La formación de la elite

criolla
La elite criolla
Los hijos de españoles nacidos en las colonias americanas y
todos sus descendientes formaban una elite social. Los
criollos fueron encomenderos, hacendados y ganaderos,
tuvieron obrajes y fincas urbanas. Su patrimonio fue
transmitido de generación en generación gracias al
mayorazgo.

La conformación de
la identidad criolla
A inicios del siglo XVII, los criollos tomaron conciencia de su
situación particular respecto a los españoles nacidos en la
metrópoli. Se manifestó en situaciones de conflicto en tres
distintos ámbitos.
-Conflictos de índole cultural.
-Conflictos de índole política.
-Conflictos de índole económica.

La constitución de la
elite criolla
El denominador de la elite criolla era la posesión de una gran
riqueza y el inocultable afán de pertenecer a la aristocracia.
Para conseguir ese objetivo, desarrollaron varias
estrategias:
-La consolidación de la fortuna familiar mediante la creación
de mayorazgos, los cuales aseguraban la preservación del
patrimonio por varias generaciones.
-Las alianzas matrimoniales con otros clanes aristocráticos.
-La obtención de un titulo nobiliario, objetivo objetivo que
fue facilitado por la corona española, que encontró una forma
rentable de conseguir fondos a través de la venta de títulos
nobiliarios.
El éxito de esta nueva elite fue emulado por las familias
criollas de nivel inferior que no pertenecían a la aristocracia.

El poder político de los

criollos
El éxito social y económico de los criollos no fue bien visto
por la corona, que siempre sospecho del grado de
subordinación y lealtad de sus súbditos americanos. En
consecuencia las autoridades españolas dictaron una serie de
medidas para restringir el acceso de los criollos a los cargos
públicos, por lo cual iniciaron una larga batalla por la igualdad
de derechos en el acceso a la burocracia.
La situación empezó a cambiar a partir de una medida
impuesta por la propia corona en 1633para financiar sus
deudas: la venta de cargos públicos. La lucha por el poder
político fue mucho mas visible en el ámbito de las audiencias,
pues la corona margino a los criollos del cargo de oidor
argumentando. Por ello, dichos cargos no se pusieron
inicialmente, a la venta. Pero en 1687 la corona cambio esa
disposición, y así los criollos pudieron acceder masivamente a
las audiencias.