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·. ·; ·: . .. ~.. . .....

A. R. Hadcliffe- Brown

·El ITiétodo de la
antropología social

EDITORIAL ANAGRAMA
BARCELONA
BIBLIOTECA DIGITAL

TEXTOS SOBRE SOCIOLOGÍA

PRIMEROS SOCIÓLOGOS CIENTÍFICOS Y LAS CORRIENTES BIOLOGÍSTAS

FICHA DEL TEXTO

Número de identificación del texto en clasificación sociología: 1153


Número del texto en clasificación por autores: 5965
Título del libro: El método de la Antropología Social
Título original: Method in Social Anthropology
Autor: Alfred Reginald Radcliffe Brown
Traductor (es): Carlos Manzano
Editor: Editorial Anagrama
Registro de Propiedad: Depósito Legal: B. 32585 – 1975; ISBN: 84 - 339- 0604 - 6
Año: 1975
Ciudad y país: Barcelona – España
Número total de páginas: 106
Fuente: http://ebiblioteca.org/?/ver/85017
Temática: Alfred Reginald Radcliffe Brown 1881 - 1955
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El método de la
antropología social
.......
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Título de la ;;¡ició~ ongínal:':. :; ·: . . . .- 1NDICE
Method in Social Anthropology
© The University of Chicago Press
Chicago, 1958

Traducción:
Carlos Manzano

Revisión:
José R. Llobera

Maqueta de la colección:
Argente y Mumbrú
Prefacio de Fred Eggan . 9
Introducción de M. N. Srivinas 11

PRIMERA PARTE
ENSAYO SOBRE EL ALCANCE Y MÉTODOS DE LA
ANTROPOLOGÍA SOCIAL • 23 _

I. Los métodos de la etnología y de la antropo-


logía sociales . 25 _
II. La interpretación histórica y funcional de la
cultura en relación con la aplicación prác-
tica de la antropología al control de los
pueblos nativos . 60
III. El estado actual de los estudios antropoló-
~ws . ~
IV. Significado y alcance de la antropología social . 115
V. El método comparativo en la antropología so-
cial 126

SEGUNDA PARTE
LA ANTROPOLOGÍA SOCIAL . 1.1....,.
.1
© EDITORIAL ANAGRAMA
Calle de la Cruz, 44
Barcelona-17 L Definición 149
ISBN 84 - 339- 0604 - 6 II. Los precursores 159
Depósito Legal: B. 32585 - 1975 IIL La formación de la antropología social 169
Printed in Spain IV. La estructura social 1'81
V. La evolución social 192
Gráíicas Diamante. Zamora, 83, Barcelona-.'i
• > ~. : ' . ~·
--~­
.....
.! . . . . . . -. '

... · . _; .. , .

PREFACIO

·,_
Es PJJSible que éste sea el último volumen de las con-
tribuciones, publicadas e inéditas, de A. R. Radcliffe-Brown
a la ciencia social en general y a la antropología en parti-
cular. Presenta, en la Parte I, los ensayos metodológicos
más. importantes de. Radcliffe-Brown por orden cronoló-
gico, y se continúa, en la Parte II, con su última exposi-
ción acabada de la naturaleza y el desarrollo de la antro-
pología social, originalménte preparada para figurar como
pnmera parte en un libro de introducción a la antropolo-
gía social que tenía en proyecto. Se publica con el permiso
y el estímulo del profesor E. E. Evans-Pritchard, albacea
literario de Radcliffe-Brown, y todos los derechos de autor
se dedicarán a engrosar una fundación de ayuda a la in-
. vestigación creada en nombre de Radcliffe-Brown.
Estamos en deuda con el profesor M. .N". Srinivas, el
ilustre antropólogo indio, por haberse encargado de or-
denar y editar este volumen y por su esclarecedora Intro-
ducción, en la que expone el desarrollo de las concepcio-
nes metodológicas y teóricas de Radcliffe-Brown. También
hemos de expresar nuestro agradecimiento a los editores
del South African Journal of Science y de Nature y a los
responsables de la British Association for the Advancement
of Science (Asociación Británica para el Fomento de la
Ciencia) y del Royal Anthropological Institute of Great Bri-
tain and Ireland (Real Instituto Antropológico de Gran
Bretaña e Irlanda) por haber autorizado la reedición de
·. los ensayos ya publicados incluidos en este volumen.
El profesor Srinivas ha preparado también una breve

9
', .. ~-·: ,- .. ·-.

:.- ·.,.

bibÚografía seleccionada de libros y ensayos que· trata.IT; INTRODUCCION


por lo menos en parte, de la influencia ejercida por Rad-
cliffe-Brown en la antropología. Ya es evidente que ha sido
considerable, y que sigue aumentando. Esperamos que este
volumen contribuya a ese fin.

FRED EGCAN

Después de retirarse de su cátedra de antropología so-


cial en Oxford en julio de 1946, el profesor Radcliffe-Brown
comenzó a trabajar en un libro de introducción a la an-
tropolo~a social, materia que había enseñado con extra-
ordinaria competencia en varias universidades de diferen-
tes partes del mundo, desde Sidney hasta Sao Paulo. A
finales de 1950, había conseguido acabar cinco capítulos
del libro y, desgraciadamente, no pudo seguir más adelan:
te. La mala salud, los largos y frecuentes viajes, la ense-
ñanza, y las muchas otras obligaciones que acapara"?an su
tiempo le impidieron acabar el libro. En 1951 pronunció
la Huxley Memorial Lecture: «El método comparativo en.
la antropología social» (incluida en este volumen), y un ·
año después escogió la cosmogonía australiana como tema
para sus Josiah Masan Lectures en la Universidad de Bir-
mingham; se trataba de un tema que había hecho suyo y
sobre el cual disertaba con gran brillantez. Después, se
trasladó á Grahamstown, en Sudáfrica, donde siguió ense-
ñando antropología social hasta que una grave enfermedad
se lo impidió. En 1955 ·regresó a Inglaterra y el 24 de oc~
tubre de 1955 falleció.
Como es de sobra sabido, Radcliffe-Brown escribía. con
gran cuidado, manejando las palabras como si fueran'pie_:
dras preciosas. Por regla general, escribía varias veces ~ ·
trabajo antes de publicarlo: dividió en secciones 1as ga~
!eradas de su famosa obra, The Andaman Islanders, y las
volvió a ordenar de otro modo para que la argumentación
quedara más clara. Su autoexigencia fue responsable en
parte de su relativamente breve producción. El fragmento
relativo a la antropología social incluido en este volurr:ien
ejemplifica las virtudes de Radcliffe-Br01.vn como escritor:

10 11
:. ..

,...,1,,..,.."'<:'"'n::~ en reconstruir la historia de los pue-


el estilo es muy sencillo -en realidad sólo aparentemen-
te-, claro y -cosa extraordinaria- carente de tecnicis- _priinitivos y en clasificar sl.,ls ra~as y sus lengua~. Se-
mos. Constituye una introducción sucinta y erudita al tema. Radcliffe-Brown, debería estudiarse la etnolog1a en
Hemos pensado q1.1e sería buena idea publicar, junto a · éstr~cha colaboración con la arqueología prehist~ric~, mi~n-
' .f'
tras que 1. . a antr0p0 1. .0g1a .
. lSlCa "'""' a~ 1~~
pe.a.- ""enwww ~-~-~--- 1..--
~a.:l \...ol.CU.\...J.c:t.:l Ulv-
los capítulos sobre la antropología social, algunos de los
artículos de Radcliffe-Brown sobre el alcance y métodos lógicas y debe estudiarse· corno parte de la materia -más
de dicha disciplina. Dichos artículos, escritos en diferen- amplia- de la biología humana.
tes momentos de la carrera de Radcliffe-Brown. han ejer- Las idéas de Radcliffe-Brown tuvieron tanto éxito, que
cido gran influencia sobre el desarrollo de los estudios an- las distinciones por las que abogó en 1923, en «Los méto-
tropológicos, pero se. publicaron en revistas e informes que dos de la etnología y de la antropología ·social», se han
no son fáciles de encontrar 1• convertido en los lugares comunes de la antropología so-
A lo largo de su carrera de antropólogo, Radcliffe-Brown cial británica actual. Pero es necesario recordar que en
abogó por una división racional de ·las diferentes materias 1923 la •fama de W. H. R. Rivers estaba todavía en su pun-
abarcadas por el término general de «antropología». El gran to álgid~. En 1911, River? anunció su conversión del evo-
estímulo dado a los estudios antropológicos por la teoría de lucionismo de Margan a una creencia en· el carácter exten-
la evolución ha producido como consecuencia la reunión, dido de la difusión y en la necesidad de realizar un aná-
dentro del marco de una sola materia, de varias discipli- lisis etnológico de la cultura; sus ideas ejercieron una po-
nas distintas, como la antropología física, la etnología, la derosa influencia durante su vida y varios años después
arqueología prehistórica, la lingüística y la antropología so- de su muerte. El enfoque metodológico de Rivers y su pro-
cial. Así, pues, la antropología abarca .todos los aspectos funda predilección por la sicología eran dos amenazas con-
de la vida humana primitiva, desde la tecnología hasta la tra el crecimiento, si no la existencia, de la naciente disci-
teología. Radcliffe-Brown' consideraba que esa disposición plina de la antropología social. El profesor Lowie escribe:
no era demasiado racional, y deseaba que se realizara una << Rivers, que tenía formación médica y sicológica, sirvió en
división de los temas en función de su afinidad lógica. el ejército durante la guerra tratando casos de neurosis de
Realizó dicha división en tres de los ensayos aquí inclui- guerra. Su mente, ágil y sugestionable, se vio influida por
dos: <<Los métodos de la etnología y de la antropología la apo.rición del sicoanálisis; de modo que in~entó combi-
social» (1923), <<El estado actual de los estudios antro- nar la sicología con la etnología. Independientemente de
pológicos» (1931) y <<Significado y alcance de la antropo- lo que aportara a la ciencia sicológiCa de aquella forma,
logía social» (1944). También el Capítulo I de La antropolo- apenas hizo contribución alguna a la etnología; por _lo me~
gía social se ocupa de esa división. nos para nosotros, no parece que' hiciera otra cosa que pa~
Al hacer esas distinciones, a Radcliffe-Brown le int~re­ rafrasear hechos etnográficos en jerga siquiátrica» 2• . · .
saba especialmente ·señalar las diferencias entre la antro- En el capítulo II del fragmento sobre la antropolágía'
pología social -la ciencia de la sociología· comparada, que social, Radcliffe-Browa expone brevemente la historia ·¿e¡
investiga las leyes universales que rigen d comportamien- terna durante los tres últimos siglos, y revela claramente ·
to social humano- y la etnología, que es una disciplina que muchos pensadores destacados de países diferentes
contribuveron a su desarrollo. Sin embargo, fue Sir Ja-
l. H~mos decidid? omitir de esta coleccióp los siguientes artículos mes Fra~er quien usó por primera vez el término <<antro-.
d~ Radcliffe-Brown: 'Sorne Problems of Bantu Sociology" (Bantu Stu-
dres,_ nos .. 1-3 [1921-22],_ págs. 38-46) y "Applied Anthropology" (disertación
pología social» en el sentido en que lo entienden hoy los
pres¡dencial a la SecciÓn· F de la Asociación Australiana y Neozelandesa
f9~~- el Fomento de la Ciencia, vigésima reunión, Brisbane, mayo-junio,
2. T!ze History of Ethnological Theory (Nueva York, 1937). pág. 172.

12
ff:y~;~~i:;~:.;t!f:]:f~'- . . . . . ·. ..•
1; ; • :;;,";;:~~~~ ~~:~e;r~~:!~i~~:o:ri~9~~ ::,:o~~~~~:·:::: i; r~construcción histórica. El profesor Lo-
~lo general critica el enfoque de . Radcliffe-
~ cial en la Universidad de Liverpool, definió claramente la
~ naturaleza y el objetivo de la antropología social. Pero
'"',C"',.,....,,.,· que « ... la intransigencia teórica de Rad-
con respecto a la historia disminuye en los
· aquello no acabó cori las explicaciones seudohistóricas y si-
que se encuentra ante datos con los cuales está
cológicas de los hechos y acontecimientos sociales. Rad-
)S()lu:tamt!nte familiarizado y, pese a ciertos escrúpulos,
cliffe-Brown fue el primer antropólogo de habla inglesa
ante ciertas hipótesis cronológicas._ "No podemos
que rechazó esos dos tipos de explicaciones y sostuvo que
tfu<me:r• racionalmente que [el sistema de parentesco de
los hechos sociológicos requerüm una explicación desde
~,.vara~.ae] se haya desarrollado independientemente de
el punto de vista de las leyes sociológicas y no de la sico-
(los sistemas de los arande) ... y hemos de presumir
logía individual o de las reconstrucciones históricas.
conexión histórica entre ellos". Y también : "el tipo
«Los métodos de la etnología y de la antropología so-
lli1lLbé3llTI:gei:1.. es un esfabón entre las formas kariera y arun-
cial» se publicó en 1923, un año después de la muerte de
. No hay duda de que éstos son ejemplos de historia
Rivers en 1922, año que vio también la publicación de dos
:On:let:ural» 3 • Radcliffe-Brown estimuló también el interés
obras de importa..'1cia revolucionaria, Argonauts of Western
. historia entre sus estudiantes. Los profesores Lloyd
Pacific de Malinowski y Andaman Islanders de Radcliffe-
_y Fred Eggan nos dicen: «Recordamos bien cómo
Brown. Este ensayo constituye la primera exposición de nuestras primeras investigaciones sobre los contac-
Radcliffe-Brown sobre la naturaleza, el alcance v las filia- en el norte de Australia y sobre los cambios
cio~es de la antropología social, y sus manifesta;iones pos- en los sistemas de parentesco de los grupos de
tenores no revelan ninguna desviación fundamental con · . norteamericanos en los casos en que había. datos
respecto a ella. Si a algún ensayo se le puede atribuir el tí- dot::mnentales o de otro tipo disponibles con los que coro-
tulo de carta fundacional -por usar una expresión favo" las influencias históricas» 4 •
rita de Malinowskí- de la antropología social británica bién señaló que los estudios de campo intensivos
moderna, indudablemente sería «Los métodos de la emo- Ios antropólogos sociales producían . como resultado
Io~ía Y de la antropología social>>. Cuando apareció por . . contribuciones a la historia tribal y local. Pero
prunera vez fue una carta fundacional de rebelión. una clara distinción entre las explicaciones históricas
El análisis del enfoque etnológico condujo a Radcliffe- funcionales. En el primer caso, la «explicación» con-.
Brown a distinguir los diferentes tipos de historia practi- buscar hechos o acontecimientos que se hayan
cados por sus colegas. Señaló que los etnólogos no eSL-ri- .nl"1D<11:Ic:i<1o anteriormente y en demostrar que los hechos o
bían ~istorias «reales», sino historias conjet~rales que, en ....uL...... uJ..uo;;:utos posteriores se originan en los anteriores.
el meJor ~e los casos, eran verosímiles y, en el peor, meras
-

la explicación con~iste en mostrar que un


acumulaciOnes de suposiciones indemostrables lo oue efec- o un grupo de acontecimientos no son sino
tiva~ente era cierto en el caso de la History of Melanesi.an de una lev universal. El conocimiento de·· la
Soczety de Rivers (2 vals.; Cambridge Universitv <>-ess
1914). . ·. • J. J. '
de una institu~ión ayudará a descubrir su función
pero una y otra son esencialmente diferentes. «La
Radcliffe-Brown aceptaba la historia propiamente di- de la antropología social es formular y confirmar
c?a en los casos en que había material documental ac:e- afirmaciones relativas a las condiciones de existencia
srble. Señaló el valor de la historia, si bien se esforzó por
recalcar que era diferente de una explicación «funcional» 3. !bid.., pág. 236.
0 sociológica de las instituciones en cuestión. En su propi:c: · : 4. Noticia necrológica sobre Radcliffe-Brown por :. C:::ggan Y W. Uoyd
· Viamer, American Anthropologist, LVIII, n." 3 (junio uc l95ó), 544-47.
14
15
- •• 1 ..
.·.·.·.-
·.· ...

·de los sistemas s~ciales· (leyes de la estática social) y a las . social está determinado, a su vez, por las características
regularidades . observables en el ca~bio social (leyes de la generales de la naturaleza humana básica» 8 • Actualmente,
dinámica social)». No obstante, la comprensión del desa- la mayoría de los antropólogos británicos aceptan la posi-
rrollo de la sociedad .humana (es decir, de la evolución so- ción de Radcliffe-Brown a ese respecto. Sin embargo, en
cial) «sólo podrá conseguirse en un estudio unificado y or- Estados Unidos hay mucho más intercambio entre la an-
ganizado en que se combinen las investigaciones históricas tropología y la sicología social (especialmente la rama de
y sociológicas» 5•
ésta llamada «cultura y personalidad») que en Inglaterra.
Hasta la década de 1930, los intentos de «explicar» las En Estados Unidos los estudios antropológicos están orga-
instituciones sociales complejas mediante la referencia a nizados de tal forma, que existe la tendencia a repartir
«hechos» de la sicología individual estuvieron muy generali- más equitativamente el tiempo del estudiante universitario
zados entre los an~ropólogos británicos. Pero Radcliffe- entre las diferentes disciplinas abarcadas por el término
Brown, siguiendo a Durkheim, insistió en el hecho de que «antropología» : antropología física, arqueología, lingüísti-
la sicología Y la antropología social tratan de hechos ·si- ca, etnelogía, antropología social y «cultura y personalidad».
tuados en niveles diferentes y de que constituye un error En Estados Unidos las distinciones entre las diferentes ra-
explicar lo social por referen~ia a lo individual. «Deseo mas de la antropología no son tan estrictas como en Ingla-
subrayar con la mayor insistencia que la antropología ·so- terra, y la antropología social no ocupa un lugar tan pre-
cial es una ciencia tan independiente de la sicología como dominante. El término «antropología cultural» está m~­
ésta lo es, a su vez, de la fisiología o la química de la física· cho más generalizado allí que el de «antropología social»,
ni más ni menos. Esta posición no es nu~va en absoluto~ y los antropólogos americanos están más dispuestos que
Durk:heim Y la importante escuela de L'Année Sociologique sus colegas británicos a pasar del nivel social al sicológi-
h~ insistido en ello desde 1895» 6 • Sin embargo, eso no sig- co, cuando no biológico 9• ·
nifica que Radcliffe-Brown ignorara «la naturaleza huma- También, en Estados Unidos la antropología y la so-
na». Dijo: «Un factor determinante en la formación de los ciología constituyen grupos de estudios diferentes, mien-
sistemas ·sociales humanos es esa naturaleza humana bási- tras que en Inglaterra se considera a la antropología social
ca de cuyo estudio se encarga el sicólogo general» 7• como una rama de la sociología. No seria de extrañar que
Es necesario recordar que cuando un antropólogo está en un futuro próximo ambas materias llegaran a aproximar-
estudiando una tribu o una aldea no está estudiando «la se todavía más. Las diferentes relaciones eXistentes entre
naturaleza humana libre de restricciones», como diría AI- la sociología y la antropología en Estados Unidos e Ingla-
dous Huxley. En todas las sociedades, por primitivas que terra se deben en gran medida a la mayor difusión de las
sean, existen restricciones, y resulta imposible pasarlas por ideas de Durk:heim y de Radcliffe-Brown en Inglaterra.
alto. «Cuando estudiamos la sicología de los franceses 0 Hasta 1931, Radcliffe-Brown considerabá que el tema
de Ios alemanes o de los ciudadanos de Estados Unidos de estudio de la antropología so~ial era la cultura o vida
nos ocupamos de las características de la mentalidad o deÍ social. Pero, posteriormente, fue usando cada vez más las
con:portamiento .que resultan del "condicionamiento" pro- expresiones «estructura social» y «sistema social» y empe-
ducrdo por un srstema social particular. En este caso las zó a dejar de usar el término «cultura». Cosa que se ve cla-
características "especiales". de que nos ocupamos están de-
terminadas por el sistema social, mientras que el sistema

5. :El mét_odo comparativo en la antropología social."


8. !bid.
6. }-?s _métodos de la etnología y de la antropología social." 9. Véanse los artículos de G. P. Murdock y R. Firth sobre la antro-
7. Significado y alcance de la antropología."
pologia social británica en American Anthropologist, LIII (1951), 465-89.
16
17
iamente en su ensayo «Sobre el concepto de función en la ·
adoptar' muchas formas diferentes, y la guerra no es sino
ciencia social» 10 •
· una de ellas» 13 •
En 1937, en su seminario de la Facultad de Chicago,
Desde 1940, el concepto de estructura social ha consti-
«Una ciencia natural de ·la sociedad>>, fue más lejos inclu-
tuido el marco teórico principal de la antropología social
so: <<No existe una ciencia de la cultura. Sólo se puede es-
británica. En Estados Unidos se hace con frecuencia la dis-
tudiar la cultura como una caracteristica de un sistema so-
tinción entre «funcionalistaS>>, seguidores de Malinowski, Y
cial. Así, pues, si existe una ciencia, se trata de una ciencia
«estructuralistas», seguidores de Radcliffe-Brown. Esta dis-
de los sistemas sociales>> 11 • Posteriormente, la «estructura
tinción es demasiado estricta, pero pone .de relieve un he-
social», que consideraba como parte de un <<sistema social»,
cho importante: en la antropología· social británica con-
reclamó cada vez más su atención, y en 1940 escogió «la es-
temporánea, la estructura ha sustituido en gran medida a
tructura social» para el tema de su disertación presiden-
la cultura. Sin embargo, no por ello es improbable que esta
cial ante el Royal Anthropological Institute.
preocupación actual por la estructura social dé lugar, a su
Sin embargo, conviene recordar que usó el concepto de
vez, en un. futuro no lejano, a un examen sistemático de la
«estructura social» en época tan temprana como 1914 12,
relación entre estructura y cultura con metodología com-
en un curso de conferencias sobre antropología social que
parativa.
pronunció en Birmingham .. En su disertación sobre antro-
En este volumen va incluido el resumen de un ensayo
pología aplicada ante la Sección F de la Australian and
que trata directamente de la antropología aplicada y que
N ew Zealand Association for the Advancement of Science
Radcliffe-BrO\vn leyó en el Fourth Panpacific Science Con-
[«Asociación Australiana y Neozelandesa para el Fomento
oaress de Java en 1929 • Ese interés por la antropología apli-
14
de la Ciencia>>] (vigésima reunión, Brisbane, mayo-junio de
cada es evidente también -en realidad, demasiado- en su
1930), destacan los conceptos de «estructura social» y de
ensayo: <cSome Problems of Bantu Sociology» (Bantu Stu-
«integración social». En ella formuló «la ley de la oposi- dies, nos. 1-3 [1921-22]). Insistió en la utilidad de la an-
ción», que consideraba como «Una de las leyes más im- tropología para la administración colonial, y una de las
portantes de la integración social». Dicha ley reza así: «en críticas que hacia a la etnología era la de que no tenía
cualquier organización dividida en segmentos la unidad y aplicación «práctica». Como deseaba popularizar la ant~o­
solidaridad de un grupo o segmento depende de la existen- pología social, Radcliffe-Brown buscaba la. ayuda de qme-
cia de alguna forma de oposición social, es decir, de alguna nes estuvieran interesados por el buen gobierno de las co-
forma de antagonismo, organizado y regulado socialmen- lonias británicas.
te, entre él y los demás grupos o segmentos con que esté Sin embargo, la fe en la antropología aplicada es tam-
en contacto, oposición que sirve para mantener diferencia- bién una consecuencia lógica de la afirmación fundamental
dos y distintos los segmentos particulares. La oposición, de Radcliffe-Brown: la de que la antropología social es una
que aquí estoy usando como término técnico para desig- ciencia como la física, la química y la biología. Uno de los
nar el antagonismo socializado e institucionalizado, puede objetivos de Radcliffe-Brown era intentar aplicar riguro-
samente la lógica de las ciencias naturales a la antropología
10. Se basa en los comentarios que Radcliffe-Brown hizo sobre un social. Acabó sacando la conclusión de que en la antropo-
a:tículo leído por el Dr. A. Lesser ante la Asociación Antropológica Ame- logía social, como en las demás ciencias naturales, los cien-
ncana en 1935. Reimpreso en Stmcture and Function in Prirnitive So-
ciery (Londres, 1952), cap. X.
11. Véase A Natural Scíence of Society (Glencoe, Ill: Free Press,
1957), pág. 106. 13. Ibid., pág. m. 1
12. Véase la memoria del pr9fesor Forres sobre Radcliffe-Brown en 14. "Las interpretaciones histórica y funcional de la cultura en re.a-
Man, LVI (noviembre de 195ó), 15, 149-53. ción con la aolicación oráctica de la antropología al control de los pue-
blos indígenas~." .
18
19
-' -~ : . ' . ~

- -
• 'tífic6s ~<puros»· descubren leyes universales que los cientí-
ficos «aplicados>> usan para el bien de la humanidad. La efi- A lo largo .de su carrera Radcliffe-Brown subrayó la im-
cacia de la antropología aplicada ha aumentado a medida portancia del método ·comparativo. De hecho, según él, una
que la antropología pura seguía progresando, mientras que de las distinciones fundamentales entre antropología social
el abandono de la ciencia pura perjudica, a la larga, a la y sociología consistía .en el uso del método comparativo por
ciencia aplicada. parte de la primera y en el desinterés por él de la segun~a.
Además, no hay que olvidar que Radcliffe-Brown creció Radcliffe-Brown estaba dispuesto incluso a llamar <eSOCIO-
en la Inglaterra victoriana, que se caracterizó por la fe en logía» a la antropología social, siempre que se añadiera el
la .razón y en el progreso, resultado de la aplicación de la adjetivo «Comparativa». Esa insistencia en el método co~­
ciencia. Dicha fe se fortificó con los propios estudios de parativo no se limitaba al nivel de la doct~na. Lo practi-
Radcliffe-Brown en las fuentes positivistas de la sociología caba constantemente. Como es de sobra sabido, en 1931 pu-
francesa 15• blicó un estudio comparativo extraordinariamente valioso
Radcliffe-Brown solía decir a sus amigos y colegas que de las organizaciones sociales de las tn'b us austra1'Ianas 17 .
el príncipe Pedro Kropotkin era su vecino en Birmingham El tema de su H,uxley Memorial LeCture fue el método co~­
Y que, cuando iba de vacaciones a esta ciudad procedente parativo eri la antropología social; en aquella conferencia
de Cambridge (donde lo conocían por ((Anarquía Brown>>), pasó del examen de un cuento popular australiano a la
solía visitar al gran filósofo anarquista. En aquellas ocasio- función de la oposición institucionalizada en la estn1ctura
nes habl~ban de toda clase de cosas, incluidas las panaceas
• social.
Espero que esta colección de ensayos y conferencias del
de Radchffe-Brown para los que consideraba ser los males
de la Inglaterra contemporánea. Kropotkin señaló al joven profesor Radcliffe-Brown en un solo volumen sea útil p~ra
los estudiantes de la materia, así como para los antropolo-
reformador que era necesario estudiar y entender la socie-
dad antes de cambiarla y que, para entender una sociedad gos profesionales. Agradezco al profesor Evans-Pritchard,
tan compleja como la Ingla,terra victoriana, había que em- albacea literario del profesor Radcliffe-Brown, haber auto-
pezar por hacer un estudio sistemático de una comunidad rizado la publicación de los ensayos incluidos en este libro.
primitiva y distante. Con arreglo a los deseos del profesor Evans-Pritchard, l.os
beneficios de este libro se reservarán como fondo especral
~uando Radcliffe-Brown comprobó que la. antropología
para ayudar a los estudiantes de antropología. Estoy en
hab1a pasado a ser una materia oficial en las universidades
b~tá~i~as, su entusiasmo por la antropología aplicada que- deuda con los profesores Sol Tax y Fred Eggan por su ayu-
da y aliento a la hora de planear este libro y por haber re-
do mrtigado por su interés por hacer progresos en la antro-
pología_ pura. En_ 1944 escribió: «La exigencia de que los visado las pruebas de imprenta, y al profesor D. G. Men-
delbaum por su ayuda y consejo.
antropo_lo~os ded1quen demasiado tiempo tratando proble-
m~s pract1cos. reduciría inevitablemente la cantidad de tra-
~.aJo que p~ede~ realizar ~ara el desarrollo del aspecto teó- M. N. SRIVINAS
Departamento de Sociología
lCO de la crencra. Pero, sm una base firme en la teoría la
1ntropoiogía ha de degenerar por fuerza y convertirse 'no Maharaya Sayajirao University of
Baroda, India
:n una _c~encia aplicada, sino en una investigación pura~en­
e emp1nca" 16 .

'f~~:B;o~eemos rec.~rdar ~quí


que Durkheim, a quien tanto siguió Rad-
:.luciona n, esc_r:¡.bw un hbro sobre e] socialismo, y que Juárez, e] re-
16 "S'f}O 'fime~rcano, fue un compañero de estudios de Durkheim.
· Ign¡ ca o Y ObJetrvo de la antropología social. n
17. Oceania Monographs, n.o 1 (Melbourne, 1931).
)

21
,:·-·

:Brni:.iOGRAFfA cRoNoLÓGICA sELEccroNÁnA DE LIBRos y ENSAyos . Primera parte


SOBRE LA INFLUENCIA DE RADCLIFFE-BROWN EN LA k'l:TROPOLOGÍA ' y métodos
Ensayos sobre el alcan_ce
LowiE, R. H. The History of Ethnological Tlzeory. Nueva
de la antropología social
York: Farrar & Rinehart, Inc., 1937, págs. 221-29. [Tr.
esp. Historia de la teoría etnológica, F.C.E., México.]
EGGAN, F. (ed.). Social Anthropology of North Anzerican Tri-
bes. Chicago: University of Chicago Press, 1937. (Véase
especialmente la Introducción de Robert Redfield con
respecto a la influencia que Radcliffe-Brown ejerció en
la antropología americana durante la década de 1930.
La segunda edición [1955] incluye otros ensayos de Sol
Tax y de Fred Eggan, que son útiles para apreciar la in-
fluencia de Radcliffe-Brown.)
FORTES, M. (ed;). Social Structure: Studies Presented to
Radcliffe-Brown. Oxford: Clarendon Press, 1949.
MURDOCK, G. P. «British Social Anthropology», y FIRTH, R.
«Contemporary British Social Anthropology», American
Anthropologist, LIII (1951), 465-89.
FoRTES, M. Social Anthropology at Cambridge since 1900.
(Conferencia inaugural.) Cambridge: Cambridge Univer-
sity Press, 1953 .
._ «Radcliffe-Brown's. Contributions to the Study of So-
cial Organization». British Journal of Sociology, vol. VI,
n.o 1 (marzo de 1955).
- Nota necrológica sobre Radclíffe-Brown en Man, LVI
(noviembre de 1956), 149-53.
ELKIN, A. P. Nota necrológica sobre Radcliffe-Brown. en
Oceania, XXVI (junio de 1956), 239-51. .
EGGAN, F., y WARNER, W. LLOYD. Nota necrológica sobre Rad-
diffe-Brown en American Anthropologist, LVIII, n.o 3
(junio de 1956), 54447.
FIRTH, R .. «Alfred Reginald Radcliffe-Brown 1881-1955»,
Proceedings of the British Academy, vol. XLII. Londres :
Oxford University Press, 1957.
·.•
..
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..

..· ..
LOS METODOS DE LA ETNOLOGIA Y DE LA
ANTROPOLOGIA SOCIAU

Creo que en esta conferencia lo mejor que puedo ·hacer


es tratar un tema que durante años ha ocupado, y sigue
ocupando, a los etnólogos y antropólogos de todo el mun-
do : el de los fines y métodos apropiados que hay que
perseguir y utilizar en el estudio de las costumbres y de
las instituciones de los pueblos no civilizados. Es evidente
que dicho · tema es de importancia fundamental, pues no
existe la menor posibilidad de que una ciencia progrese
satisfactoriamente, o consiga el reconocimiento general,
hasta que no exista algún tipo de consenso con respecto a
los fines que debe perseguir y los métodos mediante los
cuales debe procurar alcanzarlos. Pero, a pesar de los mu-
chos libros y artículos que se han consagrado a la cuestión
del método en los diez o quince últimos años, todavía no.
se ha obtenido el consenso. El terna sigue abierto a las dis-
cusiones; de hecho, sigue siendo un terna candente, y creo
que lo mejor que podernos hacer es abrir nuestras sesiones
llevándolo a examen.
Los términos «etnología» y «antropología social» o «cul-
" ....
tural» se han aplicado indistintamente al estudio de la cultu-
ra o de la civilización, que, según la definición de Tylor,
es «ese conjunto que incluye el saber, las creencias, el arte,
la moral, el derecho, las costumbres, y cualquier otra clase
de aptitudes y hábitos adquiridos por el hombre como
L South African Journal of Science, ·XX (octubre de 1923). Diserta-
ción presidencial ante la Sección E, Asociación Sudafricana para el Fo-
mento de la Ciencia, 13 de julio de 1923.

25
.:Lit~~~fff;~S!I:'~i''~:-"··;"r ~- ~ ,~ _,,: . •.
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miembro ·de iuia sociedad». Puesto que ése es el tema de tumbres de las trib~s indígen~s -de -Atistralficentr~.l~ :ie- ..
estudio, la cuestión metodológica que se plantea es la de sulta evidente en següida que nunca podremo~ obten~r m-,
cómo debemos estudiar los hechos culturales, qué métodos formación directa ·alguna referente a la histona de dichas
de explicación hemos.de aplicarles, y qué resultados de in- tribus. Por consiguiente, en esos casos, la única forma po-
terés teórico o de valor práctico hemos de esperar de nues- sible de aplicar el .. método histórico. de explica~ión. es la
tro estudio. de hacer una reconstrucción hipotética de la histona. pa-
El propio Tylor, cuyo derecho al título de padre de sada de esas tribus a partir de cualquier clase de testimo-
esta ciencia nadie impugnará, creo, señaló que existen dos nios indirectos que podamos encontrar. , ~
métodos diferentes mediante los cuales pueden explicarse Gran parte de lo que se suele llamar etnolog¡a ha ~Ido
los hechos culturales 2, y me parece que la confusión que historia teórica o conjetural de ese tipo: Permítanme ilus-
ha surgido en nuestra ciencia se debe en gran medida a la trar el método citando un ejemplo específico.' :rente a la
incapacidad para mantener cuidadosamente la distinción costa oriental de este continente hay una gran Isla: Macla-
entre esos dos métodos. gasear. Un. primer examen de la población de la isla mues-
Veamos cuáles son esos dos métodos. En primer lugar, tra que- en ciertos aspectos está relacionada, como era de
existe lo que propongo llamar el método histórico, que ex~ esperar, con los pueblos de Africa. Podemos ~nc.o~trar, es-
plica determinada institución o conjunto de instituciones pecialmente en el lado occidental,_ much?s mdiVIduos de
averiguando las etapas de su desarrollo y, en. todos los ca- tipo indudablemente negro, es decir, africano: en lo _que
sos en que sea posible, la causa u ocasión particular de respecta a sus rasgos físicos, me refiero. Y gran cantidad
cada uno de los cambios que se hayan producido. Por de los elementos de la cultura de Madagascar parecen ser
ejemplo, ·si nos interesa el gobierno representativo en In- tambíén africanos. Pero un examen más detenido muestra
glaterra, podemos estudiar su historia, obse~ando los cam- que existen elementos, tanto raciales como cul~rales,- que
bios que se han produCido a partir de los tiempos más no son africanos, y un estudio de éstos nos pernnt~ demos-
antiguos y trazando, así, su desarrollo hasta el presente. trar sin discusión ·posible que algunos de ellos denvan del
En todos los casos en que dispongamos de datos históri- sudeste de Asia. Un examen de los rasgos raciales. Y cultu-
cos, podemos estudiar los hechos culturales de ese modo. rales de Madagascar, tal como existen en la actuali~d, nos
El detalle importante que hay que observar. con res- permite decir con certeza práctica que, en un. per:-odo. ~e
pecto a las explicaciones de este tipo es que no nos apor- tiempo de no hace muchos siglos, hubo una mrmgraci?n
tan leyes generales como las que. buscan las ciencias in- a la isla de gentes procedentes de Asia, que estaban rela~Io­
ductivas. La explicación que se da de un elemento o con- nadas lingüística, cultural y, hasta cierto punto, racial-
dición cultural determinado es la de que se origina en al- mente con los actuales habitantes del archipiélago mal~yo.
gún otro, cuyo origen se descubre, a su vez, en un tercero, Podemos incluso establecer las fechas, bastante imprecisas,
y así 'sucesivamente hasta donde podamos llegar remon- es cierto, entre las cuales se produjo dicha migra~ió~. _De- -
tando el pasado. En otras palabras, el método avanza me- bió de ser anterior a las primeras descripciones .histoncas
diante la demostración de Ias relaciones temporales efec- de Madagascar de qu~ disponemos, y posterior a la int~o­
tivas entre instituciones o fenómenos o estados de civili- ducción del hierro trabajado en la región de que los m-
zación particulares. migrantes proéedían.
Ahora bien, por lo que se refiere a las instituciones de ~Un estudio más detallado de los rasgos raciales Y cultu-
los pueblos no civilizados, prácticamente no disponemos rales de Madagascar nos permitiría reconstruir muchos
de datos históricos. Si, por ejemplo, nos interesan las cos- otros aspectos de la historia de la isla. Vemos que hay por
2. Researches into the Early History of Mankind, pág. 5.
lo menos dos elementos que se han combinado en la cul-
. : ·., ~-·:..'

llamar «inductivo»; porque por sus fines y métodos es esen--


la-
. tura de isla, dos estratos cUlturales, como a veces se les
cialmente semejante a las ciencias naturales o inductivas.
llama de forma no muy apropiada, y un examen completo
El postulado del método inductivo· es el de que todos los
y sistemático de esa cultura en comparación con las del
fenómenos están sujetos a leyes naturales, y que, en conse-
sudeste de Asia y de Africa nos permitiría analizar el con-
cuencia, es posible descubrir y demostrar, mediante la apli-
junto de rasgos culturales existentes, de modo que pudié-
cación de deteD:ninados métodos lógicos, determinadas le-
ramos decir con respecto a muchos de ellos si los trajeron
yes generales, es decir, determinadas afirmaciones o fórmu-
los emigrantes o si pertenecían a la población anterior de
las generales, con mayor o menor grado de generalidad,
la isla. Y de ese modo podríamos reconstruir algunos de
cada una de las cuales se aplica a determinada gama de
los caracteres de la cultura que existía en la isla antes de
hechos o de acontecimientos. La esencia de la inducción es
.la invasión.
la generalización; un hecho particular se explica mediante
Así explicamos la cultura de Madágascar, averiguando
la demostración de que es un ejemplo de una regla general.
el proceso histórico cuyo resultado constituye, y, a falta de
Se demuestra que la caída de la manzana del árbol Y lo~
documentos históricos, lo hacemos mediante una recons-
movimientos de los planetas alrededor del sol son ejemplos
trucción hipotética de la historia, basada en el estudio más
completo posible de los caracteres raciales, del lenguaje de la ley de la gravedad.
La ciencia inductiva ha conquistado un reino de la na-
y de la cultura de la isla en el momento actual, completa-
turaleza tras otro: primero, el movimiento de los astros
dos, a ser posible, con la información aportada por la ar-
y de los planetas y los fenómenos físicos del mundo que
queología. En nuestra reconstrucción final, algunos fenó-
nos rodea; después, las reacciones químicas de las sustan-
menos serán completamente seguros; otros podrán estable-
cias de que se compone nuestro universo; posteriormente
cerse con mayor o menor grado de probabilidad, y en al-
aparecieron las ciencias biológicas, cuyo objetivo es descu-
gunos aspectos es posible que nunca podamos pasar de me-
brir las leyes generales que gobiernan las reacciones de la
ras conjeturas.
materia viva; y, en el siglo pasado, se aplicaron los mismos
Como verán por este ejemplo, podemos aplicar el méto-
métodos inductivos a las operaciones de la mente humana.
do de las explicaciones históricas aun en los casos en que
A nuestro siglo ha correspondido lo que faltaba: la aplica-
no disponemos de testimonios históricos. A partir de do-
ción de dichos métodos a los fenómenos de la cultura o de
cumentos históricos sólo podemos informarnos de la his-
la civilización, al derecho, a la moral, al arte, al lenguaje,
toria de la civilización en sus etapas más avanzadas du-
rante pocos siglos, los más recientes, un simple fragmento y a las instituciones sociales de todas clases.
Así pues, existen esos dos métodos de tratar los he-
de la vida en conjunto de la humanidad en la tierra. La ar-
chos culturales, y, como son diferentes, tanto por los resul-
queología, al excavar el suelo y poner al descubierto las
tados que persiguen como por los procedimien:os lógico~
construcciones b emplazamientos de las ciudades y al de-
mediante los cuales intentan conseguirlos, conviene consi-
volvernos las herramientas, y ocasionalmente los huesos
de razas y pueblos de mucho tiempo atrás, nos permite co~
derarlos como estudios diferentes, aunque relacionados in-
dudablemente, y darles nombres distintos. Ahora bien, los
nacer algunos de lo~ detalles del vasto período prehistóri-
nombres «etnología» y «antropología social» parecen muy
co. El análisis etnológico de la cultura, que he ilustrado
adecuados para ese fin, y propongo que se utilicen de este
con el ejemplo de Madagascar, completa el conocimiento
modo. Creo que ya existe una clara tendencia a diferenciar
procedente de la historia y de la arqueología.
el uso de estos dos términos en forma muy parecida, pero,
Este estudio histórico de la cultura nos aporta sola-
que yo sepa, nunca ha llegado a ser sistemática. Así pues,
mente un conocimiento de los acontecimientos y de su or-
propongo reservar el uso del término etnología para el estu-
den de sucesión. Existe otra clase de estudio que propongo

:s
dio de la cultura mediante el método de la reconstrucción brados hasta los mamíferos superiores .. Pero esas etapas ~: .
histórica ·más arriba descrito, y usar el término antropolo- sucesivas sólo se entienden realmente cuando hemos for-
gía social como nombre del estudio cuyo objetivo es for- mulado las leyes por las que se han producido; y sólo
mular las leyes generales subyacentes a los fenómenos cul- entonces podemos considerarlos corno etapas de un proce-
turales 3• Me parece que al hacer esta sugerencia no hago so evolutivo.
otra cosa que· hacer ·explícita una distinción que ya está Los antropólogos del siglo pasado consideraron la evo-
implícita en la mayoría de los usos actuales de estos tér- lución casi exclusivamente desde el punto de vista históri-
minos. co v no desde el inductivo, y su objetivo era, no descubrir
Creo que el reconocimiento claro de la existencia de las "'reyes fundamentales que operan en el desarrollo de la
dos métodos completamente diferentes de estudiar los he- cuitura, sino demostrar que dicho desarrollo ha sido un
chos culturales nos ayudará a entender las polémicas so- proceso por el que la sociedad humana pasó por una serie
bre el método que hán acaparado la atención de los estu- de etapas o fases. Eso resulta más que evidente, cuando
diosos en los últimos años. recordamos algunos de. los temas de discusión de que se
Durante la segunda mitad del siglo pasado, la concep- ocupaba en iran medida la antropología hasta hace pocos
ción de la evolución Ilamó, o incluso acaparó, la atención años. Existía, por ejemplo, la opinión, expresada por pri-
de los científicos, y, por eso, los antropólogos de aquella mera vez por Bachofen, de que todas las sociedades hu-
época se vieron obligados en gran medida a adoptar el manas pasan por una etapa matriarcal, es decir, una etapa
punto de vista evolucionista en su estudio de la cultura. de desarrollo en que el parentesco se contaba exclusiva o
Ahora bien, el concepto de evolución se presta a la ambi- principalmente a través de las mujeres, a través de la ma-
güedad. Si lo consideramos desde el punto de vista in- dre y no del padre, con el corolario de que los pueblos
ductivo, un proceso de evolución es el producido por la rnatrilineales son en todos los ·casos más primitivos que
acción acumulativa de una o varias. causas que actúan los patrilineales, es decir, que representan una etapa ante-
continuamente~ Según la teoría de Darwin, la evolución rior del desarrollo o evolución. Después, cuando surgió el
biológica es un proceso debido a una acción continua de interés por el totemismo, algunos antropólogos, basando
los principios de la herencia, de la variación y de la selec- sus conclusiones en la enorme distribución de esa institu-
ción natural. En este sentido, la única forma de demostrar ción entre los pueblos no civilizados, supusieron que el to-
que la cultura es un proceso evolutivo es la de revelar de- temismo era una etapa necesaria en el desarrollo de la
terminados principios o leyes de cuya acción continua ha sociedad y de la religión; y Kohler y su seguidor, Durk-
resultado. Pero, si adoptamos lo que podríamos llamar el heim, llegaron hasta el extremo de suponer que la forma
punto de vista histórico, a veces un proceso evolutivo pue- totémica de sociedad era la etapa más antigua en el desa-
de considerarse corno una serie de etapas sucesivas de desa- rrollo de la sociedad sobre la que podíamos obtener infor-
rrollo. Así, en la historia de la materia viva en la tierra mación.
los testimonios de la biología nos muestran que ha habi~ El mejor ejemplo del tipo de teorías que interesaban.
do períodos sucesivos caracterizados por la aparición de principalmente a lo que se ha llamado la escuela evolucio-
formas diferentes de organismos vivos, desde los inverte- nista de antropología se encuentra en la Ancient Society
3. Se me puede preguntar por qué no uso la palabra "sociología" en de Levlis Margan. En ella intenta definir una serie de eta-
lugar de la expresión "antropología social", indudablemente más oesada.
La razón ~s en parte el uso; además, gran parte de lo que en los. países pas del desarrollo social, caracterizada cada una por deter-
de habla mgl~sa se sl!-~!e lla~ar sociología es un estudio algo informe, minadas instituciones sociales; y considera a los salvajes
de cuyos part1danos OJee Stemmetz: "on désire des vérítés Zarges, éter-
n;olles,. vala~Ies pour toute l'humanité, comme prU: de quelques heures de la actualidad como representantes de las etapas a tra-
ae speculatwn somnolente".
vés de las cuales pasaron los pueblos civilizados siglos
30
31
atrás. Otros antropólogos no aceptaron enteramente las teo- nista nunca estuvo completamente segura de sus propios
rías de Margan, pero algunos estudiosos del tema acepta- fines, nunca resolvió claramente si lo que pretendía era
ron algunas de ellas, y todavía hay quienes siguen acep- hacer una reconstrucción de la historia de la cultura o des-
tándolas. E incluso quienes rechazaron las r.Jpótesis parti- cubrir las leyes generales de la cultura como un todo. La
culares de Margan aceptaron, en cualquier caso, su punto consecuencia de aquella falta de seguridad fue un vicio
de vista general, el llamado -mal llamado, en mi opinión- metodológico fundamental, que ahora no tengo tiempo de
punto de vista «evolucionista». examinar, pero que volveré a tener que mencionar más ade-
La suposición que Margan y otros antropólogos hicie- lante en esta conferencia.
ron fue la de que el desarrollo de la cultura se produjo a Ya en el siglo pasado hubo una escuela importante en
lo largo de una sola línea; todas las culturas que cono- Alemania que adoptó principios metodológico-S fundamen-
cemos pueden disponerse en una única serie a lo largo de talmente diferentes de los de la escuela evolucionista. Di-
una línea, de modo que puede suponerse que cualquier cul- cha escuela, fundada por Ratzel, recibió a veces el nombre-
tura situada en la parte alta de la línea ha pasado por eta- de escuela «geográfica». Schmidt y Frobenius, sus represen-
pas representadas por las que están situadas en la parte tantes más recientes, llaman a su método kulturhistorische
baja de la serie. Esta suposición, todavía aceptada aparen- y Kulturmorphologie, respectivamente, mientras que Graeb-
temente por algunos, ha llegado a ser cada vez más difícil ner y otros llaman <<etnología» a sus estudios. La caracte-
de defender, a medida que ha aumentado el conocimiento rística principal de la escuela es que centra su atención, a
de los pueblos de la tierra y de la diversidad de sus cultu- veces exclusivamente, en los fenómenos de difusión de la
ras. Una mayoría de hechos abrumadora nos muestra que cultura. Sabemos que ciertos elementos culturales pueden
el desarrollo de la cultura no se ha producido a lo largo de pasar de una región a otra o de un pueblo a otro mediante
una única línea, sino que cada sociedad desarrolla su tipo varios procesos. Así, en época reciente, Japón ha adoptado

1
~
especial como resultado de su historia y de su medio am- muchos de los elementos de la civilización europea. El pro-
biente. ceso, que podemos ver producirse a nuestro alrededor, no
Sin embargo, en esta ocasión no tengo tiempo para en~ es nada nuevo, evidentemente: ha estado produciéndose
.
trar en una crítica de la llamada escuela evolucionista. En desde que la humanidad se extendió por la tierra, y resulta
años recientes ha recibido muchas críticas, en Inglaterra, bastante evidente que debe de haber desempeñado un pa-
en Alemania y en Estados Unidos, y puedo remitirles al pel importante en la historia de la cultura.
libro del profesor Lowie titulado Primitive Society para Así pues, en los primeros años de este siglo el estudio
que consulten una crítica razonada y convincente, creo yo, de la cultura había alcanzado una posición en la que había
del tipo de teoría evolucionista de que Margan es el repre- dos escuelas, que perseguían fines diferentes y tenían poca
sentante más típico. Lo único que aquí me interesa es seña- o ninguna relación entre sí. Los antropólogos evolucionis-
lar que los antropólogos de dicha escuela consideraban la tas lo consideraban todo desde el punto de vista del desa-
cultura Y la historia de la cultura desde un solo punto de rrollo y tenían tendencia a considerar el desarrollo de la
vísta, a saber, como un proceso de desarrollo v se intere- cultura como un proceso de evolución a lo largo de una
saban exclusiva o principalmente por los p;oblemas del única línea. Los estudiosos de la «historia cultural» estu-
desarrollo, y que consideraban el desarrollo de la cultura diaban casi exclusivamente los fenómenos del paso de ele-
desde el punto de vista histórico, como una sucesión d~ mentos culturales de una región a otra, y una de dos : o
etapas Y no, desde el punto de vista inductivo, como resul- rechazaban el concepto de evolución o no les interesaba. La
tado de la acción de leyes espécíficas. Pasando al quid de primera .de dichas escuelas predominaba en Inglaterra; la
la cuestión, tal como la entiendo, la antropología evolucio- segunda, en Alemania.

32
En 1911, el Dr. Rivers, en su disertació:n. presidencial a .. se ha prestado cada vez mayor atención a la cuestión
la Sección de Antropología de la Asociación Británica, llamó la explicación de la gran masa de datos así recogidos, ~
la atención sobre aquella divergencia entre los métodos de ha existido la tendencia a adoptar lo que he llamado el me-
trabajo de los antropólogos evolucionistas y los de los es- todo histórico de explicación. La influencia de Boas en ese
tudiosos de la historia cultural, e indicó que, para que el sentido ha sido· enorme. En el artículo «Eighteen Profes-
estudio de la cultura progresara, debían combinarse ambos
sions», publicado en 1915 por el profesor ~roeber: enco_n-
métodos. Expresó la opinión de que, antes de que podamos tramos una insistencia muy clara en el punto de VIsta his-
considerar los problemas del desarrollo, hemos de conside- tórico estricto. Muchos autores, entre los que puedo men-
rar los. efectos de la difusión. «Las. especulaciones evolu- cionar a ~wanton. y a Lowie, han criticado a fondo las
cionistas no podrán tener una base firme hasta que no las
doctrinas evolucionistas, especialmente las representadas
haya precedido un análisis de las culturas y de las civili-
por ,Margan. Una sola cita bastará para ilustrar. el punto
zaciones actualmente diseminadas por la faz de la tierra.)> de vista típj.co en conjunto de los autores amencanos ac-
Así, lo que el Dr. Rivers IIamó el «análisis etnológico de tuales, o,.en cualquier caso, de gran número de ellos, Y voy
la cultura», que ya he ilustrado con el ejemplo de Mada- a sacarla de una obra en que Sapir intenta establecer los
gasc~r, adquirió_ mayor prominencia en Inglaterra, en gran principios mediante los que se pue~e reconst~r _la h~:toria
medida por_ la mfluencia del propio Rivers, y, aunque lo de la cultura a partir de un estuctw de la distnbucwn lo-
hemos perdido por su prematura muerte (que ha sido una cal de los diferentes elementos culturales. Bajo el encabe-
de las mayores pérdidas para la ciencia en los últimos años), zamiento «La etnología como ciencia histórica», escribe:
ha~ en In_glaterra_autores como Perry y Elliott Smith que
estan reahzando estudios en ese dominio con entusiasmo y La antropología cultural está llegando cada vez
eficacia.
con mayor rapidez a verse a sí misma como una
N~ tengo tiempo para tratar de las teorías y métodos ciencia histórica. Sus datos no pueden entenderse,
de dichos autores, y lo único que ahora me interesa es en sí mismos o en su relación mutua, de otra forma
mostrarles que, gracias a su influencia, se está llegando a que como extremos de sucesiones específicas de
adoptar cada vez más el punto de vista claramente histó- acontecimientos que se remontan al pasado remoto.
rico. Como ya he observado, los antropólogos anteriores Algunos de nosotros podemos interesarnos más por
no estaban del todo seguros de si deseaban reconstruir Ia las leyes sicológicas del desarrollo humano, que
histori.a de la civilización o descubrir sus leyes, y muchas nos consideramos capaces de extraer de la materia
veces mtentaban hacer ambas cosas a la vez. Los autores prima de la etnología y de la arqueología, que por
más recie~tes saben cor: toda claridad cuál es su objetivo: el establecimiento de hechos y relaciones históricos
mostrar como se han difundido por el mundo los diferen- concretos, que pueden volver inteligible ese mate~
tes elementos culturales a partir de un único centro. Por rial, pero no está claro en absoluto que la formu-
tanto, su método es el histórico.
lación de esas leyes sea tarea del antropólogo más
En Am~rica, después de la obra importante de Margan, que del historiador, en el sentido habitual y estric-
hubo relativamente poca actividad teórica. Los estudiosos to de la palabra.
de la ~~ltura estaban totalmente ocupados recogiendo in-
for~acwn ~o?re los nativos de su país, que estaban desapa- Sapir usa las palabra~ etnología y antropología como si
reCiendo rapidamente, y dando un ejemplo al resto del fueran intercambiables, pero se refiere al estudio que pro-
mundo, que desgraciadamente no se ha sefluido por lo me- pongo llamar etnología propiamente dicha, y, por esa ra~
nos no en el Imperio brüánico. Pero, en ~los ¿lÚmos diez zón, opina que debería limitarse estrictamente al método
> ·';.-,_.

r·_

histórico de interpretación y excluir todos los intentos de qllien~s consideran completamente posibl~ q~e 1~ mism_a
descubrir leyes generales. . invención se haya hecho dos veces y que mst1tuC10nes se-
Así, vemos que del conjunto, indiferenciado, o escasa- . mejwtes se hayan desarrollado en sociedades entre las cua-
mente diferenciado, constituido por la etnología-antropolo- les no haya contactos directos o indirectos. Así, algunos
gía del siglo pasado se ha ido separando gradualmente una de los autores americanos sostienen que es por lo menos
ciencia especial (para la que propongo que se reserve ex- posible que la alfarería se descubriera dos veces in~epen­
clusivamente el nombre de etnología), que se limita cada dientemente, en el Viejo Mundo y en el Nuevo. Es eVldente
vez más estrictamente al punto de vista histórico. La ma- que, mientras persista este desacuerdo sobre los postula-
yoría de sus estudiosos rechazan las teorías evolucionistas dos metodológicos fundamentales del estudio, no podrá ha-
de la primera época, bien absolutamente bien por conside· ber acuerdo con respecto a los resultados. Las pruebas adu-
rar que, en cualquie_r caso, no están demostradas y deben cidas por algunos autores para apoyar sus teorías otros las
modificarse. Algunos de ellos se limitan casi enteramente a rechazan por considerar que no lo son, y, en lugar de la
los problemas de la difusión de la cultura, mientras que cooperación, se producen polémicas, que exacerban las pa-
otros estudian también los problemas de su desarrollo, pero siones, confunden las cuestiones debatidas y envenenan la
sólo desde el punto de vista limitado a que les ha condu- atmósfera de tranquila imparcialidad, que es la única en
cido su entendimiento de la etnología como un intento sis- que la ciencia puede vivir. Lo único que podemos esperar
temático de reconstruir la historia de la cultura. es que los etnólogos, después de haber reconocido el carác-
Se han hecho intentos de definir de la fornia más pre- ter limitado de su estudio, como intento de reconstruir la
cisa posible los métodos de dicho estudio. Han tratado ese historia de la cultura, sean capaces de llegar a un acuerdo
tema Graebner en Alemania, Rivers en Inglaterra y varios más amplio con respecto a los métodos y de esa forma
autores en los Estados Unidos. Desgraciadamente, esos di· aportarnos resultados que puedan presentarse a todo el.
ferentes autores no han podido, hasta ahora, llegar a acuer- mundo por estar respaldados por la aceptación autorizada
do general alguno con respecto a los métodos que debe uti- del conjunto total de especialistas en la materia.
lizar la etnología. En particular, existen grandes diferencias Pero, ¿qué decir del otro estudio que al principio iba
de opinión por lo que respecta a algunas de las hipótesis incluido en el conjunto antropología-etnología? Hemos vis-
metodológicas y a las cuestiones de qué es a lo que se pue- to que autores como Kroeber y Sapir insisten en la nece-
de y a lo que no se puede llamar prueba. Así, algunos et- sidad de excluir de su ciencia particular (la etnología, tal
nólogos, cuyo ejemplo más extremo quizás sea Elliott Smith, como la estoy llamando) todos los intentos de descubrir
tienen tendencia a explicar todas las semejanzas culturales leyes generales. Supongo que no negarían que sea posible
existentes en el mundo entero como debidas a la difusión descubrir leyes generales en los fenómenos culturales o
a partir de un único centro. Si encuentran el mismo ele- que el intento de hacerlo esté justificado. Supongo que ad-
mento cultural en dos regiones, tanto si se trata de regio- mitirían que se pueden estudiar los hechos culturales des-
nes relacionadas como si no, suponen que se ha difundido de el punto de vista inductivo, de acuerdo con los mismos
a partir de un centro único. Por regla general, negarán la métodos que las ciencias naturales aplican a todos los •
posibilidad de que la misma invención se haya hecho en dos demás fenómenos del universo. 'Pero los dos autores cita-
ocasiones o de que la misma institución se haya desarrolla- dos, y también otros, generalmente llaman a ese estudio
do independientemente en lugares y épocas diferentes. Creo inductivo de la cultura <<sicología».
que Elliott Smith consideraría incluso que todas las for- . .
Deseo subravar con la mavor insistencia que la antro-
mas de totemismo proceden de un mismo origen y se han pología social es una ciencia tan independiente de la si-
difundido a partir de un centro único. Por otro lado, hay cología como ésta lo es, a su vez, de la fisiología o la quí-

3ó 37
- .
mica de la física; ni más ni menos. Esta posición no_ es ·_ · el" proceso por el que una sociedad impone un castigo
nueva en absoluto. Durkheim y la importante escuela de
un asesino abarca las acciones del policía, del juez y del
L'Année Sociologique han insistido en ello desde t895.
. Y, si fuéramos a considerar la cuestión comple-
En esta ocasión no puedo comentar la cuestión de la
tamente, deberíamos añadir el periodista que informa so-
relación de la antropología social con la sicología, pero voy
bre el juicio y el ciudadano que lee el informe en su perió-
a intentar aclarar la diferencia entre ellas con un ejemplo.
dico. Pero el ejemplo nos ha mostrado que la sicología
Un hombre comete un asesinato; la policía lo detiene; lo
y la antropología social consideran esas acciones desde
llevan ante un juez y un jurado, y lo juzgan; y el verdugo
puntos de vista completamente diferentes. Lo _que tienen
lo ahorca. Aquí tenemos una situación en que varios indi-
de pertinente para una ciencia es en gr.an medida insigni-
viduos con sus propios pensamientos, sentimientos y ac-
ficante para la otra.
ciones intenrienen. Se puede estudiar el comportamiento
En el tiempo de que dispongo en esta ocasión, no pue-
de dichos individuos, el asesino, el policía, el juez, etc., den-
do aspirar ·a mostrarles exactamente cuáles son las dife-
tro de la situación general, que tendríamos que dar por
rencias entre la sicología y la antropología social. Pero
sentada. Semejante estudio sería esencialmente del dominio
quizás el ejemplo que he elegido sea suficiente para mos-
de la sicología. Pero, por mucho que lo profundizáramos,
trarles que hay una diferencia. Ahora bien, creo que una
no nos aportaría explicación alguna del procedimiento en de las razones que explican la incapacidad de la antropo-
conjunto en el que los individuos desempeñan sus papeles logía social para situarse en la posición que debería ocu-
respectivos. Para ello hemos de estudiar la situación en par ha sido la incapacidad para reconocer que es comple-
conjunto como un todo, considerándola como una acción tamente diferente de la sicología. El estudio de la llamada
realizada por la sociedad, el Estado, a través de sus repre- «sicología étnica» en Alemania y gran parte de la antropo-
sentantes especialmente designados, como una reacción co- logía de Inglaterra han consistido en intentos de explicar
lectiva por parte de la sociedad ante las circunstancias par- las costumbres y creencias de los pueblos primitivos desde
-ticulares que resultan del asesinato. Y, en ese caso, los in- el punto de vista de la sicología, es decir, de los procesos
dividuos como personas particulares, con sus pensamien- mentales de los individuos. Explican, por ejemplo, la creen-
tos y sentimientos particulares, dejan de tener interés o cia en la magia como resultado de las leyes sicológicas de
importancia para nuestro objetivo. El objeto de nuestro la asociación de ideas. Semejantes aplicaciones de la sico-
estudio es el proceso en conjunto y los individuos no nos logía a los fenómenos de la cultura nunca podrán consti-
interesan excepto en la medida en que participan necesa- tuir una ciencia, de igual forma que el intento de explicar
riamente en dicho proceso. Ahora bien, esos estudios de el comportamiento de los individuos enteramente desde el
las instituciones y de las reacciones sociales son la tarea punto de vista de la fisiología no puede sustituir a la sico-
especial de la antropología social, tal como la definí al logía. Si eso fuera lo único que la antropología social pu-
principio de esta disertación.
-diera ofrecer, en ese caso los autores que incluyen dentro
Así pues, podemos enunciar la distinción entre sicolo- de la sicología todos los estudios de la cultura que no sean
gia y antropología social algo toscamente diciendo que la estrictamente históricos estarían justificados. Pero una vez
primera trata del comportamiento individual en su rela- que reconozcamos, pues ya es hora de que así lo haga-
ción con el individuo; mientras que la seg>.1nda trata del mos, que la antropología social es una ciencia independiente,
comportamiento de los grupos o de las comunidades indi- con su propio objeto de estudio especial, y sus métodos
viduales, formadas por individuos, en su relación con el distintivos propios, cuyo objetivo es descubrir leyes que
grupo. Es absolutamente .cierto que el comportamiento co- no son en sentido alg'~no leyes sicológicas, entonces y sólo
lectivo abarca las acciones de los individuos. Hemos visto entonces encontrará su posición propia y progresar:í.
38
· Otra cosa que ha impedido el desarrollo de la antropo- ·mejor cono~fda sea la d~ Sir James F~azer, según la cual
logía social ha sido la influencia de la idea de evolución hombre primitivo, por ignorar la fisiología de la· canee p-
en la forma particular en que se desarrolló por primera . ción, sacó la conclusión de que una mujer quedaba emba-
vez, con el sesgo histórico que desde el principio resultó razada por la comida que tomaba; en función de esa creen-
evidente en el estudio de la cultura. Hemos visto que la cia surgieron costumbres que exigían a cada individuo ob-
etnología moderna ha acabado por rechazar el concepto servar determinadas obligaciones rituales para con la es-
de evolución como una sucesión de fases a través de las pecie de animal o de planta de la que procedía; así nació
cuales pasa la sociedad humana. Igualmente necesario es una forma de totemismo (el totemismo de la concepción)
que la antropología social rechace la- doctrina evolucionis- y de él derivan todas las demás. Sir James Frazer no nos
ta de ese estilo, aunque sólo sea porque .no está demos- dice si cree que ese proceso se produjo una vez en una
trada lo más mínimo. región determinada y que a partir de ese centro el totemis-
Si la antropología social ha de usar la idea de evolu- mo se difundió por todo el mundo, o que el mismo pro-
ción (y, por mi parte creo que puede y debe hacerlo), habrá ceso se pn~dujo independientemente en diferentes partes
de ser en la forma de una formulación de leyes o principios ·del mundo.
generales de cuya acción continua han resultado las dife- La objeción metodológica a esa teoría, y a todas las
rentes formas de sociedad, pasadas y presentes (de igual teorías del mismo tipo, es que no parece que haya forma
forma exactamente como la teoría evolucionista de la bio- de verificarla. Es posible que podamos mostrar que el to-
logía intenta formular las leyes generales cuya acción ha temismo podría haber surgido de esa forma (aunque eso
prod~cido las diferentes especies vivas y extintas). Pero supone una gran cantidad de conjeturas con respecto a
ese tipo de leyes no se podrán formular hasta que no haya la forma en que surgen las instituciones sociales), pero no
hecho progresos enormes la ciencia. podemos, en modo alguno que pueda yo imaginar, probar
El efecto del sesgo histórico de los primeros antropólo- que esa es la forma en que surgió efectivamente.
gos, Y de la falsa idea de evolución a que condujo a auto- Además, esa teoría, y lo mismo podemos decir de otras
res como Margan, fue el de que los antropólogos investiga- parecidas, aun cuando explicase la forma en que nació el
r~n, no las leyes: sino los orígenes. Hemos visto surgir tea- totemismo en una ocasión, no explica cómo consigue se-
nas so~re e_l ongen del totemismo, sobre el origen de la guir existiendo. Y ése es un problema tan absolutamente
exoga:U.I~ e mcluso teorías sobre el origen del lenguaje, de importante como el problema del origen.
la rehgwn y de la propia sociedad; y las teorías de ese tipo Ahora bien, si dejamos de lado completamente la cues-
han ocupado un lugar muy amplio en la literatura antro- tión del posible origen u orígenes del totemismo y, en su
pológica. Pero hay motivos para dudar de si han mejora- lugar, intentamos descubrir sus leyes, obtendremos . una
do nuestro conocimiento y entendimiento de la civilización teoría de un tipo enteramente diferente y, si me permiten,
salvo en forma muy indirecta al llamar la atención sobre eÍ ilustraré la cuestión mediante una breve formulación de
inter~s ~ue ofrece la cultura de los pueblos primitivos y mi propia teoría del totemismo, en forma de unas cuantas
contnbu:r de es~ forma a su estudio más completo. afirmaciones generales que me parece que se podrán probar
Permitanme Ilustrar la diferencia entre el estudio de positivamente en el futuro mediante los métodos lógicos de
los. o~ígenes y el est~dio de las leyes mediante un ejemplo inducción ordinarios :
específico. En los cmcuenta últimos años ha habido una 1) En las sociedades primitivas, todas las cosas que
g:an cantidad de teorías sobre el origen del totemismo, tienen consecuencias importantes sobre la vida social se
nm~na de las cuales ha obtenido hasta ahora, ni parece convierten necesariamente en objetos de observancias ri-
posible que pueda obtener, la aceptación general. Quizás tuales (negativa o positiva), cuya función es expresar, y de

40 41
. ese modo fijar y pe t 1
cial de lo b. . rpe uar, e reconocimiento del valor so-
s o Jetos a que se refieren: > ci~rto que el proceso de verificación es lento. La prime-
2) En consecuencia en una so . d vez que me· interesó ·· el totemismo fue hace dieciséis
teramente o en gran me~fd ere ad que dependa en- s, y decidí empezar estudiando un pueblo primitivo que
y de la recolección las ~-~para su subsistencia de la caza · no conociera el totemismo, en caso de que se pudiera en-
de plantas, Y más e~ parti~~ren~es especies de animales Y contrar. Encontré ese pueblo en las islas Andaman, y, des-
se convierten en objeto d ~r as us_adas_ para la comida, pués de trabajar entre ellos, me arriesgué a formular una
3) E . d d e o servancras ntuales
n sacre a es diferenciadas d d . . hipótesis de trabajo sobre el totemismo en forma muy pa-
(como, por ejemplo, las tribus dividid e etennmados tip?s recida a como acabo de enunciársela a ustedes. Después fui
en grupos de parientes) lo d"f as en clanes, es decrr, a Australia, donde se encuentran algunas de las formas
diferenciarse unos de· ot' s I de~entes segmentos tienden a más interesantes de totemismo, con la intención de pasar
.
nnentras que las 0 1 ros• me rante dife..encras · d e ntua1
. ,
oservancras del ·
J.
· ' allí los ocho o diez años que pensé serían necesarios para
toda la tribu se dedic , mrsmo trpo general para
an a a1gun ob. t 1 verificar mi hipótesis. Desgraciadamente mi trabajo se vio
especial para cada uno d o Je o o e ase de objetos interrumpido después de poco más de dos años por la gue-
4) . e sus segmentos.
.. En consecuencra, mientras . rra, y, aprovechando una oportunidad, fui después a Poli-
diferenciadas (como los habi+a que en la: socredades in- nesia, donde se pueden encontrar los que parecen restos
la relación ritual con lo .• lntes de las Islas Andaman) de un sistema totémico ahora incorporado a un sistema de
. s amma es y pla t d
cormda es una relación . . n as usa os para la politeísmo. De forma que, si bien no puedo decir que haya
ciedad en conJ·unto y 1 genedrai mdiferenciada entre la so- conseguido verificar completamente la hipótesis, sí que he
. e mun o natur 1 ·
socredades diferenciadas 1 t d . a en conJunto, en las podido ponerla a prueba en un terreno bastante áinplio. En
llar relaciones rituales a -~n encra general es a desarro- cualquier caso, la presento aquí como ejemplo,.no de una
mentos (clanes u otrosespecr e; entre cada uno de los seg- hipótesis verificada, sino de una que por su naturaleza se
animai o de planta o e grupos. y una o más especies de puede verificar, cosa que no ocurre con las hipótesis sobre
• d
era1 e la naturaleza q
' n ocasrones algun d" .. ,
. 1 a rvrsron espe-
ue rnc uye un a sene · d e especies el origen del totemismo.
Desde Tu Sin embargo, la palabra "origen» tiene carácter ambi-
J. ego, en esta ocasión no d d .
plicar esta teoria del t t . pue o esarrollar y ex. guo. En el sentido en que la usó Darwin en el título de su
o emrsmo La ·
proposiciones son· form 1 . · pnmera Y la tercera obra sobre El origen de las. especies se refiere a las fuerzas
u acwnes de 1
examen abarcaria la t , eyes generales cuyo o ·reyes que han actuado en el pasado y siguen actuando
eona completa d 1 · 1
ra1 . Les ofrezco esta f
4
1 ., e ntua en gene- para producir y perpetuar modificaciones en la materia
ormu acwn des d d 1
mostrar que es posibl d. nu a e a teoría para viva. En este sentido, la teoría que he resumido podría lla-
e rsponer de u ,
mo, que, si llega a ven·fi ~ na teona del totemis- marse también teoría del origen del totemismo. Trata de
, Ca.rse, nos ayud ,
no solo el totemismo . b ara a comprender las fuerzas o leyes que han actuado en el pasado y siguen
. , smo tam ién h
necesrdad de comprom t ~uc as otras cosas, sin actuando para producir y perpetuar modificaciones en la
. e erse con nrnaun h" , .
e1 ongen o los oriaenes h. t, . o a rpotesis sobre cultura, y explica mediante la referencia a ellas la existen-
.
qurero señalar e . . o rs oncos del t o t emrsmo. . Adem-'s
. ' Insrsto en este
J.
. J. <..l. '
cia del totemismo en unas sociedades y su ausencia en
este tlpo (ya sea la re 'd , punto, que una teoría de otras.
. sumi a mas arrib
venficar mediante los a u otra) se puede Pero el significado más usual atribuido a la palabra ori-
procesos ordinarios de la I·nd .,
• uccron. gen, tanto en el uso general como en la antropología, ha
4. Ya he publicado en u sido el histórico. Una institución particular nace en un
And?man, Parte de las' Pruebnasa obra sobre los habitantes d
macwnes. · en que se b ¡ e las islas momento de tiempo determinado en dete:::-minada sociedad
asan as des primeras afir-
como resultado de determinados acontecimientos. Para co-
42
43
·,, ..,· ,·

..
..

nc)cer· su origen debemos saber cómo y, a ser posible, dón-


de Y cómo apareció por primera vez. En este sentido es en P artir de ella desarrolla uri conjunto inmenso de costum-
a 1 .
bres rituales, como las relativas a la ~uerte y a. e~tie~o Y
~I que estoy utilizando la palabra origen, y lo que estoy
al culto a los antepasados. Ahora bien, esa hipotes1s de
mtentando mostrarles es que la antropología social no se
ue los cambios en la cultura se producen generalmente de
ocupa o no deberia ocuparse especialmente del .origen en
;sa forma, por el deseo de entender y mediante la formu-
este sentido. Es cierto que, en los casos en que disponemos
lación de una explicación y el establecimiento de una cos-
de datos históricos referentes al origen de una institución
tumbre como resultado de la creencia así obtenida (y ésta
particular, ese conocimiento puede ser de gran valor para
parece ser la hipótesis subyacente a muchas .otras teorías
la_ antropología social. Pero las hipótesis no verificadas, y
de los origenes, además del ejemplo que he, citado) es ~a
generalmente imposibles de verificar, sobre los origenes
lev creneral que requiere demostración. Puede ser aplica-
no son de la más mínima utilidad para nuestra investiga- • o d
ción de leyes demostrables. ~ ble a algunos de los cambios que se pro ucen en nuestras
propias civilizaciones avanzadas, en las que el d_eseo Y la
Las fuerza: sociales específicas cuyo estudio constituye
búsqueda de explicaciones han llegado a ser muy Import~­
la tarea especial de la antropología social están constante-
tes gracias al desarrollo de la ciencia. Pero soy de la opi-
mente presentes en cualquier sociedad y, por esa razón, pue-
nión de que su importancia es relativamente menor entre los
den observarse y estudiarse, de igual forma que la sicología
puede observar las fuerzas que actúan en el comportamien- pueblos primitivos y que, entre ellos, la b~~e del desarr~~o
to del individuo. de la costumbre es la necesidad de acc1on, y de accwn
colectiva, en determinadas circunstancias concretas que
L_o que estoy _intentando aclararles es que la búsqueda
afectan a la sociedad o al grupo, y que la costumbre y las
contmua de teonas de los orígenes ha impedido el desa-
creencias que van asociadas a ella se desarrollan para satis-
rrollo de la antropología por direcciones que darian los
facer dicha necesidad. Sin embargo, el examen de todo
resultados _más :aliosos. No sólo no es necesario para la
esto nos llevaría muy lejos, y lo cito sólo para mostrar que
~tr?~ologi~ social ocuparse de las teorías de los origenes
~~toncas, smo que además dichas teorias, o la concentra- las teorías del origen, como la teoría animista, o la teoría
del totemismo de Frazer, suponen necesariamente conjetu-
cwn de la atención en ellas, puede ser muy perjudicial.
· Aden:ás, las teorias sobre el origen, en los casos en que ras que, en caso de ser ciertas, constituyen leyes generales,
no disponemos de datos históricos efectivos, han de des- y que, por tanto, antes de pasar a la constn:-cci~n de teo-
rías sobre el origen, es necesario examinar mmuc1osamente
cansar por fuerza sobre leyes generales conjeturales. Mu-
nuestras leyes generales conjeturales y demostrarlas me-
chas de las teorias de la antropología tradicional se basan
en la suposición de que los cambios en la cultura se pro- diante una inducción suficientemente amplia. .
ducen por la necesidad y el deseo por parte del hombre de Espero que ahora vean dónde nos ha conducido 1~ ar-
entender Y explicar los fenómenos del mundo que lo rodea· gumentación. La confusión que ha reinado en el estudio de
dicho deseo, lo conduce a formular explicaciones y, una ve; la cultura, que ha retardado su progreso y que en añ~s re-
aceptadas estas, modifican sus acciones y se desarrollan cientes ha causado mucha insatisfacción a sus estudiosos
costumbres sociales de diferentes tipos. El ejemplo clásico es consecuencia de no haber considerado de forma lo sufi-
de esa hipótesis se encuentra en la teoría del animismo de cientemente completa la metodología de la materia. El re-
T~ylor Y Frazer. El hombre primitivo desea explicar los fe- medio es reconocer que los dos métodos diferentes de ex-
nomenos de los sueños y de la muerte; formula la hipótesis plicar los hechos culturales, el histórico y el inductivo, de-
de que el hombre tiene un alma que sobrevive a la muerte ben mantenerse cuidadosamente separados, cosa que se
del cuerpo; y, después de haber aceptado dicha hipótesis, conseguirá más fácilmente si reconocemos que pertenecen
a estudios diferentes denominados de formas distintas. Así,
44
45
,_·_ ..

tropología social algunos, muy poco~, ~e.chos nuevos. No


la · étnología-' pasa a ser el nombre del intento de recons-
truir la historia de la cultura y ha de adoptar un punto de
.·puede hacer nada más. Para el cono~1m1ento d~ los cam-
vista dara y estrictamente histórico, y debe elaborar los
bios que se han producido y de las c1r6.lnstanc1as en que
métodos especiales mediante los cuales pueda sacar conclu-
se han producido, la antropología social ha de basarse en
siones con cierto grado de probabilidad. Esta es la opinión
la historia, no en la historia conjetural.
sostenida por la mayoría de los autores norteamericanos
Pero, por otro lado,. me inclino a pensar que la etnolo-
más recientes y está ganando terreno firmemente en Ale-
í~ nunca llegará demasiado lejos sin la ayuda de la a~tro­
mania y en Inglaterra. Así pues, la antropología social pa-
sará a ser el estudio puramente inductivo de los fenómenos
~ología sociaL Cuando Adam Smith intentó por primer~ vez
hacer «historia conjetural», intentó establecer sus conJetu-
culturales, que aspire a descubrir leyes generales y adapte
ras basándose en «principios conocidos>>. Cualquier recons-
a su tema de estudio especial los métodos lógicos ordina-
trucción hipotética -sólo puede dar pleno resultad~ si _se
rios de las ciencias naturales. De ese modo, vemos que las
basa en un conocimiento exacto de las leyes de la h1stona.
teorías del origen que han ocupado tanto lugar en la lite-
Pero la única que puede proporcionar esas leyes es la
ratura del siglo pasado constituyen una especie de no
antropología social. Si estudian la History of the ,~~lane­
man's land entre la etnología y la antropología sociaL
sian Society, en la que Rivers intentó hacer un anahs1s et-
Puesto que son intentos de reconstruir la historia de la
. nológico de la cultura de Oceanía y reconstruir su historia,
cultura, pertenecen más que nada a la etnología; pero,
verán que a lo largo de toda su argumentación sus con-
como suponen ciertas leyes generales, dependen de la an-
clusiones descansan sobre suposiciones con respecto a lo
tropología social para la demostración o verificación de
que es probable que ocurra en determinadas cir~unstan­
dichas leyes. En otras palabras, las teorías sobre los oríge-
cias: por ejemplo, lo que es probable que ocurra cuando
nes deben combinar los resultados de la etnología y de la
dos pueblos de cultura diferente se encuentran y se ~s~a­
antropología social, y llegará un momento en el futuro en
blecen en la misma isla. Ahora bien, todas esas suposicio-
que puedan hacerlo provechosamente. Pero, en el momento
nes son afirmaciones hipotéticas generales del tipo de las
presente,. lo que se necesita es obtener ahrunos
o resultados
que constituyen el tema de estudio especial de la antro~o­
concretos claros y generalmente aceptados por la antro-
logía social y que sólo se pueden verificar o hacer verifi-
pología social y por la etnología, y esto sólo se conseguirá en
cables mediante la inducción. Y la objeción principal a las
caso de que cada una de ellas se atenga a stis fines y méto-
dos especiales propios. suposiciones hechas por Rivers es la de que no están basa~
das en una inducción suficientemente amplia y, por tanlo,
Así, pues, dejando de lado ese no man's land de teorías
se prestan a la duda, a raíz de lo cuai toda la estructura
del origen, ¿que hemos de decir sobre las relaciones mu-
elevada sobre ellas resulta, por consiguiente, muy ende-
tuas entre la etnología y la antropología social? La antro-
ble.
pología social, como ciencia inductiva, debe atenerse exclu-
O vean el intento de Sapir de establecer principios me-
sivamente a los hechos y a las observaciones autentificadas
diante los cuales podemos leer lo que llama «perspectiva
de los hechos. En 1os casos en que la etnología propone
temuorah en los hechos de la distribución local de los
hipótesis que no están completamente demostradas (y en
rasg.os culturales. Verán en seguida una vez más que su-
el momento presente muy pocas son las hipótesis de la
pone, y se ve obligado a suponer, ciertos principios o leyes
etnología que pueden demostrarse completamente), la an-
generales. Puede que sean ciertos, o puede que no, pero
tropología social no puede usar dichas hipótesis. Pues ha-
sus demostraciones son cosa del método inductivo y, por
cerlo equivaldría a edificar hipótesis sobre hipótesis: una
tanto, de la antropología social. Y si la etnología ha de
estructura muy endeble. La etnología puede aportar a la
usar dichas suposiciones, y no veo cómo podría evitar ha-
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- . :-...
~

-····, ... _-.~-


- . ~--.. "'·'
.
. ,.'. .- ·. ~. ::.
-- .-,
·-.-. -
'cerio, dependerá de la antropología social para· su verifi- · ha de estar menos predispuesto ·contra su propia cien- ·
c1a,
cación.
. : da. Escribe :
Por tanto, una vez que se reconozca que la etnología y
la antropología social son estudios diferentes, uno histó- Si nasamos ahora del éxito del libro como ejempli:
rico y el otro inductivo, la relación entre ellas será de depen- ficació.n lógica de un método al propio méto~o, ¿que
dencia unilateral. La antropología social puede prescindir podemos decir de su valor? No nos queda mas reme-
de la etnología, pero parece que la etnología no puede pres- dio que reconocer que, aunque el método es con;ecto Y
cindir de las hipótesis que corresponden específicamente a el único justificable que han encontrado los_ etnol?gos, .
Ia antropología social. para el especialista en terrenos de la ciencia aleJados
Pasemos ahora a considerar otra cuestión importante, a y para el hombre de intereses intelectuales generale_s
saber, la del valor pr~ctico de los resultados que se pueden sus resultados han de parecer por fuerza bastante ~te­
esperar de Ia etnología y de la antropología social, respec- riles. Pocos de ellos pueden aplicarse en otras Cien-
tivamente. cias· la sicología, que sirve de fundamento a _la antro-
La etnología nos da una reconstrucción hipotética de la po-l;gía, no puede hacer suyos y utilizar práct:c~ente
historia pasada de la civilización; pero, si bien establece ninguno de ellos. En resumen, no aporta explicacwnes
algunos de su resultados con un grado de probabilidad bas- causales. El método nos ayuda a comprer:~er que tal
tante alto, otros son poco más que conjeturas plausibles. 0 cual cosa ha ocurrido en tal o cual ocaswn. Ez: rea-
Su valor práctico para la vida humana no puede ser dife- lidad, la naturaleza humana sigue siendo la nns.ma,
rente del de la historia y, desde luego, no puede ser mayor. ·con su conservadurismo, su inercia y su tenden:1a a
Muchas veces los hechos desnudos de la historia so"n muy la imitación. Pero las formas particulares que reVIsten
interesantes por sí mismos. Por ejemplo, puede interesar- las instituciones dependen evidentemente ~e ~n can-
nos saber que hace algt.!nos años un pueblo procedente del tidad de factores inmediatos variables, y, SI existen_ fac~
sudeste de Asia invadió Madagascar. Pero el mero conoci- tares comunes permanentes, o bien no se pueden aislar
miento de los acontecimientos del pasado no puede apor- 0 bien siguen siendo tan imprecisos como las tres te~­
tarnos por sí mismo una orientación para nuestras activida- dencias que acabamos de citar. Así, pues, la etnolog¡a
des prácticas. Para eso necesitamos, no hechos, sino gene- moderna dice esencialmente que tal o cual cosa ocu~re,
ralizaciones basadas en los hechos. La misión de la historia y puede decir por qué ocurrió .así e~ un caso par;lcu-
o de la etnología no es aportarnos esas generalizaciones, y lar. Lo que no dice, ni intenta decir, es por que las
ahora los historiadores y los etnólogos están empezando a cosas ocurren en la sociedad como tal.
reconocerlo. Por esa razón, no puedo convencerme de que Ese defecto puede ser inevitable. Puede no ser otra
las ingeniosas e interesantes interpretaciones de los etnólo- cosa que el resultado de un método cie?tífico correcto
gos vayan a ser nunca de gran valor práctico para la huma- en un terreno histórico. Pero parece Im~ortante ~ue
nidad. Pero, para que no piensen ustedes que a causa de mi los etnólogos reconozcan la situación. Mientras .siga-
interés por subrayar los derechos de la antropología so- mos ofreciendo al mundo únicamente reconstrucciOnes
cial me estoy mostrando injusto para con la etnología, les de detalles específicos y, en consecuencia, ~anteng~­
mos una actitud negativa hacia las conclusiones mas
citaré lo que dice el profesor Kroeber en su recensión del
amplias, el mundo encontrará pocas cosas aprovecha-
libro Primitive Society de Lowie. El profesor Kroeber es
bles en la etnología. Los hombres quieren saber. el p~r
uno de los más decididos exponentes del método estricta- qué de las cosas. Después ~e que decaiga el mteres
mente histórico en el estudio de la cultura y, en consecuen- inicial por el hecho de que los iroqueses tengan clanes
48
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.. ::· .-:.·.·:.

. -- >;t~~y;:;'~~1f?;~';i~i
,::·.-

'• ....

::':'~".!,;es:0!0;u::::~;;n83ll tót~ms, quie;en sa~ que la honradez del método, -que aparece ejemplifi:.::: ...::·:~,
respuesta de la et , tienen y nosotros no. La cado con tanto éxito en este caso, no adquiere. wi~.,' :¡:~
w· b .. nolog¡a, tal como la ejemplifica Lo- ·ritmo más rápido bajo la influencia de visiones de.· - ·...
le, es su stancialmente la de ue h .
solutamente pri·m·t· q ay tnbus tan ab- UJ.J.a empresa más ambiciosa.
I IVas como los i . 1
que se parecen a nosotros roqueses y os arunta
clanes y de tótems p por el hecho de carecer de Ahora bien, mientras que la etnología con su método
· ero, una vez más · t
pregunta justificada: . Po , ' se m erpone la estrictamente histórico sólo nos dice que ciertas cosas han
.
:t
vas desarrolian clanes é.y t que unas culturas primiti-
0 ems Y otras no? y d ·
ocurrido, o que es posible o probable que hayan ocurrido,
que no sabemos o que Ia difusión de una aidea ~cima~ la antropología social con sus generalizaciones inductivas . -
o no alcanzó a dete . d canzo puede decirnos cómo y por qué ocurren las· cosas, es de-
puede arrui ~a a región. Abara bien se cir, de acuerdo con qué leyes. Quizá sea imprudente inten- ·.
o r que ese tipo de pregunt . '
Y, sin embargo, se formulan . _as son mgenuas. tar predecir; cuáles serán los resultados futuros de una·
En consecuencia Y segwran formulándose. ciencia que está todavía en su infancia, pero me atrevo a
deber de . ' ~arece que los etnólogos tienen el sugerir que nuestra experiencia de los resultados ya alcan-
conciencia de adverti , 1" .
sus resultados. cu, . r cuan Imitados son zados en la vida humana a partir de descubrimientos cien-
. . , an poco satisfacen la · . .
tificada 0 simpl" t d exigencia -JUS- tíficos en el dominio de la naturaleza, permiten considerar
ofrecer formula~~o:~ ;u:e.~ult~~os más amplios, o de probable que el descubrimiento de las leyes fundamentales
dio autor de 1 Impi an que el lector me- que gobiernan el comportamiento de las sociedades huma-
, as preguntas vueiv 1
teorías facilonas y er , ' El 1 a a canso arse con nas y el desarrollo de las instituciones sociales --el dere-
hace. roneas. ibro de Lowie no lo cho, la moral, la religión, el arte, el lenguaje, etc.- tendrán
Y, finalmente· por m u fi repercusiones enormes y de gran alcance en el futuro de la
científicos nos ~ante y rmemente que los ideales humanidad. Nuestro conocimiento, recientemente adqui,..
mientas hemos d ngan apegados a nuestras herra- rido, de las leyes de los fenómenos físicos. y químicos nos
, e reconocer tamb · , 1d
~ue. el saber sea aplicable a la Ien que e eseo de ha permitido ya hacer grandes progresos en la civilización .
IneVItable L d conducta humana es material mediante el control de las fuerzas naturales. EL •
. a rama e la ciencia .
esperanza de contrib . que renuncie a Ia descubrimiento de las leyes de la mente humana, que es la .·. · ··
Uir, por poco que l misión especial de la sicología, paree.: ofrecer la promesa·
guración de la vida v .. sea, a a confi-
all . a cammo de ene t de un progreso igualmente grande en un terreno como el de
e eJón sin salida. Por tanto . on rarse en un
nada que el mundo d , SI no podemos presentar la educación. ¿Acaso no está justificado que confiemos
d e dejar que ese fra pue a usar tene 1 bl" en la llegada de una época en que un conocimiento ade-
: mas a o Igación
. .
Ciencia. caso recaiga sob re nuestra con-
cuado de las leyes del desarrollo social nos permita alean.:::·
Por arave qu . ·zar resultados prácticos de la mayor importancia, al. pro-·
o . e sea esa relativa e t Td d
de todo es preferible al d ~ en I a , a pesar porcionarnos el conocimiento de las fuerzas sociales, tanto
la 'exigencia, pero intent!u:att~sf e Y.Ista que reconoce materiales como espirituales, y su control? En cualquier .:·~ ·
nes derivadas de un . acerla con conclusio- caso, ésa es mi esperanza y debería ser la del antr.opólogo · :
1 pensamiento superf· · 1 . fl social. No creo que haya nadie entre nosotros en la actua-
por a predilección personal De , ICia m uido
radez es la virtud primordi .1 spues ~e todo, la han- lidad que no comprenda que hay muchas cosas en la ci\'i-
es un gran avance con rela . ~ , y la se~Iedad de Lowie lización de hoy que sería mejor cambiar o abolir. Lo que
de Moraan. Pero a . cwn.a las brillantes ilusiones no· sabemos es cómo conseguir el fin deseado, pues nuestro .
"' veces suspira uno con pesar al ver conocimiento de los procesos del cambio social es ver-
50
51
. daderamente m~~ superficial. y en el ~ejor de los casos es
puramente emp 1nco 0 p , E estudio de las creencias y costumbres de los pueblos
tratar las enfermedades ~~onZ::::¡ra ~i~~7::~~: esfuerzos por con el objetivo, no de· reconstruir su historia
el curandero en med · . , wn somos como meramente, sino de descubrir su significado, su función, es
Este hace experime~~~~a, solob qude más ignorantes incluso. ··decir, el lugar que ocupan en la vida mental, moral y so-
· · ' pro an o un remedio t cial, puede ser de gran ayuda para el misionero o el fun-
sm mnguna seguridad ras otro
con respecto al result d T b. ,
nosotros hacemos 0 . t a o. am ren . ·. donarlo encargado de hacer frente a los problemas prácti-
, m entamas hacer t
mentas sobre la comunidad o , . , ~u~s ro~ experi- cos de la adaptación de la civilización indígena a las nuevas
entre el revolucionario el p htica,. Y la umca dzferencia condiciones resultantes de nuestra ocupación del país. Ima-
está dispuesto a adopta~ me~s~~ d~ no_sotrDs es que aquél ginemos el caso de un misionero o un magistrado que se
todo por fe en su pana R s erOicas y a arriesgarlo pregunte cuáles pueden ser los resultados del intento de
cea. econozcamos . 1
nuestra ignorancia y la n 'd d d en pnmer ugar abolir o combatir la· costumbre del uku-lobola. Puede hacer
ecesz a e un co . .
que empírico y po nocrmrento más experimentos, pero corre el riesgo de producir resultados
ngamos manos a la ob d
dicho conocimiento medi ra e acumular que no haya previsto, con lo que su experimento puede ser
ante e1 estudio ·
en que las generaciones futuras , ~acrente, con fe más perjudicial que beneficioso. Las teorías etnológicas
trucción de una cz'VI'I' .. podran aplicarlo a la cons- con respecto al pasado probable de las tribus africanas no
zzacron m· · ·
Sin embargo pued as proxrma a nuestro sueño. le serán de la más mínima ayuda. Pero la antropología
' e que esta d· · , d
dos que podemos esnerar del pre. rccron e los resulta- social, aunque todavía no puede aportar una teoría com-
social en un futuro ~l 1 . estudro de la antropología pleta dellobola, puede explicarle muchas cosas que le serán
al «hombre práctico» go etano no atraiga poderosamente de gran ayuda, y puede colocarlo en el camino de la inves-
tos de su inversión Poquet usca resultados más inmedia- tigación por la que puede descubrir más cosas. Este es un
. r anto echemos .
resultados prácticos -más . d'. un VIstazo a los ejemplo únicamente de los muchos que podría haber esco-
de dicho estudio E mme, ratos que pueden obtenerse gido. El problema de cómo acabar con la creencia en la
bl . n este pais nos enfrentam
pro ema inmensamente difícil . os con un brujería es otro del mismo tipo, en que la antropología
de la necesidad de Y muy compleJo. Se trata social puede proporcionar al misionero o al administrador
encontrar alguna fo
razas tan diferentes con f rma en que dos conocimiento y comprensión sin los cuales no es nada pro-
rentes puedan co : . armas de civilización tan dife- bable que pueda encontrar una solución satisfactoria para
' nv1v1r en una s · d d
tacto política econ, . ocre a , en estrecho con- sus problemas prácticos. La misión del antropólogo social
. , ' omrca y moralme t .
blanca pierda lo que su ..1. ., n e, sm que la raza no consiste en buscar la solución de esos problemas prác-
. CIVI Izacwn tiene d má .
Y sm 1a inquietud y el d d e s va11oso ticos, y me parece que sería imprudente de su parte inten-
. esor en que parece
como resultado inevitabl d 1 . n amenazarnos tarlo. El den tífico debe mantenerse lo más libre· posible
de unidad en nuestra soc~ ded aS ~usen cm de e_stabilidad y de las consideraciones sobre la aplicación práctica de sus
que exista un probl'em re a · e que hay qmenes niegan resultados, y con mayor razón en un sector de problemas
a o que sea muy difi ·1 sobre los cuales se discute con acaloramiento e incluso con
convencido de que los d CI ; pero estoy
, pensa ores están 11 d d prejuicios. Su trabajo consiste en estudiar la vida y las
mas a reconocer la dificultad la a _egan o ca a vez
y algunos han sacado 1 _ly . , ur"'encra del problema, costumbres de los indígenas y encontrar su explicación
. . a conc uswn de q ,
conocrmrento y de 1 ., ue carecemos del desde el punto de vista de las leyes generales. El misionero,
verlo. a comprenswn necesarios para resol- el maestro, el educador, el administrador y el magistrado
Ahora bien, creo que a uí son quienes deben aplicar el conocimiento así obtenido a
social puede pre~nar un se ~ . ~s donde la antropología los problemas prácticos con que nos enfrentamos en la
rvrcw Inmenso y casi inmediato. actualidad.
52
53
~ '.,_ :. ·.

observaciones posteriores, proceso que es un elemento esen-


M~ gustaría poder tratar este. tema con mavor exten-
sión y m03trarles cómo un poco" de conocimie~to de la cial de cualquier inducción.
Personalmente, me parece que este divorcio entre la ob-
antropología social nos habría ahorrado muchos errores
servación y la hipótesis es completamente equivocado, Y
crasos a ]a hora de. tratar con las razas indígenas. Pero
ue la antropología social nunca hará el progreso que debe-
debo pasar a ocuparme del último tema de mi conferen-
~a hacer hasta que no estén combinadas como en otras
cia, que es ia relación de la antropología social con la et-
ciencias. Mi propia experiencia me ha hecho comprenderlo
nografía.
profundamente. He leído interpretaciones de las costum-
Por etnografía se entiende la observación y descripción
bres de pueblos que he visitado y estoy seguro de que sus
· de los fenómenos de la cultura o de la civilización esne-
cialmente entre los pueblos no desarrollados. O s~a ¿ue
autores no las habrían ofrecido si hubieran observado per-
sonalmente el pueblo en cuestión y sus costumbres. Ta~­
aporta los hechos que estudian tanto la etnología como la
bién yo mismo he elaborado algunas hipótesis para exp~­
antropología social. En el pasado la labor de observar y
car las costumbres de determinadas regiones _Y despues
recoger los datos etnográficos la realizaron en gran parte
las he visitado y un poco de observación efectiva fue su-
personas que tenían poca o ninguna formación antr-opoló-
ficiente para aniquilar en un momento todas mis tea-
gica y, muchas veces, poco conocimiento de la etnología.
Después, el antropólogo, que con bastante frecuencia no das. d b
Si la antropología social desea progresar, ha e o ser-
había tenido nunca oportunidad de hacer observaciones
var las reglas de la indución. Hay que observ~r los hechos
etnográficas personalmente, estudiaba los hechos así recogi-
y encontrar una hipótesis que parezca exph~arlos .. _Pero
dos en todas las partes del mundo y elaboraba las. explica-
éstos son sólo los dos primeros pasos de la mduccwn y,
ciones. El resultado de esa división del trabajo ha sido muy
desde luego, no los más difíciles. El siguiente paso. e_s vol-
insatisfactorio por ambas partes. Por un lado, es frecuente
ver una vez más a la labor de observación para verificar o
que las observaciones hechas por el viajero o el misionero
contrastar la hipótesis. Puede ser que descubramos que
sin preparación no sean dignas de crédito y más frecuente
hay que. modificar la hipótesis de trabajo o que hay que
aún es que sean inexactas. Resulta bastante difícil hacer
rechazarla e idear otra nueva. Y así sucesivamente hasta
observaciones en física o química sin una preparación sis-
que nuestra hipótesis pueda ser establecida, con algún
temática en la ciencia en cuestión. Pero la labor de hacer
observaciones en etnografía es muchísimo más difícil que grado de probabilidad como teoría. .
Ahorá bien, este proceso de inducción, que combma ob-
en las ciencias físicas. No hay ciencia en que la observación
servación e hipótesis, el antropólogo sólo puede llevarlo
sea más difícil ni --creo que lo puedo decir- tan difícil
a cabo en el campo. Estoy comp1etam.ente convencido de que
siquiera como en ésta; y en el pasado ha sufrido mucho
sólo de esta forma podernos realizar nuestro trabajo ade-
de la falta de observadores preparados, que son los únicos
cuadamente. El estudioso, formado no sólo en los métodos
que pueden darnos descripciones dignas de crédito. Allora
científicos de la observación etnográfica que han elaborado
se está superando gradualmente esa desventaja, y se está
.durante los últimos veinticinco años el difunto Dr. Rivers
acumulando firmemente una masa de información recogida
v otros, sino también en la teoría completa de la antropo-
en muchas partes del mundo por observadores preparados.
logía social, debe estar dispuesto a pasar varios años de su
Pero, por otro lado, la división del trabajo entre el ob-
vida viviendo en el contacto más íntimo posible con el
servador y el teórico ha sido insatisfactoria. En primer
~ueblo o pueblos que vaya a estudiar. Ha de tratar, no
l~gar, el antropólogo social tenía que depender de descrip-
sólo de observar, sino también de explicar las costumbres
ciOnes cuya exactitud no podía comprobar; y, en segundo
y creencias de dichos pueblos, es decir, que ha de intentar
lugar, no podía contrastar sus propias hipótesis mediante

54
,--?~~~t~~{" X:~ .·· .

.:: ·/ mÓstrar que cada uno de ellos ·es ejemplo de alguna ley
general de la sociedad humana. - - - . d bido a dos razones. Una ha sido que
Es cierto que eso supone el peligro de que la observa- humana. Ello se ha e d buscar los orígenes, no las
,1 se ocuparon e . 1
ción resulte influida por teorías preconcebidas. Pero todas los antropo ogos nfu . , de esta matena con a
h "do la ca swn .
las observaciones en etnografía están enormemente influi- leyes. La otra a SI , 'ctimas muchos estudiosos
·
sicolog¡~, ~u~e.r
, d e todav1a son VI
das por las ideas preconcebidas, y Ias ideas preconcebidas .. e '!-': ue les induce a considerar cua1
del antropólogo preparado son muchísimo menos perjudi- de la CIVIhzacwn y q b d los pueblos prumtl-
d. las costum res e . ,
ciales que las del viajero medio o del hombre sin prepara- intento de estu mr .
vos d es de el punto de vista ID . ductivo como tarea del Slco-
ción, si bien culto, de quienes hemos tenido que depender
-en el pasado para la información sobre los pueblos no civi-
lizados. lago~ fut del estudio de la civilización
Así pues, para el uro d me'todos diferentes, cosa
. d" t. guir esos os 11
Pennítanme resumir lo más . brevemente posible Ia ar- es necesano IS ID b s distintos para e os
, f, ·1 · usamos no m re "al
gumentación que les he expuesto. El estudio sistemático que será mas aci SI , 1 tro antropología soci .
uno emolog¡a Y a 0 E
de la civilización comenzó a mediados del siglo pasado. Al y llamamos a. diferentes, están relacionados. n pa:-
principio, no estaba muy seguro de sí mismo, de sus fines- Pero, a _pesar de ser 1 , podrá avanzar mucho SID
e· la etno og¡a no ·, d 1
y métodos. Sus cultivadores tenían tendencia a aceptar ticular, creo qu 1 , acial· la reconstruccwn e a
teorías, métodos y pruebas que ahora nosotros impugna- la ayuda de la ~t:--op~ ,og¡a s ed~ realizarse sin un cono-
ríamos o rechazaríamos. Pero fue gracias exclusivamente a historia de la CIVIhzacwn no pu al de la vida de las
. . to de las leyes fundament es
c1m1en .
la labor de aquellos hombres como pudo la ciencia desarro-
llarse. Desde finales de siglo se han hecho esfuerzos deci- sociedares. . ue de la antropología social
didos para introducir métodos más rigurosos, tanto en la Además, he afirmado q d alor práctico mucho roa-
observación como en la~ interpretación. Un resultado de ello podemos esperar resultado~ oe ~enos lejano, sino también
es que ahora disponemos de un corpus de información yor, no sólo en _el fudt~ro mas los que podemos esperar de
en el presente mme lato, que
muchísimo mayor sobre la cultura de los pueblos no civi-
lizados, y a la luz de nuestro conocimiento reciente muchas la etnología. d"d 1 derechos de la antropología
de las primeras generalizaciones anteriores resultan ser Así pues, he defen 1 o osl , En años recientes, en
incorrectas. En el terreno de los métodos de interpretación, social contra los de }a e~: ~~~:dos Unidos, la etnología
la tendencia más destacada. ha sido la insistencia cada vez Inglaterra, en :Veman.L~, y de la que merece, mientras que
mayor en el punto de vista histórico y en el método- his- ha recibido mas, aten~wn se le ha prestado, injustamente,
tórico de explicación, consecuencia de lo cual ha ·sido el a la antropologta social F ancl·a Creo que eso es
·, xcepto en r ·
reconocimiento del carácter independiente -del estudio que muy poca. atencwn,
if" · , e en caso d e q ue fuera ne·cesaria, para
1
aquí he llamado etnología, que se limita estrictamente a la bastante JUSt rcacwn, . .ento de su importan-
.
este mtento d e obtener, . el reconoclmi
reconstrucción hipotética del pasado y prescinde de toda
1 ractlco · di
clase de generalizaciones y de intentos de formular leyes. · cia y de su va1or P nto actua · 1 es decl"sivo para el estu
_ do
En particular, se han impugnado Ias- antiguas teorías de la Creo que e ::no.~e. ués de setenta y cinco anos e
evolución, y algunos autores las han rechazado entera- de la cultura pnnntlv~. D.esp , d Está empezando a to-
mente. f. ta afianzan ose.
esfuerzos, por m es :6. métodos, de sus posi"b"I-
Entretanto, se ha desatendido un poco el otro método mar conciencia clara de sus ~esdy cho luchar, ha reci-
. · · s Despues e mu
de estudio, el inductivo, por el. cual intentamos hacer gene- lidades y lrmitacwne . . "dades y en todas
. . t en las umvers1
ralizaciones y descubrir las leyes naturales de la sociedad bido el reconocimien o . . , d entre las ciencias.
una Ciencia mas e
56 partesque
Creo de ahora
que es esta, en con d"lCIO
. nes de dar resultados que

57
pueden- ser de -un valor práctico inmenso, especialmente :REFERENCIAS
para quienes se ocupan del gobierno o de la rnajora de los Methode der Ethonologie: Heidelberg, 191_1.
NER.
pueblos atrasados. En años recientes ha aumentado cons- GRAEB hn 1 . 1 Analysis of Culture,>. Dlserta·
tantemente el número de estudiosos preparados en los mé- R:rVERS. ,,Th~dEt ·a~:~: la Sección Antropológica de la
todos rigurosos de observación y con el conocimiento de cwn presl enc.l , . . el Fomento de la Ciencia,
Asociación Bntaruca para -
la materia que requiere la investigación sobre el terreno.
Mientras tanto, de igual forma que la ciencia está, por 1911. The History of Melanesian Society, 2. vals., 1914.
decirlo así, volviéndose adulta, su material de estudio está R:rVERS. (A L) «Eighteen Professions,>. Amencan Anthro-
desapareciendo con gran rapidez. La expansión de la raza KRoEBER · · ·
, . t -vol 17 página 283-, 1915.
blanca y de la civilización europea por todo- el mundo ha Pa,ogts ·
-
· '
(H • K) «Anti-Professions. A Rep Y 0
1 t Dr A L
· · •
producido cambios inmensos en sólo uno o dos siglos. Ha HAEBE...lli.IN • • •

habido pueblos indígenas, corno los tasrnanios, que han re- K.roebe:r». !bid., pagina 756 · . . · Cultu-
sultado exterminados; otros, corno los australianos y nues- s APIR (E ·) . Time Perspective in Abongmal_ Amencan
1916
A Study in Perception. Ottawa, . .
tros propios bosquimanos, están a punto de extinguirse. re. (J hn R) «Sorne An_ thropological Misconcep-
En los demás sitios, aunque sobrevivan los pueblos, sus SwANTON o ·· , · 311
.
tlOnSl>,
American Anthropologist. Vol. 22, pag¡na ,
costumbres y su modo de vida quedan alterados. Ya no
hacen las cosas que antes hacían, aprenden una lengua 192(0F ) «The Method of Ethnology''· American An-
nueva, sus costumbres caen en desuso y muchas de sus BoAS ranz: , · 311 1920.
creencias anteriores quedan olvidadas. El material mismo thropologtst. Vol. 22 : pa~ma ' hod d die nord-
ScHMIDT. «Die kulturhistonsche Met e un XIV XV
de que dependen el etnólogo y el antropólogo social para amerikanische Ethonologie>>. Anthropos. Vol. - ,
sus estudios está desapareciendo ante nuestros ojos. Creo
que no hay ninguna otra Ciencia en una posición parecida. página 546, 1920.
En ninguna otra se da el caso de que el trabajo que no se
haga inmediatamente vaya a resultar imposible de hacer.
Por esa razón, por la urgencia del trabajo que no puede
esperar, y también porque es de gran importancia en rela-
ción con los problemas prácticos con_ que este país se en-
frenta en razón de la población indígena que nos rodea,
sugiero que la forma más valiosa como esta Asociación
puede cumplir en el momento presente su objetivo de fo-
mentar la ciencia es la de estimular y ayudar de cualquier
forma posible a la ciencia de la antropología social y al
-estudio científico de los pueblos indígenas de este conti-
nente.

58
. ;. ·~ .
.........
. .· ..

II
~étodo sólo se puede aplicar perfectamente cuando se dis-
·. one de testimonios históricos y documentales completos.
LA INTERPRETACION HISTORICA Y FUNCIONAL ·. ~n el caso de los pueblos no civilizados, en el que no dis-
DE LA CULTURA EN RELACION CON LA APLICACION ponemos de dichos testimonios, la ap!icació~ de: :método
PRACTICA DE LA A_NTROPOLOGIA AL CONTROL histórico. consiste en hacer reconstruccwnes hipo~e:1cas del
DE LOS PUEBLOS NATIVOS 1
pasado. Gran parte de las teorizaciones antro!'olog1cas que
se han hecho durante los últimos cincuenta anos .han adop-
tado esa forma. Las deficiencias de este método s~n : :) . que
las reconstrucciones hipotéticas no_ dejan de s_er h1pote:1cas,
ya que no se pueden verificar; 2) que la vahdez de dichas
reconstrucciones depende de los supuestos (generalmente
implícitos) en que se basan, supuestos sobre la naturaleza
de la cultura y las leyes de su desarrollo; 3) que, en conse-
La antropología está afirmando gradualmente su dere- cuencia, no explica nada en realidad : la historia. ,sólo ex-
cho a que se la considere como un estudio que ·tiene un plica cuando nos muestra detalladamente la relacwn entre
valor práctico inmediato en relación con la administración una cultura, tal como es en un momento determinado, Y
y educación de los pueblos atrasados. Al reconocimiento de las condiciones y acontecimientos efectivos de un pasado
.dicho derecho se debe en gran parte el desarrollo reciente desconocido. En relación con lo que ahora estamos ·discu-
de los estudios antropológicos en el Imperio 'británico : el tiendo, la mayor deficiencia del método de interpretar la
nombramiento de antropólogos del gobierno en Ashanti, cultura mediante reconstrucciones hipotéticas de un pasado
Nigeria, Papuasia y en Nueva Guinea; el requisito de una desconocido es la de que carece del más mínimo valor
preparación antropológica para los oficiales que participen práctico. En el mejor de los casos, podemos r_econocerle -~n
en los servicios coloniales en Mrica; la fundación de la valor . académico. El método funcional de mterpretacwn
Escuela de Lengua y Vida Mricanas en Ciudad del Cabo descansa en la suposición de que una cultura es un sis-
en 1920 y la fundación, más reciente, de una escuela de tema estructurado. En la vida de una comunidad determi-
antropología en Sidney. Esta evolución ha provocado la pre- nada cada elemento desempeña un papel determinado, una
gunta: «¿Qué clase de investigaciones antropológicas son función determinada. La tarea de la ciencia que podríamos
de valor práctico en relación con los problemas administra- llamar «fisiología social» es la de descubrir esas funciones.
tivos?». Desde luego, la labor del etnólogo que se limita a El postulado de que depende el método es de que exis~en
recoger información sobre la vida y las costumbres indíge- ciertas ·leyes «fisiológicas» o leyes funcionales que son c¡er-
nas es valiosa. Pero una ciencia no se limita a recoger da- tas para todas las sociedades humanas, para todas las
tos; tiene también que interpretarlos. Existen dos métodos culturas. El objetivo del método funcional es descubrir
de interpretar los hechos culturales, que podemos denomi- dichas leyes generales y, gracias a ello, explicar cualquier
nar «histórico» y «funcional». Cuando adoptamos el mé- ~lemento de una cultura por referencia a las leyes descu-
todo histórico, explicamos una «cultura», o algún elemento biertas. Así, si constituye una generalización válida decir
de una cultura, mostrando cómo ha llegado a ser lo que es que la función o ritual o ceremonial principal es expresar
y, gracias a ello, mantener en existencia sentimientos que
como resultado de un proceso de desarrollo histórico. Este
son necesarios para la cohesión, podemos «explicar» cual-
l: Resumen de un artículo leído ante el IV Congreso Científico Pan- quier ritual o ceremonial determi_nado mostrando cuáles
.?acífico de Java, 1929.
son los sentimientos expresados en él y cómo se relacionan
-JO
61
-'

con la cohesión de la sociedad. -La historia, en sentido es-


tricto, no nos aporta, ni puede aportarnos, leyes generales.
La reconstrucción hipotética del pasado supone inevita- - . EL ESTADO ACTUAL
blemente determinados principios generales, pero no los DE LOS ESTUDIOS ANTROPOLOGICOS 1

prueba; al contrario, los resultados de aquélla dependen


de la validez de éstos. El objetivo del método funcional
es descubrir y verificar leyes generales por los mismos
métodos lógicos que se usan en las ciencias naturales : la
física, la química, la fisiología. Para que el conocimiento
pueda usarse de forma práctica ha de ser conocimiento
generalizado. Para poder controlar cualquier grupo de fe-
nómenos hemos de conocer las leyes por las cuales se rela-
cionan. Sólo cuando entendemos una cultura como sistema En esta conferencia que tengo el honor de pronunciar
en funcionamiento podemos prever los resultados de cual- ante ustedes como presidente de esta sección voy a expo-
quier clase de influencia, intencionada o involuntaria, que nerles algunas consideraciones sobre el estado actual de los
podamos ejercer sobre él. Así pues, si la ciencia antropo- estudios antropológicos. Quizá podría considerarse que mi
lógica desea aportar ayuda importante alguna en relación deber sería examinar la historia de dichos estudios y de los
con los problemas prácticos del gobierno y de la educa- logros obtenidos en ellos durante los cien años que ahora,
ción, ha de abandonar los intentos especulativos de canje- como Asociación, conmemoramos. Pero tuve que escribir
. turar el pasado desconocido y dedicarse al estudio funcional esta conferencia durante un viaje desde un extremo del
de la cultura. mundo hacia el otro, de modo que no pude tener acceso a
los libros necesarios. Además, entre rememorar el pasado
y orientarse hacia el futuro, tengo una prefencia tempera-
mental por esto último.
La antropología, en el sentido en que dicho término se
usa corrientemente, como, por ejemplo, en un plan de es~
tudios universitario, no es una materia, sino que abarca
varias materias relacionadas de algún modo, al tiempo que
excluye otras no menos relacionadas. Si definimos la an-
tropología como la ciencia que estudia al hombre y la vida
humana en todos sus aspectos, en ese caso es e vi den te que
la sicología, como estudio de la mente humana o del coro-
. portamiento humano, debe incluirse dentro de la antropo-
logía entre la biología humana, que trata del organismo
físico del hombre, y la antropología social o cultural, que
trata de su vida social. Y, sin embargo, no sólo no se in-
cluye la sicología en lo que se llama antropología, sino que.

l. Disertación presidencial ante la Sección H de la Asociación Bri-


tánica para el Fomento de la Ciencia, centésima reunión en Londres,
1931. .

62
63
:.,. ·. ·-~ .,

·- : .... :.

además existe poca coordinación entre los estudios sicoló- estrecha, dentro del dominio de la <<biología humana»,
gicos y los antropológicos. La razón reside en la historia entre la anatomía racial comparada y la «genética humana>>,
de la sicología, que en un principio se desarrolló en estre- -y también po~ un mayor desarrolló de la fisiología raCial
cha vinculación con la_ filosofía o, mejor, como parte de comparada, en la que hasta ahora se ha trabajado mucho
ella. Sólo gradualmente se ha ido diferenciando la sicología menos que en la anat<;>mía.
de los estudios filosóficos, y mediante la adopción de mé- La asociación natural y más útil de la ''biología humana»
todos precisos semejantes a los métodos experimentales es con las demás ciencias biológicas, con la bio-logía gene-
de las ciencias naturales se ha afirmado como una disci- -ral, cuyos resultados debe aplicar a la especie humana o
plina científica independiente. Me P!lrece que por firi. exis- verificar en ella, con la morfología comparada y la· fisiolo-
ten las condiciones para que la sicología rompa su conexión gía comparadas, y con la paleontología. Mucho menos se
con las materias filosóficas de la lógica y de la metafísica beneficiaría de una asociación estrecha con la arqueología
y entre en contacto más íntimo con la antropología. No prehistórica y con la· antropología social.
se trata sólo de una disposición lógica de las ciencias. Tan- La biología h'umana (o antropología física) y la antro-
to la sicología como los estudios antropológicos se benefi- pología social coinciden en relación- con dos series de pro-
ciarán enormemente de una coordinación más sistemá- blemas. Una de éstas es el efecto de las instituciones socia-
tica. les sobre los caracteres físicos de la población. Este estudio
Así pues, si dejamos de lado la sicología, encontramos me parece que entra dentro de la esfera de la biología hu-
el dominio general de lo que se llama antropología divi- mana más que dentro de la esfera de la antropología social,
dido en tres partes distintas. A una de ellas la mejor pues requiere que quien lo realice tenga formación bioló-
denominación que podríamos darle es la de <<biología hu- gica. El otro problema es el inverso a éste, a saber, el
mana», pues el término de <<antropología física» se suele descubrimiento de aquellas diferencias culturales, en caso
aplicar en sentido algÓ más estricto a sólo una parte de de que haya alguna, que sean resultado de diferencias
ese terreno. En una parte de éste, en la «paleontología hu- raciales, es decir, de las diferencias físicas heredadas pro·
mana», hemos presenciado durante los últimos cincuenta pias de pueblos diferentes. Ahora bien, la única forma de
años -muchos descubrimientos importantes, el más reciente enfocar este problema o serie de problemas es el estudio
de los cuales, la identificación por parte del Dr. Davidson de la sicología racial comparada o sicología étnica compa-
Black del Sinanthropus pekinensis, es siri lugar a dudas rada. Pues es evidente que cualquier clase de diferencias
uno de los más trascendentales. En otra parte de la «biolo- físicas heredadas entre las razas actuarán sobre la cultura
gía humana», el estudio comparativo de la anatomía racial, a través de las diferencias síquicas. Así, las recientes inves-
que es a lo que nos referimos normalmente con el término tigaciones del profesor Shellshear son prometedoras, por-
de «antropología física», se ha hecho gran cantidad de que quizá nos permitan definir ciertas diferencias morfo-
trabajo en el campo de las mediciones del sujeto vivo y lógicas del cerebro que diferencien a los aborigenes austra-
en el estudio de los esqueletos. No puedo por menos de lianos de los chinos y a éstos de los europeos. Tarea del
pensar que los resultados obtenidos no guardan la más mí- sicólogo o del sicofisiólogo será determinar cuáles dife-
nima proporcron con el tiempo y la energía empleados. rencias mentales son correlativas con dichas diferencias de
Creo que una de las razones ha sido la preocupación por la estructura cerebral.
intentar reconstruir la historia racial de la humanidad La sicología racial comparativa, que está en estrecha re-
cuando hasta ahora no tenemos todavía un conocimient~ lación con la biología humana, es una materia muy difícil
preciso de cómo aparecen las variaciones de la especie hu- en la que hasta ahora se ha progresado poco. La primera
mana. Creo que deberiamos trabajar por una cooperación tarea es la de proporcionar una técnica para determinar

64 65
con' la mayor prec1s10n posible las diferencias sicológicas etaoa este estudio era puramente académico, pues carecía.
que existen por término medio entre las diferentes pobla- de ~anexión inmediata con ningún aspecto particular de la
ciones. Evidentemente, muchas de dichas diferencias son vida práctica. Ahora la situación ha cambiado, y cada vez
resultado de diferencias culturales, y todavía no hay espe- hav más tendencia a reconocer que el estudio de la vida y
ranzas de que podamos enfocar como problema científico de- las costumbres de una tribu de Africa o de Nueva Gui-
la tarea fundamental de dicho estudio : la de probar que nea por parte de un etnógrafo o de un antropólogo social
determinadas diferencias sicológicas observables están en
puede aportar una ayuda práctica a los encargados de
correlación con diferencias en el organismo físico.
crobernar o educar a dicha tribu. Ahora se está poniendo
Otro campo que queda dentro del dominio general de ~la antropología, o a esta rama de ella, en estrecha relación
la antropología, tal como ahora está organizada, es el de con la administración colonial, y podemos prever muchos
la arqueología prehistórica. No necesito recordarles lo mu- resultados importantes de esa asociación.
cho que ha prosperado. Se ha granjeado más interés y Estoy convenckio de que esta nueva posición de la an-
apoyo popular que ninguna otra rama de la antropología. tropología contribuirá a acelerar el desarrollo de un cam-
Al mismo tiempo, ha pasado a ser un estudio especializado bio de punto de vista en el estudio, de un cambio de orien-
de forma mucho más definida. Con lo que ha conseguido tación, que se ha ido manifestando gradualmente durante
una independencia que no poseía cuando los estudios antro- las últimas décadas, y tengo intención de hablar de él con
pológicos se organizaron por primera vez en asociaciones y cierta extensión. Voy a intentar explicar en pocas palabras
universidades.
en qué consiste dicho cambio de orientación. Si usamos la
Además de esas dos materias, la antropología física o, palabra ciencia para referirnos a la acumulación tle cono-
como creo que sería más adecuado llamarla, biología hu- cimiento exacto, podemos distinguir dos clases de estudio
mana, y la arqueología ·prehistórica, la antropología, tal científico, o dos clases de método. Uno de ellos es el his-
como ahora está organizada, incluye como tercer campo tórico. Al otro método o tipo de estudio me gustaría lla-
de estudio el de las lenguas y culturas de los pueblos no marlo inductivo, pero existe la posibilidad de que se en-
europeos y, especialmente, los de los pueblos que carecen tienda esta palabra en un sentido erróneo. Así pues, voy a
de historia escrita. Evidentemente, esta separación de los llamarlo método de la generalización. Cournot fue quien
pueblos del mundo en dos grupos, uno de los cuales estu- insistió, hace mucho tiempo, en esta distinción entre las
dia el antropólogo, mientras que el. otro queda reservado ciencias históricas y las ciencias generalizadoras. Es de gran
para los historiadores, filólogos y otros especialistas, no se importancia para cualquier problema de metodología cien-
puede justificar en nombre de una coordinación lógica de tífica.
los estudios, y ha dejado de estar justificada por las consi- Ahora bien, cuando se emprendió por primera vez el
deraciones prácticas, como lo estaba cuando surgió por pri-
estudio de los pueblos no europeos, era natural, e inevita-
mera vez. Creo que los cambios que se están produciendo ble, de hecho, q~e se aplicara el método de las ciencias
en ese campo exigirán pronto una organización diferente históricas, mientras éste fuera aplicable. Pero, durante los
de nuestros estudios en relación con otros.
cien últimos años, se ha ido manifestando gradualmente la
A esa rama de la antropología, el estudio de las culturas tendencia a la creación de una ciencia . generalizadora de
de los pueblos no europeos, es a la que deseo dedicar mi la cultura o de la sociedad. Ha llegado el momento de
atención en esta conferencia. De los cambios que se han reconocer la existencia e independencia de dicha ciencia.
ido produciendo recientemente, que son importantes y sig- Ya he dicho que, en su's primeras etapas, el estudio de
nificativos para su desarrollo futuro, voy a citar uno aquí los pueblos no europeos se enfocó desde el punto de vista
para volver a hablar de él más adelante. En su primera histórico. Una de las misiones de la historia es darnos des-
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cripciones exactas de una sociedad o de un pueblo en una social. Esto coincide bastante con el uso corriente de los
época determinada. Los etnógrafos emprendieron su labor · dos términos.
de describirnos un pueblo no europeo precisamente de la La etnología, en el sentido en que aquí estoy usando la
misma forma. Pero la historia nos da también descripcio- palabra, se ocupa de las relaciones entre los pueblos. Si es-
nes cronológicas de los cambios que se producen en la vida tudiamos los pueblos existentes en el mundo y los del pasa-
de un pueblo. En el caso de los pueblos europeos, dispo- do sobre los que tenemos información, podemos definir
nemos de documentos escritos que permiten al historiador determinadas semejanzas y diferencias en las caracteristi-
elaborar dichas descripciones. En el caso de los pueblos no cas raciales, en la cultura y en el lenguaje. El etnólogo
eúropeos, no disponemos de esos testimonios dcumentales. puede limitarse a determinar lo más .precisamente posible
El etnólogo, de acuerdo con la suposición de que lo que nece- dichas semejanzas y diferencias y a aportar, de ese modo,
sitaba era la historia, emprendió el intento de ofrecer una una clasificación de los pueblos en función de la raza, de la
historia conjetural o hipotética. lengua y de la cuhura. Si pretende profundizar más y expli-
El procedimiento se inició en el siglo XVIII, cuando se carlas, lo hace mediante procesos históricos hipotéticos. Es
hicieron intentos de identificar a los pueblos indígenas de evidente que, a lo largo del período en que ha existido vida
las diferentes partes del mundo con los descendientes de humana en el planeta, ha habido movimientos y mezclas
las diez tribus perdidas de Israel, o se interpretaron seme- de razas; ha habido propagación de lenguas y la consiguien-
janzas en las vestiduras con el antiguo Egipto como conse- te diferenciación de una lengua en varias lenguas distintas;
cuencia de la influencia egipcia. La identificación de las y ha habido movimientos de culturas enteras con la migra-
diez tribus perdidas de Israel parece haber dejado de inte- ción de pueblos de una región a otra, o difusión de elemen-
resar a los antropólogos, pero el ingenioso rastreo de las tos culturales particulares por medio de las influencias
más diversas costumbres de pueblos de todo el mundo mutuas de pueblos vecinos. La situación actual de los pue-
hasta un hipotético origen egipcio todavía sobrevive y, como blos del mundo, o la situación en cualquier momento de la
parece ejercer una atracción sentimental sobre algunás historia, es resultado de la serie total de cambios que se
mentalidades, probablemente persistirá. han producido durante varios cientos de miles de años. El
Hacia finales del siglo XVIII, con la obra de Adam Smith objetivo del etnólogo es hacer reconstrucciones hipotéticas
y de otros autores de Inglaterra y de Francia, la recons- de algunos de esos procesos.
trucción hipotética del pasado adoptó una forma nueva. La etnología, así definida, no es una cienCia generaliza-
Se supuso que, en cierto sentido, los pueblos menos des- dora, sino histórica. Es cierto que, al hacer sus reconstruc-
arrollados representaban etapas anteriores del desarrollo ciones históricas, los etnólogos suponen a veces ciertas ge-
de nuestra propia cultura. En consecuencia, se recurrió a la neralizaciones, pero, por regla general, hacen pocos o nin-
ayuda que proporcionaba el conocimiento que se tenía de gún intento de basarlas en un estudio inductivo amplio. Las
ellos para crear una historia conjetural, que se ocupaba de generalizaciones son los postulados con que la materia
cuestiones generales como los orígenes del lenguaje o del comienza, no las conclusiones que aspira a alcanzar como
gobierno civil, etcétera. resultado de las inveÚigaciones realizadas.
Así pues, desde los primeros tiempos, los intentos de La antropología social, en el sentido que estoy dando a
utilizar la información sobre los pueblos no europeos re- este término, se ha ocupado de un tipo diferente de pro-
vistió dos formas distintas. Conviene disponer de dos nom- blemas. Se ha interesado por el desarrollo de las institucio-
bres diferentes con los que distinguir los dos estudios, y nes en la sociedad humana. Desde sus comienzos intentó
voy a usar la palabra etnologia para referirme a uno de conciliar de algún modo los dos métodos científicos dife-
ellos, y al otro lo voy a considerar parte de la antropología re:1tes, el histórico y el generalizador. Indudablemente, uno

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·-
···.. -- ·-)

de los fines de la antropología social ha sido entender 'habido dos movimientos, uno hacia la etnología y el
naturaleza de las instituciones humanas y, si puedo aecu:!o< hacia la sociología, y la antropología social tradicional
así, su funcionamiento.· Pero, en lugar de adoptar entera- se ha visto sometida a críticas de diferentes clases proceden-
mente los métodos de las ciencias generalizadoras, predo- . tes de ambas posiciones.
minó en la antropología social la concepción de la historia, Durante prácticamente todo el siglo xrx, no se hizo ape-
de la explicación histórica y del método histórico. Y, como nas distinción entre la etnología y la antropología. social.
los documentos históricos eran insuficientes, intentó fabri- Tylor, por ejemplo, combinó los dos estudios. Es cierto
car una historia hipotética de las instituciones y del des- que algunos autores practicaron uno de ellos preferente-
arrollo de la sociedad humana. Examinó cuestiones como mente y excluyeron el otro. Así, Sir James Frazer raras
el origen del lenguaje y de la religion, el desarrollo del veces se ha ocupado de los problemas etnológicos. Tam-
matrimonio y de la propiedad, los orígenes del totemismo bién es cierto que ~n algunas ocasiones ambos métodos
y de la exogamia o el origen y desarrollo del sacrificio o entraron en conflicto a propósito de problemas partícula- .
de las creencias animistas. res, pero nunca llegó a ser un conflicto entre los dos mé-
Con frecuencia la antropología social buscaba los oríge- todos y los dos puntos de vista. · ·
nes de las institUciones sociales en factores ptÍramente sico- Hacia finales del siglo pasado y en los primeros años
lógicos, es decir, que intentaba conjeturar las motivacio- de éste, se desarrollaron en Estados Unidos, Alemania e
nes de las mentes individuales para inventar o aceptar cos- Inglaterra, escuelas de etnólogos que, a pesar de disentir
tumbres y creencias particulares. Muchas veces, o incluso entre sí con respecto a cuestiones particulares de la recons-
generalmente, sus explicaciones eran históricas en un sen- trucción histórica, e incluso a los métodos del análisis etno-
tido, pero sicológicas en otro, y prácticamente nunca socio- lógico, coincidían todas ellas en atacar los métodos de la
lógicas. Más adelante volveremos a tratar de este aspecto. antropología social desde el punto de vista del método his-
Durante prácticamente todo el siglo pasado, ese método tórico. Todos ustedes están familiarizados con esas críti-
histórico-sicológico predominó tanto en el estudio antro- cas de lo que los etnólogos llaman «antropología evolucio-
pológico, que prácticamente nadie podía prescindir de él. nista».
Así, cuando Robertson Smith puso las bases del estudio El desarrollo de las ideas del difunto Dr. Rivers ejempli-
científico de las religiones y se planteó el problema de la fica el desplazamiento de la antropología social por parte
naturaleza del sacrificio (pues ése . era el problema real- de la etnología. Creo que puedo hablar de Rivers con cierto
mente, como ahora lo concebiríamos), no se contentó con conocimiento de causa, pues durante tres años fui discípulo
aislar Y clasificar las diferentes variedades del sacrificio y suyo en sicología, y en 1904 fui su primer alumno en antro-
n:ostra: ~u ·rel~ción como formas diferentes de un tipo de pología social. Desde el principio al fin, Rivers fue primor-
nto rehg1oso difundido -ése sería el método del sociólogo dialmente un sicólogo, y fue un profesor de sicología esti-
moderno, t.al como lo ejemplifica el ensayo de Hubert y mulante. No tenía formación etnológica o arqueológica, y
Mauss-, smo que la arraigada tradición de su énoca le sólo gradualmente llegó a familiarizarse con esas materias ..
obligó a intentar hacer entrar las diferentes varied;des del En su primer período de interés por la antropología, desde
sacrificio dentro de un esquema del desarrollo histórico la época de la expedición de Cambridge al estrecho de
en el que suponía que una variedad se había originado e~ Torres hasta el año 1909, su concepción de los fines y mé-
otra. todos que había que perseguir y utilizar, respectivamente,
El compromiso por parte de la antropología social en- en el estudio de los pueblos no europeos era el de lo que
tre el método histórico y el generalizador resultó imnosible he estado llamando antropología social. Aun cuando no
de rnanteiler. A consecuencia de ello, en las últimas décadas pudiera considerar satisfactorias las teorías de Morgan, por
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ejemplo, suponía que la misión del antropólogo era , repetidas veces y que siempre produce el mismo
lar teorías de. ese tipo, y creo que hasta el final de su efecto. La explicación histórica se ocupa siempre de detalles
aceptó incluso la teoría animista de Taylor y Frazer. Final- particulares, normalmente de mostrar .una relación cron~-
mente, durante su período de trabajo en Melanesia, su cada lógica entre dos o más detalles particulares. Por consi-
vez. mayor insatisf~cc.ión con respecto a aquel método llegó guiente, el valor de la explicación his~ó~ica es ~irectamente
al máximo, y en 1911, en su disertación presidencial a esta proporcional a la cantidad de conocimiento cierto y deta-
sección, declaró su preferencia por el método etnológico. llado que tengamos de los acontecimientos de .que nos ocu-
En otras palabras, desplazó su atención de un tipo de estu:.. pemos.
dio histórico a otro. En los años 1913 y 1914 tuve, poL En un sentido podemos decir que el etnólogo explica
correspondencia y en entrevistas personales, muchas discu~ las semejanzas existentes entre los pueblos mediante sus
siones con el Dr. Rivers sobre el tema del método antropo- hipótesis históricas. Pero, en realidad, la explicación no
lógico, en parte porque en aquella época tuvo la amabilidad le interesa, por: lo menos no primordialmente. En los casos
de leer Y criticar, en manuscrito y en pruebas, un libro que en que intenta hacer una reconstrucción de la historia,
yo estaba escribiendo. En el momento en que nuestra dis- el motivo es su deseo de descubrir algo sobre su pasado del
cusión cesó, su opinión era qUe, aunque estaba completa- ,que no tenemos testimonios documentales. Le interesa
mente dispuesto a aceptar la validez y necesidad del mé- el conocimiento del pasado, hasta donde se pueda, por el
todo de la sociología comparada, consideraba el mét~do de puro placer de conocer. O bien, si el etnólogo cree estar
la etnología igualmente válido y necesario y, al mismo tiem-. persiguiendo algún otro objetivo, entonces no está utilizan-
po, independiente, y prefería dedicar su atención al segun- do el método correcto, Lo único que su hipótesis podrá
do en lugar de al primero. Al final de su vida había señales aportarle será un número determinado de afirmaciones
de que su actitud estaba cambiando una vez más, de que más o menos probables sobre el pasado.· Y sus resultados
empezaba a sentirse algo insatisfecho con respecto al mé- sólo serán valiosos, o válidos, sí evita basarlos en suposicio-
todo etnológico que tan firmemente había defendido en nes sobre los principios generales del cambio histórico que
1911, y de que estaba interesándose por el método que aquí no haya demostrado la sociología; pues la misión específica
he Ilamado sociología comparada. · · de ésta es descubrir dichos principios.
Por tanto, en su cambio de punto de vista en 1911 Ri- . La dificultad metodológica en la etnología es y $erá siem-
vers representaba una tendencia general. Había ido aumen- pre la demostración de sus hipótesis. No creo que haya
tando la insatisfacción con respecto a las teorías de la an- habido nadie que haya aceptado, o que vaya a haber quien
tropología social. Creo que, desde el punto de vista del acepte, la elaborada reconstrucción de la historia de Mela-
deseo de llegar a una explicación histórica, dicha insatisfac- nesia que hizo Rivers. Las teorías de los ciclos culturales,
ción estaba justificada. Un estudio histórico «explica>> al que algunos etnólogos defienden tan firmemente, que. ha-
revelar relaciones particulares entre fenómenos o aconte- blan de ellas como si estuvieran demostradas y no a~i­
cimientos particulares. La historia no generaliza ni puede tieran la menor duda, otros estudiosos competentes e im~
hacerlo legítimamente. Nos muestra que en un momento .parciales las rechazan completamente. La teoría del origen
p~rticular se produjo un suceso particular y, a consecuen- egipcio de la cultura tiene partidarios especiales, pero tam-
Cia de ést~, o.c,urri~ algún otro acontecimiento. Así pues, bién los tiene la teoría que sitúa dicho origen en la Atlán-
en la exphcacwn histórica una causa es algo que ocurrió tida.
una vez, a consecuencia de lo cual surgieron determinados No hay duda· de que el método etnológico, usado cuida-
resultados. No es semejante a lo que se llama causa en la dosamente, puede aportarnos un n,úmero muy limitado de
ciencia natural, que es un fenómell.o que ocurre. 0 puede conclusiones muy probables, ya que no completamente se-
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..
-- ~-

documentos escritos, hemos de recurrir antes


guras. Así, por ejemplo, es indudable que la lengua·. a la arqueología para que nos dé cierto conocí-
Madagascar y gran parte de su cultura derivan bien de: . de la historia de los pueblos y de las culturas.
donesia, bien de alguna región de la que deriven tam ··Si emprendemos el estudio de la vida humana por los
l,as lenguas y la cultura indonesias. En un ejemplo de la ciencia histórica, nuestro objetivo es desea-
este, estamos ante gran cantidad de semejanzas entre todo lo que podamos encontrar de interés en el pa-
dos regiones que no pueden explicarse de otro modo y . En los casos en que existan documentos escritos, los·
caso de las lenguas es concluyente. De igual forma ;e t.UJ..L. .....~·~s, y ese estudio recibe el nombre de historia en

dría demostrar algún tipo de relación general entre A estricto. Podemos completar los testimonios escri-
lia Y la India del sur, o entre Melanesia e Indonesia. p mediante investigaciones arqueológicas. Este estudio
me parece muy dudoso que podamos llegar nunca a ob alcanzado una etapa en que puede damos información.
ner de la etnología una masa considerable de y segura dentro de un campo limitado. Solamente
detallado y probado de las relaciones históricas los de informamos de aquellos detalles de la vida de un
pueblos y las regiones. pueblo que· se pueden inferior directamente de sus vesti-
Sé que muchos antropólogos, que siguen gios materiales. Hasta cierto punto, la etnología puede
por. la historia,
_ comparten esa impresión. En los últ.rmos. · ' .. completar a la historia y a la arqueología.
tremta anos, aproximadamente, hemos presenciado el des-
a~rollo de varias escuelas diferentes de etnología y de ·
na cultural. Algunas de ellas nos han ofrecido esquemas •· El interés histórico por. la vida humana es una de 1~
elaborados de reconstrucción de la totalidad de la historia . motivos principales para estudiar a los pueblos no europe~~
humana; otras se han ocupado de problemas locales parfi- • .·Pero el mismo estudio se presta a otro tipo de inter~g: el
c~lares. Pero resulta imposible reconciliar mutuamente la.S . deseo de llegar a entender científicamente la naturaleza,de
~erentes teorías o incluso descubrir principios metodol6- 1~ cultura y de la vida social. En el pasado esos cfu.i.).nte-
grcos · sobre · cuales exista un consenso general . se nos
1 los ~eses se confundieron con frecuencia. El progreso.~de nues~
permite ~ eg¡r entre la teoría egipcia, defendida en su tros estudios requiere que se los separe, y esa: separación
forma mas reciente por el profesor Elliot Smi"th 1 l:ta estado produciéndose durante las últimas dé~adas. A par~
t 'dl "1
~ona e os c1c os culturales de Graebner 0 la teoría algo ..
,oa
tir de la antropología social ha surgido un estudio que voy
diferente, del padre
, Schmidt, o la de Frobeni·us , y que· se· a llamar sociología comparada.
yo _cua~:as mas, por no decir nada de las teorías de 1~ Mediante este término pretendo denotar una ciencia que
denvac10n de la cultura de una Atlántida perd1· da 0 d · aplica el método generalizador de las ciencias naturales a
. p 'fi . eun
cont:nente ac1 co perdido. Cada escuela sigue su propio los fenómenos de la vida social del hombre y .a: todo 1~
cammo construyendo su propia estructura, sin intentar bus- 'que abarca el término de cultura o civilización.· ·
car puntos con respecto a los cuales podría llegar a un Podemos definir eJ. método como aquel mediante eJ g,¡al
ac~erdo c_on las demás. Muchas veces el procedimiento es demostramos que un fenómeno o acontecimiento paxy:i,crolar
n:as propio de los discípulos de un culto que de lo t - es un ejemplo de una ley general. En el estudio cle ·~alq,uier
dlOSOS d . · 1 ~ S es U
, e una Ciencia. E resultado es que muchos futuros grupo de fenómenos aspiramos a descubrir leyes eJ.'* _sean
etnologos, al ver cuántas hipótesis y cuán poca certeza hay universales dentro del grupo. Cuando se descubren~.dichas
en
a 1esas reconstrucciones
1 . de la historia , se han id o pasand o a
leyes, «explican» los fenómenos que se refieren . .Una cien.:..
al a arque? og¡a, en la que por lo menos se puede llegar a cia de ese tipo, tal como la concibo, sigue sien@ :todavía
canzar Cle~a certeza y algún consenso general. Creo que descriptiva, pero, en lugar de descripciones de pG.qnenores
esa tendencia es absolutamente • sana · E n 1os casos en que
:zs
74
:f~:[,tt-f:~t·q~--1~~~~;!P-'' ·-
-, ·y. d~. sus relaciones particulares como las d
· · hi , . ' que nos an en dicho término depende de la definición que. adop-
Ciencias stoncas, nos proporciona dese . .
rales. npc10nes y diferentes autores escogen definiciones distintas.
La antropología social anterior no utilizaba ese m 't d .· .· La antropología social anterior se preocupaba de la
por lo menos no consecuentemente Hem . . e o o, ·. · ~estión del origen del totemismo. Aun suponiendo que
ocupab . . os VIsto que se hubiéramos resuelto el problema de saber qué es lo que
, a mas ~ue .nada de formular hipótesis sobre . ·.
ongenes de las Instituciones sociales. No obsta t 1 los . debemos y qué lo que no debemos incluir en el término, no
. ~ología social, mediante su estudio com n e, a an~ro~ ·. por ello quedaría concretada la cuestión. Si intentamos con-
' tituciones, hizo posible el desarrollo de r:rsaod~ fe _las ms~ . cretarla, hemos de reconocer que existen tres posibilidades.
parada. Si tuviera . tiem 0 d . · C10 og1a com~ Una es la de que todos los fenómenos de Asia, América y
arroll . d 1 p , po m;t mostrarles cómo se des~
o gra ua mente la nueva ant 1 • Oceanía a los que llamamos totemismo deriven histórica~
sociología comparada a partir. del ro¡'~?gia, es. decir, la .• mente de una institución particular que se originó en una
se iniciaron en el siglo XVIII 1 . es u 10 anten~r, cómo . región detenninada y en determinada época. Otra es la de
esa ciencia, cómo la obra d h as :nmeras ten~enclas hacia • que alguna_ forma particular del totemismo pueda haber
termack . e om res como Stemmetz, Wes~ .
sus discípyul~~ro~~nyduesJ.poecialmente la de Emile Durkheim y ·.
aparecido independientemente en dos o más regiones y en
' paso a paso a 1 · ·• épocas diferentes como resultado de procesos históricos
que podemos afirmar q . a posiciOn actual en similares y de que todas las variedades del totemismo exis-
ue existe ya una soc. 1 , .
ra d a que exige se la reco 10 ogia campa~ . tentes deriven de ella. La tercera es la de que diferentes
rente, en aspect;s impo:::z~a c~m~ algo radicalmente dife. formas de totemismo se hayan originado independiente-
partir de la que surgió. n es, e a antropología social a mente en regiones diferentes y en épocas distintas mediante
La diferencia esencial entre la • procesos históricos diferentes. Si tuviera que decidir cuál
rior y la nueva reside e I . dantropologta social ante- de dichas posibilidades me pareda la más probable, esco~
. n e tipo e teorías
Intentan establecer mediante el d' que una y otra geria la tercera. Y, naturalmente, eso significaría que el
como yo .la concibo la . 1 e~tu 10 de los hechos. Tal totemismo no ha tenido un origen.
debe rechazar todos Ío . SOCIO Ogia COmparada rechaza, y En el caso de muchas de las teorias del totemismo, re-
' s Intentos de conjetu · .
una institución cuando d' rar e1 ongen de sulta difícil decir si el autor se refiere a la primera o a la
basada en docu:Uentos h' n~ . Ispo?gamos de información segunda de las dos posibilidades citadas más· arriba. Sin
tes a dicho origen. IStoncos dignos de crédito referen-
embargo, el profesor Elliot Smith adopta claramente la
. Espero· que con un e'em 1 . primera. Si le entiendo bien, considera que todos los fenó-
concepción de esta cues/· ~ od particular quede clara mi menos del mundo entero a los que denomina totemismo (y
el totemismo, al que la a~~~~ o e~os t~mar como ejemplo no estoy seguro de qué es lo que incluiría y qué lo que
cha atención Totem. pologm social ha prestado mu~
. · Ismo es una deno · ·· excluiría del término) se han derivado en épocas relativa~
mas a gran cantidad de instit . mm~ci~n que aplica~ mente recientes de Egipto, donde la institución particular
diferentes culturas 'tod 1 ucwnes de distmtos tipos en de la que proceden tuvo su origen hace varios miles de
rasgo único de qu~ as as .cuales tienen en común el
años,. origen determinado por la forma particular adoptada
los grupos socié!les ;~ponen CI~rta relación especial entre
por la civilización egipcia.
especies de animales as e1species naturales, generalmente
Todos ustedes conocen perfectamente la última teoría
to d o, que el totemismo P antas . Conv·Iene o b servar, ante
0
del totemismo de Sir James Frazer. Supone que todas las
una abstracción un nbo es una simple cosa concreta. es
. ·
d Istmtas ' nom re aplicado a · ' formas existentes se derivan de una sola fonna original.
que tienen alcr . una sene de cosas El profesor Elliot Smith y Sir James Frazer coinciden en
::.O en comun. Lo que va o no va in~
hacer una suposición de ese tipo, pero su coincidencia no
76
77
va 'más ·lejos. La forma párticular seleccionada por
James Frazeres lo que llama totemismo de la concepción, Por tanto, desde· e( comienzo· mismo de nuestra inves~
la creencia en que el feto formado en el seno de la madre · . no podemos aislar el totemismo y tratar~o como
procede de algún alimento (animal o vegetal) que la madre .·algo independiente. Por encima de todo, ~l totemismo en
ha comido. Se sabe que dicha creencia existe en partes de ·· cultura determinada es parte de un Sistema de creen-
una . , li
Australia y de Melanesia, y me parece que, si se la investi- cias y costumbres más e.'{tenso, de una cla~e mas amp a,
gara, podría perfectamente encontrarse en otras regiones a saber, de las relaciones rituales estableCidas por la so-
en las que no está documentada. Así pues, esta teoría de ciedad entre los seres humanos y objetos de la nat_uraleza
Sir James Frazer nos aporta el origen histórico del tote- como animales o plantas y fenómenos como la lluvia .. Des-
mismo~ No está claro si considera que esa forma de tote- ubrimos que existen importantes sistemas de creenClas Y
mismo ha aparecido sólo una vez en una época y un lugar ~e costumbres que establecen relaciones rituales de ese
determinados o si cree que ha aparecido en diferentes re- tipo y, sin embargo, no van incluidos en el término tote-
giones y en épocas diferentes. Para completar dicha teoría, mismo. Los encontramos en pueblos como los esquimales
nos ofrece una explicación sicológica de la creencia que, y los habitantes de las islas Andaman, que carecen de tote-
para él, constituye el germen a partir del cual se desarrolla- mismo. De forma, que el problema del totemismo pasa a
ron todas las diferentes formas de totemismo. Por no cono- ser una parte o aspecto de un problema mu:ho m~s am-
cer las causas fisiológicas de la fecundación y al mismo plio, el de la naturaleza y función de las relaciOnes ntuales
tiempo desear vivamente encontrar una explicación, al hom- entre el hombre y los animales y las plantas en gener~L
bre se le ocurrió la idea de que un alimento comido por Así, por ejemplo hace muchos años escribí lo que pret~ndia
una mujer y seguido de náuseas (las náuseas del embarazo) ser una contribución a la teoría sociológica del totemismo
era la causa de la gravidez, con la cual estaba relacionado. en forma de un estudio de las relaciones entre el hombre
No tengo intención de hacer ante ustedes la crítica de y las especies naturales en un pueblo no totémico, los habi-
estas dos teorías del totemismo. Si la crítica ha de consis- tantes de las islas Andaman. . · .
. tir en un nuevo examen de las pruebas aducidas en favor No obstante, este problema, que no se limita al tote-
de una hipótesis (y así creo que debe ser en el terreno de mismo es a su vez, meramente una parte pequeña de un
la ciencia), no veo que se haya presentado hasta ahora proble~a ~odavía más amplio, el de la naturaleza y función
prueba alguna de la realidad histórica de estas hipótesis. del ritual y de la mitología en ge1_1eral. Si deseamos sa~er
En· realidad, me resulta imposible imaginar que se puedan por qué ciertos pueblos consideran a los animales salvaJ~S
encontrar pruebas auténticas de esa clase. y a las plantas como cosas sagradas, hemos de descubn~
Para la sociología comparada, el totemismo presenta un los pri..ncipios generales en función de los cuales se consi-
.problema o serie de problemas diferente. Podemos decir dera a las cosas de ese tipo como sagradas. De modo, que
que se refieren a la naturaleza y a la función del totemismo. el problema del totemismo, nada más formularlo, conduce
Para elucidar la naturaleza del totemismo hemos de mos- directamente a uno de los problemas fundamentales de la
trar que es una forma especial de un fenómeno mucho más sociología, el de la naturaleza y función del ritual y del
difundido, Y nuestro objetivo debe ser demostrar que es mito. Es característico del método sociológico, que cual~
un ejemplo especial de un fenómeno o, en cualquier caso, quier problema, por pequeño que sea, es parte de un pro-
de una tendencia universal en la especie humana. Para ese blema fundamental general de la naturaleza de la cultura
fin hemos de comparar el totemismo con todas las demás v de la sociedad humana.
instituciones de todas las culturas existentes que puedan . No obstante, debemos, y podemos, aislar parcialmente
estar en relación con él. problemas particulares para hacer un estudio especial de
ellos. Las conclusiones provisionales que saquemos se so,
78
-o
//
meterán a revisión, cuando consideremos el problema par-
.- . e en una totalidad mayor, a pesar
más amph~ -~ue los un·can mantienen mediante el esta-
ticular que estemos tratando en relación con el problema
general del que forme parte.
Sin emprender la tarea imposible de incluir en una ex- . de la. oposicwn,
. t de unase re acwn n~tual entre la sociedad en con-
exlph_, d
... blecimien o d relación especial entre ca a
posición breve la teoría completa de la naturaleza del ri- junto y ciertos sacra ~ de udn:hos sacra. El totemismo de
tual, creo que podemos formular un principio importante t y uno o mas e I f ,
que también es pertinente en el caso del totemismo. Es el segmen o "t des es sólo un ejemplo de un eno-
los clanes o de las mi a, t dido dentro de la relación
de que en las sociedades en que toda la población, o la eno general mucho mas ex en .
mayor parte de ella, interviene en las actividades de procu- m . I la estructura sociaL
general del ntua con , . 1 , ica general del totemis-
rar lo necesario para la subsistencia inmediata, las cosas Desde luego, una teona socioEo~ ten muchos tipos dife-
que son de vital importancia en relación con la subsistencia , ho más que esto. XIS
mo sena mue . habría que considerar todas sus
se convierten en objetos importantes del ritual. Quizá po- rentes de totemismo, y d con la teoría. Pero el
dríamos ser más prudentes y decir que existe una tenden- . t s y las que guar an ,
relaciOnes mu lfa , . al intentar ver cada ferro-
cia muy marcada a que así sea. Pues existen posibles excep- método general sena el mismo, eJ· emplo parti-
ciones, como la ausencia de testimonio alguno sobre un meno particu1ar que examinamos corno un
cular d~ una clase extensa.d análisis y de generalización
culto al ganado entre los hotentotes.
Ejemplos especiales de esa ley o tendencia son los cultos Mediante ese proceso e . una forma
0
al ganado de los pueblos de pastores, los cultos al maíz de podemos llegar a entender el totem~~:~e~·o: ingrediente
los pueblos agrícolas y los cultos al tiempo y a las esta- particular adoptada por lod qu~ parulturas que conocemos
ciones de los pueblos de todas clases. La consideración de universal de la cultura. To as_ as e stumbres mediante el
los animales salvajes y de las plantas como objetos de ri- 1 , · tema de creencias Y co
tienen a gun SIS l exterior entra en relación
tual por parte de los pueblos cazadores y recolectores debe cual el mundo de la natura ez~ dos forman una sola es-
con la sociedad, de forma ;u:le~:n relaciones entre el hom-
considerarse parcialmente o en gran parte como otro sim-
ple ejemplo especial de esa tendencia general. También in- tructura conceptual, y se es _a . "1 r en muchos sentidos
tervienen otros factores, que no tengo tiempo de examinar, bre y la naturaleza de un ti~o simLa de la sociedad. en-
pero, una vez que reconozcamos la posibilidad de su in- al de las rel_aciones establecidas:ee:~:~to inclinado a con-
fluencia, no hay razones para que alteren nuestra argu- tre los propws seres humfano_s. esenciales de la religión
mentación. "d a de las uncwnes 1
SI erar como un . t Nuestras propias re a-
Así hemos llegado a una generalización provisional que la de proporcionar dicha estruc ura. mín considera-
abarca las costumbres y creencias de que forma parte el ciones con un D.lOS qu e ha creado o que,· seo lo de lo que
1 den natural es un eJemp
:~~; ~~~¡~:';~. ~¡ ~~temismo ~oi:lr;:,:n~b~;;';;~~~::~~~:
totemismo. Pero la característica especial de lo que gene"
ralmente se considera como la forma normal del totemis-
mo es la de que toda la población está dividida en segmen- borado de un pueblo como e 1 . al Es-
tos (mitades o clanes), y existe una relación ritual especial e. ern lo de un proceso genera o univers ·. --. ~ ~-
nos es un J P. , d 1. d . da des sociales especiales
entre cada segmento y una o más especies. Creo que pode- tablece todo un sistema e_ solI an t s fenómenos de la
mos demostrar que también eso es un ejemplo especial entre los hombres, los amrna es y o ro
de una ley o tendencia general, según la cual en toda es- naturaleza. ión satisfac-
tructura dividida en segmentos, que tenga una base o fun- Cuando havamos llegado así a una concepc al
ción religiosa, la solidaridad de cada segmento, la diferen- toria de la naturaleza de. totemis~o,f
. l . podemos pasar
. . d una ins-
ciación u oposición entre los segmentos y la solidaridad estudio de sus fu ncwnes.
. Cu ando digo~ uncwn
- e1 ;s'"ema
titución, me refiero a 1 pape l qu e desempena en e s< e
80
81
!.·-· ·.-_; -

. tota.I de integración .social de que forma parte. Al usar esta


gunas de las ideas y parte de la te~ir:ología de. la an~igua.
expresión, integración social, supongo que la función de Iá. antropología soéial. Dice que el. obJetivo de su estudiO es
cultura. como un todo es· unir a los seres humanos indivi- · determinar el «origen» del totemismo y, aunque intenta
duales en· .estructuras sociales más o menos estables , es dar un nuevo significado a la palabra «Origen», el uso que
d .
ecrr, en srste.~as estables de grupo que determinan y re- hace de ella despista a· la mayoría de sus lectores y creo
gulan la relacwn mutua de dichos individuos y proporcio- que despistó al propio Durkheim e hizo que diera a _l_o que
nan una adaptación interna al medio ambiente 0 físico en realidad es una teoría de la naturaleza y la funcwn del
también una adaptación interna entre los individuos 0 gni- totemismo una forma que la vuelve objetable y ha hecho
pos componentes tales, que hagan posible una vida social que muchos de sus lectores la entendieran mal.
ordena~a. Cre.o que esa suposición es una especie de postu- Creo que, al hablar de cualquier institución, deberíamos
l~do -~nmord1al de cualquier clase de estudio objetivo y usar el término origen para referirnos al proceso histórico
Científico de la cultura o de la sociedad humana. pcr el que nació. ~sí podemos hablar del origen del gobier- ·
Cuando emprendamos el estudio funcional del totemis- no parlamentario en Inglaterra y estudiarlo efectivamente.
mo, hemos _de examina~ en cada caso particular, que pre- En la sociología comparada, si queremos darle el carácter
sen~e un num~ro de eJemplos suficiente, el papel que la científico que debe tener, hemos de rechazar absolutamente
vanedad especial de totemismo de una región determinada todos los intentos de conjeturar el origen de una institu-
dese:npeña dentro del sistema total de integración que pro- ción o de un elemento cultural. Naturalmente, siempre que
. porcwna la cultura en conjunto. Podríamos estudiar así dispongamos de buenas y suficientes pruebas sobre el ori-
las tt:nciones de una serie de variedades diferentes del gen de algo, la sociología puede utilizarlas, pero esa es una
totermsmo en Australia y, después, sacar ciertas conclusio- cuestión completamente diferente.
~es generales sobre la función del totemismo en el sistema Ya he señalado que las teorías de la antropología so-
mtegrador general de las tribus australianas. Ese estudio · cial anterior muchas veces revestían una forma sicológica.
no nos dará derecho a sacar conclusiones sobre las funcio- El procedimiento consistía en conjeturar procesos de pen-
nes. del . totemismo en América, o India, 0 Melanesia, 0 samiento en las mentes de los individuos, que inducirían a
Mnca, sm haberlo examinado. ·
éstos a adoptar determinada creencia o costumbre. En esta
De igual forma que la cuestión del totemismo forma conferencia no dispongo de tiempo para examinar la cues-
parte__de un pro~lema sociológico mucho más amplio, así tión de la relación de la sociología con la sicología. Todavía
tamb1en el estudio de las funciones del totemismo forma existe mucha confusión en relación con ella. La posición
pa:t~, del problema sociológico general de la función de la mantenida por el sociólogo es 1) la de que, en el caso de
rehgron.
las instituciones y fenómenos culturales en general, el
Espero que la _breve e inadecuada exposición que acabo sociólogo dispone de un campo de estudio que es entera-
. de~acer sobre nn concepción del tratamiento que la socib- mente distinto del campo del sicólogo, y de que las genera-
log¡~ comparada dará a los problemas del totemismo haya lizaciones hechas en dicho campo deben ser sociológicas y
servrd? ~ara mostrar Claramente la diferencia metodológica no sicológicas; 2) de que, por tanto, cualquier explicación
que d1stmgue la nueva antropología social de la antr" de un fenómeno sociológico particular desde el punto de
H "d 1 gua.
+e escog: ~ e tema del totemismo porque algunas de las vista de la sicología, es decir, de los procesos de la actividad
e.apas mas Importantes del paso de la antropología antigua mental individual, no es válida; 3) de que, en última instan-
a la nueva pueden verse en el tratamiento que DurL-;.eim cia, la naturaleza de la vida social humana está determinada
·d~ a est_e .tema en su obra Las formas elementales de la por la naturaleza del organismo sicofísica del hombre, y de
vzda relzgzosa. Desgraciadamente, Durkheim conservó al- que, por tanto, cuando hayamos descubierto leyes socioló-
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de los orígenes. La obra de autores como Tylor;
gicas universales, el sicofisiólogo deberá descubrir la
ertson Smith, Frazer, Westermarck, por citar sólo al-
de éstas en procesos sicofísicas; 4)· de que, por otro
de los más importantes de este país exclusivamente,
el comportamiento o la sicología de un ser humano ·
el camino para el avance que ahora estamos ha-
dual está determinada en gran medida por la cultura
. Al rechazar las conclusiones que sacaron mediante
le haya impuesto la soCiedad en la que vive.
que nosotros consideramos un método ~~correcto, n?
Así pues, el sociólogo afirma que es posible y necesari~
distinguir sicología y sociología como dos materias distin- · olvidamos todo lo que les debemos en rel~cwn con la pn-
roera exploración sistemática de las regwnes que ahora
tas, tan distintas como la física y la química. Sólo cuando
se distingan así las dos materias, será posible llegar a una ·nosotros intentamos estudiar de forma más exacta Y con
cooperación y coordinación auténticas entre ellas. instrumentos nuevos.
De modo que la antropología social reciente, tal como
la entiendo, difiere de la antigua en varios aspectos
La sociología comparada, tal como estoy llamando aquí
mentales. Rechaza, por considerar que no forma parte de
. a la nueva forma de antropología, requiere una nueva con-
su tarea, la reconstrucción hipotética del pasado descono~
.· cepción de los fines y métodos de las investigaciones de
ciclo. Por esa razón, evita toda· clase de discusiones sobre ·
campo entre los pueblos no europeos. No ~stá muy. ~ejana
las hipótesis relativas a los orígenes históricos. Rechaza·
la época en que para la mayor parte de la mformacwn so-
toda clase de intentos de dar explicaciones sicológicas a los.
br~ la vida y costumbres de dichos pueblos teníamos que
fenómenos sociales o culturales particulares en favor de
.. depender de los escritos de personas que carecían de pre-
una explicación sicológica definitiva de las leyes ::.u<-lU'lUl~l-..
.·.· paración para la labor de observación y descripción: v1a-
cas generales, cuando éstas hayan quedado demostradas
. jeras y misioneros principalmente. Ahora se reconoce que
mediante investigaciones sociológicas. Trata de dar descrip- .·
. no podemos dar a dicha información mayor crédito q':e
dones precisas de los fenómenos sociales y culturales en
el que daríamos a las observaciones de una persona sm
términos sociológicos, y para ese fin procura establecer una
.. preparación en una ciencia como la geología. Así pues, el
terminología adecuada. Considera cada cultura como un
.·. primer detalle en relación con la investigación de camp? es
sistema integrado y estudia las funciones de las institucio-
•· el de que, para que pueda servir plenamente a los fines
nes, costumbres y creencias sociales de todas clases como·
científicos, la descripción de la cultura de un pueblo no
partes de dicho sistema. Aplica a la vida humana en
europeo debe basarse en la labor cuidadosa de un observa-
~ad el método generalizador de la ciencias naturales para •
mte~tar formul~r las leyes generales que la fundamentan y··. . dor plenamente preparado.
· Durante los últimos cuarenta años se ha realizado de
exphcar cualqmer fenómeno dado de cualquier cultura ·
ese modo una gran labor, especialmente en América. Bajo
corno un ejemplo especial de un principio general o uní:
la influencia del Dr. Haddon, en Inglaterra y del profesor
ve~sal. Por tanto, la nueva antropología es funcional, gene-
··Boas en América, se ha hecho mucho por el desarrollo de
ralizadora y sociológica.
··una técnica del trabajo de campo etnográfico.
A pesa_r de que la nueva antropología rechaza gran parte
Es cierto que podemos encontrar personas que se consi-
de los metodos· de la antigua y todas las teorías sobre los
deran competentes para realizar esa labor de observación
orígenes de que tanto se ocupaba esta última, no obstante,
sin la preparación preliminar. También encontramos toda-
se ha desarrollado a partir de ella, no habria sido nosible
vía autores que citan las descripciones de los misioneros Y
sin ella, Y parte del valioso conocimiento de los fenÓmenos
viajeros, como si sus testimonios fueran tan dignos de cré-
s~ciales y de cierta interpretación de su naturaleza propor-
dito como los de los especialistas preparados.
CIOnados casualmente por los primeros antropólogos en su
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84
f Como en los últimos años el ,;bajo de ~po . >
. . 2~\~~~t~., ~~--~;
de una palabra en la lengua que_ usa está cü~s-:-::~:;';J_?}JB!!,;
por las asociaciones que normalmente se agrup~ _"'::?Jh~
l.~o dse ha vuelto más sistemático, la observación ha ido
torno a la palabra en dicha comunidad. Por tanto, el '~'f';it:.:::
v1en
cr ~ f
ose dmás1 amplia . y profun d a. Las d escripciones _
or"' Icas e os pnmeros antropólogos se ocupaban . tor de diccionarios recopila ejemplos del uso de la pala- ·-:-_:....

mentalmente de los aspectos más accesibles de la bra e intenta definir, hasta donde sea posible, las diferentes
de sus elementos
d . formalizados · Normalmente el variedades de dicho uso.
era una escn?ción muy incompleta de la vida de un -, . Ahora bien, el significado de un elemento cultural radica
bdlo. Obras recientes, como la del profesor Malinowski en su relación mutua con otros elementos y en el lugar que
. ocupa en el conjunto de la vida del pueblo en cuestión, es
.e, la ·Dra.
, Margaret Mead • nos dan , gracms . a una ob y
CIOn , va 1"wsa so b re decir, no simplemente en sus actividades visibles, sino _
u mas d extensa y metódica ,_ informaci· on
d e po emos llamar los aspectos no formalizados de la •también en su pensamiento y en sus sentimientos. Eviden-
t ~n fue?l~ como ~1 de Samoa, el de las islas Trobriand
e e as IS as Admiralty. Sin la información de ti
. temente, su descubrimiento con algún grado de certeza
.. sólo es posible· para quien esté viviendo en contacto efec-
no hay esperanzas . de que podamos hacer pleno p tivo con el pueblo cuya cultura esté estudiando, y como .
parado de _la descnpción de una cultura. resultado de una investigación directa y sistemática. Es
, L~ socwlogía comparada supone otro cambio cierto que cuando disponemos de un conocimiento bastante·
mas ~port~nte. _incluso' en la concepción de la ' completo de un pueblo y del significado de sus costumbres
de la mvestlgacwn de campo Segun' 1 . , y creencias, podemos hacernos una idea de sus costum-
1 d . · a concepcwn
a tarea el mvestigador de campo era simplemente o bres y creencias. Así, creo que en el caso de los esquimales_
var los hechos y recogerlos de la forma má . podemos estar bastante seguros de que el significado esen-
con ayuda de mate .al . s precisa p cial del mito Sedna radica en su relación con la división del
1 1 . d' n es como las fotografías, los textos
a engua. m Igena, etc. No era misión suya, por lo año en dos partes, verano e invierno, y en los efectos· de
no en cahdad de investigador de ca . .uJ.\~ll'J"' dicha -división sobre la vida social. _Pero, aun así, la elabo-
interpretación d . 1 d mpo, mtentar dar ración completa de esa hipótesis y, más todavía, su verifi-
e os atos que recogía. De eso se
b cación efectiva, la demostración de que ése es su signifi-
an otros.
La concepción de la nueva t 1 ,. . cado verdaderamente, sólo podría realizarse mediante poS:
ésta; es la de que , 1 1 . ~ ropo Ogia es la opuesta teriores investigaciones entre los propios indígenas.
so o e mvestigador de campo la
;.~e entra en contac~o efectivamente con el pueblo en No hay que suponer que se pueda descubrir el signifi-
wn, pudede descubnr el significado de los diferentes cado de un elemento cultural preguntando a los propios
mentas . e la cultur a, Y que d eb e hacerlo para poder indígenas lo que significa. Los hombres no reflexionan· so-
porcwnar . material
. , . que se pue d a ut1hzar
.. ' plenamente bre los significados de las cosas en su propia cultura, los
1os fmes científicos. _dan por sentados. A no ser que seamos- antropólogos, .no
Cuando hablo del o:signifi d d ' ·. _ reflexionamos siquiera sobre el significado de costumbres·
uso la palabra de fonna muca O» :un elemento cultural; tan corrientes entre nosotros como la de estrechar la mario
cuando h bl d 1 . . . y parecida a como la usamos o la de levantar el sombrero. Si, por casualidad, el etnó-
a amos e significado de las alab . .
deramos a un · di "d . .. P ras. S1 cons1-_ grafo se encuentra con un individuo que haya refle.uonado
m Vl uo, e1 s¡¡mjficado de un 1b
.
Oiga o use es la serie de ~; . .a pa a ra que.·-. sobre el significado de las costumbres de su pueblo, lo más
cosas en su mente v asociaCiones que tiene con otras probable es que dé su propia interpretación individual, que,
pensamiento total ~' por ~danta~ el lugar que ocupa en su .. por significativa e interesante que sea, no puede conside-- . . >
, n su VI a mental como un t d s·
mamas una comunid a d en un momento determinado o o. I to- el rarse como una afirmación válida sobre lo que la costumbre
1

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r la tarea de interpretar la
significa realmente para la comunidad en generaL El está calificado para. rea IZar d no a la sicología,
q ue correspon e, . .
ficado de un elemento cultural sólo puede definirse . . . u..:uu.Lu tura. Es una tarea . , d- 1 Dr Haddon se pra-
· · La concepc10n e
sino a la sociol opa. · la historia d e
de
se entienda la cultura como un todo de partes
mutuamente, y eso sólo puede hacerlo quien esté en dujo en una etapa demasiado temprana
diciones de verla objetivamente: el etnógrafo o el especia- la antropología. . . , d d produ)· 0 primero el
. fu el palS on e se d
lista en sociología comparada, precisamente. ' Como Franela e. t órico d e 1a soc1"olmría ~
compara a,
desarrollo del estu 10 ed fu Francia donde se
Por consiguiente, el investigador de campo ha de utili- .
b rado que era en El
zar una técnica especial para descubrir los significados de ·. podría ha erse espe étodos de trabajo de campo.
los hechos culturales que observe, técnica análoga en cierto elaboraran los nuevos m fu n primer paso en esa
d D t· Marruecos e u
·sentido a la usada por el lexicógrafo a.i recoger por primera trabajo e out e en . . de René Maunier constituye
vez muestras de una lengua- hablada, pero en conjunto mu- dirección, y la obra postenor métodos La importante
. lo de los nuevos ·
cho más difícil. Dicha técnica se está desarrollando ahora un buen eJemp . e basa más en e1 estu-
lentamente, pero su pleno desarrollo sólo será posible a obra de Marcel Granet sobre China s 1 observación de la
tos chinos que en- a
medida que se hagan progresos en la teoría sociológica. dio de los d_ocumen 1 franceses no sienten una
. Pero al parecer, os , .
Desde el punto de vista de la sociología comparada, gran cultura VIVa. ' . . · · etnograf1ca.
., f rte por la mvestigaciOn ..
parte del trabajo realiz~do para recoger testimonios de las atracclOn muy ue 'todos aparecen utl1¡za-
culturas de los pueblos no ·europeos en el pasado es insa- En la actualidad, los nuevos m~ ro cada vez mayor,
b d número pequeno, pe
tisfactorío y no puede utilizarse adecuadamente. Las .vitri- dos en la _o ra e un eñalar la obra del profesor Ma-
nas de nuestros museos etnográficos están llenas de obje- de investigadores. Puedo s M d Pero podemos esperar
tos cuyo significado completo no conocemos y probable- linowski y de la Dra. Margaret ea .1 publicación de mu-
mente nunca llegaremos a descubrir. Nuestras bibliotecas que en los próxi~os años ve~~:~: ~étodos.
están llenas de colecciones de mitos aprendidos de pueblos chos trabajos realizados con h de hecho se hace,
indígenas y de libros que contienen descripciones detalla- Una objeción que pue~e acrs~, yque existen muchas
das e ilustradas de ceremonias, sin que haya nada que nos contra este tipo de trabaJO e~ a. te personal del investí-
revele los. significados de dichos mitos o ceremonias. Desde posibilidades de que el puntad e ~s a es cierto .Y hay que
luego, los sociólogos pueden utilizar de algún modo dicho gador influya en los resulta os.. so ede exagerarse fácil-
material, pero no hay duda de que es menos útil de lo que reconocerlo, pero su i~~ortanciafputo pe;o muy valioso,
d"o qmza no per ec ,
lo será, como esperamos, el trabajo de campo del tipo mente. Un reme 1 ' , . etodología de la ínter-
moderno. seria el desarrollo de_ una t~c.m~a o ~rar la ;alidez de una
Creo que la primera iniciativa en favor de ese tipo pretación, que pen~nta qmza d" e~os hechos fundamentales
nuevo de trabajo de campo la tomó el Dr. Haddon, cuando interpretación particular me Ian e rueba de tal modo,
· organizó la expedición de Cambridge al estrecho de Torres. o en cualquier caso, pueda ponerseda p los efectos del
1 r . se re uzcan .
··No obstante, en aquella época se pensaba que la persona q ue, aunque no se e Immen, . . d d" ha técnica
1 L laborac10n e IC
idónea para. realizar la interpretación sistemática de una punto de vista persona . a e enfrentamos en la
cultura sería· un sicólogo. El Dr. Haddon llevó consigo a es uno de los problemas con. ¿u~ nos rgentes de nuestra
tres de los sicólogos más destacados. de nuestra época. El actualidad, una de las nedcesl a de: ude ese tipo al con-
l · 1' ·' e estu lOS '
experimento dio resultados valiosos, pero esa interpreta- ciencia. La mu tlp 1cacl0n d que realicen trabajo
ción general de la cultura del estrecho de Torres, que iba tribuir al aumento de los observa ores os casos observa-
a incluirse en el volumen del Informe que tratara de de campo y al prop~~ciodnardnos. en :;igg:~ores independien-
ciones sobre una regwn e os mve
sicología, nunca llegará a escribirse. El sicólogo como tal
89
88
te y también la cooperáción oca~ional d~ dos 6
nas en una investigación, contribuirá a la e::umJlna.c1<>mfdf dicho que el significado de un elemento ~ultural se·
los efectos del punto de· vista personal. Pero lo más al descubrir su relación cou los demas elemen-
tante de todo en este sentido será el desarrollo de la la cultura como un todo. De ello se sigue que,
sociológica que haga· de guía para el investigador de nn:na.uu.-..ute, o siempre que sea posible, el investigador de
po en sus estudios y le ayude a conseguir tanto nh,, .. ~,,.,; debe realizar un estudio total de la cultura com-
como intengridad en sus observaciones. =- Por ejemplo, no es posible entender la vida econó-
Una comprensión o interpretación sociológica aa,ect1ac de un pueblo indígena sin hacer referencia a cosas
de una cultura sólo puede conseguirse poniendo en el sistema de la magia y de la religión, y, natural-
c~ón las caz:acterísticas de dicha cultura con leyes lo inverso es igualmente cierto. Hace mucho tiempo,
g1cas conocidas. Naturalmente," sólo pueden descubrirse Dr. Haddon insistió en la necesidad de es~ c.lase de
chas leyes mediante el método comparativo, es decir intensivos de zonas seleccionadas, y as1 hizo pos-
..
~ante el estu~io y comparación de _muchos tipos de .........'.~ ....... a
- ~ ___
el Dr. Rivers, y podemos considerar que dicha
diferentes. As1 pues, el procedimiento en nuestra "'l"'''u'a forma parte de la escuda de Cambridge. El de_s-
dependerá de la creación de un corpus de teorías o del plinto de vista sociológico ha revelado, con mas
tesis relativas a todos los aspectos de la cultura 0 de incluso, que dicha necesidad es evidente.
vida social y la puesta a prueba de dichas hipótesis Podemos observar aquí que esa concepción del carácter
diante una investigación de campo intensiva. El in"''"~+;.-. de la cultura es uno de los rasgos más importan-
dor de campo del futuro, o, incluso, del presente, ha . de la nueva antropología, y constituye un aspecto en
con_ocer ~e~ectamente todas las hipótesis sociológicas ·.el que difiere profundamente de algunas de las muestras
esten ;enficadas en _parte y, a ser posible, las que de la etnología y de la antropología actuales y de las ante-
elaborandose, y ha de dirigir su investigación hacia la riores. Algunos estudiosos de la cultura adoptan lo que
ta a prueba de dichas hipótesis, ya se trate de la suya 0 podríamos llamar un punto de vista atomista de la cul~ura.
las de los otros cultivadores de la ciencia, mediante su Para ellos todas las culturas se componen de una sene de
cación a una cultura particular. Sólo así podrán ponerse . elementos' 0 «rasgos» discontinuos e independi~ntes, qut!
prue?~ las hipótesis y resultar verificadas, rechazadas de relación funcional mutua y han queaado agru-
modificadas; y probablemente el resultado normal como una simple colección por obra de casualidades
más la modificación que la verificación o el rechazo .·históricas. Un elemento cultural nuevo se origina en al~n
pletos. Sólo así podrá ponerse en práctica el método •sitio y después se propaga mediante un proceso d: "diD:--
piado de las ciencias generalizadoras, a saber, el ·.,.,,.,n......,n sión» que con frecuencia se. concibe en. forma cas1 me.ca-
de hacer un estudio preliminar de los hechos conocidos •. Este punto de vista es consecuencia en gran medida
formulación . de ge~e~alizaciones hipotéticas, la puest~ del estudio de -la cultura propio de los museos.
prueba de dichas hipotesis mediante un examen pos :-' La nueva antropología considera cualquier cultura du-.
de una serie específica de datos, la modificación de radera como una unidad o sistema integrado, en el que cada :- .. :,._
hipótesis ·originales a la luz de los nuevos datos, la nueva .•. elemento desempeña una función precisa en relación co:u. el
puesta a pn:-eba de la~ hipótesis en su forma nueva y posi- ·_ conjunto. En ocasiones, la unidad de una cultura p~ede
blemente mas compleJa o más definida, y así sucesivamen- verse alterada gravemente por el impacto de. ~tra cuu:ur~
t~. A falta de la posibilidad de un experimento efectivo, muy diferente, y puede quizá resultar destrmda o susti-
sol~ de esa forma podemos edificar una ciencia de la tuida. Esas culturas desorganizadas son muy corncntcs
soc1edad humana. en la actualidad por todo el m~ndo, desde América o l~s
mares del Sur hasta China e India. Pero el proceso mas
90
91
habitual de influencia mutua entre culturas es aquel
el cual un pueblo acepta determinados elementos aborígenes australianos o en el de algunas de las tribus de
les de sus vecinos, al tiempo que rechaza otros, acepta~ · los indios norteamericanos. . . .
ción y rechazo determinados por la naturaleza de la cultura · . . Así pues, en la nueva antropologm el trabaJO de mves-
. ación de campo ha llegado a ser mucho más difícil y de
t Ig
como un sistema. Normalmente, los elementos adoptados 0 l ., .,
«tomados prestados» de los vecinos se rehacen y modifican .. , alcance mucho más amplio. La se eccwn.! pr:par~c-1~n
en el proceso de hacerlos encajar dentro del sistema cultu- de las personas para ese trabajo es tambien mas d1f1ci~.
ral existente. El investigador de campo debería contar con un cono~I­
miento cabal de todos los desarrollos recientes de la sociO-
logía teórica. En la actualidad, no se puede obten~r en los
libros: sólo mediante el contacto personal -con qmenes es-
tán trabajando en la materia. Además, debería haber apren-
El alcance del trabajo de campo entre los pueblos no
europeos e~tá ampliándose en otra dirección, en parte como dido la técnica de la investigación de campo, tanto para la
consecuencia de las relaciones que se están estableciendo observación como para la interpretación. También debe
ahora entre al antropología y la administración coloniaL conocer todo lo que se haya descubierto hasta entonces
En otros tiempos, si un investigador de campo visitaba sobre la cultura de la región en que vaya a trabajar y, a ser
a un pueblo que había estado sometido a la influencia posible, conocer un poco las len~as también. Por último,
europea, como solía ocurrir, su misión consistía en descu- muchas veces el éxito de un investigador de campo en etno-
b . 1
grafía depende de ciertas cualidades temperamentales Y
nr, con . . a mayor profundidad y lo. más detalladamente
que pu~iera, ~uál _había sido la cultura original antes de que caracteriológicas. No todo el mundo puede ganarse la con-
se hubiera eJercido dicha influencia. No se consideraba fianza de un pueblo indígena.
parte de la labor del etnógrafo estudiar detalladamente los Es evidente que el investigador de campo ideal no es
cambios producidos en la cultura indígena por el contacto fácil de encontrar, y que necesita algunos años para su
c~n los e~ropeos. Pero muchas veces un conocimiento pre- preparación. Y, sin embargo, las recompensas de esta pro-
Ciso de dichos cambios y del modo como se producen es de fesión son muchas menos que las de las otras ciencias. Una
gran_ valor para la sociología teórica, y más incluso para pro- de las crrandes dificultades de esta ciencia es la de encon-
porciOnar una base científica de conocimiento exacto a la trar in;estigadores y proporcionarles los medios para que
administración colonial. La misión primordial del etnó- realicen su trabajo. La investigación en antropología so-
grafo sigue siendo la misma, la de descubrir todo lo que cial suele ser costosa. No puede realizarse, como muchos
pueda sobre la cultura, tal como era originalmente. Hasta otros trabajos científicos, dentro de los recintos de una
que ~o se haga eso plenamente, no se podrán entender los universidad; La necesidad más urgente es la de que se sos-
cambws que la influencia europea provoca. Pero, para que tenga dicha investigación mediante becas de i_n:estigación
la an~ropol~gía preste una ayuda real a la administración que permitirían al antropólogo que haya recibido prepa-
colomal,_ el mve~tigador de campo ha de emprender ahora ración para el trabajo de campo realizar ese trab_ajo du-
el estudw Y la Interpretación de los, cambios que vea se rante años sin tener· que abandonarlo por la ensenanza o
están produciendo en la cultura que esté investigando. cualquier otro de los empleos que actualmente constituyen
No obstante, esos estudios son de poco 0 ningún valor el único modo de conseguir ingresos asegurados y con-
para la sociología teórica o para fines prácticos, ;uando la tinuos.
cultura ~? cuestión está en p~oceso de desintegración o Y, sin embargo, el futuro de la sociología comp~rada
destruccwn completa, como, por ejemplo, en el caso de los de los pueblos no europeos reside enteramente en la mv:s-
tigación de campo. Ha pasado la época en que aceptana-
mas la autoridad científica en esta materia de alguien que posibles para siempre. ¿Existe o ha existido nunca al~na
nunca hubiera hecho un estudio intensivo de por lo menos,
otra ciencia que se enfrente o se eJ?.frentara con semeJante
una. cultura. En el pasado hemos dependido mucho de los situación, la de que, precisamente en el momento en que
llamados «antropólogos de sillón». Pero en la situación está alcanzando la madurez, disponga de muy pocos culti-
actual de la ciencia ninguna visión intuitiva, por genial que vadores y de fondos .muy escasos a causa de la falta de
sea, puede compensar completamente la falta de contacto interés y apoyo generales, y de que una gran cantidad del
personal directo con el tipo de material que el antropólogo material más importante esté desapareciendo año tras año
tiene que estudiar y explicar.
sin que exista la posibilidad de hacer estudio alguno que
Así pues, éste es otro rasgo importante de la nueva an- no sea el de un sector reducido?
tropología, la insistencia en que la investigación y la teoría
no deben separarse, sino que deben ir tan íntimamente com-
binadas como en las demás ciencias. Las observaciones de Mediante las inv~stigaciones de campo será como la
los datos, la formulación de las hipótesis y la puesta a antropología hag9. progresos de cara a convertirse en una
prueba de éstas mediante nuevas observaciones directas ciencia auténtica e importante. Pero los estudios intensivos
son todas ellas partes de un único proceso que un mis- de culturas o sociedades particulares no bastan por sí solos.
mo individuo debería llevar hasta las últimas consecuencias Dichos estudios intensivos deben inspirarse en la teoría y
posibles.
verse guiados por ella, y la sociología teórica ha de basarse
en la comparación de culturas diferentes unas de otras,
pues en esta ciencia la comparación ha de ocupar en gran
Mientras tanto, existe un hecho que a veces me parece medida el lugar que el experimento ocupa en las otras
coloca a nuestra ciencia en una posición casi trágica. Aho- ciencias.
ra que, mediante el desárrollo gradual de la teoría y el La nueva antropología está desarrollando una concep-
perfeccionamiento de los métodos de investigación, esta- ción del método comparativo diferente de la que había sido
mos en condiciones de hacer las contribuciones más impor- corriente en el pasado. En la antropología anterior se nos
tantes a la ciencia del hombre mediante el estudio inten- ofrecían libros o monografías en las que aparecían recogi-
sivo y exacto de las culturas menos desarrolladas del das y agrupadas costumbres o creencias semejantes, a veces
mundo, dichas culturas están resultando destruidas con sólo superficialmente semejantes, de toda clase de culturas
una rapidez que produce consternación. Ese proceso de des- del mundo entero. Un procedimiento de ese tipo puede ser
trucción, por medio de la acción combinada del comercio útil para hacer un primer examen de algún problema o
o la explotación económica europea, el gobierno de los fun- grupo de problemas particular, y ha sido útil de esa forma
cionarios europeos y la actividad misionera, se está produ- en el pasado. Pero lo único que puede hacer es indicar
ciendo a un ritmo acelerado. Durante los veinticinco años los problemas, no resolverlos. Para esto último se necesita
· transcurridos desde que participé por primera vez en esta un procedimiento más preciso y laborioso.
labor, he visto grandes cambios. Tribus de Australia v Para entender cómo debería ser concretamente el mé-
Melanesia y del norte de Africa, de las que hace un cuart; todo comparativo hemos de tener en cuenta la clase de
de siglo habríamos podido obtener la infonnación más va- problemas a cuya solución va dirigido. Son de dos tipos,
liosa, ahora nos proporcionarán muy poco y, en muchos que podemos distinguir con las denominaciones respecti-
casos, nada. Dentro de otro cuarto de siglo, Ia situación vas de sinc:-ónico y diac:::-ónico. En un estudio sinc:-ónico,
s_erá muchísimo peor. Trabajos que todavía ahora se pue- lo único que nos interesa es una cultura, tal como es en un
aen hacer en todas las partes del globo serán entonces im- momento determinado de su historia. Podemos decir que
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95

el objetivo final es definir lo más precisamente posible l~s ·


condiciones .que cualquier cultura ha de satisfacer para a dudas, n'J menos importantes que las semejanzas, y el
poder existir pura y simplemente." Lo que nos interesa es la nuevo método comparativo centra su atención en dichas
naturaleza de la cultura y de la vida social, el descubri- diferencias.
miento de lo que hay de universal por debajo de las nume- Ya he señalado que la sociología comparada considera
rosas diferencias que nuestros datos presentan. De ahí que una cultura como una unidad sistemática o integrada en
necesitemos comparar la mayor cantidad de tipos de cultu- la que cada elemento desempeña una función distinta. Por
ras diferentes que podamos. Por otro lado, en el estudio esa razón, su objetivo es, y debe ser, comparar unos con
diacrónico, lo que nos interesa son las formas como las otros sistemas culturales totales y no elementos culturales
culturas cambian, e intentar descubrir las leyes generales aislados pertenecientes a regiones diversas. Así pues, el
de esos procesos de cambio. procedimiento ha de ser análogo al de la morfología y fisio-
Me parece evidente que no podemos emprender con logía comparadas, cuando comparan las especies animales.
éxito el estudio de las formas como la cultura ~ambia hasta Estas últimas disciplinas realizan sus estudios comparando
que no hayamos hecho por lo menos algún progreso en la variedades pertenecientes a la misma especie, o especies
tarea de determinar de qué cultura se trata y cóm 0 fun- pertenecientes al mismo género, y después emprenden la
ciona .. Así pues, en cierta medida, el estudio de los proble- comparación de los géneros, de las familias y de los ór-
mas smcromcos ha de preceder necesariamente al estudio denes.
de los problemas diacrónicos. Los cambios que se producen En la sociología comparada, como señaló Steinmetz
en las instituciones de un pueblo no son comprensibles hace muchos años, el procedimiento científico ha de ba-
adecuadamente hasta que no conocemos las funciones de sarse en una clasificación sistemática de las culturas o de
d!chas instituciones. Por otro lado, también es cierto que, los tipos sociales. En consecuencia, nuestro próximo paso
SI pod~mos estudiar los cambios que se están produciendo es definir lo mejor que podamos determinadas zonas cultu-
en algun aspecto de la cultura, dicho estudio nos será de rales o tipos de cultura. Desde luego, dicho procedimiento
gran ayuda para nuestras investigaciones funcionales. es tan antiguo como Bastian, pero ha adquirido una impor-
Así como los problemas de la sociología comparada son tancia y uso nuevos.
d~ dos clases, así también el método comparativo se usa- Así, por ejemplo, descubrimos que Australia como un
ra de dos modos. En relación con el estudio sincrónico de todo es una zona _particular suficientemente homogénea,
la cultura, compararemos diferentes culturas unas con en la que existe el mismo tipo de cultura. Así pues, pode:
otras, tal como cada una de ellas existe en un momento mos emprender inmediatamente una comparación de las
dado de su historia, y sin hacer referencia a los cambios en diferentes tribus australianas entre sí. De forma, que po-
la propia cultura. . demos considerar que cada tribu, o cada grupo peque-
El método comparativo no riguroso, tal como se lo ha ño de tribus, nos ofrece en su sistema cultural una va-
usado much~s v~ces, y, -de hecho, lo siguen usando algunos riedad especial de un tipo general. Mediante el estudio lo
autores, es Cie~tifica~ente incorrecto en el sentido de que más minucioso posible de dichas variaciones podemos rea-
h~ce :omparacwnes mmediatas entre costumbres o creen- lizar un proceso de generalización que nos permita dar una
Cias aisladas pertenecientes a regiones diferentes v a cultu- definición o descripción general del propio tipo. Mediante
ras ~e tipos distintos. Además, centra su atenciÓn en las ese proceso, muchas veces podemos descubrir correlaciones
semeJan~as .de costumbres, y muchas veces en lo que sólo entre un elemento cultural y otro. Además, dicho procedi-
en apanenc1a son semejanzas aparentes y no reales. Pero miento es casi esencial para cualquier intento de descubrir
para el sociólogo, las diferencias culturales son, sin luga; el significado y la función de un elemento. Pues, gracias a
él, podemos determinar lo que permanece constante y lo
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97
..
como un todo. Sólo cuando hayamos realizado estudios de
que varía en una institución, costumbre o creencia, ese tipo con cierta profundidad, llegará a ser provechoso
igual modo que en la comparación de una parte de una hacer comparaciones entre la cultu~a bantú y la polinesia
zona cultural con otra. o la norteamericana.
Ese estudio de los tipos y variedades culturales en la Así pues, para la nueva antropología el método compara-
sociología comparada es completamente diferente del estu- tivo es un medio de obtener generalizaciones. Intentamos
dio de las áreas culturales en etnología. El objetivo funda- descubrir lo que hay de general de entre las variaciones de
mental de esta última es proporcionar el material para la institución o de costun1bre en toda una región o tipo. Me-
reconstrucción hipotética de los movimientos de difusión diante la comparación de un número sufic:iente de tipos
cultural. Aquélla es esencialmente un proceso de generali- diferentes, descubrimos uniformidades que son todavía más
zación, un medio de descubrir los rasgos o principios gene- generales y, así, podemos llegar a descubrir los principios
rales que permanecen constantes en todo el tipo, al tiempo o leyes universales de la sociedad humana.
que adoptan formas diferentes en las distintas partes de Una palabra cuyo constante uso ha constituido un gran
la zona. obstáculo para el pensamiento científico de la antropología
En ese estudio de las variaciones de un tipo de cultu- es la de «primitivo». Sugiere que cualquier sociedad a la
ra particular, nuestro objetivo debe ser comparar la cultura que la apliquemos representa para nosotros algo corres-
como un todo de una tribu con la de otra. Pero muchas pondiente a los comienzos de la vida sociaL Ahora bien, si
veces resulta imposible; de hecho, en el estado áctuaJ de la cultura tuvo un origen único, como podemos suponer,
nuestro conocimiento, casi siempre lo es. Por eso, podemos hace varios cientos de miles de años, en ese caso cualquier
hacer un estudio comparado de las variaciones en algún cultura existente tiene una historia tan larga como cual-
aspecto particular de la cultura. Pero hemos de tener cui- quier otra. Y aunque el ritmo de cambio puede variar,
dado a la hora de aislar úna parte de la cultura de otra para cualquier cultu;-a, igual que cualquier lengua, está experi-
los fines del estudio. Así, el estudio de algún aspecto parti- mentando cambios constantemente. Pero, aparte de esas
cular de las tribus australianas, en lugar de su organiza- connotaciones de la palabra que en cierto sentido dan a
ción como un todo, ha producido muchas interpretaciones entender la idea de «temprano», la aplicación que se suele
erróneas. hacer de ella a los tipos más diferentes de culturas es muy
Quizá no exista otra región completamente semejante a perjudiciaL Las diferencias culturales entre los maoríe~
Australia por lo que se refiere a las oportunidades que de Nueva Zelanda y los aborígenes de Australia es, por lo
ofrece para el estudio de muchas variaciones de un único menos, tan grande como la que existe entre nosotros y los
tipo de cultura. Por esa razón, en otras regiones nuestro maoríes. Y, sin embargo, agrupamos a esas dos culturas
procedimiento ha de ser algo diferente. Así, por ejemplo, bajo la calificación de «primitivas» y las contrastamos con
si deseamos estudiar las culturas bantúes de AJrica, hemos la nuestra, ceno primitiva». Sé perfectamente lo difícil que
de empezar por dividir la región total en unidades idóneas. es evitar completamente el uso de ese término, o de cual-
Una de dichas unidades abarcaría las tribus basuto-bechua- quier otro igualmente inadecuado, como el de <<salvaje».
. na, mientras que las tribus zulú-kaffir constituirían otra Quizá si tenemos lo suficientemente en cuenta las grandes
unidad. Nuestra primera etapa consistirá en estudiar cuida- diferencias culturales entre los distintos pueblos que agru-
dosamente las variaciones dentro de cada una de las regio- pamos de esa forma, podremos evitar el inconveniente
nes que constituyan una unidad. Después compararemos principal que acompaña a su uso. Así, podremos evitar el
una región con la otra, y así podremos explorar toda la defecto del método comparativo no riguroso, el de consi-
zona bantú de modo que podamos dar una desCripción derar inmediatamente comparables unos con otros todos
correcta de los caracteres generales de la cultura bantú
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los tipos diferentes de. sociedad a los que se aplica la eti- tan suficientes variaciones entre una tribu y otra, al tiempo
queta de primitivos. que el tipo gep.eral siga siendo el :rp.ismo. También en este
caso Australia es una región muy idónea. Así pues, comen-
zaría la investigación con un estudio comparativo de las
Temo que este examen de los problemas metodológicos tribus australianas. Nótese que esto no es así en absoluto
apenas les aporte una concepción precisa. Así, pues, per- porque la cultura australiana sea «primitiva», en el sentido
mítanme seleccionar un ejemplo particular de un problema de que represente los comienzos de la sociedad humana .
. sincrónico e indicar brevemente cómo intentaría resol- Al contrario, la cultura australiana es una cultura muy es-
verlo. Podemos tomar como ejemplo uno de los problemas pecializada, en la que ha habido una elaboración extraordi-
fundamentales de la sociología, el de la naturaleza y fun- naria de la organización del parentesco, y por esa razón
ción de las obligaciones morales que una sociedad impone exactamente es por la que la seleccionaría para el estudio
a sus miembros. Para los fines ·de la investigación científica de cualquier clase de. problemas que tengan relación con el
debemos subdividirlo en un gran número de problemas se- parentesco. Australia representa, no el comienzo, sino el
cundarios. Así, podemos aislar, como uno de dichos proble- fin de una larga línea de desarrollo de la estructura del
mas, el de la naturaleza y función de las reglas que prohí- parentesco. Así que mis razones para seleccionar a Austra-
ben el matrimonio entre personas entre las cuales existan lia son exactamente las opuestas de las que fueron adu·
determinadas relaciones sociales; en otras palabras, 'la na- ciclas por autores anteriores que realizaron la misma selec-
turaleza y función de la prohibición del incesto. Hasta ción.
Durkheim se enfrentó al problema al modo antiguo. Ahora Después de haber seleccionado un primer campo para
bien, aparte de que cualquier clase de hipótesis sobre el estudio comparativo, compararía la organización· social
cómo aparecieron por primera vez ese tipo de prohibicio- en conjunto de. todas las tribus australianas so~re las que
nes hace cientos de miles de años son completamente im- tenemos información adecuada, con el fin de definir cuál
posibles de verificar, también es evidente que incluso una es la naturaleza de la correlación entre las reglas que
hipótesis plausible sobre el origen no puede explicarnos la prohíben el matrimonio y la estructura social. En otras
gran diversidad que encontramos actualmente en las prohi- palabras, intentaría definir de la forma más precisa po~ ible
biciones de los diferentes tipos sociales. Y, sin embargo, la la función de dichas reglas como parte del sistema total
explicación de dichas diferencias es realmente el quid del de integración social. La investigación tiene que basarse
problema. En ésta, como en tantas otras investigaciones en el examen detallado de las variaciones. Como resulta-
sociológicas, hemos de buscar una explicación per genus et do de dicho estudio de Australia, podemos llegar a una serie
differentiam. Deseamos saber por qué todas las socieda- de generalizaciones significativas importantes. Llegaremos,
des tienen reglas de ese tipo y por qué las reglas particu- por ejemplo, a determinadas conclusiones provisionales
lares varían, como vemos que lo hacen, de un tipo social a sobre la naturaleza (no el origen) de la e.:'{ogamia. Después
otro. Tan pronto como planteamos el problema de este habrá que poner a prueba dichas conclusiones mediante
modo, nos encontramos ante un problema comparativo un estudio semejante de otros tipos de culturas. A un solo
del tipo a que he estado refiriéndome. Al tratar semejante estudioso le resultaría imposible, ni siquiera durante toda
problema, lo primero que yo haría sería seleccionar una su vida, hacer una investigación completa de todas las
cultura en que las reglas que prohíben el matrimonio sean culturas conocidas de ese modo. Esa es la razón por la que
precisas y estén muy elaboradas. Evidentemente, la cultura la cooperación de varios estudiosos en el estudio de un
de las tribus australianas es muy adecuada en ese sentido. solo problema es tan esencial en sociología. Pero un estu-
Además, hemos de disponer de una cultura en la que .exis- dio preciso de otro tipo de cultUra suficientemente difer e:,~§_
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1
.. ~\.

te de la australiana nos permitiría una verificación muy comparativo antiguo usado como medio para llegar a for-
valiosa de los r.esultados provisional.es obtenidos. mular teorías sobre el origen de las instituciones. ·
Cuando se haya conseguido de ese modo una teoría
sobre la naturaleza y la función de la prohibición del inces-
to, el próximo paso será buscar el experimentum crucis Cuando pasamos a ocuparnos de los problemas diacró-
mediante el cual se la pueda poner a prueba de la forma nicos que la sociología comparada ha de estudiar, es decir,
más critica. Ese ejemplo crucial será con frecuencia uno los problemas de cómo cambian las cUlturas, la compara-
que resulte oponerse directamente a la teoría. Así, en mi ción de las culturas tal como cada una de ellas es en un
propia teoría tendríamos que encontrar prohibido en todas momento determinado de la historia, si bien puede apor-
partes el matrimonio entre padres e hijos y entre hermanos tarnos alguna ayuda, no es suficiente por sí misma. Así, el
y hermanas. Así pues, )as diferentes sociedades en que está estudio de las variaciones que se han producido en una
permitido el matrimonio entre hermano y hermana pos cultura particular, como, por ejemplo, en Australia, aunque
ofrecen una oportunidad para poner a prueb~ la teoría, no disponga de observaciones sobre cómo o cuándo ocu-
pues hemos de ser capaces de explicar esas excepciones en rrieron, a pesar de todo puede darnos una orientación pre-
función de la propia teoría. La excepción ha de confirmar liminar para el estudio de cómo se producen las variacio-
la regla. Podemos buscar otros ejemplos cruciales semejan- nes. En otras palabras, el estudio comparado de las cultu-
tes mediante los cuales poner a prueba la validez de la ras sin historia es un método para permitirnos formular
teoría generaL con cierta precisión los problemas de que tendremos q·~e
Como consecuencia de dicha investigación, en caso de ocuparnos en un estudio diacrónico de la cultura.
que diera resultado, deberíamos sacar determinadas con- Sin embargo, para poder descubrir las leyes del cambio
clusiones sobre la relación entre las obligaciones morales social, hemos de estudiar en última instancia los procesos
y la estructura social. En otras palabras, habríamos apren- de cambio efectivos. Podemos hacerlo hasta cierto punto
dido algo sobre el lugar que ocupan dichas obligaciones mediante los documentos históricos, en todos los casos en
en la integración social. Después, la sociología tendría que que dispongamos de testimonios suficientemente comple·
emr1render investigaciones semejantes sobre otros proble- tos y dignos de crédito. Pero es de desear que los propios
mas abarcados por el problema general. Podríamos estudiar sociólogos emprendan, lo más pronto posible, el estudio de
de igual forma las obligaciones relativas a la prohibición los cambios qur; se producen en una cultura durante un
de matar, o las .referentes a los derechos de propiedad. período de años. En este ejemplo el método comparativo
Como resultado final de esa serie de estudios relacionados, consistirá en la comparación cuidadosa de procesos de
podríamos llegar a formular una teoría de la naturaleza y cambio observados detalladamente.
de · la función de la moralidad en general. Dicho sea de
paso, cualquier investigación particular de ese tipo ha de
vincularse con otros problemas sociológicos y ayudar a En la organización actual de la antropología, se supone
aclararlos. De modo que el estudio de la prohibición del que el antropólogo social debe limitarse al estudio de los
incesto supone necesari2r::t:::nte un estudio. preciso del pa- pueblos sin historia, los llamados pueblos primitivos o
rentesco desde otros aspectos. salvajes que todavía sobreviven fuera de Europa. En caso
Espero que el ejemplo que acabo de poner haya mos~ de que le interese lo más mínimo Europa, se supone que
trado claramente que el método comparativo, tal como lo debe ocuparse sólo de los tiempos prehistóricos y del lla-
usa el estudio sincrónico de la cultura, es algo diferente mado folklore, es decir, de ciertos aspectos culturales que
con respecto a aspectos imnortantes del antiguo método se han considerado supervivencias de culturas anteriores y

102
más primitivas. Esa división de los pueblos del mundo en . En Inglaterra tenernos poquísimas muestras que pue-,
dos grupos para los fines del estudio fue en apariencia dan llamarse sociología. Hobhouse, que representó a la so-
ciología en este país, era un filósofo ·más que un cientí-
bastante satisfactoria mientras predominó en la antropo-
logía el método histórico. El historiador podía aportarnos fico.
En Estados Unidos existe gran número de departamen-
la historia real de las lenguas y culturas europeas a lo lar-
tos de sociología distribuidos por las universidades. Resul-
go de los tiempos históricos. Al antropólogo, igual que al
ta difícil resumir los diferentes tipos de estudios que abar-
etnólogo o al arqueólogo, quedaba reservada la tarea de
ca este término. Gran parte del trabajo de muchos depar-
reconstruir el pasado en las regiones y periodos que que-
tamentos de sociología consiste en lo· que en este país lla-
daban fuera del dominio de la historia propiamente dicha.
maríamos educación cívica y en estudios relacionados con
Pero, para la sociología comparada como ciencia ge-
obras de asistencia social. Existe todavía algo de lo que
neralizadora de la cultura, esa división de las culturas his-
propiamente debería llamarse filosofía social, aunque mu-
tóricas y no históricas es enteramente inadecuada y, de
cho menos de lo que había hace un cuarto de siglo. La ac-
hecho, perjudicial. El sociólogo ha de estudiar todas las
tividad más señalada de dichos departamentos en. la actua-
culturas utilizando los mismos métodos. Al estudiar las cul-
lidad es lo que puede llamarse estudios sociales factuales,
turas históricas, no hace la competencia al historiador ni
es decir, la recogida de información precisa, en forma es-
entra en conflicto con él, pues cada uno de dichos espe·
tadística a ser posible, sobre determinados aspectos de la
cialistas persigue y utiliza, respectivamente, fines y méto-
vida social, principalmente en los propios Estados Uni-
d(ls diferentes. El historiador no busca, o no debería bus-
dos, pero también en cierta medida en otros países.
car, las generalizaciones. Se ocupa de pormenores y de sus
Creo que he mostrado claramente que mi propia con-
relaciones particulares, generalmente cronológicas.
cepción es la de que cualquier intento de descubrir las
leyes generales de la sociedad ·humana .debe basarse en el
estudio completo y detallado de tipos de culturas profun-
Siento no disponer de tiempo en esta conferencia para
damente diferentes y en su comparación. De hecho, la fir-
tratar adecuadamente de la relación del estudio que estoy
me convicción de que así era fue lo que me hizo entrar en
denominando sociología comparada con los estudios a ve-
el campo de la antropología hace un cuart(J de siglo. Si
ces denominados sociología o ciencia social. No puedo ha-
acaso, estoy más convencido de ello que nunca, y no veo
cer otra cosa que ofrecer unas pocas observaciones breves.
posibilidad para el desarrollo de una sociología realmente
En primer lugar, permítanme decir que lo que en Francia,
científica, excepto sobre esa base comparativa.
o en cualquier caso en la Universidad de París, se llama
Desgraciadamente, lo que ha ocurrido h~ sido que la
sociología es el mismo estudio precisamente que estoy de-
antropología ha desatendido en gran medida el estudío de
nominando aquí sociología comparada, y que, si la mate-
los pueblos no europeos en favor de la historia conjetural
ria está tan avanzada, se debe en gran medida a la obra
y, al mismo tiempo,· muchos de quienes han realizado un
. de los sociólogos franceses : Durkheim, Hubert, Mauss, Si-
tipo u otro de estudio sociológico no han tenido un co-
rniand, Halbwachs, Hertz, Granet y Maunier, por citar sólo
nocimiento completo de las sociedades no europeas. Excep-
a algunos de ellos.
to en Francia, los antropólogos han dejado para la sociolo-
En Alemania gran parte de lo que se llama sociología
gía y los sociólogos para la antropología lo que he llama-
debería llamarse de forma más apropiada, me parece, filo-
do sociología comparada. Creo que ahora, en parte como
sofía social o filosofía de la historia. Un autor que repre-
consecuencia de las actividades de la Junta de Investiga.:.
senta a la sociología comparada que acabo de describir
cienes de la Ciencia Social para intentar coordinar los di-
es Richard Thurnwald.

104
lOS
<:}¡¡,;
ferentes estudios sociales, están empezando a reconocerse diente y muy importante. Desde luego, en Inglaterra ten~-.··::.:.~_:z,:i
en los Estados Unidos los resultados insatisfactorios de mas los laboratorios Galton como. centro de ese tipo d((.-~.'-'6~')
esta división de los estudios, a causa de la cual la antropo- estudios. El difundido interés -temo que no siempre en> · · ·-e-'
logía no ha podido encontrar una posición propia ade- terarnente científico- por la eugenesia y por los problemas~ -
cuada, y no pierdo la esperanza de que antes de que trans- raciales podría utilizarse para conseguir apoyo suficiente.
curra otro cuarto de siglo la ciencia de la sociología com- Por otro lado, no parece que a la biología humana le bene-
parada haya conseguido un lugar reconocido y muy im- ficie especialmente el hecho de ir unida a la arqueología y
portante en cualquier escuela de ciencias sociales bien or- a la etnología.
ganizada. La arqueología prehistórica es ahora una materia inde- __
Las universidades inglesas, o, mejor, las universidades pendiente con su propia técnica especial y cultivada por ·l
británicas en general, se han mostrado reacias a admitir la especialistas. Naturalmente, el arqueólogo debe tener cono- )
sociología en forma alguna como materia de estudio, en cimiento de la paleontología y geología generales. No obs- ·l
contraste con su popularidad en Estados Unidos. Hasta tante, la afinidad natural de la arqueología es con la his-
cierto punto, esa prudencia ha sido oportuna. La materia toria.
está todavía en su etapa de fonnación. Pero, por otro lado, La etnología, en la medida en que intenta no simple-
su ausencia de la lista de estudios universitarios reconoci- mente clasificar las razas, las lenguas y las culturas, sino -
dos ha impedido en gran medida su desarrollo. también reconstruir su historia, ha de mantener por fuer-
za una asociación estrecha con la arqueología. De hecho, ·
en cierto sentido, se la puede considerar perfectamente
Como habrán visto, en esta conferencia lo que me ha como una rama o desarrollo ulterior de la arqueología.
interesado principalmente ha sido intentar indicar una nue- Así, podemos perfectamente considerar la arqueología pre7
va disposición de los estudios agrupados bajo el nombre histórica (o paleontología, corno a veces se le llama) y a
de antropología. Esta nueva disposición es consecuencia la etnología como una materia que persigue y utiliza, res-
del crecimiento natural, pero debería reconocérsela, y en pectivamente, los fines y métodos de la ciencia histórica ..
última instancia ha de convertírsela en la base de cualquier Frente a las ciencias históricas se sitúan las tres cien~
coordinación satisfactoria de los estudios en .las universi- cias generalizadoras : la biología humana, la sicología y la •
dades y en otros sitios. sociología comparada.
La relación más estrecha e importante de la sociología
En primer lugar, hay tres estudios que se han asociado
tradicionalmente con el nombre de antropología: la antro- comparada ~s la que mantiene con la sicología. Al especia~
pología física, la arqueología prehistórica y la etnología. lista en sociología comparada no le interesa de forma es-
La antropología física parece destinada a quedar ab-
pecial adquirir más de un conocimiento elemental de .la
sorbida dentro de un estudio más amplio de la biología arqueología prehistórica. El estudio de la historia, en.la
humana, que requiere que se lo realice en asociación es- medida en que trate de la cultura y no de los hechos de
trecha con las ciencias biológicas. El procedimiento actual, los reyes, de los estadistas y de los soldados, es del ma- ·
por el que se enseña la antropología física como parte de yor valor para él. Especialmente en la actualidad, es de
la anatomía, no siempre es del todo satisfactorio. Puede desear que la sociología comparada evite dejarse enredar
desatender el estudio del hombre como organismo vivo y en las reconstrucciones de la historia que he descrito más
tratar muy superficialmente los importantes problemas de arriba corno pertenecientes a la etnología.
!a genética humana. Me gustaría ver el día en aue la bio- Por tanto, tal como yo la concibo, la materia de la an~
tropología se está dividiendo en tres disciplinas, distinguí-
logía humana se vea reconocida como materi~ indepen-
107
106
das bien por diferencias de método bien por el tema de
cuela de Vida y Lenguas Africanas inició hace algunos años
es!=Udio : la biología humana, que está, o debería estar, vin-
un curso de vacaciones sobre antropología y administración
culada con las ciencias biológicas; la arqueología prehistó-
y educación de los indígenas para los funcionarios y misio-
rica y la etnología, ql.:le corresponden a los estudios histó-
neros del gobierno, y creo que dichos cursos han seguido
ricos; y la sociología comparada, que mantiene relaciones
impartiéndose. En Sidney se ha realizado un experimento
con la sicología, por un lado, y, por otro, con la historia
más amplio desde 1927. Los cadetes seleccionados para la
y con las ciencias sociales, con la economía, con la juris-
prudencia, etc. administración del territorio bajo mandato son enviados al
territorio por un año o dos para que se familiaricen con
Todavia no he dicho nada del estudio de las lenguas. En
el tipo de vida y de trabajo que harán, para probar su ca~
las últimas décadas. hemos contemplado el desarrollo de
pacidad para él y para permitirles decidir finalmente ~1
una ciencia general de la lingüística que se ha ido ganan-
desean emprender esa carrera. Después, asisten a la uni-
do una posición propia. Creo que es muy de desear que la
versidad de Sidney durante un año académico de nueve
lingüística y la sociología comparada mantengan una co-
meses y dedican todo su-'tiempo allí a un curso especial de
nexión muy estrecha. No tengo tiempo en esta ocasión
capacitación. Se compone de dos cursos cortos de altime-
para examinar detalladamente las relaciones de esas dos
materias. tría y de higiene tropical, pero dedican la mayor parte
de su tiempo al estudio de la sociología comparada y de la
administración colonial. El resultado de esta disposición
será que dentro de algunos años todos los funcionarios
Al concluir esta conferencia, deseo volver a hablar de
administrativos del territorio tendrán un conocimiento co-
una cuestión que he citado brevemente al comienzo a sa-
rrecto de los principios y métodos de la sociología com-
ber, la enorme importancia del reciente desarrollo 'de lo
parada y, gracias a él, habrán adquirido un conocimiento
que podemos llamar antropología aplicada o· antropología
considerable de las instituciones y costumbres de Guinea
administrativa. Durante más de una década me he preocu-
y de su significado, y habrán hecho un estudio sistemático
pado ampliamente en mi propia actividad de este estudio
de los problemas y métodos administrativos. El territorio
en Mrica y en Oceanía. Si les parece que hablo d~gmática­
de Papuasia no ha aceptado el sistema de cadetes, pero una
mente en lo que les voy a decir, quiero pedirles que re-
serie de funcionarios con experiencia de la administra~
cuerden que en el tiempo de que dispongo solamente pue-
ción han dedicado sus vacaciones a asistir a cursos espe-
do exponerles mis conclusiones sin explicar las conside-
raciones en que se basan. ciales en Sidney.
De modo que se ha hecho algún progreso en la aplica-
Durante muchísimo tiempo, los antropólogos han estado
ción práctica de los estudios antropológicos. Todavia queda
manifestando la necesidad de utilizar su ciencia para las
mucho que se podria y debería hacer. En algunas de las co-
actividades prácticas del gobierno y la educación de los pue-
lonias británicas, como las del Pacífico occidental y la de
blos dependientes. Por lo que se refiere al Imperio britá-
Malasia británica, no existen ni antropólogos del gobierno
nico, el resultado ha sido que por fin se hayan tomado al-
ni preparación regular alguna en antropología para sus
gunas ~edidas prácticas. Se han nombrado antropólogos
funcionarios. Además, me parece que los cursos que ahora
del gobierno en dos de las colonias africanas, en Papuasia
están recibiendo los funcionarios que prestan sus: servicios
y en el territorio bajo mandato de Nueva Guinea. Ahora los
en Africa son inadecuados. Unas cuantas semanas dedica-
cadetes y funcionarios que prestan sus servicios en las co-
das a la antropología pueden ser mejor que nada, pero es
lonias africanas reciben breves cursos de preparación an-
evidente que no se pueden considerar suficientes. No hay
tropológica en Oxford y Cambridge. En Sudáfrica la Es-
duda de que una de las administraciones de indígenas más
108
109
. . , ue le aportara ayuda práctica algu-
dorada, no le parecla q di c·la las costumbres de una tri-
t r en su au en .
eficaces es la de las Indias orientales holandesas, y la na para tra a h bía interesado por los escntos
ficación para esos empleos requiere cinco años de estudios bu indígena. ~tro, que se ~ b firmemente convencido de
especiales, incluidos las lenguas, el derecho y las costum- · de Elliott Srrnth y Perry, es ala , no podía sede de utili-
di de la antropo og1a
bres indígenas. que un estu o d . t e's A un funcionario de una
, . esar e su 1n er ·
Una cuestión de cierta importancia es la del tipo de en- dad practica a P . ue fue enviado a propósito a
señanza antropológica que debería impartirse a los ad- · de las colonias ~~can:~~~icos para aconsejar sobre lo~
ministradores de los indígenas para que realicen sus ta- . uno de los domm~os . ¡· 1 QUntaron s1
, d d la administración coloma , e prec , .
reas de forma adecuada. Creo que de nada les serviría el meto os e . , en antropologia a qUie-
d una preparac10n . .
estudio de la antropología física o el de la clasificación de sería bue~o ar 1 final altos funcionarios de un distn-
las razas que corresponde a la antropología física o etno- nes lleganan a ser a , . 't"l o l·ncluso perJ"udicial, que un
· · ' ue sena m u 1
logía. Tampoco les serviría el estudio de la arqueología to. RespondlO q . "b"d d;cha preparación se ocu-
. d hubiera recl 1 o • 1
prehistórica. Además, los intentos de reconstruir la histo- magistra o que beza de un testigo y no de tes-
ria de las culturas y de los pueblos a los que he denomina- paría de la forma de la ca d ante el tribunal. Estos
. t iera prestan o
do etnología no son del más mínimo valor práctico para timomo que es uv , . del tipo de opiniones que se
las tareas de la administración o de la educación de los son ejemplos c~racte:t~cos mil veces. Para el hombre de
indígenas.· me han comumcado , y 1 studio de las calaveras .o de
Es evidente que la preparación que ayude a los fun- la calle la antropologi~ : e ed los especímenes etnológi-
cionarios coloniales a hablar la lengua o lenguas de los los instrumentos de pie a o etros museos o bien de las
· os en nues '
pueblos con los que tengan que tratar es de un gran valor cos que colecc1onam. d 1 t"guos egipcios alrededor
1 viaJeS e os an I
teorías so b re os
. .
práctico. En algunos de nuestras colonias se imparten ya d l y verdaderamente, Sl JUZga
cursos sobre ellas. del mundo en busca e per as. , teria las universidades
. t que dan a esa ma 1
Lo que el administrador o educador de pueblos depen- por el tratamien o . de antropología o por as
·¿ de las revistas .
dientes necesita sobre todo es un conocimiento detallado 0 por el contem o 1, . ésas son efectiva-
de la organización social, de las costumbres y creencias de actas de los congresos ~;ropo ~;l::~or parte de lo que
los indígenas y un entendimiento de sus significados y fun- mente las cosas que consü.uyen
ciones. Sólo pueden conseguirse mediante un estudio ge- se conoce con ese norr:bre. absoluto que esos estudios no
neral de la sociología comparada, seguido de un estudio No pre~ndo sugenr en . 'fi Lo único que estoy
d 'mico y e1ent1 co.
intensivo del pueblo particular en cuestión. sean de valor aca e 1
de va or pra LJ. , c....;co para las tareas

En muchas ocasiones he conocido a personas que par- diciendo es que carecen d los pueblos dependien-
e ucar a di
ticipan en el gobierno y la educación de los pueblos indí- prácticas de go b ernar Y d ·mentando durante ez
genas, las cuales han expresado la opinión de que, cual- tes. Por otro lado, he. esta o expen one de un curso
. t ra que se comp ,
quiera que sea el interés académico que ofrezca la antrO:. años con una asigna u 1 dominio de la sociologia
or entero e . al
pología, carece de valor práctico para las actividades que creneral que a b arca p ¿· ociolócrico funclOn
o .d de un es tu 10 s o~ ( 1
realizan. He descubierto que lo que dichas personas lla- comparada, segur o diantes se fueran a ocupar e
man antropología es la ser-le de estudios académicos que de la cultura de que los estu G . e~ v Melanesia en el
incluye la antropología física, la clasificación de las razas, Africa bantú en un caso, Nueva¿· umoma.p~rado de métodos
un estu 10 e ·
la reconstrucción etnológica de la historia, la arqueología otro) comp 1eta d o con . . , colonial v de edu-
' · , d 1 dmirustrac1on -
prehistórica y la antropología social, que elabora teorías v planes de acclOn e a a . d l luz de los re-
sobre los orígenes de las instituciones. Un magistrado se - . , de lo"' l·ndícrenas considera as a a
C::J.ClOn -' o
me quejó de que, aunque había leído íntegramente La rama . 111
...··, -. . •'·-~ .

. . , ue le aportara ayuda práctica algu-


dorada, no le parecla q di cl·a las costumbres de una tri-
t tar en su au en .
eficaces es la de las Indias orientales holandesas, y la · na para ra h b'a interesado por los escntos
. dí Otro que se a I "d d
fi.cación para esos empleos requiere cinco años de estudios bu m gena. . , t ba firmemente convencl o e
especiales, incluidos las lenguas, el derecho y las costum.:. de Elliott Srmth y Perry, es al 'a no podía serie de utili-
di de la antropo ogi . .
bres indígenas. que un estu o . t 's A un funcionano de una
, . esar de su m ere .
Una cuestión de cierta importancia es la del tipo de en- ·• dad practica _a P . ue fue enviado a propósito a
señanza antropológica que debería impartirse a los ad- de las colondias ~~can:~~~icos para aconsejar sobre lo~
ministradores de los indígenas para que realicen sus ta- .·· · uno de los ommJ.os ., . 1. 1 elnlntaron Sl
, d d la administracwn coloma , e pr ~=> , •
reas de forma adecuada. Creo que de nada les serviría el · meto os e . , en antropolog¡a a quie-
, b d una preparacwn . .
estudio de la antropología física o el de la clasificación de • sena uer:o ar 1 final altos funcionarios de un distn-
las razas que corresponde a la antropología física o etno- ·· nes lleganan a ser a , . 'ti"l o incluso perjudicial, que un
dió que sena mu .,
logía. Tampoco les serviría el estudio de la arqueología to. R espon . "b"d d;cha preparacwn se ocu-
. d hubiera reci I o •
prehistórica. Además, los intentos de reconstruir la histo- ·. rnagistra o que . b de un testigo y no del tes-
ria de las culturas y de los pueblos a los que he denomina- · paría de la forma ~e la ca ezad ante el tribunal. Estos
. estuviera prestan o
do etnología no son del más mínimo valor práctico para tirnomo que , . del tipo de opiniones que se
las tareas de la administración o de la educación de los son ejemplos c~racte:~cos mil veces. Para el hombre de
indígenas.· me han comumcado , y 1 estudio de las calaveras .o de
Es evidente que la preparación que ayude a los fun- la calle la antropolog¡~ :. e . d los especímenes etnológi-
cionarios coloniales a hablar la lengua o lenguas de los los instrument~s de pie a n:es~ros museos, o bien de las
pueblos con los que tengan que tratar es de un gran valor cos que colecciona~~s e;e los antiguos egipcios alrededor
práctico. En algunos de nuestras colonias se imparten ya teorías sobre los viaJ~S 1 y verdaderamente, si juzga
cursos sobre ellas. del mundo en busca e per as. , ten·a las universidades
. ue dan a esa ma
Lo que el administrador o educador de pueblos depen- Por el tratam1ento q .
. d d las revistas e an
d tropolouía 0 por las
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dientes necesita sobre todo es un conocimiento detallado o por el contem o e 1, . cos ésas son efectiva-
de la organización social, de las costumbres y creencias de actas de los congresos ar:tropo ~gl ma~or parte de lo que
los indígenas y un entendimiento de sus significados y fun- mente las cosas que constituyen a
ciones. Sólo pueden conseguirse mediante un estudio ge- se conoce con ese norr:bre. absoluto que esos estudios no
neral de la sociología comparada, seguido de un estudio No pre~ndo suger~r en . 'fi Lo único que estoy
d 'micO y cienti co.
intensivo del pueblo particular en cuestión. sean de valor aca e al ráctico para las tareas
En muchas ocasiones he conocido a personas que par- diciendo es que carecen ded v or plos pueblos dependien-
b r y e ucar a .
ticipan en el gobierno y la educación de los pueblos indí~ prácticas de go erna d x erimentando durante diez .
genas, las cuales han expresado la opinión de que, cual- tes. Por otro lado, he, esta o e. p mpone de un curso
. tura que se co ,
quiera que sea el interés académico que ofrezca la antr~ años con una aslgna 1 d minio de la sociolog¡a
ca por entero e 0 · al
pología, carece de valor práctico para las actividades qué general que ab ar d" sociolócrico funcwn
"d de un estu IO ~=>-
. tes se fueran a ocupar e1
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realizan. He descubierto que lo que dichas personas lla- comparada, segm o
man antropología es la serie de estudios académicos que de la cultura de que los estudian G . ea y Melanesia en el
incluye la antropología física, la clasificación de las razas, Africa bantú en un caso, Nueva¿· umomparado de métodos
n un estu 10 e d
la reconstrucción etnológica de la historia, la arqueología otro) comp1etad o co . . . , colonial y de e u-
, . , d 1 drmrustracion
prehistórica y la antropología social, que elabora teorías v planes de accwn e a a . d la luz de los re- ·
sobre los orígenes de las instituciones. Un magistrado se ~ación de los indígenas considera as a
me quejó de que, aunque había leído íntegramente La rama 111
sultados de la sociología comparada He . ·
perfectamente que dicho cur d · pod1do comprobar continúe y amplíe. Pero para esa labor todavía tenemos que
menos de un año se adapta ps:rf· esarrollado durante no depender de contribuciones económicas ocasionales, la ma-
'
d es d e los estudiantes · ectamente a 1 .d 1
y aporta f . as neces¡ a- yoría de las cuales proceden de Estados Unidos. A veces
, e ectivamente lo h
a fi rma d o que 1a antropología d b'
1
que se a me siento avergonzado de que el gran Imperio británico

m
base científica para el control e Ida ap~~tar, a saber, una
· d'1genas. Y e ucacwn do~ lo s pue bl os
tenga que mendigar en América los pocos centenares de
libras con que llevar a cabo una pequeña parte de esa la-
~
En este Imperio nuestro en 1 bor, cuya realización es deber primordial del Imperio, si
cargo del control de tantos' p bel q~e ~os hemos hecho quiere gobernar los pueblos dependientes con justicia basa- 11
· Oceanía y América me ue os · rndigena
As1a, . s d e Afnca, ·
da en el conocimiento y la comprensión. !¡'1
, parece que se . i¡
gentemente dos cosas para e r necesitan ur- Me cuesta trabajo entender cómo puede ser que el es- ¡¡
los deberes que hemos asumid:~ir~~ocomo de~emos, con tudio de los pueblos· indígenas de cultura más sencilla re- "¡!
il

gunos de dichos pueblos y he s extennmado a al- ciba tan poca ayuda. Parece haber poca dificultad para re- !
d d mas causado y est
san o, años irreparables a otr N , amos cau- caudar cada año enormes sumas de dinero con destino a f
os. uestras in1· t. · 1
son muchas, son en gran med'd us ICias, que las investigaciones arqueológicas. Y, sin embargo, no exis- ¡
rancia. Por tanto, una cosa I a consecu_encia de la igno- te tanta urgencia de éstas corrio del estudio inmediato de
. . . que se necesita ur t
es d ISpüSIClODes referentes al t ¿· . gen emente las culturas vivas que la invasión del hombre blanco está
es u 10 s·1 t , · d
blos indígenas del Imper1-0 H _ s emat1co e los pue- destruyendo. Por interesantes que sean las culturas muer-
. e sena1ado la ·¿
material de valor inestimable 1 rap1 ez con que tas, lo único que estudiamos es sus restos inertes. Pode-
la humanidad está desaparecie pdara e lestudio científico de mos aprender muy poco sobre sus pensamientos "f senti-
di1i cacwn ·, n o por a destruc ·'
de culturas atrasad D d cwn o mo- mientos, sobre su derecho, costumbres, religión o mitolo-
. . d as. es e el punto d .
practico e la administrad , 1 . e VIsta gía, cosas sobre las que sí podemos obtener información
on co omal antes d
pue d a dar una fundamenta . , ' e que se en el caso de los indígenas de Africa o Nueva Guinea. En
., cwn correcta a la d . .
c1on y a la educación se r . a mimstra- una época, no muy lejana, en que habría sido posible ob-
equiere un cono . .
p 1eto y sistemático de las e lt . , Cimiento com- servar a un pueblo como el de los aborígenes australianos
.· u uras mdigenas La - .
cwn de este tipo se ha d
.

esaten Ido dur t d
~ .. . Investiga-
.
o el de los bosquimanos fabricando y usando instrumentos
flempo. Naturalmente sólo d an e emasrado de piedra de tipo paleolítico, los prehistoriadores estaban
' pue en realizarla fi
expertos preparados. Pero a e cazmente empleando su tiempo en especular sobre el posible uso que
, un en e1 caso de d
encontrar estudiantes entusiastas que po amos habrían hecho de dichos instrumentos muy semejantes los
esa tarea difícil y no remun d que se hagan cargo de hombres del musteriense o del auriñaciense.
posiciones referentes a la inveesrt~ a,. ~arecemos de las dis- Otra necesidad urgente en la actualidad me parece ser
.
existen para otras ciencia N Igacwn del . tipo d e 1as que la formulación de otras disposiciones relativas a la aplica-
hecho algo, muy poco verd:der:::.:tras un~versidades han ción del conocimiento antropológico a los problemas del
la magnitud de la labor pero t nte, temendo en cuenta gobierno y de la educación de los pueblos indígenas. No
tras universidades britan: r· emo que la mayoría de nues- creo que pueda haber quien sostenga que las disposiciones
cas no vavan . t
mente y activamente por t ~ a rn eresarse real- actuales sean adecuadas en lo más mínimo .
. d es a matena hast
sra o tarde para realizar la t a que sea dema- Ultimamente se ha hablado de la creación de un Ins-
I . s areas que aho
nstltuto Intemacional deL ra esperan. El tituto de Estudios Coloniales, que al mismo tiempo sería
preparándose para empren~:;~~ y Culturas Afric_anas está un centro para la investigación y para poner a disposición
ción de cinco años d , ., programa de InVestiga- de los encargados de las tareas administrativas los resul-
e auracon en A.f ·
, . nca, que espero se tados de dicha investigación. No puedo hacer otra cosa que
1 12
113
. expresar mi esperanza de
sea posible llevar a cab que dentro de no muchos
Mientras tanto 0 un pian de ese tipo. ·
. , a pesar de re t"d .
szones, la antropología ha canse p~ 1 os reveses y desilu-
puesto en el ·mundo de 1 guzdo por fin ganarse un· SIGNIFICADO· Y ALCANCE
· · os asuntos p , · . DE lA ANTROPOLOGIA SOCIAL 1
noczmzento como estudi ractzcos, .czerto reca- .
... , • 0 que puede h 1
ne~ mas valiosas a los probl acer as contribucio-
1os más importantes con qu:~:: q~e van a figurar entre ..
tarse, los que han surgid d 1 e Siglo tiene que enfren .
ras diferentes en todo elo e da mezcla de pueblos y cultu~ .
d 1 mun o La . . , .
e os siglos posten·ore 1 . . mzszon del siglo XX y .
d1 s es a de . ,
e mundo en alguna esp . d unzr a todos los pueblos ·.
E ecze e com "d d .
orma completamente natural la u~~ a o:z;denada. De .
en las relaciones de las ; , .atencron se ha centrado . El nombre de «antropología social» empezó a usarse
t 1· nac . .ones grand p
e os problemas de es. ero posibleme · hace unos sesenta años para distinguir esa materia de la
d 1 encontrar un 1 n-
e a comunidad mundial ara 1 u!5ar apropiado dentro .·•· etnología. Su objetivo declarado ha sido siempre aplicar
Oceanía sean d . P as tnbus de Mrica A . . el inétodo inductivo de las ciencias naturales al estudio
di e Importancia no . , Sia y ·
cha misión con éxito. menos vital para cumplir .·. de la sociedad humana, a sus instituciones y a su· evolu-
ción. Pero sólo gradualmente podemos aprender a aplicar
el método inductivo en un dominio nuevo. La historia de
. la química desde la época de Bacon hasta Lavoisier cons-
tituye un ejemplo de ello. De igual forma, la antropología
social en la actualidad no es lo que era en 1890. En aquella
época, las discusiones teóricas de la antropología social se
ocupaban sobre todo de especulaciones sobre los orígenes
(de la religión, del totemismo, de la exogamia, etc.). Toda-
vía existen algunos antropólogos sociales que siguen fieles
a las ideas y métodos de 1890. Pero los trabajos que ahora
se· están haciendo eri este terreno consisten, en gran medida,
en estudios experimentales -que combinan la observación
y el análisis- de sistemas sociales particulares, destinados
a proporcionar material para la comparación sistemática
de sistemas de tipos diferentes y para poner a prueba las
concepciones hipotéticas. Quien quiera conocer las activi-
dades actuales de la antropología social debe leer la admi-
rable obra de Arensberg y K.imball sobre Family and Com-
munity in I reland. ·
Uno de los departamentos de antropología organizados
de forma más completa es el de la Universidad de Chicago.
La materia está dividida en cinco dominios : antropología
114 l. Nature, CLIV, n.• 3.904 (26 de agosto de 1944), 257-60.

115
. expresar mi esoeranza d
sea posible lle;ar a cab~ que 1entro de no muchos
Mientras tanto un pan de ese tipo.
. , a pesar de repet"d
SIOnes, la antropologí~ h 1 os reveses
P ues t o en el mundo ~ da 1a conseguido p or fi n ganarse u . SIGNIFICADO- Y ALCANCE
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nacimiento como estud· practicas, cierto reco
• 10 que puede h 1 ·
nes mas valiosas a los probl acer as contribucio-
los más importantes con qu:ma; q~e van a figurar entre
tarse, los que han surgido d 1 es e Siglo tiene que enfren-
ras diferentes en todo el e da mezcla de pueblos y cultu-
d 1 mun o La ...
e os siglos posteriores es la d . . misiOn del siglo XX y
del mundo en alguna espe . d e unrr a todos los pueblos
fonna completamente natu~:l
en las relaciones de las
1:
. '
comuz:.~dad ordenada. De
atencion se ha centrado El nombre de «antropología social» empezó a usarse
te los problemas de naciones grandes. Pero posibleme hace unos sesenta años para distinguir esa materia de la
d encontrar un 1 n-
e la :omunidad mundial ara 1 u~ar apropiado dentro etnología. Su objetivo declarado ha sido siempre aplicar
Ocean1a sean de . P as tnbus de Mrica A . el método inductivo de las ciencias naturales al estudio
di Importancia . , Sia y
cha misión con éxito. no menos vital para cumplir de la sociedad humana, a sus instituciones y a su· evolu-
ción. Pero sólo gradualmente podemos aprender a aplicar
el método inductivo en un dominio nuevo. La historia de
.la química desde la época de Bacon hasta Lavoisier cons-
tituye un ejemplo de ello. De igual forma, la antropología
social en la actualidad no es lo que era en 1890. En aquella
época, las discusiones teóricas de la antropología social se
ocupaban sobre todo de especulaciones sobre los orígenes
(de la religión, del totemismo, de la exogamia, etc.). Toda-
vía existen algunos antropólogos sociales que siguen fieles
a las ideas y métodos de 1890. Pero los trabajos que ahora
se· están haciendo en este terreno consisten, en gran medida,
en estudios experimentales -que combinan la observación
y el análisis- de sistemas sociales particulares, destinados
a proporcionar material para la comparación sistemática
de sistemas de tipos diferentes y para poner a prueba las
concepciones hipotéticas. Quien quiera conocer las activi-
dades actuales de la antropología social debe leer la admi-
rable obra de Arensberg y Kimball sobre Family and Com-
munity in I reland. .
Uno de los departamentos de antropología organizados
de forma más completa es el de la Universidad de Chicago.
La materia está dividida en cinco dominios : antropología
114 l. Narure, CLIV, n.o 3.904 (26 de agosto de 1944), 257-60.

115
física, arqueología, etnolo 'a r .. , . .
cial. A los estudiantes qugJ.e h' IndgUistica y antropología .. descripción de los movimientos y evoluciones de las razas
, an e tener l r· . . desde la primera aparición del hombre. Otro, que ignore
en letras antes de entrar e 1d ya a Icenciatura.
dedicar un período de ostu~· e epi arta~ento, se les exige. la ciencia lingüística, afirmará que existe una conexión en-
"' IOs a os Cinco temas tre dos lenguas muy alejadas basándose en las semejanzas
un examen exhaustivo complet b y pasar
Después de lo cual el estudian~e :~ :: ca~a. uno de ellos. de unas cuantas palabras seleccionadas de vocabularios
los campos para el doctorado. Un estur:~;;I~a -~n uno de
imperfectos. O bien otro, que por su desconocimiento de
de acabar esos estudios en cuatro - n ante pue- la antropología social, ignore la naturaleza de institucio-
dan más. anos, pero muchos tar- nes como el totemismo o las mitades exógamas, afirmará
que los egipcios, que iban en busca dé oro,, perlas o con-
Podemos considerar esa combinació d
el punto de vista de cada uno d ll n e temas desde chas de cipreas, fueron los introductores de dichas institu-
antropología física propiamente di~hea ods.fy por turno. La ciones por todo el mundo.
1og¡a· h umana, es el estudio de la • 1 eren te de la b ·
. . lO-
La arqueología prehistórica es en realidad una varie-
humana (los ho . "d ) s vanacwnes en la familia dad de la etnología (la paleoetnología), el estudio de los
mim os Y de la evol · · h pueblos del pásado prehistórico, que sólo conocemos por
tanto, abarca no sólo el estudi d l ucw? umana. Por
tes del horno sapiew sino t o_. e as vanedades existen- sus restos: los lugares donde vivían, sus huesos, los ins-
na y la de los pnm. . ~t, U ambre_n la paleontología huma- trumentos que fabricaban y usaban. Como el arqueólogo
a es. n estudiante d -no recupera vestigios de las lenguas o de las instituciones
a ser un especialista com t que preten a llegar
de adquirir primero pbe ente en antropología física ha sociales de dichos pueblos desaparecidos, no necesita para
una ase complet d b · 1 • realizar los estudios de su especialidad conocimiento algu-
fología comparada (especialmente de 1 a e. 10 ogia, mor-
mía humana histología b . 1 . os pnmates), anata- no de la lingüística o de la antropología social. Por otro
deseable que' tenga algu' em no og¡a Y fisiología. Parece lado, tiene que saber algo de geología y de agrimensura.
nos conocimientos de I Parece que lo más conveniente es que la etnología y la ar-
y etnología. La lingüística o la ant'"o 1 . _arqueo ogía
de ninguna utilid d • po ogia socral no serán queología sigan manteniendo relaciones estrechas. Son sim-
L , a para su especialidad. ples ramas de un único estudio.
a etnolog¡a, como indica la 1b . .
los «pueblos>>. Los puebl 1 pa a ra, es el estudio de La lingüística, el estudio sistemático del lenguaje en ge-
os o os grup 't · neral, diferente del estudio de las lenguas .o grupos de
se parecen mutuamente ' l . os e meas, difieren y
por e caracter ra . 1 1 1 lenguas particulares, se considera en Estados Unidos como
Y la cultura. El etnólogo Cia • por a engua .
fun cwn ·· compara Y clasifica los bl uno de los campos de la antropología. En Inglaterra, esa
de sus semejanza dif . pue os en
tudi . · s Y erenc1as de mod
a e1asrficaciones raciales lin .. . . ' o que es- disciplina como tal "no ha recibido todavía el reconocimien-
más, intenta descubrir dif guistrcas y culturales. Acle- to, excepto en la Escuela de Estudios Orie11-tales [y Africa-
las migraciones influenpci?r . erentes métodos algo sobre nos] de Londres. Un estudiante que desee especializarse en
' as mutuas y e 1 · · lingüística no necesita realmente saber sobre antropología
pueblos en el pasado. vo ucwnes de los
Es evidente que el etnólo . física o arqueología prehistórica más de lo que debe co-
un conocimiento so'I"d d 1 go competente debería poseer nocer una persona culta. Pero existen conexiones impor-
... . I o e a antropol . fí . tantes de la lingüística con la etnología y la antropología
gu1strca y de la. antropolo . . og¡a s1ca, de la lin-
. g¡a socrai La lit tu . . social. Por ejemplo, el problema etnológico del pueblo ario
ca esta tremendamente sob d. era ra etnologr-
ticas. Un autor que pued r~c~ga a de especulaciones acrí- es un problema lingüístico además de arqueológico, un
falia y dolicocefalia a . a ar con soltura de braquice- problema racial y cultural.
.. , pero Ignore complet
l
p eJrdades de la estru t d 1 . amente 1as corn- Por último, llegamos a la antropología social, el estudio
c.ura e craneo, nos ofrecerá una teórico general de las instituciones sociales: derecho, re-
116
117
. 1

ligión, organización política y económica, etc. Dentro de


propio terreno de estudio, el antropólogo social no economizaría trabajo si un investig~dor de campo pudie-
sita para nada la antropología física. Si alguna vez ra proporcionai· el material necesitado al mismo tiempo
por el etnólogo y por el antropólo~o social. En algunos te-
a demostrarse que los caracteres raciales (es decir, los he.
rrenos de estudio se ha hecho as1. Pero, en el caso de la
redadas biológicamente) influyen en las instituciones socia- .••
antropología social, un trabajo de campo requiere algo más
les o en su desarrollo, en ese caso tomaría nota oportuna-··.
mente de ese hecho. · que una descripción; requiere aná:isis teóric~. Existen innu-
merables ejemplos de monografías etnográficas que son
Evidentemente, la arqueología prehistórica no hace con-
admirables para los fines de la etnología, pero extraordi-
tribución alguna a ramas de la antropología social como
nariamente insatisfactorias para el antropólogo social que
la religión comparada, el estudio comparado del derecho 0
del parentesc~ o de los sistemas económicos. Ni siquiera
deseara usar los datos.
Los estudios de cirnpo etnográficos se limitan general-
aporta demasiada ayuda para el estudio de la tecnología .·
mente a los pueblos sin alfabeto. En los diez últimos años,
comparada, tal como se practica en la antropología social, •
que lo que pretende es determinar las influencias mutuas · antropólogos sociales han realizado estudios de :a~p~ e~
entre el sistema de las técnicas y las demás partes del sis~ · . una ciudad dé Massachussets, en una ciudad de Missrss1pp1,
en una comunidad canadiense francesa, en Country Ciare,
tema social total. Indudablemente, un antropólogo social
Irlanda, en pueblos de Japón y de China. Semejantes estu-
debería conoce: los resultados de la arqueología prehistóri-:-
ca, pero los metodos del arqueólogo y los detalles de la · _ dios de comunidades de países «civilizados)}, realizados por
v~stigación no le interesan en cuanto que antropólogo : investigadores preparados, van a desempeñar un papel cada
c1al. vez más importante en la antropología social del futur~:
Ahora podemos ver que lo que mantiene unidas a las
Existe una gran confusión sobre la relación existente
entre la antropología social y la etnología. Hasta cierto pun- diferentes ramas de la antropología es la posición central
to, pero sólo hasta cierto punto, tratan de los mismos he- de la etnología (con la arqueología) como estudio geo~á­
chos. Pero los tratan de formas completamente diferentes. fico, histórico y clasificatorio de las razas y de los puebws,
Un problema típico de la etnología es el de cómo y cuándo del pasado y del presente. Por esa razón es por 1~ que a
~n~~aron en _el continente americano los antepasados de los veces se considera a la etnología y a la antropologia como
una sola y misma disciplina. Resulta interesante que el
maws amencanos y cómo desarrollaron las· diferencias de
carácter racial, de lengua y de cultura que presentaban, simposio (como ahora suele llamárselo) sobre el futuro de
cu~ndo los europeos entraron en contacto con ellos por la antropología en.la reunión del centenario del Royal An-
pnmera vez. Un problema típico de la antropología social thropological Institute incluyera discusiones sobre antr?-
pología física, arqueología, antropología social y el_ estudro
es: «¿Cuál, es la na_turaleza del derecho?)}.: Un etnólogo y . •
u~ antropologo SOCial podrían estudiar ambos Ia misma de la cultura m·aterial. No hubo nadie que hablara del fu-
~n~u, pero_ el uno b).lscaría hechos pertinentes para su ob- turo de la etnología. La etnología recibe contribuciones de

Jetivo de Situar a la tribu dentro de su cuadro general de Ia antropología física y de la lingüística, pero les, da m~y
los pueblos del continente; el otro examinaría la forma poco a cambio. En la actualidad, la antropologia soCial
com~ _trata la tribu las infracciones a la costumbre en su como estudio de la evolución goza de mala prensa entre
relacwn con una teoría general de la naturaleza y la fun- los etnólogos, de modo que ni reciben de ella ni le aportan
cwn del derecho. - muchas contribuciones.
;~ Puesto_ que_ tanto_ la _etnología como la antrop.ología so- Pero, ¿qué decir de las relaciones de las ramas de la
c,d necesitan mvestrgacwnes de campo, es evidente que se antropología con disciplinas que quedan fuera del campo
de la a.TJ.tropología? La antropología fisica guarda la rela-
118
119
ción más estrecha con las CI·encras . b'10I' · ·
tendencia a intentar ab b 1 OgJ.cas. Existe una
sor er a dentro d d ese material es usarlo para formular sus hipótesis gene-
amplio de la biología hu e un estu io más
ría también lo que se ua:anba: lqu~ probablemente inclui- rales sobre' !!1 derecho, la religión, la organización econó-
1as 1enguas bantúes · 0 de 1a lo ogia social · El estu d"10 de mica, etc. Pero dichas hipótesis deben verificarse; y, aun-
as 1enQUas de lo . d. que se puede hacer cierta verificación mediante la com-
canos queda reservado al a t ~l s m ws amen-
de las lenguas indoeuropeas ny rop~ ~go, pero no el estudio paración de las diferentes sociedades históricas, la prueba
semlticas · Cóm ( final depende de la observación (experimental) efectiva de
trazar una linde entre la arqueolo , . (. . ~. y por qué)
queología de los tiempos h¡'st , . gi?a prehlstonca y la ar- los sistemas sociales existentes.
. h 1'
drc ancas. Pero s· Los sistemas políticos, económicos y jurídicos se estu-
a mde, la arqueoloo-ía 1 ' 1 no se traza
, ,.
1OgJ.a, o una parte ·de ella en aza con la histo . L dian en la antropología social y también en la economía,
. na. a etno-
., , se considera como bd" la ciencia política y la jurisprudenda. Pero existen dife-
s1on de la geografía . la t una su 1vi-
.
d e situar, . e nogeografía ·Y d, d h rencias de método muy importantes. Una de ellas, aunque
en la actualidad 1 . (. on e emos
humana, en la antropol . , a antropogeografía o geografía no la más importante, es la de que los tres estudios citados
bas? ogia o en la geografía, o bien en am- suelen ocuparse exclusivamente de determinados tipos de
sociedad, mientras que el campo de la antropología social
La etnología trata de la histo . . .
r~sto
de la historia queda exclu :~a de los pueblos. Pero el lo constituyen todas bs sociedades humanas, razón por la
sm embargo, la conexión más 1 a de la antropología. Y, cual tiende a prestar la mayor atención a las que las cien-
es con la historia de 1 . . ~trecha de la antropología cias sociales no estudian. Es cierto que en la actualidad no
hi storia de la religión as mstitucwnes · hi t · existe conexión entre las tres ciencias sociales y la antro-
d 1d h · s ona económica,
. . , e erec o' de la or . . ., , pología social, pero hay razones para esperar que se desa-
t1ca, de Ia Ciencia et p garnzacwn poli-
historia de Europ~ 0 ~el er~ ~ar~ el antropólogo social la rrolle a medida que esta última vaya progresando.
cnst1amsmo no es , . Como actualmente la antropología está reconocida, la
te que la historia de India 0 d . mas mteresan-
o del budismo. e China, 0 que la del Islam sicología queda fuera de su campo. Y, sin embargo, la an-
tropología social guarda una relación muy estrecha con la
El autor del artículo sobre Th sicología. Para mostrar claramente dicha relación es nece-
logy» (véase Nature 20 d ." e Future of Anthropo-
que examinó la disc~sión : ~ovz_embre de 1943, pág. 587), sario distinguir dos tipos de sicología. Aquí atribuimos al
centenario del Royal A h os emd~ durante la reunión del término sicología el significado de estudio de los sistemas
nt ropologzcal Jnst"t mentales ~ síquicos -los sistemas de comportamiento, si
"¿ Q uién va a estudiar la hi t . t ute, pregunta:
tituciones sociales a e 1 s ona _Y la evolución de las ins- se prefiere- de los organismos. Podemos estudiar el com-
. sea a mund¡aJ?:o La portamiento, las manifestaciones síquicas externas de las
pnmer lugar los histo . d . . respuesta es : en
' na ores El ant '1 lombrices, de las ratas o de los chimpancés. La sicología
puede examinar personal ·1 ropo ogo social no
1 hi mente as fuentes · · · humana general trata de las características mentales que
a storia económica polít" ong1nanas de
. , lea 1egal y r . poseen los seres humanos. La antropología social trata de
trguas Grecia y Rom I d" ' . re 1g1osa de Ias an-
, a, n la, China R · p . las características de todos los sistemas sociales humanos.
qUia. No es frecuente ' liSia, ersia y Tur-
siquiera de esos cam que Etel nga competencia total en uno Un sistema social se compone de una serie de relaciones so-
Pos. antropóio · 1
tomar la mayoría de
·,
i d
os atas sobre la h" t .
go socia tiene que ciales entre ciertos seres humanos, observadas en sus in-
fluencias recíprocas. Es evidente que un factor determi-
cwn institucionales del hi t . d IS ona Y la evo1u-
t
e. t"Iene que juzrrar p s lona or' aunq ue, natura1men- nante en la formación de los sistemas sociales humanos es
. 1 " ersona mente si h" . . esa naturaleza humana básica, de cuyo estudio se ocupa el
trcu ar es digno de cr 'd't L un Istonaaor par-
e l o. o que el' an t ropo'I ogo hace con sicólogo general. De forma semejante, la naturaleza de los
120 organismos multicelulares está dete~inada por la natura-

121
- . .
~

leza de la célula viva de cuyo estudi 1 ..


1 1 . ' o se ocupan e crtó- El profesor F. C. Bartlett (N a.ture, 18 de diciembre de
ogo Y os especralistas en bioquímica y b. fí . L
nex · ' 1 IO srca. a co- 1943, pág. 700) propone cambios drásticos. En su opinión,
lOn entre a antropología social y la sicolocrí 1 no hay que -reservar lugar alguno en la antropología para
tan estrecha y de ti 0 ta . o•a genera es
la fisiología animal ; la cnr.toplaore~rdo como la relación entre la arqueología, la lingüística (el estudio general del len-
. ~ gra. guaje), la etnología (el estudio geográfico e histórico de
Exrsten también lo que podríamos II
más adecuada, «sicologías especiales» Ear;ar ~ de la forma las razas y los pueblos) o la antropología social (ni como
las características universales de los . s a_s ratan, no de estudio comparado de las formas de asociación observa-
naturaleza humana básica . d seres humanos, de la das entre los seres humanos ni como estudio de la evolu-
ciales mentales 0 d ' smo e. las· carae t enstrcas
' · espe- ción social). Debería conservarse la aptropología física o
. ' e comportamrento de 1 · di "d antropometría, en caso de que abandonara su objetivo ac-
tipos, clases O arupos U . 1 d ' OS ln VI UOS,
o
1a siquiatría· otro . n eJemp o e <<sicolo , . 1 tual de estudiar la evolución, variación y herencia en la
1 . g1a especra » es
' , os mtentos de d fin· · . , familia humana y se dedicara a delimitar los caracteres fí-
cos»: extrovertido ¡"ntro "d e rr «tipos srco.logi-
, vert1 o· esq · f , ·
co; pícnico, asténico. , UIZo reruco, ciclotími- sicos que están en correlación con las diferencias de com-
Una de las «sicología" · portamiento. También admitiría el estudio de la cultura
d 1 , . ~ especra1es>> consiste en el e tud. material, siempre que se limitara al estudio de las aplica-
e as caractenstrcas síquicas ( d . s lO
mentales o de comport . e)s ecrr, las características ciones del conocimiento natural y de su influencia en el
amrento de los · b d comportamiento. Añade otras dos disciplinas. Una es el es-
grupo social defi "d mrem ros e un
m o, ya se trate de u "d tudio de los efectos de las condiciones ambientales genera-
o de una clase social defi .d d na comum ad local
local. Cuando estudiamos 7~ :si entr~ de unq. comunidad les sobre el comportamiento. La otra es el estudio del "Pa-
de los alemanes o de l cologxa» de los franceses, trimonio sicológico de un grupo, sus tradiciones, creencias,
os norteamerican d" costumbres, ideales y sus repercusiones sobre la conducta
características de 1 os, estu ramos las
a mente o del com . social». Para el profesor Bartlett, la antropología debería
sultan del «condicio . portamrento que re-
namrento» producid convertirse en un grupo de sicologías especiales que estu-
social particular.. En est 1 o por. un sistema
e caso as caract ' t" diaran los efectos sobre el comportamiento de los caracte-
que nos interesan están det ' . d ens rcas especiales
· ennrna as por el s · t res anatómicos, el medio ambiente, el conocimiento y el
mrentras que el sistema . 1 , rs ema social,
sacra esta dete . d «patrimonio sicológico» de los grupos. No' obstante, los
por las características general b, . nnma o, a su vez,
humana. es asrcas de la naturaleza antropólogos no deben temer que se vayan a poner en prác-
Debería resultar evidente tica en un fututo próximo las drásticas reformas del pro-
cial y la sicología hav una e que. ~ntre la antropología so- fesor Bartlett. Entretanto, la «sicología especial)> que se
sociedades humanas • onexwn de doble sentido. Las ocupa de la forma como el comportamiento de los indivi-
son 1o que son p l duos se ve determinado por la «cultura>> de la sociedad
manos son lo que son D f .orque os seres hu-
mano es lo que es po. e 1orma semeJante, un cuerpo hu- .en que viven, forma ya parte ·de la antropología social. Pero
roue as células · decir que debería ser su finalidad exclusiva equivale a negar
Pero la razón de qu l. vrvas son lo que son.
e os seres huma . a la antropología soci~l el derecho a estudiar la naturaleza
una sociedad particular p nos pertenecrentes a
res en ten detenn. d de los sistemas sociales y de su evolución, estudio que
comportamiento c~racte , t. ma os modos de
. . a. ns reos es la de h .
«con d!Clonados» -asr' 1 d . que se an vrsto constituye su raison d'étre precisamente.
De f orma semeJ·ante 1se sue '1 I
e ecrr- d" h .
por rc a socredad. La antropología social aplicada no tiene más de veinte
, as ce u as de un , 1 años de existencia. Se desarrolló en Sudáfrica, Inglaterra y
reaccionan del modo J muscu o actúan v
. d" como .cO hac"'n -
m lviduales de dicho , . · ~ porque son miembros Australia en relación con los problemas de la administra-
muscuio. ción colonial. Hace unos doce años , consiguió afianzarse en
~

177
y con la economía, con la ciencia política y con la juris-
Estados Unidos a pesar de la oposición de algunos etnólo-- prudencia. N~turalmente, ninguna_ antropología social_ de-
gos, no sólo en el departamento de asuntos indios sino bería desatender~la historia de la cultura en el sentido de
t~~bién en e~ de p:otección del suelo, y en una inv~stiga­ historia del arte, de la música, de la literatura, ni tampoco
cron de eficacia reahzada en una gran fábrica y dirigida por la historia tecnológic;;¡.. En la preparación de un antropólo-
el profesor Elton Mayo de Harvard. Desde que Estados go social el primer requisito esencial es una comprensión
Unidos entró e~ la guerra, han convocado a Washington a auténtica del método experimental en la investigación cien-
muchos antropologos pa_ra realizar actividades que son, 0 tífica, y la mejor fonna de adquirirla es un estudio com-
se su~one que son, propias de la antropología aplicada. pleto de la historia de la ciencia.
Exrsten muchos malentendidos con respecto a la antro- Una parte de la antropología social es el estudio com-
pología social aplicada, a lo que es, a lo que puede hacer parado de los siste:mas económicos. Indudableme~te, de-
y a lo que no _puede hacer, pero es evidente que aquí no bería haber una conexión estrecha entre este estudio y la
podemos exammar esa cuestión. El reconocimiento de la economía y la historia económica. Otra parte de la antro-
antropología social aplicada presenta ciertas ventajas con- pología social es el estudio comparado de los sistemas le-
cretas y ciertos inconvenientes igualmente concretos. Di- gales, que exige una conexión semejante con la jurispruden-
ga~os, p~r cit~r. sólo uno de estos últimos, que la antropo- cia y con la historia del derecho; y lo mismo podríamos
logia
L ·social. teonca está todavía en la etapa de fo rmacron.
·' decir de otras partes de la antropología social. Pero, ¿qué
a exigencia de que los antropólogos sociales dedicaran de- parte de la antropología social podría tener una conexión
mas_i~do. de :u tiempo disponible a problemas prácticos re- estrecha semejante con el estudio de las diferencias somá-
duc¡na m~vltablemente la cantidad de actividad que se ticas presentadas por las diferentes razas de la humanidad,
p:rede dedrcar al desarrollo del aspecto teórico de la cien- o con el estudio de la duración y las afinidades de la cul-
cia. Pe_ro, sin una sólida base teórica, la antropología apli- tura solutrense o de la capsiense? Mientras la etnología
c~da . tiene . que degenerar por fuerza y convertirse, no en siga existiendo, constituirá un terreno de encuentro para
ciencia _aphc~da, sino en mera práctica empírica. los arqueólogos, los especialistas de la antropología física,
¿Que decir del futuro? La antropología social ha de los estudiosos de la lingüística y los antropólogos sociales.
r~clamar una posición de relativa independencia. (Ya hay Durante un siglo, el Royal Anthropological Institute ha pro-
catedras de antropología social en Oxford y Camb ·d ) porcionado un terreno de encuentro de ese estilo y seguirá
E . "fi d n ge.
_so no srgm ca que eba cortar su relación con la etnolo- proporcionándolo en el futuro. Cualquier intento de im-
gra, con la que siempre ha estado asociada: y sus conexio- poner una unidad 9-rtificial más rígida producirá probable-
nes con_ la etn~lo~í~ la conectan indirectamente con la ar" mente el resultado exactamente opuesto al que pretende
,, queolog¡a prehistonca. Debería mantener una relación es-
conseguir.
t~~cha c~n la lingüística, ya que el lenguaje es una institu-
cron socraL (~n Oxford los únicos cursos sobre lingüística
1 · Shan· sido los impartidos en el Instituto d e Antro-
gener_al
po ogra . ocia~.) Podría mantener una relación más estrecha
con la bwlog¡a humana que con la materia, más limitada
de la antropología física. '
Fuera del dominio de lo que se llama antropología, debe
~ante~er o establecer conexiones con la sicología, con la
his~ona (de forma especial, la historia económica, la his-
1
tona de. derecho, de la organización política de la religión)
125
V
tivo de nuestra ciencia.... En la realización de estos estu-
EL METO DO COMPARATIVO dios descubrimos que la misma costumbre, la misma idea,
EN LA ANTROPOLOGIA SOCIAL 1 existe entre pueblos entre los cuales no podemos estable-
cer conexión histórica alguna, de modo que no puede su-
ponerse un origen histórico común y hay que deci~r si se
trata de leyes resultan tes de los mismos, o por lo menos
semejantes, fenómenos, independientemente de las causas
históricas. Así se desarrolla la segunda misión importante
de la etnología, la investigaCión de las leyes que rigen la
vida social». «La frecuente aparición de fenómenos seme-
jantes en zonas culturales entre las cuales no existen con-
A lo que. nos referimos cuando hablamos del «método tactos históricos sugiere que de su estudio pueden obte-
comparativo» en antropología es al· método usado por un nerse resultados importantes, pues muestra que la mente
autor como Frazer en su obra La rama dorada.· Pero las humana se ·desarrolla ·en todas partes de acuerdo con las
comparaciones de rasgos particulares de la vida social pue- mismas leyes.»
den hacerse para uno de dos objetivos muy diferentes, que Boas incluyó esas dos misiones en la disciplina particu-
correspondell¡ a la distinción que ahora se hace común- lar que unas veces denominó «antropología» y otras «etno-
mente en Inglaterra entre etnología y antropología social. logía». A algunos de nosotros, en este país, nos parece más
En algunos casos, el etnólogo puede considerar la existen- conveniente considerar las investigaciones que se ocupan
cia de instituciones, costumbres o creencias semejantes en de la reconstrucción de la historia como pertenecientes a
dos o más sociedades como indicación de alguna conexión la etnología y reservar el término de antropología social
histórica. Lo que se pretende es algún tipo de reconstruc- para el estudio de las regularidades que se pueden descu-
ción de la historia de una sociedad, de un pueblo o de una brir en el desarrollo de la sociedad humana, en la medida
región .. En la sociología comparada o antropología social en que pueden ilustrarse y demostrarse mediante el estu-
la .finahdad de la comparación es diferente, pues consiste dio de los pueblos primitivos.
en explorar las variedades de las fonnas de la vida social Así pues, el método comparativo en antropología social
como base para el estudio teórico de los fenómenos socia- es el método de los que se ha llamado «antropólogos de si-
les humanos.
llón», puesto que trabajan en las bibliotecas. Su prime-
. Franz B~a~ señaló en 1888 y 1896 que la antropología ra misión es buscar lo que se solía llamar «paralelos», ras-
-e:¡~ t1ene dos nnswnes. Una es la «reconstrucción» de la histo- . gos sociales semejantes que aparezcan en sociedades dife-
ria de regiones o pueblos particulares, que consideró «la rentes, en el presente o en el pasado. Hace sesenta años,
primera misión». La segunda la describió de esta forma: Frazer representó en Cambridge a la antropología de si-
«Una comparación de la vida social de los diferentes pue- llón usando el método comparativo, mientras que Haddon
blos prueba que los fundamentos de su desarrollo cultural hisistió en la necesidad urgente de estudios «intensivos»
so~ extraordinariamente uniformes. De ello se sigue que de sociedades particulares mediante estudios sistemáticos de
e:ust~n _leyes a las que dicho desarrollo está sujeto. Su des- observadores competentes. El desarrollo de los estudios
cubnmiento es el segundo, y quizás más importante, obje- de campo ha llevado a un relativo olvido de los estu-
dios que usan el método comparativo. Eso es comprensi~
~~ L Iournal of the Royal Anthropological Institute, LXXXI (1952), 15- ble v excusable, pero tiene algunos efectos lamentables .
.:..... Huxley Memonal Lecture de 1951.
Se dice al estudiante que debe considerar todo rasgo de la
126
127
vida social en su contexto, en su relación con los demás .· Empecemos buscando paralelos. Existe un paralelo muy
rasgos del sistema particular en que se lo encuentre. Pero estrecho que podemos encontrar en los haida del noroeste
muy pocas veces se le enseña a considerarlo dentro del de América, que también tienen una división en dos mi-
contexto más amplio de las sociedades humanas en ge- tades matrilineales exógamas que reciben, respectivamente,
neraL Lo <1_Ue la escuela de antropología de Cambridge en- los nombres del águila y del cuervo, especies que se co-
señaba hace cuarenta y cinco años era no que hubiera rresponden exactamente con el halcón-águila y el grajo de
que abandonar la antropología de sillón, sino que ha- Australia. Los haida tienen una leyenda según la cual en el
bía que combinarla con estudios intensivos de sociedades comienzo sólo el águila poseía agua fresca, que conservaba
primitivas particulares en las que cualquier institución, cos- en un cesto. Pero, cuando volaba con la bolsa sobre la
tumbre o creencia de la sociedad debía examinarse en rela- isla de la Reina Carlota, el agua se derramó del pesado
ción con el sistema social total del que fuera una parte o cesto y formó lagos y ríos en los que ahora pueden beber
un aspecto. Sin estudios comparados sistemáticos, la an- todas las aves; y el salmón se abrió paso por las corrientes
tropología se convertirá en mera historiografía y etnogra- de agua y ahora proporciona comida a los hombres.
fía. La teoría sociológica ha de basarse en la comparación En algunas partes de Australia existen leyendas seme-
sistemática y ponerse a prueba continuamente mediante jantes sobre el halcón-águila y el grajo. Una se refiere a
ella. que en el comienzo sólo el halcón-águila poseía abasteci-
El único modo satisfactorio de explicar un método es el miento de agua fresca, que conservaba bajo una piedra
de poner un ejemplo. Así pues, veamos cómo puede apli- enorme. El grajo, que lo ·espiaba, le vio levantar la pie-
carse el método en un caso particular. Podemos partir de dra, beber y volver a colocar la piedra. El grajo levantó
un rasgo particular de algunas tribus del interior de Nue- la piedra y, después de haber bebido el agua fresca, echó
va Gales del Sur. En dichas tribus hay una división de la los piojos de su cabeza en el agua y dejó sin colocar la
población en dos partes, que reciben los nombres del hal- piedra. El resultado fue que el agua se escapó y formó
cón-águila y del grajo (kilpara y makwara), respectivamen- los ríos del este de Australia, donde los piojos se convir-
te. Existe una regla por la cual un hombre debe tomar tieron en los abadejos del Murray, que eran un alimento
mujer de la división diferente de la suya y los hijos perte- importante para los aborígenes, de igual forma que el sal-
necerán a la misma división que la madre. En términos món lo era para los habitantes del noroeste de. los Estados
técnicos, se denomina sistema de mitades matrilineales exó- Unidos. Si aceptamos los criterios formulados por los di-
gamas representados totémicamente. fusionistas, como Graebner, en este caso disponemos de
Una forma de explicar por qué tiene una sociedad par- lo que ellos considerarían pruebas de una conexión histó-
ticular los rasgos que tiene es mediante su historia. Como rica entre Australia y la costa norteamericana del Pacífico.
no disponemos de historia auténtica de esas u otras tribus En cuanto empezamos a buscar paralelos de la división
australianas, los antropólogos históricos se ven obligados a halcón-águila/grajo en Australia, encontramos muchos ejem-
ofrecernos historias imaginarias. Así, el Rev. John Mathew plos de mitades exógamas --en algunos casos matrilinea-
explicaría esas divisiones y sus nombres mediante la su- les, en otros patrilineales- en el resto de Australia, y fre-
posición de que dos pueblos diferentes, uno llamado hal- cuentemente las divisiones reciben los nombres de aves o
cones-águilas y el otro grajos, se encontraron en esa par- están representadas por ellas. En Victoria encontramos el
te de Australia y lucharon. Finalmente, decidieron hacer cacatúa negro y el cacatúa blanco. En Nueva Irlanda existe
las paces y estipularon que en el futuro los hombres de un sistema semejante en el que los sectores están asocia-
los halcones-águilas se casarían sólo con mujeres de los dos con el halieto y el quebrantahuesos. Llegados a este
grajos y viceversa. punto, podemos sentir la necesidad de preguntarnos por qué

128 129
·ejemplo de un fenómeno social muy difundido. A partir
han de identificarse e.-as divisiones sociales mediante refe-
del fenómeno particular, el método_ comparativo nos con-
rencias a las dos especies de aves. duce a un problema mucho más general: ¿cómo podemos
En la parte oriental de Australia la división ~e la po-
entender las costumbres por las que los grupos o divisio-
blación en dos sexos es representada por el denommado to-
nes sociales se distinguen mediante la asociación de un
temismo sexual. En las tribus de Nueva Gales del Sur, los
grupo o división particular con una especie natural par-
hombres tienen por «hermano» al murciélago y las mu-
ticular? Este es el problema general del totemismo, tal
jeres tienen por «hermana» al búho. En la par::: norte de
como se lo ha designado. No les ofrezco una solución de
Nueva Gales del Sur los tótems son el murc1elago par~
este problema, pues me parece resultante de otros dos pro-
los hombres y el trepa-árboles para· mujeres. (Es preci-
blemas. Uno es el problema de la forma en que se repre-
so recordar que los aborígenes australianos clasifican al
senta la relación de los seres humanos con una especie na-
murciélago como una «ave».) Nos encontram.o:, .p~es, con
tural en una sociedad particular, y, como contribución a
otra dicotomía de la sociedad en la que las divislones es-
dicho problema, he ofrecido un análisis de un pueblo no to-
tán ·representadas por aves. témico: los andamaneses. El otro es· el problema de cómo
En la mayor parte del territorio australiano existe una
llegan a identificarse los grupos sociales con algún emble-
división social muy importante en dos divisiones de gene-
ma, símbolo u objeto simbólico o emblemático. La identi-
raciones que se alternan o mitades endógam.as. Una divi-
ficación de una nación por su bandera, de una familia por
sión se compone de todas las personas de una generación
su escudo de armas, de una congregación particular de una
determinada junto con las de la generación de sus abuelos
iglesia por relación con un santo particular, de un clan
y la generación de sus nietos, mientras que la otra división
por su relación con una especie totémica: otros . tantos
incluye todas las personas de la generación de los padr~s Y
ejemplos de una sola clase de fenómenos para los cuales
la de los hijos(as). Dichas divisiones raras veces reciben
hemos de buscar una teoría general.
denominaciones, pero en algunas tribus se da un nombre a
El problema sobre el que deseo llamarles la atención
una de las divisiones y otro distinto a la otra. Pero, en una
aquí es diferente. Una vez admitido que por alguna razón
parte de la Australia occidental, esas mitades en~ógamas re-
es apropiado· identificar las divisiones sociales mediante
ciben los nombres del martín pescador y el abeJaruco, res-
su asociación con especies naturales, ¿cuál es el principio
pectivamente, mientras que en otra parte reciben los de
por el cual se escogen pares como el del halcón-águila y el
un pajarito rojo y un pajarito negro.
grajo, el del águila y el cuervo, el del coyote y el gato mon-
De esta forma, el alcance de nuestra pregunta («¿Por
tés, para representar las mitades de una división dual? La
qué todas estas aves?») se amplía. No sólo se identifican
razón para hacer esta pregunta no es la mera curiosidad.
las mitades exógam.as mediante la relación con un par de
Podemos suponer justificadamente que la comprensión
aves, sino también divisiones duales de otras clases. No
del principio en cuestión nos proporcionará una visión im-
obstante, no siempre se trata de aves. En Australia, las
portante de la forma como los propios indígenas ven la di-
mitades pueden ir asociadas con otros pares de animales,
visión dual como parte de su estructura sociaL En otras
con dos esuecies de canguro en una región, con dos espe-
palabras, en lugar de preguntar: "¿Por qué todas estas
cies de abeJa en otra. En California una mitad va asociada
aves?)), podemos preguntar: <<¿por qué precisamente el hal-
con el coyote v la otra con el gato montés.
cón-águila y grajo, y otros pares?)).
Podría"mos . ampliar nuestra colección de paralelos a
He recopilado muchas historias sobre el halcón-áauila
otros ejemplos en que un grupo o división racial recibe iden-
Y el grajo en diferentes partes de Australia. y en todas ~llas
tidad y se distingue de los otros por asociación con una
apare:::en esas dos aves como oponentes en algún tipo de
especie naturaL Las mitades australianas son un simple
1:; 1
130
conflicto. Un solo ejemplo, procedente de la Australia occi- pués otro aparecerán para unirse a la caza de los animales
dental, puede ~astar. El halcón-águila era el hermano de la que huyen del fuego. El halcón-águila es el cazador.
madre del grajo. En esas tribus un hombre se casa con El grajo no se une a éste u otro tipo de caza, pero cuan-
la hija de un hermano de la madre, de modo que el halcón- do se ha iniciado un fuego en el campo, raras veces tarda
águila era el posible _suegro del grajo, por lo que éste le mucho en aparecer un grajo para situarse en un árbol,
debía obligaciones como la de proporcionarle comida. El lejos del alcance de las estacas arra j adas, y esperar la
halcón-águila dijo a su sobrino que fuera a cazar al walla- oportunidad de robar alguna pieza de carne para su co-
bi. El grajo, después de haber matado al wallabi, se lo co- mida.
mió, acción extraordinariamente reprensible desde el pun- Entre las historias contadas por los australianos sobre
to de vista de la moralidad indígena. A su regreso al cam- animales, podemos encontrar una cantidad inmensa de pa-
pamento, su tío le preguntó qué había traído, y el grajo, ralelos con esta historia del halcón-águila y el grajo. Vea-
como era un mentiróso, dijo que no había conseguido nada. mos, como ejemplo, una sobre el uombat y el canguro pro-
Entonces, el halcón-águila dijo: «Pero, ¿qué tienes en el cedente de la región en que el sur de Australia se junta con
estómago, puesto que ya no llevas el cinturón apretado?>>. Victoria. En esta región el uombat y el canguro son los dos
El grajo respondió que, para luchar contra las punzadas mayores animales comestibles. En el comienzo el uombat
del hambre, se había llenado el estómago con goma de la y el canguro vivían juntos como amigos. Un día el uom-
acacia. El tío le contestó que no le creía y que le haría cos- bat empezó a hacer una «casa» para él solo. (El uombat
quillas hasta que vomitara. (Ese incidente figura en la le- vive en una madriguera hecha en el suelo.) El canguro se
venda en forma de una canción del halcón-águila, Balma- burló de él y lo incomodó. Después, un día llovió. (Hay
~angabalu ngabarina, kidji-kidji malidyala.) El grajo vomi- que recordar que en estas historias lo que quiera que
tó el wallabi que había comido. Ante lo cual, el halcón- ocurra se considera que sucede por primera vez en la his-
águila lo cogió y lo arrojó al fuego; sus ojos se volvieron toria del mundo.) El uombat se metió en su «casa>> para
rojos con el fuego, el carbón lo ennegreció, y gritó de do- protegerse de la lluvia. El canguro pidió al uombat que
lor: «¡Wa, wa, wa!>>. El halcón-águila pronunció las pala- hiciera sitio, pero éste explicó que sólo había sitio para
bras que iban a convertirse en una ley: «Nunca serás ca- uno. Así que el uombat y el canguro se pelearon y lucha-
zador, serás para siempre un ladrón>>. Y así son las cosas ron. El canguro golpeó al uombat en la cabeza con una
ahora. gran piedra, con lo que acható su cráneo; el uombat lanzó
Para interpretar esa historia hemos de tener en cuenta una lanza al. canguro que se le quedó clavada en la base
la concepción que tienen los aborígenes de esas aves. En del espinazo. Desde entonces el uombat tiene el cráneo acha-
primer lugar, las dos son aves que comen carne y el abo- tado y el canguro tiene una cola; el primero vive en una
rigen australiano se considera a sí mismo comedor de car- madriguera, mientras que el canguro vive al aire libre; ya
ne. Un método de cazar en esa región es el de que los hom- no son amigos.
bres y las mujeres se reúnan en la temporada apropiada Desde luego, esa historia no es otra cosa que un cuento
para la caza colectiva. Se inicia un fuego a través de una que puede considerarse infantil. Divierte a los oyentes cuan-
extensión de terreno de forma que el viento lo propague. do se cuenta con las expresiones .dramáticas adecuadas.
Los hombres avanzan frente al fuego matando con lanzas Pero si examinamos docenas de esos cuentos, descubrimos
o arrojando estacas a los animales que huyen de él, mien- que tienen un tema común. Las semejanzas y diferencias
tras las mujeres siguen el fuego para desenterrar a los de las especies animales se traducen en términos de amis-
animales que se hayan escondido bajo tierra. Al poco de tad y conflicto, solidaridad y oposición. En otras palabras,
haber empezado la caza, primero un halcón-águila y des- el mundo de la vida animal áparece representado en fun-

1..,...,
• .:Jf.
133
ción de rei~ciones sociales· semejantes a las de la sociedad de Nueva Gales del Sur. Estaba una vez sentado en la re-
humana. . gión del río Macleay con un indígena, cuando apareció un
Podemos encontrar leyendas referentes, no a especies trepa-árboles, y le pedí que me hablara de aquel animal.
ticulares o pares de especies particulares, sino a los «Ese es el pájaro que enseñó a las mujeres cómo subir a
par d 1 .
animales en general. En Nueva Gales e Sur ex1st_e una los árboles>>, me dijo. Después de conversar un rato; le
leyenda según la cual en el comienz? todos los__ ammales pregunté: «¿Qué parecido existe entre el murciélago y el
formaban una sola sociedad. Despues, el murc1elago fue trepa-árboles?», y, con una expresión del rostro que mos-
responsable de la introducción· de la muerte al matar ~ traba sorpresa de que hiciera semejante pregunta, respon-
sus dos esposas. Sus cuñados convocaron a todos lo:. am- dió: «Pues, naturalmente porque los dos viven en aguje-
males a una danza y, después de atrapar al murc1elago ros hechos en los árboles». Me di cuenta de que la lechu-
desprevenido, lo arrojaron al fuego. Aquello inició una pe- za y el chotacabras también viven en los árboles. El hecho
lea general en la que los animales se atacaron unos a otros de que determinados animales coman carne constituye
con fuego, y ahora todos los animales presentan marcas una especie de semejanza social, como en el caso del hal-
de aquella lucha. Las diferentes especies han dejado de cón-águila y el grajo o en el del dingo y el gato montés. Lo
formar una sociedad de amigos. mismo ocurre con la costumbre de vivir en agujeros hechos
En las islas Andanian existe un cuento muy parecido. en los árboles.
Originalmente, las diferentes especies de animales form~­ Ahora podemos responder a la pregunta: «¿Por qué el
ban una sola sociedad. En una reunión uno de ellos traJO halcón-águila y el grajo?», diciendo que se los selecciona
fuego. Hubo una pelea general en la que se arrojare?- ~ego como representantes de cierto tipo de relación que pode-
unos a otros. Algunos escaparon al mar y se convirtieron mos llamar de ~oposición». .
en peces, otros huyeron a los árboles y se volvieron pájaros, La idea australiana de lo que aquí llamamos ccoposición»
y los peces y los pájaros todavía presentan las marcas de es una aplicación particular de esa asociación por oposi-
las quemaduras que sufrieron. · ción que es un rasgo universal del pensamiento humano,
Por tanto, un estudio comparado nos revela el hecho de modo que pensamos mediante pares de contrarios, arri-
de que las ideas de los australianos sobre el halcón-ágliila ba y abajo, fuerte y débil, blanco y negro. Pero la concep-
y el grajo ~on sólo un caso particular de un _fenómeno muy ción australiana de la «Oposición» combina la idea de un
difundido. En primer lugar, esos cuentos mterpretan las par de contrarios con la de un par de oponentes. En los
semejanzas y diferencias de las especies animales en fun- cuentos relativps al halcón-águila y al grajo, estos dos pá-
ción de las relaciones de amistad y de antagonismo, tal jaros son oponentes en el sentido de antagonistas. También
como se conocen en la vida social de los seres humanos. son contrarios a causa de su diferencia de carácter, el hal-.
En segundo lugar, las especies naturales figuran distribui- eón-águila el cazador, el grajo el jefe. El cacatúa negro y
das en pares de opuestos. Sólo se las puede considerar así el cacatúa blanco, que representan a las mitades en Victo-
en caso de que exista algún aspecto en que se parezcan. ria occidental son otro ejemplo de oposición, pues esas
Asi, el halcón-águila y el grajo se parecen por ser aves car- aves son esencialmente semejantes excepto por la diferen-
nívoras destacadas; Cuando investigué .por primera vez los cia del color. En América se utilizan otros pares de con-
tótems sexuales de Nueva Gales del Sur, supuse, en lo cual trarios para referirse a las mitades : el cielo y la tierra, la
me equivocaba totalmente, que la base de la semejanza guerra y la paz, corriente arriba y corriente abajo, rojo y
entre el murciélago y la lechuza o el chotacabras era que blanco. Creo que, después de haber realizado un estudio
ambos volaban de noche, pero el trepa-árboles no vuela comparado extenso, tengo razones para formular una ley
de noche y es el tótem de las rÍmjeres en la parte norte general: la de que en todos los lugares, en Australia, Mela-

134 135
nesia o América, en que existe una estructura social de · considerarlas tontas y perezosas; como su animal represen-
mitades exógamas, se considera que éstas están en rela- tativo, y los de. este último sector se. vengan acusando a sus
ción de lo que aquí hemos llamado «Oposición». oponentes de ser inconstantes. Existen indicaciones de
Evidentemente, el próximo paso en un estudio compa- que ese hacerse rabiar mutuamente entre las mitades in-
rado es intentar descubrir cuáles son las diferentes formas tervenía en sus ceremonias serias. Había canciones de tipo
que la oposición entre las mitades de una división dual satírico que un sector podía cantar contra el otro. No obs-
adoptan en la vida social efectiva. En la literatura especia- tante, la oposición entre las mitades parece haber sido mu-
lizada existen referencias ocasionales a cierta hostilidad en- cho menos fuerte que la existente entre ciertos pares de
tre las dos divisiones existentes y que hqn existido en el clanes, a veces pertenecientes a la misma mitad, que eran
pasado. Los únicos testimonios existentes se refieren a que tradicionalmente "enemigos". En determinadas· ocasiones,
no existe hostilidad en el sentido propio del término, sino dichos clanes cantabqn "canciones de enemistad" unos con-
sólo una actitud convencional que encuentra expresión en tra otros».
algún modo de comportamiento habitual. Indudablemente, Esa institución, para la que hemos de esperar que al-
en Australia, aunque en algunos casos en que haya dispu- guien encontrará un nombre mejor que el de <<relación de
ta es posible observar que los miembros de .las mitades burla», se encuentra en diferentes formas en varias socie-
patrilineales forman "bandos» separados, hostilidad autén- dades distintas, y requiere un estudio comparado sistemá-
tica del tipo de la que puede provocar acciones violentas, tico. Su función consiste en mantener una relación conti-
no existe entre las mitades, sino entre los grupos locales, y nua entre dos personas, o dos grupos, entre las que existe
parece que dos grupos .locales de la misma mitad patrili- aparente hostilidad o antagonismo, que en realidad sólo es
neal entran en conflicto con tanta frecuencia como dos artificial. En un artículo publicado en la revista Africa 2 he
grupos pertenecientes a mitades diferentes. De hecho, como ofrecido indicaciones de cara a un estudio comparado de
una causa común de conflicto efectivo es el hecho de que dicha institución.·
un hombre tome a una mujer casada con, o prometida a, Otra costumbre significativa en que se expresa la rela-
otro, en semejantes casos los dos antagonistas o grupos de ción de oposición entre las dos mitades es aquella por la
antagonistas pertenecerán a la misma mitad patrilineal. que, en ciertas tribus de Australia y de Norteamérica, las
La expresión de la oposición entre las mitades puede mitades constituyen los «bandos» en juegos como el fút-
. revestir diversas formas. Una es la institución a la que bol. Los juegos competitivos proporcionan ocasiones en
los antropólogos han dado el nombre, no muv satisfacto- que dos personas o dos grupos de personas se enfrentan.
rio, de "relación de burla». Se espera o permit~ que miem- Dos grupos pérmanentes dentro de una estructura social
bros de divisiones opuestas se hagan de rabiar mutuamen- pueden mantenerse en una relación en la que figuran como
te mediante injurias verbales o intercambio de insultos. oponentes constantes. Las dos universidades de Oxford y
Kroeber (Handbook of Indians of California) escribe que, Cambridge constituyen un ejemplo de ello.
~ntre l~s cupeño, '<<Se reconoce una especie de oposición Existen otras costumbres en que se expresa la oposición
mofens1va entre las mitades, cuyos miembros se ridiculi- de las mitades. Por ejemplo, en la tribu omaha de Norte-
zan mutuamente con frecuencia y se acusan de inconstan- américa el círculo que formaba el campamento estaba di-
t~s Y .de tontos, respectivamente». Strong (Aboriginal So- vidido en dos semicírculos, y, cuando un muchacho de uno
czety m Southern California) escribe lo mismo. "Un anta-
gonismo inofensivo entre las mitades se manifiesta en bro-
mas entre personas de una y otra. Las personas de la mi- 2. Véase Afiica, XIII, n.• 3 (1940), 195-210. Reimpreso en Structure and
Fwu:tion in Primitive Society (Londres, 1952). Véase también Africa, XIX
tad coyote ridiculizan a las de la mitad gato montés por (1949), 133-4D.

136 1~""
• .) 1
~ -. 1

de ellos cruzaba al otro, llevaba consigo amigos y se pro- hostilidad contra sus parientes. Eso es lo que significa el
ducía una pelea con los muchachos de la otra mitad. No dicho de los gusii de Africa del Este: <<Con quien nos casa-
necesitamos ni podemos examinar aquí esas diferentes cos- .m.os es con quien luchamos>>.
tumbres. A la luz de eso es corno debemos interpretar la costum-
Examinemos brevemente la institución de la exogamia bre del matrimonio por intercambio. El grupo o parientes
de mitad, por la cual todos los matrimonios, en los casos de una mujer la pierden; quedan compensados por su pér-
en que se observa la norma, se celebran entre personas dida si reciben otra que pasará .a ser la esposa de uno de
pertenecientes a mitades opuestas. Existen innumerables ellos. En las tribus australianas, la costumbre, con pocas
costumbres que muestran que en muchas sociedades pri- excepciones, consiste en que, cuando un hombre toma una
mitivas el hecho de tornar en matrimonio a una mujer se esposa, debe entregar a una hermana para que la sust~tuya.
representa simbólicamente como un acto de hostilidad En la tribu yaralde de Australia del sur, que no tema un
contra su familia o grupo. Todos los antropólogos cono- sistema de mitades, cuando un hombre se casaba con una
cen la costumbr~ por la que se representa que la novia mujer de otro clan local, se contaba con que su propio
es capturada o separada por la fuerza de sus parientes. clan proporcionara una esposa para algún miembro del
McLennan fue quien hizo la primera recopilación de ejem- clan del que procedía la novia. De lo contrario, considera-
plos de dicha costumbre; este autor los interpretaba histó- ban el matrimonio irregular, impropio, o casi podríamos
ricamente como supervivencias de la situación más anti- decir ilegal. Sabemos que, entre las tribus de la parte
gua de la sociedad humana en que la única forma de ob- oriental de Victoria (Gippsland), la única forma apropiada
tener esposa era robar o capturar a una mujer de otra de matrimonio era la de intercambio. El sistema de mita-
tribu. des exógamas constituye un sistema de generalización del
Los habitantes de las Marquesas ofrecen un ejemplo matrim;nio mediante intercambio, dado que cada matri-
esclarecedor de ese tipo de costumbre. Cuando se ha con- monio es un caso particular dentro del proceso continuo
certado un matrimonio, los parientes del novio cogen los por el que los hombres de una mitad reciben las mujeres
regalos que se van a ofrecer a los parientes de la novia y se del otro.
dirigen a la casa de ésta. Por el camino los parientes de la Un estudio comparado muestra que en las sociedades
novia les tienden una emboscada y los atacan, y les arre- primitivas la relación establecida entre dos grupos de pa-
batan por la fuerza los regalos que llevan. El p:r;imer acto rientes mediante el matrimonio de un hombre de un grupo
de violencia procede de los parientes de la novia. Por el y una mujer del otro se expresa a través de costumbres
principio polinesio del utu, los que sufren un agravio tie- de evitación ·v de la relación de burla. En muchas so-
nen derecho a vengarse perpetrando otro. Así pues, los pa- ciedades se erige a un hombre evitar cualquier clase de
rientes del novio ejercen dicho derecho llevándose a la no- contacto con la madre de su esposa, y a menudo también
via. Ningún otro ejemplo podría ilustrar mejor el hecho de con su padre, y con otras personas de esa generación den-
que esas acciones habituales son simbólicas. tro de los parientes de su mujer. Con dicha costumbre va
Consideradas en relación con la estructura social, el sig- asoci.ada muchas veces la llamada <<relación de burla», por
nificado o referencia simbólica de esas costumbres debería la que se permite o incluso exige a un hombre que se com-
resultar evidente. La solidaridad de un grupo exige que la porte de forma ofensiva para con algunos de los parientes
pérdida de uno de sus miembros se considere como un de su mujer penenecientes a su propia generación. En otro
agravio al grupo. En consecuencia, se necesita expresarlo lugar he sugerido que podernos entender esa costumbre
de algún modo. El hecho de tomar a una mujer en matri- como el medio convencional por el que se establece y man-
monio se representa en cierto sentido como un acto de tiene una relación de tipo especial, que podemos describir

138 139
como una mezcla de amistad o solidaridad con hostilidad boración más completa de la idea se encuentra en la filo-
u oposición. sofía del yin-yang de la antigua. China. La.frase en que está
Existen otros rasgos de la organización dual que ha- resumida es: «Yi yin yi yang wei tze tao» («Un yin y un·
bria que tener en cuenta en un estudio completo. Existen yang forman un orden»). Yin es el principio femenino, yang
casos en que hay intercambios regulares de bienes o de el masculino. La palabra tao puede traducirse en este caso
servicios entre las dos mitades. En ese intercambio com- por un «todo ordenado». Un hombre (yang) y su esposa
petitivo de comestibles y objetos de valor conocido por (yin) constituyen la unidad de una pareja casada. Un día
potlach en Norteamérica, las mitades pueden ser importan- (yang) y una noche (yin) forman un todo unificado· o uni-
tes. Entre los tlingit, por ejemplo, los miembros de una dad de tiempo. De igual fonna, un v~rano {yang) y un in-
mitad realizan el potlach con los miembros de la otra mi- vierno (yin) fonnan la unidad que llamamos un. año. La
tad. Las dos mitades constituyen los dos «bandos» de lo actividad es yang y la pasividad yin, y una relación de dos
que es una especie de juego competitivo en el que los hom- · entidades o personas una de las cuales sea activa y la otra
bres «luchan con la propiedad». pasiva se concibe también como una unidad de contrarios ..
Nuestro estudio comparativo nos permite entender la En la. filosofía china antigua esa idea de la unidad de los
división halcón-águila-grajo de las tribus del río Darling contrarios aparece desarrollada con la mayor amplitud.
como un ejemplo particular de un tipo difundido de la El universo entero, incluida la sociedad humana, aparece
aplicación de determinado principio estructural. La rela- interpretado como un «orden» basado en ella.
ción entre las dos divisiones, que aquí hemos llamado «opo- Existen testimonios históricos de que esa filosofía se
sición», es la que separa y une y que, por tanto, nos nre- desarrolló hace muchos siglos en la región del rio Amari-
senta un tipo especial de integración social que me;ece llo, en el «Reino del Medio». También existen testimonios
un estudio sistemático. Pero el término «oposición» que me de que la organización social de esa región se componía
he visto obligado a usar, porque no he podido encontrar de clanes emparejados mediante matrimonios mixtos : los
otro mejor, no es del todo apropiado, pues recalca dema- dos clanes se reunían en los festivales de primavera y de
siado lo que sólo es un aspecto de la relación, el de la se- otoño y rivalizaban cantando odas, de modo que los hom-
paración y la diferencia. La descripción más correcta sena bres de uno de los clanes podían encontrar esposas entre
decir que el tipo de estructura de que se trata es la de ·las muchachas del otro. Los testimonios revelan que el sis-
unión de los contrarios. tema matrimonial consistía en que un hombre se casaba
La idea de la unión de los contrarios era una de las con la hija del hermano de su madre o con una mujer de
ideas fundamentales de la filosofía de Heráclito. Está resu- la generación· apropiada perteneciente al clan de su ma-
mida en su afirmación: «Polemos es el rey, gobierna todas dre. Según mi información, ese tipo de organización, que
las cosas>). La palabra griega polemos se traduce a veces al parecer existió hace cuarenta siglos en esa región, so-
como «lucha», pero la traducción adecuada sería «oposi- brevivía todavía en 1935, pero la investigación de ese fe-
ción», en el sentido en que hemos usado la palabra en nómeno, que se hab'ía previsto que realizara Li Yu I, que-
esta conferencia. Uno de los ejemplos que Heráclito usa es dó frustrada por el ataque japonés a China. Puede que to-
el de 1~ caja y la espiga; en este caso· no hay lucha; son davía no sea demasiado tarde para llevarla a cabo; nos per-
co~tranos u opuestos que se combinan para formar una mitirla evaluar de forma más exacta la reconstrucción his-
umdad cuando se los junta. tórica de Maree! Granet~
Existen ciertos testimonios de acuerdo con los cuales Esa filosofía del yin-yang de la antigua China es la ela-
Heráclito Y los pitagóricos recibi~ron esa idea de la uni- boración sistemática del principio que se puede usar para
dad de los contrarios de Oriente. En cualquier caso, la ela- definir la estructura social de los sectores en las tribus

140 141
australianas, pues la estructura de los sectores, como pue- Podemos decir que en la estructura social relativamente.
de verse por la breve descripción que acabamos de dar, es simple de las tribus australianas podemos reconocer tres
la de una unidad de grupos opuestos, en el doble sentido tipos principales de relación entre personas o grupos. Está
de que los dos grupos son oponentes amistosos y de que la relación de enemistad y pelea; en el otro extremo se si-
aparecen como contrarios en algún sentido, de i2:ual forma túa la relación de simple solidaridad, y en el sistema aus-
que el halcón-águila y el grajo o lo blanco y lo ~negro son traliano ésta debe existir entre hermanos y entre personas
contrarios. de la misma generación dentro del grupo local; esas perso-
La consideración de otro ejemplo de oposición en las nas no pueden pelearse, si bien en ciertas circunstancias se
sociedades australianas puede arrojar luz sobre este fenó- considera legítimo que una persona «refunfuñe)' contra
meno. Un campamento australiano se compone de hom- otra, para expresar en el campamento una queja contra la
bres de determinado clan y sus esposas, que, por la regla acción de la otra. En tercer lugar está la relación de opo-
de la exogamia, proceden de otros clanes. En Nueva Gales sición, que no es en absoluto lo mismo que la lucha o
del Sur existe un sistema de totemismo sexual, por el oue la enemistad, sino una combinación de acuerdo y desa-
una especie animal es el «hermano» de los hombres y otra cuerdo, de solidaridad y diferencia.
especie es la «hermana» de las mujeres. En ocasiones, den- Hemos empezado con un rasgo particular de una región
tro de un campamento indígena surge una situación de particular de Australia, la existencia de mitades exógamas
tensión entre los sexos. En casos así, lo que es probable que reciben los nombres del halcón-águila y del grajo, res-
que oc~a, según las relaciones de los aborígenes, es que pectivamente. Mediante comparaciones con otras socieda-
las muJeres salgan de la aldea y maten un murciélago, el des, algunas de ellas no australianas, podemos ver que no
«hermano» o tótem sexual de los hombres, y lo dejen ti- se trata de algo particular o peculiar de una región, sino
rado en la aldea para que los hombres lo vean. Entonces que es un ejemplo de determinadas tendencias generales
éstos se vengan matando al pájaro que en esa tribu es el difundidas en las sociedades humanas. De ese modo susti-
tótem sexual de las mujeres. Después de lo cual las mu- tuimos un problema particular del tipo de los que requie--
jeres pronuncian insultos contra los hombres, lo' que pro- ren una explicación histórica, por determinados problemas
voca una pelea con palos (de excavar los de las mujeres generales. Existe, por ejemplo, el problema del totemismo
arrojadizos los de los hombres) entre los dos grupos se~ como fenómeno social en el que se da una asociación es-
xuales, de la que resultan muchas magulladuras. Después pecial de un grupo social con una especie natural. Otro
de la lucha, se restablece la paz y desaparece la tensión. problema, quizás más importante, que se ha planteado es
Los . ~borígenes australianos piensan que, cuando existe el de la naturaleza y funcionamiento de las relaciones y es-
tenswn entre dos personas o dos grupos que podría que- tructuras sociales basadas en lo que aquí hemos llamado
dar latente, lo que hay que hacer es pelear y después hacer «oposición)>. Este es un problema mucho más general que
.las paces. El uso simbólico del tótem es muy significativo. el del totemismo, pues es el de cómo puede usarse la oposi-
Esta costumbre nos nwestra que ia idea de la oposición de ción con vistas a la integración social. Por tanto, el método
lo~ grupos, Y la unión de los contrarios no se limita a las comparativo consiste en pasar de lo particular a lo gene'-
mitades exógamos. Los dos grupos sexuales constituyen ral, de lo general a lo más general con vistas a alcanzar de
una estructura de tipo semejante; lo mismo ocurre a veces esa forma lo universal, las características que se pueden
con los dos grupos formados por las divisiones mediante encontrar con formas diferentes en todas las sociedades
alternancia de generaciones. El grupo de los padres v el humanas.
grup~ de sus hijos guardan una relación de oposición, "que Pero el método comparativo no se limita a formular
no difiere de la relación entre los maridos y sus esposas. problemas, aunque la formulación del problema pertinente

142 143
es extraordinariamente importante en cualquier ·ciencia; una rama especial de la sociología comparada. Es con-.
también proporciona material mediante el cual se pueden ~ · te que se distingan los fines y los meto' dos. Lah"lS-
veruen 1 ·•
dar los primeros pasos hacia la solución. Un estudio del · e n el sentido propio del término, como re ac10n au-
tona, ..
sistema de las mitades en Australia puede darnos resulta- · tica de la sucesión de acontecimientos en una reg10n par-
t en
dos que serían enorm~mente valiosos para la teoría de la . 1 d
ticular durante un período de tiempo part1cu ar, _no pue e
sociedad humana. ortarnos generalizaciones. El método comparativo, como
Al comienzo de esta conferencia he citado a Franz Boas, apt dio generalizador de los rasgos de las sociedades hu-
quien distinguió las dos tareas de que puede ocuparse el es anas
u no puede aportarnos historias particu1ares. S o'1o po-
antropólogo en el estudio de la sociedad primitiva, y esas m , d"
drán combinarse y adaptarse ambos estu lOS, cuan .o se
d
dos tareas requieren dos métodos diferentes. Uno es el reconozca adecuadamente su diferencia, y por esa razon es
método «histórico», por el que se «explica» la existencia por lo que hace treinta años insistí en la necesidad urgen.te
de un rasgo particular de una ·sociedad particular como re- de que se hiciera una distinción clara entre_ 1~ ~tnologJ.a,
sultado de una sucesión de acontecimientos particular. El como estudio histórico de las sociedades pnm1t1Vas, Y la
otro es el método comparativo mediante el cual intenta- antropología social, como rama de la soci?logía compara-
mos, no «explicar)), sino entender un rasgo particular de da que se ocupa especialmente de las sociedades qu~ lla-
una sociedad particular al interpretarlo como un ejemplo mamos primitivas. Podemos reservar todas las cu~s_t~ones
particular de un tipo o clase general de fenómenos socia- de reconstrucción histórica para la etnología. La nnswn de
les y, después, relacionarlo con determinada tendencia ge- la antropología social es la de formular Y ratificar ~fir­
neral, o mejor universal, de· las sociedades humanas. Esa maciones sobre las condiciones de existencia de los_ siste-
tendencia es lo que en ciertos casos se llama ley. La .antro- mas sociales (leyes de la estática social) y las regulandades
pología, como estudio de la sociedad primitiva, abarca que se pueden observar en el cambio social (leyes ~e la
ambos métodos, y yo mismo he usado constantemente los dinámica social). Eso sólo puede llevarse a cabo .m~dm_nte
dos al enseñar etnología y antropología social en varias uni- el uso sistemático del método comparativo, y la umca JUS-
versidades. Pero deben distinguirse. El método histórico tificación de dicho método es la esperanza de que nos apor-
nos aportará proposiciones particulares; sólo el método te resultados de ese tipo, o, como lo expresó Boas, el cono-
comparativo puede aportarnos proposiciones generales. En cimiento de las leyes del desarrollo social. Sólo en un es~u­
las sociedades primitivas siempre faltan testimonios o son dio integrado y organizado, en que se combinen los ~st~dws
inadecuados. No existen testimonios históricos referentes históricos y sociológicos, podremos llegar al entendinnento
a la aparición de la división halcón-águila-grajo en Austra- auténtico del d'esarrollo de la sociedad humana, cosa que
lia, y las suposiciones referentes a ella me parecen absolu- todavía no hemos conseguido.
tamente carentes de valor. No sabemos nada, ni sabremos
nunca, sobre· cómo llegaron los aborígenes australianos a
poseer sus sistemas sociales actuales. La suposición de que
mediante el método comparativo podríamos llegar a sacar
conclusiones válidas sobre los «orígenes» de dichos siste-
mas es muestra de un desprecio absoluto hacia la natu-
raleza de las demostraciones históricas. La antropología,
como estudio de las sociedades primitivas, abarca tanto los
estudios históricos (etnográficos y etnológicos) como el es-
tudio generalizador denominado antropología social, que

144 145
Segunda parte
La antropología social
I

DEFINICION

Podemos definir la antropología social como la inves-


tigación de la naturaleza de la sociedad humana mediante
la comparación sistemática de sociedades de tipos diferen-
tes, con atención especial a las formas -más simples-
de la sociedad de los pueblos primitivos, salvajes o pre-
alfabetos. El nombre empezó a usarse en Inglaterra en el
último cuarto del siglo XIX y ha recibido el reconocimiento
de las universidades británicas, en algunas de las cuales
existen cátedras y agregadurías de antropología social. Se
adoptó para distinguir la materia de la etnología, por un
lado, y de lo que había llegado a conocerse como sociolo-
gía, por otro.
La primera persona que tuvo el título de catedrático de
antropología social fue Sir James Frazer, quien en 1908 re-
cibió una cátedra honorífica en la Universidad de Liver-
pool. En su disertación inaugural sobre «El objetivo de la
antropología social», pronunciada el 14 de mayo de 1908,
dijo:

La antropología, en el sentido más amplio del tér-


mino, pretende descubrir las leyes generales que han
regido la historia humana en el pasado, y que, en
caso de que la naturaleza sea realmente uniforme, es
de esperar que la rijan en el futuro. De forma, que la
ciencia del hombre coincide hasta cierto punto con lo
que durante mucho tiempo se ha conocido como la
filosofía de la historia, así como con el estudio que en
años recientes ha recibido el nombre de sociología. De
hecho, tenemos razones para afirmar que la antropo-
logía social, o estudio del hombre en la sociedad, no

149
es sino otra expresión de la sociología. Y, sin embar- tendido a lo largo de muchos miles, quizá millones,
go, creo que es conveniente distinguir esas dos cien- de años... Mientras que la ~tropología social tiene
cias, y que, mientras que el nombre de sociología debe- mucho que decir sobre el hombre primitivo en el sen-
na reservarse para el estudio de la sociedad humana tido relativo, no tiene nada que decir sobre el hombre
en el sentido más amplio de esas palabras, lo más primitivo en el sentido absoluto, y ello por la razón
provechoso seria limitar el nombre de antropología precisamente de que no sabe nada sobre él, y, por lo
social para el sector particular de ese inmenso domi- que actualmente podemos colegir, no es de prever que
nio del conocimiento ... La esfera de la antropología llegue nunca a saber algo.
social, tal como la entiendo o, por lo menos, de acuer-
do con el tratamiento que propongo datle, se limita a Desde luego, no es posible trazar una línea divisoria
los toscos comienzos, al desarrollo rudimentario de la nítida entre las sociedades primitivas y las no primitivas.
sociedad humana; no abarca las fases más maduras de Además, la antropología social no limita su atención, ni
ese progreso complejo y mucho menos los problemas puede hacerlo, a las sociedades primitivas. Parte, por lo
prácticos, que incumben a los estadistas y legisladores menos, de su misión es comparar las sociedades primitivas
modernos. con !as más avanzadas. En los veinte últimos años !os an-
tropólogos sociales han realizado estudios especiales de
De modo que Frazer concebía la antropología social comunidades locales dentro de las sociedades cultas, en
como el estudio sociológico de las formas «primitivas» de Irlanda, Quebec, Massachussets, Mississippi, Japón y China.
la sociedad. De igual forma, en su artículo sobre «Social Las definiciones de Frazer y Malinowski han dejado de ser
Anthropology>> en la 13.• edición de la Enciclopedia Britá- adecuadas para caracterizar a la antropología social de la
nica (1926), Malinows.ki definía la materia como «una actualidad. Podemos decir que lo que la distingue es deter-
rama de la sociología, tal como se la aplica a las tribus minado método de investigación, que se puede aplicar
primitivas». Es necesario entender adecuadamente el adje. tanto a !os pueblos primitivos como a las comunidades de
tivo «primitivo». Frazer escribió: pequeño tamaño de las sociedades civilizadas, y que, para
conseguir alcanzar sus objetivos teóricos, la antropología
En este caso conviene evitar un error común. Los social debe prestar atención especial a las sociedades que
salvajes de la actualidad son primitivos· sólo en sen- llamamos primitivas.
tido relativo, no en sentido absoluto. Son primitivos Es necesario decir algo sobre la distinción entre antro-
en comparación con nosotros, no con el hombre autén- pología socia! y etnología, sobre las cuales se producen con
ticamente primitivo, es decir, con el hombre tal como frecuencia confusiones teóricas. Sin embargo, conviene re-
era cuando salió de la etapa puramente animal de su cordar que el nombre de «etnología», como el de «sociolo-
existencia. En realidad, en comparación con el hombre gía>>, se usa con sentidos diferentes en diferentes países e
en su estado absolutamente primitivo, hasta el salvaje incluso en el mismo país, según los autores o las escuelas.
más atrasado de' hoy es indudablemente un ,ser muy Aquí vamos a usar exclusivamente el sentido que ha tenido
desarrollado y culto, dado que toda clase de testimo- tradicionalmente y tiene en Inglaterra.
nios que poseemos y de probabilidades abogan por la El nombre de «etnología» empezó a usarse hace un poco
opinión de que todas las razas humanas existentes, más de cien años. Como muestra la etimología, es el estu-
tanto las más primitivas como las más civilizadas, han dio de los pueblos (ethnos, en griego). La Sociedad Etno-
alcanzado su nivel cultural actual, ya sea alto o bajo, lógica de Londres, fundada en 1843, afirmaba en el mo-
tras un avance lento y arduo, que debe de haberse ex- mento de su constitución que nacía «con el fin de investí-
150
151
gar las características distintivas, físicas y morales, de las
gút prehistóriCa, que puede considerarse. como una rama.
variedades de la humanidad, que habitan o han habitado
de la etnología. El arqueólogo busca los vestigios materia-
la tierra,. El ·diccionario de Oxford define la etnología
les de los pueblos desaparecidos; encuentra las cosas que fa-
como «la ciencia que trata de los pueblos y de las razas,
bricaban y usaban y a veces suficientes restos de sus esque-
de sus relaciones, de. sus características distintivas, etc.».
letos como para determinar algunos de sus caracteres ra-
La Enciclopedia Británica. (14.' edición) considera a la etno-
ciales, v a veces, en función de los testimonios geológicos;
logía y a la etnografía como «ciencias que tratan funda-
puede determinar la fecha geológica de los vestigios. Las
mentalmente del hombre como unidad racial y de la dis-
esmeradas investigaciones de los arqueólogos nos han apor~­
tribución sobre .la tierra de las unidades raciales. Abarcan
tado gran cantidad de conocimientos, que aumentan cada.
un estudio comparado de las características físicas de las
vez más, sobre los habitantes prehistóricos de muchas par-
razas de la humanidad y también un estudio comparado y
tes del mundo.
una clasiñcació:i:t de los pueblos basados en las condiciones
El etnólogo intenta sacar: i11..ferencias sobre los aconteci-
y características· culturales>>.
mientos y condiciones prehistóricos mediante el estudio de
El nombre de «etnografía» se usa generalmente para
. la distribución de los pueblos en los tiempos recientes o
referirse a relaciones descriptivas de un pueblo o de pue-
históricos y de sus semejanzas y diferencias, tanto raciales
a
blos. La etnología no se limita la descripción. En primer
como culturales. Tienen que basarse en lo que podemos
lugar intenta proporcionar una clasificación de. los pueblos
llamar pruebas «circunstanciales». En algunos casos, dichas
comparándolos y destacando sus semejanzas y diferencias.
pruebas son enteramente convincentes; por ejemplo,. la re-
Los -pueblos o los· grupos étnicos se parecen o dilieren
lación muv estrecha entre: la lengua malgache de Madagas""-
mutuamente por los caracteres raciales, por la lengua, y
car y las ·lenguas del archipiélago malayo constituye una
por sus modos de. vida y de pensamiento, desde el tipo de
prueba incuestionable de una conexión prehistórica entre
viviendas que habitan o la clase de vestidos que llevan
esas dos regiones. De forma. semejante, si no supiéramos:
hasta. el tipo de· creencias que sustentan. Los etnólogos dis-
por la historia que los esclavos del continente americano
tinguen las. características raciales de un pueblo de sus ca-
procedían de Africa, la semejanza racial de los habitantes
racterísticas culturales y las clasificaciones raciales de las
ne~ITos del Nuevo Mundo con los de Africa. nos permitiría
culturales.
· inf~rir con cierto grado de probabilidad que había habido
La distribución de los pueblos por la fáz de la tierra. en
algún traslado de pueblos a través del Atlántico; Pero a
tiempos recientes y sus semejanzas raciales y culturales son
veces las hipótesis del etnólogo son enormemente especula- .·
resultado· de acontecimientos que se iniciaron, cuando apa-
tivas; y, como es notoriamente dificil llegar a un. acuerd? ·
reció· la, humanidad, hace un millón de años quizás: ha
sobre las- pruebas circunstanciales,. existen muchas diver-
sido un proceso: de migraciones, mezclas e influencias mu:.
gencias entre las interpretaciones de los etnólogos.. , · ·· ·
tuas de los pueblos, de modificaciones de los. caracteres
Asi pues, los problemas que tiene. que estudiar la etno-
raciales y de. cambios y evoluciones culturales. En el caso
logía son, en primer lugar, problemas de clasificación ra.,.
dec algunos: pueblos y de determinados· siglos, algún. conoci-
cial y cultural, y, en segundo lugar, problemas que plantean
miento del proceso nos aporta 1a historia, usando, el tér-
los acontecimientos del pasado prehistórico. Ejemplos de
mino. en su significado corriente· de registro -relato-- de
premtas típicas de la etnología son: ¿De dónde procedían
los· acontecimientos y condiciones del pasado. Los etnólo-
ios ~pueblos, polinesios? ¿Por qué. ruta o rutas y er. qué
gos centran gran parte de su atención en descubrir aigo
sobre el pasado prehistórico. período o períodos de tiempo ocuparon las islas que aiwra
habitan? ¿Cómo, cuándo y por dónde entraron en el comi-
Una fuente importante· de conocimiento es la arqueolo-·
nente los antepasados de los indios americanos 2 ¿Cómo se
1!::;-
.l...J.k.
extendieron por él? ¿Cómo desarrollaron las diferencias cine. expéri1nentate; «el método experimental, considerado
raciales, lingüísticas y culturales que presentaban, cuando en sí mismo no es otra cosa que un razonamiento con ayuda
los europeos entraron en contacto con ellos por primera de 1 cual sometemos metódicamente nuestras ideas· a... la
vez? Los problemas de la antropología social son de tipo prueba de· los hechos. El razonamiento siempre es el mism~,
muy diferente. tanto en las ciencias que estudian a los seres vivos como
en las que se ocupan de los cuerpos inanimados .. Pero'" en.
cada clase de ciencia, los fenómenos varían y presentan
El objetivo del antropólogo social es usar el conoci- complejidad y dificultades de investigación propias»_
miento sobre las sociedades primitivas para. establecer ge- El interés teórico por la sociedad humana y stis.institu.-·
neralizaciones válidas y significativas sobre los fenómenos ciones no es nuevo. Los filósofos de China y. de Grecia for'-
sociales. En ese sentido es en el_ que podemos considerarla mularon teorías antes de la era cristiana. En la actualidad
como un tipo de· sociología .. Pero «sociología)> es una pala- existe una literatura, abundante sobre los temas de: la. filo'-
. bra enormemente ambigua; se aplica a escritos sobre la sofía social, la. filosofía. política, la filosofía de la liistoria;"
sociedad muy diferentes; gran parte de lo que se llama so- la. filosofía de la. religión y la filosofía del arte. El método
ciología tiene ppca o ninguna. relación con h1 antrop~logía . d~- razonamiento empleado·-en esas. materias::d~ebe}di~tin...:.
social. guirse del método experimental de razonamiento de: las
Auguste Comte fue quien inventó el nombre de «socio- ciencias naturales.
logía,>. Estaba convencido, como Saint-Simon antes que él. Una diferencia importante es la. de que, en lo que pode-·
de que es posible .aplicar al estudio de la. sociedad humana mos llamar el método filosófico de investigación, el objetivo
los mismos métodos· de investigación que se han aplicado suele ser: llegar a juicios de valor. Los filósofos suelen fu..te-
con tanto éxito al estudio de. los fenómenos físicos y bio- resarse por lo que. podrían o deberían ser las sociedades;..·
lógicos. Llamó. a aquella ciencia todavía inexistente primero intentan definir la. sociedad «buena)> o distinguen los siste-
física. social y después sociología. Pero el propio Comte no mas; de. moralidad, derecho, gobierno, economía,. r.eligiO:n
cultivó la sociología científica; lo que escribió puede consi- o arte inferiores de los superiores:.. La función de los. filó~-··
derarse más adecuadamente como filosofía de la hist01ia .. sofos consiste en. guiar las acciones de los hombres median-·
La idea de que podía existir una ciencia natural de la so- · te la discusió~ sobre los ffues deseables. El razonamiento
ciedad humana. se había acariciado desde el siglo xvrr. El experimental. nunca. puede aportarnos juicios ·de vaior; lo
objetivo declarado de la antropología social ha. sido contri- único q_ue pudo decirnos. es qué y cómo son. las . cosas,.
buir a la: formación de dicha ciencia. nunca qué cosas son buenas y cuáles malas. Nos puede· en-
Lo que caracteriza a las ciencias. naturales es el uso del señar los medios apropiados con vistas a. un fin. deseado;:
método de: razonamiento experimentar. Existe un error na nos puede decir: qué fines son deseables_ Si lo deseable
corriente .que· confunde el método experimental con la ex- es aniquilar: una ciudad y a sus: habitantes;· el método expe-
perimentación en el sentido de operaciones mediante las rimental puede. propor¡:ionarnos una bomba atómica ..
cuales el experimentador provoca un. fenómeno que nece- Existe una diferencia importante entre el método filo'-
sita observar; Pero el latín experiri significa exclusivamente sófico y el método experimental por el modo como llegarr
«poner a prueba». Lo que el método experimental es real- a constituir un corpus de generalizaciones que forman una
mente es un. método de investigación y razonamiento en teoria .. El método filosófico es el más antiguo. El método
que se ponen a prueba sistemáticamente las ideas srenerales experimental, después de unos comienzos vacilantes· en Ia
en· función. de los hechos observ:ados cuidadosamen~e~ Como antigua Grecia,. no llegó a: usarse plenamente hasta- finales·
dice Claude Bernard. en su Introduction al' étude de la méde- del siglo xvr en una obra como la de Galileo. Sústituyó ai '

154 155
método filosófico primero en la. mecánica, la astronomía. Y de formas de sociedad diferentes. Podemos llamar «socio-
la física, y después· en. la química y en las ciencias biológi- logía comparad~'> a ese estudio comparado. Es un tipo de
cas. El último intento importante de usar el método filo- sociología que ha progresado poco todavía,. y de ese tipo
sófico para explicar los fenómenos de la naturaleza fue la de sociología es del que podemos decir que la antropología
Filosofía de la Naturaleza de Hegel, y resulta interesante social es una parte. En_ caso de que ese tipo de sociOlogía
comparar los resultados a que llegó con los alcanzados comparada llegue alguna vez a convertirse en una materia.
por las ciencias naturales. Pero el método experimental establecida, y sólo entonces, se incorporará a ella la antro'"
todavía no ha sustituido al método filosófico a la hora pología sociaL
de crear teorías· de la sociedad. En la. sociología comparada el estudio sistemátiCo de las
Ambos métodos combinan la observación con el razona- formas -más simples-.- de sociedad de los que llamamos
miento; la diferencia entre ellos radica en la forma como pueblos primitivos es de gran valor e. importancia. Se debe
los combinan. Francis Bacon describió dicha diferencia. a muchas razones; una es la de que nos. revelarr formas de .
vida social muy· diferentes de la nuestra.. Las sociedades
_Sólo hay,y_puede haber,. dos modos de· investigar_ primitivas q:ue. todavía persisten están resultando ·destrui~
y descubrirla verdad. Uno pasa de los sentidos y los das o alteradas- rápidamente por su sometimiento ·a. los·
pormenores a los axiomas más generales, y de éstos a pueblos: más avanzados- técnican:lente. Esa es la razón por
los primeros principios y su verdad innegable, deter~ la que los antropólogos. sociales,. para intentar hacer con~
mfua y descubre axiomas medios; ése es el modo que tribuciones a. la sociología. comparada, dedican su~ atención
se usa actualmente~. El otro saca los axiomas de los sen- principal, aunque no exclusivamente, al estudio de esas for-
tidos y de los pormenores, ascendiendo uniformemen- mas primitivas de la sociedad, antes de que sea dem;;,tsiado
te. y paso a paso, de modo que al final llega a lo más tarde~ EI tiempo pasa. de prisa y los investigadores son.
· general; éste es eL modo auténtico; pero todavía. no pocos~.

· ensayado .. Ambos modos parten de los sentidos· y de El método experL.-nental -el úniCo cümtífico-- es un.
los pormenores y se apoyan en las proposiciones· más método para llegar a generalizaciones inductivas;_ La obser-
generales;- pero, a pesar de ello, diñeren enormemente, vación experimental es observación guiada por conceptos
puesto que uno trata- superficialmente de la experien- generales: Asf ·pues, la misión más importante. del cientf-.:.
. cia. y los· pormenores, mümtras· que el otro se familia- fico experimental es la de. inventar conceptos· generales o
riza con ellos debida y regularmente. Además, uno es- abstractos que aplicará al análisis de los hechos observa-
tablece desde el principio determinadas· generalidades dos y; así, podrá contrastar su valor científico. Mera obser--
abstractas e-inútiles; el otro se eleva paso a paso hasta vación y descripción: no pueden aportarnos conocimiento
las cosas qU:e' son más· familiares a la naturaleza (es- científico; y, sin embargo,. hay quienes piensan que la. acu_- .·.
. decir, las 'aostracciones más altas) 1:. mulación de observaciones producirán. algún día el avance .
de la ciencia .. Charles Darwin escribió: <qQué extraño re:-:-
Si hemos de llegar a alCanzar alguria vez el conocimiento sulta que no todo el mundo comprenda que cualquier
cientíÍico de la sociedad humana, será exclusivamente me- observación ha de ser a favor o en contra de una con-
. diante ei examen y comparación sistemáticos· de una serie cepción, para que pueda prestar algún. servicioh>. Tam-
bién, Claude Bernard escribió : «El método experimentar
l. Francis Bacon,. Novum organum. (1620), trad.. Andrew Johnson,
1859, Libro I, Aforismos XIX y XXII. El término "axiomas" (a:;;iomara) no puede aportar ideas nuevas y fructíferas a hombres q_ue .
usado por Bacon significa literalmente: "algo que vale la pena retener"~. carezcan de ellas; sólo puede servir para guiar las ideas de
es decir, generalización que· se· apoya en pruebas. Ahora los llamaría-
mos "leyes". hombres que las tengan, para dirigir las ideas y desarro-

156 1·¡;;-
~1
liarlas~ de modo que se consigan los mejores
posibles~. Así como sólo lo que se _ha sembrado en la
puede crecer en ella, así también lo único que ei método· · LOS PRECURSORES
experimental puede desarrollar es Io que se le ofrezca. El
método en sí. no produce nada. Algunos filósofos han co-
metido el error de atribuir demasiado poder al método en
ese sentido». Por último, podemos citar la afirmación de
Whewell: «Para obtener de los hechos alguna verdad gene-
ral es necesario que les apliquemos la idea apropiada que
establezca entre ellosrelaciones permanentes y definidasl>2.
Asfpues, lamis~ón de la sociología comparada, como la Desde el siglo XVI, las descripciones hechas por vütjeros
de cualquier ciencia experimental, es crear los conceptos de las costumbres de los pueblos de América, Mrica. y Asia
analítiCos apropiados err función de los cuales hacemos. ge- .atrajeron la atención de los hombres cultos de: Europa:.:
.neralizaciones, ct1ya:_relativac pro b~~ilíd:3:d puede . establecer~ c. c_Lo queJes· impresionó fue. la gran diversidad de fus. costum:....
se; cuando se contrastan sufiéi'~ntemente mediante observa- bres e instituciones de diferentes sociedades. El escritor
ciones· sistemáticas dé los fenómenos .. El dominio especial españoL Messie trató ese tema, y probablemente sus Lér;ons ·
de la antropología social es elestudio experii:nental, en ei diverses; traducidas al francés en 1552 por Claude Gruget,
sentido definido más arriba, de las sociedades primitivas .. sugirieran a Montaigne su ensayo «De la coutume,,, Jean
Bodin (1530-96) hizo un primer intento de explicar la. diver'- ·
sidad. de los pueblos en su obra Les si..:c livres de la: répu.,..
blique (1576), en la que sugeria que las· diferencias entre
los pueblos, incluidas las diferencias en su forma de· go-·
bierno,. podrían. deberse a diferencias. err las regiones" que
habitaban-, especialmente las diferencias de clima.. Esa idea
influyó en. Montesquieu y en. muchos escritores posteriores
y todavía la mantienen algunos geógrafos en la. actualidad_
Hacia comienzos del siglo XVII ya se había. desarrollado.
el interés por las especulaciones etnologicas .. Así como en. ei
siglo actUal Elliot Smith. y sus discípulos pensaban :que: _
podían seguir elrastro de la influencia de los antiguos- egip'-
cios por gran parte deia tierra, así también en épocas ante-
riores lo que se suponía haber encontrado en Asfa y· Amé:..
rica era el rastro. de las «tribus perdidas de Israeh~. Edward .
Brerewood, que había sido profesor de astronomía. err el
Gresham College de Londres, publicó en:, ló14 sus Enqui._-
ries T ouching the Diversity of Languages and. Religions
through the Chief: Parts of the W orld. En el capítulo XIII, .
sobre la. distribución de los judíos, rechaza.·la. hipótesis ·
de que los «tártaros)>, nombre que en aquella época serefé-
2.. 1Vovum organum renovatum . . Cf~ pág~ 181. ria a los habitantes de ~an parte d.e Asia, descendían. de
158 159
..
'·.·.,,·,- .
.,...,.

liarlas~ de modo que se consigan los mejores resultados: .


posibles~ Así. como sólo lo que se _ha sembrado en la tierra:'
puede crecer en ella, así también lo único que el método LOS PRECURSORES
experimental puede desarrollar es Io que se le ofrezca. El
método en sí. no produce nada. Algunos filósofos han co-
metido el error de atribuir demasiado poder al método en
ese sentido». Por último, podemos citar la afirmación de
Whewell: «Para. obtener de los hechos alguna verdad gene-
ral es necesario que les apliquemos la idea apropiada que
establezca entre ellos relaciones permanentes y definidas))2~
Así pues, lamis~ón de la sociología comparada, como la Desde el siglo XVI, las descripciones hechas por viajeros
de cualquier ciencia experimental, es crear los conceptos . de las costumbres de los pueblos de América, Mrica y Asia
analíticos apropiados en función de los cuales hacemos. ge- atrajeron la atención de los hombres cultos de~ Europa:~
neralizaciones, Ct1Ya;:_relativa. pro~~!Jilidad puede. establecer~ .. . Lo aueJes impresionó. fuela gran. diversidad de las costum;...
se, cuando se contrastan sufiCientemente mediante observa- bres~ e instituciones de diferentes sociedades .. · EI escritor
ciones sistemáticas de los fenómenos~. El dominio especial españoi Messie trató ese tema, y probablemente sus De9ons
de la antropología social es el estudio experimental, en el diverses~ traducidas al francés en 1552 por Claude Gruget,
sentido definido más arriba, de las sociedades primitivas .. sugirieran. a Montaigne su ensayo «De la coutume)>". Jean
Bodin (1530-96) hizo un prüner intento de explicar la diver•
sidad. de los pueblos en su. obra Les si:c livres de la~ répu-·
blique (1576), en la que sugería que las diferencias. entre:
los pueblos, incluidas las diferencias en su forma. de go-
bierno, podriarr. deberse a diferencias. en las regiones~ que
habitabarr, especialmente las diferencias de clima:.. Esa idea
influyó en: Montesquieu y en: muchos escritores posteriores
y todavía la mantienen algunos geógrafos en la. actualidad~
Hacia comienzos del siglo XVII ya se había desarrollado
el interés por las especulaciones etnológicas. Así como en el
siglo actUal Elliot Smith. y sus discípulos pensaban ·que· _
podían seguir el. rastro de la influencia de los antiguos. egip'-
cíos por gran parte de la tierra, así también. en épocas ante- .
riores.Io que se suponía haber encontrado en Asfa y· Amé:..
rica. era el rastro. de .las «tribus perdidas de Israeh ~- Edward: .
Brerewood, que había sido profesor de astronomía. en: el
Gresham College de· Londres,_ publicó en 1ó14 sus Enqui-·
ríes T ouching the Diversity of Languages and Religions
through the Chief Parts of the W orld. En el capítulo XIII,
sobre la distribución de los judíos, rechaza. ·la . hipótesis ·
de que los K tártaros», nombre que en aquella época se refe-
2. 1Vovum organum renovatum .. Cf~ pág. 181. ria a los habitantes de gran parte de Asia, descendían de

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las diez tribus de Israel. Sostiene que la costumbre de la algo diferente. En 1776 publicó su L'esprit des usages et
circuncisión «no es señal segura de procedencia de Israel». des coutumes des différ(mts peuples ou observations tirées
Por otro lado, supone que «los habitantes de América son des voyageurs et des historiens (3 vals.; a Londres, et se
de la progenie de los tártaros», es decir, que América estaba trouve a Paris). Al explicar el plan de su obra, observa que
poblada por hombres procedentes de las regiones nórdicas aunque se han escrito_ muchos libros sobre la humanidad,
de Asia. no se ha hecho una comparación general de las costumbres,
Mientras que la etnología se originó con esas especula- usos y leyes de los diferentes pueblos en que está dividida
ciones sobre las migraciones históricas de los pueblos, el la humanidad. Desea reparar esa omisión, y, a diferencia
método comparativo cuyo desarrollo posterior produjo la de los otros autores de libros sobre los usos de otros pue-
antropología social se originó en la idea de que las costum- blos, que se han ocupado sólo de sus aspectos extráños o
bres de un pueblo particular podrían resultar comprensi- ridículos, propone un nuevo método mediante el cual inves-
bles si se las comparaba con costumbres semejantes de tigar su mentalidad (esprit). Démeunier fue uno de los fun-
algún otro lugar. En 1703 apareció una obra titulada Con- dadores de la antropología social, a pesar de que en la
formité des coutumes des Indiens orientau.-c avec celles des actualídad sli obra está casi olvidada y raras veces se lee.
Juifs et des autres peuples de l'antiquité, traducida al in- En los autores de los siglos xvrry XVIII es fácil descubrir
glés en 1705. El autor dice que lo que le ha interesado ha dos tipos de interés por las sociedades salvajes, uno de los
sido «investigar sólo lo que los indios tienen en común cuales conduce en última instancia a la etnología y el otro
con otros pueblos antiguos, pero de fonna más especial a la antropología social. El Dr. William Robertson, rector
con los judíos», sin entrar en la cuestión de si las 'seme- de la universidad de Edinburgo e historiador oficial de Su
janzas que descubre fueron resultado de la penetración de Majestad para Escoda, reconoció esos dos intereses en su
los judíos en India «O si Dios, al dar una Ley a su Pueblo, History of America, publicada en dos volúmenes en 1777.
no le prescribiría muchas cosas que las otras naciones ya Robertson consideraba la cuestión etnológica del origen de
observaban por considerarlas buenas en sí mismas». En los indios americanos corno mucho menos importante que
1700, Natalis Alexander había publicado su Conformité des la utilización del conocimiento sobre ellos en un estudio
cérémonies chinoises avec l'idolatrie grecque et romatne. del progreso humano.
Una obra más importante fue la de Lafitau en 1729, Moeurs
des sauvages amériquains comparées aux moeurs des pre- Cuando los europeos descubrieron inesperadamen-
miers temps. Su objetivo era hacer comprensibles las cos- te un Nuevo,Mundo, enonnemente alejado de todas
tumbres de la antigüedad comparándolas con las de los las demás partes del continente- entonces conocido, y
indios americanos a los que había visitado. El presidente habitado por hombres cuyo aspecto y costumbres di-
de Brosses hizo una primera contribución al estudio com- ferían extraordinariamente del resto de la especie hu-
parado de las religiones, cuando en 1760 publicó su obra mana, de fonna natural la cuestión de su origen se
Du culte des dieux fétiches, ou parallele de l'ancienne re- convirtió en un, objeto de curiosidad y atención. Las
ligion de l'Egypte avec la religion actuelle de Nigritie. Su teorías y especulaciones de hombres de ingenio sobre
obra puso en circulación la palabra «fetichismo» para deno- este tema ocuparían muchos volúmenes; pero la mayo-
minar religiones corno las del Africa occidental. ría de ellas son tan infundadas y quiméricas, que el
El método adoptado en esas obras era comparar las cos- intento de enumerarlas o refutarlas constituiría u:n in-
tumbres de los pueblos existentes con las de los pueblos de sulto para el entendimiento de mis lectores [I, 265].
tiempos antiguos, los judíos,. los egipcios, o los griegos y La condición y carácter de los indígenas america-
los romanos. Jean-Nicolas Dérneunier (1751-1814) intentó nos, en la época en que los europeos llegaron a cono-

160 161
cerlos, merece consideración más atenta que la inves- Idea of Progress de J. B. Bury (1920) puede consultarse una
tigación de su origen. Esta última es un mero objeto relación de su .desarrollos_
de curiosidad, mientras que la primera es una de las Mediante la aceptación de la idea de progreso surgió
más importantes e instructivas investigaciones en que entre los pensadores del siglo XVIII la idea de que las insti-
puede ocuparse el filósofo o el historiador. Para com- tuciones sociales de la.humanidad -lenguaje, derecho, reli-
pletar la historia del entendimiento humano e inten- giones, etc.- tuvo un origen y desarrollo naturales, y que·
tar perfeccionar el conocimiento de su naturaleza y el estudio de las sociedades más simples descritas por los
operaciones, hemos de observar al hombre en todas viajeros proporcionaría medios para llegar a una mejor
las situaciones en que se ha visto colocado. Hemos de comprensión de la naturaleza y de la sociedad humanas.
seguirlo en su progreso a través de las diferentes eta- El siglo XVII había sido testigo de desarrollos inmensos del
pas de la sociedad, a medida que avanza gradualmente · conocimiento sobre 1~ naturaleza como resultado de la apli-
desde el estado infantil de su vida civil hacia su ma- cación del método de razonamiento experimental. Surgió
durez y ocaso [I, 281]. el deseo de aplicar el mismo método de investigación a la
vida humana. En 1739, David Hume calificaba su Treatise
Robertson nos da aquí una de las primeras definiciones of Human Nature de «intento de introducir el método de
del estudio que posteriormente pasó a llamarse antropolo- razonamiento experimental en el estudio de las cuestiones
gía social y a distinguirse de la investigación de los oríge- morales».
nes de los pueblos que conocemos con el nombre de etno- Podemos decir que la historia de la ciencia social mo-
logía. derna comienza con la obra de Montesquieu. Se había visto
El gran aumento del conocimiento sobre los habitantes influido profundamente por la filosofía cartesiana y desea-
de diferentes partes del mundo planteó a los pensadores ba ampliar la idea cartesiana de la leynatural a los hechos
un problema, el de explicar la gran diversidad en las for- sociales. En s~s Considerations sur les causes de la grandeur
mas de la sociedad humana. La respuesta a dicho problema des Romains et de leur décadence (1734), Montesquieu enun-
se encontró en la teoría del progreso o evolución humanos. ció, e intentó aplicar, la idea de que en los sucesos históri-
Esa teoría consiste en que a lo largo de la existencia de la cos, además de las ocasiones particulares que se consideran
humanidad en la tierra ha existido un desarrollo del cono- causas, existen causas generales. La misión del filósofo, o,
cimiento y de las instituciones sociales que ha avanzado de como ahora diríamos, del científico, es intentar descubrir
forma desigual en diferentes partes del mundo, y que, por dichas causas generales.
tanto, las sociedades salvajes y bárbaras de Africa, América En 1748, MorÍtesquieu publicó su libro más importante,
y Oceanía representan en sus características más generales De l' esprit des lois. Se proponía estudiar das leyes, las cos-
condiciones semejantes (pero no idénticas) a aquellas a tra- tumbres y los diferentes usos de todos los pueblos de la
vés de las cuales han pasado las sociedades más civilizadas. tierra. Podemos decir que el tema es inmenso, puesto que
Desde luego, la idea no era enteramente nueva. Lucrecio abarca todas las instituciones aceptadas entre los hom-
había enunciado la doctrina del avance progresivo de la bres» 1• El libro que escribió después de muchos años de
humanidad en las artes, y Tucídides había sugerido que las lecturas y reflexiones se ocupaba de las leyes y de la rela-
naciones bárbaras nos dan una idea de lo que han sido ción de las leyes de una sociedad con otros rasgos del sis-
las naciones civilizadas. Aunque en el siglo XVIII autores tema social. Existen muchas clases o tipos de sociedad, y
como Grotius, Fontenelle y John Locke expresaron ocasio- las leyes son diferentes según dichos tipos distintos. "La
nalmente la idea del progreso humano, hasta el siglo si-
guiente no se emprendió su desarrollo sistemático. En The l. The Spirit of La>vs, trad. Nugenr (Nueva York, 1949), pág. 293.

162 163
humanidad se ve influida por varias causas : por el clima, En la segunda mitad del siglo XVIII. hubo un grupo de
la religión, las. leyes, los diferentes preceptos del gobierno, autores británicos, muchos de ellos influidos por Montes-
por los precedentes, la moral y las costumbres que compo- quieu, que aceptaban la idea del progreso e intentaban des-
nen la mentalidad general de las naciones (esprit général) ... » arrollar un estudio .inductivo de las instituciones sociales
La hipótesis metodológica de Montesquieu es la de que los utilizando el conocimiento entonces disponible sobre «las
diferentes rasgos de la vida social de una sociedad están naciones toscas y bárbaras», que ahora llamamos «primi-
en relación mutua como partes de un todo o sistema, y pre- tivas». Adam Ferguson escribió un Essay on the History of
cisamente por haber formulado por primera vez y clara- Civil Society (1767) y trató del mismo tema en sus Princi-
mente esa· hipótesis es por lo que El espíritu de las leyes pies of Moral and Political Science (1792). John Millar, en
tiene tan gran importancia en la historia de la ciencia so- . su Origin of the Distinction of Ranks (1771) compara las
cial. Más adelante ver:emos que esa hipótesis es un principio instituciones sociales de rango, autoridad y propiedad en
conductor de la antropología social moderna. diferentes etapas de la evolución social que clasifica así :
Unos tres años después de la aparición de la obra de cazadores y pescadores, pastores, agricultores y comercian-
Montesquieu, Turgot formuló su teo·ría del progreso social tes. Otras obras fueron las de lord Monboddo, Of the
en su Plan de deux discours sur l'histoire universelle. A lo
Origin and Progress of Language (6 vols., 1773-92), y James
largo de la existencia de la humanidad ha habido progresos Dunbar, Essays of the History of Mankind in Rude and
alternados con episodios de decadencia. Nuestros propios
Uncultivated A.ges (1780).
antepasados y los predecesores de los antiguos griegos se
Adam Smith (1723-90) en sus conferencias sobre filosofía
parecían a los salvajes de América, tal como eran éstos
moral expuso una teoría general de la sociedad. La segunda
cuando se los descubrió. Vemos progresos en las artes cada
parte de dichas conferencias se publicó en 1759 con el título
día, y vemos también en unas partes del mundo pueblos
civilizados e ilustrados y en otras pueblos que vagan por de Theory of Moral Sentiments. La cuarta parte apareció
los bosques. Ha habido desigualdad de progreso en las dife- desarrollada en su Enquiry into the Nature and Causes of
rentes sectores de la humanidad. Los salvajes que viven de the Wealth of Nations, editada en 1776. La tercera parte
la caza no han avanzado tanto como los pueblos pastoriles trataba de la justicia y pretendía seguir la sugerencia de
o los cultivadores de la tierra. Un estudio atento de los Montesquieu e intentar «delinear el progreso gradual de
pueblos del mundo, pasados y presentes, nos permitirá la jurisprudencia, tanto pública como privada, desde las
crear una «Historia Universal» que abarcará el estudio de épocas más tosc.ils hasta las más refinadas, y señalar los
los sucesivos desarrollos progresivos de la especie humana efectos de las artes que contribuyen a su subsistencia y a
y los detalles de las causas que han contribuido a ellos, y la acumulación de la propiedad, al producir las correspon-
revelará la influencia de las causas generales y necesarias dientes mejoras y alteraciones en el derecho y en el gobier-
y la de las causas- particulares y de las acciones libres de no». Nunca llegó a acabar el libro que proyectaba sobre ese
grandes hombres, y la relación de todo ello con la consti- tema, pero en 1896 Edwin Cannan publicó notas recogidas
tución de la propia naturaleza--humana. por un estudiante sobre las conferencias que pronunció
Sin embargo, Turgot no continuó el estudio cuyo plan en 1763 con el título de Lectures on Justice, Police, Revenue
había trazado de joven. Su amigo y discípulo el marqués and Arms. Los Philosophical Essays de Smith, publicados
de Condorcet (1743-94) escribió en 1793 su Esquisse d'un en 1795, «eran, al parecer, partes de un proyecto que con-
tableau historique des pro gres de l' esprit hum.ain. Este es- cibió para ofrecer una historia coherente de las ciencias
bozo de la historia del progreso humano ejerció enorme liberales y de las artes refinadas».
influencia en el siglo xrx. En su introducción a los Philosophical Essays (1810),

164 165
,-·_ ·:::..
.. - ..·.

Dugaid Stewart define el objetivo que Adam Smith perse-


guía en sus escritos. nes; y a veces nuestras conclusiones a priori pueden
contribuir a confirmar la verosimilitud de los hechos~.
Cuando, en un período de la sociedad como éste que, en una observación superficial, parecían dudosos
en el que vivimos, comparamos nuestras adquisiciones o increíbles.
intelectuales, nuestras opiniones, costumbres e insti- A esa clase de investigación filosófica, que carece
tuciones, con las que predominan entre las tribus atra- de nombre apropiado en nuestra lengua, voy a tomar-
sadas, tiene por fuerza que ocurrírsenos una pregunta me la libertad de atribuirle la denominación de His-
interesante: ¿A través de qué etapas graduales se ha toria Teórica o Conjetural, expresión cuyo significado
realizado la transición desde los primeros y simples es- coincide casi exactamente con el_de Historia Natural,
fuerzos de la naturaleza sin cultivar hasta un estado tal como lo emplea Hume (véase su Historia natura[
de cosas tan maravillosamente artificial y complica- de la religión) y con lo que algunos autores franceses
do? ... ¿Cuándo se originaron las diferentes ciencias y llaman H istoire Raisonnée.
los rudimentos, hasta llegar a sus últimos y más refi-
nados perfeccionamientos? ¿Cuándo la asombrosa es- Dugald Stewart dice a continuación que hasta hace poco
tructura de la unión política; los principios fundamen-
tales que son comunes a todos los gobiernos; y las di- no se han considerado [temas como el del derecho ;¡
ferentes formas que la sociedad civilizada ha revestido el del E:obierno] desde este punto de vista. pues lama-
en diferentes épocas del mundo? Sobre la mayoría de yoría de los políticos antenores a Montesquieu se han
esos temas muy poca información podemos esperar contentado con una relación histórica de los hechos :v
de la historia; pues, mucho antes de la etapa de la so- con referir de forma vaga el derecho a la sabiduría de
ciedad en que los hombres empezaron a pensar en legisladores particulares o a circunstancias acciden-
recoger por escrito sus transacciones, muchas de las tales, que ahora resultan imposibles de comprobar.
etapas más importantes de su progreso ya se habían En cambio, Montesquieu consideró que las leyes se
producido. Quizá puedan recogerse unos cuantos he- originaban fundamentalmente en las circunstancias de
chos aislados a partir de las observaciones casuales la sociedad; e intentó explicar, a partir de los cambios
de los viajeros que hayan observado la organización de en la condición de la humanidad que se producen en
1as naciones atrasadas; pero es evidente que nada de lo las diferentes etapas de su progreso,. léJ:S alteraciones
que pueda obtenerse de esa forma se parecerá a una correspondientes que sufren las instituciones. Así, por
relación detallada, regular y coherente del progreso ejemplo, en sus aclaraciones ocasionales sobre la ju-
humano. Ante esa falta de testimonios directos, nos risprudencia romana, en lugar de internarse por la
vemos obligados a substituir los hechos. por conjetu- selva de la erudición de escoliastas y anticuarios, con
ras; y, cuando no podamos cerciorarnos sobre la forma frecuencia lo vemos tomar prestadas sus opiniones en
como los hombres se han comportado en determina- los lugares más remotos y aislados del globo, ·y combi-
das ocasiones, hemos de considerar de qué modo es nar las observaciones causales de los viajeros y nave-
más posible que hayan procedido, a partir de los prin- gantes incultos con un comentario filosófico sobre la
cipios de su naturaleza y de las circunstancias de su historia del derecho y de las costumbres.
situación exterior. En esas investigaciones, los hechos
aislados que los viajes nos proporcionan, pueden ser- El siglo XVIII había abierto un camino que conduce a las
vir con frecuencia de guías para nuestras especulado- investigaciones de la antropologí'a social o de la sociología
comparada. Se reconoció una nueva comprensión de la
166
1.47
III
·sociedad humana que se podía conseguir mediante la com-
paración de las diferentes formas de vida e instituciones LA FORMACION DE LA ANTROPOLOGIA SOCIAL.
sociales; existía la idea de progreso que proporcionaba una
explicación para aquella diversidad; hubo la contribución
de Montesquieu, según la cual en el desarrollo histórico
de las sociedades existen causas generales distintas de los
acontecimientos accidentales o de las ocasiones particula-
res; hubo la otra contribución de Montesquieu, según la
cual los diferentes rasgos de la vida social en una región y
época particulares están relacionados íntímamente para En un capítulo anterior hemos visto que en el siglo xvnr
formar una especie de unidad sistemática; finalmente, hubo el interés por los pueblos no europeos condujo a dos tipos
la idea de la «historia conjetural», que desempeñó un papel diferentes de investigación. Una de ellas se ocupaba de los
importante en los primeros desarrollos de la antropología orígenes históricos de pueblos como los habitantes de Nor-
social. teamérica, o los de las islas del Pacífico, o los aborigenes
Como fundamento de todo ello estaba la idea de que australianos y tasmanios. Esta evolucionó hasta convertirse
los fenómenos de la vida social de la humanidad podían en el siglo XIX en lo que es mejor denominar estudios etno-
estudiarse mediante los mismos métodos de investigación lógicos. La otra era una investigación filosófica sobre el
que habían producido un progreso tan grande al aplicarse progreso humano, y de ésta fue de la que se originó la a~­
a los fenómenos físicos y biológicos. La posibilidad y nece- tropología social.
sidad de un estudio positivo e inductivo de la sociedad La etnología apareció como rama científica reconocida
humana como un todo fue la esencia de las enseñanzas de hacia 1840 y se desarrolló muy rápidamente durante los
dos autores del siglo XIX, Saint-Simon y Comte. Ninguno cien años siguientes. Hubo un gran aumento continuo del
de ellos desarrolló realmente la ciencia sobre la que escri- conocimiento etnográfico, proporcionado al principio por
bieron; Saint-Simon fue uno de los fundadores del socia- viajeros y después por el trabajo de campo de los etnógra-
lismo e intentó establecer una nueva religión; su discípulo, fos. Lo que en los primeros tiempos habían sido «vitrinas
Comte, fue un filósofo que también fundó una nueva reli- de curiosidades» se convirtió en museos etnológicos, que
gión: el positivismo. Sin embargo, ambos fueron figuras pasaron a ser centros de estudios etnológicos. El siglo XIX
importantes del desarrollo de la ciencia social. Comte fue vio la aparición y rápido progreso de la arqueología prehis-
quien inventó el nombre de ·«Sociología» para la ciencia tórica. El interés por las diferencias .entre los pueblós del
positiva de la sociedad cuya creación esperaba ver. mundo y la idea de que sería posible reconstruir una his-
toria racial de la humanidad contribuyeron al desarrollo
de la antropología física. El estudio de la filología compa-
rada mostró que se pueden descubrir relaciones históricas
entre las lenguas.
. Una de las tareas de la etnología es la clasificación de
los pueblos en función de sus caracteres raciales, sus len-
guas y su cultura. Otra tarea relacionada con la anterior es
obtener conocimiento de la historia de los pueblos, sobre
los que no existen testimonios escritos, mediante inferencia

169
168
·~· .....·.
obtenida a partir de diversos tipos de pruebas circunstan-
Como ya hemos dicho, la antropología social tuv~ s~ ..
ciales. Es un tipo de estudio histórico que usa métodos -
diferentes de los dei historiador. Franz Boas, cuya enseñan- origen en la investigación filosófica del progreso humano
za ejerció enorme influencia en Estados Unidos, conside- y en los usos de la comparación que hemos ~itado en un.
raba ese tipo de estudio como parte de la antropología. capítulo anterior, repres~ntados, por l?s escntos de Mon-
Para él, la misión primordial de la antropología es «la tesquieu, de Brosses, Lafltau, Demeumer y otros. El re_co-
reconstrucción de la historia». «La ciencia de la antropo- nocimiento de la gran diversidad de formas de la vrda
logía», escribió, «trata de la historia de la sociedad humana. social de las instituciones, costumbres y creencias, fue el
unto' de partida. Las comparaciones entre los indios de
~orteamérica
Difiere de la historia, en el sentido estricto del término, en
que sus investigaciones no se limitan a los períodos sobre y los pueblos de la antigüedad, entre.las. co:-·
los cuales existen testimonios escritos ni a los pueblos que tumbres religiosas del antiguo Egipto y las del M~~~ occr-·
desarrollaron el arte de la escritura». Boas sostenía que un dental moderna, y entre diferentes pueblos no crv1hzad~s
rasgo de una sociedad «sólo se puede entender en función mostraron que, bajo la diversidad, se podían de~cubnr
de su pasado», de modo que el único tipo de explicación ciertas semejanzas. El objetivo del método compa~a:rvo· era
que se puede buscar en antropología es la explicación his- revelar dichas semejanzas entre los pueblos drstmtos Y
tórica, del tipo de la que proporciona la historia de los his- dispersos. Según Démeunier, la comparación de los uso~
toriadores. La explicación sociológica queda excluida. El de diferentes pueblos nos permitiría descubrir lo que _llamo
siguiente pasaje muestra la idea que Boas tenía del estudio s~ «espíritu» y hoy llamariamos su signif~cado. Lafi~au y
de la «antropología histórica». otros pensaban que las· costumbres de los tiempos antiguos
podrían entenderse mejor gracias a las se~~j~nzas que. ?re-
El objeto de nuestra investigación es descubrir los sentaban con costumbres de pueblos no crvrhzados de epo-
procesos mediante los cuales se han desarrollado de- cas recientes posteriores. Ese usó de la comparación se. ha
terminadas etapas de la cultura. Las costumbres y mantenido hasta la actualidad. Los estudiosos de la antigua
creencias no son los objetos fundamentales de la in- Grecia arrojaron luz sobre la sociedad de aquella época
vestigación. Deseamos descubrir las razones por la5 mediante comparaciones con rasgos de la vida social de
que existen dichas costumbres y creencias; en otras los pueblos primitivos. La rama dorada de Frazer, uno
palabras, deseamos descubrir la historia de su des- de los clásicos de la antropología social, comenzó como un
arrollo ... Un estudio detallado de las costumbres en intento de entender la costumbre por la cual en tiempos
· su relación con la cultura total de la tribu que las prac- antiguos el sacerdote del templo de Ne~i o.~tenía s": cargo
tica, unido a una investigación de su distribución geo- matando a su predecesor. Buscó la expbcac10n examman~o
gráfica entre las tribus vecinas, nos proporciona casi costumbres semejantes en otros lugares, lo que le conduJO
a investigar comparativamente muchas costumbres y creen--
siempre un· medio para determinar con considerable
exactitud las causas históricas que condujeron a la
~ias diferentes tanto de los pueblos no civilizados como de
los pueblos de la antigüedad.
formación de las costumbres en cuestión y a los proce-
sos sicológicos que intervenían en su desarrollo 1• Tan- El método comparativo, o el uso de paralelos entre los
hábitos y las costumbres de un pueblo y otro, que empezó
to si llamamos a este tipo de antropología «etnología»
a utilizarse en el siglo XVIII, suponía el principio enunciado
o <cantropología histórica», en cualquier caso es algo
diferentes de la antropología social. por Bergier en 1767 de que partout les hommes se ressem-
blent. En el siglo xrx recibió el nombre, pedante y enga-
ñoso, de «unidad síquica,> de la_ humanidad. El principio
l. Franz Boas, et al., General Anthropology (1938). Introducción.
real es el de que, como los seres humanos, tal como los
170
171
conocemos, son el mismo tipo de criaturas, es probable que, primitivas, había ciertos rasgos de costumbre y creencia
cuando están asociados en la vida social, creen en regio- que se encontraban en sociedades muy alejadas unas de
nes diferentes, e independientemente, formas de asociación otras y sin conexión o comunicación mutuas documentadas.
con semejanzas en sus instituciones. En consecuencia, no era posible explicar las semejanzas
Si deseamos una fecha, podemos escoger la de 1870 como debidas a lo que los etnólogos llaman «préstamo» o
como la del comienzo de la antropología social. Una de las «difusión>>, sino que requerían otro tipo de interpretación.
misiones del nuevo estudio era explorar las semejanzas de Así pues, el problema a que se enfrentaban los antropólo-
1os rasgos sociales en diferentes regiones mediante el es- aos sociales era el de cómo reducir las diferencias y seme-
'='
tudio de las fuentes etnográficas e históricas. Tylor recopiló janzas de costumbres y creencias sociales a alguna clase
Y comparó las diferentes creencias sobre el alma humana de orden.
Y su supervivencia después de la muerte. McLennan llamó La idea rectora que habían recibido del siglo anterior
la atención sobre la existencia en regiones diferentes de era la de progreso; así pues, el estudio del progreso se con~
una costumbre por la que cada uno de los grupos (clanes) virtió en la misión principal del estudio. Se reconoció, como
en que la sociedad estaba dividida, estaba asociado con una había señalado Comte, que para hacer un estudio del pro-
especie particular de animal o de planta, asociación que greso había que considerar a la humanidad como un todo.
se expresaba en el ritual o en los mitos. A esa clase de cos- En épocas diferentes regiones distintas hacen contribucio-
tumbres McLennan les dio el nombre de «totemismo>>. Fra- nes al desarrollo general del conocimiento humano o de
ze~, a petición de Robertson Smith, recopiló la información la vida humana. La región semítica, por ejemplo, fue la
ex1~t~~te sobre ella para un artículo de la Enciclopedia que proporcionó la forma de escritura alfabética que ahora
Bntanzca, que posteriormente se publicó en forma de li- está tan difundida.
bro en 1887 Y se amplió en 1910 para formar los cuatro El desarrollo progresivo de la humanidad puede verse
volúmenes de Totemism and Exogamy. Margan recopiló de la forma más fácil en las técnicas materiales. El general
los sistemas de nomenclatura usados para las relaciones Pitt-Rivers se interesó por el desarrollo de las armas, desde
de parentesco y matrimonio existentes en el mundo entero sus formas más sencillas hasta las más avanzadas. Regaló
y reveló las semejanzas dispersas por regiones muy aleja- su colección, ampliada para que incluyera muchos otros ti-
das de los que llamó <<sistemas clasificatorios». Frazer una pos de producciones materiales, a la Universidad de Oxford
vez _más ~ ~e:ición de Robertson Smith, y para la En~iclo­ como museo de tecnología comparada que sirviera para
pedza Bntanzca, recopiló los datos sobre las costumbres ilustrar los progresos de la humanidad, por lo que era
conocidas con el nombre de «tabú». Su obra La rama do- muv diferente de un museo etnológico que ilustre sobre las
rada, en su forma final ampliada, es un corpus de costum- fodnas de vida de los diferentes ~pueblos del mundo. En
bres Y. creencias ?rocederi.tes del mundo entero. En época algunos casos, el estudio de las técnicas puede dar una
P_ostenor ~omenzo una recopilación de datos sobre la creen- idea del orden del desarrollo. El arco compuesto constituye
Cia en la mmortalidad, de la que, sin embargo, sólo com- un progreso con respecto al arco simple; la ballesta deri-
pletó dos volúmenes.
vaba del arco ordinario. Así podían presentarse las etapas
Aquel examen exploratorio de. costumbres y creencias sucesivas del avance técnico.
~ara mostrar su diversidad y semejanzas subvacentes cons- En el siglo pasado se supuso que los pasos o etapas
tl tuyó 1~ principal contribución de los prime;os an tropólo- sucesivas de Comte habían producido una teoría del pro-
g?s. socwles a la formación del tema como disciplina me- greso en el pensamiento humano, la teoría de las tres eta-
todJca. Una cosa que reveló' aquella labor de recopilación pas. La primera etapa era la de la religión, dividida, a su
fue que , a· pesar d e l a gran diversidad de las sociedades
vez, en tres, representadas por la religión de los salvajes
1.,...,
1.:..
173
a la que Comte denominó fetichismo, por el politeísmo que· cionista» para referirse a esas teorías de las etapas sl1ce-
sucedió a ésta y por el monoteísmo que le sucedió; Ia sivas. En realidad, se basan en la concepción ·del progres<?··
segunda etapa era la de la metafísica; la tercera y última Margan, por ejemplo, concebía la historia de la humanidad
etapa iba a ser la del positivismo, en la que el pensamiento como un proceso de perfeccionamiento material y moral
n.o estaría controlado ni por la religión ni por la metafísica, continuo. Dichas· teorías se oponen directamente a la idea
smo por la ciencia positiva. de evolución social, pues un rasgo esencial de la evolución
La esperanza de descubrir etapas sucesivas de desarrollo es el de que es un proceso de desarrollo divergente. Todas
en las instituciones produjo hipótesis especulativas, que se las formas de sociedad existentes en tiempos recientes re-
convirtieron en obstáculos graves para el desarrollo de una presentan el resultado final de dicho desarrollo divergente,
antropología social científica. Un ejemplo lo constituve lo de igual forma que los insectos, las aves y los mamíferos
que se l.lamó la teoría matriarcal. Se descubrió que en "'algu- representan el resultado final de los desarrollos divergentes
nas sociedades la filiación, la sucesión y la herencia de la de la evolución orgánica. Por otro lado, el progreso, como
propiedad podían transmitirse por la línea femenina de proceso de perfeccionamiento, se concibe a lo largo de una
modo que un hombre pertenecería al· grupo del he~ano única trayectoria, como el perfeccionamiento paso a paso
de su madre o podría heredar la propiedad o la posición de las condiciones de la vida social.
social de éste. La hipótesis era que esas condiciones repre- La antropología social primitiva heredó del siglo XVIII
sentaban supervivencias de una primera condición de la la idea de la «historia conjetural», la idea de que el origen
sociedad, de cuya existencia no hay la más mínima prue- y desarrollo de determinado rasgo de la vida social puede
ba, en la cual el parentesco se contaba exclusivamente a tra- descubrirse gracias al razonamiento a priori a partir de los
vés de las mujeres y no· se reconocía relación entre el padre «principios conocidos de la naturaleza humana)). La· supo-
Y el hijo. Dicha hipótesis, formulada independientemente sición consiste en que, puesto que sabemos cómo actúan y
por Bachofen y McLennan, y desgraciadamente aceptada por piensan los seres humanos, podemos hacernos una idea
todos los autores, por Tylor, Frazer, Margan, Dur.kheim y bastante aproximada de cómo llegaron a crear determinada
muchos otros, entorpeció enormemente el estudio del pa- creencia, costumbre o institución social. Así pues, en la
r~nt7~co. ha~ta el comienzo de este siglo, e incluso después antropología primitiva el origen de varios rasgos de la vida
siguio eJerciendo una influencia perniciosa no sólo sobre social era un tema de especulación constante. Hubo varias
la teorización sino también sobre la observación. teorías sobre el origen de la religión. Tylor ofreció una
Un ejempl_o más destacado de aquel intento por parte teoría sobre el origen de la creencia en la supervivencia del
de los antropologos de establecer mediante el razonamiento alma después de' la muerte del cuerpo. Quizás el mejor
a priori un orden de sucesión de las instituciones sociales ejempl() de ese tipo de cosas lo proporcione el totemis~o,
o d~ las formas de la sociedad lo constituye la obra Ancient cuyo origen pasó a ser un tema favorito de. especulación y
. Soc~ety del ameriCano Lewis Margan, publicada en 1877. discusión. Van Gennep, en un examen de conjunto del tema
Haciendo uso de su extenso conocimiento etnográfico · _ en 1920, pudo enumerar treinta y nueve teorías sobre el ori-
· f ul ,m
tento orm ar un esquema de las etapas sucesivas del gen del totemismo que se habían lanzado desde 1870 hasta .
desarrollo ~umano, que -según pensaba- representaban la fecha. Cada autor que se ocupó del tema lanzó su propia
pu.eblos eXIstentes. Sus teorías eran absolutamente acien- teoría. Había gran abundancia de hipótesis y una falta abso-
tíficas Y ahistóricas, pero tenían cierto encanto. romántico luta de consenso.
y, tal como las presentó Engels, actualmente son una parte A finales del siglo XIX algunos estudiosos del tema em-
esencial del marxismo ortodoxo. pezaron a pensar que aquellas especulaciones sobre el ori-
Con frecuencia se usa la expresión «antropología evolu- gen de los rasgos de la vida social, o sobre el orden de
174
175
desarrollo de las instituciones, en lugar de contribuir- antropología social. Este último es especialmente impor-
avance de la ciencia, lo obstaculizaban. Si la antropología .·.· tante como iniciador del estudio sociológico de la reli-
social había de ser una ciencia experimental, debía admitir .gión en su obra sobre la religión semítica.
sólo hipótesis experimentales y negarse a considerar cuales- A finales del siglo xrx la antropología social inglesa re-
quiera otras. Una hipótesis experimental es la que puede cibió una profunda influencia de la obra de Emile Durk-
contrastarse por referencia a observaciones. Resulta impo- heim y los autores que colaboraron con él en L'Année So-
sible poner. a prueba las hipótesis sobre los origenes. o so- ciologique. Durkheim había recibido la influencia no sólo
bre la sucesión de las instituciones sociales, ni mediante de Montesquieu y Comte, sino también de autores ingleses,
testimonios históricos ni mediante la observación de las Herbert Spencer, Robertson Smith, Frazer y otros. El ob-
sociedades existentes. En consecuencia, no hay lugar para jetivo de su vida y de su obra fue poner los fundamentos
ellas en un estudio experimental. firmes de una ciencia de la sociología comparada, y reco-
La idea de «origen» presenta un carácter ambiguo. Se noció la inmensa importancia para dicha ciencia del estu-
puede considerar que significa las condiciones y aconteci- dio sistemático de las formas de la vida social o de los
mientos particulares por las que determinado rasgo de la pueblos primitivos o no civilizados.
vida social, como, por ejemplo, el totemismo, apareció en Los sociólogos franceses criticaban los métodos y las
una región y época particulares, su origen histórico. O pue- teorías de los antropólogos sociales ingleses. Una de sus
de existir una concepción de un proceso causal repetido, criticas era la de que, al centrar su atención en las cuestio-
de modo que, por ejemplo, el mismo tipo de proceso causal nes del origen, desatendían· cualquier clase de estudio de
habría producido el totemismo en épocas y regiones dife- la función social de las instituciones, costumbres y creen-
rentes. Los orígenes históricos sólo pueden descubrirse me- cias de que trataban. Dos costumbres que pueden parecer
diante las investigaciones históricas. Una hipótesis sobre semejantes pueden desempeñar funciones diferentes en las
el origen causal sólo puede basarse en la observación efec~ sociedades en las que existan, por lo que no serán compa-
tiva de por lo menos un ejemplo del proceso. Las teorias rables propiamente. Sólo se puede descubrir la función me-
sobre el origen lanzadas en el siglo pasado no proporciona- diante el examen del lugar que ocupa en el sistema social
ban ni conocimiento histórico ni científico. . de que forma parte.
La mayoria de las veces las teorias sobre el orie:en de · Otra crítica era la· de que muchas de las teorias de los
determinada categoría de costumbres se basaban ;n una antropólogos eran sicológicas más que sociológicas y se
suposición no expresa sobre la naturaleza de las costum- basaban en una sicología intelectualista. Los sociólogos
bres en 1cuestión. La teoría de Tylor sobre el origen de la franceses sostenían que los fenómenos sociales necesitan
religión se basaba en su concepción de la religión como explicación sociológica, que para entender la religión, por
conjunto de creencias a las que se había llegado mediante ejemplo, hay que estudiarla como un fenómeno social es-
procesos de razonamiento erróneos. Las teorias sobre el pecífico. Robertson había sido el iniciador de esa posición
origen del totemismo se basaban en suposiciones sobre la y Durkheim reconoció la influencia de dicho autor en su
naturaleza de las creencias y prácticas totémicas. En lugar obra. Una religión particular debe examinarse como parte
de las especulaciones del siglo pasado sobre los orígenes, del sistema social en el que exista, y no puede explicarse
los antropólogos de este siglo se ocupaban de los problemas mediante teorias sicológicas. Esto es pura y simplemente
de determinar la naturaleza de las instituciones, costum- una aplicación más desarrollada de la concepción que tenía
bres y creencias encontradas en las sociedades primitivas. Montesquieu del derecho. Así, el totemismo en Australia, o
Historiadores como Fuste! de Coulanges, Henry Maine y el culto a los antepasados en_ una tribu africana se han
Robertson Smith hicieron contribuciones importantes a la examinado en su función social, en el papel que desempe-

176 177
ñan en una sociedad organizada de determinada manera~
Otra influencia importantes fue la de A. C. Haddon, de· . nuo de investigación. El antropólogo teórico _que no haya
Cambridge. Criticó el método comparativo, tal como lo usa- · ·d durante un tiempo en contacto contmuo con un
ron Frazer y otros, e insistió en la necesidad de que los VI~b~o primitivo estará en una situación _de grave desven-
estudios comparados se basaran en lo que llamaba «estu- ~aja para intentar usar el material proporcwnado por otr~s.
dios intensivos de las sociedades particulares». Haddon co- En consecuencia,· ahora se reconoce que una parte .esencial
menzó su carrera como zoólogo, y sabía perfectamente que de 1a preparacwn· , de un antropólogo social es reahzar d por1
la morfología y fisiología comparadas tienen que basarse lo menos una investigación de campo. Por. otro la o, e
en estudios anatómicos y fisiológicos cuidadosos de especies ·nvesticrador de campo tiene que estar eqmpado c~n un
particulares. Sostenía que gran parte de los datos usados
1
conoCl
-~liento de las teorías e hipótesis de la matena. Su
1 h. , . . t t s
por los antropólogos sociales eran de valor dudoso y poco misión consiste en poner a prueba as 1potes1s e.us en e
dignos de crédito, dado que procedían, no de descripciones basándose en sus observaciones, que, a su vez, pue~en p_o-
de observadores con preparación científica, sino de misio- nerse a prueba mediante estudios comparados y oosena-
neros y viajeros que carecían de preparación para la ob- ciones sobre otras sociedades. .
servación de los hechos sociales. Además, afirmaba que, Esencialmente, la antropología social c~ns1ste en ~a com-
para entender cualquier costumbre o creencia de una socie- paración de diferentes formas de vida socral, d~ socredades
dad primitiva, no basta con compararla con casos semejan- primitivas unas con otras, con sociedades antiguas s?bre ,,
:i
'!
tes de otro lugar, sino que hay que estudiada también en las que tenemos conocimiento histórico y con las s~~reda­
su relación con el sistema particular de costumbres v creen- des avanzadas actuales. El objetivo de la comparac1_on
dichos estudios es obtener clasificaciones y generalizacio-
:n
cias de que forma parte. Por tanto, lo que se necesitaba era
trabajo de campo realizado por investigadores adecuada- nes· podemos llamar a eso uso «sistemático». Pero las com-
mente preparados cuya misión consistiría no sólo en recris- par~ciones pueden usarse para el obje~iv~ ~ompleta~e_nte
::o
trar los rasgos de la vida social, sino también en interpre- diferente de formular una hipótesis h1stonca o gene~1ca.
tarlos mediante un análisis de sus influencias mutuas. La Los dos métodos comparativos diferentes puede~ Ilus-
expedición de Cambridge al estrecho de Torres en 1898· trarse adecuadamente mediante el ejemplo del estudro ~el
señaló el comienzo de una nueva fase en el desarrollo de la lenguaje. El siglo xrx fue testigo del de~~rrollo de la lm- .. ¡
antropología social. Desgraciadamente, Haddon pensaba que güística histórica. Mediante la compar~cwn de_ lenguas se
la persona idónea para interpretar las costumbres y creen- puede mostrar que algunas de ellas estan relacronadas <<g~­
óas sociales sería un sicólogo que acompañaba a la expe- néticamente». Se puede demostrar que las lengua~ germa-
dición; aquella sección del informe nunca llegó a publicarse nicas (inglés, holandés, alemán, noruego, etc.) tuvieron un
ni a escribirse siquiera. Pero los investigadores de campo origen común en determinado momento del ~asado, Y los
del siglo xx pusieron en práctica las ideas de Haddon. lingilistas han podido mostrar que la mayona de las _Ien-
En el siglo XIX la labor teórica en antropología social gu;s de Europa y muchas de la India tienen un onge~
estuvo separada de la labor de observación. El antropólogo común. Las lenguas se clasifican genéticamente e~ «fann-
teórico no se encargaba personalmente de la observación lias» y «ramas>> de familias, y las lenguas germámcas. son
de las sociedades primitivas, sino que recopilaba hechos una rama de la familia indoeuropea. Desde 1880 aproxm~a­
procedentes de los escritos de otros. Sobre esa base no se damente apareció un tipo diferente de estudio del lengu~Je,
puede establecer una ciencia satisfactoria; pues en el mé- la Iinwística general, que actualmente es una rama cl_e_n-
todo experimental el razonamiento, el análisis y la obser- tífica ~establecida. En este estudio se usa la comparacwn
vación van combinados íntimamente en un proceso conti- de unas len!::uas con otras, no para descubrir relaciones his-
tóricas o g;néticas entre ellas, sino par:1 descubrir Y for-
178
179
mular 'las características generales del I . .
e · 1d e , enguaJe como
specra e J.enomenos sociales. Su ob. etivo e . ..
una clasificación genética sino una
tipos morfológicos. '
T el
~, reahzar, no .
asr rcacwn mediante·
LA ESTRUCTURA SOCIAL
La «reconstrucción» de la histori
las actividades del antropólogo socia~ no entr~ _dentro de
encarguen de ella los etnólo os ar ' ~uede aeJar que se
lagos históricos» El uso d lg ' queologos Y «antropó-
' e a com a ·,
antropólogo social es sem . t p racwn por parte del
eJan e a su uso en la ¡· .. , .
general o en la zoologr'a co d . mgurstrca
m para a Su ob · t" ll
generalizacionAs válidas s b 1 . Je rvo es egar a
y de los f ,~ . o re a naturaleza de la sociedad
enomenos socrales d. .
tico de las semejanzas y 1 ~-~ rant~ el estudio sistemá- Whewell, en su Novum organon renovatum 1, define la
de la genera,lización abstra;: 1 er~n~ras. Mediante el uso ciencia inductiva com «la aplicación de ideas claras y apro-
ticas más gener~les e . la se drstmguen las caracterís- piadas a un conjunto de hechos», y dice que requiere un
' sencra es y pe
social de las accidental . nnanentes de la vida proceso doble de «explicación de los conceptos» y «COne-
. es Y vanables.
. Ha habido quienes han pensado , xión de los hechos». Cada ciencia ha de avanzar por medio
diar las sociedades de lo 1 . que la razon para estu- de sus conceptos apropiados, lo que requiere la creación de
1arse, así, Jas condicioness sa VaJes . 1 d
es la d d
e que pue en reve- un sistema coherente de términos técnicos. «En una ciencia
,
d e epocas . socia es e nu t
antiguas. La com ., es ros antepasados avanzada, la historia del lenguaje de la ciencia es la his-
de la evolución acaba con pr~ndswn correcta de la teoría toria de la propia ciencia... El principio fundamental y
.
lranos esa 1 ea Los b ,
no representan un d . a ongenes austra"" norma suprema de una terminología científica es que los
d amos, sino una raza es a raza e la qu ·
. 1" d e nosotros deseen. términos han de crearse y asignarse de modo que sean
. pecra rza a result d .
genera racial que se ha prod "d ante e la diVer- adecuados para enunciar simple y claramente una propo-
sapiens. De igual modo 1 f ucr o en la especie del horno sición general cierta». La antropología social todavía no
• a onna de la s · d d es una ciencia avanzada; todavía no tiene un sistema cohe-
es una fonna especializada u , ocre a australiana
gente que es un rasgo q_ el resulto del desarrollo diver- rente de conceptos denotados por términos técnicos acepta-
esenc¡a de la e 1 . ,
su condición de forma esp . 1. d vo ucwn social. Por dos y usados con el mismo sentido por todos los estudio-
1o que la sociedad de los ecra b ,
rza a -no .,
anc ....stra1- es por sos de la materia. Eso es resultado, y al mismo tiempo señal,
para el e;tudio comparad~. ~~l~enes australianos es valiosa de la inmadurez de'la ciencia. Una de las dificultades con
un conocimiento científico d 1 eseamos llegar a conseguir que ha de enfrentarse el lector de la literatura antropológica
humana, sólo podemos 'L el a nat~raleza de la sociedad es el hecho de que diferentes autores usen la misma palabra
. , nacer o medrant 1
srstematica de tipos d"f e a comparación con significados distintos, y a veces muchos términos antro-
d I.ferentes sean meJ"or . I erentes de soci d d
A , e a ' y cuanto más pológicos se usan de forma ambigua o siri definición pre-
· sr como el t d· d
menos evolucionadas d 1
e a vr"d a 0 es, u· ro e las formas
cisa.
.
b wlocrra , , .
asr tamb. , 1 rgamca es es en eral en Para evitar el pensamiento confuso y acientífico, es ne-
. "" ' ren e estudio de 1 f
cwnadas de la sociedad . as armas menos evolu- cesario obtener, y tener en cuenta constantemente, una idea
socioiogía. . es esencral para una ciencia de la clara de la naturaleza de la realidad empírica de que tene-
mos que tratar en la antropología social, y a la cual deben
referirse todos nuestros conceptos y teorías. Sólo de esa

ISO l. 3.· ed., 1858.

181
una época deterririnada sin hacer referencia· a· los cambios
de sus rasgos generales, de una descripción diacrónica, que
de lugar» que resulta d: tra~cla e la «conc~eteness
forma podemos evitar 1 fal . d
fueran realidad ar las abstracciOnes como describe dichos cambios·.
es concretas error 1 Dos conceptos muy importantes son el de estructura so-
evitar. Existe la tende . ' . que resu ta difícil de cial y el de organización social. El concepto de estructura
· ncia a concebir la · d d
sx fueran entidades ¿· . . . s ((sacie a es» como se refiere a la distribución de las partes o componentes re-
Iscontmuas mdepe di
d e Aristóteles para . n entes. Eso deriva lacionados mutuamente en una unidad más amplia. Pode-
.· ' qmen una sociedad k .
po l ztzke, una
. asociación pol't" 1 1ca como la ciud era unad doznonia rnos hablar de la estructura de una casa, con lo que nos
ga. El conJunto de persa . a -esta o grie- referirnos a la distribución de las paredes, techo, habita-
nas que VIven en d
na d
. a y están sometidas a una autoridad una1'zona . , eterrni-
. ciones, escaleras, pasillos, etc., y, en última instancia, a una
Simplemente un tipo de . . ., po 1t1ca umca es distribución de los ladrillos, piedras, maderas, etc. Pode-
asoc1acwn Podrí
((¿ E s e1 Imperio Br"t' . " ·. amos preguntar: rnos hablar de la estructura de una obra musical como dis-
. I amco una socied d" . ,
sociedades distintas lo inte :> a _o, SI no, cuantas tribución de sonidos sucesivos, y podernos decir que la es-
asociación religiosa o ecl g~~n._». La Iglesia Romana, como tructura de una fuga o sonata es semejante. en la forma
como una asociación pol';.siasdticla, es tanto una sociedad a la de otra. La estructura de una molécula es la distribu-
1 xca e tipo de Est d U "d
E s necesario evitar la tend . a os m os. ción de sus átomos componentes unos en relación con los
como entidades disconf encxa a considerar las sociedades
muas, como hizo H b S otros. La estructura de un cuerpo humano es, en primer
L. a realidad empírica de u er ert pencer. lugar, una distribución de tejidos y órganos, pero, en última
mediante la descripción elq e 'tl:~ta la antropología social, instañcia, es una distribución de células vivas y muertas y·
d . • ana ISIS y los e t d ·
ra os, es el proceso de 1 "d . s u lOS campa-
nada durante un· dete a_ VI da soci~l de una región determi- de fluidos intersticiales.
Los componentes en última instancia de la estructura
. rmma o penado de t" L
socia1 como realidad feno meiilca , . es un pro Iempo. á vida social son seres humanos individuales considerados como
pone de una multitud d . fl . ceso que se· com- actores en la vida social, es decir, como personas, y la es-
. e m uencias mutu d .
com b madas. Los acontecimi . as y e acciOnes tructura consiste en la· distribución de las personas unas en
social son los hechos 1 entos particulares de la vida relación con las otras. Los habitantes de Europa están
a os que debemo 1· "
tros conceptos y teoría p h s ap Icar todos nues- distribuidos en naciones, lo que constituye, por tanto, un .¡''
vida social debemos des. "ba:a _acer una descripción de la !
sen Ir Ciertos r rasgo estructural de la vida social de Europa. En una aldea . ¡

parezcan importantes o . asgos generales que podemos encontrar una distribución de personas en fami- \
. pertmentes para .
gacwnes, y esas dese . . nuestras mvesti- lias, lo que constituye una vez más un rasgo social. En una
npcwnes ge 1· d .. -l
proporcionan los datos d 1 . ?"era Iza as son las que familia, la estructura se compone de las relaciones mutuas .
!

importancia la forma e a Ciencia. Es evidente que tiene


como se bt" · entre el padre, la madre y los hijos. ·
procedan de la .observac·, di o xenen dichos datos, ya Así pues, al buscar los rasgos estructurales de la vida
u1 d IOn recta o de 1 h h
e ares, e las manifestaciones d . . os ec os partí- social, buscamos primero la existencia de grupos sociales
testimonios históricos. e los mformadores o de los de todas clases, y examinamos también la estructura interna.
li de los grupos que encontremos. Pero, además de la distribu-
vidaDurante
social un
de' período
una . ,m1"t a d 0 _los rasgos generales de la
· regwn particular d ción de las personas en grupos y dentro de dichos grupos;
ma1terados o pueden ca b. pue en permanecer encontramos también una distribución en clases y catego-
tancia. En otros casos ~s Iar_ eln aspectos de poca impar- rías sociales. Las distinciones sociales entre hombres y
, d f" . , pecxa mente si t .
no O SU lCientemente am l" h b , ornarnos un pe- mujeres, entre jefes o nobles y súbditos, entre patriarcas
en algunos rasgos p d p Io,_ a ra cambios importantes Y plebeyos, entre brahmanes, sudras e intocables, son ras-
• 0 emos dxst · ·
crónica, en la .que se t 1 l?guxr una descripción sin-
ama a vxda social tal como es en 183
182
gos estructurales importantes, si bien no podemos decir
. . q~.
constrtuyan ~pos so~mles. Además, un rasgo estructural· estructura del ejército. La organizac10n del ejército con-
de la mayor unportancra es la distribución de las persona siste en la asignación de actividades de diferentes tipos a
en relaciones diádicas, de persona a persona, como las exis~ los grupos y a los individuos, ya sea en época de paz o du-
tentes en_tr~ ~I amo y el criado, o, en el caso de las socie- rante las operaciones militares efectivas. Un ejército mo-
dades pnmrtivas, entre el hermano de la madre y el h'· derno es el mejor ejemplo de una estructura enormemente
d 1 h E '1 . . lJO
e a erm~na. n u trmas mstancias, una estructura social organizada; un Estado socialista tendría que ser algo se-
se revela bren en las influencias mutuas entre los grupos mejante.
cuando una nación entra en guerra con otra br'e · ' La mejor forma de mostrar claramente lo que es el con-
fl · , n en m-
uencras mutuas entre las personas. ceoto de estructura social es poner un ejemplo, y podemos
d
Mientras que la estructura se refiere a d' t 'b ·
IS n uc10nes to~ar el sistema estructural de las tribus de una parte de
e . p:rsonas, la organización se refiere a distribución de Australia occidental, tal como era en otra época. La base
activrdades. Podemos decir que un 3·ardinero 0 esencial de la estructura la proporcionaba la división del
. . un campe-
Sino orgamza _su. propio trabajo cuando asigna diferentes país en una serie de territorios distintos y delimitados.
tareas a las drstintas estaciones del an- 0 La · ·, Cada hombre pertenecía, por nacimiento y durante toda
. . · orgamzac10n
socral es la drstribución de las actividades de dos 0 más su vida al de su padre y al del padre de su padre. Los hom-
p~rsonas que .se amoldan para componer una actividad com- bres así relacionados con un territorio particular consti-
b:na_da. Un ~Jemplo es la organización del trabajo en una tuían un grupo social distinto que llamamos «clan», y ésa
f~bnca, medr~nte la cual el gerente, el capataz, los obreros e.ra una unidad de importancia fundamental en la estruc-
tienen que eJecutar determinadas tareas propias de cad~ tura social. Una mujer pertenecía también al clan de su
uno ~e ellos como parte de una actividad total. Un grupo padre, pero como el matrimonio entre personas de un mis-
orgamzado, que puede componerse de dos personas única- mo clan estaba prohibido, las mujeres se casaban con hom-
me?t_e, es aquel en que los miembros se combinan en una bres de otros clanes y pasaban a pertenecer al territorio i!
;ctr~r~ad conj~nta en la cual cada uno tiene asignada una del marido.
LUncwn. No oostante, no podemos considerar dichos o-m- Los hombres de un clan, junto con sus esposas, proce- ¡]·:1.

1
pos como rasgos de la estructura social a o dentes de otros clanes, y sus hijos, formaban un grupo que [
+ • , no ser que pre- ¡;¡
sence~ crerta permanencia. Un equipo de fútbol es un o-ru convenimos en llamar horda, que ocupaba el territorio del "¡:¡
orgamzado, pero la congregación de gentes que ayudanp~ clan. La horda acampaba agrupada como una unidad tanto ·
sacar de una zanja un coche volcado no lo es en su propio país como cuando estaba de visita en territo-
!!
Podemos ilustrar esos conceptos de estruc~ rios amigos. Podemos decir que una horda era políticamen-
nización mediante el eJ· emplo del . , . d ura y orga-
. ejercito mo emo. La es- te autónoma, estaba sometida a la autoridad de los ancia-.
tructura consrste, en primer lucrar en la di'st 'b . , nos, y era autosuficiente económicamente. Probablemente
o- d' · · o ' n uc10n en
on:~os: r;rsiOnes, cuerpos de ejército, regimientos, com- no superara, por regla general, la cifra de cincuenta per-
pamas, rcetera; y, en segundo lugar, en la distribución del sonas.
;ersona en graduaciones: generales,. coroneles, comandan- La estructura interna de la horda era una división en
._es, cabos, «otras graduaciones>> etc Una grad ., familias, cada una de las cuales se componía de un hombr2
'~ .1 ' · uac10n no es
. n grupo, os comandantes, por ejemplo no const·t con su esposa o esposas y sus hijos(as) pequeños. Era un
·vruoo . 1 . ' r uven un
::;. . socra ' Sino una cateo-oría social com 1 "f grupo doméstico sometido a la autoridad del hombre, que
1 · o ' o os onta-
:er~s, ~S l~presores O los catedráticos de universidad p r disponía de su propio hogar y abrigo y de su propio sumi-
:a drstnbuCión en o- d · · e .. o
ora uacwnes es un rasgo esencial de la nistro de comida. La familia como grupo se formaba con
~34
el matrimonio y el nacimiento de los hijos y finalizaba

185
--·· ....

c~mo g~po· s_epara~o a la_ muerte del marido, con lo que torio y vivir con la horda, a pesar de no ser miembro del
solo tema existencia contmuada durante un número d · · clan ni poder llegar a serlo. Miembro!:¡ diferentes de un clan·
años . limitado.
. El clan era un grupo permanente, que 1ose determinado estaban vinculados de esa forma con otros
propios nativos consideraban había nacido al comienzo del clanes distintos. La misma consecuencia se desprendía del
mundo y era eterno; a medida que iba perdiendo miembros hecho de que un hombre estuviera vinculado con el clan
po~ defunción, el nacimiento de nuevos miembros sustituía de su madre y con el clan del que procedía su esposa. Cada
a estos. L~ _con~inuidad de la horda como grupo de perso- persona tenía su posición particular en la estructura , de
nas qu~ Vlvran JUntas de forma regular era algo diferente. parentesco total. Incluso dos hermanos de sangre pod1an
Los miembros masculinos del clan constituían el núcleo casarse en clanes diferentes, si bien tenían la misma vincu-
~ermanente de la horda, pero los miembros femeninos sa- lación con el clan de su madre.
han de ella al casarse, y otras mujeres entraban en ella Existe una división. de la sociedad en dos mitades, y di-
como esposas de los hombres.
cha división se da en una serie de tribus. Cada clan perte-
Había sistemas de estructura más amplios. Una serie nece a una de las mitades. Podemos representar a las mita-
de clanes tenían la misma lengua y costumbres semejantes· des por medio de los símbolos I y II. Esencialmente, el sis-
en c.onsecuencia, formaban una comuni·dad 1" .. , t" ,
d · . mgu1s 1ca, que tema es una clasificación o agrupación de clanes, que pe-
enommamos tnbu. A diferencia de las t "b d
. n us e otras netra a través de la clasificación en tribus o comunidades
regw~es, en este caso no era un grupo unido políticamente· lingÜÍsticas. Un hombre distingue los clmes con los que
los m~embros de una tribu no se unían para ninguna acció~ tie~e relación según que pertenezcan a su propia unidad o
combmada. Hordas de la misma tribu o de tribus dife- a la otra. Existe otra dicotomía de la sociedad en dos divi-
rent_es podían vivir en paz unas con otras o en ocasiones siones mediante alternancia de generaciones, que podemos
pod1an entablar combates.
representar por los símbolos x e y. Si un hombre pertenece
Personas de hordas y tribus diferentes estaban vincula- a la división x, sus hijos serán y, cosa que también será su
das mutuamente mediante el sistema de parentesco Un padre, mientras que el padre de su padre y el hijo de su
hombre estaba, v~nculado por medio de alguna relació~ de hijo serán x, como él mismo. Por consiguiente, cada clm
pa~entesc~, proxu~a o lejana, con cualquier persona con contiene en todo momento personas de ambas divisiones.
dUien tuviera algun contacto social, independientemente Así pues, existe una cuádruple división de la sociedad,_ en
~ la horda ~ t:ibu a la que perteneciera. La base del lo que podemos llamar «secciones>>, que son cuatro: Ix, Iy,
comp_uto _consistra en las relaciones genealógicas efecti- IIx, IIy. Dichas se~ciones llevan nombres como banaka,
vas, mcluidas las existentes entre miembros de 1
L · uncm burong, kariera y paldjeri. De acuerdo con las leyes de
os panentes de una persona determinada se clasifica~ esas tribus, un hombre sólo puede casarse con una mujer
dban en una serie limitada de categorías, cada una de ellas
enotada por t- · d que pertenezca a una de las categorías en que sus parientes
. un_ ermmo e parentesco, pero distingui- estén distribuidos, la que incluye la hija del hermano de
~a en la categona.' _según fuera más próxima o más le- su madre. El resultado es que debe encontrar una esposa
Jana .. El comportamiento recíproco de dos personas cua- en la división de su propia generación y en la mitad opuesta
lesqUie~a con respecto a otra dependía de la relación ue a la suya; un hombre de Ix debe buscar esposa en IIx; en
mantuvieran en. la estructura del parentesco. La est!c- la tribu kariera un hombre de la sección banaka tenía que
tura era una distribución compleja de relaciones diádi- buscar esposa en la sección burung. Si por «grupo sociaL>
~~s, 1ed pe:s~na a persona. Un hombre particular estaba entendemos un conjunto de personas con cierta cohesión,
~~n~u a o mtlmame~te,, a través de su madre, con el clan en ese caso los clanes y hordas son grupos en ese sentido,
esta y con sus miemoros. Siempre podía visitar su terri- pero no las secciones. Proporcionan un tipo de clasificación
186
187
de las personas dentro de la estructura de parentesco in-
tertribal, y forman parte de dicha estructura. Esta descripción de un sistema estructural en un pueblo
Debemos éitar otros aspectos de la estructura sociaL primitivo puede contribuir a . ac~~rar ciert~s cuestiones_
Cada clan es un grupo totémico distinto, con sus propios Para Herrar a realizar una descnpcwn de un s1ste~a estruc-
centros-tótem dentro de su territOlio, sus propios mitos tural, n; sólo tenemos que considerar los grupos sociales,
sobre el origen de los rasgos topográficos del territorio y como la familia, el clan y la horda, en el caso de la Aus-
de esos lugares sagrados y sus propios ritos, que se realizan tralia occidental, junto con la estructura interna del grupo
con el objetivo manifiesto de mantener la continuidad de y las relaciones entre los grupos, y tambi~n las clas~s so-
la naturaleza y de la sociedad. Cada clan tiene su solidari- ciales, sino que, además, henos. de exan:mar el co,nJunto
dad y continuidad totémicas propias, que lo diferencian de total de las relaciones, establecidas socialmente, ae per-
otros clanes. Pero, además, existen ceremonias totémicas y sona a persona, como en el sistema de parentesco austra-
ritos religiosos para· la iniciación de los muchachos en las liano. La realidad social de los grupos y de las clases con-
que varios clanes se unen y cooperan. De vez en cuando se siste en la forma en que afectan a las relaciones mutuas de
celebran reuniones de clanes en el territorio de uno. de las personas, según que pertenezcan al mismo grupo o a
ellos; según las ocasiones, se reúnen diferentes agrupacio- diferentes g:rupo~s o clases. Desde este punto de vi~ta, la
nes de clanes, dado que a una reunión celebrada en el terri- estructura de una región en una época determinada con-
torio de un clan determinado asistirán exclusivamente los siste en el conjunto total de relaciones en que participan
clanes amigos y vecinos. Los clanes y sus reuniones son las personas de dicha región.
los que proporcionan la estructura religiosa de la sociedad. En cualquiera de las relaciones de que se compone la
Podemos considerar que cada una de dichas reuniones estructura social se espera que una persona observe deter-
crea un grupo político temporal, pues en .ellas se résuelven minadas reglas o normas de comportamiento. Par~ refe-
los conflictos entre clanes o entre miembros individuales rirse a esto se usa el término institución, que es un ststema
de clanes diferentes bajo la autoridad de la opinión pública establecido o reconocido socialmente de normas o pautas
congregada. En eso es en lo que esa tribus se acercan más de conducta referentes a determinado aspecto de la vida
a una organización política más amplia que la horda. social. Las instituciones familiares de una sociedad son las
En esas tribus, como en otros sitios de Australia, existía normas 0 pautas de comportamiento que se espera obser-
una circulación continua de determinados tipos de artículos ven en su conducta los miembros de la familia en sus rela-
mediante intercambios de regalos, con lo que pasaban de ciones mutuas. Existen pautas o normas de conducta de un
una horda a otra. Dichos intercambios eran menos impor- padre para con sus hijos, de una esposa para con su ma-
tantes desde el punto de vista económico que del de mante- rido y viceversa, de 'un hijo para con uno de sus padres,
ner las relaciones de amistad. de un hermano para con su hermano o hermana. Se tr:J.ta
En muchas sociedades un elemento importante del sis- de las instituciones aceptadas en una sociedad particular,
t~ma estructural es la división en clases sociales, como, por porque establecen, con cierto grado de flexibilidad, la co~­
eJemplo, la división entre jefes y súbditos en Polinesia. En ducta adecuada de una persona en una relación dererm1·
las tribus australianas no existen distinciones de esa clase, nada. Definen el modo como se espera que se comporte una
excepto la que se basa en el sexo y la edad, pero ésta es persona, y también la forma como puede esperar que_ los
muy imponante. Los hombres y las mujeres tienen ocupa- demás se comporten. No todo el mundo se comporta Siem-
ciones diferentes. En todos los asuntos sociales ejercen la pre como debe, como se espera que lo haga; en todas las
autoridad los ancianos, que son también los dirigentes n- sociedades son frecuentes las desviaciones de mayor o me-
cuales. nor importancia; a ellas corresponden sanciones de diferen-
tes clases. Por consiguiente, la estructura social debe des-
188
189
cribirse mediante las instituciones que definen la . ·d d t ctural es la continuidad de dichas ordenacio-
nui a es ru • · 1
apropiada, O exigida, de las personas en .SUS diferentes rela- . P d Os e xpresar esto adecuadamente med1ante as
nes. o em · y forma En la contmm . "d a d estat1ca
, · d e·
ciones. Los rasgos estructurales de la vida social de una ideas d e ma t ena · . )
región determinada consisten en todas esas distribuciones d .f. . tanto la materia (ladrillos, maderas, teJaS, etc.
un e I IClO, · .
permanentes de las personas en relaciones institucionales como la forma siguen siendo las mismas. En un cuerJ?o
que se revelan en las acciones e influencias mutuas cuya h umano, la materia se compone de moléculas que0 estan e de
totalidad constituye la vida social. cambiando constantemente; mi cuerpo no se comp n
Una cuestión que debemos citar, aunque sólo podamos las mismas moléculas que ayer, y existe, la idea popular de
tratarla brevemente, es la de la continuidad estructural. que al cabo de siete años :odas las moleculas d~ un cuerp~
Podemos considerar en primer lugar la continuidad de los humano han sido sustitmdas. Pero un o~gamsmo huma
grupos sociales. Un grupo del tipo de una nación, una tribu no conserva su forma, exceptuando cambw_s c_omo la am-
. 'n de una pierna. Así pues, la contmmdad estruc-
o un clan puede tener una existencia permanente, a pesar pu t acw . , . , . pro-
- sus miembros están cambiando continuamente ,
de que tural de un organismo es dmamtca, no estatlca, es un.
dado que pierde unos por defunción y adquiere otros por ceso en que la materia de que se compone el orgam:mo
nacimiento. Una sociedad científica pierde miembros por está cambiando continuamente, mientras que la forma ~¡gue
defunción o dimisión, pero los sustituye eligiendo a nuevos . do la misma. La continuidad estructural de las soc:eda.-
slen , . "d . 1 matena la
miembros. La Academia Francesa sigue conservando su des humanas es dinamica en ese sentl o . a .,
identidad, a pesar de que actualmente sus miembros son componen los seres huma~os,. y l_a forma la conexwn de
un conjunto de personas enteramente diferentes de los éstos mediante relaciones mstltucwnales.
miembros que la componían en el siglo XVIII. Un aspecto que hay que considerar es el hecho ~e q:re
El mismo tipo de continuidad podemos observar en las los individuos cambien de posición en la estructura socral
clases sociales. En una sociedad polinesia, la clase de los durante el transcurso de su vida. Un ho_mbr~ puede cam-
jefes es permanente, dado que, cuando un jefe muere, se biar de nacionalidad, o abandonar una Iglesia para adhe-·
lo sustituye, a veces por su hijo mayor. Una clase profe- . a otra Lo que en todos los casos está presente es el
nrse · _ . .d
sional puede tener el mismo tipo de continuidad; a medida proceso por el que un ser humano comlenz~ :~ VI a _como
que van muriendo doctores o abogados, nuevos titulados niño y crece hasta volverse adulto; la posiciOn social de
de la profesión van ocupando sus lugares. Un regimiento una persona cambia, gradualmente o a través de etapas
del ejército puede tener una existencia permanente, aunque definidas institucipnalmente, como, por ejeO::plo, cuando de
cambien de modo más o menos continuo las personas que ser un niño pasa a ser un joven y despues una perso~a
lo forman, y, aunque los tenientes pasen a ser capitanes y may or En al2:unas sociedades africanas, un rasgo social
· ~ d ' 1 dad en
después comandantes y coroneles, la distribución de las muy importante es un sistema de gra os segun. a ~ ,
graduaciones sigue siendo la misma. Estados Unidos siem- el que un individuo pasa de un grado al sigUiente de
pre tiene un presidente, e Inglaterra tiene un rey, aunque acuerdo con la pauta institucional. .
la persona que ocupe esa posición dentro de la estructura Así pues, la estructura social debe defimrs~ como l~
social cambie de vez en cuando. La Cámara de los Comunes ordenación permanente de las personas en relacwnes defl-·
inglesa o la Cámara de Representantes de Estados Unidos nidas o controladas por instituciones, es decir, por normas
:nantiene su continuidad, a pesar de los cambios en sus 0 pautas de comportamiento establecidas socialmente.
:niembros que se producen en cada elección.
Así, como la estructura social es una ordenación de las
1ersonas en roles y relaciones institucionalizadas, la conti-
191
90
V limitar nuestra atención a su teoría de la evolución social.
Spencer sostenía que el desarrollo de la vida orgánica y el
LA EVOLUCION SOCIAL desarrollo de la· vida social de la humanidad son ejemplos
de un proceso único, para el que propuso el nombre de
«evolución)>. La idea de la evolución es la de una realiza-
ción progresiva de las potencialidades de la vida orgánic::1,
en un caso, y de la vida social, en el otro. Podemos reducir
la teoría a tres proposiciones esenciales. 1) Tanto la evo-
lución or2:ánica como la evolución social son procesos na-
turales s;jetos a la ley natural. 2) El proceso de la evolu-
En 1860 Herbert Spencer formuló la teoría de la evolu- ción es de desarrollo divergente. Todas las diferentes es-
ción social en un ensayo sobre «The Social Organism» y la pecies vivientes y extinguidas de animales y plantas pro-
desarrolló en sus Principies of Sociology, cuya publicación ceden de un pequeño número de formas primitivas y sim-
comenzó en 1876. Podemos decir que dicha teoría era re- ples de la materia viva; la diversidad en las formas de la
sultado de reunir en lo que el propio Spencer llamaba una vida .org:ánica es -resultado del desarrollo divergente, que
«filosofía sintética)) dos ideas heredadas del siglo XVIII. caracteriza a la evolución. De igual forma, las diferentes
Una de ellas era la idea del transformismo en la vida orgá- formas de vida social existentes en la actualidad o cono-
nica o, como se la ha llamado a partir de Spencer, <<evolu- cidas gracias a la historia son resultado de un proceso de
ción orgánica». La otra era la idea del progreso en la so- desarrollo divergente. 3) Tanto en la evolución orgánica
ciedad humana. .
como en la social ha habido una tendencia general, que
Durante la segunda mitad del siglo XVIII la obra de Spencer llama «avance de la organización)>. En la evolución
biólogos como Adanson, de Maupertuis, Buffon, Erasmus, O rO'ánica
::: ' los orO'anismos
~
de estructura y función más com-
Darwin, Cabanis y Lavépede fue debilitando la creencia en plejas se han desarrollado a través de etapas progresivas
la estabilidad de las especies animales y vegetales. Dichos a partir de otras más simples, los vertebrados de los in-
científicos prepararon el camino para la teoría de la evolu- vertebrados, los animales de sangre caliente de los de san-
ción orgánica, que formuló por primera vez y de forma gre fría, por ejemplo. En la evolución social, las socieda-
concreta Lamark en su disertación inaugural de un curso des de estructura u organización más compleja se han ido
de zoología el 21 Floréal del año VIII de la Revolución desarrollando prpgresivamente a partir de formas menos
( 1800). Antes de Charles Darwin, hubo evolucionistas en el complejas. Así, pues, la evolución, tal como se la concibe
terreno de la biología, uno de los cuales fue Spencer, pero en Ia teoría, es a un tiempo un proceso de diversificación
la publicación de El origen de las especies (1859) fue lo en las formas de la vida orgánica o social y un proceso
que hizo destacar a dicha teoría. La teoría del progreso de «avance de la organización», orgánica o social. Hay que
iumano había alcanzado su culminación con los escritores recordar que, como dijo T. H. Huxley, «la evolución no es
=le la segunda mitad del siglo XVIII, y había llegado a ser una explicación del proceso cósmico, sino meramente una
·.ma idea aceptada en el siglo XIX. Spencer, que había re- presentación generalizada del método y los resultados de
~ibido la influencia de Comte, empezó su estudio de la dicho proceso)> .
.;ociedad desde el punto de vista del progreso, como puede
La filosofía de Spencer recalca la unidad y continuidad
·:erse en su Social Statistics, publicada en 1851.
de la naturaleza, y de la evolución como proceso natural.
No necesitamos examinar la teoría de Spencer del uni-
La evolución de la mente, el desarrollo de formas de acti-
,·erso, al que consideraba en evolución, sino que podemos
vidad mental más complejas a partir de formas más sim-
~'2
193
pies es un rasgo de la evolución orgamca. La evolución so- nadas encontramos las formas de vida social más desarro~
cial, o lo que. también llama evolución <<superorgánica», liadas.
es, según Spencer, una continuación del proceso de la evo~ Para el evolucionista, el género humano, incluidas las
lución orgánica. Dice que no puede haber separación ab- especies extinguidas y la sobreviviente del hamo sapiens,
soluta entre la evolución orgánica y la superorgánica. «Si es producto de la evolución orgánica, y la mente huma-
ha existido la Evolución, la forma de ésta que aquí hemos na es producto del desarrollo neurosíquico, que es parte de
distinguido como superorgánica ha debido surgir de la or- la evolución orgánica. En relación con la evolución super-
gánica mediante etapas imperceptibles. Pero debemos deli- orgánica, existe una diferencia muy importante entre los
mitarla adecuadamente diciendo que incluye todos los pro- seres humanos y los otros animales sociales. En el caso
cesos y productos que suponen las acciones coordinadas de estos últimos, la forma de la vida social es la misma en
de muchos individuo_s, cuyos resultados superan en exten- todas las poblaciones de una especie, pero en la vida hu-
sión y complejidad a los que pueden conseguirse mediante mana agrupaciones diferentes de seres humanos tienen for-
acciones individuales.» mas distintas de vida social. En el caso de la humanidad,
El desarrollo de la vida social entre los animales es un la evolución superorgánica es un proceso que ya no depen-
rasgo importante de la evolución orgánica. Entre las for- de de la evolución orgánica, es decir, de los desarrollos en
mas inferiores de la vida animal, los biólogos han estudia- las caracteristicas innatas de la especie. Existe una enorme
do lo que Allee llama la «fisiología de masas)> de las agru- laguna en nuestro conocimiento del proceso evolutivo en
paciones animales. La reunión de los animales de una es- conjunto, pues ignoramos, y seguiremos ignorando, com-
pecie en una misma zona muchas veces les resulta bene- pletamente las formas de vida social de los primeros seres
ficiosa; en algunos casos puede alterar el entorno, como, humanos o de sus antepasados prehumanos inmediatos.
por ejemplo, el agua en que nadan, para adaptarlo mejor No sabemos nada de la vida social del Sinanthropus peki-
a su vida social. Si consideramos que esas agrupaciones nensis. Existen razones ·para fijar el cambio real de la vida
no son auténticamente sociales y, siguiendo a Allee, las lla- social prehumana a la humana en función de los comien-
mamos «subsociales», en ese caso hemos de reconocer zos del lenguaje.
que, en todo el dominio de la vida animal, «no se pueden Así pues, la teoría de la evolución social no consiste
trazar líneas claras y seguras entre los organismos socia- sólo en que ha existido un desarrollo divergente en las
les y los subsociales». «Lo único que podemos encontrar formas de la vida social en diferentes sectores de la hu-
es un desarrollo gradual de los atributos sociales, que su- manidad, sino también en que ha habido «avance en la or-
giere ... un substrato de tendencias sociales que se extiende ganización», que· no se ha producido de forma uniforme.
por todo el reino animal. De ese substrato social surge la Existen ciertas ideas falsas que hay que evitar. Spencer
vida mediante la intervención de diferentes mecanismos y escribió: «Se suele concebir la evolución de forma que su-
con formas de expresión distintas hasta que llega a su cul- ponga en todo una tendencia intrínseca a convertirse en
minación presente en los vertebrados y los insectos» 1• En algo superior; pero se trata de una concepción. errónea de
una etapa relativamente temprana de la evolución animal ella,>. Una sociedad que haya alcanzado una etapa de equi-
aparecieron dos líneas divergentes, una conducía a los in- librio interno y externo puede continuar sin cambio im-
sectos y la otra a los vertebrados y, por obra de otra di- portante alguno de estructura. «El cambio no significa ne-
vergencia, a las aves, por un lado, y a los mamíferos, por cesariamente avance. Muchas veces no va orientado hacia
:Jtro. Entre los insectos, aves y mamíferos más evolucio- una estructura superior ni hacia una inferior. Sólo en al-
gunas ocasiones causa la nueva combinación de los fac-
l. W. C. Allee, The Social Life of Animals (Nueva York: W. W. Nor-
:on & Co., 1938), págs. 274-5. tores un cambio que constituye una etapa en la evolución

194 195
. ·.·
.. (

sociaL Es· de todo punto posible y, según creo, muy pro,- hacernos una> idea aproximada. de lo que podemos' llamar
bable, que la regresión haya sido tan frecuente como la la esfera de i:i:rlluencias mutuas en. que participan las: per..;.
progresión.» Lo mismo ocurre con la evolución orgánica. sanas que estamos observando; En este sentido,. entende-
Julian Huxley escribe: «Gran parte de la diversidad siste- mos por influencias. mutuas tanto las hostiles como las
mática de menor importancia que se observa en la natu- cordiales; existe influencia mutua en Australia cuando una
raleza es ajena a. la trayectoria principal de la evolución, horda lucha contra otra. En la última guerra hubo influen-
constituye una mera excrecencia de variedad ·superpuesta cia mutua de. tipo hostil entre Estados Unidos y Japón. Así
pues, podemos volver a formular· las afirmaciones de Spen~
a su modelo general».
Esencialmente, un proceso evolutivo es una. combina~ cer y de Durlú"teim. definiendo el factor de la evolución a.
ción de azar y necesidad, y, a. causa de la intervención del que se refieren. como la. extensión progresiva de la esfera
de la influencia mutua. · ·
azar, no puede predecirse. Ningún conocimiento biológiCo,
La _extensión .de. una. esfera de influencia mutua.-.d~b~
por amplío que fuera, habría podido predecir que del ante~
pasado·· original de los caballos, dotado de cinco dedos er,¡. medirse: primordialmente; no.· en función de la geografia,,
__los. pies, derivaría .en·_ última instancia er caballo. de carre- sino del número. de personas en quienes o . de. quienes I9s
ras inglés· y el caballo de carga de la actualidad; y,. a ia in- habitantes de. una _región . determinada pueden. ej~rcer- o
recib~.- respectivamente, influencias· mutuas., Así;. por ejem, ·
versa, si no dispusiéramos de los testimonios paleontológi-
plo, un.aumento en la densidad de la población. de una:. re-
cos, sería imposible conocer el tipo de animal de que de-
gión produce como consecuencia el aumento de·las ·dimen-
riva eL caballo moderno.
siones de la. esfera de influencia mutua. En relación... c~n
Spencer recalcó como factor de evolución social lo. que
esto,. podemos citar la distinción de. Durkheim entre ·den~
llamó «las dimensiones cada vez mayores de la. colectiv:i~
sidad material y densidad social; la primera. se mide me"
dad social,. que generalmente van acompañadas de una den-
sidad en aumento»~. La idea de que, durante el desarrollo diante: el número·. de personas que viven en _una zona: que.
haga. de: unidad, como, por ejemplo;, un kilómetro cua~
socüu,.Ias asociacionesen·pequeñaescala,.pequeñas en cuan-
drado; la segunda. aumenta~ independientemente de. la. den- .
to al número de personas y en cuanto a la zona geográfica,
quedan absorbidas dentro de otras en mayor escala o com-
sidad. material, al aumentar, las comunicaciones y la· fre~
cuencia. de las: influencias mutuas_ . . .
pletadas por ellas~. había· sido formulada. antes· de Spencer.
.. En. los cas~s .en que: las influe:iJ.cias. mutuas son fr~cueru-. ·•
Saint-Símon sostuvo que ei hecho más destacado en la his-'-
~oria es la extensión continua. del principio de asociación,
tes:_o continuas·· tienen. tendencia:: a adoptar una.fonna pa,..
trón. y a institucionalizarse, así~ en mayor ·o menor medí~
como ~n la serie :: familia; ciudad~ nación, iglesia· suprana-'
da. Por tanto, la, extensión. geog!-áfica. de·. la esfera-e de- fu~­
cionaL Comte· tomó dicha. idea de Saint-Simon y precedió
a Spericer a, la hora de exponeria; Durkheún, siguiendo a:. fluencia: mu~a P?_~i1:Ülita!.. y a veces. contrib-uye, 'a pr~ducir;.
sistemas. de integración sodai más. amplios. ·Pára Spencer,. ··
Spencer; expresa esa misma idea diciendo· que la tendencia
dominante- de la evolución social ha sido «la extensión pro-- la «~tegración» es «el rasg? primordial, deJa e_voiuc::ión», :t
prec1samente porque: conduce a formas de inte:rradón socü:U: .·
gresiva. del: medio sociah>·. ·
más amplias y más complejas,. es por lo que~ el «aumento
Spencer tuvo tendencia a concebir las sociedades como
en Ias dimensiones del agregado. sociah, que aquí. llamamos
entidades discontinuas, tal como son los organismos, pero
aumento en las dimensiones de la esfera. de influenci<:t mu.'-
eso es insuficiente. Por consiguiente, es necesario encontrar
tua, es un factor tan imporrante. de la evolución sociaL Ex:is.;. ·
alguna forma de volver a formular la idea de Spencer. Si
ten diferentes modos de futegraciÓn social que pueden. com.:. . .
nos colocamos en una región particular y en determinado
binarse de formas diferentes. en la misma región.· Spencer
periodo, por ejemplo en una tribu australiana.· podemos

196 197
:. ; '. ; .·; .. :.;i i''
~
-~. tenía tendencia. a concebir·!~ integración desde el' punto
"i···. ··. .''.:.;:;;~:-~.:·:··· ;,; ·'::•···. ;.
de-~:Roina y~JilsO'conqufs~as· militares. ~ue:. ~roduj:~ra~·:iá~ ':fi;_:;j: · .
tnació~y el crecimiento deL Imperio Romano~ eLlatm pa:s&· ·.· .·
!l de vista de la política, o de· la política. y la economía coro.,.
i?J binadas: E~o descartaría· a i:ma sociedad como la Iglesia a ser lalengua:hablada. de gran: parte· de. Europa oéciaentar,.
-~J Romana y, en ¡a sociedad de los aborígenes australianos; con lo· que· 'iustituyó a muchas otras lenguas, aL etru~co ya .
varias lenguas· itálicas y celtas ... La. unificación: lingüística
-·-~ ~=~~!~.la integración proporcionada por el sistema del pa-
acompañó al _proceso de integración política mediante la
; En un primer intento de comparar las soCiedades en conquista;. pero por razones que no resulta difícil descubrir ·
},~ función dé las dimensiones de la esfera de influencia mu-· el latín. no llegó a ser la lengua hablada del-Imperio de ··
Oriente. El. proceso de expansión cesó después deLsfgió- r~ .
:.- ·~ -:. _·. tua, resulta útil considerar el lenguaje. En las sociedades y a la: decadencia. deL Imperio Romano. siguió un proceso.
····~ niás· pri.Ínitivas que· conocemos; el grupo primario es un·
,~ grupo pequeño de personas vinculadas a un territorio· de• de desintegración política~ La lengua-latina se dividió- en:...
;;~4 terminado. Dichas·· grupos son de- pequeño tamaño,: pues· gran; cantidad.dé.diferentes dialectos-hablados.La Igl;sia:,.· _
·:1 ·muchas veces constan· dé menos de 100 hombres;. muJeres ·Romana.· conservó.eL latfu .. comO.lengua·escrita;peJ."o'.sófo~ ·:·
. ·........ olf?:_~a]J._am.Ias·.ciases.,_cultas.. _Cuandq~~l_p_~Qfeso:::.r;k.reinteg~a~~S
-~~:~ ---Y~os,_y_rarªL~e(:~sJ_por_!].Q_d~cir_nunca,.exceden los _zoo _
.·~ Unos pocos de dichos: grupos tienen una lengua comun:.. y . ción. política;. comenzo; coridu jo a la forinacióni:"de· tina: se-·· ;: ;
i forman, así, una.- comunidad lingüística, y en dicha comu-· rie de" naciones independientes· en I<:>·que.·había:::sido~er:im,...·, ·
-~ nidad suelen observar las· mismas costumbres y tienen un perlo de Occidente~. A:. partir de· los numerosos:; ~ifa:lectos·;. .
~ sistema de ideas común. Podemos considerar su tipo de es- latinase nacieron:, las· .lenguas románicas actuales :: francé~Ío:~ <
l ·
1/
tructura,. social como el dé la tribu poco integrada o des-
centraliZada .. Las tribus·: o comunidades lingüísticas son pe•-
provenzal; italiano,. catalán,, castellano,, portugués ..
Spencer, puesto que concebía las sociedades; como entida:...
des discontinuas¡. cada. una de las• cuaü~s. se componía•de: la_
-.~::···· q~eñas; pu~s cu:ntan.sólo varios ce~t:nares. de· individuos,.... ·
jfl, desde 200aproXIIDadamente: comó·mrmmo··hasta 2~500 como· población: de.:unaregió'n limitada y· definida,. corisiderabaef: .... ·.
jJ" máx.ü:no en: ei ~a5o de· este tipo ·de estrUctura, como: vemos· aumento de: las,: dimensiones. deL agregadO.. social como: re:.- · ·
}J ··. entre los·: ~<salvajes»: que viven de~ la caia:,. la pesca y la reco- sultado de la. incorporación de sociedades: peql,leñas a; otras;: · ·
Jif lección de productos:· naturales; Es· cierto que en: esas' so- mayores·;_ Escribió: que «Ia formació'n de una sociedad:' mao.
~: cie~~des p~iin~'tiva~ ~uchas· 'veces una persona aprende: ·a yor es: resultado exclusivo de: la combinación. de sociedades;
hablar una lengua. diferente de· la suya: y que; en: los: casos: máS: pequeñas¡.. cosa que ocurre• sin; destruir· las divisiones:~
1;].
~~· err:q~e dos· lenguas. vecinas· son semejantes por Iá.gramáti~
producidas: anteriormente por. la:; s¡eparación» •., Peroruna:·· ,·~;;·
]~,•. ca y-er vocabuüirio,. la. comunicación entre· personas de trf:. ·.·.·
sociedád~. en. el• sentido que: Spencer atribuía a:. la: palabr~,<>
puede·: aumentar:. de .«.masa,,: mediante· ei creciinümto de: la ·:> ·.·"
~ bus'. dife~ent~s: :_s~losibl: o incluso bast~nte f~c~:-,N? · ?hS,t
s· tante; e.L pequeno-:-tamano· de: la comumaad linguistica da: pob~ación~ pues<. «la masa>' se:• refiere aL número efe:. mdi\rr:?: ::, ;,::
.m· uña. indicación. de·Ias~ reducidas dimensiones· de la· esfera· drios: que componen un. grupo. Los; sociólogos· han: reconÓ~:~·..::_.·, ~:
·.~ · dé;' inflü.enda: mutua:~ Podemos comparar esa sittiaciórr cdrr. cido. ef. aumento dé las poblaCiones como uno de Ios:facto~- _t:~',i;,
res importantes de la.. evolución. social~" . .;•:·.~ ::.:· · "':~
~~ la de hoy ·eru que: riilllones' dé: personas: liablan, 'éómo lent
j guas maternas; el fuglés·;. er español o el árá.bt~. ¿Por qué:.habría de considerarse el mero t~año,, iiite~~- : .·
:;l ·' La llistoria del latín ilustra la ccmexión .que a veces· pretado aquf como el número de personas partidpant~s: err
las influencias mutuas que componen la. vida social. como.. : ·
~l existe· entre ·er lenguaJe y los· procesos por los que se ani: ....•
;J plían o reducerr las· esferas:· de· influencia mutua. Ori~nai~ . factor en sf mismo del aumento de comp:lejidad de Ili ¡es-
tructura social?. La respuesta reside: en.. lo.• que,< los cferití2 ·
J mente, el latín: era: la ·lengua de u1:r pequeño grupo de ha~:
j1 bitantes del Lacio.· Con la fundación de 'la ciudad-estado ficos conocen como «principio. de semejanza''• expuesto por
'-:~~

··j 199
! 198
0~·1
i
conduce desde Ias condíé:íones dé las.·tribus saivaj'es. ha~i ·.·
Galileo hace trescientos años. Enunciado burdamente, con~ los logros científicos y técnicos de las sociedades modernai
siste en que existen límites de tamaño para toda clase de Para la teoría de la evolución,. el progreso en ese sentid;
estructuras; así,. por ejemplo, la naturaleza no puede pro- depende del desarrollo de la organización que es eL ras 0
ducir árboles en nuestra Tierra por encima de determi- esencra1 de la evolución social y, al mismo tiempo, es u~o
nada altura, y Galileo ·calc~ló que el límite se situaba a 300 d~ los factores. de que depende esta última, a su. vez. Por
pies de altura aproximadamente. El reconocimiento de este eJemplo, el progreso en el conocimiento y en las técnicas
principio, tal como se aplica a la estructura social, es un en las sociedades más complejas ha dependido del desa,
aspecto esencial de la teoría de la evolución social. Siin~ rrollo cada vez mayor de lo que se llama la ~{división. del
mel, por ejemplo; escribió que «todo aumento cuantitativo trabajo», pero resulta más correcto describirl~ como la di::..
de una sociedad .produce como resultado una modificación ferenciación cada vez. may_or de las ocupaciones en; una:
Cua.litativa, requiere· nuevas adaptaciones. Las formas de estru~tura ocupacional compleja. y ésta,. a su vez;: ha. de--
los grupos dependen estrictamente del número de los ele- pendido_ del progreso. técnico y ·del conocimiento que iba,
mentos; una estructura. que sea adecuada para un grupo acumulando se. .. . · ·
social con determinado número de _mi~~bros_ pe_~~~~~:_su ----JUlian Hri.~~Y h~:~~¿~-·= ~P;d~rrro~ co~~ider;~¡~ ~voL
-"-valor;.· sf"aCJ.uér atiriieri:t:a» ... lución como el proceso por el. que la utilización de los~ re.:..
. La evolución social, tal como la concebía el creador de cursos de la tierra por parte de la materia viva resulta má;
la· teoría,. es, esencialmente, el desarrollo de las «estructu~ eficaz. gradualmente)>. El avance evoluti~o. es cuestión del
ras y funciones. que componen la. organización y vida de~ desarr?llo de las formas de adaptación y Ia. adaptación es:
cada sociedad», desde las · fonnas más sencillas hasta las a un _tiempo exterior e interior~ El avance en la adaptación
·más· complejas·. Spencer reconoció también: ((ciertos desa- extenor es lo que Huxley llama «Una. elevación del. límite·
rrolles asociados que ayudan a la evolución social; y a los superior-de Ia eficacia biológícar Ía. cual se. define:. cmri:o. con-
éuales ayuda ésta:: los desarrollos del lenguaje, del cono- trol cada vez. mayor del medio ambiente e ind~pend€mci~
ciiniento, de la· moral. de: la estética» .. Consideraba «1a acu,. con. respecto a éh. Al avance en la adaptación interior lo
mulación de productos superorgán.icos que solemos distin- califica de «elevación. del nivel superior: de la. eficacia fun~- . •
guir como artificiales, pero que, considerados filosóficamen;.; cional. y de la. armonía de los ajustes interiores»·... En. Ia
te~. no son menos. naturales. que· todos los demás resultan.:. evo.l~ción d~ las sociedades huma.pas, el. avance·e~ l~,acfup"­
tes dela evolución», como uno más de los ((faCtores)>- de la tacion extenor se ha conseguido, no mediante modificacio-
evolución sociaL Entre éstos incluía los artefactos materia.,. nes. del organi~nio humano, sfuo mediante lo_ que más~ arrf-·
les,.. el lenguaje;_ ei desarrollo· del conocimiento· que acaba ba hemos llamado progreso. Es un avance en la adaptaci6n.
en Ia ciencia;: el desarrollo de las leyes, las mitologías·, las: de ·los ,seres humanos al medio. físico en que viven;;.. EI .
teologías;: los: có"digos de: propiedad, la buena:: conducta>, la ' · avance en la adaptación interior se ha conseguido. mediante, ..
ceremonia; y el: complejo grupo de los «productos que lla:: la adaptación de los int;lividuos humanos a sistemas, de rec..
mamas estéticos;> .. Hipotéticamente, se considera que nin:;. l~ciones ordenadas. Podemos perfectament~ llamar a esto. .
guno de dichos desarrollos ··es. enteramente: independiente(
«coaptación social:>. Es lo que significa propiament~ el tér'-:
sino que están vinculados todos ellos con el desarrollo, de· mino civilización, si consideramos su derivación; pues cives· ·
la estructura sociaL Desde luego, todavía está por investí..: · eran las personas que vivían juntas en una comunidad or-
gar la naturaleza de tales vinculaciones. · · denada institucionalmente, diferentes de los hostes;. de lo$
Lo que suele considerarse como "progreso» es la actimu:Z
~u~ _sólo P?dfan. esp~rarse acciones enemistas as. En la evo- -
ladón del conocimiento y el perfeccionamiento de las· téd- · lllc. . on orgamca, el desarrollo exterior y el interior son in-
nicas gracias a las invenciones, y los descubrimientos, qutf
201
200
terdependientes. En la evoluc.ión social, existe una medida
no (Laufer) podía escribir que, en su opinión, la teoría de
de la interdependencia entre la adaptación de un grupo a
la evolución social es «la teoría más irracional estéril
su entorno y la «eficacia y armonía funcional de sus ajustes . . d d , y
pern1crosa e to as las que se han concebido en la historia
interiores», que constituyen la coaptación social. de la ciencia». No hemos considerado necesario incluir en
Podemos dividir la evolución social de los H ominidae este libro discusión alguna de las opiniones de los antievo-
en tres fases. De la primera ni sabemos ni podemos saber lucionistas. Sus escritos muestran una asombrosa confu-
nada; fue la fase del primer desarrollo del uso de las herra- sión de pensamiento e ignorancia de la teoría de la evolu-
mientas, del lenguaje, de la moral y, probablemente, de la cwn social. El movimiento fue un intento de desviar a los
religión, o, por lo menos, de la creencia en fuerzas sobre- antropólogos de la antropología social, como estudio socio-
naturales. Con respecto a la segunda fase, no sabemos con l~gi~o. de las sociedades primitivas, hacia la antropología
certeza nada sobre los acontecimientos, y las conjeturas de h1s~onca, como reconstrucción de la historia; en Estados
los etnólogos y las conclusiones de los arqueólogos no nos Umdos lo consiguió durante mucho tiempo.
aportan demasiada ayuda. Lo que podemos observar son los
productos de esta fase, las diferentes formas de la vida so-
cial de los pueblos no históricos. La tercera fase es la que
conocemos históricamente, que abarca durante un período
limitado de no más de seis mil años una parte limitada
de la superficie de la tierra. La tercera fase es el dominio
de los estudios históricos. No obstante, no hay nada que
impida a los antropólogos emitir opiniones sobre las condi-
ciones y acontecimientos de esta fase. Aun así, de lo que
fundamentalmente se ocupan los antropólogos sociales es
de las formas sociales de la vida social que representan la
supervivencia en los tiempos modernos de la segunda fase
de la evolución, antes de que los hombres hubieran inven-
tado el arte de· la escritura y pudieran dejar testimonios
escritos, por imperfectos que fueran, de sí mismos y de sus
vidas. Lo que hay que recordar es que ninguna sociedad no
histórica representa la forma de que deriva sociedad histó-
rica alguna~ Ningún reptil superviviente puede conside-
rarse como forma ancestral a partir de la cual evoluciona"
ron las aves y los mamíferos.
Este libro está escrito desde el punto de vista de alguien
que durante toda su· vida ha aceptado la hipótesis de la
evolución social, tal como la formuló Spencer, por conside-
rarla una hipótesis de trabajo útil en el estudio de la so-
:::iedad humana. Pero conviene avisar al lector de que en
:mtropología existe un potente movimiento antievolucio-
:lista, cuyo principal representante fue Franz Boas a co-
:nienzos de este siglo. En 1918 un ilustre etnólogo america-

202
203
BIBLIOTECA DE ~~TROPOLOGíA

Dirigida por José R. Uobera

Adam Kuper
Antropología y antropólogos. La escuela británica: 1922-1972

2 José R. Llobera (ed.)


La antropología como ciencia
Textos de Lévi-Strauss, Radcliffe-Brown, Goodenough, Kaplan, Manners, Pa-
noff, Rivers. Malinowski, Lewis, Giuckman, Conklin. Leach, Eggan, Murdock,
McEwen, Jarvie, Beattie, Tylor, !pala y Nutini, compilados y prologados por
José R. Llobera.

3 J. S. Kahn (ed.]
Ei concepto de cultura: textos fundamentales
Textos de Tylor, Kroeber, Malinowski, White y Goodenough, compilados
y prologados por J. S. Kahn.

4 A. R. Radcliffe-Brown
El método de la antropología social
5 Louis Dumont
Introducción a dos teorías de la antropología social
Textos adicionales de Ge!/ner, Beattie, Schneider, Rivers, Fortes, Leach,
Goody, Needham y Dumont.

En preparación:

E. R. Leach
Sistemas políticos de las tierras altas de Birmania
M. G. Smith (ed.]
Antropología política
Maurice Gode/ier (ed.)
Antropología y economía
A. R. Radc!iffe Brown y Dary/ Farde (eds.)
Sistemas africanos de parentesco y matrimonio
E. E. Evans-Pritchard
Brujería, oráculos y magia entre los azande
E. E. E•1ans-Pritchud
Los nuer
Antropología y sociología en otras colecciones

Colección Argumentos
Barrington Moore Jr.
Poder político y teoría social
Paolo Caruso
Conversaciones con Lévi-Strauss, Foucault y Lacan
Claude Lévi-Strauss, Pierre Bordieu y otros
La teoría
Timothy Raison (ed.)
Los padres fundadores de la ciencia social
Raymond Bellour
El libro de los otros
(Conversaciones con Lévi-Strauss y otros)
E. R. Leach
Un mundo en explosión

Guías alfabéticas
Jean Duvignaud
La sociología

Ediciones de Bolsillo
Cathérine Backes-Ciément
Lévi-Strauss. Presentación y antÓlogía de textos

Cuadernos Anagrama
E. R. Leach, Lévi-Strauss, antropólogo y filósofo; Claude Lévi-Strauss,
y el barbero
_Ciaude Lévi-Strauss, El futuro de los estudios del parentesco
Osear Lewis, La cultura de la pobreza; Osear Lewis, K. S. Karol y Carlos '""'~rne::>.
Pobreza, burguesía y revolución
Jean-Marie Vincent, La metodología de Max Weber; Max Weber,
metodológicos de la sociología
Julian Pitt-Rivers, Tres ensayos de antropología estructural
Marco lngrosso, Modelos socioeconómicos de Interpretación
tinoamcricana: de Mariáteguf a Gunder Frank
Rodolfo Stavenhagen, Ernesto Lac!au, Ruy Mauro Marini, Tres ensayos
América Latina
Ciaude Lévi-Strauss. Melford E. Splro, Kathleen Gough, Polémica sobre el
y la universalidad de la familia
Claude Lévi-Strauss, Estructuralismo y ecología
Bruce G. Trigger, Friedrich Engels, Sobre el origen
Luc de Heusch. El estructuralismo heterodoxo de Mary Oouglas;
Sobre la naturaleza de las cosas
Maurice Godelier, Funciom;lismo, estructuralismo y marxismo
K:ent V Fianner¡_ La evolución cultural de fas civilizaciones

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