Está en la página 1de 3

ÁREA: TUTORIA

EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE : LOS SEMÁFOROS DE AUTOCUIDADO

PROPÓSITO: Los y las estudiantes reconocen conductas y hábitos saludables en su vida cotidiana,
distinguiéndolos de aquellos que no lo son, a partir de sus consecuencias.
RETO: ¿Cómo puedo desarrollar conductas y hábitos saludables en mi vida cotidiana?

SESIÓN 1: IDENTIFICAMOS SITUACIONES DE RIESGO

Durante las próximas actividades, utilizaremos el


código del semáforo para definir, como equipos, la
mejor manera de responder ante cada situación
presentada. Elegiremos el color verde para
demostrar que estamos de acuerdo, que se trata
de una acción positiva, constructiva o de una
situación que no implica riesgo. En cambio, el color
rojo representa una acción que no deberíamos de
realizar, es una señal de peligro. Si no estamos
seguros, elegiremos el color ámbar / amarillo, y
esperaremos para determinar si finalmente
estamos ante una situación de luz verde o luz roja,
y que valdría la pena conversar al respecto para
tomar una decisión.

Ejemplo:
Álvaro no sabe nadar. Durante un paseo de fin de semana con sus primos, estos le cuentan que la
playa queda muy cerca, y que podrían ir. A Álvaro le gusta la idea y los acompaña. Una vez en la
playa, le proponen una competencia, hasta unas rocas que se encuentran a unos 100 metros de la
orilla. Todos corren para no ser los últimos en llegar. Álvaro también corre y se mete al mar entre los
primeros, pues no piensa ser la burla de sus primos.

Reflexiona:
¿Qué color le asignas al comportamiento de Álvaro?
Le asigno el color ROJO.
¿Por qué elegiste ese color?
Esta en el peligro sin que su familia se dé cuenta al igual que sus primos.
¿Qué puede pasar con Álvaro?
Se podría ahogar ya que no sabe nadar.
¿Cuál sería la decisión más adecuada?
Irse a ese lugar con un adulto, y si no le dejan sería en otra oportunidad.
¿Qué harías tú si fueras Álvaro?
Preferiría no ir a ese lugar si no me acompañan mi familia y poder tener un día en tranquilidad y más no en
desesperación de nuestra familia.

A continuación, lee los siguientes casos y reflexiona respondiendo las siguientes


interrogantes. ¿Qué color le asignas?, ¿Por qué le asignas ese color?, ¿Qué le puede pasar?,
¿Cuál sería la decisión más adecuada?, ¿Qué harías tú si fueras esa persona?

• Alicia siente que tiene suficiente trabajo con asistir al colegio. Por eso, y aunque siente que tiene bastante energía, siempre
que está en casa está acostada, ya sea en su cama o en un sillón de su sala. Sus papás comprenden que ella es una persona
tranquila y que prefiere tener poca actividad, así que le permiten seguir descansando, e incluso se ofrecen a ayudarla si
necesita algo para estar más cómoda. ¿Qué opinan del comportamiento de Alicia?
Yo opino que el comportamiento de Alicia es perezosa para ello ella debe seguir poniendo su empeño en sus estudios y que
los adolescentes no se cansan a la hora de hacer sus obligaciones.
• Carlos piensa que es muy importante reunirse con sus amigos, a quienes aprecia mucho, y conoce desde que eran muy
pequeños. Ellos buscan realizar retos constantes para demostrar quién es el mejor: quién aguanta cargar más peso con sus
manos, quién puede estar más tiempo sin comer, quién puede gritar más alto por más tiempo. Carlos se divierte mucho con
estos retos y siempre quiere ganarlos, aunque no siempre lo logra.

Está mal porque están poniendo en riesgos sus vidas uno se debe querer como son y no los veo como amigos cuando
quieren hacer retos para ver quien es mejor, todos son los mejores en esta vida.

• Daniela ama la lectura, y su tía le ha regalado una colección de 5 libros que la tienen muy entusiasmada. Por eso, ha
decidido leer a partir de las 8.00 a.m., que es cuando puede concentrarse mejor, hasta que sus ojos se lo permitan. Por
ejemplo, ayer se fue a dormir a
las 2.30 a.m. Hoy hará lo mismo. La lectura es apasionante y siente que ha encontrado el
mejor pasatiempo del mundo.
Si, porque dormir hasta muy tarde no es bueno, ya que para estar bien una persona tiene que dormir una cierta cantidad de
horas y no desvelarse para evitar ojeras y cansancio.

• Eduardo es responsable por Argos, su perro, a quien saca a pasear todas las tardes. A Argos le gusta mucho explorar, y
siempre lleva a Eduardo a nuevos lugares. Eduardo sabe que está protegido por Argos, que es grande y podría defenderlo si
se encuentra en una situación peligrosa, así que se deja llevar por él. Ha empezado a conocer lugares que no conocía,
alejándose de su barrio, sin preocuparse, porque Argos conoce el camino.

• Esta situación es muy riesgosa, ya que al explorar lugares nuevos dejándose guiar por su perro, puede llegar a sufrir
algún accidente, y al salir sin autorización o conocimiento de alguna persona adulta, puede llegar a lastimarse en
perderse, y no contar con la ayuda de alguien para auxiliarlo.

Flor ha descubierto hace poco que los alimentos muy condimentados le caen mal. No entiende bien por qué, ya que en su
casa todos aman la comida de sabores fuertes y con mucho picante. Es una costumbre familiar. Y por eso mismo prefiere no
contarles a sus padres, quienes celebran cada vez que ella agrega un poco más de rocoto a su plato. “Ya se me pasará”,
piensa Flor, mientras disfruta del sabor, sabiendo que luego se sentirá mal.

Ella debería contarles a sus padres lo que está sucediendo, sus padres deben entender y preferir preparar su comida de Flor
con menos condimentos ya que si sigue consumiendo ese alimento al tiempo tendría algunas enfermedades.

• Gustavo ha leído que dormir en el suelo ayuda a corregir errores de postura. A él algunas personas lo molestan porque
camina encorvado, así que decide probar esa técnica, y sin que nadie lo sepa, deja su cama y se acuesta en el piso. El primer
día fue terrible. Se levantó con un dolor de espalda muy fuerte. “¿Será que me estoy enderezando?” se preguntó. No sabe por
cuánto tiempo debe durar esta práctica, pero está dispuesto a seguir con ella para que nadie más le diga que camina
encorvado.

Si es una situación de riesgo, porque puede que estas prácticas no sirvan, y solo empeoren su problema y que se encuentre
peor, con dolores musculares, etc.

Nuestro cerebro siempre nos está enviando señales de alerta sobre las posibles
situaciones de peligro a los que nos podemos enfrentar, al igual que en la dinámica
del semáforo, sin embargo, en muchos momentos se ve “nublada” u obstaculizada,
o las ignoramos porque le damos mayor relevancia a nuestros impulsos, emociones
o impresiones, sin dar el espacio necesario para reflexionar sobre cada situación de
riesgo, tal como lo hemos ejemplificado en este ejercicio. Lo interesante es que, una
vez que desarrollemos esta práctica, este proceso puede ser
más rápido y adquiriremos la costumbre de “detenernos a pensar sobre los posibles riesgos” que estas situaciones puedan traer. Se
trata de que vayamos formando el hábito de detenernos brevemente a reflexionar, hasta convertirse en una excelente práctica de
autocuidado.
Actividad:
Identifica algunas conductas que habitualmente realizas y que crees que de alguna forma te pueda afectar. Para ello puedes
trabajar con la Ficha de registro de compromisos, que tiene el siguiente formato:

Dejaré de…. Y empezaré a…

Enviciarme en el celular por mucho tiempo. A leer y ayudar a mi mamá.

Estar en la tele. A ayudar a mi mamá en la cocina y realizar mis tareas escolares.

También podría gustarte