Según Foucault, el poder no es una sustancia, sino un ejercicio, y no está centralizado en
el Estado sino difundido en el tejido social El poder no es una sustancia, sino un ejercicio. El poder no solo es negativo o represivo en forma de ley, sino que en las sociedades liberales crea una sensación de libertad y no reprime el deseo. El poder no se localiza solo en el Estado, sino que se difunde en toda la sociedad El poder designa relaciones entre sujetos que de alguna manera forman una asociación o grupo Para ejercer el poder se emplean técnicas de doma, procedimientos de dominación y sistemas para obtener la obediencia. El ejercicio del poder puede estar legitimado por acuerdos sociales o encubierto Foucault se interesó por el "cómo" del poder, es decir, el conjunto de mecanismos por los cuales los sujetos constituyen su subjetividad existe una profunda relación entre poder y saber. El constructo de Foucault le permitió descubrir que el conocimiento requiere un marco de poder para su realización y, por el contrario, el conocimiento es un producto del poder. La comprensión de Foucault de la relación entre poder y conocimiento tiene implicaciones importantes para comprender cómo se produce, circula y legitima el conocimiento en la sociedad. Destaca las formas en que el poder opera a través del conocimiento, dando forma a lo que sabemos y cómo lo sabemos. SEXUALIDAD Según Foucault, vivimos en una sociedad donde los mecanismos de poder están dirigidos hacia el sexo, el cuerpo y la vida. Argumentó que el discurso sobre la sexualidad ha proliferado durante la época moderna, a medida que ciertas profesiones comenzaron a examinar la sexualidad de manera científica, lo que llevó a la constante confesión de sentimientos y acciones sexuales por parte de los examinados. Foucault también creía que la producción de la sexualidad es el resultado de los mecanismos de poder en la sociedad. Argumentó que la sexualidad no es sólo un conjunto de discursos, prácticas e instituciones que regulan a los individuos desde la perspectiva de la sexualidad, sino que es “la producción de la sexualidad” misma. En general, el trabajo de Foucault sobre la sexualidad enfatiza las formas en que las relaciones de poder dan forma a nuestra comprensión y experiencia del sexo y la sexualidad.