Está en la página 1de 2

XANTOLO: LA FESTIVIDAD DE LOS MUERTOS

Xantolo, celebración del Día de Muertos en la Huasteca Hidalguense, es una


tradición de más de cuatro meses de preparación y dedicación,

Es una verdadera fiesta y donde la muerte parece cobrar vida con el


cempasúchil, con la quema del copal, con el ritmo huapanguero que alegra los
bailables de los huehues, en los cuales participan niños, adolescentes y adultos
que asumen con respeto y alegría su papel.

Todo inicia el 24 de junio con el Día de San Juan Bautista con la siembra
de la milpa con semillas de la flor del muerto, cempasúchil o
cempoalxochitl.

Para el 29 de junio en el Día de San Pedro y San Pablo se comienza la


engorda de los animales que se usarán para la preparación de los platillos a
colocarse en la ofrenda.

El 29 de septiembre en el Día de San Miguel se realiza la primera tamaliza


para la elaboración de los chichapales que no son otra cosa que una olla de
barro donde se cocerán los tamales para el Xantolo. El 18 de octubre el Día de
San Lucas se cortan los racimos de plátanos para que estén maduros en la
ofrenda, así componen una ofrenda para agradecerle a la tierra por lo que ha
hecho y pedir que la celebración se lleve sin problemas.

El 30 de octubre en el Día de las Flores se comienza la construcción del


arco que se colocará en la ofrenda, se dispone de mesas o cajas para
construir cuatro pisos que representan la niñez, la juventud, la adultez y
la vejez y se comienza a vestir el recinto.
El 31 de octubre se dedica a los niños o angelitos, y el 1 de noviembre es para
los difuntos grandes, al mediodía los familiares hacen un camino de flores
cempasúchil desde la calle hasta donde está la ofrenda para guiar a las almas y
para que no se pierdan se prenden veladoras.

El 2 de noviembre, Día de la Bendición de los Difuntos, a mediodía en el


panteón se celebra una misa para despedir a las almas y pedir por su eterno
descanso, sobre las tumbas se coloca comida y comparte entre los vivos la
comida mientras el compás de los músicos alegra el momento.

El 30 de noviembre, Día de San Andrés, se hace la última ofrenda por la


noche de lo que se conoce como Xantolo chiquito, pues se hace el destape
de los coles, huehues o disfrazados que participaron en las fiestas del
Xantolo y con un alegre baile a los huapangueros uno por uno se les rocía
aguardiente para retirarse las máscaras para dar por concluida la
celebración.

También podría gustarte