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1CANALIZACIÓN DE VÍAS

El uso de la vía venosa periférica con catéter es uno de los pilares terapéuticos dentro
de la atención prehospitalaria hasta el punto de que la mayoría de los pacientes son
portadores de uno o más catéteres venosos. La seguridad del paciente es una prioridad en
cualquier proceso dentro de su atención sin dejar de lado la seguridad del profesional
sanitario; de modo que, la canalización acceso rápido al torrente sanguíneo venoso de una
persona y debe realizarse con determinada asepsia, conocimiento y habilidad
ofreciéndole al paciente una atención de calidad.
Dentro de los cuidados que proporcionan las y los profesionales de salud a sus pacientes
se encuentra las relacionadas con el tratamiento de las patologías a través de
administración de medicamentos y soluciones por vía intravenosa, para lo que es
necesario la obtención de una vía periférica (de Salud, s.f.).
Si hablamos de “venopunción” decimos que es la técnica que consiste en puncionar
transcutáneamente una vena con una aguja de acero unida a una jeringa o un catéter;
debemos también hacer alusión al término “periferia” que se refiere a la vena que se
encuentra localizada en la periferia del organismo, con excepción de las venas centrales
como la aorta, la cava, entre otras, que solo son puncionadas por los médicos dentro de
centro hospitalario por la gran problemática que representa el cometer un error en una
vena de esta magnitud. Por lo general, los profesionales en atención prehospitalaria tienen
preferencia por las venas de las extremidades. Las venas de las extremidades superiores
tienen menor índice de riesgos y son de fácil acceso, de modo que se utilizan con mayor
frecuencia que las de las extremidades inferiores, éstas se usan pocas veces y solo si un
acceso en extremidades superiores no es una opción viable (Calero, 2019).
En ocasiones, la canalización de una vía puede tornarse compleja, resultando en
múltiples punciones que generan dolor e incomodidad al paciente, además de otros
efectos indeseados que pueden tener un alto impacto en la atención que el paciente
recibe, por ello es importante conocer la anatomía de las venas y saber identificar los
posibles factores de riesgo que podrían dificultar una canalización exitosa, solo de este
modo se evita que el paciente pase por sufrimientos innecesarios; aunque se ha
demostrado que la dificultad a la hora de canalizar una vía no esta directamente
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relacionada con el profesional si no más bien, depende de las características de cada
paciente.
La canalización de una vía también conlleva sus debidas complicaciones como
cualquier proceso terapéutico y estas estarán determinadas por varios factores como: la
adecuada técnica de canalización, el sitio de punción, tiempo prolongado del acceso
venoso, tipo de catéter utilizado.
En conclusión, la obtención de un acceso venoso tiene un papel importante a la hora
de tratar a un paciente, si bien es cierto no todos los pacientes lo necesitan, pero en su
mayoría será la base del tratamiento, es por ello por lo que el profesional sanitario debe
tener conocimiento del tema y sobre todo del correcto procedimiento para que así la
seguridad tanto del paciente como del profesional no se vea comprometida.

Lista de referencias

Huamán Lázaro, S. C., & Murillo Reyes, M. P. (2019). Conocimientos y prácticas sobre
bioseguridad en canalización de vía venosa periférica en estudiantes de enfermería de
una Universidad Privada, 2017.

Abadal, H. V., Narváez, P. F., & Mata, F. R. Capítulo 6 Canalización de vía venosa periférica.
Programa de prácticas de simulación ii. Procedimientos de enfermería, 69.

Calero, M. Á. R. (2019). Definiendo la vía venosa periférica de difícil canalización y los factores
de riesgo asociados: revisión sistemática. Medicina balear, 34(1), 11-19.

de Salud, R. PROCEDIMIENTO DE CANALIZACIÓN Y CUIDADOS DE LA VÍA VENOSA

PERIFÉRICA.

Junio 2023