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LA PRENATALIDAD

La prenatalidad es una etapa crucial en la vida de toda mujer. Durante este período, el
cuerpo de la madre experimenta una serie de cambios para prepararse para el parto y
para dar a luz a un bebé sano. Es importante que las mujeres reciban atención médica
adecuada durante el embarazo para garantizar la salud tanto de la madre como del bebé.
También es un momento emocionalmente intenso para las mujeres, ya que están
experimentando cambios tanto físicos como emocionales. Es importante que las mujeres
tengan un buen apoyo emocional durante este tiempo, ya sea de amigos, familiares o
profesionales médicos. En la prenatalidad se llegan a dar tres periódos: La fase del
huevo o también llamado cigote, que se da de( 0-14 días),tengo entendido que durante
la fase del huevo o cigoto, se produce la fecundación del óvulo por parte del
espermatozoide, dando lugar a la formación de un cigoto. Este cigoto comienza a
dividirse y a formar células, que se agrupan en una estructura esférica llamada mórula.
La mórula se sigue dividiendo y diferenciando, formando una estructura hueca llamada
blastocisto, que se implanta en el útero y da lugar al embrión. Aquí comienza la segunda
fase, la del embrión, durante la fase del embrión, se produce la formación y desarrollo
del embrión a partir del blastocisto. En esta fase, se forman los distintos tejidos y
órganos del cuerpo del futuro ser humano. El embrión experimenta una serie de cambios
y transformaciones a medida que se desarrolla, como la formación de la notocorda, la
aparición de las extremidades y la formación de los sistemas nervioso, cardiovascular y
respiratorio, entre otros, se da desde (14 días-2 meses). Y por último tenemos la fase
fetal, durante esta fase, el embrión se convierte en un feto y continúa su desarrollo y
crecimiento. En esta etapa, los órganos y sistemas del cuerpo se perfeccionan y se
producen cambios significativos en la apariencia física del feto. El feto experimenta un
rápido crecimiento en tamaño y peso, desarrollando características distintivas como las
huellas dactilares, las uñas, el vello corporal y los órganos sexuales (2 meses- hasta el
nacimiento). Durante el embarazo, es bueno que se realicen exámenes como por
ejemplo, un examen de sangre, para evaluar la salud de la madre y del feto. Estos
exámenes pueden incluir pruebas para detectar enfermedades como la anemia, la
diabetes gestacional, las infecciones de transmisión sexual y los trastornos genéticos.
También se pueden realizar pruebas para determinar el tipo de sangre y el factor Rh de
la madre, lo que es importante para prevenir complicaciones en caso de que el feto tenga
un tipo de sangre diferente. En general, los exámenes de sangre durante el embarazo son
una herramienta importante para garantizar la salud y el bienestar de la madre y del feto.
Por otro lado el análisis de orina durante el embarazo es una prueba que se realiza para
detectar posibles problemas de salud en la madre y en el feto. Este examen puede
revelar la presencia de infecciones del tracto urinario, proteínas o azúcares en la orina,
lo que podría indicar una posible diabetes gestacional. Las palpitaciones abdominales
durante el embarazo son sensaciones de latidos o pulsaciones que una mujer
embarazada puede experimentar en el área del abdomen. Estas palpitaciones pueden ser
causadas por el aumento del flujo sanguíneo en el cuerpo, los cambios hormonales y el
crecimiento del útero. En la mayoría de los casos, las palpitaciones abdominales durante
el embarazo son normales y no representan ningún riesgo para la madre o el feto. Sin
embargo, si las palpitaciones son intensas, frecuentes o van acompañadas de otros
síntomas preocupantes, es importante consultar a un médico para descartar cualquier
complicación. El control de peso durante el embarazo es importante para asegurar la
salud de la madre y el desarrollo adecuado del feto. También se pueden realizar
exámenes del seno de la madre para detectar posibles problemas de salud, como quistes
o tumores. Estos exámenes pueden incluir una mamografía o una ecografía mamaria.
Sin embargo, en general, se recomienda que las mujeres eviten las mamografías durante
el embarazo debido a los posibles riesgos para el feto. En su lugar, se puede realizar una
ecografía mamaria, que utiliza ondas sonoras para crear imágenes del seno. También se
puede realizar un examen físico del seno por parte del médico. Es importante que las
mujeres informen a su médico si notan algún cambio en sus senos durante el embarazo.
Así como estos, hay muchos otros controles que una madre gestante debe de realizarse.
La nutrición durante el embarazo es muy importante para el crecimiento y desarrollo del
feto, así como para la salud de la madre. Se recomienda una dieta equilibrada que
incluya una variedad de alimentos ricos en nutrientes, como frutas, verduras, proteínas,
granos y productos lácteos bajos en grasa. Es importante consumir suficiente ácido
fólico, hierro y calcio. El ácido fólico sirve para prevenir defectos del tubo neural en el
feto, como la espina bífida y la anencefalia. Además, el ácido fólico también juega un
papel importante en la producción de células sanguíneas y en el desarrollo del sistema
nervioso del feto. Algunas recomendaciones serían: seguir detalladamente sus chequeos,
comer alimentos balanceados y apropiados, evitar el consumo de alcohol y drogas,
mantener buena higiene, realizar ejercicios leves, etc.
Toledo León, María Fernanda

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