Lo Eterno de la Navidad (4:30 P.M.

)
Juan 1:1-5
Introducción:
 Este es el inicio de una serie navideña en una parte del primer capítulo de Juan.
 Pensemos en esto: Cuando alguien hace algo bueno por ti, siempre es bueno poder
conocerlo, para expresarle nuestro agradecimiento. Digamos que te da un chocolate y
le puedes decir “gracias” y quizás te cae un poco mejor.
 Pero que pasa si, Alguien viene y te da un sustento económico para poder terminar la
carrera, o que pasa si Alguien te da lo suficiente como para poder estudiar una
maestría o lo que necesitabas para que tu negocio no cierre o lo que necesitas para que
tu papa o mama pueda tener el tratamiento necesario en el hospital. No solamente
quieres conocer a esa persona, quieres saber porque su interés en ti, porque ha hecho
eso, porque da tanto de si mismo y porque tu puedes recibir tan maravilloso regalo.
 Lo más increíble es que muchas veces pasamos por alto a Alguien que ha traído para
ti algo mas profundo y más alto que todo lo que te acabo de mencionar, trajo todo un
mundo y no solo eso sino también un nuevo camino y hogar.
 Si paso la vida entera en esta tierra sin conocer Quien ha hecho todo por mí, todo será
un desperdicio. ¿Quién es Él? ¿Quién es Él Eterno de la Navidad?

1. Es el Hijo Eterno:
1.1. El Verbo es Eterno.
Juan 1:1ª “En el principio ya existía el Verbo, ...”

 Antes que algo existiese, Él ya era, ya estaba. Él es eterno. Él ha existido antes del
tiempo mismo. Y Ahí Él tenía una vida llena de infinito gozo en la presencia del Padre.
 Genesis 1:1 “En el principio Dios creó los cielos y la tierra.”
 Él Verbo ya existía antes de la creación, Pero ¿quién es Él? Juan lo llama “El Verbo” o
“La Palabra”. Es una Persona Divina real que ha sido revelada a nosotros.
 En el AT, “La Palabra” da a conocer algo. Su cualidad más importante es la verdad.
La Palabra de Dios es la verdad. Pero además…
 En una biblia en arameo muy antigua, Dios es reemplazado muchas veces por la frase
“La Palabra de Dios”. Este era un título para Dios mismo. Para el tiempo de Juan, la
Palabra no solo describía la verdad, sino era La verdad misma. Como una Persona.
 Y En el NT vemos que Jesús no solo hablaba La Palabra, el mismo es La Palabra.
 Cristo no solo trasmite la Palabra de Dios, sino que toma vida en Él. Él no solo enseña
la Ley, Él es la ley de Dios. Cristo es el Verbo de Dios porque: expresa la mente de
Dios; y revela lo que es Dios al hombre.
 1 Juan 1:1 “Lo que existía desde el principio, lo que hemos oído, lo que hemos visto
con nuestros propios ojos, lo que hemos contemplado y lo que han tocado nuestras
manos, esto escribimos acerca del Verbo de vida.”
  El Verbo, es el Eterno Hijo de Dios, Santo, de inimaginable gloria.
1.2 El Verbo es parte de la Trinidad.
Juan 1:1b “y el Verbo estaba con Dios, …”

 Esto nos muestra que Él era parte de la Trinidad. Dios es uno solo en esencia, pero
existe en 3 personas distintas. Siendo una de ellas, el Verbo, el Hijo de Dios.
 El Verbo estaba con Dios, o “hacia Dios”. Él no solo está mirando al Padre, está
relacionándose con Él, conociéndose en forma perfecta. Y en esa comunión Él tiene
gozo. El gozo que ambos tienen es tan fuerte que marca la mente del Hijo.
 Juan 17:5 “Y ahora, glorifícame Tú, Padre, junto a Ti, con la gloria que tenía contigo
antes que el mundo existiera”.
 El Verbo ha estado en una relación gozosa cercana con el Padre, desde siempre. No
solo es una Persona Maravillosa, sino que estaba disfrutando del mayor gozo posible
dentro de esta relación eterna y maravillosa con el Padre. Pero también…

1.3 El Verbo es Dios mismo.

Juan 1.1c “y el Verbo era Dios.”

 El Verbo es Dios mismo. A pesar de que el Verbo es una persona distinta a Dios Padre,
es también Dios. Es el mismo Ser.
 Nosotros somos Un solo ser y una sola Persona. Pero Dios no. El es un Solo Ser, pero
en 3 diferentes Personas. Y una de ellas es el Verbo, el Eterno Hijo de Dios.
 Filipenses 2:6 “el cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a
Dios como algo a qué aferrarse,”
 Él ya estaba completamente bien con Su Padre, no tenía por qué añadir la humanidad
a su Persona. Sin embargo, Él tomó forma humana con todo y sus limitaciones,
tentaciones y circunstancias. Él se arriesgo a la traición, al rechazo, al abuso y todo
para obedecer a Su Padre y para salvarnos. Él Eterno se hizo el ser humano más débil.

2. Es el Creador Eterno:
Juan 1:2 “Él estaba en el principio con Dios.”

 En medio de esa relación eterna, Dios crea todo lo que existe. En ese momento Él Verbo
ya estaba con Él. El Verbo llevo a cabo la creación...

2.1. El es el Ejecutor de la Creación:

Juan 1:3ª “Todas las cosas fueron hechas por medio de Él,…”

 Todas las cosas, una por una, fueron creadas por medio del Verbo. Él creo todo.
 Pensemos en todo lo que podemos ver, cada insecto, cada animal, cada árbol, cada
montaña, cada partícula de arena, cada estrella gigantesca y cada galaxia, todo fue
creado por el Verbo, por el Hijo de Dios, Nuestro Señor Jesucristo.
  Salmos 33:6 “Por la palabra del Señor fueron hechos los cielos, Y todo su ejército
por el aliento de Su boca.”
 Por El Eterno Hijo de Dios fueron hechos todas las cosas, incluyendo las espirituales,
invisibles a nuestros ojos. Cada ángel y ser espiritual. Fue hecho por Él.
 En Él fueron creadas todas las cosas. Entonces. ¿Quién mejor que Él para decirnos del
porque de la creación? Del porque tu y yo hemos sido creados.
 Pero no solo todo ha sido creado por medio de Él, sino que también ha sido creado
para Él…

2.2 Él es el Centro de la Creación:

Juan 1:3b “… y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.”

 Esta parte podría traducirse así: “sin Él ni siquiera un átomo llego a ser.”. Sin Él nada
podría ni siquiera existir, menos aún tener un proposito. La razón de la perdición
Adán y Eva es que intentaron encontrar sentido y proposito fuera de Dios, y esto no
solo es imposible, es mortal. Trajo la muerte, la separación de la comunión con el Padre
y la maldad entro al mundo.
 El Verbo no fue creado. Es todo lo contrario. Él siempre ha existido y ha creado todo
lo que vemos, ¡Todo existe para Él! ¡Eso nos incluye a nosotros!
 Por Él existe todo. ¿De dónde viene la creación? Del Verbo, ¿A dónde apunta? Al
Verbo. Toda gira en torno a Él. Todo vino a ser para Él. Así que todo encuentra Su
sentido en Él, solo podemos hallar nuestra verdadera razón de ser, en Él.
 Hebreos 1:2 “en estos últimos días nos ha hablado por Su Hijo, a quien constituyó
heredero de todas las cosas, por medio de quien hizo también el universo.”
 Él es la causa principal de todo lo creado. Si todo fue creado para Él ¿Por qué vives
como si todo girara en torno a ti? Por el pecado, el mismo de Adán y Eva. “Yo puedo”
“Yo sé”. Si pensáramos en que Todo es para Él, mi vida sería distinta.
 Entonces Él es el Eterno Hijo de Dios. Y la creación es hecha por medio de Él y para
Él. Pero Él también…

3. Es la Vida y la Luz Eterna:

3.1 Verdadera Vida:
Juan 1:4ª “En Él estaba la vida…”

 En Él está la vida misma. En el AT, vemos que solo Dios tiene vida en Sí mismo. La
vida física que tenemos es una simple existencia, no es la vida de Dios.
 Juan 5.26 “Porque como el Padre tiene vida en Él mismo, así también le dio al Hijo
el tener vida en Él mismo”.
 Esta vida indestructible y verdadera está en el Verbo, en Cristo. Esta vida es santidad,
verdad, amor, etc. La plenitud de la esencia de Dios está en el Verbo. Esta es la
verdadera vida.
  Esta verdadera vida es la fuente o principio de toda vida: física y espiritual. Toda vida
viene de Él. Piensa en esto: Antes de la materia, Ya existía la vida, y estaba en Dios, en
el Verbo. Solo había vida. Vida verdadera y eterna.
 Él no solo es por quien y para Quien todo fue hecho (la creación) sino por medio de
Quien podemos acceder a la verdadera vida (la salvación).
 Juan 11:25 “Jesús le contestó: «Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en Mí,
aunque muera, vivirá…”
 La vida natural es dada por la creación, pero la vida verdadera es dada por la salvación
que se selló con la resurrección. Creer en Jesús es tener vida y cuando alguien posee
esta vida verdadera, tiene una íntima comunión con Dios en Cristo.
 Romanos 5:10 “Porque si cuando éramos enemigos fuimos reconciliados con Dios
por la muerte de Su Hijo, mucho más, habiendo sido reconciliados, seremos salvos
por Su vida.”
 Somos salvados por su vida no solo su muerte. Su vida, es ahora nuestra vida, eterna
y verdadera, a la cual accedemos por medio de la fe. Él es nuestra vida. La verdadera
vida es nuestra en Él desde ahora, pero la experimentaremos totalmente al fin. La vida
eterna está fundamentada en Su resurrección, así que nuestra esperanza es segura. En
Él está la verdadera vida, pero también la…

3.2 Verdadera Luz:

Juan 1:4b “… y la vida era la Luz de los hombres.”

 La luz es a la vez un medio y un objeto para poder ver. Nos capacita para entender el
mundo y dominarlo o comprenderlo, tener luz es poder vivir, trae libertad y
esperanza.
 Salmos 27:1 NTV “El Señor es mi luz y mi salvación, entonces ¿por qué habría de
temer?”
 La humanidad se caracteriza, por lo contrario, por las tinieblas, la maldad y el odio.
Pero Dios es luz, verdad y amor.
 El Verbo nos capacita para entender lo que nos rodea, es luz. Primero, nos capacita al
darnos la posibilidad de entender y descubrir la creación. Nos dio una mente.
 Pero también es luz porque nos revela Su verdadera vida. Ahora podemos entender
el Plan de Dios. Ahora podemos tomar una decisión por fe, entendiendo lo que El
Verbo, Cristo hizo en la cruz y en su resurrección. Su Espíritu nos impulsa, pero lo
hace cuando conocemos esta realidad, la cual debe afectar primero nuestra mente.
 Cristo es la verdadera luz. Da sentido a todo. Solo al conocer a Cristo, nos conocemos
realmente a nosotros mismos, conocemos la verdad y tenemos un sentido de realidad.
 Adán y Eva, intentaron encontrar luz en ellos mismos, al querer ser igual a Dios.
Muchas veces pensamos que tenemos todas las respuestas, que todo lo podemos, pero
así no hallaremos un sentido para esta vida, no hay luz en nosotros. No encontraremos
un verdadero y eterno proposito en nosotros.
 Juan 8:12 “Jesús les habló otra vez, diciendo: «Yo soy la Luz del mundo; el que me
sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la Luz de la vida».”
  Cristo es la luz de los hombres. No podemos comprender nuestra misma existencia
desligados de Él. Él nos muestra el camino, al mismo tiempo Él es la meta. Él es la Luz
de la vida. ¿Seguiremos caminando como a oscuras?

4. Es el Regalo que puedes aceptar:

Juan 1:5 “La Luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la comprendieron.”

 Desde la caída, aquella luz fue anunciada a los hombres. Cristo es la luz y esta luz
resplandece desde el Éxodo con el sacrificio del cordero pascual pasando por
Números, con la serpiente levantada en alto y por todos los libros de la Biblia.
 Aquella luz sigue resplandeciendo en Jesús mismo en el Nuevo Testamento y sigue
resplandeciendo ahora mismo en medio de las tinieblas de este mundo. Las tinieblas,
en este caso, es la humanidad caída y ciega por el pecado y la incredulidad.
 La luz hace notar que hay una decisión humana de nacimiento a favor del mal. Los
humanos aborrecen la Luz, porque esta muestra lo que son en realidad, pecadores.
 La última parte de Juan 1:5 en otras versiones dice: “las tinieblas no la derrotaron”.
Pero normalmente esta palabra tiene que ver con comprender o tomar. Así que lo que
al parecer Juan está mostrando es que la oscuridad no acepta o detesta la luz.
 “… El mundo fue hecho por medio de Él, y el mundo no lo conoció. A lo Suyo vino,
y los Suyos no lo recibieron.” (Juan 1:10-11)
 Las tinieblas presentes aún en medio de Su Pueblo, no lo recibieron. Toda la
humanidad en pecado se resiste activamente a la luz y no la acepta, la rechaza.
 Juan 3:19 “Y este es el juicio: que la Luz vino al mundo, y los hombres amaron más
las tinieblas que la Luz, pues sus acciones eran malas.”
 Los hombres y mujeres en pecado aman las tinieblas. No solo pecan, aman pecar.
Aman creerse autosuficientes, aman mentir, aman la lujuria, aman el chisme, aman el
ganar dinero fácil, aman sus adicciones sean drogas o un deporte, aman lo malo.
 Así los humanos amaron más sus pecados que a Aquel que es la vida misma. Amaron
más la creación que al Creador. Esto los llevo no solo a despreciarlo, sino a pedir su
muerte. Y a sentirse satisfechos al verlo morir. Pensaron que esa luz se extinguiría para
siempre. Odiaban a Cristo, quien realmente los amaba, y los amo hasta darles el regalo
de la salvación si ellos lo recibían, pero “no lo recibieron”.

CONCLUSIÓN:
Juan 12:44-48 “Entonces Jesús exclamó: «El que cree en Mí, no cree en Mí, sino en Aquel que
me ha enviado. Y el que me ve, ve a Aquel que me ha enviado. Yo, la Luz, he venido al
mundo, para que todo el que cree en Mí no permanezca en tinieblas. Si alguno oye Mis
palabras y no las guarda, Yo no lo juzgo; porque no vine a juzgar al mundo, sino a salvar al
mundo. El que me rechaza y no recibe Mis palabras, tiene quien lo juzgue; la palabra que he
hablado, esa lo juzgará en el día final.”

Quiero parafrasear una canción: Ahora, Consideraras a Aquel que se despojó de Su posición
para tomar forma de hombre, Aquel que se volvió hombre y sufrió debilidad. ¿Aquel que se
humillo profundamente, Aquel que desprecio la vergüenza y el dolor para ir a la cruz y
soportar el peso del pecado y la muerte?

¿Tu vida seguirá girando alrededor de ti? ¿Despreciaras el tener vida de verdad?

Recuerda que Él no ha venido a juzgar sino a salvar. Él te creo, Él te conoce y ahora ha venido
por ti, para llevarte a Él y darte una verdadera vida, Una con proposito y eterna, solo debes
aceptar por fe, este hermoso regalo de Salvación.

En la Navidad, hay un protagonista, Cristo. ¿El es el protagonista de tu vida? Si eres un

cristiano, y has estado pasando por un tiempo de frialdad, hoy vuelve a darle el primer lugar
a Cristo. Vive para Él, disfruta de la vida verdadera. Él está esperando. Tu desprecio puede
ser algo de lo que te arrepentirás siempre.

Si anhelas aún vivir para ti, recuerda que aquello que has escuchado, aquello que en tu
corazón ya sabes, es lo que te juzgara aquel día frente a Su trono. Simplemente recibirás
aquello que quieres, estar lejos de Él.

Si tu anhelo es recibir Su vida y Su luz verdadera por primera vez, te animo a que desde hoy
lo hagas. Acércate por medio de una oración por fe al Señor y renuncia a tu vida antigua,
centrada en ti, pide perdón por tus pecados, arrepiéntete y confía por fe en Su Salvación, en
lo que Él ya ha hecho por ti y permite que Él te de una verdadera razón para vivir y recibe
Su vida eterna. Sigue Su Luz y vivirás. Oremos.