VI EL ALTO LLAMADO A LA SUMISION

La palabra presentación evoca imágenes feas y reacciones incluso más feas en nuestra cultura moderna
"liberado". El concepto de sumisión está ahora popularmente asociada con la debilidad, la derrota y la
opresión.

Es fácil olvidar que la sumisión de Cristo a su Padre, "hasta el punto de la muerte" ( Filipenses 2: 8 ), no
sólo demostró una inmensa hazaña de la fuerza humana, pero es también el modelo para la vida cristiana
(cf. Filipenses 2: 1 -11 ). Y la unidad familiar es uno de los mayores campos de prueba para que los
creyentes ponen que la presentación en pantalla.

Pero ¿cómo podemos someternos unos a otros en el contexto de una familia sin dejar de reconocer los
papeles ordenados por Dios de liderazgo y autoridad? Ese es el tema Pablo se dirigió en Efesios 5: 22-6:
4 . Desde la presentación personifica el carácter de la persona que es verdaderamente llena del Espíritu
Santo, Pablo explicó cómo la sumisión mutua debe trabajar en una familia.

Él escribió bajo la guía del Espíritu Santo, por supuesto, así que esto no era más que la opinión privada del
apóstol ( 2 Pedro 1: 20-21 ). Dios mismo inspiró las mismas palabras del texto ( 2 Timoteo 3:16 ). Pablo
habló aquí para esposas, esposos, hijos y padres, en ese orden. Y la advertencia a las esposas es simple,
cubriendo sólo tres versos:

Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor. Porque el marido es cabeza de la mujer,
como Cristo es cabeza de la iglesia, siendo El mismo el Salvador del cuerpo. Pero como la iglesia está sujeta
a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo. ( Efesios 5: 22-24 )

Es importante recordar que Pablo no comenzó por señalar a consignar y esposas a un estatus de segunda
clase. Hay un sentido en el que todo el mundo en la iglesia debe someterse a todos los demás como Pablo
claramente en el versículo anterior. Efesios 5:22 simplemente explica cómolas esposas deben mostrar su
sumisión.

Observe también que Pablo comenzó y terminó esta breve sección especificando cuales las esposas deben
someterse a: "a sus maridos" ( Efesios 5:24 ). "Su marido" sugiere que la esposa de buen grado debe hacerse
sujeto al marido, que es su posesión . Los esposos y las esposas pertenecen el uno al otro, y por lo tanto
tienen responsabilidades únicas entre sí, que no tienen a nadie más (cf. 1 Corintios 7: 3 -4).

Las mujeres, como grupo, no se hacen siervos de los hombres en general, y los hombres no son elevados
automáticamente a una clase dominante sobre todas las mujeres. Pero la Escritura llama a cada mujer que
presente, en particular, a la jefatura de su propio marido. En otras palabras, la propia familia es el ámbito
principal en el que una mujer piadosa es cultivar y demostrar la actitud de humildad, servicio y sacrificio se
pide en Efesios 5:21 .

Además, el comando es general y de barrido. No se limita a las esposas cuyos maridos están
cumpliendo su función. No está dirigida únicamente a mujeres con hijos, las esposas de los líderes de la
iglesia, o incluso las esposas cuyos maridos son fieles creyentes. Es categórico e
incondicional: esposas . Cualquier persona que se ajusta a esa clasificación está obligado a obedecer el
mandato de este versículo al someterse a su propio marido.

¿Qué, exactamente, requiere este comando? La palabra griega para "sujeto" o presentados (hupotasso )
significa "hacer cola bajo." Tiene la idea de situarse en un rango inferior al de otra persona. Esta es la idea
misma de la humildad, la mansedumbre y la humildad de la mente se pide en Filipenses 2: 3 : ". Regard uno
al otro como más importante que a sí mismos" De ninguna manera tampoco implica inferioridad habla de
una clasificación funcional, no una inferioridad de esencia.
Se trata de un papel que Dios mismo ordenó para esposas. En Génesis 3:16 , Dios le dijo a Eva: "Tu deseo
será para tu marido, y él te dominará." Por un lado, el matrimonio es la unión perfecta de dos personas que
se convierten en una sola carne ( Génesis 2:24 ). Por otra parte, Dios ha ordenado claramente que el marido
debe ser la cabeza en esa relación. Incluso la naturaleza parece afirmar el orden correcto. Los hombres
normalmente tienen la ventaja de una mayor resistencia física y emocional, mientras que las mujeres por lo
general tienen una resistencia más misericordiosos y el carácter que equipan a que sean un apoyo y aliento-
ayudantes adecuados a sus maridos.

Me doy cuenta de que la jefatura del esposo y la sumisión de la mujer no son nociones populares en estos
días. Incluso en algunos círculos cristianos hay movimientos que tratan de derrocar el orden bíblico y algo
sustituto que es más políticamente correcto. El mundo quiere un enfoque más humanista e igualitario a la
sociedad: una, sin clases, la igualdad artificial sin sexo. En lugar de rechazar que la filosofía y la defensa de
los principios bíblicos, muchos en la iglesia han caído presa de las mentiras de nuestro tiempo.

Pero la Escritura es clara y consistente. Cada vez que la Biblia habla sobre el papel de la mujer, el énfasis es
exactamente el mismo. Esto no es una opinión personal machista del apóstol Pablo, como algunos han
sugerido. Tampoco se trata de un principio poco clara o ambigua que se sugirió vagamente en la
Escritura. Toda la Escritura que toca el tema del papel de la mujer dice esencialmente la misma cosa. No hay
forma en torno a ese hecho bíblico y, como veremos la próxima vez, la Escritura da continuamente
respuestas claras a cada objeción importante.