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COLUMNA NARRATIVA

Instrucciones: utilice el siguiente esquema para colocar los recursos necesarios que empleará en su trabajo
individual.

TEMA PERSONAJES

Alicia-protagonista
Soledad y Esperanza Marta
Violador

NARRADOR ESPACIO (Lugares)

La banca de una calle


Narrador Protagonista Un callejón oscuro

TIEMPO (PRESENTE, PASADO, FUTURO) ACCIONES

Una violación que cambio por completo su vida.


Pasado y presente

TIPO DE TEXTO NARRATIVO ATMÓSFERA

Estilo directo/Narrativo Angustia; soledad, esperanza.

ORDEN CRONOLÓGICO GÉNERO LITERARIO


(Lineal o discontinuo)
Novela
Discontinuo
Aquel día de mi tragedia:
Y ahí estaba yo deambulando por las rocosas calles de mi pueblo, donde
ya no me sentía cómoda ni segura, viendo a cada hombre como un
depredador mira a lo que va a ser su caza; yo estaba ahí pero no estaba
ahí, caminada sin ningún rumbo cuando de repente vuelvo a la vida viendo
a un grupo de niños jugar por las calles de lo más felices que pudieran
estar; me duele mucho mi alma que no saben que están en su mejor etapa
de la vida, porque al crecer se encontraran con la cruda realidad de este
mundo y sus desgracias; me senté en una banca casi destruida cuando se
me acerca Marta una chica no muy menor a mi y me pregunta que era lo
que me pasaba, y recuerdo muy bien sus palabras; “oye te encuentras
bien, parece que estas mal, te gustaría decirme que es lo que te sucede,
claro si es que tu quieres nada más” La verdad es que yo no quería hablar
con nadie de lo que me había pasado y menos con una persona extraña,
sin embargo me di cuenta que necesitaba decirlo, y si no era a ella no se lo
diría a nadie ya que no tengo a nadie, no tengo familia ni conocidos, pude
sentir que ella de verdad quería ayudarme o simplemente escucharme,
que eso era lo que yo más necesitaba en ese momento; necesitaba a
alguien que me escuchará todo lo que tenía que decir y así poder
desahogarme de la gran tragedia que me volteo el mundo por completo. Y
fue en ese momento cuando yo comencé a relatar la desgracia de mi vida.

Me ocurrió una gran tragedia hace tres días y de verdad me sorprende el


poder contarla y estar viva, aunque siento que me arrebataron la vida
entera; Era de mañana una mañana normal y corriente como siempre, me
levante de mi cama a alistarme para salir al trabajo como siempre, ese día
iba más temprano ya que las huelgas siempre me retrasan porque siempre
tapan las calles, claro que me parece correcto que hallan personas que
defiendan su punto de vista para ellos y para los demás como yo que no
podemos participar de ellas, de verdad que me gustaría poder participar en
una de ellas pero como todos dicen soy mujer y debo comportarme como
tal, además yo se que siempre pasan tragedias en esas huelgas; Bueno ya
iba de salida para mi trabajo, al llegar a mi trabajo me puse el delantal y
empecé a lavar el suelo de mi señora, ya se que a ella siempre le gusta
que este impecable, ese día era día de pago por lo que en la tarde ya
había terminado de trabajar y ella me pago lo habitual y la verdad es que
era una gran miseria para lo que ella ganaba ya que era una gran familia
empresaria capitalista; pero nunca me quejaba del pago enfrente de ellos,
porque podría ser que me echaran; Bueno ya eran alrededor de las 6:30
de la tarde cuando me encontré estancada en el vía central de donde
siempre pasaba para regresar a mi casa, había una gran manifestación por
lo cual tuve que irme por unos callejones los cuales nunca me gusta pasar
y siempre evito, los llaman los callejones prohibidos, ocurre tanta
delincuencia y son de los callejones más pobres que hay, la verdad es que
yo soy muy pobre pero no llego al extremo de tener que vivir en esas
condiciones, me encontraba caminado un poco con deprisa para poder
salir luego de esos callejones donde se escuchaba a los gatos maullar, a
los perros llorar y a las personas pelear con gritos y golpes. Cuando de
repente escucho el mismo ritmo de mis pasos caminar detrás de mi la
verdad es que ni quise voltear a ver ya que me enfoque en apurarme más,
pero si yo me apresuraba la otra persona igual así que me decidí, decidí
parar y voltear en eso me di cuenta de que era una mujer y ella siguió
caminado y cuando pasa enfrente de mi me da un pequeño empujón y se
me cae una bolsa la cual llevaba y donde estaba mi dinero, rápidamente
me agache para recogerla y al momento de subir habían dos hombres uno
detrás de mi y el otro frente mío, sentí de repente unos escalos fríos, y solo
recuerdo haber tragado profundamente un poco de saliva, el hombre de
enfrente me pide mi bolso, ellos me querían robar y yo sujete con firmeza
mi bolso pero ellos me lo arrebataron, cuando ya tenían en sus manos mi
bolso recuerdo que el hombre de enfrente mío le dijo al de atrás “Listo lo
tenemos, vámonos” y escuche por primera vez la vos del hombre causante
de mi desgracia. El le dijo con una vos espeluznante y muy gruesa, “Yo no
he acabado” el otro hombre contestándole “ya esta tenemos el dinero,
vamos” y de nuevo le dijo “No he terminado; VETE”

Sabia en mi interior que esto no iba a terminar nada bien para mí, el
hombre de enfrente mío salió corriendo y yo iba a hacer lo mismo pero el
hombre de atrás me sujeto con fuerza y me puso y pañuelo en mi nariz, lo
que único que pensé es que podía gritar y retorcerme para que alguien me
auxiliara, sin embargo me di cuenta que estaba perdiendo la conciencia
sentía como perdía las fuerzas y poco a poco iba cerrando mis ojos, lo que
más tengo presente es que mientras todavía me quedaban fuerza luche lo
mas que pude, recuerdo que mujeres me volteaban a ver con sus rostros
de angustia pero ni una de ellas me ayudo simplemente continuaron
haciendo lo que estaban haciendo, solo me voltearon el rostro.

Recuerdo estar en un lugar muy oscuro, recuerdo esa vos tan espelúznate
hablarme en mi oído, el hombre estaba encima mío, y yo no tenia fuerzas
ni la conciencia al cien, por lo cual no me pude mover, pero si recuerdo
todo lo que ese hombre hacía, sentía una gran impotencia de que no podía
hacer nada y recuerdo que simplemente volví a cerrar mis ojos y decidí
rendirme y esperar no volver a abrirlos nuca más en este mundo.

Volvían mis fuerzas y mi conciencia al cien cuando pude sentir que estaba
en una banca cerca de un parque tirada y con mi ropa rasgada, era muy
temprano no había nadie en las calles, y me reincorpore y entendí lo que
me había pasado, un ser asqueroso me había violado y me dejo tirada en
una banca de una calle somo un costal de papas; recuerdo sentir
nuevamente la piel de gallina, empecé a sudar frio y a ponerme muy
pálida, empecé a llorar desconsoladamente, empecé a gritar como nunca,
unas cuantas personas se percataron de los grandes gritos que estaba
haciendo y recuerdo que una persona un hombre ya mayor se acercó,
extendió su mano para levantarme del suelo, pero yo empecé a gritar
mucho mas fuerte así que mejor se fue el señor.

Tenia un gran dolor de vientre es algo inexplicable, los labios los tenía
secos me dolía mucho caminar así que me quede como por tres horas
más en ese banco y al final decidí por fin regresar a mi casa, recuerdo
dormir hasta el siguiente día y ese día no fui a trabajar y no me importo si
la señora me despediría yo ya tenia la vida acabada, Sali de nuevo y no
me sentía segura en ningún lado sentía que las personas me miraban y
me juzgaban, de algún modo sentía que la culpa de todo lo que me paso
era mía, que pude luchar más o simplemente haber echo algo para que no
hubiera pasado. Me sentía muy débil así que decidí sentarme en una
banca, y eso es lo que he estado haciendo desde hace dos días venirme a
sentar en esta pocilga de banca que es donde ese cerdo de hombre me
dejo tirada, y bueno me siento muerta, ya no tengo nada más que hacer,
esta es la desgracia de mi vida.

Marta con un rostro muy pálido me dijo al terminar de contarle mi historia,


“No es tu culpa, no podías hacer nada ante esa situación”, ella muy
amable me recito unas cuantas palabras que de cierto modo me volvieron
un poco a la vida, ya no miraba tan oscuro mi alrededor y comprendí que
yo no tenia la culpa, y al ver bien a Marta me di cuenta de que era una
señora muy bien vestida, creo que la tela de su vestido era una de las
mejores telas que existían; y me dijo, “Nunca me presente”; “Hola soy
Marta y busco a grandiosas mujeres como tu para que afrontemos a este
mundo lleno de machismo y para que nos valoren como deberían, trabajo
en una asociación y junto a mi esposo queremos que nos acompañes para
salir todos juntos adelante; claro solo si tú quieres.”

Yo me quede sorprendida, desde ese momento he contado miles de veces


mi historia, la cual llamaba mi desgracia, pero ahora la llamo una nueva
oportunidad…

Hola me llamo Alicia y desde que me violaron apoyo a miles de mujeres


que pasan por maltrato o situaciones similares, para que puedan seguir
adelante y no se queden estancadas como me hubiera quedado yo si no
fuera por una persona que se puso la mano en el corazón y me ayudo a
que saliera adelante
Entre mujeres nos debemos apoyar y por más solas que nos sintamos
siempre hay mas de alguna persona que está ahí para apoyarnos.

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