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Universidad de San Carlos de Guatemala.

Curso: Derecho Constitucional.


Dra: Lucrecia Barrientos.
Trabajo: Resumen del libro, Teorías de las formas de gobierno, Norberto Bobbio

Nombre del Alumno: Hector Alexander Hernández Ajqui


No. carné: 202204875
Sección: C
Hegel dedica un capítulo introductorio a la "base geográfica de la historia del mundo”, en el que
explica que la historia del mundo ha pasado por tres fases: el altiplano con sus grandes llanuras, la
llanura fluvial,"el terreno fértil lleva consigo el paso de la agricultura”; la zona costera, en la que se
desarrollan las actitudes del hombre al comercio y se forman nuevas razones de riqueza y nuevas
condiciones de progreso civil ( “el mar despierta el ánimo; invita al hombre a la conquista y a la rapiña
pero también a la ganancia y a la adquisición”). El hecho de que tres fases de la civilización
correspondan a tres diferentes zonas de la tierra demuestra que la evolución de las sociedades
humanas no se presenta solamente en momentos sucesivos, sino que sobreviene también mediante
un desplazamiento de área a área. De otro modo: a un cambio en el tiempo corresponde uno en el
espacio, lo que acontece, como el cambio temporal, en cierta dirección.
En las Lecciones de filosofía de la historia, hay un capítulo dedicado al concepto de constitución, en
el que Hegel explica que "es la puerta, por donde el momento abstracto del Estado entra en la vida y
en la realidad". Las formas históricas de constitución por las cuales pasan todos los Estados y la
propia historia del mundo son tres: una primera forma de reino patriarcal, que corresponde a la
categoría del despotismo; una forma de Estado libre aunque se trate de una libertad particularista, que
es la república en sus dos encarnaciones históricas, la aristocrática y la democrática, y finalmente una
forma de reino ya no patriarcal y despótico, esto es, un reino en el cual el rey gobierna en una
sociedad que ahora está articulada en esferas relativamente autónomas que es la monarquía.
Lo nuevo en este pasaje, frente a toda la tradición y al mismo Montesquieu, es el criterio con
base en el cual se distinguen las tres formas. Efectivamente las tres formas de gobierno corresponden
a tres tipos de sociedad, la primera a una sociedad todavía indiferenciada y desarticulada en la que las
esferas particulares que componen una sociedad evolucionada, los Estados o los estamentos, todavía
no han salido de la unidad indistinta inicial. La segunda es una sociedad en la cual comienzan a
aparecer las esferas particulares sin lograr completamente su autonomía frente a la totalidad. La
tercera es una sociedad en la que la unidad se recompone mediante la articulación de las diversas
partes, es decir, en la que al mismo tiempo hay unidad y distinción y en la cual, por lo tanto, la unidad
es perfectamente compatible con la libertad de las diferentes partes. Hegel se refiere a este tercero a
la monarquía constitucional.
Se comprende que si la forma de gobierno es la estructura política de una sociedad bien
determinada, toda sociedad tiene su propia constitución y no puede tener otra. De esta manera
considera que toda discusión sobre la óptima forma de gobierno es una pérdida de tiempo. Para Hegel,
el movimiento histórico era continuo y por tanto no podía ser cíclico, y que toda forma estaba
rigurosamente vinculada a su espacio geográfico y a su tiempo histórico, por lo que no podía ser
repetida dos veces. Hegel rechaza plantearse el problema de la mejor forma de gobierno. El objetivo
que se propone es "entender lo que es la razón”. Una tercera observación se refiere a la expresión
"sociedad civil" que en la cual el momento de la eticidad está dividido en los momentos parciales de la
familia, la sociedad civil y el Estado; o sea, en el sentido de esfera intermedia entre la familia y el
Estado, en la que, con base en la disolución de la familia, se forman las clases sociales, precisamente
las clases cuya existencia constituye, como hemos visto, el carácter distintivo del Estado moderno que
es diferente del despotismo antiguo.
Las formas clásicas sólo son convenientes para las sociedades simples; únicamente la monarquía
constitucional, es la forma idónea en las que las delimitaciones particulares que constituyen la
"sociedad civil' son relativamente independientes frente al sistema estatal. El carácter distintivo de la
monarquía constitucional no reside en el hecho de que gobiernen en los diferentes niveles uno, pocos
y muchos, sino en el más sustancial de que los poderes fundamentales del Estado estén divididos y
sean ejercidos por órganos diferentes.
Comentario: Hegel tiene influencia en un pensamiento de carácter socialista, denota que una correcta
estructura de la forma de Estado es aquella apegada a la constitución, o sea, a las leyes, en donde
impere el interés común, y no el individual, como la mayoría de la época de la ilustración, pero el
análisis de la unión del espacio geográfico con el cambio incesante me dejó muy emocionado. Dejando
a un lado los juicios de valor para las formas de gobierno en cúal de todos es el más bueno y malo,
dejando espacio a la razón.

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