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Incertidumbre generalizada

Hablar del futuro es una conjetura. Todavía no sabemos qué curso va a tomar. Es momento para
asumirla con una profunda responsabilidad misionera tomar en serio que significa la misión de la
iglesia en un contexto o conyuntura en la que estamos viviendo. ¿Qué es ser iglesia y qué debe
hacer la iglesia? Ester 4:14.

La iglesia ha estado no a la altura de los grandes momentos que se han vivido. Pero cuando ha
respondido a la altura de la responsabilidad misionera del momento que ha vivido ha provocado
cambios.

Debemos tener actitud espiritual (Hch 15:28) para estar a la altura y para mirar a las alturas. La
iglesia no siempre ha tenido actitud espiritual para responder ante las oportunidades o problemas
que, aunque no son las actitudes distintivas de la iglesia, deben ser influenciadas: política,
económica, social. La actitud que distingue al pueblo de Dios es la actitud espiritual, que significa
aquí me pongo de acuerdo con el Espíritu para responder sobre esta situación de lo cual no hay
nada escrito.

Pentecostalismo post COVID-19.

Tendencias post-COVID

1. Aumento de la desigualdad social e injusticia económica: américa latina es la zona


geográfica más violenta del mundo, más desigual, injusticia, corrupción y deterioro del
medio ambiente. Posiblemente esto aumentará post-COVID.
2. Descenso de la movilidad de las personas (efecto sobre el turismo y grandes eventos).
3. Extensión de la agorafobia y aumento de la xenofobia, segregación y supremacismo:
temor a estar encerrado y el deber de estar encerrado.
4. Reforzamiento de procesos tecnológicos en curso.
5. Interés por la ética y los valores morales (medio ambiente, minorías, bienestar animal,
etc.).
6. Atención a la vida saludable y bienestar espiritual. Éxito relacionado con la calidad de vida:
se están vendiendo más libros sobre espiritual que de doctrina y teología.
7. Polarización política, riesgos geopolíticos, mayor activismo social. Hartazgo ciudadano.
8. Agravamiento de grandes males sociales: violencia de género, violencia infantil, otros.
9. Preocupación por preguntas existenciales y del sentido de la vida: ¿qué es el ser humano?
Somos limitados, no tenemos el control de todo y somos interdependientes (parábola del
buen samaritano; Mt. 25 en el necesitado encontramos el mismo rostro de Jesús). Muerte,
vida después de la muerte y sentido de vida.

Prioridades para tener en cuenta en nuestros ministerios

1. Sensibilidad ético-social: la iglesia debe asumir con toda responsabilidad la problemática


social. Misión integral.
2. Innovación eclesiológica: oportunidad inmensa para hacerlo. ¿Qué es la iglesia y para qué
es la iglesia? Se debe pensar en un nuevo modelo de hacer iglesia en América Latina.
3. Renovación de la espiritualidad: Hemos atendido más la piedad, el testimonio, pero la
espiritualidad como vivencia de la interioridad personal, como el cultivo de nuestra
relación con Dios, el arte de la contemplación con Dios, la profundización de la
espiritualidad humana. El arte de cuidar la espiritualidad en nuestras comunidades.
4. Creatividad pastoral: no ha faltado para entrar en la música, la farándula, de la empresa
editorial, los medios de comunicación, etc. Este es el momento para que con la creatividad
del Espíritu podamos atender estas nuevas necesidades y nuevos desafíos. Estamos para
responder a los nuevos desafíos del futuro o para contribuir a la creación de un nuevo
futuro.

Estos deben pasar a la prioridad de la agenda ministerial de la iglesia.

El templo pero desde la perspectiva de Hechos: sacar la fe del templo y ponerla en las casas.
Después del siglo III la iglesia católica sacó la fe de las casas y las llevó otra vez al templo.

Propuestas teológicas para la acción

El común denominador en toda la video-conferencia es que hay un futuro que desconocemos y al


cual tenemos que dar algunas respuestas o de qué manera somos parte de la respuesta. Uno de
los ejes importantes de ella es, por un lado, la búsqueda de las personas de sentido, de
espiritualidad, es algo muy fuerte, junto con la otra cara de la moneda, el rechazo a una fe
institucionalizada. En esto ayuda la creatividad pastoral y la innovación eclesiológica.

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