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Exposición del capítulo 16 titulado: El misterio del cristo cristiano o del dios personal.

Por: Juan David Díaz Paniagua.

La critica que Feuerbach ha ido siguiendo ha notado la necesidad de delimitar lo que es


la religión cristiana y diferenciarla de otras religiones, este capítulo delimita lo que es la
religión cristiana mediante la muerte del Dios abstracto, del Dios del entendimiento, la
hora del deceso de la afirmación pura, el Dios que gime, el que impone mandatos y
leyes y que encuentra su fin en el cristianismo, el cristianismo subsana la angustia del
dios judío que solo impone la ley, mediante el ejemplo vivo de cristo, cristo es la
satisfacción del anhelo, la necesidad suplida, el deseo satisfecho.

Pero ¿realmente logra satisfacer a la humanidad? ¿Logra liberarla de su sufrimiento?


Cristo ¿es el grito de alegría por la satisfacción? O más bien ¿el auto-consuelo de la
humanidad como mecanismo de la liberación de la angustia? Precisamente en esto
ahonda Feuerbach desde su consideración positiva de la teología como antropología.
Para la exposición de los temas he decidido establecer una división de cuatro partes del
texto, la primera la he denominado el “sentimiento como esencia” la segunda “la
esencia del sentimiento” la tercera “realización de la esencia del sentimiento” y la cuarta
“la imaginación en la esencia del cristianismo”

A) El sentimiento como esencia:

La primera línea nos muestra de entrada la esencia del cristianismo, Feuerbach


comienza el capítulo con una reducción del dogma cristiano ¿Qué otra cosa es el
cristianismo sino aquello de lo que recibe su nombre? el sentimiento es el cristianismo,
porque cristo es el sentimiento, el sentimiento realizado, los deseos del corazón
realizados son el dogma real del cristianismo, esta reducción a que la esencia del
cristianismo no es otra cosa que la esencia del sentimiento viene desde capítulos
anteriores, las mismas imágenes, los mismos santos ya trataban de ocultar a ese Dios
que conservaba la teología como ser del entendimiento, ese Dios en ultimas no
representa nada concreto, y es que precisamente la particularidad del cristianismo reside
en esta reducción.

La consecuencia es que la trinidad se desmorona ante una sola persona, ante aquel que
satisface plenamente el sentimiento, porque como dirá Feuerbach más adelante: “solo él
(cristo) corresponde al anhelo de un Dios personal, solo él constituye una existencia que
corresponde a la esencia del sentimiento, solamente en él se acumulan todas las alegrías
de la imaginación y los sufrimientos del sentimiento”. Pero ¿Cómo es que el
sentimiento necesita ser realizado? Si la esencia del cristianismo es la esencia del
sentimiento ¿Qué es entonces el sentimiento? Para aclararlo es necesario examinar lo
que constituye el sentimiento.

B) La esencia del sentimiento:

El sentimiento del hombre, el que constituye la esencia del cristianismo nos dice
Feuerbach le es más agradable ser redimido que redimirse a sí mismo, ser pasivo que
actuar ,él no se mueve a realizar lo que como tal quiere, él desea ver realizados sus
requerimientos, este sentimiento es una inclinación que incita al hombre a ver sus
deseos satisfechos fuera de sí más que a satisfacerlos por sí mismo, no se ama a sí
mismo, prefiere verse amado por otro, en el caso de la religión el sentimiento despliega
su inclinación de verse amado por otro en Dios, en cristo.

Pero el sentimiento que aspira ver todos sus anhelos resueltos en otro no es consciente
de que en la religión es él mismo, el sentimiento se determina a si mismo pero no quiere
reconocer que se determina a sí mismo y por eso su autodeterminación la ve en otro, su
pasividad consiste en la inversión de las relaciones entre el hombre y eso en otro en lo
que subsana su necesidad de realización, por eso en el sentimiento “aquello que es
pensado es lo que piensa y lo que piensa es lo pensado”, así logra satisfacerse, sentir que
sus deseos fueron realizados objetivamente, esto es característico de la sensibilidad, por
el contrario de la racionalidad que se auto- determina.

Por contraposición a esta autodeterminación es que Feuerbach equipara al sentimiento


con una naturaleza soñadora, en el sueño el que duerme es el que sufre el sueño y lo
hace como si él fuera otro, aun sin saber que fue el quien creo esas condiciones, esta
creación del sentimiento es el autoengaño del sentimiento, soñar es tomarme como
objeto en otro, se toma como un ser diferente a si mismo aquel que sueña, hay una
duplicación de lo real, duplicación de la realidad que el sentimiento también efectúa, lo
determinado no se identifica con lo determinante, sufro lo que yo mismo produzco.

Si el sentimiento es como el sueño, la religión cristiana esta permeada por esta


pasividad en tanto que ella misma es el sueño del sentimiento, ella es la realización de
sus deseos mediante un Dios concreto, pero no solo la religión es realización del
sentimiento, es probable que otras teorías o dogmas que partan del sentimiento humano
también puedan tender a esa enajenación, es necesario la revisión de esas teorías, pero:
¿hasta qué punto nuestra actual noción de utopía (en caso de que parta del sentimiento
humano) no es una enajenación de la conciencia con la petición formal del
desenmascaramiento de la enajenación? ¿Hasta qué punto lo que consideramos activo,
auto-determinado, no es también pasivo?

La naturaleza del sentimiento se le opone al entendimiento en tanto que identificadora


de su ser en lo otro, el entendimiento solo sabe afirmar “yo pienso” por eso como dice
Feuerbach el yo de Fichte es indeclinable porque solo toma al yo a partir de la razón,
porque en la oración el sentimiento seria ese sustantivo o pronombre que no es el sujeto
de la oración, y que no puede identificarse con el sujeto mismo en nominativo, ¿y el
corazón? Eso también es el hombre, la religión se nos exhibe como una realización de
ese carácter desecante en el sentimiento pero ¿es realmente válida? Feuerbach lo que
busca después de habernos expuesto esta fenomenología del sentimiento es encontrar el
verdadero tú del sentimiento, en donde se realiza como tal y no en donde se realiza en
otro aparentemente, para ello primero describirá la realización del sentimiento en la
religión.

C) Realización de la esencia del sentimiento:

Cristo en la religión realiza lo que el sentimiento humano desea, al igual que el milagro
cristo es lo soñado, es la voluntad y la acción juntos, el redentor y también el milagro
llevan a cabalidad lo que el sentimiento pide, en el plano natural el milagro es la
satisfacción inmediata del deseo del sentimiento humano físico y es inmediata porque se
opone a la actividad natural, la cual solo llevaría a cumplimiento estas necesidades de
los hombres de manera ardua, fatigante, cristo igualmente en el plano moral es la
realización de esas necesidades morales del hombre, oponiéndose a la actividad moral
del hombre racionalista; el milagro es la actividad natural lo que cristo a la actividad
moral racionalista.

Cristo rompe las cadenas del hombre, libera al hombre de toda actividad de mediación,
ya el hombre no tiene condiciones para ver sus deseos realizados “lo que quieres hacer
ya ha sucedido” dice Feuerbach, todo lo puedo en cristo y es de esta manera como el
sentimiento en la religión es una especie de fenómeno psíquico porque en primer lugar
hay un deseo, el sentimiento mediante un proceso de enajenación los satisface
proyectándose en lo otro, como un artificio, un facticius donde eso otro asume el papel
propio del hombre.

En el redentor se cumple la ley, esa ley dictaminada por el entendimiento la cual solo
estaba ahí, afirmada y que cristo lleva a su plenitud mediante el ejemplo, él es el
ejemplo, ahí reside todo el valor del cristianismo, el cristiano sale del estado de
frustración, vence la ley, ¿vemos la ley después de cristo como un mandato? Cristo
cambia esa percepción de la ley, el sentimiento vuelve la ley un camino, la frívola
sombra del mandato una verdad en el ejemplo vivo, la pura abstracción vida; camino,
verdad y vida nada más es el redentor de los cristianos.

En esta oposición de ley y cristo la función del redentor está en el estímulo de los
impulsos del sentimiento que la ley no logra estimular ¿y qué mejor estimulo, que mejor
fuerza que el ejemplo? tal parece que el cumplimiento de la ley es la fuerza mágica del
cristianismo, como el ejemplo parte del sentimiento ella tiene una suerte de capacidad
involuntaria para influir en los hombres, ellos quieren actuar como cristo, pero esta
fuerza no reside en la virtud sino en el ejemplo mismo el cual se pliega ante el impulso
involuntario de imitación, ahí reside el poder, el poder de cristo como ejemplo , la
religión es precisamente esto y esto es su fin ¿Qué es el fin de la religión sino su fuerza?
Dios es la esencia del hombre, realizada en cuanto tal con el fin de que como hombre
“llegue a ser objeto de la conciencia para el hombre mismo”, no obstante la religión
sigue sosteniendo la abstracción, la dogmática que entra en contradicción con lo que la
religión cristiana había conquistado para el hombre.

Pero a cristo se le entiende también como la mediación, la mediación entre dios y el


hombre, esto se muestra en relación con el milagro: el redentor milagroso es un
intermedio entre dios y el hombre en tanto que realiza el sentimiento pero no bajo las
contingencias y peticiones de la naturaleza o la razón, sino que lo hace libre de las leyes
de la naturaleza o de la moral, lo hace mágicamente y mediante las condiciones
favorables para el sentimiento, así pues el milagro es la satisfacción inmediata de los
deseos del sentimiento, libres de labor o de toda imposibilidad de la naturaleza para
cumplirse a plenitud.

La fe es un requisito para el milagro, si crees en la palabra todo se te concederá, pero


esta fe es un milagro en sí mismo, el milagro de Dios en el hombre, de la creencia de lo
que es él, de su palabra, es por esto que en la palabra, liberada de todo obstáculo, se
demuestra que Dios es la esencia del sentimiento.

La muerte de cristo es solo la muerte de lo divino y abstracto en cristo, el padre


abandona al hijo, el hijo deja ese ser alejado porque ya es él el que ha satisfecho el
deseo del corazón y lo ha hecho hasta el extremo, en un primer plano, el visual, el
sentimiento logra cumplir sus anhelos pero necesita más, necesita tocar la llaga, en un
segundo plano, el táctil el sentido más cercano es el que logra corroborar que el deseo se
ha cumplido, por eso es necesaria la crucifixión porque este es el espacio donde se
demuestra en un plano más cercano el deseo pleno, en la sangre y solo en ella se
resuelve a plenitud el último deseo de la religión, se resuelve el misterio del sentimiento
religioso.

D) La imaginación en la esencia del cristianismo.

Con la encarnación rotundamente y para siempre Dios se hace hombre y el hombre se


hace Dios, este proceso irreversible de la encarnación se diferencia del proceso de la
encarnación de los orientales porque en estos la encarnación es una rutina, en el
hinduismo encarnar no es nuevo, esto sucede porque la imaginación es ilimitada, no se
restringe, pero en los cristianos esta imaginación se restringe, solo encarna un ser y ese
ser es Dios pero ¿Quién restringe la imaginación? Y ¿Qué consecuencias trae esto para
el cristianismo?

El carácter de Dios como un ser del sentimiento, como un ser encarnado, lo hace un dios
personal, pero no es cualquier personalidad sino una personalidad exclusiva, una
personalidad única, es única en tanto que, como decíamos es Dios el único que puede
encarnar, la exclusividad exige realidad por la necesidad del sentimiento, por eso para el
cristiano un Dios como naturaleza no le basta, porque el sentimiento requiere ser
también satisfecho en la realidad con una personalidad concreta en el tiempo, la
necesidad surge de la fuerza del anhelo, dice Feuerbach que “ el énfasis con el que se
expresa la unicidad de la personalidad ejerce tal impresión sobre el sentimiento que lo
representa inmediatamente como real” transformándolo en objeto de la imaginación y
de la historia.

Precisamente cristianismo es unión de imaginación y sentimiento, cristo es la unión de


la necesidad del corazón y la libertad de la imaginación, pero ¿cómo es que la
imaginación es libre? ¿No habíamos dicho que estaba determinada por el sentimiento?
Su restricción más que limitación es delimitación la cual permite la personalidad de
Dios, la imaginación sigue el impulso del sentimiento y en él se delimita como una
tendencia practica más que poética o errante, la imaginación no se despliega
desmesuradamente, tiende a lo que tiende el sentimiento, se limita exteriormente (sobre
lo que podría hacer en la naturaleza) y se hace ilimitada interiormente ya que el aparente
obstáculo solo es medio para su despliegue en lo humano, ese despliegue hará lo
perdurable perecedero y lo perecedero perdurable es por esto que la naturaleza depende
de cristo y cristo del corazón.

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