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REGLAS DE SOLUBILIDAD

1. Para que una sustancia se disuelva en un disolvente inerte, debe tener una polaridad semejante
a él.

2. La mayoría de las moléculas orgánicas tienen tanto una parte polar como una parte no polar,
por lo que, a medida que aumenta la parte de hidrocarburos de la molécula, las propiedades de
los compuestos se aproximan a la de los hidrocarburos de los cuales se derivan.

3. En una serie homóloga la solubilidad decrece al aumentar el peso molecular.

4. Los disolventes reactivos pueden ser: ácidos para disolver bases, y bases para disolver
sustancias con propiedades ácidas. Los ácidos concentrados comúnmente disuelven sustancias de
grupos que pueden formar sales de oxónio, sulfónio y amonio, entre otros.

5. Un valor elevado de la constante dieléctrica y su capacidad para formar enlaces de hidrógeno,


conforman un disolvente malo para sustancias no polares.

6. Asimismo, la prueba de solubilidad resulta un excelente complemento para un análisis


elemental orgánico, pues el comportamiento de una sustancia orgánica pura, frente a diversos
disolventes, frecuentemente puede señalar la presencia de ciertos grupos funcionales y conducir
así hacia información más específica acerca de ésta. En algunas ocasiones pueden hacerse
deducciones aproximadas del peso molecular, ya que los miembros con menos de 5 átomos de
carbono generalmente son solubles en agua, mientras que los homólogos superiores son
insolubles.

7. También, las pruebas de solubilidad pueden dar a conocer si el compuesto es una base débil
(amida), una base fuerte (amina), un ácido débil (fenol), un ácido fuerte (ácido carboxílico), o una
sustancia neutra (aldehído, cetona, alcohol, éster).
Regla 1

Todas las sales de los metales del grupo 1 (alcalinos) y del amonio (NH4+) son solubles. Los
cationes son los que marcan la solubilidad y no los aniones.

Regla 2

Todas las sales de nitrato (NO3), permanganato (MnO4), clorato (ClO3), perclorato (ClO4) y
acetatos (CH3COO) son solubles.

Todos estos aniones son monovalentes, voluminosos e integran compuestos iónicos solubles.

Regla 3

Las sales de cloruros (Cl), bromuros (Br), yoduros (I), cianuros (CN) y tiocianatos (SCN), son
solubles en agua. Sin embargo, esta regla sí presenta varias excepciones, las cuales se deben a los
metales plata (Ag+), mercurio (Hg22+) y plomo (Pb2+). Los cationes voluminosos tienden a formar
compuestos insolubles.

Los fluoruros de metales alcalinos o de amonio, tienden a ser insolubles o ligeramente solubles.
Una excepción es el fluoruro de plata, AgF, el cual es muy soluble en agua.

Regla 4

La mayoría de los sulfatos son solubles. No obstante, hay varios sulfatos que son insolubles o poco
solubles, y algunos de ellos son los siguientes: BaSO4, SrSO4, CaSO4, PbSO4, Ag2SO4 y Hg2SO4.
Los cationes voluminosos tienden a formar compuestos insolubles; excepto el rubidio, ya que es
un metal alcalino.

Regla 5

Los hidróxidos (OH) son insolubles en agua. Pero de acuerdo con la regla 1, todos los hidróxidos de
los metales alcalinos (LiOH, NaOH, KOH, etc.) son solubles, por lo que son una excepción a la regla
5. Asimismo, los hidróxidos Ca(OH)2, Ba(OH)2, Sr(OH)2 y Al(OH)3 son ligeramente solubles.

Regla 6

Todos los ácidos inorgánicos y los halogenuros de hidrógeno (HX, X= F, Cl, Br y I) son solubles en
agua.

Regla 7
Aniones polivalentes tienden a originar compuestos insolubles. Esto aplica para los carbonatos
(CO32-), cromatos (CrO42-), fosfatos (PO43-), oxalatos (C2O42-), tiosulfatos (S2O32-) y arsenatos
(AsO43-).

No obstante, las sales con los metales alcalinos y el amonio son excepciones a esta regla, pues son
solubles en agua.

Regla 8

La mayoría de los óxidos (O2-) y sulfuros (S2-) son insolubles en agua. Esto se observa cuando se
intenta pulir los metales empleando únicamente agua.

De nuevo, los óxidos y los sulfuros de los metales alcalinos sí son solubles en agua. Por ejemplo, el
Na2S y (NH4)2S son una de esas dos excepciones. A lo que respecta a los sulfuros, son de los
compuestos más insolubles de todos.

Por otra parte, algunos óxidos metálicos alcalinotérreos también son solubles en agua. Por
ejemplo, CaO, SrO y BaO. Estos óxidos metálicos, juntos con el Na2O y K2O, no se disuelven en el
agua, sino que reaccionan con ella para originar sus hidróxidos solubles.

FACTORES QUE AFECTAN LA SOLUBILIDAD

Estos factores son: superficie de contacto, agitación, temperatura y presión.

Superficie de contacto: Al aumentar la superficie de contacto del soluto con el solvente, las
interacciones soluto-solvente aumentarán y el soluto se disuelve con mayor rapidez. El aumento
de la superficie de contacto del soluto se favorece por pulverización del mismo.

Agitación: Al disolverse el sólido, las partículas del mismo deben difundirse por toda la masa del
disolvente. Este proceso es lento, y alrededor del cristal se forma una capa de disolución muy
concentrada que dificulta la continuación del proceso, al agitar la solución se logra la separación
de la capa y nuevas moléculas del disolvente alcanzan la superficie del sólido.

Temperatura: Al aumentar la temperatura se favorece el movimiento de las moléculas en la


solución y con ello su rápida difusión. Además, una temperatura elevada hace que la energía de
las partículas del sólido, iones o moléculas sea alta y puedan abandonar con facilidad su superficie,
disolviéndose.

Presión: Los cambios de presión ordinarios no tienen mayor efecto en la solubilidad de líquidos y
de sólidos. La presión tiene gran efecto en la solubilidad de gases. La solubilidad de gases
aumenta cuando se incrementa la presión. Al disolver un gas en un líquido, la solubilidad del gas
es directamente proporcional a la presión.

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