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INSTITUTO POLITECNICO PFTVr

NACIONAL
SECRETARIA ACADEMICA
PROYECTO DE ESTUDIOS
SOCIALES TECNOLOGICO$
Y CIENTIFICOS

APROXIMACIONES AL CONCEPTO DE
MET000LOGIA EN LA
BIBLIOTECO LOGIA

T E S 1 S
QUE PARA OBTENER EL GRADO DE
MAESTRO EN CIENCIAS CON ESPECIALIDAD
EN METODOLOGIA DE LA CIENCIA
P R E 9 E N T A

VALENTINO MORALES LOPEZ


DIRECTOR DE TESiS:
DR. MIGUEL ANGEL RENDON ROJAS

CO-DIRECTOR DE TESIS:
DR. HUMBERTO MONTEON GONZÁLEZ

MEXICO. ID. F. 1999


DEPi9
INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL , J

EOCi0I DE ESTUDIOS DE POSGRADO E INVESTIGACION

ACTA DE REVISION DE TESIS

S . 1:. -1 N.
9j7 11 10 H 2 SE. A 'AOEMIC
Nncro CEIcIS1:( P E S T Y C.

EnaÍdad de itEXICO? mes


d e, el Comisión Revisora de
Tesis designada por el C "si
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presentada por el alurcn


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aspirante al gradó dec:


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DF ONC ROJC JO JJ'DO OJ..STILLO 'JRCIJ-

DR • 4TO MONTTO:: GOZLEZ •C• K/.. RUTE GUERRZ.,CANTOYO


_t .'_ ••.

EL PRESIDENTE •i• .-•


.•

DRZO V. J2, 7EZ DcmToUEz


-
RESUMEN

Este trabajo parte del supuesto de Ja falta de profundización en la conceptualización


de la metodología en la bibliotecología. Por lo tanto para lograr un acercamiento mayor,
primero se revisan diferentes propuestas epistemológicas para la bibliotecología;
después se muestran los antecedentes históricos del concepto en la filosofía de la
ciencia; posteriormente se hace la revisión histórica del concepto dentro de la
bibliotecología. Se finaliza con el rescate de elementos de la filosofía de la ciencia y la
bibliotecología, para apuntalar el concepto de metodología en la bibliotecología.

ABSTRACT

This work begin of pressupuest of the little reflection about conceptual ization of the
methodology in the library science. Then to a good refietion, first review different
epistemological proposal te the library science; after present historic antecedent of the
concept in the science philosophy; they do historic review of the concept in the library
science; and finish with the rescat of elements of the science philosophy and the library
science to found the concept of methodology in the library science.
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN 3

1. La Bibliotecología: acercamientos epistemológicos. 9

1.1 Técnica. 12

1.2 Tecnología. 16

1.3 Ciencia. 18

1.3.1 Humanidades 22

1.3.2 Social. 24

1.3.3 Natural. 30

1.3.4 Espíritu. 33

1.3.5 Interdisciplinaria. 35

2. Antecedentes del concepto de metodología en la filosofía de la ciencia 39

Metodología 39

2.1 Antecedentes del concepto de metodología. 41

2.2 Griegos. 42

2.3 Edad Media. 44

2.4 Renacimiento hasta el siglo XIX. 46

2.5 Siglo XX. 53

2.5.1 Corriente comunista o materialismo dialéctico. 53

2.5.2 El Círculo de Viena. 54

2.5.3 Karl R. Popper. 56

2.5.4 Thomas Kuhn. 61


2.5.5 lmre Lakatos, 65

2.5.6 Paul Feyerabend. 68

3. El concepto de metodología en la bibliotecología. 74

3.1 El concepto de metodología en la bibliotecología pionera: 1850-1900. 74

3.2 El concepto de metodología en el intento de una bibliotecología con base

científica: 1901-1950. 77

3.3 El concepto de metodología en la encrucijada, ¿bibliotecología o ciencia de la

información?: 1950-. 85

4. Reflexión en torno al concepto de metodología en la bibliotecología. 129

4.1 Elementos sobre el concepto de metodología en la filosofía de la ciencia. 130

4.2 Elementos sobre el concepto de metodología en la literatura

bibliotecológica. 133

4.3 Propuesta de conceptualización de la metodología para la bibliotecología. 138

CONCLUSIONES 143

BIBLIOGRAFÍA

ANEXO 157
INTRODUCCIÓN

Esta investigación muestra una revisión y propuesta del concepto de metodología

en la bibliotecología, con base en propuestas de la filosofía de la ciencia y literatura

bibliotecolágica.

La reflexión sobre la metodología es de vital importancia para cualquier disciplina

que tenga como fin alcanzar un status adecuado dentro del saber. Sin embargo, a

pesar de que la tradición histórica marca la existencia de un método científico, cuyas

características son universales y únicas, en fechas recientes tales afirmaciones son

puestas en entredicho en la obra de Thomas Kuhn y Paul Feyerabend. Por lo tanto,

es necesario abordar esa problemática, relacionada con su conceptualización, dentro

de una disciplina joven como la bibliotecología.

Aunque si bien pueden existir dudas sobre la validez de esta investigación,

plantearla y acercarse a una clarificación del concepto de metodología en la

bibliotecología, servirá para abrir vías en la investigación sistemática y explorar

campos que por limitantes conceptuales, no es posible abordar de manera profunda

hasta este momento. Por otro lado, este trabajo servirá a la parte epistemotógica de

la bibliotecología, al ampliar el panorama sobre la ubicación de la bibliotecología

dentro de la clasificación de la(s) ciencia(s), además de apoyarla en su

fundamentación; por otro lado sería posible plantear hipótesis sobre el posterior

desarrollo de la bibliotecología.

3
Asimismo, en este momento de reformulación del antiguo paradigma

biblíotecológico, es acertado reflexionar con respecto a Ea conceptualización de la

metodología en la bibliotecología, a la luz de las aportaciones de los filósofos de la

ciencia y proponer alternativas para el correcto entendimiento y desarrollo de la

metodología en la bibliotecología.

Entonces, en este trabajo se intenta poner a discusión la conceptualización de la

metodología en la bibliotecología de acuerdo con los siguientes objetivos:

- Aportar elementos para una conceptualización de la metodología en la

bibliotecología.

- Identificar y describir la conceptualización de la metodología en la literatura

bibliotecológica de la segunda mitad del siglo XIX y durante el siglo XX.

A partir de tales objetivos, se formularon las hipótesis que a continuación se

mencionan:

- Sí existe una noción d& concepto de metodología en la bibliotecología, dado que

existen acercamientos al mismo en la literatura bibliotecotógica, pero es necesario

clarificarlo con la ayuda de propuestas de filósofos de la ciencia.

Si se propone un concepto de metodología en la bibliotecología, es posible proponer

una tipología de los métodos usados en la bibliotecología.

Muestra del debate sobre el paradigma que debe normar la bibliotecologia, es el texto de Richard Apostie y Boris
Raymond. Lihrariansh,p and ihe informalion paradigm. -- London The Scarecrow Press, 1997. xiii, 162 p.
Comentan que se vive una pugna entre el viejo paradigma de servicio bibliotecario y el nuevo de h?/bmiación.

4
- Si tos métodos de otras disciplinas previamente se someten a un análisis profundo,

es posible es posible aplicarlos a la bibliotecología.

- Si hay una tradición histórica que sustenta a la bibliotecología, existe una

metodología bibliotecológica.

- Si se revaloran tos métodos clásicos de la bibliotecología, no serán considerados

inferiores a los de otras disciplinas.

El método empleado para la realización del presente trabajo fue el documental. De

esta forma, se leyeron diversas obras que se consideraron vitales, en el tratamiento

M concepto de metodología. Desafortunadamente, en el campo bibliotecológico

pocos autores trabajan ese concepto de manera particular y para lograr comprender

la manera como se usa, fue necesario leer manuales de metodología y textos

relacionados con otros asuntos. De cualquier manera, fue posible rescatar varios

puntos de vista que enriquecieron el trabajo. Otro apoyo fundamental fueron las

clases de la maestría, puesto que sirvieron para complementar o aclarar el punto de

vista del autor, de este trabajo. En este sentido es importante mencionar las

conversaciones fuera de clase, donde en ocasiones se confrontaron diversidad de

ideas, sin las ataduras de una academicismo rígido, lo que permitió replantear una y

otra vez las propias.

Este trabajo consta de cuatro capítulos, en donde se muestra el resultado de la

investigación:

5
1. Bibliotecología: acercamientos epistemolágicos.

En este capítulo se revisan las propuestas generadas para identificar a la

bibliotecología, desde el punto de vista técnico, tecnológico y científico. La intención

es mostrar los conflictos que hay entre la comunidad bibliotecológica por conformar

su epistemología, y la necesidad de desarrollar cada una de sus partes, entre ellas la

metodología

2. Antecedentes del concepto de metodología en la filosofía de la ciencia.

Se revisa la historia de Ja conceptualización en la filosofía de la ciencia, desde los

griegos, hasta el siglo XX. La intención es dar una base filosófica a la propuesta del

cuarto capítulo-

3. El concepto de Metodología en la bíbliotecología.

Se presentan las ideas de diversos autores bibliotecólogos, que en sus textos

trabajan el concepto de metodología. El propósito es demostrar la preocupación de

los bibliotecólogos por debatir el asunto.

4. Reflexión en torno al concepto de metodología en la bibliotecología.

Se retoman varias de las ideas expresadas en los capítulos 2 y 3, para identificar

elementos útiles en la conceptualización de la metodología. Al final de esta parte, se

ofrece una definición mínima con la que será posible trabajar posteriores

investigaciones.

6
La utilidad de la investigación radica en que este trabajo sienta las bases para una

investigación de mayor profundidad sobre los métodos usados en la bibliotecología.

Asimismo apoyare la fundamentación de la bibliotecología. Entre los resultados que

arroje esta investigación, se espera un mayor desarrollo de la investigación teórica y

aplicada en el ámbito bibliotecológico. En este sentido es importante apuntar que el

esclarecimiento de la metodología bibliotecológica ayudara a que los diferentes

centros de documentación, centros de información, bibliotecas, etcétera, puedan

marcar una senda sólida en el planteamiento y aplicación de sus proyectos, los

cuales ayuden al desarrollo de México.

Sin mas por agregar se solicita al lector una actitud crítica que enriquezca las ideas

presentadas a continuación.

7
olOgía: acercamientos epistemOlógic0
1. La jIiote C
Este primer capítulo se presenta un panorama general de las propuestas

epistemológicas de la disciplina Bibliotecológica, para ubicar al lector en el contexto

donde se ubica esta investigación. Porque la metodología es parte de la

epistemología y la intención es demostrar que debido a la falta de consenso sobre

la epistemología en la bibliotecología, es necesario construirla sobre lo ya

existente, enriquecido con nuevas propuestas que tomen en cuenta la

epistemología

La razón para escoger el término Bibliotecofogía, y no otro' es convencional,

porque se trata del término con el cual se le ha reconocido un carácter disciplinario

por parte de la sociedad y por el momento no está sujeto a una moda, como es el

caso de Ciencia de la Información2.

Sin embargo no hay consenso para ubicar a la bibliotecología dentro de la

clasificación del saber, además de que el término es fuertemente impugnado y está

Existen otros términos para nombrar esta disciplina, como Ciencias de la Información, Documentación,
Ciencias de la Documentación, Biblioteconomía. etcétera.
2
Los términos lntbrmáiica y Ciencia de la fn/di inacin. tuvieron presencia a principios de la década de 1970.
A. T. Mikhailov, A. 1. Chernyi y R. S. Giljarevsky, definieron la Informática de la siguiente manera: scienific
discipline ínvesiigaii/lg /1w sirliciure and properlies / i,ifinina/ion. Y a Ciencia de la Información: ¡he /ieId
'?t se/ence concerned wiih licitO ¡C dli f)rOperI/e,S of in/diinatio,i cmd a/so will: ¡he laws of jis crea/ion,
oi-ganisalion, lransformcuion aiid u/ii/sa/ion. En Francia se usa Infornzal/cjue, para: science of efficient
processing, particularly computer-based, of information which is treated as the basis of human knowlcdge and
communications in scientific, economic and social domains. Chavidarov, S. "lnformatics: a new science at
crossroads". En: Infórmalion ve/ence jis scope, ohJecis of researcl; andproblenis. Moscow : FID, 1975. 363
p. -- (FID; 530): 222-236. pp. 222. Otro autor propone a la ciencia de la información, para denotar a la
metaciencia de la ciencia de la información, ciencia de la documentación y sus disciplinas afines
(bibliotecología, archivologia). Koblitz, J. "On the subject of inforination and documentation science". En:
ínfo,-,naf ion science jis seope, oI?jects of research andprohk'ins. Moscow : FID, 1975. 363 p. -- (FID; 530):
238-256. pp. 251.

9
sujeto a revisión, ofreciéndose alternativas como Ciencias de la Información3.

Ante la anterior aseveración es necesario comentar que la bibliotecofogía ha

tenido modificaciones, que ante los ojos de algunos miembros de ¡a comunidad

bibliotecológica se hace necesario el uso de un término diferente, que abarque

todos los aspectos de esta disciplina. Sin embargo se puede postular que la

disciplina no necesariamente cambia, sino los procesos o aproximaciones al objeto

de estudio. Ante esto se objeta que al transformarse las estructuras cognitivas para

el estudio de determinado objeto, a pesar de que el objeto continúa siendo el

mismo, es necesario encontrar o identificar un nuevo término para referirse a la

disciplina. Pero en este trabajo se considera que la esencia del objeto de estudio

es la misma y lo que se modifica es el discurso característico de la bibliotecología,

ya que a pesar de arrogarse términos rimbombantes, en la práctica cotidiana y la

enseñanza, los bibliotecólogos continúan trabajando los mismo asuntos. Por otro

lado, a pesar de las transformaciones tecnológicas el objeto de estudio no ha

sufrido una modificación sustancial. Ello no quiere decir que se apuesta al

inmovilismo, pero por bien de la disciplina, es necesario fundamentarla

adecuadamente y la discusión sobre un término y otro se debe desplazar, por un

momento, para evitar confusiones.

Etimológicamente bibliotecología proviene de las palabras griegas biblos libro,

3 Esto tiene relación con la disputa sobre cual paradigma debe prevalecer y se considera que los posibles
paradigmas son el de scr%•'/cic' bibliotecario o el de ¡,fi)rn,acióI,, como lo muestra el texto de Richard Apostie
y Boris Raymond J.ihrarim.hi» anci ihe in/ormalion paraa'igin. London : The Scarecrow Press, 1997. xiii, 162
P.

10
theke caja o depósito, que forman la palabra biblioteca; y logos tratado o estudio.

Unidas forman la palabra bibliotecología, que se refiere a la disciplina encargada

del estudio de las bibliotecas y todo lo relacionado con ellas. En una acepción mas

trabajada, la bibliotecología se ocupa de estudiar cómo ciertos documentos

(colecciones bibliotecarias), a través de una institución informativa

(biblioteca) pueden poner en contacto (accesar) con el mundo de la

información a los lectores4.

Ahora bien la preocupación por conformar una epistemología bibliotecológica es

una inquietud constante entre los estudiosos de esta disciplina, pero no es posible

encontrar acuerdo entre los principales representantes de las diferentes

comunidades epistémicas, quien se acerque a estudiarla tiene la impresión de

estar ante un ente fragmentado. Por lo tanto ante la cantidad de autores que han

aportado a la formulación de la epistemología bibliotecológica, es posible entrever

un amplia gama de propuestas. Pero es necesario saber cuales continuación se

presentan y analizan los enfoques para la ubicación de la bibliotecología en las

diferentes áreas del saber. Se hace necesario en este primer capítulo, para que al

lector le sea más clara la problemática de la epistemología bibliotecológica y la

necesidad por encontrar vías adecuadas para conformarla. De esta manera se

evitará tomar aspectos aislados o fragmentarios, caer en el eclecticismo o el no

tomar en cuenta aspectos de la epistemología de la ciencia, necesarios para dar

forma a la bibliotecológica.

'Miguel Ángel Rendón Rojas. Basc.s teó,icas yfifosfkcis de la hibliotecologia. México : UNAM, CIJIB,
1997. 148 p. - (Monogiaflas 24). p. lIS. En la segunda reimpresión de este trabajo añade un postfacio, donde

11
1.1 TécnIca.

Esta visión, característica de los momentos iniciales de la bibliotecología 5 , se

debe a que ésta nació de la necesidad de formar recursos humanos para ocuparse

de las bibliotecas 6 . En esta aseveración están implícitos los primeros momentos

M desarrollo histórico de las bibliotecas. Durante ese tiempo, quienes se

ocupaban de las bibliotecas, no intentaron conformar una epistemología para la

bibliotecofogía, y esa preocupación se presentó hasta el siglo XIX. La razón por la

que no tomaron esa meta como objetivo es que en algunos de los casos, los

bibliotecarios tenían otras preocupaciones intelectuales o no tenían la preparación

necesaria para lograrlo. Lo fácil es culpar a la escuela norteamericana de tal

defecto, pero los partícipes de la bibliotecología en el plano internacional,

cooperaron en el fortalecimiento de esta visión.

Michael H. Harris 7 señala que Melvil Dewey consideraba a la Bibliotecología

como un arte mecánico. Asevera que la intención de Dewey era convertir a la

bibliotecología en una ciencia, idea con la que discrepo, pues Dewey no propone

teorías y leyes como lo exige el positivismo, más bien da la apariencia de estar

amplia y aclara las razones que lo llevaron a plantear su definición de bibliotecología.


Pierce Butier. An rntroduciwn (o libran' science / mt. Lester E. Asheirn. -- Chicago : Phoenix Book : The
University ofChicago Press, c1933. xvi, 118 p. pp. 110.
"Un ejemplo cercano es la creación del actual Colegio de Bibliotecologia de la UNAM, creado para satisfacer
la necesidad de personal bibliotecario capacitado profesionalmente, con el fin de hacerse cargo de las
bibliotecas de la universidad. Por esa razón gran parte del profesorado se trataba de gente con formación
ac/demica diferente a la de hibliotecología, pelo que por azares del destino había sido o era encargada de
alguna biblioteca,
' Michael
H.
Harris. "State, class, and cultural reproduction: toward a theory of library service in the United
States". En: .4d1'a,,ces in lihraria,,shi,, y. 14 / ed. by Wesley Simonton. -- (lando : Academiç Press, 1986. xi,
320 p.: 211-252. pp. 217.

12
preocupado en proponer técnicas adecuadas para fortalecer la práctica

bibliotecaria. No por eso se deja de reconocer la influencia de las ideas de Dewey

sobre el posterior desarrollo de la bibliotecología, al intentar justificar el carácter

científico de esta disciplina.

Por otro lado, a finales del siglo XIX La Fontaine y Otlet iniciaron su trabajo

intelectual, bajo la tutela del término Bibliografía, que sufrio modificaciones

paulatinamente, hasta aterrizar en el término Documentación. Es interesante

mencionar que en los planteamientos de algunos de los pioneros de la

documentación, no la consideran ciencia, sino una técnica perteneciente a la

bibliotecologia. Tal es el caso de S. C. Bradford, impulsor de los primeros intentos

de lo que actualmente se conoce como bibliometría, quién concebía a la

documentación como una técnica de necesidad práctica que reune, clasifica y hace

accesible los registros de todos los tipos de actividad intelectual; siendo esas las

razones por la que es usada en el trabajo de las bibliotecas especializadas8.

A pesar de los intentos por darte categoría científica a la bibliotecotogía, no

dejaron de existir autores que defendieron la posición tecnicista, al mostrar que la

bibliotecología por sus características es una técnica y no forma parte de la

ciencia. Es el caso de H. K. Majundar, quién en un breve texto, intenta demostrar

que la bibIiotecoogía, a pesar de conjugar los elementos mecánico e intelectual, es

una técnica. Estudia el caso de las cinco leyes de Ranganathan, considerada base

S. C. &adford. Docurneníation, London : Crosby Lockwood & Sons. 1948. - 156 p


pp. 5, 11-12

13
de la ciencia bibliotecológica 9 , las cuáles son meras descripciones de la labor

bibliotecológica, pero no son establecidas por una autoridad, ni son guías de las

acciones del sujeto en la sociedad, como ser moral, o en el campo de la ciencia10

En este ámbito por lo general se ubica a la gente sin formación universitaria para

el trabajo en las bibliotecas. Desafortunadamente muchos de los bibliotecólogos

con alta formación académica son incapaces de trascenderlo, ya que se han visto

involucrados en procesos exclusivamente técnicos, sin cuestionar lo que realizan.

Y los que pretenden cuestionar, chocan con le barrera del exceso de trabajo que

les impide dedicarse a la reflexión ya que por lo general, al culminar sus estudios,

los bibliotecólogos se dedican de manera primordial a la práctica profesional,

olvidándose de la investigación epistemológica. Y como los bibilotecólogos se han

centrado en la aportación de elementos para la solución práctica de asuntos que

aquejan a la biblioteca 11 , sus labores se han restringido a la solución inmediata de

problemas o a la adecuación del trabajo de la biblioteca ante nuevas situaciones

enfrentadas por el desarrollo de la tecnología 12 , en las áreas que afectan

Shiyali Ramamrita Ranganathan. Thefivt' /awi of Libra, y Sc/ence. India Sarada Ranganathan Endowment
for Libraty Science, 1989. 449 p.
1 '> H. K. Majundar. "Librarianship: a science or att art?". En: Library sck'nce lok,y: Ranganalhan fe stschrifl /
cd. by P. N. Kavia. - New York Asia Publishing House, c1965. y. 1: 348-350.
Esta situación se puede constatar COfl algunas de las tesis producidas por los egresados del Colegio de
Bibliotecología de la Facultad de Filosofia y Letras de la UNAM, la Escuela Nacional de Biblioteconomía, en
México, y aun de varios de los productos de las investigaciones realizadas en el Centro Universitario de
Investigaciones Bibliotecológicas, de la Universidad Nacional Autónoma de México.
El caso que puede mencionarse es el impacto del vertiginoso desarrollo de la tecnología en la práctica
bibliotecológica. Ante esto se ha producido una vasta literatura, desde mediados de la década de 1980 hasta
este momento. Con ello han aparecido nuevos términos que son meros anglicismos, trasladados, de manera
arbitraria al lenguaje español y a pesar de reflejar un cambio en ciertos procedimientos de la bibliotecología,
pienso que no necesariamente aportan algo innovador en el terreno conceptual o no hacen una diferencia en la
esencia de algunos de los procesos que se realizan con o sin apoyo de la tecnología. Con ello el autor de este
trabajo no se opone a la tecnología, sino a considerarla el eje central del trabajo bibliotecotógico, dejando de
ubicarla como instrumento o medio que apoya las tareas y si bien en algunos procesos facilita el trabajo, no es

14
directamente el tratamiento y diseminación de la información. A esto se añade que

la mayoría de los autores ponen énfasis en cuestiones técnicas y poco se ocupan

de la epistemología 13

En este contexto es posible considerar a la bibliotecología como técnica, ya que

se trata de realizar procesos de acuerdo a determinados pasos, al parecer

inmutables e imposibles de ser sometidos al análisis y menos a la crítica. Este

aspecto de la bibliotecología no es reprobable, porque sin él, se perderían algunas

de las funciones de la bibliotecología en la sociedad 4. Lo malo está cuando la

misma gente que participa en el trabajo bibliotecario se encierra en esa visión

reduccionista y no es capaz de renunciar a considerar a la bibliotecología fuera de

su espacio de acción y bajo los procesos que tradicionalmente ha seguido. Por eso

se hace necesaria la conformación de una educación bibliotecológica en la cual se

enseñe a tos alumnos a reflexionar y analizar, evitando formar recipientes de

fórmulas mágicas, que solucionarán los problemas que aquejan a la

bibliotecología. Esto traerá la formación de gente pensante que ponga énfasis en el

análisis y la comprensión de los fenómenos en los que está enmarcada la

p osible que una máquina sustituya a un ser humano en su capacidad creativa y racional.
Armendáriz Sánchez, SaúJ. "La información como industria. En: Investigación Bibliolecológica:
archivo?lornia, hihíiotecología e información. 6 (12): 11-24, ene-jun., 1992. Calva González, Juan José. "El
conocimiento teórico de la materia de consulta en los programas de dos escuelas de bibliotecologia en México"
/ Florencio Soriano Eslava, Roberto Garduño Vera. En: Iin. estigctción Bibliotecológica: urchh'ono,nia,
hi/IioIeco/ogía e información. 5 (II): 4.23, jul.-dic, 1991. Fernández de Zamora, Rosa María. "El oficio del
lnbliotecóiogo". En: Investigación Bihliuteco/ógica: archivonoinía, hihlioiecología e información. 5 (10): 42-
44, ene-jun., 1991. Setién Quesada, Emilio. "Fundamentos teóricos y metodológicos de las investigaciones
sobre la actividad de las bibliotecas públicas cubanas, estado actual y perspectivas de desarrollo de esas
investigaciones". En: investigación Bih?íotecológica: archivonomia, bibliolecología e información. 3 (7): 3-
20jul-dic, 1989.
Ejemplo de una función de la bibliotecologia en la sociedad es una correcta catalogación y clasificación, de
tal manera, que los usuarios puedan acceder rápidamente a los documentos. Tal función es posible, gracias a
adecuadas técnicas de catalogación y clasificación, sin contar otros aspectos importantes. Pierce l3utler. Op cii.

15
bibliotecología.

Desafortunadamente esta situación se refleja en muchos de los productos de

investigación, donde en vez de intentar la formación de una epistemología

bibliotecológica, se hace el recuento de experiencias personales, o se intenta

generar leyes o teorías de manera inductiva, a partir de experiencias limitadas a un

número reducido de bibliotecas. En este sentido, es necesario que los

bibliotecólogos sean capaces de diferenciar el ámbito profesional del disciplinario.

Se hace también necesario que los investigadores realicen una labor de verdadera

fundamentación teórica, aunque no lo harán sólos, sino con el apoyo del

bibliotecólogo profesional (quien tiene la experiencia por estar trabajando

directamente con el fenómeno 1 ), que pueden enriquecer las propuestas o la

percepción del investigador.

1.2 Tecnología.

Es una visión relativamente nueva, fortalecida con el desarrollo de las

tecnologías de la información. En ella se considera al bibliotecólogo como un

operador (servidor) intermedio entre la información y el sujeto que la necesita; se

pone énfasis en la administración y se retorna un nuevo término denominado

rein gen/ería 16. En esta propuesta se les llama a los bibliotecólogos, ingenieros del

conocimiento.

PP.
15 11 1,

Aclarando que no es necesario que esta relación se de en todas las áreas de la investigación.
Huwe. Terence K. and Kerry L. Ross. "Reengineers, inforniation technologist, and librarians: discovering the
common ground". En: ¡'JI) News Bis//clin. y. 44 (1994). no. 7-8 (¡uly-august). p. 150-156.

16
Esta visión es factible ubicarla en un estado superior a la técnica, pero no se

debe confundir a la tecnología con la ciencia, ya que la primera se preocupa por

cuestiones de aplicación, siendo interés primordial el cómo. La segunda explora

cuestiones de mayor profundidad, preguntando el por qué 17. Quizá la idea de

tecnología, es una propuesta acabada del pensamiento de Melvil Dewey, quien

consideraba a la bibliotecología un arte mecánico. Al ser una visión esencialmente

empirista, poco importa la creación de una epistemología sólida o el análisis

concienzudo del objeto de estudio, ya que al ser una máquina con lo que se está

trabajando se centran los esfuerzos por tenerla en operación correctamente.

Entonces los bibliotecólogos deben estar preocupados en conformar una adecuada

administración del conocimiento, para ofrecerla a los usuarios.

Desafortunadamente esta perspectiva no toma en cuenta (os elementos

humanos y sociales que están relacionados con el desarrollo de la bibliotecología y

que de diversas maneras influyen en ella. Por eso ha generado una seria

preocupación de hacer a un lado el aporte de las ciencias humanísticas y sociales,

bases originales de la disdplina. Esta inquietud la expresó Deanna B Marcum 18, en

una reunión de la ASL(B, cuando señaló que a causa del desarrollo de las

tecnologías de Ja información se pone un enfásis excesivo en la formación de

gente capaz de trabajar con esas tecnologías, dejando de lado el aspecto

U
Síntoma de esta confusión es cuando se habla de ciencia dura y ciencia blanda, y se incluye las diferentes
áreas de la ingeniería en el primer apartado, cuando un ingeniero no se preocupa por hacer ciencia, sino
tecnología.
Deanna B Marcum. "Libratians or technicians? which shall we be?". En: informa/ion for a new age

17
humanista y social de la bibliotecología.

Aunque dadas las características actuales de la bibliotecología, en su ubicación

en la clasificación de las ciencias -ya sea en las ciencias sociales, las

humanidades, o, la tecnología-, es Importante tomar en cuenta la propuesta

expuesta por Jean François Lyotard, cuando habla de las tecno-ciencias 19 y

evaluar la posibilidad de ubicarla en esa tipología. Pero el desarrollo de esta idea

si es válida- debe tener bien claro los componentes y fronteras de la

bibliotecología, con eso se evitará confusión. Sin embargo es difícil aceptar que la

bibliotecología quede al nivel de mera tecnología, ya que se ocupa de aspectos de

importancia para el desarrollo del saber humano.

13 Cíencia

La visión de la bibliotecología como ciencia es relativamente reciente20,

ambiciosa y con importantes defensores, así como detractores. Existen intentos

valiosos e importantes 21 que no cuajan por falta de continuidad o de un consenso

entre las diferentes comunidades epistémicas bibliotecológicas. Ha tropezado con

limitantes, porque algunos autores adolecen de los elementos necesarios para dar

carácter científico a la disciplina, al caer en contradicciones graves que impiden

redefining lite librarian. Colorado : Libraries Unlimited, 1995, 192 p. pp. 11-14.
" Jean François Lyotard. La postmodernidad explicada a los niños / tr. Enrique Lynch. -- Madrid: Gedisa,
1991. 123 p. p. 2932
2') con tuerza durante el primer cuarto del siglo XX. Allan D. Pratt. lite inforination of lite irnage. --
New Jersey : Ablex, 1982. y, 117 p. (Libraries and librarianship series). pp. 45
Autores que se deben reconocer son Shera y Ranganathan, quienes con lucidez aportaron valiosas ideas al
desarrollo de la bibliotecologia.
22
Kuhn ha señalado la importancia del consenso entre los actores de la comunidad científica para el desarrollo
de los paradigmas.

18
23
elaborar propuestas de importancia e impacto en la formación de los nuevos

bibliotecólogos.

Por eso a pesar de que La bibliotecología ha estado identificada como un simple

trabajo práctico, existen indicios de la preocupación por conformar Ja epistemología

bibIiotecoJógca. En este sentido, en México es importante el trabajo realizado en el

Centro Universitario de Investigaciones Bibliotecológicas de la UNAM, con

investigadores como Miguel Ángel Rendón 24 , Ramiro Lafuente 25 , Susana Sander,

' Ejemplo de ello es José López Yepes. La documentación como disciplina . Icaria e historia. -- 2a ed. --
Pamplona : EUNSA, 1995. En esta obra, el doctor Yepes en la página 33, ubica a lo que él flama
documentación como ciencia de la ciencia, dentro del espectro de las ciencias sociales, pero en la página 321,
la trata como una disciplina general, interdisciplinar, autónoma e instrumental al servicio de todos los
saheres y actividades sociales. El lector se pregunta si es ciencia social o disciplina interdisciplinar. Otro
ejemplo con características reprobables es el libro de Emilia Curras. Las ciencias de la documentación
bibliolecologia, archivologia, documentación e información. Barcelona : Mitre, 1982., donde la autora
comete el error de mezclar ideas disimiles, al intentar fundamentar las ciencias de la documentación, un
ejemplo es cuando presenta una visión positivista del inetodo científico, e inmediatamente después cita a
Hermes Trimegistus, el cual en la filosofia de la ciencia no es tomado en cuenta. Ni Paul Feyerabend, defensor
de la libertad del cientiico en la investigación se atrevería a tal audacia.
24 Miguel Angel Rendón Rojas. "Algunas peculiaridades de la ciencia bibliotecológica". En; Investigación
Bibliotecológica hibilolecologia, archivología, documentación e información. y. 10. no. 21 (1996): 22-26.
Bases teóricas yjilosoficas de la bibliotecología. México : UNAM, CUIB, 1997. 132 p. "Hacia un nuevo
paradigma en biblioteoología'. En: Transinformaçao. y. S. no. 3 (1996): 17-31. "La información como ente
ideal objetitivizado". En: Int'esligación Bibliotecológica : lihliotecoIogía, archivología, documentación e
infonnación. y. 9, no. 18 (1995): 17-24. "Metodología de la investigación en bibliotecologia". En:
Investigación Bibliolecológica : bibliotecologia, archiwilogia, documentación e información. y. 10. no. 21
(1996): 27-29. "Las tareas para la fi.rndamentación de la bibliotecología". En: Investigación Bibliotecológica
bibliolecologla, archivologia, docwnen:ación e información. y. lo, no, 20 (1996): 9-15.
Lafi.iente. ",Es necesario un nuevo paradigma en catalogación?". En: Investigación Bibliolecológica
hiblioteco/ogía, archivologia, documentación e información. y. 2. no. 5 (1988): 4-11, "La síntesis crítica del
conocimiento bibliotecológico : su valor para la investigación en Bibliotecologia". En: l,rvesligación
Bihliolecológica : hibliotecología, archhvlogia, documentación e información. Y. 2, no. 4 (1988): 3-10. En
coautoria con estela Morales Campos. "Reflexiones en torno a la enseñanza de la bibliotecologia". En:
Investigación Bihliolecoiógica : hibliotecología, archivología, documentación e información. y. 6. no. 12
(1992): 25-33.
"'Susana Sandet. "Clasificación ¿actividad técnica o teórica?" En; Jnvc'siigación Bibliolecológica
hihlioteco/oglet, archivologia, documentación e información. y . 2. no. S (1988): 43-50. "Elementos histórico-
teóricos para la indagación de la estructura teórica de la Biliotecologia". En: Investigación Bibliolecológica:
hibliotecologia, archivología, documentación e información. y. 3, no. S. (1990); 31-37. "El problema de la
investigación bibliotecológica norteamericana: una revisión (19301960)". En: Investigación Bihliolecológica
hihliolecologia, arc'hii'ología, documentación e información. st. 8, no. 16 (1994): 20-24.

19
etc. En Espaiia están Emilia Currás 27 y José López Yepes 28 . Por parte de Cuba,

destacan investigadores como Emilio Setién 29 y Salvador Gorbea 30 , que se

dedican a estos estudios. En Brasil trabajan Anna María Marques Cintra 31,

Sebastiao de Souz 32 y Solange Pantel Mostafa 33 . Estados Unidos de América,

con gran influencia en la biblíotecología mexicana, tiene en su haber una gran

cantidad de autores, entre ellos se cuentan a Eugene Garfleld M , Jesse H. Shera35,

27 EmiIia Currás. Las ciencias de la documentación hibliotecologia, archirologia, documentació, e


información. Barcelona Mitre, 1982. La información en rus nuevos aspectos. Madrid : Paraninfo, 1988. 307
P.
2 José López Yepes. "El concepto de. ciencia de la documentación: unidad en la diversidad o diversidad en la
unidad". En: inves/igación Bibliotecológica : hiblioteco/ogia, archivologia, documentación e información. y.
10. no. 21 (1996): 4-6, La docu,nenicrció,, como discplina: teoría e historia. 2a cd. Pamplona : E(JNSA,
1995. 337 p. (Manuales ciencias de la información 8). ISBN 84-3 131-328-5. El estudio de / documentación
metodología y hihliograf',a fundamental. Madrid : Tecnos, cl 98l. 185 p. (Colección ciencias de la
comunicación). ISBN 84-309-0869-2.
29
Emilio Setién y Salvador Gorbea l'ortal. "De la Bibliotecología al sistema de conocimientos científicos
bibliológico-infbrmativo". En: Investigación I3ihlioíecológiea biblia/ecología, are/urología, documentación
e información. y. S. no. 16 (1994): 21-25. "Estudio de desarrollo de las bibliotecas públicas cubanas
condiciones para la modelación matemática de su actividad". En: Investigación Bibliolecológica
b'hlioteco logia, arehivologia, dacumentació,, e información. vS. no. 11(1991): 24-32. "El objeto de estudio
de las disciplinas biblioIógico-infbmativas y su enfoque en la Biblioteca Nacional José Martí de Cuba". En:
Investigación Bibliotecológica biblioteeviogia, archivologia, documentación e información. y. 10. no. 21
(1996): 1-13
"'Salvador Gorbea Portal. "Principios teóricos y metodológicos de los estudios métricos de la información".
En: Investigación Bibliotecológica hih/iolecologia, e.irchirologra, doezmxe;,tación e información. y. S. no. 17
(1994): 23-32.
3 Anna María Marques Cintra. "Subjetividade e interdisciplinaridade na Biblioteconomia". En:
Transinformaçao. y. S. no. 3(1996): 32-43.
32 Sebastiao de
/j Souza. Dimensiot's a/vais da bi/ioleconomia no Brasil: um esíudo atravis de snos tendencias
Joao I'essoa: UJ-'Pb', I987 160 p. (Dissertaçao fr Mesirado). "Fundamentos filosoficos da biblioteconomía" .
En: Revista de Bih/ioteconomj(v. y. 9, no. 2 (jul.-dez, 1986): 189-196. "Información: utopia y realidad de la
Bibliotecología". En: Investigación Bibliotecológica : hibliotecología, archivo/agio. . documentación e
información. y. 10. no. 21(1996): 14-17.
33
Mostafa, Solange Pantel. "Enfoques paradigmaticos da bibliotecologia: unidade na diversidade cm
diversidade na unidad. En: invesligació,; Bihliotecoíógica hibliotecologia, archivologia, documentación e
información. y . 10. no. 21(1996): 18-21. .Epis/emologia da hiblMeconomia. - Sao Paulo : PUC-SP, 1985,
(Tese de Doutorado). "Filosofando sobre a área de informaçao". En: 1.ondrina, Simpósio Brari/-sul de
injonnaçao. 12 p. (copia Xerox) maio, 1996. --. Ademir Benedito Alves de Lima y Ediardo Ismael Murguía
Maranon. "Paradigmas teóricos da Biblioteconornia e Ciencia da lnformacao". En: Ciencia da iuformacao y.
21, n. 3. (Set-dez, 1992): 216-222
Euene Garfield. Citaikv, índex/ng . it,s Iheoiy and app/ica1io, tu se/ence, iechno/ogy. and human/lies.
New, York : .Joh,, Wiley, c1979. xxi, 2741. (informa/i(>n se/ence serie).
3 Jesse H. Shera. Lu fundamentos de la educación hibliotecológica. México : UNAM, CUtB, 1990. 520 p.
I,llroduction ¡i/rary scieizce : basic elemenis of fihrcuy se/ence. Colorado : Libraries : Librajies Unlimited,
1976. 208 p. Libraries and dic organiza/ion of knowledge. -- Connecticut: Archon Books, 1966. xix, 224 p.

20
con un legado importante respecto a la conceptualización de la bibliotecología

durante la mitad del presente siglo; Michael H. Harris, cuya propuesta

desafortunadamente es regionalista, pero tiene aspectos rescatables, sobre todo

por la crítica que hace a la tradicional escuela bibliotecológica norteamericana, que

aún pesa en ciertos círculos bibliotecotógicos; también se encuentra Pierce

Butler 37 , pionero en el intento por darle carácter científico a la bibliotecotogía. De

Inglaterra está D. J. Foskett 35 . De la extinta URSS se cuentan A. 1. Mijailov 39 y Q

S. Chubarian4°

Como parte de la bibliotecología inglesa se han contado a los autores hindúes,

pero debido a la importancia de sus aportaciones se les nombra aparte. Su figura

representativa, sobre todo en la teoría de la clasificación, es S. R. Ranganathan41.

Además está la participación de canadienses como Samuel D. Nei1142.

Ante la cantidad de autores mencionados, es natural que existan múltiples

propuestas en relación con la epistemología bibliotecológica. En çste apartado se

muestran sucintamente características generales de algunas de esas propuestas.

Michael H. Harris, Sine, çlass, and cultural reprodnclion: zoward a theory of lihraiy serrice la ihe linlied
Siaies. En: Advaiice ja lihrarianship y . 14 / cd. by Wesley Simonton. -- Orlando : Academie Press, 1986. xi,
320 p. -- ISBN 0-12-024614-7. p. 211-252
Pierce Butier. Ibidem.
30 D, J. Foskett. "The ciasification research groip, 1952-1962". En: Libri. Y. 12, no. 2 (1962): 127-138. "'Fhe
communicactíon chain". En: ]he information environineni : a world view. Amsterdam : FID, 1990.
' A. 1. Mijailov y R. S. Gijilarievskji. Curso introductoria de inforrnólica/docurnentaria. Caracas
Fundación instituto Venezolano de la Productividad, 1974. 236 p.
4110.
S. Chubarian. J3ibliolev1ogIa general. -- Cuba: Editorial Cientiflco-Técnica, 1976. 367 p. "Librarianship
stem ofthc sciences." En: Libri 21(4) (1971): 21
?jyaii grnamÍita Rangaflath '1 he fi ve laws of /ihrary 5rjcflce 1989. 449 p.
1.3.1 Humanidades

En sus inicios, la bibliotecología se identifica con las disciplinas humanísticas

(razón por la cual, por ejemplo, la Licenciatura en Bibliotecología se imparte en la

Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM). Esta perspectiva, a pesar de ser una

visión decimonónica del quehacer bibliotecológico, no se puede menospreciar, ya

que permitió el desarrollo de aspectos importantes de la bibliotecología, como el

bibliográfico.

Esa vertiente tiene ciertas particularidades:

• Se enfatiza el servicio al usuario y la preservación de la cultura escrita del

hombre. A partir de esto, se procura desarrollar el esfuerzo individual

(específicamente del autor y el lector).

• Se caracteriza por estudiar la creatividad del ser humano, escribe sobre lo ya

escrito.

El objeto de estudio son las creaciones del ser humano, especialmente las ideas

expresadas en documentos.

• La investigación consisteen observaciones y opiniones sobre documentos y en

elaborar documentos, se toman como base otros, aunque esto provocó que
45
los bibliotecólogos quedaran relegados a la búsqueda de registros

42
S. D. Neili Di/einrncs in (he study (?f informasion : expk'ring (1w hrnirniaries qf i,forrnazio,: scietwe. -- New
York Grenwood Press, 1992. xv, 184 i. (Contributions in Iihrarianship and information science; no 70).
Allan D. Pratt. Op M. pp. 45.
El proceso de catalogación, clasificación y elaboración de resúmenes y bibliograflas.

22
En ocasiones los defensores de esta visión cayeron en la idealización exagerada

M quehacer bibliotecológico, Jo que trae consigo (a preocupación de que el

bibliotecólogo sea un amigo o amante de los Iibros, enemigo del potencial

destructor del libro y apoyo indispensable de la lectura. Otra de las grandes

debilidades, es que no permitió el desarrollo de la bibliotecología, al evitar la

introducción de nuevos métodos o líneas de investigación 41, ya que muchas de

esas novedades provenían de las ciencias naturales y sociales. Ejemplar es la

situación de la Universidad de Chicago, durante la década de 1930, cuando se

produjo una fuerte polémica porque se introdujeron en Ja enseñanza de los futuros

bibliotecólogos, métodos provenientes de las ciencias sociales, situación a la que

se opusieron varios bibliotecólogos48. La discusión se dio entre profesores que no

eran bibhotecólogos de formación y los practitioner's. Los primeros, preocupados

por ofrecer una sólida formación a los estudiantes, iniciaron la enseñanza de

métodos provenientes de sus propias disciplinas. Los segundos, consideraban

inadmisible que a los futuros bibliotecólogos se les enseñaran métodos

estadísticos, cuando se les debía inculcar -sobre todas las cosas- el amor a los

libros y el servicio a los usuarios49.

Con todo y sus defectos, esa óptica enriquece a la bibliotecología, porque resalta

Alian D. Pratt. IMdem pp. 46-48.


Frank Atkinson. Librarkwsh:p an introduction lo me profession. - Connecticut : Linnet Books: Clive
Bingley, 1974. 112 p. pp. 54.
Allan O, Pratt. ll,kle,n pp. 58.
Stephcn Karetzky. Reading research and hbrarianship a history andanalysis. -- Connecticut : Grenwood
Press, 1982
Helen Haines. Living wiih hxks. - 1950. Jan8 Bahadar Khanna. 'Phyosophy of librarianship". En: Library
scjeice today: Ranganathaii fe.slchrif: / cd. by P. N. Kavia. -- New York : Asia Publishing House, ci 965:
346-347. pp. 347.

23
el aspecto humano, tan importante en esta disciplina. Y evita que se caiga en un

exagerado mecanicismo o mercantilismo, donde se exalta sólo lo relacionado con

lo técnico, tecnológico y monetario de la bibliotecología. El problema es cuando se

cae en el error de considerar que es la única área imperante en la bibliotecología.

Por esa se hace necesario que, sin olvidar, desechar, renegar, ni atarse a la

tradición donde se sustenta la bibliotecología, se avance en la exploración de

nuevos territorios para el bibliotecálogo.

1.3.2 Social.

Existen valiosas propuestas 5 ° que ubican a la bibliotecología dentro de las

ciencias sociales y tal parece que se trata de una posición concensada entre

buena parte de los bibliotecólogos. Los primeros intentos por clasificarle en las

ciencias sociales se observan en la primera mitad del siglo XX, y en la actualidad

es posible identificar los métodos y conceptos tomados de esa área y aplicados en

la bibliotecología, heredados de esa época. Aunque desde ese momento a la

fecha, son numerosas las corrientes con aportaciones para el fortalecimiento de la

bibliotecologia en el campo de las ciencias sociales. Por eso, en este apartado se

presentarán las de mayor importancia.

Una postura al respecto es la impulsada por los bibliotecólogos de Estados

Unidos de América. Ésta se presenta primero por la influencia que dicha corriente

50 Ejemplo de ello son: O. S. Chubarian. /3/hl/ok' cología general. -- Cuba : Editorial Científico-Técnica, 1976.
367 p. p. 9-20, 42-44. Ronald R. Powell. Bcg.s'k research ,neilwdsfor l/brar/ans. New Jersey : Able, 1985.
188 p. p. 1. Jesse H. Shera. Librar/es and ¡lic organizoliol: of kiioledge. -- Connecticut : Archon Books,
1966. xix, 224 p. pp. 16-17. Inlroduciion ¡o Iihrary se/ence: basic elernenis of lihrary science. pp. 49-50.
tiene en la bibliotecología a nivel internacional y sobre todo en Latinoamérica. Sus

fundamentos se ubican en el positivismo, especialmente la corriente pragmatista

defendida por filósofos de Estados Unidos y en la idea de la biblioteca como un

espacio para la formación de buenos ciudadanos en una democracia libre.

Esta posición fue avalada de la siguiente manera:

De acuerdo con Pierce Butler 51 , la bibliotecología es un fenómeno que debe ser

discutido en cualquier sistema de las ciencias sociales. Shera 52 , por su parte, al

considerar la importancia de los documentos en la comunicación humana, cree que

la bibliotecología está íntimamente ligada a una nueva epistemología social y a la

semántica general, como parte de la comunicación social.

Al tener su orientación epistemológica enraizada en el positivismo, ambos ponen

énfasis en fundamentar a las ciencias sociales de manera similar a las ciencias

naturales. Piensan que para constituir una verdadera ciencia debe fundamentarse

en la cuantificación de los aspectos empíricos de su objeto de estudio, soslayando

la construcción de teorías. Fortalecida esa posición con las ideas del pragmatismo,

consideran primordial la investigación empírica que responda a razones

pragmáticas inmediatas, en detrimento de la investigación pura.

A pesar de enfatizar la ubicación de la bibliotecología en el universo de las

ciencias sociales, al avanzar en la construcción de la bibliotecología como ciencia

Pierce Butier. Op. cii pp. xi.


Jesse 11. Shera. Libruries anil ilie organiza/ion of know/edgc.. pp. 16-17. Jniroduciion lo fibraiy science...

25
la desligan de su entorno socia!, bajo la creencia de que el científico debe ser

objetivo, imparcial y desligado a cualquier interés alejado de su objeto de estudio.

Una critica severa a estas posturas, la expone Michael H. Harris en State, class,

and cultural reproduction, quién se basa en las ideas de Gramsci. Sin dejar de

considerar a la bibliotecología dentro de las ciencias sociales, muestra la

necesidad de una mayor vinculación con el contexto social en el que está ubicado

el objeto de estudio de los bibliotecólogos y propone una epistemología que, a su

juicio, rompe con la tradicional escuela norteamericana basada en el pragmatismo.

De acuerdo con lo expresado con antelación, existen aspectos cuestionables con

la postura de los autores norteamericanos, pero es importante señalar que es

plausible su intento por desarrollar la ciencia bibliotecológica, sobre todo porque

procuraron -especialmente en la Universidad de Chicago- fortalecerla con la

introducción de métodos provenientes de las ciencias sociales, que a la larga

demostraron su importancia al contribuir en el desarrollo de la bibliotecoiogia.

Continuadores de la ruptura con la concepción de la escuela bibliotecológica

tradicional, son los impulsores de la bibliometría. Quienes pretenden analizar el

tamaño, crecimiento y distribución de la bibliografía científica y el estudio de la

estructura social de los grupos que la producen y utilizan 53 . Por esa razón se

deslindan del término bibliotecología, por el de ciencia de la información, bajo el

supuesto de que su trabajo tenía carácter científico, a diferencia de los

p. 49-50
José Ma. López Piero. El a,zálisis esladislico p socionlélrico de la hiera/ura cien//fico. Valencia

26
bibliotecólogos, y la necesidad de una mayor participación en los altos círculos

académicos universitarios. Eso les lleva a atacar la imagen típica del

bibliotecólogo, por su pasividad ante la sociedad.

Otro punto de vista es el expuesto por O. S. Chubarián, perteneciente a la

escuela bibliotecológica soviética. Anda su postura en la filosofía marxista

leninista, por eso su texto principal se fundamenta en las obras de Lenin y los

documentos de los congresos del Partido Comunista. En general, es similar a la

postura anteriormente expuesta, pero con algunas diferencias, sobre todo porque

se basa en la filosofía marxisa-leninista con menosprecio al positivismo, por

considerarle un corriente capitalista. Enaltece las ideas de Lenin y da una apología

de lo logrado por la bibliotecología soviética y llega a compararla con la

bibliot ecología burguesa, acusando una visión parcial. Demuestra las bondades del

sistema al que pertenece.

Sin embargo, a pesar de ser una visión encuadrada en las directrices de una

ideología54, tiene aspectos valiosos, como la preocupación por la vinculación con

otras áreas del saber humano y la creación de una adecuada metodología para la

bibliotecología. En una posición similar a la sostenida por Chubarián, otros autores

de la escuela soviética ubican a la ciencia de la información en las ciencias

sociales55 , sobre todo porque a pesar de partir de un enfoque sistémico, no

('1)11v!, 1972. 821).


Aunque el autor arumenta que se trata de una postura científica asentada en sólidas bases científicas.
S. Chavdarov. "Inforrnatics: a new science at crossroads'. En: Infr,natio,i science ¡Ix scope, ohjecls qf
researchanclprohlems. Moscow : HD, 1975. 363 p. -- (VID, 530): 224-237. pp. 236

27
dejaban de ver que el proceso de la información estaba inmerso en la sociedad y

era necesario estudiarlo en ese contexto.

Con todo y sus argumentos matizados, se trata de un intento loable por darle

cientificidad a la bibliotecotogía. Irónicamente su idea de ciencia es cercana al del

positivismo, al remarcar la necesidad de fundamentar la teoría en hechos

materiales. Además propone el uso de la dialéctica y la crítica 56 a los resultados y

postulados de los autores o equipos de trabajo. Es un punto de vista poco

conocido en Latinoámerica. Quienes por razones de índole político se unieron a

esta propuesta fueron los cubanos y otros países, por las mismas razones, fueron

reacios a aceptarlo. En esta corriente se deben mencionar a Emilio Setién y

Salvador Gorbea, quienes profundizan y amplian en el contexto latinoamericano

varios de los alcances teóricos de la escuela soviética. En lugar de involucrarse en

una discusión sobre el término a usar para denominar a lo que en este trabajo se

denomina bibliotecología, optan por hablar del Sistema de conocimientos

científicos bibliológico-in formativo, donde engloban a la archivología, la


57
bibliografología, la bibliotecología y la ciencia de la información y de manera

implícita le ubican en el campo de las ciencias sociales58.

Una propuesta de singular interés es la de Robert Escarpit, quién con

intenciones de conjuntar teóricamente a la información y la comunicación, esboza

la teoría diacrónica de la información y comunicación. Consideraba que la irrupción

" Cosa que desafortunadamente no aplicaban a su propia circunstancia.


" Emilio Setién y Salvador Gorbea Portal. Op ch. pp. 22-24.

28
de las máquinas en el ámbito de la información representaba nuevos desafíos a los

documentalistas, sobre todo porque no era posible continuar con los mismos

esquemas de trabajo y era necesario adecuarlos a las nuevas condiciones. En ese

sentido se unía al coro de voces que pugnaban por la modificación de las posturas

bibliotecológicas tradicionales59.

Otra escuela importante de mencionar es la española. José López Yepes 60 en su

obra La documentación como disciplina, ubica a la bibliotecología (allí llamada

documentación) como ciencia de la ciencia, dentro del espectro de las ciencias

sociales. Desafortunadamente, en el mismo texto, cae en una incongruencia al

tratarla como una disciplina general, interdisciplinar, autónoma e instrumental al

servicio de todos los saberes y actividades sociales. La pregunta para un lector

que desconozca la manera de pensar del autor es si es ciencia social, o disciplina

interdisciplinar. El que se une a tal postura es Antonio García Gutiérrez, que se

refiere a documentación como una disciplina pragmática (también auxiliar aunque

moleste a algunos el adjetivo secundario) 61 . Resalta la necesidad de evitar caer en

el extremo de la excesiva teorización o reduccionismo de la actividad

bibliotecológica.

Puntualización de Salvador Gorbea en una conversación.


Robert Escarpit. 7héorie géiJra/e de in/ormaíioi, el de fa colnmwlicaiion. - Paris 1-Iachette Universite,
c1976. 218 p. - (Clasiques Hachette: langue, linguistique, cornrnunication). pp. 3, 157. 165.
'° José López Yepes. La documeniació,, como disciplina: leo/ ja e historia. Op. cii
pp. 33. 231
Antonio García Gutiérrez. "La investigación docunientolóica : hacia un ajuste interdisciplinar". En: S1RE
ieprcsei,tació,,y organi:ació,, del coF?ocin,/nwnfo. y. 1, no. 2 (1995): 11-20. pp. 13.

29
1.3.3 Natural.

Ante la insatisfacción de un sector de la comunidad bibliotecológica por la falta

de cientificidad de su disciplina, a principios de la década de 197062, cobra fuerza

la intención por llevarla a las ciencias naturales. Al considerarla un saber similar al

de la física o química 63 , pretendían darle un carácter científico trayendo métodos

provenientes de esa área del saber. La finalidad era generar estudios para

descubrir y fundamentar leyes, modelos y teorías de la ciencia de la información,

siguiendo procesos parecidos a los de la física, biología, química, etcétera.

En intentos primarios se cuenta el trabajo de Paul Otlet, que en el Traité de

documentat ion, considera que la documentación o bibliología es la ciencia teórica,

comparativa genética y abstracta, que abarca todos los libros, todas las especies y

todas las formas de documentos 64 . En ese trabajo presenta un ambicioso

programa para la conformación integral de la ciencia de la documentación,

abarcando asuntos teóricos y prácticos. Algo significativo en Otlet,

indiscutiblemente por el tiempo que le tocó vivir, es la influencia que el positivismo

ejerce sobre él y el amplio saber que refleja en su obra.

Varios de los posteriores autores, que se ubican en esta vertiente, retomaron la

1,2
Con esta inquietud se acuña el nuevo término ciencia de la información, expuesto al inicio del trabajo. Por
esa razón en este apartado se usa ese término. Chavidarov, S. Ib/den,... pp. 222
M. C. Yovits. "A theoretical framework for the development of information science". En: Informas/en
science ¡f.v .vcope, objecis of researc/, andprob/enis. Moscow : FID, 1975. 363 p. -- (F1D 530): 90-114. pp
II B. C. Brookes. "The fundamental equation of inforination science". En: Informa/ion sc/e/,ee ¡Ss scoje.
'ç!ssea/'L'/7g,/fjç/ hkn,s' Moscow : FU), 1975. 363 p. -- (FID; 530): 115-130. Pp. 174.
e" Paul Otlet. El tratado de doci,,ne,,Iación el libro sobré el libio: teoría ypráci/ca /
tr. María Dolores
Ayuso García. Murcia : Universidad de Murcia. 1996. xiv, 432 p. pp. 9.

30
teoría de la información propuesta por Shannon y Weaver 65 , y la aplicaron al

proceso de información bibliotecológico. Un ejemplo es un modelo propuesto para

la medición formal de la creatividad y el valor de información contenido en un grupo

de datos o en un documento, con la finalidad de influir en la toma de decisiones; se

considera la medición de ese modelo, aplicable universalmente a la información

pragmática, equivalente al nivel tres de la teoría de la información de Shannon y

Weaver66 . Otros intentaron demostrar que la ciencia de la información sólo tomaría

un lugar de importancia entre las ciencias si los científicos de la información en su

investigación y trabajo aceptaban que ¡a información en el sentido cognitivo está

estrechamente relacionada a la información en el sentido biológico67

Mientras tanto, autores con mayor entendimiento de la situación reas de la

bibliotecología como disciplina, marcaban claras diferencias con las otras ciencias

(biología -información genética- y matemáticas -teoría de la información),

señalando que las fronteras del saber al que se dedica la ciencia de la información

es la recolección, procesamiento y accesibilidad de la información, con el fin de

darle un carácter científico y demostrarlo. Por lo tanto, razonan, que se trata de

una nueva ciencia al tener su propio objeto de estudio 68 . De cualquier manera en lo

que todos los autores concuerdan, es que la información tratada por esta nueva

ciencia (ciencia de la información) es la información científica, a diferencia de los

C. E. Shannon, W. Weaver. iYze nicrihe,natical theory (?f conimunicalion. -- Urbana : University of Illinois
Press, 1949.
(,ó
El modelo de Shannon y Waver tiene los siguientes niveles: 1) Técnico; 2) Semático; 3) Pragmático. M. C.
Yovits. ib/de,,,... pp. 90-91
(,7
B. C. Brookes. Op. cii. pp. 128
H. Diemer. "Information science: a new science". En: Ijiforinalion science lis scope, ohjccis qf research and
plohIL'm.'. Moscow : FID, 1975. 363 p. -- (F1D; 530): 192-203. PP. 193-194, 203.

31
bibliotecólogos tradicionales que trabajan con información general.

A pesar de las diferencias, no cejaron en su intento y en la actualidad se

observan algunos autores que dan un desarrollo vigoroso a tal idea. Al igual que en

los momentos originales fomulan modelos matemáticos para otorgarle carácter

científico. En este sentido van de acuerdo con la interpretación de la idea de

Galileo sobre la importancia de las matemáticas en la justificación de los saberes

de una ciencia. Además se adhieren a la idea positivista de que las ciencias

naturales son de mayor importancia, al tener en su apoyo el saber empírico

cuantificable. Esto da por resultado un intento de ciencia, donde se enfatiza la

conformación de una formalización rigurosa de esta disciplina.

Esta situación se ve reflejada en los cambios de nombre y planes de estudio de

varias instituciones extranjeras y nacionales, antiguamente denominados

bbIiotecoIogía. En lo nuevos planes de estudio se pone énfasis en la enseñanza

de matemáticas (sobre todo estadística). La formación de cuadros con un sólido

conocimiento matemático no es malo, pero sí se requiere de cuidado, pues el

trabajo y la investigación en la bibliotecología no pueden restringirse a la aplicación

de modelos matemáticos, dado que el trabajo y la investigación en la

bibliotecología trata con elementos difíciles de someter a la medición,

comprobación y demostración matemática. En este sentido, es importante la

advertencia de G. Wersig, quien considera que la mera teorización puede conducir

a la construcción de una disciplina alejada de la realidad social y por eso propone

32
la sociología de la información69.

Este esfuerzo a pesar de ser necesario someterlo al análisis y a la crítica, no es

posible desdeñarla, pues abrió líneas hasta ese momento no exploradas por los

bibliotecólogos. El desafío que implica al demostrar que el trabajo con información

es susceptible de hacerse con el apoyo de las matemáticas, es necesario

retornarlo, ya que se trata de un fuerte apoyo para la formalización, vigor y

seriedad de esta disciplina. indudablemente muchas de las sendas antes abiertas,

se han cerrado y en tanto otras se han fortalecido pero sin ese espíritu audaz la

ciencia bibliotecológica no podrá avanzar.

1.3.4 Espíritu.

Una propuesta de reciente cuño es la expresada por Miguel Ángel Rendón, quién

apoyándose en la terminología de Dilthey -al considerarla más apropiada e incluso

argumenta una estética más elegante y evita la discriminación de las ciencias,

apoyándose en que en la ciencia contemporánea no se espera llegar a una teoría

última y acabada- opta por ubicar a la bibliotecología en las ciencias del espíritu,

donde se engloba a las conocidas como ciencias sociales y humanísticas 70 . Con

ello no niega el carácter científico de la bibliotecología, pero hace una diferencia

sustancial con las ciencias naturales, a causa de la metodología y las propiedades

" G. Wersig. "Sociology of implication and inlbrrnation sciencc: implications for research and scientific
training". En: informa/ion SLICIICC lis seope, ohecis of research andprobiems. Moscow : FID, 1975. 363 p. --
(F1D 530): 170-183. Pp. 170-171.
Es necesario acotar que Miguel Angel Rendón evita con ello una disputa centrada en términos y no en
conceptualizaciones, que seria la tarea primordial de la bibliotecología cii estos momentos.

33
que las diferencia 71

Miguel Ángel Rendón parte de la idea de que la bibliotecología trata de una

verdadera ciencia y apoya su fundamentación en filósofos de diversas tendencias,

basándose en el método dialéctico, con el fin de evitar un eclecticismo, donde se

realice un collage teórico. En el resultado de su investigación inicialmente presenta

las tareas a realizar para fundamentar a la bibliotecología, que son la

fundamentación filosófica, teórica, extrateórica, metodológica y lógica. Advierte que

las tareas no se realoizaran necesariamente de manera cronológica, de acuerdo a

determinada jerarquización de las tareas a realizar y en su trabajo se aboca a la

fundamentación teórica y filosófica de la bibliotecología.

Inicia con la ontológica (primera parte de fundamentación filosófica), donde

concluye que los miembros de la comunidad bibliotecológica trabajan dentro de un

marco filosófico determinado, con ciertas excepciones, como la de Ranganathan.

En la fundamentación teórica, analiza y reconceptualiza términos centrales en el

quehacer bibliotecológico, como información, necesidad de información, usuario,

documento e institución informativa y los relaciona. Concluye la fundamentación

filosófica con la gnoseología, donde propone que la investigación bibliotecológica

se realice bajo los lineamientos de un nuevo paradigma72.

La propuesta de Miguel Ángel Rendón, por la misma formación de su autor, tiene

Miguel Ángel Rendoti Rojas. /3ases Ieórici.vyfi/sóficas de la /3ihlioiecofogia. Op. cit. p. 8-20.
linde,,,. pp. 35-121.

34
fuertes bases flosóficas, quizá donde sea necesario fortalecer su posición es en el

aspecto bibliotecológico. Sin embargo se trata de una línea que si se sigue sus

resultados serán importantes porque no se reduce al ámbito mexicano sino

recupera la tradición filosófica occidental, sustento de la mayoría de los

bibliotecólogos.

1.3.5 Interdisciplinaria.

Entre los asuntos que son de llamar la atención, se encuentra el carácter

interdisciplinario 73 de la bibliotecología. Esta idea se fundamenta en la diversidad

de asuntos tocados por la bibliotecología y que tienen relación con diferentes áreas

del saber.

En este tenor es difícil circunscribir las áreas de la bbliotecología 74 en las

ciencias sociales, ya que su inspiración viene de las humanidades 75 o de las

llamadas cienc ias duras 76 . Ejemplo de ello, y a decir de Shera 77 , entre los orígenes

de la bibliotecología en los Estados Unidos de América, está la original inspiración

de las bibliotecas durante el siglo XIX, cuando el interés era promover la cultura

para todos los miembros de la sociedad, al parecer relacionada con una

""Hay varias pro uestas corno interdisciplinaria, multidisciplinaria y transdisciplinaria. Se escoge


interdisciplinariedad, en este caso, porque da la idea de la convergencia en una disciplina de elementos
provenientes de diversas disciplinas.
7 Corno la catalogación, clasificación, bibliozrafia, indización, administración de bibliotecas, la tccnotogia
aplicada a la consulta, los procesos técnicos del libro, etcétera.
Jesse H. Shera. I.'71?'oducíion lo lihrarp st/ence . basic eleineiii of lihrarv vcience. Ihide,ii. P. 9. Joseph P.
Natoli. "Lihrarianship as a human science: theory, niethod and application". En: Lihrary Research. no. 4
(1982): 163-174, p. 163-166.
71,
Salvador Ciorbea Portal, 1J niode/o inalemótico de B,ad/ord su aplicación a las revistas lati,iocítnericunas
de las e/e//cias hi blio/ecológi CU5 y de la informació,,. México : EJNAM, CUIB, 1996. 152 p.
77Jessc H. Shera. initoduction lo /ihiary se/ence... op, cii. p. 33-40. Esto no quiere decir que She.ra reniegue

35
concepción humanista; del otro lado, está la actual vinculación con la tecnología en

la aplicación de elementos desarrollados por la computación y las

telecomunicaciones, que han afectado la práctica y aún la concepción de las

bibliotecas 78 y la formulación de leyes de proposiciones bibliotecológicas,

enunciadas mediante modelos expresados en términos matemáticos 79 . Es una

postura poco defendida; quizá veladamente lo hace José López Yepes en su obra

antes mencionada, cuando dice que la ciencia de la documentación es una ciencia

para la ciencia 80 . A pesar de lo poco fundamentada, es necesario explorar esta vía

como otra posibilidad para la ubicación de la bibliotecología en el espectro de las

ciencias.

Emilia Currás 81 se une a la posición de Yepes y después de un recuento de

diferentes clasificaciones de la ciencia, concluye que es una ciencia de la ciencia.

Sin embargo declara, apoyada en Desantes, que las ciencias de la documentación

son 'ancilla scientiae" obediente y sumisa al servicio de otras ciencias y "causa

scientiarum", principio y origen de otras ciencias. Y de manera ambiciosa concluye:

de ubicar a la bibliolecologia en las ciencias sociales, pero buena parte de su trabajo intelectual es posible
recuperarlo para fundamentar la interdisciplinariedad de la bibliotecología
75 Esta situación se revela en el lenguaje de boga en la actualidad. Pues se puede observar el uso de anglicismos
y términos inexistentes, apenas una década atrás. Sin embargo se debe tener cuidado y no dejarse engañar con
el canto de las sirenas, pues no por usar un lenguaje nuevo y atractivo, la bibliotecología necesariamente ocupa
un nuevo siatus y un lugar privilegiado dentro las disciplinas científicas. Ya que, como es bien sabido, el
lenguaje no cubre todos los requerimientos que le dan a una disciplina el carácter de ciencia. Además, es bueno
recordar la ironiz.ación de Nietzche, sobre la fragilidad de los conceptos humanos, los cuáles son fáciles de
crear y desechar,
79 c. E. Shannon, C. E. y W. Weaver. Thc ,naihernatica/ iheoiy of cononzinicalion. Emilio Setién. "Estado de
desarrollo de bibliotecas públicas cubanas... Ibid/em. Rosa Ma. Martines Rider y Agustín Gutiérrez Chiflas.
"Reflexiones sobre los aspectos científicos de la investigación en Biblioteconomía". En: Im'esiigación
Ilihlioiecológka hbliotecologki, archit'ologia, / c,inzenioció,z e iizJr,nacióii. y . 2. no. 3 (1987); 60-62, p.
61.
° José López Yepes La /ocuneizIac/óii corno disciplina leona e historia. lbidern. p. 23 l
Emilia Curras. La informaciÓn en sus nuevos aspectos. p. 107-111.

36
nada sin las ciencias de la documentación y todo por ellas.

De acuerdo con lo expuesto en este capítulo, en el ámbito bibliotecolágico

existen diversas posturas para comprender esta disciplina y su objeto de estudio.

Ésta es una de las razones por las cuáles la construcción de la epistemología

bibliotecotógica es un desafío. Desafío tomado por las diferentes comunidades

epistémicas que participan en la bibliotecología y que han sido presentadas grosso

modo.

Al ser la metodología uno de los componentes de la epistemología, tal parece

que tiene similar problemática. Entonces, antes de proponer un concepto de

metodología bibliotecolágica, se hace necesario revisar las vicisitudes del concepto

de manera general en la metodología de la ciencia y de manera particular en la

bibliotecología. Esa es la tarea que ocupará el siguiente capítulo.

37
2. Antecedentes del concepto de metodología en la filosofía de la ciencia

En el capítulo anterior se expusieron las diferentes propuestas para la ubicación

de la disciplina bibliotecológica. De manera general se dio a conocer como los

bibliotecólogos entienden su disciplina. Unos le ubican en la técnica, otros en la

tecnología y otros en la ciencia. De todo esto puede desprenderse una falta de

acuerdo entre los bibliotecólogos para la construcción de su epistemología y por

ende, una necesidad de construirla en todos sus aspectos. Uno de esos aspectos

es la metodología, asunto que se trata en este capítulo al ofrecerse la visión que

se tiene en la filosofía de la ciencia en torno al concepto de metodología y después

presentar los diferentes puntos de vista existentes entre los bibliotecólogos en

torno al mismo.

Metodología

Etimológicamente metodología es una palabra compuesta por los siguientes

elementos: a) método, conformada por las palabras griegas metha (en medio, en

seguida, a continuación, después) y odos (camino); b) logia, del griego logos

(tratado o estudio). Por lo tanto se trata del estudio del método y/o los métodos.

Otra acepción usada, proveniente del uso común, es método y/o conjunto de

métodos de la actividad humana; y otro significado posible es la aplicación de un

método o métodos82 . Las anteriores son acepciones generales del término

metodología.

2
Esos significados son a nivel general y pueden encontrarse en: Efl de Gortari. El método de las ciencias
nociones fundainenlales. México : Grijalbo, imp 1996. 151 p. (Tratados y manuales Grijalbo). p. 17, 89. Henry
Van Laer. J'hvlo.s'ophy of science. 2a ed. Pittsburgh : Duquesne University Press, 1963. 2 t. (Duquesne studies
philosophical series 6). t. ],p. 55. Mario Bunge. La investigación científica : .su estrategiav su filoso/la. /

39
En la metodología de la ciencia, se han propuesto lo siguientes significados

específicos:

a) La lógica o parte de la lógica que estudia los métodos.

b) El conjunto de métodos empleados por una ciencia o grupo de ciencias.

c) El estudio filosófico de los métodos de una(s) ciencia(s) o sólo del método83

La primera acepción no se toca en este trabajo, porque por el momento interesa

más aclarar el aspecto conceptual del término metodología en la bibliotecología,

esa es la razón para abordar las otras dos acepciones, que afectan de manera

directa la noción del concepto de metodología.

La acepción a la que se prestará mayor interés es la tercera, pues lleva a una

discusión que aunque es posible considerar estéril -al creer que siguiendo

determinados pasos se trabaja el método científico y por lo tanto el conocimiento

generado dentro del ámbito bibliotecológico es científico 84 -, es justificable, porque

en terminos generales en fa literatura bibliotecológica consultada, se presenta al

método científico sin someter su ontología a discusión. De cualquier manera es

tr. Manuel Sacristas. 2a ed. Barcelona : Ariel, c1983. (Methodos : filosofia, historia, sociología y política de la
ciencia y de la Técnica). p. 24.
Leoncio Ortíz González. Diccionario de lógica.
México 1PN, c1995. 400 p. p 249. Mario Bunge. La
invesligación ciez1fica. Op cii. p. 27, 50. Melodología del conocjrnjenl (,
cien qfico 5a ed. México : Quinto
Sol, 1985. 445 p. p. 4-5, 8-9. Sebastián Alvarez. "Racionalidad y método científico". En: Racionalidad
episíénrica
/ cd. León Olivé. Barcelona : Trotta, 1995. 278 p. (Enciclopedia Iberoamericana de Filosofia 9):
147-170. p. 147.
Alan F. Chafmers ¿Qué es cosa llamada deuda? --
2a de. -- México : Siglo XXI, 1984. x, 245 p. --
(Teoría). pp. 4.
importante aclarar que la existencia del método científico en la filosofía de la

ciencia no fue un problema epistemológico sino hasta el siglo XX

2.1 Antecedentes del concepto de metodología.

El origen histórico de la ciencia y su metodología es indeterminable en el tiempo.

De acuerdo con la Academia de Ciencias de la URSS y Cuba, cuando el hombre

comienza a operar consciente o inconscientemente con la idea elaborada de la

causalidad, en lo concreto de la práctica, es cuando se da la ciencia y su primer

método 86 . Por eso consideran que el método inicial de la ciencia primitiva fue el

método de ensayo y error. Por su parte Popper 87 ubica los antecedentes del

método científico entre los griegos y lo denomina método crítico, al considerar a los

griegos el primer pueblo que pone en tela de juicio lo establecido como verdadero,

sea por la religión o la mitología 88 . Justo es decir que en otras civilizaciones se

Haciendo un breve repaso en la historia de la fllosofia de la ciencia, se encuentra que no es posible hablar
estrictamente entre los griegos de un método científico, tal y como es concebido en la actualidad, pues ellos no
tenían esa concepción, pero sí es posible ubicar el desarrollo de algunos procedimientos, identificados
actualmente como métodos usados por la ciencia, tales como la mayéutica desarrollada por Sócrates y la lógica
trabajada por Aristóteles. En la Edad Media, siguiendo con la tradición heredada de la cultura grecolatina, no
existieron mayores aportaciones, salvo el reforzamiento de la lógica. Algunos señalan el surgimiento del
método científico con el trabajo de Galileo y su pretensión de matematizar sus resultados, pero a quien se le
reconoce como el que fundamenta la idea del método cientifico es a Francis Bacon. Otros filósofos y científicos
con un trabajo sólido al respecto son Descartes, Newton, Mil¡, etc. Mayor información sobre este punto se
puede obtener en: David Oldrey. El arco del conocimiento .' introducción a ¡a historia de la filosqfía y
metodología de la ciencia / tr. Ferran Vallespinas y Carlos Duarte; rey . ed. David Casacubierta. -- Barcelona
Crítica, 1993. 607 p. -- (Serie general ; 228). -- ISBN 84-7423-579-0. G. E. R. Lloyd. Methods andprohlerns
¡ti Greek .vcience : selecledpapers. -- Cambridge : Canibridge LJniversity Press, 1991. xiv, 457 p. -- ISBN 0-
521-37419-7. Javier Echeverría. Introducción a la metodología de la ciencia :.filosofía de ¡a ciencia en el
siglo XX. -- Barcelona : Barcanova, 1989. 322 p. -- (Barcanova: temas universitarios). -- ISBN 84-7533-472-
5. Metodología del conocimiento cien qfico. Op cit. Ralph M. Blake, Curt J. Ducasse and Edward H. Madden.
7heorie.s of scienIfic nicihod : (he Re,,ai,swance zhrough ¡he nineteenth ceniwy / ed. By Edward H. Madden . -
- New York : Gordon and Breach, 1989. viii, 346 p. -- (Classics in the history and philosophy of science ; 2). --
ISBN 2-88124-351-7 (France).
"> - ...... (IP! ('flh1fl('ifliP?!Il) científic o Q- eif 1n 14'
87 N
Karl R. Popper. ('onocimieizto objetivo: un enfoque evolucionista. -- 4a ed. -- Madrid : Tecnos, 1992. 342 ,
p. (Estructura y fi.inción: el porvenir actual de la ciencia). p. 312-313.
G. E. R Lloyd. Op. cit. p. 115. S T Y C.

41
pueden encontrar elementos similares a los de la cultura griega, pero es necesario

recordar que en este trabajo se parte de la civilización occidental, la que hunde sus

raíces intelectuales en los griegos.

2.2 Griegos.

A los griegos se les reconoce el origen de la filosofía occidental 89 , entre los

personajes de mayor importancia están Sócrates 90 , Platón (428 ó 427-347), y

Aristóteles 92 . La filosofía griega logró sintetizar el saber anterior y construyó

conceptos y métodos fundamentales para la antigüedad y con repercusiones a lo

largo de la historia.

A pesar de que el método no era objeto del análisis filosófico, estaba implícito en

la forma de abordar los problemas y la actitud mental de los filósofos 93. Por eso

una de las contribuciones de importancia de los griegos es el método axiomático

de elaboración del conocimiento. Éste surgió a partir de principios geométricos, por

lo que su origen es matemático. Los axiomas y postulados de la geometría eran

considerados como definiciones de las hipótesis y éstas se interpretaban de

'<9 Se usa filosofía, tomando en cuenta que los griegos no diferenciaban entre ciencia y filosofía como sucede en
la actualidad.
° Aportó la duda metódica como principio fundamental en la concepción del método. En el aspecto formal su
método está compuesto por la ironía y la mayéutica.
" Considera al método el camino por el cual marchar de la apariencia a la realidad, del falso al verdadero
saber. La mayor parte de sus ideas las plasmó en la Carta VII y el diálogo La República, Fedro. Político y
1'ilebo. Usa la Dialéctica como método para llegar a las ideas elevadas y descender a las cosas de menor nivel
en busca de la verdad y las Ideas. También se le atribuye el método axiomático.
92
Se le atribuye la creación de la lógica formal. Su aporte a la metodología para adquirir el conocimiento se
encuentra en el Organon, obra con diferentes partes como Calegorías, De la interpretación, Analíticos
Primeros, Analíticos segundos, Los tópicos y Re/iilaciunes de los sofismas.
Metodología del conocimiento científico. Op. el. p. 16, 33.

42
manera univalente. Consistía en la significación veritativa de las premisas

fundamentales y derivadas en los marcos de la ciencia particuIa4

Pero la falta de experimentos para comprobar teorías es señalado para minimizar

el aporte de los griegos a la ciencia al comparar a los filósofos griegos con los

científicos modernos. Del otro lado están los que creen que practicaban el método

experimental. Sin embargo por las condiciones imperantes, es posible concluir que

la comprobación de las teorías era rudimentaria y se basaba fundamentalmente en

la observación, pues se carecía de los instrumentos necesarios para manipular

objetos o fenómenos 95 . A esto se añade el menosprecio de los griegos a labores


96
que implicaban un trabajo manual, pues era destinado a los esclavos

De cualquier manera el dominio de los pensadores griegos se dejó sentir a lo

largo de la historia intelectual de occidente y aun de oriente, como es el caso de -

los árabes. Por eso en el apartado dedicado a la Edad Media es notable que en

buena medida consistían en comentarios a las obras de los fliosofos griegos.

94 Ihidein., P. 18, 27, 58.


G. E. R Lloyd. Op cit. p. 70, 72, 76, 97, 418, 432.

43
2.3 Edad Media.

Este período de la historia se ha considerado una época de oscuridad y sin

avance considerable de la ciencia, atribuido al rígido dominio de la Iglesia católica

romana en occidente. Sin embargo se puede encontrar el enlace intelectual entre

los sabios griegos y los científicos de la era moderna en este período. En ese

sentido existieron ciertos escritores representativos 97 , sobre todo durante la Baja

Edad Media98

De la Baja Edad Media poco se puede hablar, pues occidente estuvo

convulsionada por múltiples guerras. Además antes de 1150 se creía que Platón

era el filósofo de la naturaleza más importante. Pero a partir de esa fecha los

escritos de Aristóteles sobre la ciencia y el método científico comenzaron a

traducirse al latín de fuentes árabes y griegas. Alrededor de 1270 se había

traducido una gran cantidad de obras de Aristóteles, y fue tal impacto de la obra

aristoteliana que la presentación normal de un trabajo sobre una ciencia

determinada se convertía en un comentario a la obra de Aristóteles99.

Los autores de esta época estuvieron interesados en la lógica y el desarrollo del

aspecto empírico de la ciencia 100 fue mínimo. Y dadas las características de la

Philipp Frank. Filosofia de la ciencia. --México : Herrero Hermanos Sucesores, 1965. 333 p. pp. 22.
" Robert Groseteste (1168-1253), Roger Bacon (1214-1292), John Duns Escoto (c. 1265-1308), Guillermo
de Ockham (1285-1349), Pietro d'Abano (1275-c.1315), Nicolas de Autrecourt (c.1300-después de 1350),
Jacopo da Forli (c. 1360-1413), Hugo de Siena (1376-1439), Agostino Milo-Nifo (1473-1538), Giacomo de
Zarabella (1533-1589).
David Oldrey. 0/) cit. p. 56.
John Losse. Introducción histórica a lafilosofia de la ciencia. -- 3a ed. -- Madrid Alianza Editorial, 1981.
251 p. p. 40.
°° También se llama protociencia al periodo que corre de la Antigüedad hasta inicios del Renacimiento.

44
época, los escritos de mayor importancia están plagados de cuestiones que en la

actualidad no son reconocidos como parte de la ciencia, sino forman parte de la

teología o religión, productos del pensamiento humano sin reconocimiento

científico a partir del racionalismo. Aunque otros les reconocen su carácter

científico, siempre y cuando no se toquen aspectos subjetivos, sobre todo

sobrenaturales, sino como producto del ser humano101.

En la justificación histórica de la metodología de la ciencia, se ha pretendido

trazar una línea directa de la Escuela de Padua hasta los trabajos de Galileo. Se

resaltan como el vínculo entre escritos antiguos relacionados con metodología y

los trabajos de filósofos del siglo XVII. Algo que se debe reconocer de la Escuela

de Padua es su intento por modificar las nociones de resolución y composición

para producir un método en la generación de conocimiento sobre materias

empíricas combinando resolución y composición. Además Galileo retomó puntos

importantes de los textos de los paduanos para la conformación de su

metodología.

Dentro de este período se preservó el bagaje intelectual de la antigüedad. Pero

para que se propiciase el "gran salto" en la ciencia era necesario esperar tiempos

mejores, que se dieron a partir del Renacimiento.

Esto lo reconoce de manera iniplicita un teólogo católico como Hans Küng, en Ser cristiano.

45
2.4 Renacimiento, hasta el siglo XIX.

El Renacimiento es reconocido por renovar la creación humana, esencialmente

en el campo de las artes. Pero, a pesar de que en el campo de las ciencias no

hubo una renovación tan acelerada, se sentaron bases que son indicios del

posterior aporte de Galileo, Descartes, Leibniz, Newton, etc. Los siglos posteriores

al Renacimiento estuvieron marcados por la confianza en la capacidad del ser

humano de alcanzar la verdad absoluta y final sobre la naturaleza, siempre y

cuando el método correcto se empleara. Sobre la naturaleza de ese método había

un acuerdo general, concebido como una combinación de la experiencia y la razón.

Además, de acuerdo con la Academia de Ciencias de la URSS y Cuba en el

Renacimiento la metodología del saber científico empezó a formarse como rama

independiente en el marco de la filosofía de la ciencia102.

La corriente humanista, heredera y transformadora de la antigua tradición

medieval dominó el Renacimiento y puso enfásis en las humanidades y las artes,

desdeñando la ciencia empírica. Los humanistas, bien entrado el siglo XVI, eran

hostiles a la investigación empírica. Y autores renacentistas dibujaban una visión

reduccionista del significado y la posibilidad de la ciencia, al aseverar que el saber

genuino aislado de la naturaleza del mundo a través de la ciencia empírica era

prácticamente imposible. Sin embargo algunos autores ven indicios empíricos del

método científico en escritos de Leonardo da Vinci103 . Se atienden con

preponderancia cuestiones relacionadas con la lógica y la hermenéutica de textos,

102
A1e/odologia del conocirnielito cie,ilifico. Op. CII. p. 16.
103
Ralph M. Blake, Op cit. p. 7-8, 12-15, 48.

46
aunque en la interpretación se extiende el campo de interés a escritos seglares.

Todavía era necesario esperar algún tiempo para que las ciencias empíricas

pudieran tomar el lugar protagónico que les caracteriza en la época moderna.

En el siglo XVI se confrontaron dos visiones: la de los antirrealistas y realistas.

Los antirrealistas al conocer los límites de un método aplicado a la investigación,

tendieron a exagerarlos con el fin demostrar la imposibilidad de aplicarlo a la

investigación seria en la profundización del saber del universo. Los realistas

preocupados con la necesaria unidad de las ciencias y la legitimidad del reclamo

de las ciencias para establecer conclusiones objetivamente válidas y confiables,

advertían la tentación de subestimar las conclusiones alcanzadas mediante un

método"'

En esa disputa poco a poco fueron ganando terreno los realistas y el desarrollo

de la ciencia de la época moderna se caracterizó por el empleo de métodos de

investigación empírica, vinculados al desarrollo del método inductivo y gracias al

creciente prestigio de la artesanía y sus realizaciones técnicas. Una de las razones

por las cuales se logró el triunfo de la aplicación del método científico, fue el

abandono de la estigmatización del trabajo manual privativo de las clases bajas105.

Por otro lado, la gnoseología y metodología pusieron de relieve varios aspectos de

la estructura del saber científico y de los procesos de la investigación científica. Al

mismo tiempo, se descubrieron dificultades de principio y contradicciones en la

R&ph M. Blake. Ibidem. p. 47.


Phílipp Frank. Op. cii. pp. 23.

47
investigación del pensamiento científico 106. Dos importantes personajes en la

fundación de la metodología fueron Galileo Galilei y Francis Bacon.

Galileo Galilei (15641642)107 es considerado el fundador de la metodología

científica moderna. Una de sus aportaciones fue la unificación de la teoría y el

experimento como partes integrantes de su método de investigación, consistente

en el enfoque teórico del planteamiento del experimento y la elaboración de los

datos experimentales. Además introdujo el uso de las matemáticas en la

investigación.

Por su parte Francis Bacon (15611626)108 consideraba que la experiencia y l

inducción eran vitales en la correcta formulación de los principios del método

científico 109 . A su juicio el experimento y la observación fundamentaban el

verdadero método para la ciencia. Aunque no desdeñaba el uso de la lógica,

consideraba necesario que las conclusiones se tomaran como verdaderas,

apoyados en hechos verificados y no sólo tomando en cuenta el razonamiento. Al

oo Ii.lelodologia del COflOCiflhieflIO Cieiitifico. Op. cii. p. 110-111, 133.


107
La estructura del método de Galileo es:
1.- l'artiendo de los datos de las investigaciones y del experimento burdo, se crecí el modelo ideal del
experimetilo, que es realizado más larde, y de ese modo queda precisado.
2.- Mediante la reiterada repetición del experimento se obtiene el promedio de las magnitudes medidas, en
las que se introducen correcciones teniendo en cuenta diversos factores perturbadores.
3.- Las magnitudes obtenidas por inedia del experimento son el ¡ful/o de partida al formular la hipótesis
matemática, de la que se deducen las consecuencias mediante razonamientos lógicos.
4.- Es/as consecuencias se comprueban después en el experimento y sirven de confirmación indirecta de ¡a
/nçótesis adoptada.
lO
El Novuni Organumn, el Parasceve, la Svlra svlvarum, y varias Histories son los escritos fundamentales de
Bacon. Enfatizó que el movimiento inductivo ascendente, a partir de una amplia base empírica, constituye la
eficacia del método.
109
Ralph M. Blake. Op. M. p. 17, 19.

48
creer en acercamientos paulatinos al conocimiento del universo, reconocía la

imposibilidad de tener un saber último y acabado"'

Al tener como antecedente los trabajos de Galileo y Bacon, varios autores del

siglo XVII procuraron profundizar los fundamentos de la metodología de la ciencia.

Entre ellos estan Thomas Hobbes (1588-1679), quien consideraba al método

racionalista de geometría la base para un conocimiento científico del mundo;

Johannes Kepler (1571-1630); René Descartes (15961650)111, que procuró

elaborar un método para la obtención de conocimientos verdaderos, los autores de

la Lógica de Port-Rpyal, trabajo anónimo de dos teólogos jansenistas, Antoine

Arnauld (1612-1694) y Pierre Nicole (1625-1695), escrito como libro de texto de

lógica y metodología para estudiantes del Colegio de Port-Royal, su base era

aristotélica y su método era la búsqueda de la definición esencial de las cosas;

Isaac Newton (16421727)h12, negaba la validez del uso de hipótesis para la

'°Ibidc'm. p. 25.
Al concebir al método universal con bases matemáticas ubica los siguientes componentes vinculados entre
si:
Todo problema científico se reduce a un problema formulado en el lenguaje de la matemática.
2.- Yodo problema male,nálico se reduce a un problema algebraico.
3.- lodo problema algebraico se reduce ala solución de una ecuación Única.
Y la estructura del método universal, que propone, son las siguientes cuatro reglas, como guías de la mente.
Incluir en sus juicios sólo lo que aparece con tanta claridad y evidencia que no concede margen alguno
para dudar de ello.
2.- Dividir cada una de las dificultades investigadas en tantas partes como sea posible y necesario para
superarlas mejor.
3.- Mantener determinado orden del razonamiento, empezando con los objetos más sencillos y de más fácil
comprensión palo ir ascendiendo paulatinamente al conocimiento de lo más complicado, aplicando ese
orden incluso allí donde los objetivos del razonamiento no aparecen en su vinculo natural.
4.- Elaborar siempre una relación tan completa y concisa, tan general, que se tenga la seguridad de que no
se han cometido omisiones.
Utilizó cogito, ergo sum (primero pienso, luego existo), como base para descubrir la verdad de otras
proposiciones, con claridad y distinción.
12
Tal expresión debería ser una constante en su investigación pero las hipótesis están presentes en su trabajo.
Por eso se ha considerado que su afirmación se dirige contra abusos en el uso de las hipótesis. Su metodología
puede sintetizarse de la forma siguiente:

49
investigación (no hago hipótesis, escribió en los Principia); John Locke (1632-

1704), familiarizado con la metodología de la ciencia experimental, elaboró una

argumentación contra la metodología aristotélica; y Gottfried Wilhelm Von Leibniz

(16461716)h13, considera que el problema sustancial era lograr un método exacto

de enlazar ideas. Esa época es fundamental en el desarrollo de la física mecánica,

que posteriormente influyó en sus presupuestos metodológicos para otras

disciplinas.

En el siglo XVIII el prestigio de la ciencia y sus métodos ya estaba consolidado y

se trabajaba en las instituciones educativas de mayor prestigio. De esa época

datan los trabajos de Georges Berkeley (16851753) h14 ; David Hume (1711-

1776)115, célebre por plantear el problema de la inducción; lmmanuel Kant (1724-

1 - La observación de la realidad y la experimentación meticulosa sobre el comporlamnienlo de ésta, lo llevan


mediante una inducción general a establecer una ley o hipótesis.
2.- Una vez enunciada, se aplica a una situació,, particular, deduciendo matemáticamente cómo se
comportarían los objetos reales en este caso.
3.- Se Coniprileha en la práctica la verdad de los resultados obtenidos mediante la deducción y por tanto la
validez del principio de partida (ley o hipótesis).
4.- Se repite este proceso en una gran cantidad de casos particulares, y si sus resultados son coherentes, se
acepta la ley o inducción primaria, hasta que se descubra algún fenómeno que no sea explicable por ella.
313
Escribió un trabajo titulado Sobre la síntesis análisis universales, o el arte del descubrimiento y juicio.
114
Escribió De motu.
115
Enunció sus ocho reglas de la siguiente manera:
1.- La causa y el efecto deben ser contiguos en espacio y tiempo.
2.- La causa debe ser anterior al efecto.
3.- Debe existir una unión constante entre la causa y el efecto.
4.- La misma causa siempre produce el mismo efeclo, y el mismo efecto nunca debe proceder de una causa
distinta.
5.- Cuando varios objetos producen un mismo efecto debe ser a través de alguna cualidad, que se revelará
como común a lodos ellos.
6.- La deferencia en el efecto por parte de dos objetos parecidos debe proceder de los aspectos particulares
en los que difieren.
7.- Cuando mi objeto aumenta o disminuye con el aumento o disminución de su causa, se debe considerar
como un efecto añadido, derivado de la unión de los diferentes efectos, que a su vez proceden de diversas
partes de la causa.
1804), expositor del carácter sintético de los juicios de la ciencia, adjudicó a las

hipótesis un papel regulador.

E! siglo XIX estuvo marcado por diferentes utopías y la ciencia no se abstuvo de

ellas, como la posibilidad de poder conocer los principios generales o leyes que

regulaban el universo. Son varios los autores que trabajaron la metodología, entre

ellos está William Herschell (17381822)h16, defensor del inductivismo, reconocía

que el proceso de investigación demanda el uso de los métodos inductivo y

deductivo, poniendo énfasis en la verificación empírica; William Stanley Jevons

(18351882)hh7, relacionó sistemáticamente la inducción, la probabilidad, y la

hipótesis; William Whewell (17941866)h18, consideraba que su lógica inductiva era

la lógica del descubrimiento y sostenía que el descubrimiento de las verdades

científicas era progresivo; John Stuart Mill (18061873)h19, en su metodología

8.- (fi, objeto que existe durante un cierto momento en su perfección completa sin ningún efecto, no es la
única causa de tal efecto, pero necesita ser auxiliado por algún otro principio, que debe inducir su influencia
y operación.
''
Escribió el Discurso preliminar de filosfia natural, Propuso las siguientes reglas generales para la
investigación:
1. - 1 Tiia conjunción constante en/re causa (antecedente) y efecto ('consecuente).
2.- La ausencia de un efecto (consecuente) en la ausencia de una causa (ai:Iecedenle).
3. - Una proporcionalidad entre causa (aiiecec/inte) y efecto (consecuente).
4.- Igual que 3, aunque expresada con palabras d?ferentes.
5.- Una versión del efecto (consecuente) al rever/ir la causa ('antecedente,).
Distingue dos estados en la inducción: a) descubrimiento y verificación de causas aproximadas y leyes de bajo
grado de generalidad; b) descubrimiento de causas y leyes generales (teorías), obtenidas de la examinación de
los hechos individuales.
Propuso tres pasos en el proceso inductivo: (1) separación de algunas hipótesis por el carácter de una ley
general; (2) deducir consecuencias desde aquella ley; (3) observar las armonización de las consecuencias con
los hechos particulares bajo consideración.
118
Bosquejó los siguientes pasos del proceso inductivo:
1) Clarificación de los elementos del conocimiento por análisis, que consta de la explicación de concepciones y
la descomposición de los hechos.
2) Coligación de hechos por medio de una concepción: se trata de la selección de la idea, la construcción de la
concepción y la determinación de las magnitudes.
3) Verificación de la coligación: realizada mediante la predicción, la consilience y la simplificación.
119
Propusó los cánones de inducción.

51
reflejaba la epistemología empírista; Auguste Comte (17981857)120 padre del

positivismo; Ernst Mach (18381916)121, dio importancia a los experimentos

mentales; Charles Sanders Peirce (18391914)122, intentó construir la lógica del

descubrimiento basado en una visión general de la metodología para la

construcción de hipótesis; John Dewey (1859-1952), creía que la verdad era

identificable con el éxito pragmático; Pierre-Maurice-Marie Duhem (1861-1916),

consideraba que las hipótesis se interrelacionan lógicamente al creer en la unidad

de la ciencia.

En la época que va del Renacimiento hasta el siglo XIX se fortaleció la idea del

método científico regulador de la investigación y el saber en la ciencia. La postura

¡'rime,' canon (el método de concordancia o .s'eme/anza): si dos o más casos del fenómeno sometido a
investigación tienen en común sólo una circunstancia, entonces esta circunstancia -en la que sólo concuerdan
lados estos casos- es la causa (o la consecuencia) del fe,zómeno dado.
Segundo canon ('el método de diferencia): si el caso en el que aparece el fenómeno dado y el caso en que
no aparece sois semejantes en todas las circunstancias, excepto en una, que se encuentra en el primer caso,
esta circunstancia en la cuál se diferencian únicamente estos dos casos, es la consecuencia, o la causa, o la
parte necesaria de la causa de/fenómeno ",'
Tercer canon (el método c(?izj unto, de concordancia, y diferencia): si dos o más casos de surgimiento del
fenómeno tienen de camá:: una sola circunstancia, y dos o más casos en que no surge ese fenónzeno tienen de
común sólo ¡ci ausencia de esa misma circunstancia, entonces tal circunstancia, en la que sólo se dfereszcian
ambos tipos de casos, es la consecuencia, o la causa, o ¡aparte necesaria de/fenómeno investigado.
Cuarto canon (el método de los residuos:).' separar de/fenómeno una parte tal, que se sabe por inducciones
anteriores, que es el efecto de ciertos antecedentes y el resto del fenómeno es el efecto de los demás
antecedentes.
(juii:to canon (el método de variaciones concomitantes): todo fenómeno que varia de alguna manera
siempre que otro fenómeno varia de una manera particular, o bici: es la causa o es el efecto de este
fenómeno, o está conectado con él por alguna causa.
120
Resaltaba la importancia de las pruebas empíricas como fuente de conocimiento, y pretendía eliminar de la
ciencia o del discurso filosófico todo tipo de entidades situadas fuera del alcance de la investigación empírica.
De ahí que el positivismo adujera la necesidad de unidad del método científico, basado en el método
experimental, para todas las ciencias,
121
Consideraba que las leyes y principios científicos descansan en fundamentos empíricos, y se comprueban
mediante el método experimental,
122
A su juicio el método científico consta de formulación de hipótesis, deducción y comprobación de
consecuencias, llamó al último paso inducción. En "A theory of probable inference" caracterizaba la inducción
como la inversión de una deducción estadística. Y en "The varieties and validity of induction", distinguió tres
tipos de inducción: 1) cualitativa, sinónimo de hipótesis o abducción; 2) cuantitativa, lo mismo que la inversión
de una deducción estadística; 3) cruda, es inductio quae proceditper enumeralionen, simplicem de Bacon.

52
imperante es conocida como inductiva, aunque con algunas oposiciones iniciales y

la de Hume. Sin embargo, a pesar de la seguridad de la existencia del método

científico, el terreno estaba en preparación para el debate sobre su existencia

durante el siglo XX.

2.5 Siglo XX.

Este siglo inició con la idea de poder estudiar la sociedad y el comportamiento de

los individuos conforme a las reglas postuladas por el método científico seguido en

las ciencias naturales. Tal idea tuvo éxito entre los estudiosos de las ciencias

sociales; el marxismo y el positivismo son muestra de ello. Esto provocó la

formulación de teorías o creencias aberrantes y justo es reconocer que posibilitó el

desarrollo y fortalecimiento de ciertas áreas de las ciencias sociales 123

En este siglo existen cuatro autores claves para comprender la concepción de la

metodología de la ciencia: Karl R. Popper, Thomas Kuhn, lmre Lakatos y Paul

Feyerabend. Asimismo, se debe tomar en cuenta las aportaciones de la corriente

desarrollada bajo los auspicios de la extinta URSS y que tuvo impacto en América

Latina, sobre todo en la bibliotecología cubana 124 . Además es necesario mencionar

al Círculo de Viena, eslabón de enlace con la filosofía del lenguaje y las propuestas

formuladas en la lógica-matemática125.

2.5.1 Corriente comunista o materialismo dialéctico.

123
Con efecto en la bibliotecologia, sobre todo a través de la escuela norteamericana, de gran influencia en la
bibliotecologia internacional.
" Ejemplo de ello es el desarrollo de la teoría bibliotecológica de Emilio Setién.
125
Relacionados con Bertrand Russell, Ludwig Wittegenstein y en discusión continúa con Karl R. Popper.

53
A pesar de los cuestionamientos a los que últimamente está sometido el

materialismo dialéctico, por ser la supuesta base científica que sustentó el

socialismo real imperante en la ex Unión Soviética, su impacto en la ciencia fue

significativo e influyó en el desarrollo científico de la URSS. Sus seguidores

reclaman la herencia de las ideas de Hegel, Marx y Lenin.

En el libro sobre metodología, de la Academia de Ciencias de la URRS y Cuba,

se considera al método desde la teoría del reflejo, al tener en cuenta que la

dialéctica materialista puede actuar como método universal del conocimiento

porque refleja en el razonamiento teórico las leyes generales del desarrollo del

mundo material. Además la dialéctica materialista, como lógica del conocimiento,

realiza sus funciones metodológicas en los distintos niveles de análisis del

conocimiento126.

2.5.2 El Círculo de Viena.

La posición sustentada por la tradición, con la que se abre en este siglo la

reflexión sobre metodología, es la sostenida por el Círculo de Viena, identificada

como neopositivismo. Consideraban que la inducción es la base de las ciencias

empíricas. La inducción aportaba el procedimiento o comportamiento que era más

favorable al éxito práctico. Su objetivo era encontrar una serie de acontecimientos

cuya frecuencia de ocurrencia tuviera un límite. Entonces si un método conduce a

un límite de frecuencias, el método inductivo también debe hacerlo.

54
Aseveraban que los frutos de la ciencia, tangibles aún en la vida cotidiana del ser

humano, indican la existencia de un método científico general, con unidad y único.

El trabajo de los miembros del Círculo de Viena sobre metodología es reconocido

por el principio de verificación. La verificabilidad sería el criterio regulador para

distinguir la ciencia de otros tipos de saber. La verificación debería ser completa y

hecha por medio de la observación, por eso conectaban a la teoría y observación

mediante las reglas de correspondencia. Al ser verificada la corrección de una o

más predicciones, las teorías y las leyes se confirman127.

Diversos personajes participaron en el Círculo de Viena. Entre ellos Rudolf

Carnap (1891-1970), quien hizo uso de la lógica para la formulación de sus ideas

en torno a la metodología de la ciencia, proponiendo el empirismo lógico. Otto

Neurath (1882-1945), por su parte, propuso la teoría de las coherencias para

conocer las hipótesis falsas 128 . También se relaciona al Círculo de Viena con la

concepción heredada, propuesta por Hans Reichenbach (1891-1953), quien

sostiene que todo conocimiento es probabilístico 129 . La justificación de la inducción

formulada por Reichenbach es una regla de deducción racional, es una

herramienta o instrumento de investigación, de esta manera se da el carácter

instrumental a la metodología, no a la teoría 130 . Otro autor impulsor de la

126
Javier Echeverría. Op. cit. p. 55. Metodología de/conocimiento científico. Op cit. p. 143, 146.
327
Javier Echeverría. Op, cii. p. 11, 13-14, 17-18. David Oldrey. Op. cit. p. 372, 451.
328
Javier Echeverría. Op. cii, p. 20-21. David Oldrey. Op. cit. p. 355, 362, 373.
329
David Oldrey. Ibidem. p. 379-380.
' 30 /hidem. p. 381.

55
concepción heredada es Ernest Nagel (1901-) propugnador de la reducción entre

teorías 131

Actualmente los defensores de la concepción heredada aceptan que en la

primera fase de la investigación, puede haber influencias extracientíficas, pero al

justificar la teoría, es necesaria una racionalidad estricta al confrontar las

predicciones y las consecuencias de la teoría con la experiencia132.

Con el tiempo las posturas de los miembros del Círculo de Viena poco a poco se

vieron atacadas por otros pensadores. Uno de los aspectos con mayor

cuestionamiento fue la verificabilidad. Quién procuró mostrar sus inconsistencias y

presentó una vía alterna en la metodología, fue Karl R. Popper.

2.5.3 Karl R. Popper.

Karl Popper aceptaba la existencia del método científico, más no su carácter

ún ¡Col 33 . Al llegar a la conclusión de que la filosofía de la ciencia se encontraba en

un impasse con la tradición empirista, consideró que la única forma de revitalizarla

era modificando todo el sistema. Entonces propuso la falsación en lugar de la

verificación, como instrumento metodológico para valorar el carácter científico de

una teoría, en contraposición a la postura del Círculo de Viena.

131
Javier Echeverría. Op. cii. p. 51.
L32Ihidern p. 25-32, 38, 41. David Oldrey. Op. cii. p. 383, 385.
133
Sobre todo si se toma en cuenta que su método se basa en la crítica a lo que se formula como verdadero.

56
Con ello concedía mayor importancia a la comprobación de teorías, como el

punto de partida de la reflexión metodológica sobre la ciencia, y a la demostración

de sus errores. Y deja de lado la comprobación de la validez de una teoría

mediante pruebas empíricas 134. Una teoría científica puede ser falsada mediante la

experiencia -teorías empíricas- o por su contrariedad interna -teorías lógicas y

matemáticas. Las teorías no se pueden verificar empíricamente pero sí son

constrastables de manera negativa y no positiva, por lo tanto la contrastación

teoría/experiencia es un procedimiento metodológico que evalúa a la teoría

científica. 135

Asimismo, creía que la metodología científica es esencialmente deductiva y no

inductiva. En ese sentido la ciencia se aproxima a la verdad proponiendo sistemas

hipotéticos complejos (teorías científicas) que explican ciertos fenómenos. Los

científicos deducen, a partir de esos sistemas hipotéticos la verdad o verdades de

su objeto de estudio.

Por lo anterior, a pesar de que Popper centra su propuesta metodológica en la

falsacián de teorías, la verdad continúa siendo el objetivo de la ciencia, pero por la

vía negativa. Se buscan razones para rechazar lo que se considera verdadero y

sólo se acepta la teoría que no ha sido falsada. Se aprende e incrementa el

conocimiento por medio de la crítica racional136.

Javier Echeverría. Op. cit. p. 78.


135
Ibidem. p. 80-85.

57
A su versión de la metodología hipotético-deductiva de la ciencia, la denominó

método de ensayo y error, o de conjetura y refutación. El método de conjetura y

refutación lleva al científico cerca de la verdad y resuelve el problema de la

inducción 137. El problema de la inducción consiste en indagar si las diferencias

inductivas están lógicamente justificadas, y bajo qué condiciones la están. Para

ello se formula una ley lógica que fundamenta dichas inferencias, propone que sea

un enunciado sintético y universal. Considera además, que una inferencia es

inductiva cuando pasa de enunciados singulares (o particulares) a enunciados

universales -hipótesis, leyes o teorías.

Sin embargo su propuesta contiene reglas metodológicas, que contradicen su

ideal de pureza lógica, y están dispersas en la Lógica de la investigación científica.

Johansson las reuniió y ordeno de la siguiente manera:

1. Regla de demarcación:

Una teoría es científica si y sólo si es fa/sable, es decir, si es inconsecuente o

incompatible con al menos una afirmación existencial singular que pueda

comprobarse mediante observación ¡ntersubjetiva.

2. Reglas contra estrategias convencionalistas:

(1) Al adoptar una regla no utilizar conceptos indefinidos como si fueran definidos

(por la teoría).

36 Ibídem. p. 95-96, 100.


137
1
David Oldrey. Op. cii. p. 451-453, 455, 457.

58
(u) Sólo son aceptables aquellas hipótesis auxiliares cuya introducción no

disminuye el grado de falsabilidad o comprobabilidad del sistema en cuestión, sino

al contrario, lo incrementa.

(iii) Se prohiben alteraciones subrepticias.

(iv) Se deben rechazar las teorías comprobables intersubjetivamente a la luz de

experimentos contrarios.

(y) Las hipótesis auxiliares se deben usar lo menos posible.

3. Reglas que requieren un alto grado de falsabilidad:

(i) Considerar las leyes naturales como sintéticas y afirmaciones universales

estrictas.

(u) Aquellas teorías susceptibles de ser comprobadas de modo más estricto han de

tener preferencia.

(iii) El número de axiomas (de las hipótesis más fundamentales) ha de minimizarse.

(iv) Cualquier nuevo sistema de hipótesis ha de producir, o explicar, las

regularidades corroboradas por el sistema antiguo.

(y) Una nueva teoría ha de partir de alguna idea unificadora, simple, nueva y

poderosa sobre alguna conexión o relación entre objetos previamente

desconectados o hechos o nuevas entidades teóricas.

(vi) Una teoría nueva ha de ser independientemente comprobable.

4. Reglas de aceptación para afirmaciones básicas:.

(i) Una teoría se toma como fa/seda sólo si descubrimos un efecto reproducible

que refute la teoría. En otras palabras, sólo se acepta la falsación si se propone y

corrobora una hipótesis empírica de bajo nivel que describe este efecto.

59
(u) No deben aceptarse afirmaciones básicas dispersas (es decir, aquellas

lógicamente desconectadas) sino que deben aceptarse afirmaciones básicas en el

curso de la comprobación de teorías, que propongan nuevas cuestiones sobre

estas teorías, que se responderían a través de la aceptación de las afirmaciones

básicas.

5. Reglas de aceptación para las teorías:

(i) Se debe otorgar un grado positivo de corroboración a una teoría si es

compatible con las afirmaciones básicas aceptadas y, si por añadidura, se acepta

una subclase mayor de cero de estas afirmaciones básicas como resultado de los

intentos sinceros de refutar la teoría.

(u) El grado de corroboración de una teoría no está determinado tanto por el

número de ejemplos corroboradores como por la severidad de las distintas pruebas

a los que se ha sometido la hipótesis en cuestión.

(II,) No se debe otorgar un alto grado de corroboración a una teoría que ha sido

fa/seda por un experimento comprobable intersubjetivamente basado sobre

hipótesis fa/sables.

(iv) La teoría debe someterse a algunas comprobaciones nuevas y rigurosas.

6. Reglas para falsar afirmaciones pro babilísticas:

(i) Considerar como eliminados o prohibidos los acontecimientos altamente

improbables.

7. Reglas para las ciencias socia/es:

(1) Todas las ciencias teóricas o generalizadoras deben hacer uso del mismo

método, independientemente de que sean ciencias naturales o ciencias sociales.


(iii) (sic) La tarea de la ciencia consiste en describir cómo se comportan los

objetos. esto se lleva a cabo introduciendo libremente nuevos términos allí donde

fuera necesario, o bien redefiniendo nuevos términos donde fuera conveniente y

rechazando su significado original (sic). Ya que las palabras son sólo instrumentos

útiles de descripción.

(iii) Un punto de vista seleccionado preconcebídamente se debe introducir en la

historia o escribir la historia que nos interesa.

(iv) La tarea de la teoría social consiste en construir y analizar cuidadosamente

modelos sociológicos en términos descriptivos o nominalistas, es decir, en términos

de individuos.

Otro rasgo distintivo de Popper es la idea de que la ciencia posee un método

científico particular, consistente en la forma de proceder y pensar característico de

los científicos, que le da carácter racional al movimiento científico 138. A pesar de

ser uno de los filósofos de la ciencia de mayor prestigio durante este siglo, también

fue sujeto a la crítica y a la modificación de sus ideas por parte de otros

pensadores

2.5.4 Thomas Kuhn.

Hasta este momento se aceptaba sin discusión la existencia del método científico

para realizar y validar la investigación científica. Pero no había acuerdo sobre la

exposición correcta de ese método, o su consistencia. Aunque por lo menos se

aceptaba la existencia de rasgos comunes, característicos de la investigación

61
científica 139 . Es cuando se presenta Ja propuesta kuhniana basada en la idea del

paradigma. Para comprender el desarrollo histórico de la ciencia, provoca la

búsqueda de líneas diferentes a la de un solo método regulador de la investigación


140 .
científica En este sentido una aportación de Kuhn a la metodología de la

ciencia, es su insistencia en la importancia de los estudios históricos minuciosos

como etapa previa a la elaboración de teorías generales sobre la ciencia. Además,

negaba la existencia de un método científico, al decir que el método era formulado

en función del paradigma.

El concepto de paradigma propuesto por Kuhn ha sido objeto de mucha

controversia, ya que a juicio de los filósofos de la ciencia, Kuhn no lo esclareció en

su obra fundamental, Las revoluciones científicas. Una manera de entender el

paradigma, es en referencia a un modelo de donde surgen tradiciones de

investigación científica, se elabora a partir de teorías y técnicas particulares para

resolver problemas de investigación, en el contexto de una determinada área de la

ciencia. Es una amalgama de teoría y método que conjuntamente aporta algo

semejante a una cosmovisión del mundo y es de uso cotidiano en la filosofía y

metodología de la ciencia. Cada paradigma posee su utilaje conceptual y

operatorio141.

Ibidern. p. 459, 463-464, 476-477.


' 39 Ibidem. p. 477.
'° Es necesario aclarar que muchos de los resultados posteriores del trabajo de Kuhn ni el mismo los esperaba,
llegando a retractarse o matizar su posición expresada en Las revoluciones cienljficas.
141
Javier Echeverría. Op. ci!. p. 113.

62
Divide el desarrollo de la teoría científica en tres períodos: precientífico, ciencia

normal y crisis.

En la etapa precientífica, los hechos son recopilados de manera fortuita. La

observación y experimentación casual, así como los datos de la artesanía,

constituyen esa primera amalgama.

En la etapa de ciencia normal se transforma el proceso de investigación, al tomar

en cuenta experimentos y fenómenos investigados de manera sistemática y no al

azar. La investigación es dirigida y los investigadores se interesan progresivamente

por dicho paradigma, hasta el punto de que las demás decaen " 2. La función

general de un científico durante este período es similar a la de un jugador de

rompecabezas. Los considera como rompecabezas, debido a que poseen

soluciones garantizadas, aseguradas por el paradigma, que aporta reglas

apropiadas para la culminar la investigación con éxito.

Durante el período de crisis se cuestionan las técnicas experimentales -la

metodología del paradigma-. Además se producen discusiones sobre las

suposiciones fundamentales de la estructura teórica del paradigma, hasta

transformarlo. Sucede lo siguiente al existir un rival del paradigma establecido:

1) se transforman los problemas a resolver, o se utilizan diferentes concepciones y

definiciones de la ciencia;

42 lhidem. p. 108,

63
2) aparecen diferencias conceptuales entre ambos paradigmas, ligadas al lenguaje

teórico y la interpretación ontológica de los datos analizados;

3) hay una visión diferente del mundo, al no percibir los mismo los defensores de

los paradigmas.

La visión anteriormente expuesta, niega implícitamente la existencia de un

método científico definido o un conjunto de reglas metodológicas establecidas para

desarrollar la investigación científica. Más bien son soluciones concretas o

rompecabezas, que utilizados como modelos o ejemplos, pueden reemplazar

reglas explícitas como base para la solución de los restantes rompecabezas de la

ciencia normal143.

Esta propuesta es importante para la metodología de la ciencia, al atacar uno de

los principales postulados de las distintas corrientes filosóficas y científicas; la

existencia de una base empírica común a todos los científicos, dibujada en el

método científico; al existir diferencias sustanciales -u ontológicas-,

epistemológicas -concepciones respectivas de la ciencia, heurística, metodología-,

o de percepción 144 . Frente a concepciones sistemáticas o normativas de la ciencia,

Kuhn propone que se hagan estudios históricos previos para ver cómo se ha

producido el cambio científico en la historia de la ciencia, constituyéndose en

complemento imprescindible para la reflexión metodológica. Por lo tanto, la

David Oldrey. Op. cii. p. 479-483, 486,


Javier Echeverría. Op. M. p. 115-116.

64
importancia de la filosofía de la ciencia consiste en analizar el cambio científico -los

cambios conceptuales, heurísticos, metodológicos y ontológicos145.

Las posturas de Kuhn provocaron diversa reacciones. Una de ellas es la de los

seguidores de Karl Popper, representados por lmre Lakatos, quienes rechazaban

varios de sus postulados. Y otra fue la expresada por Paul Feyerabend, que

radicalizó la ligera postura relativista de Kuhn.

2.5.5 Irnre Lakatos

Lakatos146 junto con Popper, aceptaba la existencia del método científico.

Consideraba que el desarrollo metodológico de la ciencia es mediante programas

de investigación científica. Por otro lado distingue el falsacionismo metodológico,

en dos versiones distintas:

a) Popperl: se trata del falsacionismo metodológico ingenuo, posición

característica de Popper, sobre todo en la Miseria del historicismo y en la Sociedad

abierta.

b) Popper2: es el falsacionismo refinado propuesto por Lakatos, siendo su

aportación al debate sobre metodología iniciado por la obra de Kuhn. Afirma que la

contraposición tiene lugar entre dos teorías, de las cuales los científicos adoptan la

' 45 lhidemt. p. 119-122.


Sus trabajos fueron compilados en un libro denominado Lo.vprogrwnas de investigación cientifica.

65
que posee un mayor contenido empírico, lo que trae consigo la noción de programa

de investigación

El programa de investigación está formado por una secuencia de

investigaciones, desarrolladas por uno o más investigadores, donde se adoptan

determinadas reglas metodológicas. Cada programa se caracteriza por dos

conjuntos de reglas, uno indica al investigador qué caminos de investigación debe

evitar y otro le muestra qué caminos seguir 147 . Al señalar las jerarquías en las

hipótesis o teorías de un programa de investigación, señaló las intocables (hard

core, núcleo) y las que aceptan modificación y cambio a medida que el programa

se desarrolla (pro fective belt cinturón protector)148.

La heurística de un programa de investigación consiste en un conjunto de

técnicas para la solución de problemas científicos, de las cuales algunas pueden

ser generales. Propone dos tipos de heurística que funcionan en la metodología de

los programas:

a) la heurística negativa, estipula que las presunciones del núcleo no deben ser

cuestionadas o alteradas;

b) la heurística positiva, está formada por varias instrucciones metodológicas que

informan acerca de cómo debe desarrollarse el programa149.

147
Javier Echeverría. Op. cit. p. 123, 132.
148 /hidenz. p. 125-126.
Ibidemi. p. 134, 136-137. David Oldrey. Op. cit. p. 490.

66
Los programas de investigación pueden desarrollarse en etapas distintas, de

modo que sean progresivos o degenerativos. Si un programa conduce al

descubrimiento de nuevos fenómenos que son explicados de forma satisfactoria

por las hipótesis de! programa, se produce un cambio progresivo, dado que las

nuevas suposiciones realizadas en el marco del cinturón protector aumentan el

contenido empírico de la teoría (o programa). Pero cuando el programa está en

fase de agotamiento las hipótesis añadidas son ad hoc. Éstas permiten explicar

observaciones aberrantes y salvar las presuposiciones del núcleo, pero no

permiten predecir nuevos fenómenos com probables' so.

La distinción entre los contextos de descubrimiento y de justificación, y la

insistencia en el primero para elaborar una teoría de la ciencia que pueda ser

confrontada por la historia real de la misma, resulta un punto fundamental en la

metodología de Lakatos 151 . Sin embargo acepta la imposibilidad de probar y refutar

las teorías sólo por procedimientos empíricos. Por lo tanto ninguna proposición

fáctica puede ser probada mediante un experimento, debido a que toda prueba

conlleva una deducción lógica, y las proposiciones sólo pueden derivarse a partir

de otras proposiciones, y no de hechos. De ahí que los experimentos cruciales no

existen, sólo los que pueden destruir instantáneamente a un programa de

investigación.

'° ll,idern. p.
492, 497.
Javier Echeverría. op. cit. p. 147.

67
La posición de Lakatos fue duramente confrontada por Feyerabend, con quien se

proponía sostener un debate que la temprana muerte de Lakatos impidió. De ese

debate sólo quedó el libro de Feyerabend, Tratado contra el método.

2.5.6 Paul Feyerabend.

La postura en torno al método científico sostenida por Paul Feyerabend

conmocionó varios de los presupuestos manejados en la filosofía de la ciencia, al

enunciar la inexistencia del método científico, proponiendo para el trabajo en la

ciencia el todo se vale152.

Argumentaba la inexistencia de algún método privilegiado para la investigación

científica que conduzca a la adquisición de un saber científico privilegiado. Y como

las revoluciones científicas han suscitado cambios metodológicos importantes, la

idea de un método fijo y estable, o la noción de una racionalidad invariable a lo

largo de los tiempos, ha de ser abandonada. Con ello acepta la existencia de

diferentes métodos, susceptibles de ser usados en la investigación y postula el

anarquismo metodológico. Entonces la ciencia carece de un método especial, que

52
Con esta aseveración es necesario tener cuidado, pues si bien Feyerabend en Contra el método y Y'ratado
con/ra el método, enarbola el todo se vale, posteriormente en La ciencia en uncí sociedad libre, pondera tal
declaración, aseverando que no intenta sustituir un conjunto de reglas generales por o/jo conjunto, sino
convencer al lector de que todas las metodolotias, incluidas las más obvias, tienen sus límites, señalamiento
hecho con anterioridad, pero que a su juicio, no había sido observado por sus críticos, atribuyéndosele la
intención de sustituir unas reglas generales por Otras. Paul Feyerabend. Con/ra el método. -- Madrid Ariel,
1974. PS La ciencia en iiiia sociedad libre / tr. de Alberto Elena. -- México Siglo XXI, 1982. 261 p. --
(Teoría). p. 31-32. Y ralado con/ra el método esquema de imima teoría anarquista del cünücitnieiiio. México
REI, 1997. 319 p. P 12, ]7n, 174, 185, 206, 290.

68
la convierta en una actividad privilegiada, merecedora de respeto al producir un
153
saber verdadero

Afirma que en los cambios en la ciencia teórica que suponen transformaciones

M paradigma implican actos de irracionalidad. Porque es necesario escapar de un

determinando sistema de conocimiento y trabajar con otro, opuesto en ocasiones

al primero en principios fundamentales y además con frecuencia se modifican

sustancialmente las reglas prescritas. Si está en lo cierto, ninguna ciencia, forma

de saber, metodología o pensamiento puede reclamar un estatus privilegiado154.

Para resolver la nueva situación, propuso un procedimiento contrainductivo,

basado en la contradicción sistemática de teorías y resultados experimentales

establecidos. De ahí desglosa dos reglas contrametodológicas:

1) Desarrollar hipótesis inconsistentes con teorías aceptadas y altamente

confirmadas.

2) Las hipótesis inconsistentes con las observaciones, los hechos y los resultados

experimentales no necesitan defensa especial, pues no existe una teoría que

concuerde con todos los hechos conocidos de su dominio.

David Oldrey. Op. c,l. p. 502-503.


Ibidem, p. 505, 509.

69
No con ello pretende convertir a la contrainducción en la nueva regla

metodológíca general de la actividad científica, sino convencer al lector que todas

las metodologías tienen sus límites155

Además en oposición a la idea de un método científico, y como idea clave de su

epistemología anarquista propuso el lema todo vale. Ya que al pugnar por un

liberalismo metodológico que no restrinja la investigación científica, porque el

progreso de la ciencia requiere de la libertad metodológica de los científicos, el

todo vale puede ser tomado como una regla o principio metodológico, al poner

pocos obstáculos al progreso científico y ser adecuado para fa actividad científica

en una sociedad libre. En ese pluralismo metodológico supone un nuevo marco

teórico para asumir esa divergencia metodológica entre teorías rivales156.

Consideraba al todo vale el único principio de la metodología anarquista, pero ocho

años después precisó que no puede ser el primer y único principio de la nueva

metodología, pues automáticamente se convertiría en regla, contrario a su

deseo' 57

Con Paul Feyerabend se cierra esta revisión histórica del concepto de

metodología, ya que relativiza la validez del método científico como regulador de la

investigación y el saber científico, postura congruente con los tiempos

posmodernos que corren en la actualidad. Aunque esto no quiere decir que se

Javier Echeverría. Op. cii. p. 213-215.


36
Ibidem. p. 217-218, 221.
157
Ihide,n. p. 246.

70
deba tomar la postura de Feyerabend como el punto climático del saber humano,

pues ni él mismo lo aceptaría.

Como se vió a lo largo de este apartado, la versión tradicional que caracteriza a

la ciencia por su método tiene antecedentes en el racionalismo del siglo XVII,

fundado en el empirismo del XVI. A esto se suma que los científicos usan la noción

de método científico con convicción, equivalente o sinónimo de la ciencia.

Asimismo, a traves de la historia se procura la fijación de una serie de reglas que

deben 158 seguirse en la investigación científica.

Con lo anterior se pretende demostrar que el método científico posee un rico

contenido, que ha dado lugar a importantes avances en el conocimiento de lo real.

Por eso la idea de un método preciso y común a todas las disciplinas fue

fundamental en la noción de ciencia en la era moderna. Bajo esa idea el more

geométrico, el método experimental, la reductibilidad a sistemas formales de las

teorías científicas son tentativas de caracterizar metodológicamente la actividad

científica1 .

Pero la definición del método científico presenta serias dificultades y como se ha

visto a través de este apartado, es difícil tender una línea histórica progresiva de la

metodología desde el tiempo de los griegos a la actualidad. En ese sentido

Feyerabend tiene razón al aseverar la inexistencia histórica de métodos ciertos y

' Ihijeini. p. l.
' Jhiden,. p. 2. David Oldrey. Op. cit. p. 515.

71
seguros seguidos de forma cuidadosa, que permiten la adquisición de

conocimiento científico cierto, seguro y válido. Ya que las ideas, intuiciones,

hipótesis, etc., pueden extraerse de diversas fuentes, en ningún modo

caracterizables y contrario a lo que pudiera pensarse la ciencia se desarrolla

gracias a que ese componente anárquico enriquece su estructura. Lo que no

descarta determinados procedimientos cuidadosamente controlados, como los

codificados en los cánones de Mill160.

Visto lo anterior se hace necesario evitar posturas radicales, pues entorpecen

una visión global y enriquecedora del quehacer científico. Ya que en un caso se

ensalza a la ciencia por sobre otros aspectos de la creación del ser humano. Y la

contraparte minimiza el quehacer científico, rebajando los indudables aportes de la

ciencia. Se hace necesario tener una perspectiva donde se conjunte el apego a

ciertas reglas flexibles, que permitan la creatividad del científico. Además, evitando

la jerarquización, se debe precisar qué es el saber científico, diferenciándolo de

otras producciones del ser humano.

u;í)
David Oldrey. Op. cit. p. 548.

72
3. El concepto de metodología en la bibliotecología.

De acuerdo con el capítulo anterior, en donde se ofreció un esbozo de los

avatares del concepto de metodología en la filosofía de la ciencia, en este se

presenta la situación de tal concepto en la bibliotecología, a través de un recorrido

por los períodos descritos a continuación.

3.1 El concepto de metodología en la bibliotecología pionera: 1850-1900.

Si bien es factible enunciar la existencia de una metodología de la

bibliotecología, conformada desde los primeros momentos del quehacer

bibliotecológico, a causa del desarrollo de la metodología, desde la perspectiva

positivista, se menospreció por considerarla sin carácter científico. En apoyo a la

idea de la existencia de métodos rigurosos y válidos en la bibliotecología, se debe

mencionar que la mayoría de las disciplinas al tener su propio objeto de estudio,

primero han creado sus métodos y los han forjado de manera empírica y

posteriormente se han dado a la tarea de reflexionar sobre esos métodos, aunque

en algunas ocasiones la reflexión se da a la par, sobre todo con el interés de

justificar la validez del uso de esos métodos y cuando la disciplina está en una

etapa científica.

A lo largo de las historia varios personajes se comprometieron en la

conformación de una teoría bibliotecológica, pero no es visible en los primeros

momentos de ésta disciplina. A pesar de que el bibliotecario como investigador fue

un concepto familiar en las Universidades en el siglo XIX, ya que esos

74
investigadores pertenecían a las artes y humanidades 161 , además de que los

autores clásicos como Melvil Dewey no trabajaron siguiendo determinados

métodos y teniendo presente cierto concepto de metodología. En ese sentido no es

posible aceptar la aseveración de Susana Sanders, cuando afirma que Melvil

Dewey trabaja con el método hipótetico-deductivo 162 . Tal aseveración es aceptable

sólo sí se considera como una deducción al analizar el trabajo de Melvil Dewey.

De acuerdo a Michael H. Harris, a inicios de la mitad del siglo XIX, algunos

bibliotecarios reflexionaron sobre la naturaleza de esa nueva profesión. Diversos

personajes estaban de acuerdo con Melvil Dewey, quien describió el trabajo

bibliotecario como "arte mecánico", y la mejor manera de aprenderlo era mediante

el precepto y la práctica.

Según Busha, la institucionalización de la investigación en la bibliotecología en

Estados Unidos inició en 1850, fortaleciéndose en la última década del siglo XIX. Al

considerar esas fechas, se deduce que la metodología en bibliotecología, está

ligada a la creciente preocupación por la metodología en otras áreas del saber.

Apunta también que los primeros métodos usados en la bibliotecología tenían

como finalidad la descripción de los fenómenos, respondiendo las preguntas del

qué es y qué hace163.

Michael Brittain. "Training and education for library and information science research". En: Research
polky in /iliarians/iip and information science / de. By Colin 1-larris. -- London Tay]or Graharn, C1991. 139
p. p. 106.
162
Susana Sander. La teoría decimal de Mclvii Dewey". En: i)ocrmwnlación de las ciencias de la
información. no. 20 (1997): 113-129. p. 17-118.
Charles H. Busha an Stephen P. Harter. .Research nwthods in /ibrarianshij, /echnique.r and ink'rpreta!ion.
-- New York : Academic Press, 1980. -- xii, 47 p. -- (Library and infbrmation science). p. S.

75
Por su parte Chubarián reconoce cierto desarrollo teórico y metodológico de Ja

bibliotecología en la Rusia prerrevolucionaria164

Esta primera etapa puede identificarse dentro de las propuestas técnica u

humanística desarrolladas en el capítulo anterior, el papel tan importante que

jugaron en ese momento los bibliotecarios vinculados directamente con las

bibliotecas, para el desarrollo de los métodos seguidos en las mismas. Se

respondían cuestiones inmediatas y prácticas. También está profundamente

identificada con el espíritu de ese tiempo. Muestra de ello es la idea de Paul Otlet

por lograr la conformación de una bibliografía universal, que coincidía con ¡a idea

prevaleciente en ese momento, por lograr aprehender un saber verdadero,

universal y último. Además es interesante la idea sobre la metodología, sustentada

por Paul Otlet, consideraba que los métodos válidos en otras disciplinas, pueden

ser aplicados en la bibliología, pero advierte la necesidad de reflexionar sobre esas

aplicaciones. Se adhiere a la idea prevaleciente de que el método científico esta

constituido por un conjunto de reglas y presenta la manera como debe ser

realizado el análisis y síntesis de los elementos de la bibliología. Concluye que

para exponer la bibliogía existe un par de posibilidades:

• Tratar por separado en tres partes e incluso en tres obras distintas:

1. la bibliología;

2. bibiiotécnica;

64
O. S. Chubartan. Op. cii. p. 25.

76
3. las reglas fijadas o preconizadas por la organización internacional de la

documentación.

. Tratar simultáneamente esas cuestiones en los cuadros de una clasificación

única cuyos diversos puntos serían enfocados cada uno según esos diversos
165
puntos de vista

Era necesario esperar nuevos tiempos para lograr otro tipo de aportaciones. En

una nueva etapa se crean centros educativos con nuevas expectativas, ya no sólo

la de formar profesionales para el trabajo en las bibliotecas. Se sumó la

incorporación de profesores provenientes de diferentes áreas del saber, sobre todo

las ciencias sociales, quienes procuraron la introducción de métodos de sus

propias disciplinas.

A continuación se ofrece un panorama de los primeros intentos por transformar la

bibliotecología, en aras de darle carácter científico, conforme a los cánones de las

ciencias naturales y sociales.

3.2 El concepto de metodología en el intento de una bibliotecología con base

científica: 1901-1950.

En 1906 se introduce por primera vez la enseñanza de la experimentación,

colección de datos, análisis de datos y presentación de datos, en escuelas de

bibliotecología. Sobre todo donde se formaban los bibliotecólogos que trabajaban

77
en bibliotecas del área médica 166 , factor que influyó al posterior desarrollo de la

ciencia de la información. Los impulsores de esta propuesta en su mayoría

provenían de áreas diferentes a la bibliotecología e iniciaron la introducción de

métodos diferentes a los usados en la bibliotecología.

De cualquier manera la bibliotecología tradicional tenía vigencia. Esa práctica

(llamada también empirismo) intuitiva y experimental se aproximó a una

profesionalización que comenzó a tener problemas durante la primer década del

siglo XX y por 1920. Varias voces se levantaron para protestar por la falta de

implementación de una metodología seria para la profundización en el saber

bibliotecológico, requisito necesario para elevar el estatus del bibliotecólógo167.

Pero es hasta después del primer cuarto del siglo XX, cuando los bibliotecólogos

de los Estados Unidos de América procuran la implementación de una

investigación basada en métodos claramente sistemátizados 168 . A principios de

1930, Charles C. Williamson afirmaba que la verdadera causa por la que la

bibliotecología trataba de manera científica pocos problemas, era por su falta de

preparación en el uso del método científico, por eso sus estudios eran básicamente

empíricos, sin cap'acidad para apoyarse en el método científico. De acuerdo con tal

idea, Arnold K. Borden señaló la necesidad de preparar a los bibliotecólogos a la

Paul Otlet. Op cii. p. 24.


66
Michael Brittain, Op. cii. p. 106.
11,7
Michael H. Harris. Op. M. p217.
'('8 A Iibray science research recider cind hihIiog-aphic guide / Charles H. Busha ed. - Colorado : Libraries
Urilirnited, 1981. X, 201 p. p. 2.

78
luz en las pautas metodológicas marcadas por la sociología, economía y otras

ramas afines del saber"'.

En un texto para presentar métodos estadísticos aplicables a la bibliotecología,

E. W. Mc Diarmid menciona que ningún método es enteramente satisfactorio y

ubica la estadística en la sociología. Por eso en su libro combina diversos métodos

y procedimientos estadísticos. Al aceptar Ja insuficiencia de las estadístisticas cree

necesario conjuntarlas con otros métodos científicos, con el fin de obtener un mejor

saber, pues advierte que la sola laboriosa colecta de datos no son los únicos

constituyentes de la ciencia o el método científico, por lo tanto es necesario


170
adicionar interpretacionas basadas en la comprensión e inteligencia

La oportunidad para un amplio debate entre los defensores de una

bibliotecología técnica (arte) y una bibliotecología científica se dio por la fundación

de la Graduate Library School of the University of Chicago, fundada en 1926.

Ligada a los órigenes de la investigación bibliotecológica en Estados Unidos por

ser la primera en dirigirse seriamente a la investigación para dar una estructura

formal y los principios de una adecuada metodología. Ya que hasta 1930 los

métodos usuales dentro de la bibliotecología estaban relacionados con la historia y

descripción de la bibliotecología y casi era nula la formación sobre otro tipo de

métodos.

Charles H. Busha. op. cit. p. 5.


70
E. W. Mc Diarmid. '[he ¡ihra;y survey: pmh/em.s cxnd rnei/wd.s. Chicago : ALA, 1940. xv, 243 p. p. vi¡, 1-3

79
Cuando Wilson fue elegido decano en 1932, dirigió la escuela al campo de las

ciencias sociales y aplicó a sus problemas la metodología de la investigación de las

ciencias sociales 171 . En un artículo en Libraty Journal de 1934, expresaba la

inquietud de ofrecer a los bibliotecólogos una mejor comprensión de los métodos

de investigación 172 . Además en 1940, entre los objetivos ennumerados por Wilson

para la Universidad de Chicago, el tercero hablaba de desarrollar actitudes

experimentales y críticas hacia la bibliotecología entre los estudiantes de

bibliotecología. Por eso permitió que los profesores no bibliotecarios aplicaran

métodos de investigación sociológicos para estudiar la lectura como un fenómeno

social y la biblioteca como una invención social 173 . También en un artículo

publicado en 1942 en Libray Quarter/y, Herman H. Henkle, dentro de los asuntos

que enfatizaba por una investigación sistemática, mencionaba a la investigación

científica.

Durante 1930 y 1940 la escuela de Chicago fue el centro de mayor importancia

para la investigación en bibliotecología. Tenía un cuerpo de investigación, que

produjo vasta literatura pionera en el campo bibliotecológico, con la colaboración

de los estudiantes. Entre las publicaciones que trataban la cuestión metodológica,

está el libro de Douglas Waples Investigating Iibrary prnblems, primer libro

estadounidense que trata el tema de la metodología aplicada a la bibliotecología.

Además Waples era considerado el profesor que con mayor entusiasmo promovia

'' Jesse H. Shera. Introduclion lo library science: Op. cit. p. 145.


172
A library. OP. cit. p. 4-6.
173
Jesse H Shera. Librar/es ami 1/le organ/zalion of knowledge. Op. cii. p. 212.

80
el empleo de novedosos métodos de investigación para resolver problemas en

bibliotecología.

Ante eso surgió una fuerte oposición de los bibliotecarios 174 , dado que existían

prejuicios entre los bibliotecarios, de ser sujetos/objetos de investigación -actitud

típica del bibliotecario en 1930 y aún actualmente. Por eso, los bibliotecarios

objetaron que cualquier análisis estadístico violentaba su relación con los libros

que amaban y los individuos que servían. Esto trajo por consecuencia una

dolorosa ruptura y el impedimento para introducir trabajos basados en el método

científico, en algunas áreas de la bibliotecología.

Sin embargo, poco a poco los métodos estadísticos fueron ganando terreno y

artículos como How ¡ run my Iibrary good fueron criticados por ser meras piezas de

opinión a las que les faltaba un estudio profundo, que permitiera la generalización

fundamentada en la evidencia175.

Esa novedosa manera de abordar los problemas en la bibliotecología tuvo eco

entre los bibliotecólogos ingleses. De tal manera que en 1936, después de una

reunión en la Universidad de Chicago, James H. Wellars, publicó un artículo en

Libran,' Association Record. En ese artículo apuntaba que en ambos lados del

Atlántico existía poca simpatía por la implementación del método científico en la

bibliotecología, y él mismo era escéptico hasta después de conocer los resultados

174
MchaeI Brittain. Op. cii. p. 106,
S. O. Neili. Op. M. p. 149.

81
en la Universidad de Chicago. Por eso animaba a sus colegas de Gran Bretaña

para la trabajar con el método de investigación en bibliotecología176,

Chubarián señala que en esa época se renovaron los métodos de trabajo de la

bibliotecología soviética gracias a una aguda discusión 177 . Esos métodos se

basaban en la dialéctica marxista-leninista, los escritos de Lenin sobre bibliotecas y

los acuerdos de los Congresos del Partido Comunista de la URSS.

En la bibliotecología hindú, Ranganathan pretendió desarrollar su Código de

clasificación bajo los principios del método científico. Lo concebía en forma de

espira' infinita, dirigida a la adquisición del saber y lo ilustra de la siguiente manera:

la experimentación, la inducción, la hipótesis y !a verificación son dirigidas por la

deducción para la formación de leyes. Le atribuye al método científico las

siguientes características:

1. De experiencias individuales, mediante generalizaciones, se derivan leyes

empíricas con el apoyo de la inducción y ecuaciones lógicas.

2. Reducción del método científico a unos cuantos principios normativos, con el

apoyo de la imaginación y/o intuición.

3. Se generan leyes o cánones derivados de principios normativos con la ayuda de

métodos de inferencia y semántica.

4. Se revaloran los saberes existentes, a la luz de sus aciertos y errores.

' 7" A Iibraiy. Op. cit. p. 7-8.


1770.
S. Chubarian. Biblioleco/ogía general. Op. cit. p. 38.

82
5. Se reinicia e! ciclo.
178
6. Se sigue ese procedimiento de manera infinita

A pesar de que en las ciencias sociales no se procede rigurosamente de esa

manera, es válido como un modelo abstracto. Y como Ranganathan apuntaba,

usualmente no buscamos leyes sino principios normativos. Los principios

normativos pueden servir como una guía para la acción, con el fin de formularlos,

estudiar acciones sociales y las situaciones que las causan179.

Además, de acuerdo con Shera, Ranganathan en su tratamiento lógico-

matemático de los Prole gomena fo librar,' classification, sigue los postulados de los

Principia Mathematica de Whitehead y Russell. Tal aseveración es riesgosa

porque Russell y Whitehead pretendían que la matemática fuera reducible

mediante la lógica a unos cuantos enunciados. Y la posición de Ranganathan era

proponer principios que apoyaran la clasificación del saber en constante desarrollo,

pero que era imposible encerrar en un esquema. Por lo tanto su postura es acorde

a la sostenida por el segundo Wittgenstein 180, quien habla de que el lenguaje es

infinito y niega la posibilidad de encerrar al mundo en el lenguaje.

C'lasified code: wiih addiiio,zal ,ules fo, dictionarycatalogue code. --


Ranganathan, S. R. catalogue
Bangalore : Sarada Ranganathan Endowment for Library Science, 1996. 640 p. -- (Ranganathan series in
Library Science ; 2). p. 20.
Jesse H. Shera. Lihrarit's aiid ¡he organization of knowiedge. Op. cit. p. 146 xi-xii.
° La obra de Wittgenstein se divide en lo que se conoce corno primer y segundo Wittgenstein. El primer
Witttgenstein estaba de acuerdo con las posturas de Bertrand Russell y su obra magna es el Traciatu.s lógico
male,ncílico; en tanto el segundo presenta un alejamiento y ruptura de los postulados de Russel, siendo la obra
mas reconocida Investigaciones filosóficas.

83
En ese tiempo la investigación bibliotecolágica era nueva, y la teoría existente

para guiar la investigación era muy pobre, por lo tanto los que la realizaban

necesitaban instrucciones precisas en cuanto al uso de métodos y técnicas. Esa

situación se refleja fielmente en la obra de Beals, quién escribió sobre estadística,

pero advirtió que el método podía ser débil en esencia y que la correlación no

necesariamente probaba la causalidad 181 . Por otro lado las investigaciones

efectuadas durante las décadas de 1930 y 1940, trataban el qué del objeto de

estudio de la bibliotecología y eran de naturaleza clasificatoria. Es después de la II

Guerra Mundial cuando la mayoría de las escuelas de bibliotecología empezaron a

hablar sobre investigación y establecieron cursos y seminarios sobre métodos

aplicables a la bibliotecología182.

Ya después de 1945 un amplio sector de los investigadores en bibliotecología

procuraron métodos de investigación para aspectos donde las innovaciones

bibliotecológicas podían aplicarse 183 . En ese mismo tiempo los bibliotecólogos

poco a poco fueron haciendo a un lado investigaciones donde se trabajaban

asuntos históricos y descriptivos, pretendiendo retomar métodos experimentales y

cuantitativos' 84 . Ese nuevo impulso se ve en 1948, cuando la mayoría de las

escuelas de bibliotecología ofrecían cursos de métodos de investigación' 85.

''
Jesse H. Shera, Inlrodi,clion fo lihrary sck'nce. Op. cit. p. 146.
82Jessc H. Shera, Lihraries wid ¡he organizalion of know/edge. Op. cit. p. 213
A /ihrary. Op. cit. p. 10.
' 4 /hide,n. p. 11.
I5 Ibulem. p. 11

84
Es interesante ver que en este período se renovó la concepción de la

metodología entre los bibliotecólogos. Esa renovación estuvo condicionada por los

métodos de las cienicas sociales, especialmente la estadística, aunque hubo

quienes promovieron la interpretación de las cantidades obtenidas por el método

estadístico. Por eso en ese momento se dio un paulatino alejamiento de la

concepción humanista. Desafortunadamente se pensaba que lo importante en el

método era la forma únicamente, sin tomar en cuenta otros aspectos, por eso se

preocupaban por estudiar y enseñar a manera de recetas de cocina, acordes con

la técnica, y no con verdaderos métodos.

3.3 El concepto de metodología en la encrucijada, bibliotecoIogía o ciencia

de la información?. 1950-1993.

En 1951, en los Estados Unidos de América se propuso la creación de un centro

de investigación sobre bibliotecología. Entre la justificación, se aseveraba que

promovería la evaluación y estudio de métodos bibliotecarios. Se argumenta que a

partir de 1959-1960 hubo cambios trascendentales en la bibliotecología. A. J.

Meadows, sostiene que en 1960 comenzó un uso intensivo de métodos bien

establecidos, en la bibliotecología186.

Además, en 1963, un estudio publicado por el Departamento de Salud de

Estados Unidos señalaba algunos de los métodos usados por los bibliotecólogos,

A. J. Meadows. Innovation in informal ion: lwenlyyears of/he British Lihra,y Research and Developmenl
Depar/mem. --London : Bowker-Saur, c1994. x, 175 p, -- (British Library Research Series). p. 26, 91.

85
como el análisis documental, análisis estadístico de datos, y ocasionalmente cuasi-

experimentos, pero todavía era predominante la figura de los estudios históricos.

Un autor que tomó preponderancia a principio de este periodo fue Jesse H.

Shera. En sus escritos apologéticos a las contribuciones de Francis Bacon, señala

que a partir de él se fecha el inicio de la ciencia e investigación moderna. Por eso

no se puede hablar sobre filosofía de la ciencia moderna sin mencionar a Francis

Bacon ya que cada investigador del fenómeno natural o social están en deuda,

consciente o inconscientemente, con Bacon. Pues la insistencia de Bacon sobre el

uso estricto del método experimental para descubrir los hechos de la naturaleza

fue retomada en la práctica científica moderna 187, pero provocó el olvido de que

Bacon protestaba por la excesiva acumulación de observaciones. Además sabía

que la experimentación se practicaba desde tiempo atrás.

Reconoce que el aporte de mayor valor al saber humano por parte de Francis

Bacon fue la fundamentación del método inductivo, con el fin de implementarlo en

la investigación sistemática y una rigurosa autodisciplina que identifica al

verdadero científico 188 . Ese método dirige la observación primaria y la

experimentación. Consideraba que al menos en parte acierta al observar que el

método de observación primaria y la experimentación como una técnica para el

descubrimiento de nuevo saber es susceptible de errores y verdades189.

187
Jesse H. Shera. .fniroduction lo /ihrary wjence Op. cit. p. 147.
Jesse H. Shera. Libra,ies and i1' organizalion of kiiowlcdge. Op. cit. p. 149-150.

86
Bacon estableció patrones metodológicos. Mostró que el procedimiento se da a

partir de los sentidos y nociones particulares hasta llegar a las proposiciones

generales. La idea consiste en proceder regular y gradualmente de un axioma a

otro, entonces el axioma general no es alcanzado hasta no analizar el último de los

particulares. Para una investigación efectiva, el investigador debe ser constante e

imaginativo en la selección y ensamblaje de evidencias. Y para que sus resultados

sean considerados verdaderos es necesario que alcancen la mayor generalización

posible19°

Contrasta el trabajo de Bacon, con el antiguo estudio de los primeros principios.

La diálectica de Platón fue un método para estudiar esos primeros principios, y

Aristóteles los unificó en una ciencia denominada metafísica. La investigación

medieval fue ordenada lógicamente por la teología, donde se agrupaban, de

acuerdo con cierta proporción y énfasis las verdades relacionadas con Dios y el

hombre; el hombre y el hombre; y el hombre y la naturaleza. La Ilustración estuvo

dominada por la búsqueda de una explicación racional del universo, y el ser

humano en su conjunto pretendió medirse mediante la fría y clara luz de la razón.

Actualmente, un mundo especializado busca una nueva unidad que pueda dar

dirección y propósito a la vida, ya que la era de la relatividad destruyó las antiguas

normas por las cuales las relaciones humanas con todas las fuerzas del universo y

89
Jesse H. Shera. Tize comp/cal librar/un. Op. cit. p. 57.
190
Jesse H. Shera. 1./bruñes and 11w orgallizalion qfkiim'1edge Op. cit. p. 210.

87
su relación permitían, bien o mal, juzgarlas. El hombre se encuentra inmerso en el

caos ya que la naturaleza se supone en un vacío191

Por eso el misticismo y la metodología del tiempo de Bacon son respuesta a las

preguntas por la acumulación y asimilación de hechos que se dirigen a la

formulación de generalizaciones o universales que extiende, corrigen o verifican el

saber.

Según Shera desde Darwin y Bacon se sabe que la metodología, en su sentido

genérico, es más que un método o sistema de métodos, una tecnología, o un

cuerpo de técnicas. Porque puede involucrar cualquiera de ellos, sin que la

definan. Se trata de un acto intelectual que inicia con la formulación de preguntas y

progresa a través de la examinación crítica de evidencias que son relevantes y

relacionado con la revelación de la verdad que es generalizable y universal. La

meta es el perfeccionamiento del saber humano a través de la persecución de la

verdad, meta dificil de ser alcanzada, pero que debe ser considerada el objetivo

principal de la investigación. Por eso la búsqueda del saber último es interminable

y nunca llega el final de ella, porque siempre existe algún lugar inexplorado. De

cualquier manera no se insta a la desesperación sino se desafía a la iniciativa.

Por otro lado, descrita en términos de sus secuencias de actos es un proceso

intelectual donde un problema es percibido, dividido en sus elementos

constituyentes y analizado a la luz de ciertas premisas básicas; los datos válidos y

191
Jesse 14. Shera. 7/ie cornpleat lihra,-ian. Op. cit. p. 158.

88
relevantes son recolectados; las hipótesis son objetivamente examinadas,

rechazadas, enmendadas o probadas. Los resultados generalizables de este

proceso calificado como principios, leyes o verdades que contribuyen a la

comprensión del ser humano mismo, sus trabajos o su medio ambiente.

De otra manera es la sistematización para descubrir nuevos hechos para grupos

de hechos, o nuevas relaciones entre hechos; mediante la formulación de una

explicación preliminar o hipótesis sujetas a una investigación apropiada para

validarlas o refutarlas (falsarias). La única regia que gobierna a la metodología es

la objetividad' 92 . En ese sentido Shera considera que la experimentación es

posterior a las hipótesis. Por eso está de acuerdo con Pierre Qutier, cuando

considera que la verdadera investigación científica inicia hasta la formulación de

una hipótesis teórica193.

En un intento por profundizar en la concepción y descripción de la metodología,

Shera asevera que es la crítica de los temas indagados, con el fin de determinar su

relevancia; la crítica de la hipótesis, supuestos inteligentes, sobre los cuales la

metodología se basa; la crítica a la evidencia para determinar su relevancia; y el

análisis crítico de los resultados. Por eso la investigación de mayor nivel se

aproxima al arte, al involucrar análisis y síntesis; ya que primero parte el objeto

para estudiarlo, como un artista que analiza el objeto que esta representando, y

después reúne todas las partes, igual al artista que finalmente todo lo plasma en la

92
Jesse H. Shera. I,ihniries and 11w organizalion ()fkflowIedge. Op. cii. p. 211,
Ibídem. p. 209.

89
obra final 194 . Concluye con la aseveración de que la historia de Ja metodología

presenta un continuum de ciclos analíticos-sintéticos, en el cual la vida intelectual

inicia con un análisis donde el objeto de estudio es subsecuentemente sintetizado y

refragmentado para tomar la forma de una nueva unidad. Además, dejando de lado

cualquier tipo de misticismo, la metodología es una respuesta a preguntas por la

asimilación de hechos verificados o verificables, dirigidos a la formulación de

generalizaciones o universales que corrijan o apoyen el saber existente195.

Critica a sus compatriotas por estar preocupados en la obtención de resultados

inmediatos, con lo que rechazan la ciencia pura. Y los bibliotecarios, contaminados

con tales ideas, fallaron en la obtención de los principios básicos de la organización

del saber, su diseminación y comunicación, piedras fundamentales sobre las

cuales la práctica profesional descansa.

De ahí concluye que la metodología es un trabajo sistemático para descubrir

nuevos hechos o grupos de hechos o nuevas relaciones entre hechos; mediante la

formulación de una explicación preeliminar o hipótesis, sujetas a investigación, el

fin de validarlas o\ refutarlas. Entonces la metodología es la base de una disciplina,

al no dejar lugar a la subjetividad, además de que la formulación de sus resultados

son obtenidos con la finalidad de prevalecer. Sin embargo, hay que considerar que

es elaborada por seres humanos, quienes junto con la capacidad de razonar,

cuentan con sus emociones y por lo tanto, subjetividades. Y si el razonamiento o la

194 lhideni. p. 146.


195
Jesse H. Shera. /,zi,vJuc/ion lo librczry scie,,c'. Op. cii. p. 147.

90
observación están diluidos por ¡as emociones, se convierten en sofismas o

dogmas. Eso se da en la bibliotecología, disciplina que en esencia trata de ofrecer

un servicio de seres humanos a seres humanos. Y un ser vivo está lleno de

emociones, lo cual provoca problemas para la aplicación de una metodología

similar a la usada en las ciencias naturales196.

La bibliotecología está relacionada con un cuerpo de saberes sobre el saber

mismo. Sin embargo al estar el saber en constante desarrollo y aumento, es tema

de continuo estudio. Pero como el saber es coordinado e integrado al trabajo

profesional, es un complicado campo de investigación.

Shera estaba plenamente convencido de que desde los primeros momentos de

esta disciplina se proponen sistemas lógicos y la formulación de un método

científico' 97. Tenemos un sistema lógico y ¡a formulación de un método científico.

sabemos con alguna exactitud cómo el saber de este tipo es acumulado y

transmitido de una generación a otra. Muchos filósofos han especulado sobre la

naturaleza del saber, sus fuentes, métodos y límites de validez. Pero el estudio de

la epistemología siempre está contra el contexto del proceso intelectual del

individuo198.

Si es verdad que la metodología es un intento para establecer el nuevo saber,

sin pensar en las posibles aplicaciones prácticas finales, entonces el método

' 96 Jhidem. p. 148.


'97
Jesse H. Shera. L,brarie.s ami ¡he ogai,izaIion of /azowkdge. Op. cii. p. 7.

91
científico es el patrón dominante para la investigación en la civilización

contemporánea y se aplica en áreas que no son fundamentales en la producción

de nuevo saber. Un ejemplo son los recientes desarrollos (métodos estadísticos

para establecer hechos que puedan ser transitorios) que representan adaptaciones

M método científico de pensamiento199.

Shera da una serie de razones para calificar a la metodología en la

bibliotecología. En un primer momento no era primordial en los asuntos tratados en

el área; y cuando hubo preocupación en torno a ella, de manera entusiasta se

tomó de guía al método científico. Además se usaban como modelo métodos

provenientes de las ciencias sociales, que inspirados por el positivismo se basaban

en la estadística, lo que provocó que la metodología fuera asociada de manera

restringida con la estadística.

Esperanzado, comenta que a pesar de todo, los procesos y tecnología usados

por el bibliotecario son establecidos y basados en años de experiencia práctica200.

Entonces como los métodos y técnicas de la bibliotecología se han derivado

empíricamente, no es sorprendente que la investigación en bibliotecología también

es empírica inicialmente. Como resultado, mucha de la investigación

bibliotecológica ha sido del tipo que Bacon llamaba testimonio, las implicaciones

por lo generales son personales y afectan unicamente a lo idiosincrátic0201.

ibidem. p. 15.
Ibídem. p. 57.
200
Jesse H. Shera. 17w comp/ea! librarla,,. Op. cit. p, 151.
201
esse H. Shera. Libraries ai:d (he organization qí knowledge. Op. cit. p. 213.

92
Shera resalta que el carácter empírico de la investigación bibliotecológiCa y su

excesiva dependencia en observaciones locales y datos limitados a una región

geográfica, no propiciaban el descubrimiento de teorías y leyes con un carácter

científico. Provocando que la bibliotecología no desarrollara su carácter científico.

Dado que la bibliotecología al desarrollar un método válido científicamente, ha sido

presa del error que Bacon señalaba- la falacia de la investigación, la naturaleza de

la naturaleza misma 202 . Aunado a lo anterior la bibliotecología es integrativa, y su


práctica debe estar fundada en la percepción y utilización de relaciones time-

binding203.

Al reflexionar sobre la incesante búsqueda de un sistema en la solución de

problemas, Shera retorna a Hertz y Rubenstein y observa que la introducción del

trabajo en equipos de investigación es valiosa para reducir la incertidumbre y

minimizar la posibilidad de error204 . Aunque es bueno aclarar que tal forma de

trabajo no es novedosa, pues tiene precedentes en la historia de la ciencia, como

por ejemplo los trabajos de los biólogos en el desarrollo de la teoría de la

evolución.

En otro plano, al criticar a los más científicos de los científicos de la información

Shera argumenta que pretenden estar en un juego limpio, pero el ruido en sus

sistemas de investigación pueden tener un origen poltergeistlich. Por otro lado

202 1/,iden,t. p. 214.


203
Jesse 11. Shera. ihe comp/caí librarian: and olber essays. Op. cit. p. 58.

93
afirma que en sus intentos tienen problemas para probar si la mecanización es o

no más eficiente y efectiva que los métodos convencionales de almacenamiento

documental.

Al pretender dirigir un sistema para la organización de la administración de

información bibliográfica, de acuerdo con la lógica. Una y otra vez argumentan,

como sostuvo John Stuart Mil¡ en su Method of Difference, que cuando X ocurre

junto con Y, Z también ocurre; pero cuando X ocurre junto con Y, Z no ocurre;

entonces lógicamente se sigue que X y Z están causalmente relacionados. Sin

embargo tal concomitancia no prueba la causalidad, aun cuando se pueda

demostrar que permanece constante en las dos situaciones. Pero en los estudios

sociales es imposible demostrar que Y no varía, dado que las características del

hombre están en continua modificación. Por eso sólo dentro del contexto de un

modelo es posible la lógica de Mi1l 205. De lo cual se infiere que los postulados de

los científicos de la información están en un error al no tomar en cuenta factores

externos a sus modelos.

Shera remata comentando que no existe la seguridad de lo que es realmente la

Razón, pues se sabe que no es más que un eufemismo. Esto es particularmente

visible en la bibliotecológica, por el asombro y la aceptación irreflexiva y acrítica de

la mecánica de la moderna investigación científica 206 de los bibliotecólogos.

204
Ihidein. p. 215.
205
Ihidein. p. 107.

94
Señala que como la solución a los problemas de la bibliotecología, se plasmaron

en determinados patrones durante algunas reuniones de bibliotecarios, provoco

que varios de los métodos bibliotecarios de manera pragmática esten basados en

premisas ad hoc, apoyadas en esos patrones.

Entiende que si la ciencia es un repositorio para el crecimiento de

descubrimientos empíricos cristalizados o economizados en intervalos apropiados

en teorías, principios o leyes que tienen una alta articulación en el grupo

profesional o escuela de pensamiento para comprender la totalidad del fenómeno

con el que se trabaja, entonces la bibliotecología es una ciencia 207 . Comenta la

necesidad de implementar cursos en métodos de investigación y lógica 208.

Considera necesarios cursos de los principios del razonamiento y el método

científico; lógica, preferiblamente Aristotélica y simbólica; y si es posible, algún

trabajo sobre la estructura y naturaleza del lenguaje como un instrumento de

comunicación social209.

La postura de Shera es importante para comprender el debate generado en la

segunda mitad del siglo, entre los bibliotecólogos y los propugnadores de la ciencia

de la información. Sus planteamientos son audaces, sobre todo tomando en cuenta

el transfondo disciplinario que tiene. Es importante su intento por ubicar a la

bibliotecología dentro de la tradición científica al retomar los planteamientos dados

206
Jhide,n. P. 108.
207 Jesse H. Shera. Librar/es and ¡he organizalion of knowledge. 013. cit. p. 162.
2111 Ibidenl.P. 166.
209lhidern. P. 193.

95
por Francis Bacon sobre la metodología. Además reconoce que la bibliotecología

tiene métodos propios, aunque no se deja ilusionar fácilmente al comentar que

esos métodos son esencialmente empíricos.

Desafortunadamente cae en una positivismo hasta cierto punto ingenuo y a

pesar de criticar el excesivo logicismo de los científicos de la información, él mismo

cae en esa postura al resaltar la importancia de la lógica en la enseñanza de los

bibliotecólogos. Otra contradicción como ¡a anterior, es que no queda claro si

critica o resalta la labor empirista de los bibliotecólogos.

De cualquier manera, es importante tomar en cuenta a Shera para ampliar el

espectro de la bibliotecología, pues es un personaje clave para el desarrollo de

esta disciplina en los últimos años. Porque representa un ámbiente de una

bibliotecología que contaba con poca influencia de las tecnologías de información.

En contraparte con Shera, los impulsores de la ciencia de la información, se

caracterizaban por proponer una metodología que usaba modelos matemáticos,

superando el nivel meramente descriptivo de la estadística bibliográfica

tradicional21 ° Con esto llevaron a niveles de cierta sofisticación los iniciales

métodos enseñados en la Escuela de Bibliotecología de la Universidad de


Chicago.

210
José Ma. López Piñero. Op. cit. p. II.

96
En el contexto de 1970, apareció una antología de lecturas sobre metodología

para bibliotecólogos, donde se enfatiza en los métodos de las ciencias sociales por

considerarse apropiados para la bibliotecología. Además se recomienda que los

bibliotecólogos usen métodos de otras disciplinas, pero señala que la falta de una

teoría bibliotecológica única y clara impide el buen desarrollo de la investigación en

bibliotecología, pues sus métodos no están claros 211 . Desafortunadamente no se

propone un concepto claro de metodología.

Además de Shera, otro personaje con un papel protagónico en esos cambios, es

Herbert Goldhor, quién promovió un programa donde estimulaba la conducción de

estudios en los cuales las hipótesis podían ser verificadas y relacionadas entre

variables determinadas de antemano. Para lograrlo impulsó el uso de métodos

estad ísticos212 . En su libro An introduction te scientific research in iibrarianship,

publicado en 1972, dice que el método de investigación científica es efectivo y

factible de trabajar a largo plazo en la bibliotecología.

Concebía a la bibliotecología más que un arte, técnica o un campo de práctica,

por ser un ciencia donde es posible la generalización desde la experiencia,

fundamentos filosóficos o juicios administrativos 213 . Y aseveraba que para ser

ciencia la bibliotecología necesita verdades generales, generadas poco a poco

mediante un trabajo iniciado en un punto particular, basado en evidencias y

211
Reader in research melhods for Iibraria.s-/iip / ed. By Mary Lee Bundy and Paul Wasserman. --
Washington : NCR Microcard Editions, ci 970. viii, 363 p. -- (Reader series in librar)' and information science).
p. 3, 10, 33, 41, 87, 124, 139, 145, 149.
"' A /ibrary. op. el. p. 17.

97
confirmado con observaciones. Lográndolas, da el brinco de arte o técnica a

ciencia o disciplina. Con todo y su optimismo, acepta que la bibliotecología

atraviesa por problemas similares a las ciencias sociales, al ser difícil corroborar

los resultados de la investigación 214 y reconoce que la bibliotecología en la

actualidad, como en la antigüedad, recupera su saber mediante el método de

ensayo y error y no a través del uso de estudios sistematizados en leyes y teorías

científicas. Sólo mediante el uso del método científico de investigación es posible

tomar distancia del método de ensayo y error215.

Considera que desde el siglo XV un nuevo tipo de verificación de los estudios de

los fenómenos naturales fue gestándose y no se basaba en la lógica de relaciones

de pensamiento, presuposiciones o deducciones. En ese tiempo Copérnico,

Galileo, Bacon y otros filósofos naturales desafiaron los dogmas tradicionales y

buscaron la confirmación de sus teorías en el mundo de la naturaleza. Ese método

de adquisición del saber es llamado método científico de investigación, y es

caracterizado por el uso de la inducción, que es la formulación de un principio

general desde un número de casos individuales 216 . Sin embargo acepta que el

método científico no sólo consiste en la inducción, atribuyéndole cuatro

características21 .

213
Charles H. Busha. Op. M. p. 5.
214
Herbert Goldhor. Aii iniroduclion lo scien(ific research in Iihrarianship. -- Illinois, 1972. iii, 203 p. --
(Monograph ; 12). p. 2
215
Herbet Goldhor. Op. cit. p. 6.
21(
Jhjje,,, p. 4.
217 lhidem. p. 5.

98
a) Examina la verdad de una hipótesis218

b) Permite uniformidad en los términos para evitar confusiones, definidos de

manera que una palabra signifique lo mismo para diferente gente.

c) Usa la evidencia como opuesta al testimonio. Por evidencia se entiende los

datos u observaciones, apropiadamente definidas, registradas y reportadas, de

manera que diferentes investigadores pueden verificarlas. Al contrario los

testimonios son las opiniones o premisas no verificables, son elaborados

usualmente por una persona y tomados en condiciones donde es díficil controlar la


situación 219

d) Su naturaleza es autocorrectiva. Como la conclusión de un estudio está limitada

a la evidencia colectada y analizada, se reconoce que es factible modificar o

revisar las conclusiones de los estudios. En las ciencias se insiste en el carácter

tentativo de las conclusiones de cualquier estudio y la pared de las ciencias se va

construyendo ladrillo a ladrillo220.

Reconoce que el método científico de investigación, en la forma de estudios de

investigación, no es aplicable a la bibliotecología. Por eso enumera varias

dificultades para la aplicación del método científico en la bibliotecología:

a) Los objetos de estudio de las ciencias sociales en general y la bibiotecología en

particular son complejos. Sin embargo, cree que el objeto de la bibliotecología no

es más complejo o dificil para comprender que los fenómenos naturales o físicos.

218
Ihidein. p. 11.
2t9 Ihide,n. p. 18.

99
b) La investigación en bibliotecología no puede ser contínua porque está

estudiando el trabajo del hombre, sujeto al prejuicio, provocando que el acto de

observación sea influenciado por el fenómeno.

c) La imposibilidad de la aplicación de experimentos. Pero no es la única vía para

obtener datos y no es usada en todas las áreas de la ciencia natural y física 221.

Concluye afirmando que la factibilidad de la aplicación del método científico en la

bibliotecología sólo podrá verificarse con el tiempo, después de serios intentos de

aplicación del método científico en este campo de estudio222.

Las observaciones de Herbert Goldhor con respecto a la metodología son de

interés, dado que influyeron en el desarrollo de la investigación en bibliotecología.

Desafortunadamente cae en una paradoja, puesto que inicialmente recomienda el

uso del método científico en la biblíotecología, pero después considera que no es

factible saber si es posible aplicarlo en esta área del saber. Entonces, es necesario

que esa incertidumbre la exponga antes de recomendar el uso del método

científico. En Goldhor se nota una excesiva influencia del pragmatismo

norteamericano, influido fuertemente por el positivimo. Por tal motivo, confunde la

validación del saber con la cuantificación.

En 1975 se resaltaba la importancia de los métodos en bibliotecas especializadas

para la mejor comunicación con los administradores de esos centros. Barbara J.

220
Ibidem. p. 22.
221
Ibidem. p. 27.
Petrof consideraba la posibilidad de un acercamiento científico del saber

bibliotecológico223 . Lubomyr Wyna expresó la necesidad de incorporar métodos

estadísticos a la bibliotecología. Al señalar el requerimiento de un conocimiento del

proceso de analísis estadístico de datos cuantitativos al interior de la

bibliotecología. Enunciaba los siguientes argumentos:

a) Las ciencias sociales, de las cuales la bibliotecología forma parte, incrementa la

cuantificación de datos como evidencia sólida para la toma de decisiones.

b) Los bibliotecólogos están siendo desafiados por el aumento de servicios

bibliotecarios, por lo que se necesita el desarrollo de mejores análisis de datos.

En contraparte, Pauline Wiíson promovió la introducción de métodos cualitativos

a la bibliotecología. Pero la oposición a los científicos de la información y su

excesivo uso de la estadística y el método científico en la bibliotecología fue

configurada mejor por Curtís Wright. Él identificó a la bibliotecología en el polo

opuesto a la ciencia aplicada por su estudio de las ideas (información). El sustento

metafísico hace buscar la terra infirma de esa disciplina en la filosofía, reduciendo

su existencia física al significado del tratamiento que se le da. Considera que los

bibliotecálogos cometen un error, siguiendo a la ciencia de información al usar el

método científico. Como resultado se científiza una idea humanística que no puede

ser cientifizada y el único remedio para esa situación es el retorno a sus

fundamentos humanísticos. 224 Basado en argumentos filosóficos, cuestionó la

investigación realizada en bibliotecología. Su visión partía de una dicotomía entre

222
Ibídem. p. 28.
223
A librar y. Op. cit. p. 21.

101
el invisible antimundo de la subsistencia metafísica y el visible mundo de ¡a

existencia física. En su crítica hacía los siguientes señalamientos:

a) Los bibliotecólogos no pueden apropiarse acríticarnente de metodologías de

otras disciplinas y deben desarrollar sus propias estrategias de investigación.


b) La bibliotecología es una tecnología del saber basada en ¡a filosofía, no una

tecnología científica de la acción.

c) La información no puede ser estudiada científicamente ni por los científicos.

En consecuencia, se hacía adversario de la implementación de métodos

empíricos en la bibliotecología. Por eso Busha califica su postura de errónea,

porque es posible emplear el método científico para estudiar una gran variedad de

fenómenos de la bibliotecología. Asevera que la bibliotecología no es metafísica y

por lo tanto no es una antítesis de la ciencia como un sistema de saberes. Por lo

tanto la bibliotecología puede usar métodos provenientes de las ciencias sociales y


naturales.225

La postura de Wrigth es seductora, porque retorna, con mayores bases, al

problema inicial de la caracterización de la bibliotecología: ¿ciencia o arte?.

Desafortunadamente lleva a un nivel excesivo de abstracción la cuestión de ¡a

información, pues los bibliotecólogos no trabajan sólo con entes abstractos

(información), sino concretos (información plasmada en documentos). Quizá si se

224
S. D. Neifl. Op. cii. p. 147.
225 A lihrary. Op. cit. p. 23.

102
matizara o profundizara la idea de Wrigth, es posible lograr una mejor comprensión

del fenomeno bibliotecológico.

En 1976, Shaughnessy al hablar sobre la naturaleza de la metodología,

estableció la necesidad de la implementación del proceso estócastico, modelos

heurísticos y la técnica Monte Carlo. De manera optimista daba la impresión de

que el avance dentro de la metodología en la bibliotecología permitía la madurez

de esta disciplina 226 . Por su parte Vickery enlistaba posibles alternativas

metodológicas a ser usadas, dependiendo de la naturaleza del problema 227. Ya que

los bibliotecólogos necesitan de un método determinado colectivamente para los

propósitos y objetivos actuales de la bibliotecología, el cual pueda ser adaptado a

otras metas relacionadas. Pero en una disciplina relativamente nueva e indefinida

las discusiones sobre metodología inician con muchas dudas.

En ese tiempo se consideraba al método científico un medio para la

sistematización y ordenamiento en el estudio de muchas áreas del saber, sobre

todo en las ciencias sociales. Pero a principios de la década de 1980 se aceptaba

que apenas se iniciaba en la clarificación de las metodologías de la bibliotecología.

Y por eso continúa la recurrente crítica de que la poca preocupación por desarrollar

la metodología en la bibliotecología se refleja en la mínima preocupación por la

enseñanza del método científico a tos bibliotecólogos228.

221
Ihideni. p.40.
227
Ibide.'n. p. 39.

103
En ese contexto Busha considera que los métodos de la bibliotecología pueden

ser retomados de otras profesiones y disciplinas. Aunque cree que la falta de una

teoría adecuada en bibliotecología trae en consecuencia la dificultad para generar

y verificar hipótesis, acepta la posibilidad de la aplicación de métodos científicos

(observación, experimentación y otros métodos) en la bibliotecología. Por eso

anima a usarles en la descripción y explicación de fenómenos recurrentes en

bibliotecolog ía229.

Afirma que los métodos de la ciencia son observación, instrumentos, medición,

experimentación, causalidad y modelos. Y los elementos del método científico son:

variables, hipótesis, intuición, razón, deducción e inducción. Como muestra del

modelo general del método científico de investigación 230 , presenta el esquema que

se muestra en el anexo 1. Y acepta la existencia de varios métodos bibliotecarios

para la adquisición, catalogación, almacenamiento y diseminación de libros y otros

medios de comunicación. Sin embargo considera factible hacerlos más rapidos y

eficientes si se retorna el método científico, pues nota debilidad metodológica en

esos métodos, sobre todo por su omisión del método experimental231

El libro de Busha es interesante como manual para una introducción primaria en

la metodología. Pero para un saber mayor es dificil tomarlo en cuenta sin criticarle,

pues cae en serios errores. Confunde los pasos del método científico, como

228 Ibidem. p. 1-3.


229
Charles H. Busha. Op. cit. p. 5.
230 lbidem. p.9-13.
23
ibídem. p. 7.

104
métodos individuales y a los métodos los reduce a simples técnicas. Si bien acepta

la existencia de métodos de la bibliotecología, les exige algo que no pueden tener:

experimentación. Es una idea excesivamente empírista, pues pretende que todo

método cuente con experimentos para validar sus resultados.

En 1981 fue publicado el libro de O. S. Chubarian, Bibliotecología general. En

principio hace una diferencia entre los métodos usados en la sociedad socialista y

la capitalista, criticando a los últimos por su falta de crítica al sistema social

imperante.

Asevera que las fuentes y las bases metodológicas de la teoría bibliotecaria en el

siglo XX de la URSS están íntimamente unidos al nombre de V. l Lenin, porque a

través de su obra se llega a la conclusión, desde el punto de vista metodológico,

que la biblioteconomía ni se desarrolla aisladamente, ni por vías independientes,

pues está subordinada a leyes generales del desarrollo social y constituye la base

de un organismo social concreto. Entonces fundamentada en la metodología

leninista, la bibliotecología se eleva al nivel de ciencia social contempóranea. Por

eso critica a la bibliotecología desarrollada en los países burgueses, al no estar

basada en una metodología que pueda contribuir a su formación como ciencia

social. Al reconocer que la bibliotecología adolece de métodos propios, anota que

requiere del apoyo de un conjunto de métodos provenientes de otras ciencias,

sobre todo de las sociales232.

105
La postura de Chubarián es rescatable y confluye con otros que ubican a la

bibliotecología en las ciencias sociales y tratan de estudiarla desde la teoría de

sistemas. Desafortunadamente por las características políticas imperantes en su

época, su trabajo está plagado de ideología, lo cual no es malo si se reconoce,

pero él no diferencia un saber científico de una postura ideológica, al creer que la

ideología leninista es científica. De todas maneras es posible retomar varias de sus

ideas para la conformación de un concepto de metodología para la bibliotecología,

como por ejemplo su señalamiento de los aspectos sociales que influyen en el

estudio del objeto de estudio de la bibliotecología.

En 1981 John Maryn decía que los métodos de investigación están más

relacionados con las técnicas que dan un manejo significativo en una situación

determinada, que con técnicas que si bien apoyan una hipótesis no son capaces

de proveer una adecuada explicación de las razones por las cuales un fenómeno

ocurre233.

Norma H. Anderson en su libro Methods of information integration theoy,

publicado en 1982, afirma que los problemas del método experimental no existen

como entidades abstractas, divorciadas del objeto de estudio. Asevera que los

detalles de método y procedimiento no deben tener menor importancia que los

aspectos relacionados con la estructura teórica. Considera que los problemas

metodológicos tienen una relación central con los programas de investigación

2320. S. Chubarian. Op. cit. p. 3,-6, 10-17, 36-56,

106
sobre teoría de la integración de información, dado que esos problemas son

estudiados en el contexto de investigaciones experimentales particulares. Al existir

incertidumbre y faltar sistematización, provoca la necesidad de valorar la

importancia de los problemas metodológicos en la ciencia de la información234.

Sostiene que a pesar de que la metodología es vista negativamente (ya que

sugiere una instancia dogmática de estandarización de procedimientos y datos

correctamente analizados e involucra complejos aparatos y estadísticas

especializadas), es una parte orgánica de la investigación, pues la validez de los

métodos derivan de lbs resultados empíricos. Además, los problemas

metodológicos deben ser estudiados en su propio medio, abstraídos de

aplicaciones particulares, incluyendo aspectos de análisis de regresión,

transformación monótona y estimación de parámetros. Sin embargo existe un

grave peligro porque los estudios metodológicos son tema de desarrollo involutivo

que rápidamente pierden relevancia empírica. Entonces es necesaria una

metodología asentada sobre los patrones productivos. Los diferentes momentos

precedentes sobre la organización cognitiva son entendidos para ilustrar esta

interdependencia entre método y teoría235.

En el mismo año de 1982, Emilia Currás publicó su libro Las ciencias de la

documentación: biblioteco/ogía, archivo/o gía, documentación e información, en ese

233
John Martyn and F. Wiifrid Lancaster. Invesligalive nicthods in ¡ihrary aud information science: an
iji/roduclion. Virginia 1RP, ci 981
Norman H. Anderson. Melhods of ii:forrnazion inlegralion /heoiy. -- New York : Academic Press, 1982.
xviii, 444 p. -- (Information integration theory). p. 1, 348.

107
texto pretendía sentar las bases epistemológicas de las ciencias de la

documentación y en consecuencia, dedica un apartado al método. En ese apartado

trabaja comparando a la ciencia con las ciencias de la documentación.

Considera a la ciencia un cuerpo de doctrina formado y ordenado

metódicamente, donde se aplica un método, al que entiende como el conjunto de

reglas a que deben sujetarse las diversas facultades del alma durante el estudio de

una rama del saber. Además supone el orden que debe tenerse en los actos para

conseguir un fin236. Considera que ambas acepciones contienen dos elementos:

a)un agente externo, reglas, orden;

b) un agente interno, facultades del alma, actos.

A continuación analiza el método aristotélico, el cual supone conocer los hechos,

las causas (material -materia de que están hechas-, formal -forma de las cosas- y

eficiente -efecto que produce-). Al relacionarlo con las ciencias de la

documentación, considera que corresponden de la siguiente manera:

a) Hechos: los datos;

b) Causas: los documentos; éstos estarían divididos:

i) causa formal, tipo de documentos, registro, clasificación y archivo;

u) causa material, el tema de que trata el documento, donde está

implícito su análisis, indízación, almacenamiento, etc.;

iii) causa eficiente, la información que se facilita.

235
Norman H. Anderson. Op. M. p. 349.
236
Emilia Curras. Las ciencias de la documentación. Op. cit. p. 67-70.

108
Posteriormente asevera que si el método se desarrolla lógica y coherentemente

se habla del método científico. Y como la documentación es una ciencia, desarrolla

una metodología propia de toda ciencia, que contiene:

a) Observación: captación del problema, identificada con la pregunta o demanda

de información.

b) Experiencia: lleva a la resolución del problema, comparada con la búsqueda de

la documentación en ficheros, bandas magnéticas, etc.

c) Deducción: análisis del resultado y su exposición, es el análisis de los

documentos obtenidos, la selección de los pertinentes y la comunicación de la

información solicitada. Se trata de todo el proceso de la documentación y la

infomación.

A continuación recuerda que Ramón y Caja¡ habla de tres estadíos en la

metodología utilizada en la investigación: observación, suposición de hipótesis y

verificación. Esos pasos los iguala con el proceso seguido en la documentación. La

suposición o hipótesis es la búsqueda de los datos o documentos supuestamente

pertinentes y sólo al dar la información se verifica si es la que el demandante

necesita. Concluye que la documentación se adapta a muchos de los principios y

teorías de la filosofía de la ciencia y su metodología. Desafortunadamente en la

última parte de este apartado, revuelve la ciencia con la magia y comenta que la

documentación tiene cualidades de ciencia y magia.

109
La noción de Currás es loable al recabar una gran cantidad de información

externa a la bibliotecología y tratar de aplicarla a ella. Pero el exceso de

información le lleva a exagerar o mezclar cosas antagónicas, como el caso de la

magia con el método científico. Por otro lado todavía tiene las nociones de un

método científico rudimentario y menciona autores desconocidos en la filosofía de

la ciencia. Es necesario tener cuidado con las afirmaciones de Currás, pues su

intento por igualar a la bibliotecología con la ciencia en ocasiones se torna abusivo.

Por otra parte Ravichandra 1. Rao considera que la investigación en

bibliotecología se ha transformado con el correr del tiempo. En el momento que

escribió su libro, tendía al crecimiento el uso de la lógica, la investigación científica

y la cuantificación de las actividades bibliotecarias diarias, llevando al desarrollo de

modelos para describir diversos aspectos del uso de bibliotecas. Habla de los

siguientes pasos del método científico:

1. Desarrollo de hipótesis.

2 Planificación de un experimento.

3. Observación y/o colección de datos.

4. Análisis de datos.

5. Examen y desarrollo de modelos


237
6. Interpretación y generalización de los análisis de datos

i. K. Ravichandra Rao, Qucinlitative rnethods for library aid infor?naIion science. -- New York : John
Wiley, c1983. 271 p. p. 3.

110
Afirma que como en las ciencias físicas, los investigadores en bibliotecología

deben conducir investigaciones para comprender los problemas y asuntos en su

área. Los investigadores en bibliotecología toman muchas formas con las cuales

pueden Abordar varios problemas de su ámbito de estudio 238 . Quizá si hubiera

trabajado un libro con mayores expectativas a la de las estadísticas, su aporte

sería interesante.

En 1985 Ronald R. Powell, en su libro Basic research methods for Iibrarians,

considera que los métodos de investigación básica son opuestos a los de la

investigación aplicada. Asevera que la investigación bibliotecolágica puede ser

igual a cualquier investigación científica, si se presentan los conceptos básicos de

manera uniforme. Al vincular la bibliotecología con las ciencias sociales, presenta

métodos provenientes de las mismas239.

Uniéndose a la opinión de Busha y Harte, asevera que una gran proporción de la

investigación en bibliotecología es débil metodológicamente, ya que depende de

observaciones locales y datos limitados 240 . Y de acuerdo con Goldhor declara que

quien aprende el método científico puede comprender y usar cualquier otro método

menos riguroso. Otro beneficio de aprenderlo es la posibilidad de comprender y

1. K. Ravichandra Rao. Op. cit. p. 4.


239
Ronald R. Powetl. Basic research methods for llbrarians. -- New Jersey: Ablex, 1985. x, 188 p. --
(Libraries end information science series). p. ix.
240
Ronald R. Powell. Op. cit. p. 6.

111
evaluar críticamente los reportes de otros. Además de la habilidad para conducir

investigaciones241

Presenta el método deductivo y el inductivo. Cita a Babbie, quien establece que

el método deductivo hace razonar hacia las observaciones y el inductivo hace

razonar de las observaciones. El razonamiento inductivo contribuye al desarrollo de

lo que se conoce como método científico o el método de investigación científica.

Esa aproximación al descubrimiento del conocimiento, inició durante el

Renacimiento y se fortaleció en el siglo XVI. Lo considera el método válido para

resolver problemas y responder preguntas a las que no se le haya respuesta.

Asegura que existe consenso entre varios investigadores sobre el patrón básico

del método científico de investigación, aunque varían algunos de sus elementos.

Leedy describe el método científico como un medio por el cual se descubre la

verdad, de acuerdo con los siguientes pasos:

a) identificación del problema que puede ser la meta de la investigación;

b) recolección de los datos necesarios para solucionar el problema;

c) desarrollo de hipótesis tentativas;

d) verificación empírica de las hipótesis mediante el análisis de datos.

241
Ihidein. p. 7-8.

112
Babbie, que veía el método científico como una combinación de los métodos

deductivo e inductivo, dependiendo de la fase de investigación, presenta los

siguientes pasos del método científico:

a) construcción de la teoría;

b) derivación de hipótesis teóricas;

c) operacionalización de conceptos;

d) colección de datos empíricos;

e) examen empírico de las hipótesis.

Nachmias y Nachmias establece que el proceso científico consiste de siete

estadíos principales: problema, hipótesis, diseño de la investigación, medición,

colección de datos, analisis de datos y generalización. Cada uno de ellos está

interrelacionado con la teoría en el sentido de que afecta todo lo que ella afecta"'.

Los investigadores consideran necesario emplear una variedad de metodologías

específicas, pero los métodos usados en la investigación siguen un bosquejo

general y exhiben características generales iguales. Se tiene en mente el problema

principal y los problemas secundarios, los bibliotecarios pueden considerar

desarrollar una o más hipótesis para guiar el futuro de la investigación. De

cualquier manera al investigador le corresponde decidir la metodología y las

técnicas de colección de datos que usará. Los criterios que reconoce en el método

242
Ibídem. p. 12.

113
científico son los de universalidad, réplica, control y medición 243 . Un proyecto de

investigación que se adhiere al método científico consiste de ciertos estadíos244.

La propuesta de Powell continúa la idea del positivismo, de un método con

características generales aplicables a cualquier área del saber humano. Tal idea ya

era cuestionada por científicos de la ciencia natural y parecía que no se percataba

de ello este autor.

Pero siempre existe oposición a las recetas o pensamientos preconcebidos y en

1986, Michael Harris atacó el positivismo con la intención de replantear los

fundamentos epistemológicos de la investigación en bibliotecología y ciencia de la

información, para fundamentarlo en la teoría crítica y la hermenéutica. Bosquejó la

tendencia del positivismo por permanecer en la superficie de las apariencias, ya

que se describen los fenómenos pero no se explican. De ahí identifica el objetivo

de esa ciencia con el instrumentalismo -el uso de leyes y teorías para predecir y

controlar 245 . Resulta un trabajo trivial sobre preguntas incorrectas, reducido a la

técnica y administración. Al referirse al actual rechazo del positivismo por parte de

las ciencias sociales en general, considera que es porque las ciencias sociales

simplemente no pueden sustentar la división esencial entre el sujeto y el objeto de

investigación central en la epistemología positivista246.

243Ihideni. P. 14-15.
244
Ibidem. p. 15, 42.
Berkeley es identificado como uno de los representantes conspicuos del instrumentalismo.
246
S. D. Neili. Op. cit. p. 147. Michael H. Harris. Op. M. p. 211-252.

114
Crítica que cuando aparece la ciencia de la información, los bibliotecólogos creen

que el problema es una metodología primitiva y lo único que se necesita es

modernizarla247 . Y caracteriza lo que a su juicio es la epistemología prevaleciente

en el ámbito bibliotecológico estadounidense, basada en el positivismo.

1. La bibliotecología es una disciplina genuina, pero inmadura, ante las ciencias

naturales, por lo que es necesario seguir los procedimientos de la ciencia,

aplicables a la bibliotecología. Esos son mediciones cuantitativas y numeraciones

intrínsecas en el método científico. Reducen el complejo fenómeno a sus

elementos básicos y examinan las vías en cuales es posible interactuar.

2. La bibliotecología debe ser vista como un conjunto de hechos gobernado por

leyes generales. Descubrir esas leyes y teorías es el objetivo principal de la

metodología.

3. La relación de esas leyes y teorías con la práctica, es esencialmente

instrumental. Consistente en que algunas de las leyes y teorías están para

explicar, predecir y controlar un estado adecuado por la simple aplicación del

conocimiento teóric0248.

4. El bibliotecólogo debe mantener una neutralidad estricta en su trabajo de

investigación 249

La crítica e ideas expresadas por Michael H. Harris, son interesantes, pues se

inscriben en la tradición incorforme de la bibliotecología. Desafortunadamente su

247
Ihidc'mt. p. 211.
24K j ,
P. 219.

115
propuesta epistemológica está reducida al ámbito de los Estados Unidos de

América. Quizá si sus expectativas fueran amplias, su propuesta abarcaría otros

terrenos de la bibliotecología.

En ese mismo volúmen de Advances in Iibrarianship, Nancy Freeman Rhode

apuntaba la necesidad de entrenar a los bibliotecólogos en el uso de los métodos

de las ciencias sociales. Comenta que a principios de 1960 se amplió el uso de

sofisticados métodos, especialmente de análisis estadístico y los métodos ya

existentes se mejoraron. Aunque faltaba la construcción de una teoría adecuada y

una pobre conceptualización, pues por si solos los métodos no aceleran el

desarrollo de una disciplina.

Habla de tres métodos de las ciencias sociales, retomados por los

bibliotecólogos: entrevista, observación y análisis de fuentes documentales250 . Dice

que el método hipótetico-deductivo desarrollado en las ciencias naturales, con su

énfasis en el análisis estadístico de datos recolectados en el desarrollo de un

experimento, fue tomado por las ciencias sociales y adaptado por los

bibliotecólogos para estudiar las necesidades y usos de la información. Al notar las

debilidades de ese método en el estudio de la información, se inclina por usar un

método holístico, donde se tomen en cuenta aspectos externos a la estadística.

Confía en que es posible combinar los métodos cuantitativo y cualitativo, con el fin

de lograr una mejor investigación y se inconforma por la polarización existente en

249
Ibídem. p. 220.

116
el uso de ambos 251 . Comenta la posibilidad de aplicar una etnometodología.

Concluye afirmando que la metodología que propone está basada en una

construcción teórica, alternativa al absolutismo de la teoría de la información. Al

tratar con el uso de la información, por parte del sujeto252.

La propuesta de esta autora es audaz, pues se atreve a proponer un método

donde sea factible estudiar el fenómeno de la información desde varias

perspectivas. Por otro lado pone el dedo en la llaga, cuando observa que el

problema de la metodología bibliotecológica es la falta de una adecuada teoría y

conceptualización. Pero ¿será necesario tener construida la teoría y los conceptos

para iniciar la investigación? No es problema, ya que la construcción de teorías y

conceptos se da gracias a la investigación. Por lo tanto la metodología ayuda a

constituir y es construida por la teoría y los conceptos.

Martha Hale L. dice que los métodos empleados en el diagnóstico del uso de la

información deben evaluarse conforme al método científico. Para ello son

necesarias técnicas, presentadas en el marco conceptual para la examinación de

las metodologías253. Por eso marca la diferencia entre los resultados de la ciencia y

el sentido común. De la ciencia dice lo siguiente:

1) Construye teorías sobre la relación.

25') Freeman Rhode. "Information need". En: Advances iii librarianship y. 14 / ed. by Wesley Simonton.
-- Orlando : Academic Press, 1986. xi, 320 p. 49-73. p. 53.
Ihiden,. P. 59.
251

252
Ihiden,. p. 65.
Hale, Martha L. Adminislraiors and information: a review qf meihodologies used for diagnosing
in/ornicilion use. En: Advances in lihrarianship y. 14 / ed. by Wesley Simonton. -- Orlando : Acadernic Press,
1986. xi, 320 p. : 75-99. p. 76

117
2) Controla las circunstancias en las que las relaciones son verificadas

empíricamente.

3) Valora la certeza de la verificación de una relación, sin ser influido por agentes

externos al objeto de estudio254

Tipifica los siguientes métodos:

a) Métodos intuitivos: es el acto o facultad de conocer sin el uso de un proceso

racional, es el conocimiento inmediato. Capacidad para conocer algo sin hacer un

estudio profundo. Está relacionado con el método heurístico, tan vilipendiado en la

ciencia255

b) Métodos impresionistas: el estadío entre intutivo y sistemático, es denominado

impresionista. Incluye técnicas más sistemáticas que el anterior. Dependen de la

experiencia existente256.

c) Métodos sistemáticos: el adjetivo sistemático sugiere que las técnicas son

planeadas con anticipación. La información profesional no sólo identifica el

propósito del estudio diagnóstico sistematizado, también planea los pasos para el

análisis y colección de datos. Es cercano a los métodos científicos257.

La anterior tipología es ingenua, dado que esos métodos están relacionados con

pasos del método científico. Pero lo que sí es de llamar la atención es su idea de

valorar los métodos, con el fin de verificar su validez para la investigación.

254
Martha L. Hale. Op. cit. p. 79.
255
/hidcnz. p.. 80.
256 lhidern. p. 84.
257 Ibídem. P. 90.

118
Prasnas Zunde al hablar de leyes en su obra Information science laws and

regularities: a sutvey, las entiende como blandas. Considera que en el ámbito del

estudio de la ciencia de la información existen pocas regularidades observadas

que puedan ser satisfactoriamente verificadas y confirmadas. Razón por la que las

hipótesis de esos estudios no pueden ser sometidas a una rigurosa

experimentación. Por eso decide referirse a todas las observaciones reportadas de

relaciones empíricas como regularidades y no leyes. Esas regularidades se basan

en mediciones estad ísticas 258 . Es importante el matiz que da a las leyes, porque

acierta al señalar que en la bibliotecología no es posible generar leyes, como las

de las ciencias naturales, esa observación debe ser tomada en cuenta por los

bibliotecólogos.

En 1988, en el marco del seminario international Seminar Qn information

Research, celebrado en Yugoslavia, se vertieron interesantes puntos de vista.

Neva Tudor e ¡van Mihel, establecieron que la metodología no varía, pues la

misma era aplicada en la investigación teórica y aplicada. Por otro lado advertían

que la aplicación de métodos multidisciplinarios e interdisciplinarios, y

particularmente su interpretación, si no es aplicada con el mayor cuidado y

comprensión, puede dirigir a conclusiones incorrectas y causar efectos

indeseables259 . En el mismo seminario Warren Hans consideraba que los métodos

258
S. D. NeilI. 01). cit. p. 140.
259
Neva Tudor-Silovie and ¡van Mihel. "Foreword". En: In/ormalion resarch: research nieihods in Iibrary
aiid infor,naíion .vcience / ed. by Neva Tudor and ¡van Mihel. -- London : Tayor Graham, c`1988. -- 261 p. p.
2, 4.

119
innovativos pueden ser usados en el avance de los objetivos de investigación

apropiados al principal enfoque del programa260 . Asimismo P. Williams-Harvard y

Linda Stewart expresaban su preocupación, en el sentido de construir sobre bases

metodológicas sólidas a la profesión261.

Por su parte Michael H. Hill, aludiendo a la historia, afirma que la investigación

científica floreció más de dos milenios atrás, en China y los Balcanes. Sin

embargo, en Europa la investigación científica fue despreciada por los romanos y

extinguida en la Edad Oscura, salvo por los esfuerzos iluministas de Carlomargo.

Hasta el Renacimiento y la Reforma, en los siglos XIV y XV, nuevamente floreció la

investigación científica racional y objetiva. Últimamente en Europa se han

preocupado en observar y fundamentar conclusiones racionales que el observador

debe aceptar como verdad última, aun cuando difiera de la observación262.

Zaheta Barsic presentó un proyecto donde usó metodología proveniente de las

ciencias sociales para aplicarla en la preparación de los cuestionarios y

procesamiento de la colección de resultados. Asume que la categorías descriptivas

para la evaluación de la accesibilidad son método de procesamiento de

documentos y los directamente conectados a la categoría del profesional

260
Warren J. Hans. "The historial development of the research programme of the Council on Library
Resources". En: informa/ion research: research ,nethods in lih'ary and informa/ion sck'nce / ed. by Neva
Tudor and Ivan Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p. 25,
261
P. Williams Harvard and Linda Stewart, "Problerns of disseminating research information". En: I!?formation
reseurch: research meihods ¡ti libran' and informa/ion science / ed. by Neva Tudor and Ivan Mihel. -- London
Taylor Graham, c1988. --261 p. p. 27.
262
Michael W. Hill. "Jnvolvement in research and development". En: informa/ion research: research meihods'
Iü libra!) and informa/bu science / ed. by Neva Tudor and Ivan Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. --
261 p. p. 43-45.

120
característico del bibliotecólogo y especialista de la información está después de la

colección de datos263 . Blaise Cronin dice que ¡os métodos cualitativos se combinan

con los cuantitativos para la colección, análisis y presentación de datos con el fin

de proveer el contexto donde se mueve el vendedor del producto y da una

propuesta para su implementación en la bibliotecología 264 . Varios de los autores

señalaban el uso de métodos cuantitativos y cualitativos, en la bibliotecología y

ciencia de la información, provenientes de las ciencias sociales265.

En 1989, Daniel Benedikts, propuso el uso del análisis hermenéutico en la

ciencia de la información. Considera que los métodos cuantitativos estadísticos

pueden ser usados solamente en aquellas áreas donde la percepción humana de

una situación no es factor elemental. La presencia y validez de la percepción

humana es una clara indicación para la aplicación de métodos hermenéuticos

fenomenológicos. En 1990 Julian Warner recuerda que el ámbito establecido en la

ciencia de la información es social y no natural y que las metodologías para la

263
Zaheta Barsic. "Availability and use of international organizations documentation in Yugoslav libraries".
En: Information research: research n?ethods iii Iibrary and informa/ion science / cd. by Neva Tudor and ¡van
Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p. 82, 85, 89.
264
Blaise Cronin. "Approaches to market research". En: informa/ion research: research melhods ¡ti Iihrary
andinfornzalion science / ed. by Neva Tudor and Jvan Mihel. -- London: Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p.
130.
265
Christine L. Borgman. "Human factors in the use of information systems: research methods and results".
En: informa/ion research: resewc/, nie/hods in lihrary aiid informa/ion science / ed. by Neva Tudor and ]van
Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p. 140, 142, 158-159. Anaska Ferligoj. "Cluster analysis
of citation histories from an institutional setting". En: informa/ion rescarc/z: research melhods iii Iibraiy and
informa/ion science / cd. by Neva Tudor and Ivan Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p. 187,
197. A. W. Glanzel Schubert and T. Braun. En: Informa/ion research: research meíhods ¡ti Iihraiy and
informa/ion science / cd. by Neva Tudor and ¡van Mihel. -- London: Taylor Graham, e 1988. -- 261 p. p. 204.
Radostev Todorov. En: Informa/ion researc/z: research mncihods in libraiy and informa/ion science / cd. by
Neva Tudor and Ivan Mihel. -- London : Taylor Graham, c1988. -- 261 p. p. 213. Miroslav Tudjman. "A
literature measure of scientific communcation: cokcitation anaysis of Master theses in information science in
Yugoslavia, 1961-1984". En: Informa/ion research: rcsearch mc/hods in library and informa/ion sciencc / cd.
by Neva Tudor and ¡van Mihel. --London : Taylor Graham, c1988. --261 p. p. 226-227, 244.

121
investigación modeladas en las ciencias físicas y la tecnología son débiles y poco

productivas en la ciencia de la información 266. Esos son ejemplos de la inquietud

por introducir nuevos y diferentes métodos a la ciencia de la información, con la

finalidad de convertirla en una disciplina científica. Paralelo a esa búsqueda de una

metodología adecuada, está la batalla con el positivismo lógico en la

bibliotecología.

En 1990, en Research methods in libra,y and information science studies, se

sugirió adicionar, en la investigación avanzada, metodologías actualizadas y de

interés al objeto de estudio 267. En ese mismo tiempo Constance Ann Mellon,

propuso los métodos naturales. En un recuento de la confrontación de las dos

tendencias reconocidas en la investigación de las ciencias sociales, identifica a

quienes con el positivismo usan métodos cuantitativos con el positivismo,

considera que ponen un énfasis exagerado en Ja cuantificación, olvidando que la

bibliotecología está centrada en el sujeto. En contraparte pone a quienes usan

métodos cualitativos, con la tradición naturalista, quienes se preocupan por el

sujeto, además de que dice que se trata de una forma de pensar, más que una

metodología de investigación. Comenta que los métodos cualitativos se usaron por

primera vez en 1940.

Critica que en la bibliotecología, en la educación e investigación, se ponga

énfasis en el uso de métodos cuantitativos, cosa que a su juicio reduce el entorno

2,6
S. D. Neili. Op. M. p. 145-146.

122
de esta disciplina. Además anima a la incorporación de otros métodos

provenientes de la antropología y etnología. También reconoce que ningun método

tiene preferencia por sí mismo, sino que depende del objeto de investigación 268.

Michael Brittain considera que los que se oponen al uso de metodologías

foráneas tienen razón si se refieren a un solo método de la investigación científica -

hipótetico deductivo. Pero hay variedad de los métodos y paradigmas para la

adquisición del saber en las ciencias descriptivas, cosa retomada en la ciencia de

la información.

Los autores anteriores son ejemplo de las amplias posibilidades de enriquecer

los métodos de la bibhotecología. Es indudable que se debe tener cuidado en qué

métodos se aplican, pero ello no debe restringir a los bibliotecólogos a métodos

estadísticos únicamente.

En la conmemoración del X aniversario de la fundación del Centro Universitario

de Investigaciones Bibliotecológicas (CUIB), la Doctora Elsa Barberena

consideraba la necesidad de dar una formación sólida en procedimientos

estadísticos a los estudiantes de bibliotecología, o cuando menos exigir bases

mínimas de conocimientos matemáticos a los aspirantes a la maestría en

bibliotecología. Señaló que tener esos conocimientos ayuda al estudiante a mejorar

Research meihods in /ihrar y and infornialion scíence sfudk's / ed. by Margaret Salter. -- London : LA,
1990. x, 182 p. p. viii.
Constance Ann MeHon. Nciluralisiic inquiryfor lihrary sck'nce: melhod.s and applicalionsfor research,
e'a1uaiion, and teching. -- New York GP, 1990. -- xii, 201 p. -- (Contributions in Iibrarianship and
information sicence; no 64). p. xiii-xvi, 1-5, 18, 139-141.

123
su metodología. En su aseveración se refleja la creencia de que la metodología

está basada en las matemáticas. Además aseveró que la bibliotecología es una

disciplina multifacética en los métodos que utiliza y las disciplinas que examina269.

La idea vertida por Elsa Barberena está inserta en la idea tradicional positivista,

donde sólo lo cuantificable es válido como saber científico.

La visión actual que priva en la bibliotecología norteamericana con respecto a la

metodología, es posible notarla en Buyers and borrowers. En este libro el autor

sostiene que la disciplina bibliotecológica no es más que un cuerpo de técnicas

empíricas y eclécticas, las cuales son derivadas de las metodologías y contenidos

de las ciencias sociales, puras y aplicadas sobre bases ad hoc. Por esa razón, a Ja

disciplina le falta un duradero cuerpo de teorías para proveer bases firmes en la

solución de problemas de bibliotecología. Se debe admitir que es necesario

apreciar el estado elemental del conocimiento en la bibliotecología. Y también es

urgente la definición de los teoremas básicos sobre biblioteca y usuarios, desde lo

cuales se progresará a un estado más avanzado de conocimiento y comprensión

de los problemas y oportunidades que deben ser encarados en la planificación,

provisión y evaluación de los servicios bibliotecarios270.

Concluye que los conceptos de usos nuevos y repetidos como los aplicados a las

bibliotecas, invitan a una investigación más fuerte en una escala mayor e intensiva,

269
Edición conmemorativa del X aniversario del CUIB / comp. Estela Morales Campos ' y Elsa Ramírez
Leyva. -- México: CONACLJLTA: CUIB, 1992. 2v. p. 79-80.
27()
Charles D. Ernery. Buyers and borroivers: ihe applicaiion of consunwr lheory lo the sindy of lihra,y use. --
New York The Haworth Press, 1992. --xix, 188 p. -- (Haworth library and information science). p. 1.

124
para proveer bases empíricas para el desarrollo de futuras aplicaciones y mejoras.

Un objetivo de este proyecto es definido como una metodología que pueda ser

usada convenientemente para alcanzar esa meta271.

En 1992, en un libro donde recopila diferentes artículos publicados por ASLIBI

Samuel D. Neili, comenta que es complicado desarrollar pruebas para argumentar

en cuestiones relacionadas con fenómenos de las ciencias sociales. Y como la

ciencia de la información es un fenómeno de corte social, tiene esa problemática.

Por esa razón dice que los resultados de investigaciones basadas en métodos de

las ciencias físicas tienen poco impacto en las ciencias de la información 272 . Señala

que el dilema del área de los métodos de investigación en la ciencia de la

información, radica en que la creación y uso de la información es complejo,

impreciso y subjetivo. Por esa razón la medición cuantitativa no puede tratar sus

principales problemas, que se ubican en las relaciones humano-humano, humano-

máquina y humano-lenguaje, ya que para ser medibles los fenómenos deben ser

observables y los aspectos vitales del trabajo de la información son cognitivos y

afectivos. Entonces NeilI hace el recuento del uso de la estadística y critica el

exceso de enfásis puesto entre los bibliotecólogos273.

Expresa que el dilema arte-ciencia existe en las ciencias sociales y se refleja en

los métodos de investigación, mas no en el fenómeno estudiado. Sugiere que los

factores culturales pueden contribuir a la tensión entre métodos cuantitativos y

271
Charles D. Emery. Buyers and borrowers, ibidem. p. 150.
272
S. D. Neili. Op. cit. p. 140.

125
cualitativos y el dilema de hacer cualquier investigación en el campo de la

bibliotecología y ciencia de la información. Propone aplicar en el análisis de sus

objetos de estudio los diferentes métodos de las ciencias sociales, ya que influyen

aspectos culturales274

En la obra de Neili, se apuntalan aspectos que merecen atención, como la

dicotomía arte-ciencia, y para este caso la visión de forjar y trabajar métodos que

no se circunscriban a la estadística.

Robert M. Losee decía que los profesionales de la información deben adoptar

nuevos métodos a su situación. Recomienda el uso de métodos de investigación

para descubrir cómo un problema puede ser resuelto (o ha sido resuelto) para

entonces encontrar o diseñar la metodología o procedimiento que pueda resolver

el problema de manera efectiva. Asevera que el más importante elemento en la

adquisición y desarrollo del saber científico es el método usado para investigar

preguntas planteadas por el investigador, método similar al propuesto por los

griegos como mayeutica275.

En el marco de un curso sobre metodología para bibliotecólogos, Miguel Ángel

Rendán propuso el método diálectico, con el que se puede hacer uso de diferentes

vertientes metodológicas, sin caer en un eclecticismo desafortunado o en extremos

273
Ibideni. p. 141.
274
Ibidem. P. 149-155.
275
Robert M. Losee and Karen A. Worley. Research and evalualion for i,forma1ion professionals. San Diego
Academic Press, 1993. xi, 239 p. -- (Library and information science). p. ix, 13.

126
que impidan el buen desarrollo de la investigación 276 . Y al tocar en su libro la

fundamentación metodológica, advierte que el objetivo es analizarlos métodos que

se adecuan al objeto de estudio de la bibliotecología, cuáles son y cómo se

aplican 277. Asimismo señala algunos de los principales métodos que deben

analizarse, para determinar su aplicación en la bibliotecología. Entre ellos

menciona al lógico-deductivo que se utiliza para clasificar y catalogar los

documentos; el hermeneútico, empleado para la interpretación de documentos; y

los métodos estadísticos usados en las investigaciones de camp0278

Recientemente Antonio García Gutiérrez, valora los diferentes aportes

metodológicos de otras disciplinas a la bibliotecología, pero advierte de las

confusiones generadas por el uso de los mismos. Preocupado por esa situación

urge a situar las fronteras del objeto de estudio de la documentación, con la

finalidad de conformar una metodología adecuada279.

Son varias las ideas sobre metodología expresadas en la literatura

bibliotecológica. Y es satisfactorio detectar el interés de los miembros de esta

disciplina en reflexionar y opinar sobre ese asunto. Con ello dan muestras de que

es un debate interesante y no ocioso, pues ayuda a fortalecer la disciplina. En el

siguiente capítulo se retomarán las ideas vertidas en este capítulo, para ver si es

posible generar un adecuado concepto de metodología en la bibliotecología.

276
Miguel Ángel Rendón. "Metodología..." Op. cit. p. 27-29
277
Miguel Anhel Rendón. "Bases teóricas..... Op. cit. p. 31.
278 lbidem. p. 31-32.
279
Antonio García Gutiérrez. Op cit. p. 15-16.

127
4. Reflexión en torno al concepto de metodología bibliotecológica.

De acuerdo con lo expuesto hasta este momento, tomar una postura

reduccionista con respecto al concepto de metodología en la bibliotecológica es

peligroso, dado que las posiciones existentes son diversas y presentan una amplia

riqueza conceptual.

Con tal idea en mente, en este último capítulo, con una actitud crítica, primero se

explorará cuáles elementos conceptuales de importancia puede aportar la filosofía

de la ciencia en la conformación del concepto de metodología manejado en

bibliotecología. Se remarca la actitud crítica, ya que se tiene conocimiento del

esfuerzo antecedente por retomar un discurso científico para la bibliotecología, sin

embargo no se tomaban en cuenta las características únicas de la bibliotecología,

que la hacen diferente a otras disciplinas y por ello no se logra un discurso propio.

En segundo lugar se retoman elementos valiosos, expuestos por diferentes

autores en bibliotecotogía, pues no es posible menospreciar el esfuerzo de los

bibliotecólogos, cuyas aportaciones fortalecieron el desarrollo conceptual de la

disciplina.

Hasta el momento, en los capítulo 2 y 3, se revisaron diferentes posiciones en

torno al concepto de metodología, tanto de la filosofía de la ciencia, como de la

bibliotecología; toca entonces el momento de retomar los aspectos que apoyen la

conformación de un concepto de metodología para la bibliotecología.

129
4.1 Elementos sobre el concepto de metodología en la filosofía de la ciencia.

De la filosofía de la ciencia es factible tomar en cuenta a todas las vertientes

representadas en ella. En una postura diálectica, similar a la propuesta por Miguel

Ángel Rendón 280 , se deben revisar los diferentes puntos de vista expuestos para
retomar los adecuados. Aunque entraña el peligro de caer en el eclecticismo o

provocar la confusión del lector, pero evita el otro peligro del dogmatismo y el

apego a una sola vertiente.

De la tradición filosófica es posible retomar la lógica, con mayor sofisticación con

el paso del tiempo, útil en el trabajo clasificatorio de los bibliotecólogos y

susceptible de ser usado en la conformación de una teoría adecuada para la

bibliotecología. La retórica es seductora para ofrecer trabajos impecables y de esa

manera el bibliotecólogo pueda tener presencia en ámbitos externos al suyo. La

herméneutica es otro elemento, pues en la catalogación y asignación de

encabezamientos de materias el bibliotecólogo debe echar mano de ella.

La era que corre del Renacimiento al siglo XIX, dejó como legado el inductivismo,

criticable en algunas de sus partes, sobre todo en sus pretensiones de llegar a

conocer la verdad última y su sistematización mecanicista del método. Pero loable

en lo que respecta a su insistencia de probar las teorías propuestas mediante

280
De acuerdo con Miguel Ángel Rendón, con ese método diálectico es posible retomar de las diferentes
propuestas existentes, elementos que fortalezcan el programa de investigación propio, sin caer en un
eclecticismo desafortunado o posturas extremistas que entorpezcan el desarrollo de la disciplina. Retomado de
una conversación con el autor y de: Miguel Angel Rendón Rojas. "Metodología de la investigación en

130
hechos. Otro aspecto, es el uso de la medición del objeto al momento de la

investigación, pues de esa manera se conocen profundamente en algunos de sus

aspectos. La posibilidad de experimentar puede intentar dejarse de lado

inmediatamente, sin embargo es posible realizarlo, sobre todo en áreas de la

bibliotecología, donde no estén comprometidos elementos sociales. Es

imprescindible mencionar a las corrientes del siglo XIX (especialmente positivismo

y marxismo), las cuales tenían el sueño de alcanzar la verdad absoluta y a la vez

trataban de ser críticos ante el saber de su tiempo. Sobre todo, ante el pesimismo

posmoderno que abruma al hombre moderno, es necesario levantar las nuevas

utopías, para el siglo siguiente. Y, qué mejor si se intenta eregir un sueño guía

para esta disciplina.

Las corrientes de este siglo son diversas y sus aportaciones son las siguientes:

La idea verificacionista del Círculo de Viena es atrayente pues exige al científico

demostrar que sus resultados son reales. De esa manera es posible evitar fraudes.

Desafortunadamente esa propuesta en algunos casos es dificil aplicar en la

bibliotecología, aunque se debe tomar en cuenta para exigir el sustento de las

ideas expresadas. Otro punto que es importante es la insistencia de la concepción

heredada en presentar de manera metódica los resultados de la investigación a los

miembros de la comunidad epistémica.

bibliotecología". En: Investigación Bihliok'cológica: bibliotecología, archivología, documentación e


in,forn,ación. y. 10. no. 21(1996): 27-29.

131
De Popper es imprescindible su escepticismo ante la inducción y su postura

crítica de las diferentes teorías. Si algo es necesario en la bibliotecologia es la

postura crítica. Pues como se observó en el segundo capítulo, una de las críticas

recurrentes era que se retomaban acríticamente los métodos de otras disciplinas.

A Kuhn se le debe la idea de paradigma y una visión revolucionaria de la ciencia.

Pero el elemento a tomar en cuenta es cuando señala que ¡a metodología es de

acuerdo al paradigma bajo el cual se trabaja. Es vital señalarlo, pues llevándolo a

la investigación, evita tomar cualquier método, sin importar si es posible aplicarlo al

objeto estudiado y según la teoría desde la que se estudia.

De lmre Lakatos se puede tomar su idea del núcleo duro y blando de un

programa de investigación. Es indispensable formar en la bibliotecología un núcleo

duro, que sería su esencia , el cual no permita los cambios por las modas. Y junto

con ello permitir la flexibilidad necesaria de manera que no se estanque.

Sobre lo expresado por Paul Feyerabend es indiscutible la atracción provocada

en el lector. Sin embargo se deben tomar con cuidado sus aseveraciones, porque

ello provocaría echar por la borda varios de los avances logrados hasta el

momento en la bibliotecología. A lo que indiscutiblemente se le debe hacer caso es

a su deseo de tener un método que permita la creatividad del bibliotecólogo, sin

permitir su anquilosamiento, tanto en maneras de realizar una investigación, como

en temas a los que pueda dirigir su escrutinio.

132
Por tanto entre los elementos que es posible retomar para la conformación de la

conceptualización tenemos que: la metodología puede verificar, hacer el análisis

mediante la falsación, tomar el(los) método(s) que sea(n) aplicable(s) al objeto de

estudio, generar el núcleo duro y blando de una disciplina y conjugar la creatividad

para poder realizar estudios diferentes o aun opuestos al paradigma dominante.

4.2 Elementos sobre el concepto de metodología en la literatura

bibliotecológica.

En la revisión de los autores expuestos en el tercer capítulo, es de notar la pobre

o nula reflexión sobre la metodología bibliotecológica, pues la mayoría de los

trabajos que tocan el tema, se centran en la descripción de los métodos y técnicas

a seguir o recomendables para la Bibliotecología o al reflexionar sobre el tema,

parten de una visión positivista.

Entonces, algunos bibliotecólogos tienen la idea de la existencia del método

científic0281 , vía única, sobre la cuál, la validez de los productos de la investigación

se apoya para darle a las diversas disciplinas status de ciencia (el método

científico propuesto en Bibliotecología, pretende tener características del usado en

las ciencias naturales, enraizando su tradición desde Galileo Galilei y Francis

2 Charles H. Busha. Ibidem. p. 5. Goldhor, Herbert. Ibideni. p. 9. A lihraiy science research reader and
bibliographic guide. ed. Charles H. Busha. Colorado Libraries Unlimited, 1981. 201 p. p. 1. Octavio G.
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Seminario preConferencia IFLA sobre educación para la investigación e investigación para la educación.
Bogotá: ALEBCI, 1983. 2v.: 49-67. p. 59.

133
Bacon, aunque se basa en el propuesto por una corriente teórica de las ciencias

sociales282).

283
Pero los planteamientos sobre la metodología de la ciencia que han

sustentado la posibilidad de la inexistencia del método científico único, lleva a

cuestionar el concepto de método bajo el cual se trabaja en la bibliotecología.

Además, la investigación en bibliotecología se realiza mediante una gran

diversidad de métodos 284 o, en realidad cada quien hace la investigación como

considera conveniente sin seguir método alguno, y sin saberlo se está

implícitamente de acuerdo con la postura del anarquismo metodológico propuesto

por Paul Feyerabend. Sin embargo, la reflexión en torno a la metodología

bibliotecológica, se ha planteado en pocas ocasiones 285 en el ámbito

bibliotecológico.

""En especial se sigue la escuela de Estados Unidos, apoyada en la creencia de que toda investigación debe ser
comprobable y siguiendo la utopía de la perfección de los números, proponen varios métodos estadísticos
(aunque por el seguimiento que se les da, parecen técnicas), mediante los cuales, a su juicio, es posible
comprobar la validez de las investigaciones, y (de manera prácticamente mágica) se refuerza la cientificidad de
la disciplina en la que se trabaja. No por ello se debe proponer el rechazo de los métodos estadísticos, pero se
debe ponderar su uso, de acuerdo a lo que se esté trabajando. A library science resecirch reader aiid
hihliograp/zic guided Jbidcn,. p. 21-22. Blaise Cronin. "Approches to inarket research". En: Informa/ion
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Newton-Smith. La racionalidad de la ciencia. Barcelona : Paidos, 1987. 309 p. p. 141, 153.
284Charles D. Ernery. l3uyers and horrowers lite application of consunzer /heory lo ¡he study of lihraiy use.
New York : The Haworth Press, 1982. 188 p. p. 1.

134
Por otro lado, la metodología de la bibliotecología es, la mayoría de las

ocasiones, construida por personas con formaciones diferentes a la

bibliotecológica. Quienes aplican los métodos aprendidos en sus disciplinas de

origen 286 , o, los bibliotecólogos retoman métodos provenientes de otras disciplinas.

En este sentido, un problema en torno a la metodología bibliotecológica es saber si

los métodos usados por los bibliotecólogos han sido retomados de manera

arbitraria de otras disciplinas 287 . Incluso cuando dichos métodos sean aplicables a

la bibliotecología no se han comprendido a fondo y su aplicación se hace sin tomar

en cuenta las circunstancias de la bibliotecología. En ocasiones, el interés sólo

está en reproducir un bello método, cuando en realidad es una técnica lo que se

estaría poniendo en operación 288 . Por lo anterior cabría aceptar la posibilidad de

una asimilación de los métodos foráneos 289 , como complemento y apoyo a los

métodos ya existentes y usados por los bibliotecólogos en la conformación de su

disciplina. Eso, si creemos en la existencia de una metodología bibliotecológica, en

donde se entiende metodología como el conjunto de métodos o procedimientos

usados en una actividad o disciplina en particular.

285
Un caso, pero con un enfoque kuhniano, es el artículo ya referido de Susana Sander "El problema..." Op.
ci'.
286Como Miguel Angel Rendón, que propone el método dialéctico, con el cual es posible hacer uso de
diferentes vertientes metodológicas, sin caer en un eclecticismo desafortunado o en extremos que impidan el
buen desarrollo de la investigación. Retomado de una conversación con el autor y de Miguel Angel Rendón
Rojas. "Metodología..." ibidein: 27-29.
287H. Curtís Wright. "lnquiry is science and librarianship". En: .Jonrnal of Lihrary Hisloiy. no. 13 (1978): 250-
264.
2 Al estarse aplicando de manera algorítmica, sin posibilidades de modificación.
29 Hay varias propuestas en ese sentido y se puede ejemplificar con: Constance Ann Mellon. Natural/suc
inquiiyfor libia); scie,,ce . ine//wds and app/icalion for re.earch, eva/ ya/ion and /eaching. New York : GP,
1990. 201 p. I. K. Ravichandra Rao. Quanuitauive meuhodsfor library and jnforniaujon scicnce. New York
John Wiley, 1983. 271 p.

135
Sin embargo, a pesar de lo criticable, de las posturas de los diferentes autores

expuestos en el capítulo tres, es importante resaltar la preocupación existente

desde los primeros momentos de la bibliotecología, por conformar una metodología

adecuada. A esto se suma que existe una postura fresca, que intenta diversificar

los métodos de esta disciplina, como implementar la hermenéutica, para no quedar

sólo en la mera recopilación de datos, sin crear o recrear el saber.

Es importante resaltar que algunos de los autores revisados consideran

necesario conformar la metodología con base en una epistemología sólida. Y esa

epistemología debe ser generada con la ayuda de la metodología. Ello lleva a una

acción que cuenta con apoyo recíproco entre la metodología y la epistemología.

Otro punto, es el reconocimiento de los bibliotecólogos de la existencia de una

metodología en la bibliotecología, desde los primeros intentos por darle un carácter

disciplinario. Tienen razón cuando afirman que esa metodología debe revisarse y

actualizarse conforme a las necesidades imperantes en un momento determinado.

En ese sentido es válida su preocupación sobre la poca profundidad de los

métodos seguidos tradicionalmente en la bibliotecología. Lo cual lleva a apuntar la

necesidad de implementar métodos que profundicen en el estudio del objeto de

estudio de la bibliotecología. Se debe añadir la posibilidad de trabajar conforme a

la metodología estipulada por los bibliotecólogos profesionales. Sin dejar de lado la

separación entre el aspecto profesional y disciplinario de la bibliotecología.

136
Lo anterior no debe llevar a los bibliotecólgos a no retomar métodos de otras

disciplinas. Lo que se requiere es tener una actitud crítica hacia esos métodos de

manera que se evite retornarlos sin valorarlos y adecuarlos a las necesidades de la

bibliotecolog Ea.

Se debe tener bien presente que se está trabajando en una ciencia, por lo tanto

los métodos aplicados deben ser reconocidos en dicha ciencia. La pregunta que

surge es: ¿cuáles son esos métodos?. La respuesta posible es que se trata de

aquellos métodos con los que se estudia un determinado objeto de saber, de

manera sistematizada y los cuales permiten generar un saber válido y tal proceso

sea posible reproducirlo en otros momentos.

Pero para evitar peligros de dogmatismos metodológicos, se hace necesario

quitar la idea de un sólo método capaz de generar ciencia. Por lo tanto la idea del

método inductivo como el método de la ciencia no debe ser erigido como verdad

absoluta. En este sentido es importante la postura de NeilI y Shera cuando resaltan

el aspecto social de la bibliotecología, que lleva a la dificultad de encerrar su saber

en un modelo.

Indudablemente existe el consenso del papel central de la metodología en la

bibliotecología. Es una idea que no debe ser desechada, pues si se hace, se corre

el riesgo de tener un saber desordenado y sin la posibilidad de poder agruparlo

para consolidar a la bibliotecología. En lugar de ello se caería en la fragmentación

caótica, que no permite avances sustanciales.

137
4.3 Propuesta de concepto de metodología para la bibliotecología.

Ante el estado del concepto de metodología en la bibliotecología, mostrado con

antelación, es necesario formular un concepto fundamentado en la etimología y

descripción. Además se deben tomar en cuenta las propuestas de los metodólogos

de ¡a ciencia y los diferentes autores bibliotecólogos que han escrito sobre

metodología. Por esa razón, el concepto presentado a continuación reune esas

características.

En este trabajo se toma una postura no extremista, se considera que el método

científico no existe per se y no puede ser exhaustivamente especificado en un

sistema articulado de reglas. Su existencia depende del proceso seguido por los

científicos en su trabajo cotidiano, pues usan ciertos procedimientos bajo los

cuales regulan su trabajo (no quiere decir que el seguimiento estricto de esos

procedimientos hará válidos tos resultados de la investigación o les da categoría de

conocimiento científico). Entonces, se habla de un método científico de acuerdo al

contexto en el cuál está ubicado el investigador. Pues el lenguaje único y científico,

además de las supuestas reglas del método científico son convencionales y

transformables290 . Por tanto, el método científico es el conjunto de procedimientos

seguidos por el(los) científico(s) en la investigación para justificar la verdad de

teorías yio modelos que intentan representar la realidad, pero no es universal,

aunque sí diferente en cada área del saber.

290 Gérard Fourez. La cons/rncció,, del conocimiento científico. lbide,n. p. 26, 110, 116. W. H. Newton-Smith.
La ,acjona/idad de la deuda. Ibidem. p. 141, 153, 229-230, 250, 290-292. Sebastián Alvarez. Ibidem. p. 166.

138
El concepto de metodología bibliotecológica puede referirse al estudio del

método y/o los métodos usados en la bibliotecología; al método y/o conjunto de

métodos de la bibliotecología; la aplicación de un método o métodos en la

bibliotecología. La razón de ese(os) método(s) es que a través de él, el

bibliotecólogo genera y refuerza la teoría y modelos bibliotecológicos.

A esto se suma el hecho de que la metodología es un elemento vital en la

conformación de una disciplina (aunque no necesariamente le de carácter de

ciencia) al darle rigurosidad y sistematizar su investigación y quehacer cotidiano. El

conocer y comprender la metodología de la ciencia es de suma importancia para

no encajonar la visión metodológica en una sola vía, sino ser abierto a las

diferentes posibilidades, analizarlas de manera crítica y retomar los elementos que

puedan enriquecer a a bbiiotecología. Esto, porque en varios de los trabajos sobre

metodología en la bibliotecología revisados, da !a impresión da que lo sustano do

matcdofo; adica er aplicación de adecuados métodos de medición

(vinculados especialmente con la estadística), dejan de lado elementos


291
:::IPUILdl]Lub pata la melodología de la ciencia y que son útiles para la

metodología en la bibliotecología. Además, poco se tome c ccnte c e de

de os métodos de medición, no son el único apoyo para realizar

investigación.

139
En un segundo nivel, el método científico en la bibliotecología se debe

implementar de acuerdo al contexto de esta disciplina; pues se trata del conjunto

de procedimientos seguidos por los bibliotecólogos, aunque son diferentes en cada

área de esta disciplina. Por ejemplo: en la bibliometría se usa la estadística; la

clasificación hecha mano de la teoría de conjuntos y la lógica; en los

encabezamientos de materia se usa la hermenéutica, etc. Además los métodos

usados en la bibliotecología no es posible restringirlos a un conjunto exhaustivo de

determinados métodos, aunque es posible identificar los de uso más común y las

áreas donde son aplicados, para sugerir una tipología que pueda regir la

investigación bibliotecológica.

Con respecto a la segunda acepción y ya fijada la posición respecto a la

ontología del método científico, puede decirse que los métodos de la ciencia no

son un conjunto acabado de determinados métodos. Aunque existen varios

métodos identificados como útiles para la ciencia: deductivo; inductivo; analítico y

sintético; observación; sistemas formales, modelos y representación de los hechos;

la medida; hipótesis; probabilidad; axiomático; de concordancia; hipotético-

deductivo; experimentación; comprobación o corrección; y el de prueba y erro r292

29
'Como ejemplo, el análisis efectivo de los datos obtenidos en la investigación, pues la investigación científica
no sólo se trata de la descripción de un fenómeno y la manera como llega a realizarse el trabajo estadístico en
hibliotecología, sólo se remite al aspecto descriptivo.
292Eduardo Primo Yúfera. Introducción a la iiri'estigación científica y tecnológica. Madrid Alianza Editorial,
1994. 399 p. (Alianza Universidad). p. 22-29. Gérard Fourez. La construcción del conocimiento cienlfico.
Ibidem. p. 26-29, 32. Marx W. Watofky. Introducción ci la filosofía de la ciencia. 3a ed. México Alianza
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6-7, 233-234, 240-241, 243-244, 246-250, 253, 273. Roberto Torrett. E/ método axiomático. En: La ciencia:
estructura y desarrollo / de. C. Ulises Moulines. Madrid : Trotta, 1993. 234 p. (Enciclopedia Iberoamericana
de Filosofla 4): 89-110. p. 89, 107. W. H. Newton-Smith. La racionalidad de la ciencia. Ibidem. p. 24,
31.33, 242.

140
Por lo tanto existe una gran diversidad de métodos en la ciencia y el científico

hecha mano de ellos, de acuerdo al contexto en el que está ubicado y el tipo de

investigación en la cuál está involucrado.

Indudablemente, es necesario hacer estudios con mayor profundidad sobre este

tema. Esta tesis pretende inscribirse dentro del gran proceso que tiene como meta

la conformación de la epistemología bibliotecológica. Sólo resta esperar que otros

tomen el reto para la discusión. De lo cual se pueden deprender disensiones y

acuerdos que pueden enriquecer los avances de la epistemología bibliotecológica.

141
CONCLUSIONES

Varios asuntos se expusieron a lo largo de la exposición de esta investigación. En el

primer capítulo se expusieron las diversas propuestas en torno a la conformación de una

epistemología para la bibliotecología. En el mismo resaltaba la necesidad de trabajar

diferentes líneas para lograr una epistemología adecuada para bibliotecología, entre

esos elementos resaltaba la conceptualización de la metodología en la bibliotecología.

Ello llevó al segundo capítulo, donde se presentó un concepto general de la metodología

y se revisaron los antecedentes históricos de la metodología en la filosofía de la ciencia.

Pero como era necesario revisar lo realizado en la bibliotecología, en el tercer capítulo,

se presentaron propuestas representativas de la bibliotecología en torno a la

metodología. Con los elementos expuestos en el segundo y tercer capítulo se llegó a

conformar una propuesta de concepto de metodología de la bibliotecología, expuesto en

el cuarto capítulo.

Las conclusiones de este trabajo son las siguientes:

- Es factible enunciar un concepto adecuado de metodología para la bibliotecología,

retomando a la filosofía de la ciencia y la literatura bibliotecológica.

- La tipología de los métodos usados en bibliotecología es posible establecerla, ya con el

concepto presente. Aunque para lograrlo es necesario un nuevo trabajo destinado

exclusivamente a la formación de esa tipología.

143
- Sí existen métodos desarrollados exclusivamente en la bibliotecología y tienen su

propia rigurosidad. En trabajos sobre métodos usados en las diferentes áreas de la

bibliotecología, se pueden valorar sus características profundamente.

- La aplicación de métodos de otras disciplinas a la bibliotecología es posible realizarla,

dadas la comunicación con otras áreas del saber, sólo se necesita evaluarlos

críticamente.

- A pesar de todo, existe una tradición histórica que sustenta la metodología en la

bibliotecología.

144
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155
ANEXO

Modelo general del método científico de investigación:

rState
Genera'
LProblem

Conduct
Literature
Search

State
Specific
Probem

Design
Methodology

Gather
Data

Analyze
Data

Report
Results

Polish and
Ramify
Hypotheses

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