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El psicólogo desde el comienzo de la evaluación, inquiere sobre el problema y su

evolución, pero se centra en el momento actual, en las manifestaciones del problema en


el momento presente. El psicólogo estudia lo que la persona refiere en la clínica, tanto lo
que hace en el propio contexto clínico como las descripciones que hace sobre otros
contextos relevantes al problema. Evalúa a la persona que acude a la clínica, a través de
distintas herramientas: Observación directa, autorregistros de situaciones externas,
descripciones de los sucesos relevantes de la semana a través de la entrevista o aplica
pruebas (test psicológicos) que dan cuenta de las capacidades o estilos de
comportamiento de la persona. Como se verá posteriormente el psicólogo a través de la
evaluación tratará de hacer un análisis funcional del caso que le permita fijar los objetivos
y procedimientos de la intervención.

Desde la perspectiva conductual la intervención psicológica se plantea como un


proceso de aprendizaje cuyo objetivo general es procurar herramientas para facilitar la
adaptación de las personas, para que de este modo logren los objetivos de bienestar por
los que acude a consulta.

Antes de abordar muy brevemente los tres casos clínicos hipotéticos, quiero destacar
que, los autores en esta materia, disponen habitualmente de una gran variedad de
normas y contextos para la elaboración de los informes de los casos clínicos, por lo que
no existe un patrón predominante al respecto. Tanto es así, que muchos psicólogos
clínicos que intentan publicar estudios de casos se encuentran con la dificultad añadida
de lo que supone publicar en una revista científica con la ausencia de normas específicas
para este tipo de publicaciones.

Los estudios de casos clínicos son unas de las metodologías utilizadas en la


investigación en Psicología, y sin duda, una de las más útiles desde el punto de vista
aplicado, pues permite que los clínicos puedan transmitir sus experiencias de una forma
sistemática, y que otros psicólogos puedan entenderlas y discutirlas, lo que sin duda
contribuye al acercamiento entre teoría y práctica de la psicología clínica.
CASO CLINICO 1:

TDAH Y ANGUSTIA DE SEPARACIÓN

ANAMNESIS

FICHA DE IDENTIFICACIÓN:

Nombre del paciente: Augusto José Rivero Márquez

Edad: 5 años 7 meses

Fecha de nacimiento: 08 de Septiembre de 2011

Grado de Instrucción: Preescolar Nivel III

Escolaridad: Colegio Gonzalo Méndez II

Nombre de la madre: Jazmín Márquez de 40 años. Educadora.

Nombre del padre: Augustino Rivero de 42 años. Abogado. Comerciante.

Fecha del informe: 09 de Noviembre del 20018.

MOTIVO DE CONSULTA:

La mamá de Augusto acude a evaluación tras recibir un informe de la escuela


solicitando apoyo profesional por las conductas del niño dentro del salón de clases.

ANTECEDENTES RELEVANTES

Augusto es el hijo menor de la familia. Sus hermanas mayores se llaman Fernanda de


14 años y Paula de 10 años de edad, el niño ha presentado problemas del lenguaje y
déficit de atención. En casa viven el padre, la madre con sus tres hijos y el personal de
servicio.

Producto a término de gestación a los 36 años de edad de la madre. Peso y talla


promedio. Recibió lactancia materna durante dos semanas. Al nacimiento presentó
ictericia recibiendo el tratamiento necesario. Durante su primer año no padeció
enfermedades significativas. La madre padeció depresión posparto y recibió apoyo
médico.
En el área motora refieren que en cuanto a coordinación gruesa su avance fue normal,
gateando a los 7-8 meses y caminando al año aproximadamente. En el área motora fina
reporta dificultad.

Controló esfínteres diurnos a los 2 años. En relación al uso del lenguaje refieren que
desde pequeño habló fluidamente y con una correcta pronunciación.

Su mamá describe a Augusto como un niño muy mimado por ella, el rey de la casa,
muy deseado por ser varón, cariñoso, generalmente está contento y de buen humor,
tranquilo en los momentos de juego, más sin embargo distraído en otras actividades, por
ejemplo: necesita movimiento y se levanta al baño con frecuencia a la hora de comer y a
veces eso la desespera y termina gritando.

Inició el maternal a los 2 años por iniciativa de la madre, sin embargo lloraba mucho,
asistió a 3 diferentes instituciones, pero en todas sucedió lo mismo. Al entrar al colegio
actual, e incluso el año escolar pasado que era su segundo año, lloró por las mañanas los
tres primeros meses aproximadamente.

Recibió apoyo extraescolar por parte de la maestra para regularizarlo en relación al


programa y por presentar problemas de atención el año escolar pasado y el actual. En
casa se le supervisa la tarea y se le corrige ya que a veces le da flojera hacerla. Por las
tardes asiste 3 veces por semana a clases de tenis.

En el informe del maestro, se refiere a él como un niño con lapsos de atención cortos
de aproximadamente 5 minutos en cada clase. El maestro observa que en los cuentos
aumenta su atención. Se torna distraído cuando está en grupo ya que habla con quien
tenga a un lado, lo que tiene como consecuencia un bajo rendimiento académico. Es
obediente, amigable, comparte, espera su turno, acepta cambios de actividad.”

El maestro informa que su atención sostenida ha ido decreciendo. Es querido y


aceptado por sus compañeros. Se ha modificado la ubicación y dinámica con Augusto
dentro del salón de clases para favorecer su aprendizaje, su desempeño mejora cuando
se le aísla del grupo, sentándolo en un escritorio individual ubicado al centro del aula;
además se les ha sugerido a los padres una serie de ejercicios y dinámicas en casa que
apoyen al niño en el área de atención.
En orden de importancia, las “conductas problema” dentro del salón de clase referidas
por el maestro son: su falta de atención, el que se distrae con cualquier cosa y que se
precipita a dar una respuesta antes de que el maestro termine de hacerla, sucediendo
esto en casi todas las materias, incluso con la maestra de psicomotricidad.

Augusto, demanda mucha atención del maestro y compañeros, interrumpe


constantemente la clase con comentarios ya sea sobre su trabajo o el de los demás
moviéndose sobre la competitividad y el constante aviso en relación a las faltas cometidas
por los demás niños. Presenta conductas inmaduras y regresivas tales como no respetar
el dialogo de otros, habla en un tono de voz más alto que el promedio del grupo, gesticula,
hace ruidos y se victimiza para llamar la atención y lo logra.

EXAMEN MENTAL:

Augusto es un niño agradable a la vista, de complexión delgada, su arreglo personal al


asistir a las sesiones fue pulcro, mostrando ubicación en tiempo y espacio. Presento
angustia de separación ante la figura materna verbalizando dulcemente que si su mamá
se iba él no se sentiría cómodo. Durante la primera sesión busco a su madre en 2
ocasiones a través de la ventana del despacho sonriendo al ver el auto afuera. Las
sesiones posteriores estuvo nuevamente pendiente a través de la ventana y al no ver el
auto de su madre inmediatamente preguntó la hora de finalizar las actividades.

Su actitud hacia las pruebas fue de resistencia mostrando poca confianza en sí mismo,
conductas regresivas y de indefensión (sensación de “no puedo”). Sus períodos de
atención fueron cortos, presentó susceptibilidad a estímulos ajenos a las pruebas con
poca habilidad para discriminar la actividad principal a ejecutar. Habla y se mueve
mientras trabaja. Fue necesario repetir las palabras varias veces para que fueran
escuchadas y comprendidas, la emisión de sus respuestas fueron anticipadas al final del
planteamiento y en ocasiones la respuesta era incorrecta o no tenía relación alguna con el
tema.

SE APLICARON LOS SIGUIENTES MÉTODOS PARA OBTENER INFORMACIÓN:

 Entrevista con los padres.


 Informe de Historia Clínica.
 Entrevista con el niño, observación del juego y dibujo libre. Permite conocer rasgos de
la percepción del mundo del niño, figuras significativas y proyección emocional en
éste.
 Manejo de su cuerpo en el espacio, coordinación motora gruesa y fina, esquema
corporal, habilidades y actitudes.
 Informe del maestro. Escala de medición conductual Conner´s Proporciona medidas
para identificar una variedad de problemas conductuales en niños de 3 a 12 años.
 Dibujo de la Figura Humana, Koppitz. Evaluar aspectos de la maduración grafológica,
cognoscitiva y emocional de los niños mayores de 5 años.
 Dibujo de la Familia. L.Corman /LLuis (DF). Revela la manera cómo el niño percibe el
ambiente familiar y su persona dentro del mismo e integra esto a su vida efectiva.
 Test Gestáltico Visomotor, BENDER (Koppitz. Evalúa la percepción y coordinación
visomotora así como el nivel de maduración del niño de 5 a 11 años.
 Escala Wechsler para la medición de la inteligencia para preescolar y primaria
(WPPSI).
 Cuestionario Neuropsicológico QNST. Valora la presencia de signos neurológicos
suaves y hace posible la canalización del paciente a interconsulta.

RESULTADOS DE LOS INTRUMENTOS DE MEDICIÓN:

El rendimiento intelectual medido a través de la Escala WPPSI (La Escala de


Inteligencia Wechsler para Preescolar y Primaria es una prueba de inteligencia diseñada
para niños desde los 2 años y 6 meses hasta los 7 años y 7 meses. Fue desarrollada por
David Wechsler en 1967) corresponde a Normal Promedio (CI total/ 106). En el análisis de
sus funciones no se encontraron diferencias significativas en los coeficientes de las
escalas verbal (100) y de ejecución (111). La diferencia de 11 puntos entre ambas escalas
es significativa en cuanto a su habilidad para trabajar en tareas concretas y guiadas por
estructuras propias de la escalas de ejecución. Cualitativamente muestra en la escala
verbal dificultad para prestar y mantener su atención, retener y reproducir conceptos en
memoria a corto plazo, ansiedad ante las preguntas, fuga de ideas, respuestas impulsivas
y evidente falta de información y vocabulario para poder estructurar y expresar lo que
piensa, fallas en la percepción espacio-temporal.

En el DFH (El Test de Dibujo de la Figura Humana) se observa un desempeño normal


bajo con madurez grafológica y percepción corporal por debajo del promedio para su
edad. (R=4 /4 de los indicadores de desarrollo/ninguno excepcional). En su narración
presenta a un niño que llama la atención de los demás por sus conductas disruptivas, lo
cual es reflejo de la manera en la que él se mueve en los distintos ambientes.

En el análisis del Dibujo de la Familia (DF). Su trazo fue impulsivo y estereotipado sin
establecer diferencias de género o tamaño a los distintos miembros del clan. Su narración
refiere una dinámica familiar disfuncional dividida por bandos donde la jerarquía parental
no está del todo definida. Se detectan patrones de sobreprotección e indulgencia donde el
trato que recibe es el de un niño de menor edad. Se refiere a sí mismo como el más
gratificado por la protección y complicidad de mamá, dice ser el consentido al que no
castigan ni regañan. Presenta a su hermana Paula como el “chivo expiatorio” de la familia
a la cual se le acusa siempre de las peleas y problemas familiares aun cuando no sea ella
la responsable. Se percibe a si mismo infantilizado con rasgos de bebé lo que indica
inmadurez emocional.

Los resultados del BENDER (R=15) lo ubican en un nivel madurativo en el límite


correspondiente a su edad (5 a 5 1/2 años). Su ejecución presenta orden confuso en la
disposición de las figuras sobre el papel y fallas en la integración que pueden ser
justificadas por la impulsividad al realizarlas; mostró dificultad para mantener la atención,
decodificar y reproducir la figura.

En la prueba neuropsicológica QNST obtuvo un resultado de 21 considerado aun


dentro de los límites normales de ejecución (0 a 25). Sin embargo obtuvo puntuación
significativa en los ítems característicos de pacientes con Trastorno Primario de Atención
(correspondientes a 4, 5, 11).

Durante la entrevista se describe a sí mismo dentro del ambiente escolar como un niño
que es “malo” para poner atención, dice que no le gusta porque es “nomás ver el pizarrón
todo el rato”, menciona que lo que más le gusta es jugar en el patio.

Durante su juego libre demanda constante atención y ayuda para actividades básicas
tales como abrir recipientes los del material, establecer temas de juego, atarse las
agujetas. Esto hace evidente la costumbre que tiene que un adulto interactué con él y lo
apoye en la solución de problemas.

En la Escala Conner´s para maestros se observa que efectivamente las conductas de


A tienden a ser poco controladas, notándose como significativos los ítems referentes a
autocontrol, impulsividad y atención. En la Escala Conner´s para padres respondida por
su madre no presenta nivel de significancia en ninguna de estas áreas.

DIAGNÓSTICO:

Augusto presenta Trastorno Primario de Atención e Hiperactividad. Angustia de


separación por Trastorno Del Apego Crónico.
PLAN DE INTERVENCIÓN:

Se sugiere interconsulta con especialista en paidopsiquiatría para confirmar


diagnóstico de T.P.A.H. y recibir el apoyo médico necesario.

Evidentemente hay que trabajar directamente con el apego y la relación establecida


con su madre. Presenta conductas y hábitos de crianza que requieren de modificación
relacionados con el sueño, alimentación, eliminación y uso el del chupón. Su historia
clínica revela angustia de separación ante las figuras de seguridad y definitivamente la
dinámica de sobreprotección en la relación contribuye a los mismos síntomas. R demanda
atención de los adultos en exceso y se frustra cuando no la recibe en el momento o
cantidad que él quiere.

Es necesario rastrear y modificar los modelos de sobreprotección en relación al área


de autoayuda en casa y escuela. Abstenerse de resolverle los problemas. Modificar la
manera en la que se relacionan con él brindándole la atención que necesite cuando la
pida de una manera adaptativa. Ayudarlo a controlar sus impulsos estableciendo límites
claros y consistentes.

Tanto en casa como en escuela hay que trabajar de manera consistente en los
siguientes puntos:

 Capacidad de demora (ayudarlo a esperar su turno, respetar las conversaciones y de


otros sin interrumpir, entre otros).
 Tolerancia a la frustración.
 Responsabilizarse por las consecuencias de sus actos.
 Internalizar controles.
 Atención y concentración.
 Autoayuda.

Iniciar terapia psicológica desde el enfoque cognitivo-conductual para apoyar estas


mismas áreas a nivel profesional después de tener los resultados del médico.
CASO CLINICO 2

TRASTORNO BIPOLAR II
ANAMNESIS

FICHA DE IDENTIFICACIÓN:

Nombre del paciente: Mariela Valentina Romero

Edad: 71 años

Fecha de nacimiento: 11 de Marzo de 1947

Estado Civil: Soltera

Educación: 3er Año de Bachillerato

MOTIVO DE CONSULTA:

La hermana de Mariela la lleva a la consulta por la falta de orientación en


tiempo y espacio, y por presentar alteración en el estado de ánimo.

ANTECEDENTES RELEVANTES:

Mariela es una mujer de 71 años de edad, con un nivel intelectual medio. Vive
con su hermana, quien informa que desde hace algunos meses Mariela, ha
asumido un comportamiento diferente tanto en la casa como en la comunidad
(cambios de humor, personalidad, pensamiento y conducta). De igual forma,
labilidad afectiva, las fluctuaciones en los niveles de sociabilidad y las conductas
violentas son fuentes de conflicto tanto para Mariela como para mis familiares.
Siempre está a la defensiva, discutiendo y desorientada en relación al lugar donde
se encuentra.

Según la hermana de Mariela, ellas siempre han tenido una buena relación
entre ambas. Afirma que nunca ha exteriorizado los sentimientos ni aptitudes
durante la muerte de sus padres. La relación con su padre fue difícil, por cuanto
tenían dificultades a la hora de hablarle por el miedo que le sentían.
La relación entre ambos padres no era buena, mantenían continúan
discusiones por cuanto nuestra madre no le hacía caso y siempre se alteraban por
la manutención y situación económica de la familia.

Actualmente, ha cambiado de grupos de amigas pero las conductas problemas,


las desorientaciones y las discusiones continúan. Tiene una actitud pasiva, no
saluda, no recoge la habitación y siempre continúa con conductas problemáticas.

EXAMEN MENTAL:

Paciente femenino de 71 años de edad, presenta una vestimenta no favorable,


comportamiento aislado y temeroso, actitud vacía y falta de contacto con la
realidad. Su postura es erguida y muestra resistencia al momento de hablar, se
nota un esfuerzo al momento de vociferar algunas palabras. Su comportamiento
es temeroso, no se ubica en tiempo y espacio.

Su actitud es calmada, más bien tímida, tiene sobre saltos de euforia o


agitación. Pasa del llanto a estar calmada. La resistencia la manifiesta cruzándose
de brazos. Mantuvo la mirada fija, tensa y hacia el vacío en el momento de la
entrevista, quería responder cada pregunta, pero manifestaba incoherencia de las
mismas.

Mariela posee una Desorientación Alopsiquica (no se ubica en lugar y


tiempo) propio de la alteración de conciencia, presenta un lenguaje desorganizado
y/o disgregado. Mostró durante el desarrollo del examen mental euforia,
excitación, llanto al hacer los relatos y las respuestas dadas a las preguntas
hechas por el psicólogo. Se percibe como una joven de “16 años”.

SINTOMATOLOGÍA:
 El paciente presenta una comorbilidad en su condición presentando un
trastorno orgánico, retardo leve y bipolaridad.
 Desorientación Alopsiquica
 Malestar psíquico: llanto, actitud vacía
 Comportamiento aislado y temeroso.
PROTOCOLO DE TRATAMIENTO DEL TRASTORNO BIPOLAR:
Evaluación preliminar
 Evaluación clínica completa.
 Aplicación de escalas clínicas: Inventario de Beck (ansiedad y depresión),
MDQ para trastorno bipolar.
 Test psicométricos: MMPI, Bender.
Frecuencia y duración de las sesiones y duración del tratamiento: Máximo 20
sesiones, a lo largo de un período de 12 semanas. Cada sesión durará
aproximadamente 50 minutos. Se programan para las 3 primeras semanas 2
sesiones semanales; de la 4 a la 12 una semanal y posteriormente cada 15 días, 3
semanas para establecer controles y seguimientos.

DIAGNÓSTICO

Mariela presenta Trastorno Bipolar II (Código CIE-10: 31.8), episodio más


reciente depresivo, grave con síntomas psicóticos, con síntomas melancólicos,
con ciclos rápidos, crónico.

PLAN DE INTERVENCIÓN

Se sugiere realizar máximo 20 sesiones, a lo largo de un período de 12


semanas. Cada sesión durará aproximadamente 50 minutos. Todo ello con la
finalidad de establecer controles y seguimientos .

Fase 1:
1. Investigar expectativas hacia la terapia.
2. Concretar los problemas más urgentes y accesibles (desesperanzas, ideas de
suicidio, mal funcionamiento general, disforia grave,)
3. Explicar el racional de la terapia cognitivo-conductual, estableciendo relación
entre pensamiento-emoción y conducta, y explicarle cómo las emociones se
relacionan con los pensamientos.
4. Presentar e informar sobre cuestionario para registrar las actividades para la
siguiente sesión.
5. Proporcionar al paciente información teórico-divulgativa sobre el trastorno
bipolar.
6. Explicar brevemente la importancia del cumplimiento del tratamiento
farmacológico.

7. Indicar registro cognitivo-conductual con el objetivo de identificar la relación


pensamiento-emoción-conducta.

Fase 2:
1. Revisar los efectos de la sesión anterior.
2. Revisión de hoja de registros.
3. Trabajar con el horario de actividades.
4. Explicación de elementos biológicos de los trastornos afectivos
5. Elaborar diagrama de vida del TBP con el paciente.

Fase 3:
1. Evaluar efectos de la sesión anterior.
2. Revisar las actividades realizadas.
3. Establecer relación entre factores psicosociales y episodios maníacos y
depresivos.
4. Evaluación psicológica (Bender, DFH y MMPI)

TERAPIAS PSICOLÓGICAS:

Terapia Cognitivo-Conductual

La psicoterapia cognitivo-conductual se basa en la premisa de que el afecto y el


comportamiento de un individuo están determinados en gran parte por la forma en que
éste estructura su mundo. Sus cogniciones (ideas e imágenes) se fundamentan en
actitudes y premisas (esquemas), que se desarrollan a partir de experiencias previas.
Las técnicas terapéuticas están diseñadas para identificar, probar y corregir las
conceptualizaciones distorsionadas y las creencias disfuncionales y esquemas que
subyacen en las cogniciones.

La psicoterapia cognitivo-conductual ayuda al paciente a pensar de manera más


objetiva acercar de sí mismo y del mundo que lo rodea, por lo que se reducirán los
síntomas y su conducta será más adaptativa.

Esto se logra mediante el uso de técnicas destinadas a: monitorear las cogniciones,


reconocer la conexión entre pensamiento-emoción-conducta, examinar las evidencias que
están a favor o en contra de sus cogniciones, corregir sus distorsiones, aprender a
identificar los esquemas condicionantes (supuestos subyacentes) y los esquemas básicos
(auto esquemas) que lo predisponen a distorsionar su experiencia.

Así, los objetivos básicos de la psicoterapia cognitivo-conductual, para el


tratamiento del trastorno bipolar son los siguientes.
 Educar a los pacientes, familiares y allegados sobre el trastorno bipolar, sobre
las aproximaciones del tratamiento y sobre las dificultades comunes asociadas
a la enfermedad.
 Enseñar a los pacientes un método para monitorear la ocurrencia, severidad y
curso de los síntomas maníacos y depresivos.
 Facilitar el cumplimiento de regímenes de medicación prescrita.
 Proporcionar estrategias no farmacológicas, específicamente destrezas
cognitivo-conductuales, para afrontar los problemas cognitivos, afectivos y
comportamentales asociados a los síntomas maníacos depresivos.
 Asistir a los pacientes en el enfrentamiento de estrés que puedan interferir con
el tratamiento o precipitar nuevos episodios de depresión y/o manía.

Psicoeducación: Es una técnica que consiste en informarle al paciente y a sus


familiares de forma sencilla, clara y concisa aspectos relacionados sobre la
enfermedad, que permita prevenir las recaídas o las complicaciones.

El paciente pasa a ser parte activa en la evolución favorable de su enfermedad


y es el formato de terapia psicológica que más evidencias científicas ha
demostrado a la hora de tratar el trastorno bipolar. El formato de la psicoeducación
se lleva a cabo en grupos de personas con trastorno bipolar y personas de su
entorno cercano, conducidos por un clínico experto en trastorno bipolar. Los
grupos de psicoeducación deben tener una duración de unos cuatros meses
aproximadamente, con una periodicidad semanal.
CASO CLINICO 3

FOBIAS ESPECÍFICAS

ANAMNESIS

FICHA DE IDENTIFICACIÓN:

Nombre del paciente: Manuel Martínez

Edad: 24 años

Fecha de nacimiento: 10 de Junio de 1994

Estado Civil: Soltero

Educación: 4to. Año de Bachillerato

MOTIVO DE CONSULTA:

Manuel es acompañado a la consulta por su compañero de trabajo, quien manifiesta el


temor que él le tiene a las alturas.

ANTECEDENTES RELEVANTES:

El paciente es un joven de 24 años, con un nivel de escolaridad medio. Trabaja como


yesista en una empresa privada que ha montado junto a su hermano. Vive en la ciudad de
Barquisimeto y trabaja en un pueblo llamado Quibor.

Presenta un miedo excesivo a las alturas, experimentando estados de ansiedad


elevados. Lleva a cabo conductas de evitación ante la situación temida. El paciente tuvo
un accidente grave con una bicicleta cuando tenía cinco años de edad. Situamos aquí el
origen de la fobia que ha persistido en su vida diaria por adquisición del miedo específico
por condicionamiento clásico de tipo traumático.

Este miedo afecta a su vida cotidiana, pero de forma más persistente en su trabajo.
Esto se debe a que en muchas ocasiones, debe subirse a lugares elevados, como por
ejemplo cuando trabaja en fachadas o decoraciones exteriores. En estas situaciones el
paciente solicita ayuda de su compañero ya que él no puede desempeñar este trabajo.

EXAMEN MENTAL:
La adquisición de la fobia se ha producido por condicionamiento clásico de tipo
traumático.

El paciente muestra conductas de evitación cuando ha de enfrentarse a la situación


fóbica, es decir a cualquier situación ante la que exista una altura relativamente alta.
Estas conductas son más frecuentes en su trabajo, ya que éste le exige enfrentarse a
alturas para desempeñarlo. Fuera de su trabajo intenta evitar esta situación a toda costa,
y si ha de enfrentarse a ella lo hace con una ansiedad generalizada. Los factores de
mantenimiento de la fobia son diversos.

Sus pensamientos son negativos, cuando se sitúa en un lugar elevado presenta


cogniciones erróneas, como por ejemplo que se va a caer al vacío, con la consecuente
respuesta de intentar por todos los medios bajar de ese sitio elevado a un lugar seguro. Si
ha de someterse a una situación imaginaria, su ansiedad es algo menor, al igual que sus
pensamientos negativos, pero no deja de cesar el miedo fóbico que presenta el paciente.
A partir de esto deducimos que su nivel de ansiedad se generaliza a situaciones “ in vivo”
y a situaciones imaginarias.

EN EL EXAMEN MENTAL DEL PROBLEMA FÓBICO PODEMOS CITAR LA


SIGUIENTE SINTOMATOLOGÍA:

 El paciente presenta una fobia específica a las alturas.


 Presenta un miedo excesivo, el cual, interfiere en su vida cotidiana, ya que intenta
evitar situaciones o circunstancias en las que pueda verse expuesto a una altura
relativamente elevada.
 Muestra ansiedad focalizada en las reacciones de miedo y en el propio contexto
fóbico. Su miedo va acompañado de elevadas respuestas fisiológicas.
 Presenta pensamientos negativos centrados en el posible daño que le pueda causar la
picadura de una avispa, y también presenta miedo a la reacción que pueda tener su
cuerpo ante la picadura de la avispa.

INSTRUMENTOS DE EVALUACIÓN

Se utilizan cuatro tipo de evaluaciones, una entrevista clínica centrada en miedos


específicos, un cuestionario de Temores de Wolpe para adultos ( FSS-76), una evaluación
especifica de los miedos, y por ultimo un test de Aproximación Conductual ( TAC).
DIAGNÓSTICO:

Manuel presenta una fobia específica según el DSM-V, miedo o ansiedad intensa por
un objeto o situación específica (p. ej., volar, alturas, animales, administración de una
inyección, ver sangre).

PLAN DE INTERVENCIÓN:

Fase 1: Contextualización de la práctica y evaluación de las fobias específicas. Consiste


en un informe evaluativo, en el cuál, le pasamos a la paciente, la entrevista clínica
centrada en miedos específicos, el cuestionario de temores de Wolpe para adultos (FSS-
76), Evaluación específica de los miedos y test de aproximación conductual (TAC).

Fase 2: Información educacional sobre las fobias específicas.

Fase 3: Realización de una escala de motivación; realización de la jerarquía relacionada


con el objeto fóbico “situación ansiógena”. Autorregistro de inducción de sensaciones
corporales. Autorregistro de detección de las cogniciones erróneas.

Fase 4: Uso de las estrategias de afrontamientos: esta sesión consistió en la discusión de

las cogniciones erróneas y respiración abdominal.

Fase 5: Exposición en vivo al objeto o situación temida.

Partiendo del diagnóstico de la fobia específica o de la acrofobia y su asociación a los


ataques de pánico, se debe iniciar terapia psicológica desde el enfoque cognitivo-
conductual, asociado o no a los ataques de pánico.

Concluimos que, el paciente Manuel Martínez presenta un miedo elevado a las alturas,
lo que generalmente se denomina como acrofobia.

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