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El sistema educativo del Antiguo Egipto estaba disponible principalmente para los niños de familias adineradas y se centraba en enseñanzas como la escritura, astronomía, religión, música y lenguaje. La educación estaba a cargo de sacerdotes en escuelas o templos y se enseñaba de forma rutinaria a través de la memorización y copia de signos. Las niñas generalmente no tenían acceso a la educación formal y se quedaban en casa para las tareas domésticas.
El sistema educativo del Antiguo Egipto estaba disponible principalmente para los niños de familias adineradas y se centraba en enseñanzas como la escritura, astronomía, religión, música y lenguaje. La educación estaba a cargo de sacerdotes en escuelas o templos y se enseñaba de forma rutinaria a través de la memorización y copia de signos. Las niñas generalmente no tenían acceso a la educación formal y se quedaban en casa para las tareas domésticas.
El sistema educativo del Antiguo Egipto estaba disponible principalmente para los niños de familias adineradas y se centraba en enseñanzas como la escritura, astronomía, religión, música y lenguaje. La educación estaba a cargo de sacerdotes en escuelas o templos y se enseñaba de forma rutinaria a través de la memorización y copia de signos. Las niñas generalmente no tenían acceso a la educación formal y se quedaban en casa para las tareas domésticas.
Cuando hablamos del Antiguo Egipto nos referimos a una
sociedad milenaria que tuvo sus inicios unos 3100 años antes de cristo, que terminó unos 300 años antes de nuestra era, cuando ya se encontraban más desarrolladas las culturas griegas y romanas. Se trata de una cultura rica desde muchos puntos de vistas, que formó su propia religión y su propia civilización básicamente de la nada. También, se dio la primera revolución agrícola, la cual marcaría profundamente toda la civilización humana y se generó uno de los primeros sistemas educativos del mundo. Como en la actualidad, las escuelas de esta antigua sociedad contaban con su propio edificio y eran considerados espacios muy importantes para la cultura y para la continuidad de su civilización. En el Antiguo Egipto a día de hoy durante el desarrollo de esta civilización la educación estaba ligada a la familia y hasta los cuatro años los pequeños se entretenían con sus juguetes. Posteriormente, los niños aprendían imitando la profesión de sus padres en algunas labores como los agrícolas, talleres o viñedos entre otros. Las escuelas, tal como pasa en la actualidad, era el lugar al que los niños asistían para disfrutar de las primeras etapas de su educación, pero no todos los niños podían asistir. Era una sociedad tan dividida por los estratos sociales como la egipcia eran verdaderamente pocos los que podían gozar de este privilegio.
Los niños que asistían a la escuela y que tenían acceso a los
libros del Antiguo Egipto eran casi única y exclusivamente los miembros de familias adineradas. un hijo de esclavo asistía, así como los hijos de la clase más pobre. El sistema educativo de esta sociedad estaba compuesto casi exclusivamente por hombres. Las niñas se encontraban excluidas de este sistema educativo y la mayoría de las veces debían resignarse a quedarse en casa a cumplir con las labores del hogar También señalaba que quienes no pudieran ir al colegio tenían que ser educados en casa. Las casas de instrucción, que era la educación elemental y comenzaba a los 6 años. Estaba dirigida por sacerdotes y su programa incluía escritura, astronomía, religión, música, lenguaje e higiene. Abarcaba todos los sectores populares y se impartía en templos y a veces en la calle. La Escuela de Escribas, era de carácter superior y además de incluir las mismas áreas que la educación elemental incorpora los tres tipos de escritura egipcia: la demótica, la hierática o religiosa, y la jeroglífica.
La enseñanza era completamente rutinaria. Los escolares disponían de
un silabario donde aprendían ordenados los signos habituales con su correspondiente pronunciación y significado. Los recitaban en voz alta, los aprendían de memoria y los copiaban para aprender a escribirlos bien. El maestro corregía los ejercicios señalando los errores en el dibujo y en la ortografía.