así un valor inherente a la persona humana que se manifiesta
a través de la autodeterminación consciente y responsable de su vida y que exige el respeto
de ella por los demás”.
Citando a WOLFANG, el mismo autor, señala que aquélla “es una cualidad intrínseca y
distintiva reconocida a todo individuo que lo hace merecedor del mismo respeto y
consideración por parte del Estado y de la comunidad, implicando, en este sentido, un
complejo de derechos y deberes fundamentales que aseguran a la persona tanto contra
todo y cualquier acto de cuño degradante o deshumanizado, como velan para satisfacer las
condiciones existenciales mínimas para una vida saludable…”
El Tribunal Constitucional chileno ha señalado, situando a la dignidad como valor principal
en el artículo 1°, inciso primero de la carta política (“Las personas nacen libres e iguales en
derechos”) que “por ser la base del sistema constitucional imperante en Chile “a la cual se
alude en aquel principio capital de nuestro Código Supremo es la cualidad del ser humana
que lo hace acreedor siempre de un trato de respeto, porque ella es la fuente de los
derechos esenciales y de las garantías destinadas a obtener que sean resguardados” (Rol
943-07).
Finalmente, en lo que aquí interesa resaltar, el mismo NOGUEIRA postula que “el valor y
principio de la dignidad humana tiene un carácter absoluto y de obediencia irrestricta”;
“constituye un mínimo invulnerable del ser humano” y “todos los derechos fundamentales
tienen en ella su fundamento y base sustantiva ya que todos ellos contribuyen a desarrollar
ámbitos propios de la dignidad de la persona humana”
En armonía con lo razonado, conviene rememorar una reconocida sentencia del Tribunal
Constitucional español, que tiene ya casi 25 años y cuya fuerza descriptiva del fenómeno
que se analiza –y sin remilgos de lenguaje- corrobora la actualidad y universalidad del
fenómeno que se viene tratando: “La celebración de un contrato de trabajo no implica de
modo alguno la privación para una de las partes, el trabajador, de los derechos que la
Constitución le reconoce como ciudadano (…) Ni las organizaciones empresariales forman
mundos separados y estancos del resto de la sociedad ni la libertad de empresa legitima el
que quienes prestan servicios en aquéllas por cuenta y bajo la dependencia de sus titulares
deban soportar despojos transitorios o limitaciones injustificadas de sus derechos
fundamentales y libertades públicas, que tienen un valor central y nuclear en el sistema
jurídico constitucional (…). Las manifestaciones de ‘feudalismo industrial’ repugnan al
Estado social y democrático de Derecho y a los valores superiores de la libertad, justicia e
igualdad a través de los cuales ese Estado toma forma y se realiza” (STC 88/1985; 19 de
julio)
Los actos de acoso laboral exigen agresiones u hostigamiento reiterados. En la especie
existieron, sin que la demandada buscara fórmulas para solucionar el conflicto laboral y que
se propusiera el traslado y luego se desistieran de esa acción, producto de ese actuar me
ocasiono un daño irreparable.
IV.- PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN DE TUTELA LABORAL.
En Cuanto a acción de tutela El artículo 485 del Código del Trabajo contempla el
denominado Procedimiento de Tutela Laboral, el cual se aplicará a aquellas cuestiones
suscitadas en la relación laboral por aplicación de las normas laborales que afecten los
derechos fundamentales de los trabajadores, entendiéndose por estos los consagrados en
la Constitución Política de la República en su artículo 19 números 1º inciso primero, siempre
que la vulneración sea consecuencia directa de actos ocurridos en la relación laboral de
trabajo, 4º, 5º, en lo relativo a la inviolabilidad de toda forma de comunicación privada, 6º,
inciso primero, 12º, inciso primero, y 16º, en lo relativo a la libertad de trabajo, al derecho
a su libre elección y a lo establecido en su inciso cuarto, cuando aquellos derechos resulten
lesionados en el ejercicio de las facultades del empleador. También se aplicará este
procedimiento para conocer de los actos discriminatorios a que se refiere el artículo 2º de
este Código, con excepción de los contemplados en su inciso sexto. Además, el inciso 3º de
la norma en comento señala expresamente que los derechos y garantías a que se refiere la
norma resultan lesionados, cuando el ejercicio de las facultades que la ley le reconoce al
empleador limita el pleno ejercicio de aquellas sin justificación suficiente, en forma
arbitraria o desproporcionada o sin respeto a su contenido esencial.
En Cuanto al daño moral:
Siendo el daño moral sufrido consecuencia directa de la acción ilícita de la demandada,
llamada por el ordenamiento a garantizar precisamente el bien que lesiona (artículo 184 del
Código del Trabajo) corresponde dar lugar a la demanda en cuanto a la indemnización
solicitada, desde que resulta procedente en la lesión de un daño extrapatrimonial ajustar la
tutela efectiva al principio transversal al orden normativo que se formula como el deber de
reparación integral del daño por quien lo causa.
Existe jurisprudencia superior, en una interpretación extensiva y no literal de la norma
general contenida en el artículo 1556 del Código Civil, desde la sentencia de la Corte
Suprema de 20 de octubre de 1994 (Revista Derecho Y Jurisprudencia, t.9, sec. 1ª, páginas.
100 y ss) que ha recibido las tendencias más modernas acerca del principio resarcitorio
anotado, sin que se divise razón alguna para estimar que la interpretación de la norma
común sea inaplicable al ámbito del contrato de trabajo. Razonar a favor de la distinción en
función de la materia importa consagrar una exégesis inequitativa que niega la reparación
del daño y, al mismo tiempo, validar una distinción no amparada por el ordenamiento, que
da tutela judicial al daño extrapatrimonial causado por un ilícito contractual en una clase de
contratos y no en otra.
POR TANTO, en mérito de lo expuesto y de conformidad a lo establecido en los artículos 1,
2, 5, 7, 41, 71, 73, 162, 163, 168, 172 y 173, arts. 446 y siguientes, 485 y siguientes del
Código del Trabajo, RUEGO A US.: se sirva tener por interpuesta denuncia de tutela laboral
en procedimiento de tutela por vulneración de derechos fundamentales, en contra del
Ilustre Municipalidad de Puerto Aysén, Rut.
69.240.100-k, dotado de personalidad jurídica y patrimonio propio, representado por su
alcalde don Julio Esteban Confucio Uribe Alvarado o quien haga sus veces al momento de
la notificación de la presente denuncia; todos ya individualizados; acogerla en todas sus
partes,
y se declare:
1.- Que se ordene en forma inmediata al demandado el cese de la conducta vulneratoria de
forma inmediata o en el plazo que S.S. estime prudente;
2.- Que se declare que las conductas denunciadas que afectan mi integridad física y
psíquica .
3.- Que se condene a la demandada al pago de una indemnización por daño moral, derivado
del sufrimiento experimentado debido a las conductas lesivas denunciadas, por la suma de
$ 180.000.000 o la suma que S.S. estime prudencialmente.
4.- Como medidas concretas de reparación de las consecuencias lesivas derivadas de las
vulneraciones de derechos fundamentales denunciadas, se solicita:
a) Que se ordene a la demandada a sacar del colegio a la directora quien se encuentra
vulnerando mis derechos.
b) Que se ordene a la demandada a publicar al interior del Servicio una carta pública de
disculpas.
c) En subsidio de las anteriores, aquellas medidas que US., considere soberanamente
pertinentes para impedir que se sigan vulnerando mis derechos fundamentales.
5.- Las costas e intereses y reajustes en conformidad a la ley.
PRIMER OTROSÍ: Solicito a SS., tener presente que designo abogado patrocinante y
apoderado, con todas las facultades de ambos incisos del CPC, Art. 7, las que se dan por
expresamente reproducidas, a doña NESTOR GÓMEZ CANALES, abogado habilitada
para el ejercicio de profesión, con domicilio para estos efectos en Gabriela Mistral N° 560,
comuna de Coyhaique, quien suscribe en señal de aceptación mediante firma electrónica
simple, según las disposiciones de la Ley N° 20.886, la ley núm. 19.799 y en particular
establecido en el auto acordado acta núm. 37-2016
SEGUNDO OTROSÍ: SOLICITO A SS. Que en virtud de lo dispuesto en los artículos 433 y 442
del Código del Trabajo, autorice que las actuaciones procesales, exceptuando las
audiencias, puedan efectuarse por medios electrónicos, y que las notificaciones del
presente proceso se me efectúen a los correos electrónicos
nestorgomezcanales@gmail.com

También podría gustarte