Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Lucas 22:61-62 dice, “En ese mismo instante el Señor se volvió a ver a
Pedro, y entonces Pedro se acordó de las palabras del Señor, cuando
le dijo: “Antes de que el gallo cante, me negarás tres veces. 62
Enseguida, Pedro salió de allí y lloró amargamente.”
PAUSA
¡Pedro negó a Cristo! Jesús le había dicho a Pedro, que tenía que
negarse a sí mismo. ¡EL “YO” DEBE DE SER IGNORADO! Esta es la
raíz del verdadero discipulado. Pero Pedro no lo entendía… ¡NO
PODIA OBEDECERLO!
¿Cómo fue que Pedro – este Pedro carnal, testarudo, ¿y con tanto
amor propio -- sé pudo convertir en el hombre de Pentecostés? ¿Y
cómo pudo escribir sus increíbles epístolas? ¡Es que ahora, Cristo
estaba a cargo! ¡Cristo velaba por él! Cristo le enseñaba y lo bendecía.