Está en la página 1de 6

I.

Planteamiento del problema

Antecedentes del tema. La Administración del estrés laboral en tiempo pandemia.

La administración al ser un proceso que involucra una amplia gama de actividades


en las cuales se presentan pro y contras al momento de estar laborando podemos
afirmar que dentro de ellas encontramos lo que es el estrés laboral que es un
problema que nos afecta a todos, pero no al mismo tiempo.
Este término lo introdujo implícitamente Henry Fayol a quien se le conoce como el
padre de la teoría moderna administrativa, ya que él se basó en su propia
experiencia introduciendo los reconocidos catorce principios administrativos. Fayol
propone que si no se cumplen uno o varios de ellos pueden significar factores de
estrés para los trabajadores de una organización, por el contrario, si se aplican
estos principios el porcentaje de estrés dentro de una organización, disminuirá en
un grado considerable.
Por otro lado, si se analiza bien se puede decir que durante la pandemia del
COVID 19 no se cumplieron estos principios debido a que ninguna organización
estaba preparada para afrontar una nueva metodología laboral y los integrantes
mucho menos, lo cual le dio una gran ventaja de evolución exponencial al estrés
laboral, lo cual indicaba la implementación inmediata de la administración del
estrés laboral para contrarrestar esta problemática.

Bibliografía
Soto, B. (21 de 10 de 2014). Henry Fayol y el estres. Recuperado el 11 de 07 de 2023, de
Trabajando con estres:
https://trabajandoconestres.wordpress.com/2014/10/21/henry-fayol-y-el-estres/
Marco teórico

El estrés

Definición de estrés

El estrés es imprescindible para la vida, pero tenía todo el sentido hace miles de

años cuando el ser humano se dedicaba a la caza y éste le alertaba del peligro. Ahora

las adversidades son muy diferentes y las situaciones cotidianas o laborales nos

llevan a activar ese mecanismo de estrés sin necesidad de que nuestra vida corra

peligro. En la actualidad existen muchos conceptos sobre el estrés y a través de

fuentes verídicas se dan a conocer los siguientes:

El concepto de estrés proviene del inglés stress, presión, tensión, esfuerzo y está

estrechamente relacionado con el cúmulo de trastornos y de aflicciones en las

personas de ciertos sucesos que se presentan en la organización y en el entorno. El

término suele usarse para describir los síntomas que muestran las personas como

respuesta a la tensión provocada por presiones, situaciones y acciones externas:

preocupación, irritabilidad, agresividad, fatiga, ansiedad y angustia, lo que perjudica

su desempeño y, sobre todo, su salud. (Chiavenato, 2009)

(Pereira, 2009) Manifiesta que el estrés ha sido un tema de interés y preocupación

para diversos científicos de la conducta humana, por cuanto sus efectos inciden

tanto en la salud física y mental, como en el rendimiento laboral y académico de la

persona.

Así mismo (Gallardo, 2021) considera estrés al mecanismo que se pone en marcha

cuando una persona se ve envuelta por un exceso de situaciones que superan sus

recursos. Por lo tanto, se ven superados para tratar de cumplir con las demandas que
se le exigen para superarlas porque en estos casos, el individuo experimenta

una sobrecarga.

Tipos de estrés normal

Según nos lo relata (Gallardo, 2021) la Asociación Americana de Psicología (APA)

determina que el estrés en su fase normal tiene dos tipos:

 Estrés agudo: Es un estrés que se ocasiona en un breve periodo de tiempo y

normalmente desaparece con rapidez, es frecuente en todo el mundo puesto que

aparece cuando se vive un proceso nuevo o excitante, o cuando se pasa por

situaciones complicadas, como rupturas de pareja; dado al escaso tiempo que

dura no suele ocasionar problemas importantes para la salud.

 Estrés crónico: Se padece durante un periodo de tiempo más prolongado que el

estrés agudo, este tiempo puede variar, desde varias semanas a meses. Las

personas que padecen este tipo de estrés pueden acostumbrarse tanto a la

situación de activación, que pueden llegar a no darse cuenta de que lo viven y

acaban sufriendo problemas de salud. Suele aparecer cuando las personas no ven

una salida a una situación compleja y deprimente, algunas veces aparece por una

experiencia vivida en la niñez que se interioriza y se mantiene latente desde

entonces.

Tipos de estrés de acuerdo con las emociones y sensaciones

Como señala (Hernandez, 2023) Para aprender a cuidar nuestra salud mental es de gran

importancia mantenernos bien informado, por esta misma razón cabe recalcar estos dos

tipos de estrés de acuerdo con las emociones y sensaciones estos son:


 Eustrés también conocido como estrés positivo se relaciona directamente con

la hormona de la felicidad (denominada dopamina), partiendo de la interacción

entre el estresor y la experiencia corporal máxima. Hace alusión principalmente

a la capacidad de afrontamiento de un individuo, es decir, todo el conjunto de

acciones que permiten una mejora en el rendimiento para realizar determinada

tarea; permite que salgamos que nuestra zona de confort tomando ciertos riesgos

que no son de naturaleza peligrosa para poder llegar a la autorrealización

personal.

 Distrés es también conocido como estrés negativo, el cual a nivel fisiológico se

asocia con la producción de cortisol (hormona encargada de liberarse ante la

presencia de estrés), en este tipo de estrés se produce un desequilibrio fisiológico

y psicológico y es el que conocemos comúnmente como “estrés”. A nivel

general se activa por una amenaza ya sea interna o externa que implica un

esfuerzo excesivo, este tipo de estrés es perjudicial para la salud.

Componentes del estrés

De acuerdo con (Chiavenato, 2009) se distinguen tres componentes básicos que

conforman el estrés y estos son:

 Desafío percibido: Es el primer componente del estrés y surge de la

interacción entre las personas y su percepción del entorno (no

necesariamente de la realidad). Por ejemplo: los chismes o los rumores de

que se cerrará una empresa pueden provocar estrés en un trabajador, aun

cuando no exista una amenaza real.

 Valor importante: El desafío sólo provocará estrés si representa una amenaza

para algo que la persona considere importante o valioso. Ejemplo: Los


mismos rumores del cierre de una empresa tal vez no provoquen estrés en

una persona joven que tiene mejores oportunidades por delante.

 Incertidumbre sobre la resolución: Cada persona interpreta la situación en

función de su capacidad para enfrentar eficazmente el reto que se presenta, si

una persona percibe que puede manejarlo con facilidad, no habrá estrés.

También existe el efecto contrario, es decir, si la persona percibe que no

existe posibilidad alguna de que el problema se resuelva, sentirá poco estrés.

La tensión máxima se presenta cuando la dificultad que alguien percibe en

un reto es muy similar a su capacidad para cumplir lo que se le pide. A

medida que el grado de dificultad y el grado de capacidad se alejan, el

resultado se vuelve cada vez más incierto.

Fases del estrés:

Para explicar la relación entre el estrés y los síntomas fisicoquímicos (Chiavenato,

2009) nos narra que Hans Selye desarrolló la teoría del síndrome de adaptación general

que según él, la reacción del organismo ante el estrés consta de tres fases:

 Alarma: Se presenta cuando la persona identifica y percibe la amenaza, sea

física como ser daño corporal o psicológica (la posibilidad de perder algo, como

un empleo). Los cambios fisiológicos antes descritos comienzan en esta fase.

 Resistencia: La persona se hace resistente a las presiones creadas por la amenaza

inicial. Los síntomas fisiológicos que se derivan de la fase de alarma

desaparecen, a pesar de que la causa del estrés persiste. Al parecer, la resistencia

se logra debido al aumento de los niveles de hormonas que secreta la glándula

pituitaria o las suprarrenales.


 Agotamiento: Cuando la exposición a la causa del estrés dura mucho tiempo, la

persona entra en la fase de agotamiento ya que la actividad de la glándula

pituitaria y de las suprarrenales disminuye y la persona no logra adaptarse al

estrés continuo. Reaparecen muchos de los síntomas fisiológicos de la fase de

alarma. Si el estrés persiste, la persona empieza a sufrir fatiga, un estado de

agotamiento que puede conducir a un daño físico grave, e incluso provocar la

muerte por infarto u otro padecimiento cardiaco.

También podría gustarte