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USO Y HABITACION.

Dr. Carlo BELLIN

1. CONCEPTO. El uso se halla definido por el art. 541/1º y puede asumir 2 formas:
1º) servirse de la cosa ('uso propio');
2º) exigir una porción de los frutos que la cosa produce ('uso impropio').
En el primer caso, el usuario hace un uso directo de la cosa; en el segundo no,
careciendo su derecho de inmediatez. En este caso no se ve alterado el principio 'servitus in
faciendo consistere nequit' pues se trata de obligación de dar.
La habitación está definida por el art. 542/2º y consiste en 'habitar gratuitamente la casa
de otro'. Por casa, debe entenderse todo inmueble urbano o rural, sujeto al régimen común o
de propiedad horizontal apto para casa habitación, lo cual presupone la existencia de una
construcción.
Si la habitación se constituye onerosamente para la mayoría de la doctrina se ingresa
en el derecho real de uso.

2. LIMITES DE ESTOS DERECHOS. Art. 545/1º. Su límite son las 'necesidades personales
del usuario o habitador'. El concepto de necesidades personales es un concepto variable:
aumenta y disminuye de acuerdo a las circunstancias (arts. 545 a 547).
Si por el título constitutivo se le da una extensión mayor que desnaturalice el uso se
ingresaría en el campo del usufructo, lo cual tiene importancia desde que no tienen lugar los
caracteres de indisponibilidad e inembargabilidad.

3. INHERENCIA PERSONAL. Art. 549. El vínculo a la persona del titular del derecho es más
fuerte que en el usufructo y ello trae como consecuencia que:
1º) solo se refiere a las necesidades personales de su titular;
2º) es incedible (art. 549);
3º) es inembargable (art. 2368 Nº 8). La razón de la incedibilidad surge de que la
extensión del derecho la dan las necesidades del titular y no las del cesionario;
4º) no puede beneficiar a una persona jurídica (hay una 'incapacidad específica de
goce').

4. CONSTITUCION Y EXTINCION. El art. 542 remite a las normas de usufructo para la


constitución y extinción de estos derechos.
La habitación y uso legales resultan de:
1º) los previstos por el art. 881, en la redacción dada por la ley Nº 16.081, que creó
derecho de habitación para el cónyuge supérstite y conjuntamente un derecho de uso respecto
de los muebles que alhajaban el hogar conyugal;
2º) la previsión del art. 23 de la ley Nº 16.095, de 26 de octubre de 1989, que crea
derecho de habitación para discapacitados.

5. DERECHOS Y OBLIGACIONES. En cuanto a los derechos y obligaciones del usuario y el


habitador la ley no remite a las normas del usufructo, sin perjuicio de que habrán de tenerse
presentes en cuanto pueden aplicarse a cada caso concreto por analogía.
Se establece que:
a) no hay obligación de afianzar (art. 543/1º);
b) hay obligación de inventariar en caso de (art. 543/2º):
- habitación;
- cuasi-uso.
c) obligación de contribuir a las expensas ordinarias de gastos y conservación en
proporción al beneficio que el predio les reporta (art. 548);
d) art. 547: solo se refiere al uso. El usuario solo tiene derecho a los frutos comunes, no
a los de mejor calidad. Puede modificarse por acuerdo de partes.

6 .USO Y HABITACIÓN DE ORIGEN LEGAL.


A partir de la ley N° 16.081, se consagró por el legislador los derechos de uso y habitación del
cónyuge supérstite, utilizándose la técnica legislativa de incorporarse guiones al art. 881 del
CC. Consagra bajo determinadas condiciones, que el viudo/a permanezca en el hogar
conyugal, evitando se produzca la partición, relegando a herederos y legatarios a la figura de
nudos propietarios, esto es quedándose solo con el poder de disposición, esto es; sin el uso y
el goce.

Cosa similar pero con restricciones más severas consagro el art. 11 de la Ley N| 18.246
conocida como de unión concubinaria. Para que nazcan estos derechos de creación legal,
debe el concubino supérstite tener mínimo 60 años, haber convivido 10 años con el causante,
y no tener recursos económicos para procurarse una vivienda.

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