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DERECHO PROCESAL CONSTITUCIONAL- Fix Zamudio

I.CONCEPTO DE DERECHO PROCESAL CONSTITUCIONAL


El derecho procesal constitucional es una de las ramas del derecho procesal,
que analiza de manera sistemática los principios, conceptos, organismos, procesos y
procedimientos que tienen por objeto la solución de conflictos que surgen de la aplicación
de normas constitucionales, o de otra manera, el estudio científico de las diversas garantías
de carácter constitucional en sentido contemporáneo, es decir, los instrumentos que se han
establecido a fin de restaurar la normalidad fundamental infringida o desconocida por los
órganos del poder público.
A este respecto, consideramos conveniente mencionar el concepto que de
esta materia ha expresado el jurista peruano Elvito A. Rodríguez Domínguez “… el derecho
procesal constitucional es aquella disciplina que se ocupa del estudio de las garantías
constitucionales, las que consisten en instrumentos procesales, que sirven para efectivizar el
respeto de la jerarquía normativa que señala la Constitución y el respeto y cumplimiento de
los derechos humanos que la Carta Magna establece.
II.ORIGEN DE ESTA DISCIPLINA
El procesalista español Niceto Alcalá-Zamora y Castillo, considera que el
origen del derecho procesal constitucional radica en los lineamientos esenciales del llamado
sistema continental europeo, austriaco o kelseniano de la resolución de conflictos
constitucionales.
Por otro lado, Néstor Pedro Sagues, conocido jurista argentino y quien es
uno de los más destacados especialistas del derecho procesal constitucional, discrepa de la
idea de que Kelsen fuera el fundador de la misma, por considerar que esta disciplina se
nutre de los conocidísimos instrumentos procesales de carácter constitucional del hábeas
corpus, writ of error y demás instrumentos destinados a tutelar los derechos fundamentales
y el principio de supremacía constitucional.
El maestro Fix Zamudio, considera que, si bien los instrumentos de
resolución de conflictos constitucionales y el principio de la supremacía constitucional son
muy anteriores a la doctrina kelseniana, el estudio sistematizado y profundo, es decir,
científico, de los principios básicos del derecho procesal constitucional, inicia a partir de las
enseñanzas kelsenianas, ya que anteriormente solo se habían hecho análisis aislados de los
diversos instrumentos y comentarios sobre ellos y, por ello la considera como una de las
ramas más recientes de la ciencia del derecho procesal.
III.EVOLUCIÓN Y CONSOLIDACIÓN DEL DERECHO PROCESAL
CONSTITUCIONAL
Con independencia de si consideramos a Hans Kelsen el fundador de esta
disciplina procesal gracias a su fundamental estudio de 1928, o bien a su obra de conjunto,
lo cierto es que el desarrollo de la doctrina sobre esta materia fue paulatino, no obstante el
desarrollo creciente y dinámico de los organismos y los procedimientos para la solución de
conflictos de carácter constitucional en sentido estricto.
El nombre de derecho procesal constitucional utilizado en los años cuarenta
por el insigne procesalista español Niceto Alcalá Zamora y Castillo, se impuso lenta pero
sostenidamente, especialmente en los últimos años, en los cuales se ha convertido en una
materia de análisis de gran expansión en la doctrina procesal y constitucional
contemporáneas.
En numerosas facultades y escuelas de derecho de México y Latinoamérica
se han establecido cursos de derecho procesal constitucional. Asimismo, debe mencionarse
que varias entidades federativas mexicanas han consagrado recientemente instrumentos de
garantías constitucionales locales y, algunas de ellas han expedido leyes reglamentarias de
los mismos con la denominación “Ley de Control Constitucional”, como las de los estados
de Tlaxcala (18 de mayo de 2001) y Chiapas (25 de octubre de 2002).
Por tanto, puede afirmarse sin exageración que el derecho procesal
constitucional se ha consolidado plenamente como una disciplina autónoma del derecho
procesal general, pues cuenta con una doctrina abundante y en constante aumento, una
jurisdicción especializada y un conjunto de procedimientos que tutelan las normas
fundamentales y los derechos humanos en los ordenamientos constitucionales de nuestra
época.
IV.EL CONTENIDO DEL DERECHO PROCESAL CONSTITUCIONAL
El derecho procesal constitucional debe considerarse como una disciplina
científica relativamente reciente, por lo que todavía se encuentra en formación, no obstante
que, como lo hemos sostenido anteriormente, se ha consolidado plenamente, lo que
significa que todavía no existe un criterio predominante sobre su contenido, es decir, sobre
la materia u objeto de su estudio.
El jurista argentino Osvaldo Alfredo Gozaíni otorga al derecho
constitucional un contenido todavía más extenso, pues en su opinión dicha disciplina abarca
el examen no de las garantías constitucionales en sentido estricto, sino también las
instituciones procesales reguladas por las normas fundamentales, entre ellas los derechos de
acción y el debido proceso.
El distinguido constitucionalista peruano Domingo García Belaunde,
considera que esta disciplina está regida por los principios, valores e instituciones del
derecho procesal general, como lo es la llamada trilogía fundamental, integrada por la
jurisdicción, la acción y el proceso, de manera que con este enfoque considera que esta
rama procesal debe estudiar esencialmente: a) jurisdicción constitucional; b) procesos
constitucionales, y c) órganos constitucionales.
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Es difícil proporcionar un panorama siquiera aproximado de los numerosos y
complejos instrumentos procesales y jurídicos que se han desarrollado en las
Constituciones contemporáneas. Pueden ensayarse varias clasificaciones, pero
consideramos más adecuada la que divide los medios jurídicos de protección de los
derechos humanos de acuerdo con las regiones en las cuales se han creado.
Se pueden señalar en primer lugar los mecanismos de creados en Inglaterra y
posteriormente en los países que estuvieron bajo su dominio, especialmente Estados
Unidos. El más antiguo es indudablemente el habeas corpus (exhibición personal), que
surgió en el primero de esos países desde la Edad Media. De ahí paso a las colonias
británicas en América, se desarrollo en todos los países de la Commonwealth, y se ha
extendido a numerosos ordenamientos, prácticamente a la totalidad de los latinoamericanos
y algunos de Europa continental.
Otra creación del derecho angloamericano, que paradójicamente no pudo
implementarse en Inglaterra, pero sí en las colonias americanas y posteriormente en otros
países de la Commonwealth, es la revisión judicial judicial review, por medio de la cual se
estableció primero la facultad y después la obligación de los jueces de desaplicar en los
procesos concretos, las disposiciones legislativas contrarias a la Constitución, y que dio
lugar al llamado sistema americano de control constitucional, que se extendió de manera
paulatina por todo el continente, desde Argentina hasta Canadá.
En los ordenamientos latinoamericanos han surgido instrumentos tutelares
que posteriormente se han extendido a otras reginas. El más importante de todos es el
derecho de amparo, que surgió definitivamente en los artículos 101 y 102 de la
Constitución Federal (con antecedentes en la Constitución del estado de Yucatán de 1841).
En la actualidad, con ese mismo nombre de acción, recurso o juicio de
amparo se ha establecido en los siguientes ordenamientos constitucionales
latinoamericanos; Argentina, Bolivia, El Salvador, Costa Rica, Guatemala, Honduras,
Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela.
El derecho de amparo, también por influencia mexicana, se introdujo en la
Constitución republicana española del 9 de diciembre de 1931, esto se debe a las
enseñanzas del jurista mexicano Rodolfo Reyes, quien residió muchos años en España,
donde se refugió debido a los acontecimientos de la Revolución mexicana iniciada en 1910.
Además del derecho de amparo con esa denominación y en sentido estricto,
han surgido otros instrumentos equivalentes, pero con distintas denominaciones, que por
otra parte pueden considerarse como sinónimas. El primero en aparecer, de dichos
mecanismos equivalentes al amparo, fue el llamado mandado de seguranca (que algunos
autores traducen al castellano como mandamiento de amparo), creado en la Constitución
Federal Brasileña de 1934, el cual procede esencialmente contra los actos
inconstitucionales o ilegales de autoridades administrativas y, en general contra la conducta
administrativa de cualquier autoridad que afecte los derechos de los gobernados.
Otro instrumento es el llamado recurso de protección, que fue incorporado a
la constitución chilena en el año de 1980, y que tiene por objeto proteger los derechos
fundamentales consagrados constitucionalmente contra actos violatorios que provengan de
autoridades públicas, con excepción de la tutela de la libertad y la integridad personales
protegidas por el hábeas corpus (que, a partir de su consagración en la carta fundamental de
1925, se conoce como “recurso de amparo”).
Por otro lado, en Colombia encontramos la figura de la acción de tutela
establecida en la constitución colombiana en el año 1991 y que posee funciones similares a
las del amparo en el ámbito latinoamericano (aunque sin tantos formalismos
procedimentales de acuerdo con el maestro Silva).
Dentro de un concepto amplio del derecho de amparo (que comprendería
también el hábeas corpus), deben considerarse de igual manera otras instituciones con
funciones equivalentes, pero que tutelan de manera específica algunos derechos
fundamentales. La mayoría de estos instrumentos fueron introducidos en la Constitución
brasileña de octubre de 1988, pero se han extendido a otros ordenamientos
latinoamericanos, algunos ejemplos son los siguientes:

 Mandado de seguranca coletivo: Es un instrumento brasileño y tiene por


objeto proteger los derechos de carácter colectivo
 Habeas data: Es un instrumento brasileño que tiene por objeto proteger
al gobernado contra las posibles alteraciones de la información
electrónica y muchos países lo han adoptado
 Mandado de injuca: Es un instrumento brasileño que procede cuando la
ausencia de una norma reglamentaria impide el ejercicio de derechos y
libertades constitucionales o de las prerrogativas que se refirieren a la
nacionalidad, la soberanía y a la ciudadanía, lo que implica que se trata
de un mecanismo para lograr que se supere la omisión en que incurre una
autoridad con facultades legislativas para dictar disposiciones
reglamentarias
 Acción de cumplimiento: Es una garantía constitucional peruana que
procede contra cualquier autoridad o funcionario renuente a acatar una
norma legal o un acto administrativo, en perjuicio de las
responsabilidades de ley
 Acciones populares: Son instrumentos de garantía constitucional que han
asumido diversos significados en el derecho latinoamericano, y por ello
dicho termino puede aplicarse, por una parte, como medio para ejercer
una acción abstracta de inconstitucionalidad y en segundo lugar, como
una instancia para reclamar la inconstitucionalidad o ilegalidad contra
reglamentos, normas y disposiciones generales de carácter
administrativo, al titular derechos o intereses difusos o trascendentales y,
en general, de carácter colectivo (actualmente la regula Colombia y
Brasil)
No omito señalar que, otro sector esta constituido por los organismos no
jurisdiccionales que se inspiran en el Ombudsman de origen escandinavo, que si bien
poseen un carácter estrictamente procesal, sus funciones se pueden situar dentro de la
jurisdicción constitucional de la libertad a la que nos referimos, en virtud de su vinculación
con los tribunales en sentido estricto, a los cuales apoyan y auxilian en su labor de
protección de los derechos humanos, al resolver preventivamente las violaciones de tales
derechos, de esta manera, los conflictos respectivos ya no son necesarios de plantearlos en
la vía judicial. Se procura resolver el problema por medio de la conciliación y, si no
obtienen resultados inmediatos se inicia una investigación, que en su caso culmina con una
recomendación no obligatoria, pero que tiene la fuerza de la publicidad. Además, en sus
informes periódicos, dichos organismos pueden proponer, en muchas ocasiones con éxito,
reformas a las prácticas, reglamentos y leyes administrativas que pueden ser obstáculo para
la tutela de los derechos de los gobernados.
En otro orden de ideas el maestro Fix Zamudio, refiere que debemos
distinguir entre los siguientes dos conceptos:
 Jurisdicción constitucional orgánica: Es aquella dirigida a la protección
directa de las disposiciones y principios constitucionales que consagran
las atribuciones y competencias de los distintos órganos de gobierno y,
en ese sector podemos señalar la revisión judicial de la
constitucionalidad de las disposiciones legislativas.
 Jurisdicción constitucional trasnacional: Refiere al estudio de los
conflictos que pueden suscitarse entre los mecanismos de incorporación
del Derecho interno y el propio ordenamiento jurídico interno.

V.DERECHO PROCESAL CONSTITUCIONAL Y DERECHO


CONSTITUCIONAL PROCESAL
El derecho procesal constitucional tiene como contenido los organismos,
instrumentos y procedimientos establecidos para la resolución de los conflictos de carácter
constitucional, y por ello, se ha sostenido que es una rama del derecho procesal general, y
por su parte el derecho constitucional procesal examina las diversas categorías procesales
que se han incorporado, cada vez con mayor detalle, a las Constituciones contemporáneas,
pero que se aplican a la decisión de las controversias de todas las materias, y no
exclusivamente las de carácter fundamental y, como ejemplo podemos afirmar que la que a
la primera disciplina pertenece el examen de la jurisdicción constitucional y a la segunda la
jurisdicción en general, y lo mismo ocurre con el derecho de acción, los procedimientos y
los organismos jurisdiccionales, que algunos autores califican como magistratura o
judicatura.
VI. CONTENIDO DEL DERECHO PROCESAL CONSTITUCIONAL
Finalmente, podemos concluir apoyándonos en la famosa trilogía estructural
del derecho procesal, que se pueden señalar tres aspectos esenciales como contenido del
sector del derecho constitucional que pretendemos analizar: A) jurisdicción, B) garantías
judiciales y C) garantías de las partes.

A) Jurisdicción: Es una actividad del Estado que se imparte por medio del
proceso, es un atributo de la soberanía del Estado y, es la función pública
que tiene por objeto resolver las controversias que se plantean entre dos
partes y, que decide dichos conflictos de manera imperativa y desde una
posición imparcial, un juzgador.
B) Garantías judiciales: Refieren al conjunto de instrumentos establecidos
en las normas constitucionales, con el objeto de lograr la independencia y la
imparcialidad de los órganos jurisdiccionales.
C) Garantías de las partes: Son las que poseen los justiciables cuando
acuden a solicitar la prestación jurisdiccional.

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