Está en la página 1de 7

Centro Universitario de la Salud de Cruz Roja

Mexicana
Delegación San Luis Potosí, S.L.P
Incorporada a la UNAM
Clave 8715/12

CONTEXTO DE SALUD
INFANTIL
Salud Infantil
Producto 1: Resumen del contexto salud infantil

Alumna: Josselyn Rangel Rdz


Docente: LEO Griselda de Santiago Luevano
Introducción

Los niños y niñas tienen derecho a la salud y a disfrutar su niñez de la mejor forma
posible. Los niños saludables tienen mejores oportunidades de crecer,
desarrollarse y aprender, y posteriormente convertirse en adultos sanos y
productivos. La Salud Pública contribuye a lograr estas aspiraciones. Sus acciones
se realizan en la etapa del desarrollo, sus efectos en el estado de salud son
inmediatos, y también en edades posteriores.
En México, las condiciones de inequidad de la población requieren que la salud
publica cumpla dos roles: reducir las disparidades y mejorar el estado de salud de
los niños y adolescentes. Este trabajo presenta los principios de la salud pública
aplicables a la práctica pediátrica, describe los cambios demográficos y
epidemiológicos que están ocurriendo en la niñez mexicana, aborda el papel de
los principales determinantes de la salud, y las herramientas modernas de la salud
pública para este grupo de edad.
La definición de salud en la niñez se define como "La salud representa el grado
en que los niños, de manera individual o colectiva, son capaces o se les habilita
para desarrollarse y realizar su potencial, satisfacer sus necesidades y ampliar sus
capacidades para interactuar exitosamente con el ambiente biológico, físico y
social"; y la salud en el niño se define como “La salud de las niñas y niños es un
derecho constitucional donde los padres y madres tienen la responsabilidad de
cuidar y mantener la salud en los niños, con ayuda de las instituciones de salud”.

La noción del estado de salud durante la niñez, entendida como el período entre
los 0 y 18 años de edad, es diferente de la condición de salud en edades adultas.
Los niños, debido a su desarrollo, tienen una dinámica constante en su estado de
salud y son expuestos de forma longitudinal a múltiples influencias de carácter
biológico, ambiental, cultural y conductual. Dichas influencias pueden convertirse
en factores de riesgo o factores protectores y/o promotores de la salud.
El desarrollo conceptual y empírico del campo de la salud pública enfocado en la
niñez está en evolución. Blair et  han propuesto la siguiente definición de salud
pública para este grupo de edad: "Arte y ciencia de promover y proteger la salud y
el bienestar, y de prevenir la enfermedad en los infantes, niños y adolescentes,
mediante las competencias y los esfuerzos organizados del personal de salud, de
las instituciones públicas, de las agrupaciones civiles y de la sociedad en su
conjunto". Para lograr su cometido, las acciones se sustentan en el conocimiento
de los patrones de salud y enfermedad, la identificación de los factores de riesgo y
de las estrategias para mitigar su efecto y para mejorar el estado de salud y el
bienestar de los niños y adolescentes.

La población en edad pediátrica tiene características específicas y necesidades de


salud que requieren respuestas puntuales en salud pública, por lo cual es
indispensable generar mayor evidencia y conocimiento para el análisis y la
implementación de soluciones a escala poblacional de los problemas de salud que
afectan a este grupo de edad.
La identificación de los aspectos que afectan la salud y el desarrollo involucran el
conocimiento de distintos ámbitos, por ejemplo las condiciones demográficas, la
influencia del estado socioeconómico y la inequidad, la cohesión social y familiar,
migración, marginalización, salud mental, calidad de vida, bienestar, estilo de vida,
el efecto de políticas de promoción de la salud, nutrición y crecimiento físico,
desarrollo (intelectual y social), registros vitales, lesiones, ambiente y acceso y
utilización de servicios. Estos ámbitos son dinámicos y es crítico identificar y medir
su influencia en el estado de salud y definir y cuantificar los elementos necesarios
para conocer la magnitud de las necesidades en la población pediátrica y conocer
las mejores prácticas para satisfacerlas.
El Comité de Evaluación de la Salud Infantil: Medición del Riesgo, Factores
Protectores y Promotores para Evaluar la Salud de los niños en la Comunidad
propone cinco principios rectores:
1. Los niños son parte vital de la sociedad.
2. Existen diferencias fundamentales entre los niños y los adultos, lo cual debe
motivar a que se brinde especial atención a la salud de los niños.
3. La salud durante la niñez tiene efectos a largo plazo que se pueden
manifestar en la edad adulta.
4. Las manifestaciones e interpretaciones de la salud varían en las diferentes
comunidades y las diferentes culturas.
5. Los datos epidemiológicos de la salud de los niños y de sus determinantes
son necesarios para diseñar servicios que permitan maximizar el estado de
salud durante la niñez y consecuentemente en edades adultas.

El perfil demográfico y epidemiológico de los niños y adolescentes ha cambiado en


un periodo muy breve. Entre 1950 y 1970, el grupo de 0 a 20 años de edad
incrementó hasta representar el 57% del total de la población; posteriormente, las
políticas de planificación familiar y los cambios socioeconómicos del país
contribuyeron a mantener una declinación progresiva en la tasa de fertilidad.
Actualmente, el grupo de 0 a 20 años de edad representa el 38% de la población.
Las tasas de mortalidad neonatal, infantil y preescolar se han reducido, en parte,
por las mejoras en las condiciones sanitarias y de acceso a servicios de salud; sin
embargo, todavía no alcanzan las cifras establecidas para las Metas del Milenio.
Entre 1980 y 2009, la mortalidad neonatal se redujo de 15.7 a 9.2 por 1,000
nacidos vivos. La mitad de las muertes neonatales son prevenibles y ocurren
durante el trabajo de parto, el parto y en las primeras 24 horas de edad. Las
principales causas de mortalidad neonatal son prematurez (28%), infecciones
(26%), asfixia (23%) y malformaciones congénitas (8%). Las tasas de mortalidad
neonatal no son iguales en todas las regiones del país, lo que indica las
disparidades existentes.
Entre 1990 y 2010, la tasa de mortalidad infantil se redujo de 38 a 14 por 1,000
nacidos vivos6, y entre 1970 y 2010 la tasa de mortalidad en niños menores de
cinco años se redujo de 109 a 17 por 1,000 nacidos vivos. La mortalidad atribuible
a las enfermedades prevenibles ha declinado sensiblemente gracias a las mejoras
en las condiciones sanitarias, de acceso a servicios de salud y de ampliación de
los programas preventivos.
Conclusión

En concordancia con la agenda 2030 de los Objetivos del Desarrollo Sostenible y


la Estrategia Mundial para la Salud de las Mujeres, los Niños y los Adolescentes,
se está recomendando al sector salud enfoques más integrados y colaborativos
para abordar las desigualdades en la región en el ámbito social, dimensiones
ambientales y económicas del desarrollo. El crecimiento y desarrollo saludable y
óptimo de un niño también requiere un hogar seguro, un vecindario seguro y
protección contra la violencia y la disciplina dañina

La diversidad y complementariedad de los insumos para la producción de salud


destaca la importancia de contar con un enfoque integral en el diseño de la política
social, e implica que, en cierto sentido, toda política social es una política de salud;
la aleatoriedad de los eventos disruptores de la salud implica la deseabilidad de
contar con un sistema integral de atención de la salud, integrado por niveles de
complejidad creciente (uno de los cuales sería el de la medicina familiar, en el cual
el médico de familia sería libremente elegido por el hogar) ligados por un sistema
de referencia y contrarreferencia y apoyado en acciones amplias de salud
comunitaria; los problemas de información asimétrica justifican la existencia de los
seguros sociales; consideraciones de política social y de reducción de
externalidades negativas justifican la asignación de subsidios gubernamentales
para el aseguramiento de las familias (en especial de las de menores ingresos),
con lo cual se establece un régimen de seguridad social; y distinguir entre diversos
niveles de atención permite combinar, en forma pragmática, la provisión directa de
servicios por parte del sector público y diversos esquemas de pago a los
proveedores privados
Referencias bibliograficas

1.UNICEF. Convention on the Rights of the Child. New York: United Nations; 1989.
Disponible en: http://www.unicef.org/crc/index_30160.html.         
2. Blair M, Hall D. From health surveillance to health promotion: the changing focus
in preventive children's services. Arch Dis Child. 2006; 91:730-5.         
3. National Research Council; Institute of Medicine; Board on Children, Youth, and
Families; Division of Behavioral and Social Sciences and Education; Committee on
Evaluation of Children's Health. Children's Health, the Nation's Wealth: Assessing
and Improving Child Health. Washington, DC; The National Academies Press;
2004.
4. Blair M, Stewart-Brown S, Waterston T, Crowther R. Child Public Health. Oxford;
Oxford University Press; 2003.         
5. Rigby M, Köhler L, Blair M, Metchler R. Child health indicators for Europe. A
priority for a caring society. Eur J Public Health. 2003; 13:38-46        
6. UNICEF. At a glance: Mexico. Statistics. Disponible
en: http://www.unicef.org/infobycountry/mexico_statistics.html#88.         
7. Ávila-Curiel E, Shamah-Levy T. Diagnóstico de la magnitud de la desnutrición
infantil en México. En: Zúñiga E, coordinador. México ante los Desafíos de
Desarrollo del Milenio. México: CONAPO; 2005. p. 99-126.        
8. Flores-Huerta S, Klünder-Klünder M, Muñoz-Hernández O. Physical growth and
nutritional status of Mexican infants from newborn to two years of age. Salud
Publica Mex. 2012; 54(suppl 1):S82-S89.         
9. Flores-Huerta S, Klünder-Klünder M, Muñoz-Hernández O. Feeding practices
and nutritional status of Mexican children affiliated to the Medical Insurance for a
New Generation. Salud Publica Mex. 2012; 54(suppl 1):S20-S27.         

También podría gustarte