Dios Hijo.

Antes de comenzar a enseñar sobre “Dios Hijo”, vamos hacer un efecto

retroactivo para centrarnos en el Dios Eterno, el Creador, y conocer un poco
acerca de su Naturaleza.

Para poder comprender a Dios Hijo, primero es necesario que

comprendamos acerca del Dios Eterno.

Está determinado que quien no conozca de Dios no puede presentarlo. La

fuerza de nuestro servicio al Eterno está en proporción directa del conocimiento
que obtengamos del Ser o el Sujeto que estamos Sirviendo.

El tratar de servir, sin conocer a quien estamos sirviendo es vaguedad y se

cuenta como el delinquir en lo que se hace, y tal acción no trae ningún resultado.

Nuestro Mesías dijo que el Propósitos de la Vida Eterna es conocer al

Creador y al Mesías Ungido. Caso que del cual nos vamos a ocupar en este
congreso.

Juan 17.3.

“3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios

verdadero, y a Jesús, a quien has enviado”.

En nosotros existe una necesidad de nuestro Dios Eterno, de nuestro

Creador, la necesidad de conectar con la Fuente de toda existencia. La vida sin el
Eterno no tiene sentido.

Romanos 14.8, 9.

“8 Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor

morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos. 9
Porque Jesús para esto murió y resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así
de los muertos como de los que viven”.

La vida del hombre no tiene sentido si no la vivimos para la Eternidad, sino

edificamos para la Eternidad.

Estamos hechos para la Eternidad, sin embargo, no todos alcanzarán esta

Promesa. No debemos ignorar que el pecado trajo separación. Separación con el
Creador; por lo que el fin de todo ser humano es la muerte.

1
 Dios no solo es un Creador que no solo Diseñó el Universo, también Diseñó
el mecanismo de Salvación para también darnos Vida Eterna.

La muerte es real y es el fin de todos; pero el Salvador nos ha brindado

Salvación.

Juan 3.16.

“16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo
unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida
eterna”.

El Creador ha diseñado un mecanismo de Salvación. En lo más profundo

del corazón del hombre sabe que hay una esperanza de vida, de resurrección
después de la muerte.

Es verdad que no podemos llegar a una comprensión completa acerca de la

Plenitud de Nuestro Creador, por el simple hecho de que nuestra capacidad es
limitada para poder comprenderlo.

Incluso, las Escrituras Sagradas no son para describirnos como es Dios en

toda Su Plenitud, sino para mostrarnos cómo el Creador se relaciona con
nosotros. Por lo que, Él nos presenta lo que le place revelarnos.

Deuteronomio 29.29.

“29 Las cosas secretas pertenecen a Adonai nuestro Dios; más las
reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que
cumplamos todas las palabras de esta ley”.

¿QUIÉN ES DIOS?

El tratar de explicar el Ser de Dios es algo inconcebible, inexplicable,

abstracto.

El ¿Quién hizo a Dios? Es una pregunta llena de necedad, porque se basa

en la falsa suposición de que Dios viene de alguna parte y esta suposición te lleva
a otra pregunta ¿De qué parte viene? La respuesta es, que esta pregunta ni
siquiera tiene sentido.

Es como preguntar ¿A qué huele el azul? El azul no está en la categoría

de las cosas que tienen olor, así que la pregunta en sí misma es defectuosa y

2
necia. De la misma manera, Dios no está en la categoría de las cosas que son
creadas, o llegan a existir, o son causadas.

Por esta razón, no podemos hablar de la Existencia de Dios. Ya que Dios

no existe. Las cosas que existen, tienen causa y procedencia de creación. Dios no
tiene causa ni procedencia de creación, Él simplemente Es.

Entonces para referirnos a Dios, no necesitamos comprobar su existencia,

sino Su Eternidad Presente.

¿Cómo sabemos esto? Bien, sabemos que de la nada, nada procede. Así
que si alguna vez hubo un tiempo en que no existía absolutamente nada, entonces
nada hubiera podido existir.

Pero las cosas existen. Por lo tanto, puesto que nunca pudo haber habido
absolutamente nada de la nada, algo tuvo que haber, Ser, o estar siempre antes
de la nada, para que de la nada en su Ser, hacer las cosas que existen. Este Ser
que ha sido y ha estado por la Eternidad antes de la nada es a quien llamamos
Dios.

Todo lo que comienza a existir tiene una causa. El Universo comenzó a

existir, por lo tanto, tiene una causa.

La ciencia establece que esta causa apunta a una realidad más allá del
Universo, una realidad Atemporal, trascendente, inmaterial, inteligente. Y es así
como se describe al Creador en las Escrituras.

En lo científico, es imposible estudiar a Dios, Él es abstracto, es un Ser que

no se puede meter en un cubo de ensayo y analizarlo por completo en forma
absoluta.

La Biblia nos da algunos indicios muy minúsculos, pequeños, destellos,

micra y balbuceo de información acerca de la naturaleza de Dios, entre ellas: Sus
Propiedades y Virtudes, la Omnipresencia, Omnisciencia, Omnipotencia, Su
Eternidad, lo Eterno (Atemporal), lo Infinito, Su Justicia, Su Santidad, Su
Integridad, Su Equidad, Su Nombre Propio, Sus Nombres Retentivos y
Calificativos, Sus Obras (Incluyendo Su Creación), sus Proezas y Maravillas, Su
Amor, Su Gracia, Sus Misericordias, Su Paternidad.

Las Escrituras, solo nos asoma ciertas cosas pequeñas de lo Grande que
es Dios. Por lo tanto, el Creador desea que lo conozcamos en los términos que
utiliza Su Palabra.

3
 TÍTULOS DEL CREADOR.

En la Biblia el Creador tiene muchos Títulos: El primer título que la Biblia

utilizó para el Creador es la palabra hebrea “Elohim”.

- Elohim: Este es un término que hace referencia de su Esencia y Plenitud.

Génesis 1.1.

“1 En el principio creó Dios (Elohim) los cielos y la tierra”.

- Elohim es un título que viene de la raíz hebrea “Eloa” que significa

“Poder, fuerza o autoridad”.

Por lo que, Elohim tomado como singular superlativo se traduce como

“Poder sobre todo poder, máxima expresión de autoridad, la fuerza sobre
todo el Universo”.

1 Crónicas 29.11.

“11 Tuya es, oh Adonai, la magnificencia y el poder, la gloria, la victoria

y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son
tuyas. Tuyo, oh Adonai, es el reino, y tú eres excelso sobre todos”.

Falsamente muchos piensan que el término Elohim cuando se refiere al

Creador es el Plural para referirse a 3 Personas de la Deidad.

No hay ninguna parte en la Biblia que afirme esto, sino que el concepto
Elohim es la palabra hebrea para describir “La Suma de las Propiedades,
virtudes y cualidades de la Deidad, no de personas diferentes”.

Elohim se tradujo al español con la palabra “Dios” que es una palabra

tomada del griego “Theos”, que viene de una raíz que significa “Día o luz de
día”. Ya que los griegos comprendían a sus dioses como seres de luz y es verdad
que la Biblia documenta que Dios es luz en 1 Juan 1.5.

Pero la Luz es una sola Propiedad de Dios. Es decir, no lo describe en Su

Plenitud, no le hace justicia a la palabra Elohim en el pensamiento Bíblico.

La Esencia del Creador no está relacionada con luz sino con el término
“Poder, autoridad y fuerza”, por lo que Elohim es un término auténtico y más
apegado a lo que la Escritura quiere presentarnos acerca de nuestro Creador, la
expresión máxima de poder.

1 Timoteo 6.16.

4
 “16 el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a
quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver, al cual sea la honra y el
imperio sempiterno. Amén”.

- Elohim: Aporta una nueva dimensión de Dios de poder, Él se convierte en el Dios

que crea. Su Poder es total y creativo.

- Elohim: Sostiene y contiene la idea de poder creador y gobernador, de potencia y

soberanía.

- Elohim: Es aquel que por Su poderoso poder creó el vasto universo; quien dice y
es hecho; quien hace las cosas de la nada; por cuya palabra los mundos fueron
delimitados de modo que las cosas que se ven fueron hechas de lo que no se
veía.

De este Elohim, Pablo hizo referencia en el discurso que dio en el Areópago a los
atenienses, cuando les hizo mención del "…Dios no conocido…". El Elohim no
conocido. Según Hechos 17.22-26.

Elohim como Plenitud es algo inconcebible, no hay manera de limitar lo

complejo que puede llegar a ser Elohim, por eso debemos comprender que Elohim
es la Plenitud de la Deidad.

LAS PROPIEDADES DE DIOS.

El Eterno nos muestra a través de Su Palabra, Su Carácter moral, su

justicia y misericordia y por supuesto su concepto de amor que son cualidades de
Su Carácter, pero también la Biblia nos muestra las cualidades que lo hacen ser
Dios.

Ser consciente de estas cualidades Divinas nos ayudará a entender cómo y

qué Dios.

Hay cosas que son Propias de Dios, entre ellas la Eternidad, Eterno
(Atemporal) E Infinito.

ETERNIDAD: Es la duración que no tiene principio ni fin. Es el espacio de

tiempo excesivamente prolongado. Lo que es antes, después del tiempo.

Las Escrituras nos hacen referencia de la Eternidad pasada y la Eternidad

futura.

 Dios en la Eternidad Pasada Es.

5
  Dios en el Presente Es.
 Dios en la Eternidad Futura Es.

Por eso se le conoce como el “Eterno Presente”.

En lo que concierne al hombre:

 El Pasado Fue.
 El Presente Es.
 El Futuro Será.

Pero Dios en el Pasado Es, en el Presente Es y en el Futuro Es.

La Eternidad es algo que no puede ser revertido porque trasciende de la

temporalidad misma. Dios es Inmortal y perdura para siempre, no tuvo principio ni
tiene fin.

Salmos 90.2.

“2 Antes que naciesen los montes Y formases la tierra y el mundo,

Desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios”.

El Creador ya era antes del comienzo del tiempo, recordemos que el tiempo
es una magnitud física importante para experimentar el Universo en el que
vivimos.

ETERNO: Es lo que no está sujeto al tiempo. Dios no solo es Eternidad,

también es Eterno. Esto indica que es Atemporal, porque Él esta antes y después
del tiempo y no está sujeto al él.

El Creador no está sujeto al tiempo, sino que lo trasciende, por lo que en

algún momento tuvo que establecer un Principio y para esto tuvo que formar una
emanación de él que pueda interactuar con lo temporal, a esta emanación se le
conoce en hebreo como “Reshit” qué significa “Primicia”.

De ahí que en la Biblia, la primera palabra es “Bereshit” que se tradujo

como “En el principio…”, pero también se traduce como “En primicia…”.

La Primicia en el contexto Bíblico se refiere a los primeros frutos de la

Cosecha y que se toma como ofrenda para el Eterno.

Esto quiere decir que el Creador ofrendó de Sí mismo para crear el

Universo, Él estableció la Primicia.

Génesis 1.1.

6
 “1 En el principio creó Elohim los cielos y la tierra”.
- “En el Principio…”. Tiene que ver con el establecimiento del tiempo.
- “Creó los cielos”. Tiene que ver con el Espacio.
- “…Y la tierra…”. Tiene que ver con la Materia.

Es el Origen del Universo, del tiempo, el espacio y la materia.

INFINITO: Es lo que no está sujeto al espacio, no tiene límites, no tiene

fronteras. Es lo que va más allá de lo más allá.

Salomón dio testimonio de esta verdad haciendo referencia de la infinidad

de Dios.

1 Reyes 8.27.

“27 Pero ¿es verdad que Dios morará sobre la tierra? He aquí que los
cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener; ¿cuánto menos esta
casa que yo he edificado?”.

2 Crónicas 2.6.

“6 Mas ¿quién será capaz de edificarle casa, siendo que los cielos y
los cielos de los cielos no pueden contenerlo?”.

Para mayor comprensión de lo infinito de Dios, voy hacer una comparación

tomando como referencia los dos puntos cardinales por donde sale y se oculta el
sol que son el oriente y el occidente.

Las Escrituras Sagradas datan que estos dos puntos cardinales están
distante uno al otro en Salmos 103.12, “12 Cuanto está lejos el oriente del
occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones”.

Nosotros como hombres, cada vez que damos un paso al oriente o al

occidente más se aleja de nosotros. Nunca lo alcanzaremos. Son puntos
cardinales el cual nunca podemos alcanzar.

Lo infinito de Dios está en que Dios alcanza el oriente y se consigue con el

occidente.

Si alguien quisiera acercarse a una de estos extremos jamás lo puede

hacer, ya que cada vez que intentes acercarte, ellos se hacen distantes, por lo
tanto son inalcanzable.

7
 ESPÍRITU E INVISIBLE: El Creador en su Plenitud es incorpóreo, lo
que lo hace Invisible. Dios le dijo a Moisés lo siguiente:

Éxodo 33.20.

“20 Dijo más: No podrás ver mi rostro; porque no me verá hombre, y

vivirá”.

El término “Rostro” es la palabra hebrea “Paná”, que viene de la raíz

“Panim”, que se tradujo como rostro, pero también significa “Aspecto o
Presencia”.

Por lo que está diciendo que el hombre no puede ver la Plenitud del
Aspecto, la Presencia de Dios porque moriría.

En su esencia plena como Dios, la Biblia nos confirma que es invisible e

intangible y que habita en Luz inaccesible, que nadie lo ha visto.

Timoteo 1.17.

“17 Por tanto, al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio
Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén”.

Podemos leer en las Escrituras que Dios es invisible, ningún hombre puede
ver a Dios en su Plenitud ya que habita en Luz inaccesible.

OMNISCIENCIA: Es lo Eterno y lo infinito del pensamiento y el

conocimiento de Dios. Es lo inculto, el conocimiento presente en Dios en los tres
tiempos: Tiempo Pasado, Tiempo Presente, y Tiempo Futuro.
En relación a la omnisciencia endógenamente están como Propiedad dos
grandes virtudes que son: la “Omnisapiensa” y la “Prognosis”.

 OMNISAPIENSA: Es el conocimiento que Dios tiene del pensamiento de

los hombres, y es parte de la omnisciencia de Dios.
Salmos 94.11.
“11 Adonai conoce los pensamientos de los hombres…”.
1 Corintios 2.11.
“11 Porque ¿quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el
espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de
Dios, sino el Espíritu de Dios”.
Dios sabe todo lo que los hombres piensan a nivel mundial al mismo
tiempo. En la omnisapiensa de Dios puede resolver todos los problemas de los
8
hombres al mismo tiempo. En la omnisapiensa de Dios, no te deja de desatender
a ti para darles atención a otros. Dios no te pone en espera. Sin dejarte de atender
a ti me atiende a mí.
Quien diga y solo piense que Dios se olvidó de ti, es no conocer de Dios en
Su Omnisapiensa. Dios no se olvida de nadie, son los hombres los que se alejan
de Dios. Dios no se separa de nadie, es el hombre quien se separa de Dios. Dios
no se mueve del punto donde está, son los hombres los que se mueven.
 PROGNOSIS: Es el anticipado conocimiento de Dios, que es parte de la
omnisciencia de Dios.

Jeremías 1.5.
“5 Antes que te formase en el vientre te conocí,…”.
Nosotros estábamos en la prognosis de Dios. Permítanme presentarles ésta
hipérbole: “Aunque Dios quisiera olvidarse de ti, no puede”.
Siempre estamos en el pensamiento de Dios, siempre estamos en el cuidado de
Dios.
Salmos 147.5.
“5 Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; Y su entendimiento es
infinito”.

OMNIPRESENCIA: La cualidad de Omnipresente significa que el

Creador está presente en todo lugar.

Dios es inmenso e inconcebible, lo que quiere decir que no tiene medida o

extensión, no está sujeto a limitaciones que el espacio impone. Penetra todo
espacio, está presente en Plenitud en cada uno de los lugares existentes y puede
manifestarse en cualquier lugar.

El apóstol Pablo confirmó este principio de la Deidad.

Hechos 17.27, 28.

“27 para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan

hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. 28
Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros
propios poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos”.

Aquí nos enseña que la Presencia y el Espíritu de Dios se encuentran en

todo lugar.

OMNIPOTENTE: El Creador es la causa primera, absoluta e infinita

necesaria y suficiente de todo lo que existe.
9
 El Creador tiene la libertad y el poder de hacer todo lo que considere como
bueno, no hay nada imposible para el Eterno.

Salmo 115.3.

“3 Nuestro Dios está en los cielos; Todo lo que quiso ha hecho”.

Mateo 19.26.

“26 Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los hombres esto es imposible;
mas para Dios todo es posible”.

En la Biblia se utiliza un término para esta Propiedad del Eterno. El título es

“Shaday”, que significa “Todopoderoso o todo Suficiente”.

Génesis 17.1.

“1 Era Abram de edad de noventa y nueve años, cuando le apareció

Jehová y le dijo: Yo soy el Dios Todopoderoso; anda delante de mí y sé
perfecto”.

Génesis 35.11.

“11 También le dijo Dios: Yo soy el Dios omnipotente: crece y

multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes
saldrán de tus lomos”.

DIOS HIJO.

LA DUALIDAD ES IDOLATRÍA.

Creer que Jesús no es Dios puede llevarnos a la idolatría. Vamos a

explicarlo. Hay dos posturas contrarias:

 Por un lado, quienes consideran a “Jesús como Divino”, lo que significa

que es Dios.

 Por otro lado, hay quienes consideran a “Jesús como un hombre”, lo

describen como un sabio o un profeta quitándole su estatus Divino, ya que
el término “Divino” viene de “Dios” o es relativo a Dios. Entonces estarían
rechazando a Jesús como Dios.

Si consideramos que Jesús fue un simple hombre, un profeta, un sabio,

alguien que fue creado como tú o como yo. Eso es equivalente a creer que Jesús

10
es un humano que ha llegado a tener Autoridad Divina. Algo así como un hombre
convirtiéndose en Dios. Eso no es lo que enseña la Biblia, y eso es idolatría.

Se está promoviendo la enseñanza de que Jesús no es Divino, y que no es

Dios. Incluso, se promueve que se trata de un simple hombre o un profeta,
quitándole así toda Divinidad.

Hay quienes llegan a rechazar Su existencia, llegan a rechazar que Jesús

es el Mesías profetizado en el Antiguo Testamento.

Muchos creyentes especialmente influenciados por el judaísmo rabínico,

han optado por las lecturas de fuentes judías tardías de corte rabínico ven a Jesús
como un hombre o un profeta que guardó la Ley, y que fue considerado como un
hombre justo, por ello Dios lo escogió para implementar su Agencia Divina y darle
inmortalidad.
El concepto de “Agencia Divina” consiste en que Dios manda mensajeros,
Ángeles, profetas que hablan en Su Nombre como representantes. Ellos asumen
que esto fue lo que sucedió con Jesús. Concluyendo que Jesús no es Dios y eso
quiere decir que entonces es un ser creado, un hombre sabio, maestro, profeta
que habló en Nombre de Dios. Sin embargo sabemos por las Escrituras Sagradas
que Jesús es más que eso.
Juan 3.36.
“36 El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en
el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él”.
El Judaísmo rabínico rechaza a Jesús como el Mesías, niega que el Mesías
se manifestó en carne.
A través de las Escrituras Sagradas, no cabe duda que Jesús es Dios, El
“YHWH”, la expresión visible del Dios invisible.

EL MESÍAS PROFETIZADO.

Tratemos de pensar en el contexto de las profecías antes del Mesías, aún

no existía el Nuevo Testamento, las personas esperaban a un Mesías profético y
solo creían en un solo Dios.

Oseas 13.4.

“4 Mas yo soy Adonai tu Dios desde la tierra de Egipto; no conocerás,

pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí”.

11
 Isaías 43.10, 11.

“10 Vosotros sois mis testigos, dice Adonai, y mi siervo que yo escogí,
para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí
no fue formado dios, ni lo será después de mí. 11 Yo, yo Adonai, y fuera de mí
no hay quien salve”.

Prestemos atención a estas maravillosas palabras que acabo de leer, data

que no conoceremos a otro Salvador que no sea el Padre Eterno, y no habrá fuera
de Él quien Salve.

También data, que Dios escogerá a su siervo Siendo una referencia del
Mesías para que conozcamos, creamos y entendamos que se trata de Dios
mismo.

Isaías 33.22.

“22 Porque Adonai es nuestro juez, Adonai es nuestro legislador,

Adonai es nuestro Rey; él mismo nos salvará”.

Según éste pasaje de la Escritura, Padre Celestial está haciendo una

promesa por medio del profeta que será el Eterno mismo quien proveerá
Salvación.
Isaías 35.4.
“4 Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que
vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os
salvará”.
Estos versículos nos documentan que Dios mismo vendrá.
Isaías 25.9.
“9 Y se dirá en aquel día: He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos
esperado, y nos salvará; éste es Jehová a quien hemos esperado, nos
gozaremos y nos alegraremos en su salvación”.
Isaías 52.6.
“6 Por tanto, mi pueblo sabrá mi nombre por esta causa en aquel día;
porque yo mismo que hablo, he aquí estaré presente”.
Tenemos al Creador Todopoderoso omnipresente, atemporal, incorpóreo,
Eterno y Soberano que promete estar presente en aquel día de la Salvación. Dios
mismo manifestándose en carne para interactuar con la humanidad.
Isaías 45.21, 22.

12
 “21 Proclamad, y hacedlos acercarse, y entren todos en consulta;
¿quién hizo oír esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino
yo Adonai? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador; ningún otro
fuera de mí. 22 Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra,
porque yo soy Dios, y no hay más”.

JESÚS ES EMANUEL.

Un estudio detallado bajo la óptica de Bíblica nos confirma que el Mesías es

“Emanuel”.

Su pronunciación en hebreo y “Manuel” que significa “Dios entre

nosotros o en medio de nosotros”.

El vocablo “Él” hace referencia a Dios, al todopoderoso así que esto se

traduce como “Dios entre nosotros o Dios en medio de nosotros”.

En el pensamiento Bíblico “Emanuel” no es un nombre personal sino es un

Propósito, un cumplimiento. Y todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho
por el Eterno por medio del profeta cuando dijo: “23 He aquí, una virgen
concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido
es: Dios con nosotros”. Según Mateo 1.23.

Estamos convencidos que la gran revelación de la Biblia es qué Jesús es la

manifestación visible del Único Dios que se ha manifestado en espíritu y en carne
para la redención de Su Pueblo.

DIOS FUE MANIFESTADO EN CARNE.

1 Timoteo 3.16.

“16 E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue

manifestado en carne…”.

Cuando llegó el cumplimiento del tiempo. Dios puso esa Voluntad en

acción. El Creador atemporal y no sujeto al espacio, decidió manifestarse en un
plano temporal y limitado en el espacio descrito por Juan como la “Encarnación
del Verbo”.

Juan nos presentó una de las evidencias contundente de la Preexistencia y

Divinidad de Jesús como expresión Corpórea de Dios.

13
 Vamos a leerlo de la Traducción de la Biblia Textual:

Juan 1.1.

“1 En un principio era el Logos, y el Logos estaba ante Dios, y Dios era

el Logos”.

En griego data: “Kei Theos en jo Logos”, que traduce al español: “Y Dios

era el Logos.
Hay que poner mucha atención porque el versículo data claramente que
Dios era el Logos. En algunas traducciones aparece como “…El Verbo…”.

 En arameo es Memrá.
 En griego es Logos.
 En hebreo es Dabar.
 En español es Palabra.

El término “Logos” es el equivalente del término hebreo “Dabar” que se

traduce como “Palabra”.

Biblia Textual:
Juan 1.14.
“14 El Logos se hizo carne y tabernáculizó entre nosotros, y
contemplamos su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia
y de verdad”.
Esta es una expresión importante que significa que la Deidad asumió la
naturaleza humana.
Jesús es la expresión física, la imagen visible del Dios Invisible entre
nosotros.
El término “Tabernáculizó” también se traduce como “Habitó”, viene de la
palabra “Skenoó” que significa “Extender, tabernáculo”.
Un tabernáculo en hebreo es la palabra “Shakán” que significa “Morar,
hospedar, hacer tabernáculo”. Y es de la raíz hebrea “Mishkan” que también
se traduce como “Tabernáculo”.
Así Jesús en la carne se vuelve un tabernáculo para la Plenitud de la
Deidad, es decir, comienza su función como el Portador de la Palabra del Eterno.
Filipenses 2.6.
“6 el cual, siendo en forma de Dios (Morfei Theo), no estimó el ser igual
a Dios como cosa a que aferrarse,”.

14
 Cuando Pablo enfatizó que Jesús vino en carne, nos está confirmando su
preexistencia al afirmar que antes de la carne era en forma de Dios.
El término “Forma de Dios”, en griego es “Morfei Theo”, que significa
“Imagen, rostro, aspecto de Dios”.
El término “Aferrarse” en el griego es “Arpagmón”, es una palabra de
difícil traducción e interpretación ya que es la única ocasión que es utilizada en la
Biblia.
En otros textos griegos es utilizado como “Avaricia, voracidad, avidez”.
Es decir, “No actuó con avaricia al ser Dios, sino que mostró humildad”.
Como se refleja en los siguientes versículos:
Filipenses 2.7.
“7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho
semejante a los hombres;”.
No consideramos que “Despojarse” se refiere a vaciarse de sus
Propiedades y virtudes divinas como: Poder, conocimiento y soberanía.
Despojarse se refiere a adoptar los Atributos esenciales de hombre,
identificándose por completo con las debilidades humanas.
Jesús pasó de ser imagen, aspecto y rostro de Dios a forma, aspecto y
rostro de hombre.
Tomó forma de siervo. Ya esto había sido prometido en Su Palabra.

Isaías 43.10, 11.

“10 Vosotros sois mis testigos, dice Adonai, y mi siervo que yo escogí,
para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí
no fue formado dios, ni lo será después de mí. 11 Yo, yo Adonai, y fuera de mí
no hay quien salve”.

Fuera del Eterno no hay quien salve, pero además data que el Eterno
escogerá a su Siervo, siendo una referencia del Mesías para que conozcamos,
creamos y entendamos que se trata de Dios mismo.

EL HIJO DE DIOS.

A esta manifestación Física del Creador se le conoce como “Ben Elohim -

Hijo de Dios”.

15
 El concepto “Hijo” no es como lo entendemos en el ámbito terrenal, sino
que “Hijos” significa en realidad la “Imagen visible de lo invisible o Dios
manifestado en carne”.

Hijo en hebreo es “Ben” que también significa “Portador de la voluntad o

el constructor del Nombre”.

Mientras que el concepto “Padre”, en arameo es “Abba”, que significa

“Fuente de vida”. La Plenitud de la deidad.

Jesús es el instrumento de salvación que el Eterno utilizó para interactuar

con el hombre.

Juan 14.6.

“6 Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al

Padre, sino por mí”.

Colosenses 2.9, 10.

“9 Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, 10 y

vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y
potestad”.

Jesús se dirige a la Plenitud de Dios como “Abba” que significa “Origen o

fuente de vida”.

16