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EXPEDIENTE : Nº 057-2014

ESCRITO : 02-2014
PROCESO : Administrativo Disciplinario.
SUMILLA : Recurso de Apelación en contra de
Resolución Administrativa.

SEÑOR CORONEL PNP INSPECTOR REGIONAL DE TACNA -


MOQUEGUA

Mi Coronel :

ELIO MARIANO FERREYROS ZAPATA, Mayor PNP,


identificado con Carné de Identidad Personal N° 285877 y
Documento Nacional de Identidad N° 07625061,
prestando servicios actualmente en la División Policial Ilo
de la Región Policial Moquegua; señalando domicilio
procesal en la casilla 34 del Poder Judicial de Ilo-
Moquegua; ante usted, me presento para exponer lo
siguiente :

Que, invocando interés y legitimidad para obrar, y por ser


derecho que me asiste al amparo de lo prescrito en el Artículo 59° Inciso 2) segundo
párrafo del Decreto Legislativo Nº 1150 que regula el Régimen Disciplinario de la Policía
Nacional del Perú, concordante con el Artículo 48º y Artículo 57° de su Reglamento
aprobado mediante Decreto Supremo N° 011-2013-IN en vigencia, es que recurro a usted
a fin de interponer el presente RECURSO DE APELACIÓN en contra de la RESOLUCIÓN N°
04-2015-IG-PNP-DIRINV-DIVIRODP-IRTAC.MOQ/IMG de fecha 12 de Febrero del 2015, con
la que se resuelve imponerme la injusta y drástica sanción de PASE DE LA SITUACIÓN DE
RETIRO, por la Infracción Muy Grave codificada como MG-54 en el Anexo III: Tabla de
Infracciones y Sanciones Muy Graves adjunta al Decreto Legislativo Nº 1150 que regula el
Régimen Disciplinario de la Policía Nacional del Perú.

I. PETITORIO :
Por ser de pleno derecho solicito se admita el presente
Recurso de Apelación, el cual está orientado a que se declare la NULIDAD de la
RESOLUCIÓN N° 04-2015-IG-PNP-DIRINV-DIVIRODP-IRTAC.MOQ/IMG de fecha 12 de
Febrero del 2015, mediante la cual se resuelve imponerme la sanción de PASE A LA
SITUACIÓN DE RETIRO, conforme a los fundamentos de hecho y derecho siguientes :

II. DEL PLAZO PARA IMPUGNAR LAS INFRACCIONES DE


NATURALEZA MUY GRAVE:

El Artículo 59º Inciso 2) segundo párrafo del Decreto


Legislativo Nº 1150 denominado “DECRETO LEGISLATIVO QUE REGULA EL RÉGIMEN
DISCIPLINARIO DE LA POLICÍA NACIONAL DEL PERÚ”, determina que: “Contra la resolución
de sanción, el infractor puede interponer recurso de apelación ante el Tribunal de
Disciplina Policial que emitió el acto impugnado dentro del plazo de cinco (05) días hábiles
contados a partir del día siguiente de la notificación”, entonces, al haber sido notificado
de la impugnada el día Miércoles 04 de Marzo del 2015, el plazo debe vencer el día
Miércoles 11 de Marzo del 2015; en consecuencia, el presente recurso se encuentra
dentro del plazo fijado por ley, cumpliéndose con los requisitos de procedibilidad
establecidos y, conforme al tercer párrafo del Artículo 59º Inciso 2) invocado, se debe
elevar al Tribunal de Disciplina Policial, para su resolución final.

III. FUNDAMENTOS DE HECHO:

1. Que, la imputación deviene como resultado de las


investigaciones administrativo disciplinarias realizadas por ante Inspectoría Regional PNP
Tacna - Moquegua, en mérito de mi presunta implicancias en el delito de Peligro Común
en la modalidad de Conducción de Vehículo en estado de ebriedad, como consecuencia
de la intervención policial del día 21 de Octubre del 2014 a las 19.30 horas
aproximadamente en la jurisdicción de la Comisaría PNP Pampa Inalámbrica-Ilo, como
consecuencia del Accidente de Tránsito protagonizado por el vehículo policial PL-16088
asignado a la Comisaría PNP El Algarrobal de la Región Policial Moquegua.

2. Que, antes de impugnar el fondo de las cuestiones


de hecho y derecho contenidas en la RESOLUCIÓN N° 04-2015-IG-PNP-DIRINV-DIVIRODP-
IRTAC.MOQ/IMG del 12 de Febrero del 2015, me permito invocar a la jurisprudencia
vinculante creada por el Tribunal Constitucional como máximo intérprete de la Constitución
y las Leyes, en los Fundamentos 10, 11 y 12 de la Sentencia de fecha 18 de Marzo 2011
(EXP. N° 03167-2010-PA/TC caso Sandro Favio Ugarte Herrera ) en los que sostiene: “(…) 10. Al
respecto este Colegiado considera que el establecimiento de disposiciones sancionatorias -
tanto por entidades públicas, privadas, particulares, así como por autoridades judiciales-
no puede circunscribirse a una mera aplicación mecánica de las normas, sino que en ella
debe efectuarse una apreciación razonable de los hechos en cada caso concreto,
tomando en cuenta las particulares circunstancias que lo rodean. El resultado de esta
valoración y evaluación llevará pues a adoptar una decisión razonable, proporcional y no
arbitraria.-11. En este sentido, la razonabilidad es un criterio íntimamente vinculado a la
justicia y está en la esencia misma del Estado Constitucional de Derecho. Se expresa como
un mecanismo de control o interdicción de la arbitrariedad en el uso de las facultades
discrecionales, exigiendo que las decisiones que se tomen en ese contexto respondan a
criterios de racionalidad y que no sean arbitrarias. Como lo ha sostenido este Colegiado,
esto “implica encontrar justificación lógica en los hechos, conductas y circunstancias que
motivan todo acto discrecional de los poderes públicos” (Cfr. Exp. Nº 0006-2003-AI/TC).--
12. Al reconocerse en los artículos 3º y 43º de la Constitución Política del Perú el Estado
Social y Democrático de Derecho, se ha incorporado el principio de interdicción o
prohibición de todo poder ejercido en forma arbitraria e injusta. Este principio tiene un
doble significado: (i) en un sentido clásico y genérico, la arbitrariedad aparece como el
reverso de la justicia y el derecho; (ii) en un sentido moderno y concreto, la arbitrariedad
aparece como lo carente de fundamentación objetiva, lo incongruente y contradictorio
con la realidad que ha de servir de base a toda decisión. Es decir, como aquello
desprendido o ajeno a toda razón de explicarlo (Cfr. Exp. Nº 0090-2004-AA/TC)” (cursivas,
énfasis y subrayados agregados).

3. Ahora bien, volviendo al tema en concreto,


mediante la impugnada el Órgano de Investigación y Decisión de Inspectoría Regional Sur
Arequipa, me impone la injusta y drástica sanción disciplinaria de PASE A LA SITUACIÓN
DE RETIRO por Infracción Muy Grave MG-54 tipificada en el Decreto Legislativo Nº 1150
que regula el Régimen Disciplinario de la Policía Nacional del Perú, la misma que
textualmente se describe como: MG-54 CONTRA LA IMAGEN INSTITUCIONAL
“Pertenecer a una organización criminal o cometer delito flagrante” (Pase a la Situación de
Retiro); nótese que la tipicidad concreta imputada ha sido interpretada de manera extensiva o
análoga ya que ha sido dividida en DOS SUBTIPICIDADES AUTÓNOMAS con el
pretexto que el conector disyuntivo “o” indica opciones alternativas excluyentes entre sí,
(cuyo criterio lo analizaré más adelante); sin embargo, de haber sido intervenido en
flagrante delito debí ser detenido y puesto a disposición de la Fiscalía Penal de turno en
calidad de DETENIDO, hecho que no se ha producido debido a que NO FUI
INTERVENIDO COMETIENDO DELITO ALGUNO; con lo que se acredita la
vulneración de mi derecho al DEBIDO PROCESO administrativo disciplinario

4. Al margen del sustento anterior, y, respecto de la


Infracción de naturaleza Muy Grave imputada, es preciso cuestionarla fáctica y
jurídicamente: MG-54: “Pertenecer a una organización criminal o cometer delito
flagrante” (Pase a la Situación de Retiro).- En primer lugar, mi posible conducta incumple con el
primer requisito de tipo, por no pertenecer a ninguna organización criminal; en segundo lugar,
como lo sustenté en mi escrito de Alegatos y Medios de Defensa de fecha 11 de Diciembre del
2014, en autos, existen como medios de prueba en mi contra, el Acta de Intervención
Policial formulada y suscrita por el Mayor PNP Víctor Parreño Galván Comisario de Pampa
Inalámbrica; y, Parte de Intervención Policial formulado por el Suboficial Superior PNP
Carlos Piérola Vega de la Comisaría de Protección de Carreteras de Ilo; asimismo, el
Certificado de Dosaje Etílico Nº 0038 (Registro Nº 1698), Transacción Extra-Judicial de
Reparación de Daños de fecha 23 de Octubre 2014; y, por el hecho de haber sido
encontrado en el interior del vehículo policial instantes después de ocurrido el accidente de
tránsito; sin embargo, debo reiterar que, tanto el Suboficial Superior PNP Piérola Vega
como el Mayor PNP Parreño Galván, se hicieron presentes en el lugar POSTERIOR A
OCURRIDOS LOS HECHOS; es decir, ambos efectivos policiales NO VIERON NI FUERON
TESTIGOS PRESENCIALES del evento.

5. Según el DÉCIMO OCTAVO Considerando de la


impugnada, el criterio rector del Órgano de Investigación y Decisión, se ha basado en: “A.
Al Mayor PNP Elio Mariano FERREYROS ZAPATA, se le ha encontrado responsabilidad
administrativa disciplinaria, por Infracción MUY GRAVE, contra la Imagen Institucional,
CÓDIGO MG-54 “PERTENECER A UNA ORGANIZACIÓN CRIMINAL O COMETER FLAGRANTE
DELITO”, previsto en el anexo III de la Tabla de Infracciones y sanciones del D.Leg.Nº 1150
Ley del Régimen Disciplinario de la PNP y su Reglamento, por las siguientes
consideraciones: a) Que, el día 21OCT14 ha sido intervenido por protagonizar un
Accidente de Tránsito el día 21OCT14, a horas 19.30 aprox., al conducir el vehículo policial
de placa de rodaje EPC-282 (PL-16088), encontrándose en estado de ebriedad hecho
corroborado con el Certificado de Dosaje Etílico Nº 0038 con resultado POSITIVO de 1.89
grs/l (un gramo ochenta y nueve) b) Que, entiéndase por flagrante delito, cuando el sujeto
agente es descubierto en la realización del hecho punible, o ACABA DE COMETERLO; para
el presente caso el intervenido fue encontrado instantes después de haber cometido el
ilícito penal y que en ese momento se encontraba en el interior del vehículo EPC-282,
conforme al Acta de Intervención Policial, declaración testimonial del Mayor PNP Víctor
Juan PARREÑO GALVÁN, Parte S/N-2014-COMPRCAR ILO suscrita por el SOS PNP Carlos
PIÉROLA VEGA, con el Informe Policial Nº 140-REGPOSUR-DIRTEPOL-M/DIVPOL-Ilo/Comis-
Pam-Inal.SIAT, suscrita por el SOS PNP Julio SOLÍS RAMOS, en el cual determina la
participación del administrado como conductor del vehículo policial partícipe del accidente
de tránsito del 21OCT14, aunado a ello que el administrado reconoce plenamente su
participación en el Accidente de Tránsito, como conductor de la Unidad Policial EPC-282,
corroborado con la Transacción Extrajudicial de Reparación de Daños, del 23OCT14 (…)”;
como se aprecia, el Órgano de Investigación y Decisión sustenta su criterio sancionador
en DOS VERBOS RECTORES y, ha ofrecido CINCO MEDIOS DE PRUEBA que, para el Órgano
de Investigación y Decisión, son copulativos de mi presunta implicancia en los hechos
materia de Litis, cuatro de los cuales fueron desvirtuados en mi escrito de Alegatos y
Medios de Defensa de fecha 11 de Diciembre 2014.

VERBOS RECTORES
5.1 Que, el día 21OCT14 ha sido intervenido
por protagonizar un Accidente de Tránsito el día 21OCT14, a horas 19.30 aprox., al
conducir el vehículo policial de placa de rodaje EPC-282 (PL-16088), encontrándose en
estado de ebriedad hecho corroborado con el Certificado de Dosaje Etílico Nº 0038 con
resultado POSITIVO de 1.89 grs/l (un gramo ochenta y nueve) (…)”; al respecto, debo
reiterar que en autos NO EXISTEN pruebas objetivas ni testimoniales que determinen que
en el momento del accidente de tránsito ESTUVE CONDUCIENDO el vehículo policial,
habiéndose basado su apreciación en un sustento que no ha sobrepasado la esfera del
análisis.

5.2 (…) b) Que, entiéndase por flagrante delito,


cuando el sujeto agente es descubierto en la realización del hecho punible, o ACABA DE
COMETERLO; para el presente caso el intervenido fue encontrado instantes después de
haber cometido el ilícito penal y que en ese momento se encontraba en el interior del
vehículo EPC-282 (…)”; si bien es cierto la flagrancia se configura cuando el agente es
descubierto realizando el ilícito o con los indicios y/o evidencias de haberlo cometido en
esos instantes; en mi caso en concreto, si bien es cierto que estuve en el interior del
vehículo siniestrado, en ninguna parte de los actuados policiales dice que me encontraba
CONDUCIENDO EL VEHÍCULO o que estuve sentado al volante del mismo, ya que la
intervención del personal policial se produjo DESPUÉS DEL ACCIDENTE; con lo que se
acredita que ni posible conducta NO REUNE los dos presupuestos punibles; a mayor
abundamiento, de haber sido así, como es que NO FUI DETENIDO ni puesto a disposición
de la Fiscalía Penal de Turno en CALIDAD DE DETENIDO.

DE LOS MEDIOS DE PRUEBA


5.3 “(…) declaración testimonial del Mayor PNP
Víctor Juan PARREÑO GALVÁN (…)”; este medio de prueba testimonial no resulta
contundente, si tenemos en cuenta que el Mayor PNP Víctor Juan Parreño Galván se
ratifica en el contenido del Acta de Intervención Policial de fecha 21 de Octubre 2014
formulada, no habiendo tenido otra opción que ratificarse en razón que podría ser
denunciado por Delito de Falsedad; a mayor abundamiento y respecto de la mencionada
Acta de Intervención Policial, debo reiterar que esta tampoco resulta contundente ya que
en el primer y segundo párrafo, me sindica, en forma directa, como el conductor del
vehículo policial siniestrado, pese a que él NO VIO EL ACCIDENTE DE TRÁNSITO por haber
llegado posterior al suceso y DESPUÉS QUE EL SUBOFICIAL SUPERIOR PNP PIÉROLA
VEGA, quien estuvo en la intervención inicial; por tanto, al igual que la declaración
testimonial, el contenido de esta Acta de Intervención Policial NO REÚNE LOS REQUISITOS
de prueba plena, por haber basado su contenido en imputaciones directas sin haber sido
verificadas plenamente; asimismo, tanto en su declaración testimonial como en el
segundo párrafo del Acta consigna que le indiqué que yo había estado conduciendo el
vehículo y que le referí la forma y circunstancias del accidente, en este extremo,
considero que lo vertido por el Mayor PNP Parreño carece de veracidad, ya que por mi
estado de aturdimiento y desorientación por el impacto, así como por mi estado de
inecuanimidad no pude decirle que conducía el vehículo policial momentos previos al
accidente, ni pude describir los hechos, y, lo sostengo así, por cuanto, según el Certificado
de Dosaje Etílico Nº 0038, cuya muestra fue tomada con hora con diez minutos después
del accidente, tenía 1.89 g/l de alcohol en la sangre, entonces, si tenemos en cuenta que,
según bibliografía de gran aceptación, de 1,00 a 1,99 gramos por litro de alcohol en la
sangre los efectos progresivos del alcohol producen un COMPORTAMIENTO de exceso de
expresión, vaivenes emocionales, enojo o tristeza, bullicio y disminución de la libido; y,
produce cierta DISCAPACIDAD como alteración de los reflejos, aumento del tiempo de
reacción, motricidad fina, tambaleo, titubeo, dificultad para hablar, disfunción eréctil
temporal y posibilidad de intoxicación temporal; y, en este estado no pude describir con
exactitud la forma y circunstancias del accidente, habiendo realizado el Mayor PNP
Parreño Galván una descripción analítica pero de su apreciación en la escena del
accidente.

5.4 “(…) Parte S/N-2014-COMPRCAR ILO


suscrita por el SOS PNP Carlos PIÉROLA VEGA, (…)”; respecto a esta Parte S/N-2014-
COMPRCAR ILO del 21 de Octubre 2014 formulado y suscrito por el Suboficial Superior PNP
Carlos Piérola Vega de la Comisaría de Protección de Carreteras de Ilo; como se aprecia, en
su contenido, indica que el día de los hechos se encontraba de servicio como Clase de Base
y FUE AVISADO POR USUARIOS DE LA VÍA SOBRE EL ACCIDENTE DE TRÁNSITO, con lo que
se acredita que el mencionado Suboficial PNP NO ESTUVO PRESENTE en el momento del
accidente de tránsito, habiéndose limitado su intervención policial en mérito de la noticia
recibida por los usuarios de la vía, constituyéndose inmediatamente al lugar y encontrando
el vehículo accidentado (Punto 1. del Parte en mención); asimismo, en la parte inicial del punto
2. consigna que “se constató que en el interior del vehículo se encontraba un efectivo
policial, procediendo a auxiliarlo, e identificándosele como el Cap. PNP FERREIROS ZAPATA
Elio; llegando al lugar personal de la Comisaría Pampa Inalámbrica al mando del May. PNP
PARREÑO (…)”, aquí se aprecian dos premisas: La primera, que el mencionado Suboficial
PNP verificó que me encontraba en el interior del vehículo, no sindicándome que era el
conductor ni señalando mi ubicación (asiento del piloto, copiloto o tripulante) en el interior del
vehículo; y, la segunda, que el Mayor PNP PARREÑO llegó al lugar posterior a los hechos
ocurridos.

5.5 “(…) Informe Policial Nº 140-REGPOSUR-


DIRTEPOL-M/DIVPOL-Ilo/Comis-Pam-Inal.SIAT, suscrita por el SOS PNP Julio SOLÍS RAMOS,
en el cual determina la participación del administrado como conductor del vehículo
policial partícipe del accidente de tránsito del 21OCT14, (…)”; conforme se aprecia en el
OCTAVO Considerando de la impugnada, el Informe Policial fue remitido a la Fiscalía
Provincial Penal Corporativa de Ilo-Segundo Despacho de Decisión Temprana de la
Provincia de Ilo para que accione en la parte que le corresponde por mi presunta
implicancia en delito de Seguridad Pública-Peligro Común en la modalidad de Conducción
de Vehículo en Estado de Ebriedad; autoridad que hasta la fecha no ha emitido
pronunciamiento alguno respecto de mi implicancia en ilícito penal alguno; a mayor
abundamiento, los hechos investigados por el Instructor del Informe Policial Suboficial
Superior PNP Julio Solís Ramos, han sido orientados a mi condición como CONDUCTOR
DEL VEHÍCULO POLICIAL SINIESTRADO; sin embargo, EN NINGUNA PARTE del Informe
Policial existen pruebas o convicción respecto de mi condición como conductor; es así
que, el Instructor no ha recabado pruebas testimoniales de testigos del hecho, habiendo
basado su criterio solo en las pruebas instrumentales que tenía a la mano como las Actas
de Intervención Policial, Certificado de Dosaje Etílico y Transacción Extra Judicial, NO
EXISTIENDO NINGUNA OTRA PRUEBA ADICIONAL que corrobore mi implicancia.

5.6 “(…) aunado a ello que el administrado


reconoce plenamente su participación en el Accidente de Tránsito, como conductor de la
Unidad Policial EPC-282, corroborado con la Transacción Extrajudicial de Reparación de
Daños, del 23OCT14 (…)”; como lo sustenté en mi Alegato de defensa, cuando el suscrito
se entrevistó con la Licenciada Yanet C. Ortega Ortega encargada de la Dirección General
del Instituto Superior Tecnológico Público “Luís E. Valcárcel”, llegamos a un acuerdo
conciliador para reparar los daños ocasionados en la estructura del mencionado instituto
superior, pero en mi condición de RESPONSABLE del vehículo policial por ser el Comisario
de El Algarrobal, pero no como CONDUCTOR de dicho vehículo; asimismo, el documento en
mención fue redactado en la misma Institución Superior por el abogado de la directora,
considerándome como conductor de la unidad móvil para presionarme en caso de
incumplimiento, tal como aparece en la parte final del punto 4. del mencionado
documento, habiéndome sometido con la finalidad de arribar a un acuerdo conciliador
inmediato.

5.7 Adicionalmente, se ha creado convicción de


certeza en el resultado del Certificado de Dosaje Etílico Nº 0038 (Registro Nº 1698), como
lo sustenté anteriormente, en ningún momento fui sorprendido conduciendo el vehículo
policial PL-16088 al momento de producirse el accidente de tránsito, habiendo permitido
que se me extraiga la muestra de sangre para el examen de dosaje etílico para no agravar
mi situación; es decir, para no incurrir en Infracción Muy Grave (MG-10), y, para cumplir
con el procedimiento policial por ser Oficial de la Policía Nacional del Perú en situación de
Actividad, pero NO COMO CONDUCTOR del vehículo policial accidentado; asimismo, debo
reiterar que ese día NO ERA EL CONDUCTOR DEL VEHÍCULO POLICIAL, el cual era conducido
por el Suboficial de Segunda PNP en situación de Retiro Jaime Wenceslao Henry Tarqui
Concha, quien se ofreció a conducir el vehículo al ver mi estado de inecuanimidad.

6. Con relación a la Infracción Muy Grave MG-54:


“Pertenecer a una organización criminal o cometer delito flagrante” (Pase a la Situación de
Retiro); AL MARGEN DE REITERAR QUE YO NO CONDUCÍA EL VEHÍCULO POLICIAL AL
MOMENTO DE LA INTERVENCIÓN POLICIAL, es pertinente contradecirlo de la siguiente
manera: En primer lugar, mi posible conducta incumple con el primer requisito de tipo, por no
pertenecer a ninguna organización criminal; en segundo lugar, NUNCA FUI INTERVENIDO
COMETIENDO FLAGRANTE DELITO, ya que, según se desprende del Acta de Intervención Policial
suscrita por el Mayor PNP Víctor Parreño Galván y del Parte S/N-2014-COMPRCAR ILO suscrito
por el Suboficial Superior PNP Carlos Piérola Vega, en ningún momento se consigna que fui
sorprendido conduciendo el vehículo policial en estado de ebriedad, ya que ambos
efectivos policiales llegaron a la escena después de producido el accidente; a mayor
abundamiento, y, como lo sustenté anteriormente, el Órgano de Investigación y Decisión ha
interpretado la tipicidad imputada MG-54 de manera extensiva o análoga ya que ha sido
dividida en DOS SUBTIPICIDADES AUTÓNOMAS con el pretexto que el conector
disyuntivo “o” indica opciones alternativas excluyentes entre sí; y, respecto de los alcances
de la Sentencia de fecha 01 de junio del 2009 del Tribunal Constitucional ( EXP. Nº 05423-2008-HC/TC)
en cuyo del Fundamento 9. dice: “Que el Tribunal Constitucional ha establecido en reiterada
jurisprudencia que la flagrancia en la comisión de un delito presenta dos requisitos
insustituibles: a) la inmediatez temporal, es decir, que el delito se esté cometiendo o que
se haya cometido instantes antes; y b) la inmediatez personal, que el presunto delincuente
se encuentre en el lugar de los hechos en el momento de la comisión del delito y esté
relacionado con el objeto o los instrumentos del delito, ofreciendo una prueba evidente
de su participación en el hecho delictivo”, reiterada en el segundo párrafo del
Fundamento 2. de la Sentencia de fecha 28 de marzo 2011 ( EXP. N° 00354-2011-PHC/TC);
consecuentemente, mi POSIBLE conducta incumple los requisitos insustituibles de
INMEDIATEZ TEMPORAL e INMEDIATEZ PERSONAL por cuanto NO SE HAN OFRECIDO
PRUEBA EVIDENTES DE MI PARTICIPACIÓN EN EL HECHO DELICTIVO, es por ello que NO
FUI PUESTO A DISPOSICIÓN DE LA FISCALÍA DE TURNO EN CALIDAD DE DETENIDO.

7. Respecto de la Infracción Muy Grave MG-51:


“Protagonizar accidentes de tránsito en estado de ebriedad o drogadicción, conduciendo
vehículos del Estado” (De 1 a 2 años de disponibilidad ); me remito al contenido del punto
precedente, reiterando que NO CONDUCÍA EL VEHÍCULO POLICIAL PL-16088 DEL ESTADO
AL MOMENTO DE LA INTERVENCIÓN POLICIAL.

8. Sobre la Infracción Grave G-31: “Ocasionar


accidente de tránsito con vehículo policial, sin estar autorizado para su manejo o con
vehículo particular sin poseer licencia de conducir” (De 6 a 10 días de sanción de rigor ); al
margen de reiterar que no conducía el vehículo policial al momento del accidente, en el
supuesto negado de haberlo hecho, si cuento con la Licencia de Conducir Nº H-07625061
Clase A Categoría Uno vigente, cuya copia forma parte del expediente principal.

9. Ahora bien, al no existir prueba plena de mi


implicancia en el delito de Peligro Común ni en las tipicidades imputadas, habiéndose
basado el criterio sancionador en la simple sindicación del Mayor PNP Víctor Parreño
Galván en su declaración testimonial y Acta de Intervención Policial, y, en el contenido del
Acta de Intervención Policial suscrita por el Suboficial Superior PNP Carlos Piérola Vega
considero pertinente invocar al principio de IN DUBIO PRO REO (PRO ADMINISTRADO en
materia administrativa), entendiéndose “(…) no como un principio aislado, sino más bien
íntimamente unido al principio de presunción de inocencia más aún cuando se trata de
producir efectos jurídicos, hacerse efectivo o exigible; en el ámbito procesal, la aplicación
de este principio implica que, cuando el juzgador se vea obligado a suspender su
razonamiento porque se encuentra ante presupuestos de hecho imposibles, improbables,
no comprobados o que sencillamente no justifican la aplicación de la pena, debe
abstenerse de condenar a una persona; su aplicación práctica está basada en el principio
de que toda persona es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad; en caso de que
el juez no esté seguro de ésta, y así lo argumente en la sentencia, deberá entonces dictar
un fallo absolutorio"; en este sentido el principio de in dubio pro reo es considerado una
regla de garantía constitucional esencial en todo Proceso Penal (...)” (extraído del Trabajo de
Investigación Monográfica "In dubio pro reo" del Dr. Luis Oscar Donayre Yshii Abogado Titulado de la Universidad
Nacional San Luis Gonzaga de Ica, "Medalla de Oro" Premio a la "Excelencia Académica 2007", VII Premio a la Excelencia
Académica en Derecho "José León Barandiaran Hart", Autor de la Tesis: "La Corte Penal Internacional: Problemática e

Impunidad de los Delitos Internacionales" ); asimismo el tribunal Constitucional en Sentencia


vinculante ha determinado que: "El principio indubio pro reo no es un derecho subjetivo,
sino un principio de jerarquía constitucional cuyo fin es garantizar el cabal respeto del
derecho fundamental a la libertad individual, bien para resguardar su plena vigencia, bien
para restringirlo de la forma menos gravosa posible, en el correcto entendido de que tal
restricción es siempre la excepción y nunca la regla (…)” (Fundamento 1. de la Sentencia de fecha
27 de Septiembre 2002 – Expediente Nº 1994-2002-HC/TC – Caso Rudecindo Adriano Huanca Céspedes ).

10. Finalmente, deseo agregar que el suscrito ha


cumplido con la reparación completa de los daños materiales producidos en el vehículo
policial PL-16088 con mi propio peculio y sin costo para el Estado, conforme lo corroboro
con la copia simple del Informe Técnico Nº 002-2015-REGPOSUR-OFAD-UNILOG/SM del
20 de Enero 2015 que adjunto como prueba a mi favor; invocando a mi favor a los
criterios rectores contenidos en el Artículo 31º del Decreto Legislativo Nº 1150.

IV. FUNDAMENTOS DE DERECHO :

Solicito al respetable Colegiado que se tenga en


consideración el contenido del Artículo 2do. Inciso 24 Literal e. de la Constitución Política
del Estado que prescribe: “Toda persona es considerada inocente mientras no se haya
declarado judicialmente su responsabilidad”; este principio constitucional vincula también
a los actos administrativos, por consiguiente guarda estrecha relación con lo prescrito en
el Artículo IV Inciso 1 Numeral 1.7 de la Ley N° 27444 del Procedimiento Administrativo
General, de aplicación supletoria en los procedimientos administrativo disciplinarios, que
consigna: “Presunción de Veracidad.-En la tramitación del procedimiento administrativo,
se presume que los documentos y declaraciones formulados por los administrados en la
forma prescrita por esta ley, responden a la verdad de los hechos que ellos afirman. Esta
presunción admite prueba en contrario”.

POR LO EXPUESTO :

A usted Mi Coronel PNP, invocando al principio de


PLURALIDAD DE INSTANCIAS, solicito se me conceda recurso de Apelación por estar
dentro del plazo establecido por el Artículo 59º Numeral 2) segundo párrafo del D.L.Nº
1150, y Artículo 48º del Decreto Supremo Nº 011-2013-IN., elevando el presente recurso,
juntamente con el expediente principal, al Tribunal de Disciplina Policial en la forma y
plazos establecidos en el Artículo 59º Inciso 2 segundo y tercer párrafos de la Ley Especial,
concordante con el Artículo 57º de su Reglamento, para que se pronuncie sobre el fondo
de la pretensión con arreglo a Ley.

PRIMER OTROSI DIGO: Invocando a los alcances del Artículo 50º Numeral 3) del D.L.Nº
1150, concordante con el Tercer Párrafo del Artículo 48º del D.S.Nº 011-2013-IN, solicito
se me conceda la oportunidad de exponer mis descargos ante el Respetable Colegiado, en
la fecha y hora que se digne determinar.

SEGUNDO OTROSI DIGO: Ofrezco como medios de prueba a mi favor los mismos que
obran en el expediente principal, incluido mi escrito de Alegatos y Medios de Defensa de
fecha 11 de Diciembre del 2014; y,
1. Copia simple del Informe Técnico Nº 002-2015-REGPOSUR-OFAD-UNILOG/SM del
20 de Enero 2015.

ANEXOS:
1.a. Copia de Carné de Identidad Personal N° 285877.
1.b. Copia de Documento Nacional de Identidad N° 04400380.

Moquegua, 09 de Marzo del 2 015.

___________________________
ELIO MARIANO FERREYROS ZAPATA
CAPITÁN PNP
CIP. N° 285877
DNI. N° 04400380
EXP. Nº : 43-2014
ESCRITO N° : 01-2014
PROCESO : Procedimiento Disciplinario
SUMILLA : Recurso de Apelación.

SEÑOR CORONEL PNP JEFE DE LA OFICINA DE DISCIPLINA


DE AREQUIPA.

Mi Coronel :

ERASMO EDMUNDO LOBATÓN TORRES,


Suboficial de Primera PNP, identificado con
Carné de Identidad Personal N° 31313676
(Constancia Nº 579) y Documento Nacional de
Identidad N° 29715269, prestando servicios
actualmente en la Sección Servicios Especiales
de la Dirección Territorial Arequipa; con el
debido respeto me presento para exponer lo
siguiente :

Que, invocado interés y legitimidad para


obrar; y, al amparo del Artículo 57º de Decreto Supremo Nº 011-2013-IN. que
aprueba el Reglamento del Decreto Legislativo Nº 1150 Régimen Disciplinario de
la Policía Nacional del Perú en actual vigencia; es que recurro a usted a fin de
interponer el presente RECURSO DE APELACIÓN en contra de la Resolución de
la Oficina de Disciplina PNP Arequipa N° 372-2014-IGPNP-DIRINV-OFICIR/OD-
AREQUIPA de fecha 17 de Abril 2014; mediante la cual se resuelve sancionarme
con DIEZ DÍAS DE SANCIÓN DE RIGOR por Infracción Grave prevista en el
Código G-34 del Decreto Legislativo Nº 1150 que regula el Régimen Disciplinario
de la Policía Nacional del Perú en vigencia; Resolución que me fue notificada
formalmente con fecha 19 de Mayo del 2014.

1. PETITORIO :
Por ser de pleno derecho vengo a la instancia
superior respectiva, para que en un ACTO DE JUSTICIA se declare fundada la
pretensión contenida en el presente Recurso de Apelación, y, se REVOQUEN los
alcances de la Resolución de la Oficina de Disciplina PNP Arequipa N° 372-2014-
IGPNP-DIRINV-OFICIR/OD-AREQUIPA de fecha 17 de Abril 2014, mediante la
cual se resuelve imponerme la drástica, excesiva e injusta sanción de DIEZ (10)
DÍAS DE SANCIÓN DE RIGOR, y, se proceda al archivamiento del presente
procedimiento; conforme a los fundamentos de hecho y derecho siguientes :

2. DEL PLAZO PARA IMPUGNAR LAS


INFRACCIONES DE NATURALEZA
GRAVE:

El Artículo 58º Inciso 2) segundo párrafo del


Decreto Legislativo Nº 1150 denominado “DECRETO LEGISLATIVO QUE
REGULA EL RÉGIMEN DISCIPLINARIO DE LA POLICÍA NACIONAL DEL
PERÚ”, determina que: “Contra la resolución de sanción procede recurso de apelación
que será presentado ante el mismo Jefe de la Oficina de Disciplina dentro del plazo de cinco
(05) días hábiles contados a partir del día siguiente de la notificación”, entonces, al haber
sido notificado de la impugnada el día 19 de Mayo 2014, el plazo debe vencer el
día 26 de Mayo 2014; en consecuencia, el presente recurso se encuentra dentro del
plazo fijado por ley, cumpliéndose con los requisitos de procedibilidad
establecidos y, conforme al tercer párrafo del Artículo 58º Inciso 2) invocado, se
debe elevar el presente al Inspector Regional Sur correspondiente, para su
resolución final.

3. FUNDAMENTOS DE HECHO :

1. Que, como se desprende del expediente, se


me imputa responsabilidad disciplinaria por supuestamente haber incurrido en la
Infracción Grave codificada como G-34 del tipificada en el Decreto Legislativo Nº
1150 Régimen Disciplinario de la Policía Nacional del Perú por haberme
encontrado falto a mi centro de labores por el lapso de CUATRO DÍAS; es decir,
del 10 al 14 de Enero 2014, cuyo sustento se encuentra en el Considerando 10. de la
impugnada en el que se señala: “Que, el SO1 PNP Erasmo Edmundo LOBATÓN
TORRES, (…) refiere además que permaneció en su domicilio signado en la calle
Rosaspata Nº 1012-B distrito de Mariano Melgar, no pudiendo acreditar el tratamiento
médico con la compra de los medicamentos recetados según afirma por haberlos comprado
en forma particular, actos que, como medio probatorio no tienen el valor legal; además en
las ocurrencias policiales formulados por el SOT1 PNP Rufo CONDORI MACHACA,
SO3 PNP Edwin GARNICA CALLOAPAZA y SO2 PNP Edy GÓMEZ FLORES,
que obran a fojas (36,37 y 38) determina que no ha permanecido en su domicilio;
asimismo, según el tratamiento médico obtenido, no estaba imposibilitado físicamente para
comunicar telefónicamente a su subunidad PNP el estado de su salud; sin embargo, no lo
hizo, acciones que restan credibilidad en los argumentos de su defensa”; al respecto, es
pertinente alegar que, me ratifico en todos los argumentos vertidos al momento de
ejercitar mi derecho a la defensa; reiterando que los días de mi ausencia en mi
centro de trabajo me encontraba en mi domicilio guardando absoluto reposo a fin
de cautelar mi salud; en este extremo invoco a mi favor los alcances del
PRINCIPIO DE PRESUNCIÒN DE VERACIDAD contemplado en el Artículo IV
Inciso 1 Numeral 1.7 del título preliminar de la Ley 27444 que textualmente señala:
“En la tramitación del procedimiento administrativo, se presume que los documentos y
declaraciones formulados por los administrados en la forma prescrita por esta Ley,
responden a la verdad de los hechos que ellos afirman. Esta presunción admite prueba en
contrario”; y, Artículo 42º Numeral 42.1 del mismo cuerpo legal que dice: “Todas las
declaraciones juradas, los documentos sucedáneos presentados y la información incluida en
los escritos y formularios que presenten los administrados para la realización de
procedimientos administrativos, se presumen verificados por quien hace uso de ellos, así
como de contenido veraz para fines administrativos, salvo prueba en contrario”; en este
orden de ideas, los documentos denominados PARTES DE OCURRENCIAS
formulados por el Suboficial Técnico de Primera PNP Rufo Condori Machaca con
fecha 10 de Enero 2014; , Suboficial de Tercera PNP Edwin Garnica Calloapaza del
11 de Enero 2014, Suboficial de Segunda PNP Edy Gómez Flores del 12 de Enero
2014; y, Suboficial Brigadier PNP Juan Sánchez Valdivia del 13 de Enero 2014,
UTILIZADOS EN MI CONTRA como pruebas de mi posible conducta NO SE
CONSTITUYEN EN PRUEBAS IDÓNEAS EN CONTRARIO, en razón que, para
darle un marco de veracidad y legalidad a las posibles diligencias de
NOTIFICACIÓN realizadas por los efectivos policiales antes señalados, se debió
formular ACTAS DE VERIFICACIÓN, de NOTIFICACIÓN o de DILIGENCIA
FRUSTRADA, en la que se debió adjuntar el FORMATO de la NOTIFICACIÓN; a
mayor abundamiento, cuando el Suboficial Brigadier PNP Juan Sánchez Valdivia
me notificó debió hacerme suscribir la Notificación escrita o formato emitido por
la autoridad solicitante, así está establecido en los Artículos 20º y 21º de la Ley
27444; sustento esto en el Artículo 41º del Reglamento de Documentación Policial
aprobado por Resolución Ministerial Nº 0456-90-IN/PNP del 19 de Septiembre
1990 (vigente en el momento de los supuestos hechos), en el que dice que el ACTA “Es el
documento en el que se deja constancia de una intervención policial o de un acto
administrativo y tiene por finalidad garantizar la veracidad de la diligencia y la legalidad
de los procedimientos”; por el contrario, el PARTE, según el Artículo 117º del mismo
cuerpo legal “Es el documento con el cual se da cuenta a la autoridad competente o
escalón superior sobre hechos, actividades, situaciones, diligencias o resultado de
investigaciones relacionadas con el servicio o sobre asuntos de carácter administrativo o
disciplinario”; es por ello que sostengo que se debió formular ACTAS y no PARTES
DE OCURRENCIAS ya que con estos último no se ha acreditado las supuestas
diligencias de notificación realizadas.

2. A mayor abundamiento, en este mismo


Considerando 10. se alega que el Certificado Médico otorgado por el Dr. Juan
Fidel Cary Cutipa en el que se consigna el diagnóstico de “DESCOMPENSACIÓN
DIABÉTICA” y los cuatro días de tratamiento y descanso médico otorgados, como
medio probatorio no tiene el valor legal; esta apreciación carece de sustento toda
vez que este diagnóstico fue emitido por un PROFESIONAL EN MEDICINA y
ninguna autoridad distinta puede cuestionarlos porque ello obedece a su
capacidad profesional y bajo su propia responsabilidad; en este extremo, invoco a
los alcances del Artículo 41º Inciso 41.1 Numeral 41.1.5 de la Ley 27444 que
textualmente dice: “Constancias originales suscritas por profesionales independientes
debidamente identificados en reemplazo de certificaciones oficiales acerca de las condiciones
especiales del administrado o de sus intereses cuya apreciación requiera especiales actitudes
técnicas o profesionales para reconocerlas, tales como certificados de salud o planos
arquitectónicos, entre otros. Se tratará de profesionales colegiados sólo cuando la norma
que regula los requisitos del procedimiento así lo exija”; finalmente, la administración
desmerece mis descargo con el argumento que “(…) según el tratamiento médico
obtenido, no estaba imposibilitado físicamente para comunicar telefónicamente a su
subunidad PNP el estado de su salud (…)”, reconociendo que es cierto que no
comuniqué a mi Subunidad Policial sobre mi estado de salud, hecho que
efectivamente merece una sanción disciplinaria, PERO NO EN LA MAGNITUD
DE LA SANCIÓN DE RIGOR.
3. En el Considerando 11. se realiza la
observación que el Dr. Juan Fidel Cary Cutipa se encuentra inhábil por falta de
pago, sin embargo, esta responsabilidad no me alcanza ni debe servir como medio
de prueba toda vez que el profesional es responsable por sus propios actos;
asimismo, el Certificado Médico presentado es original y fue proporcionado por el
mismo profesional; es más, si bien es cierto que las recetas médicas y análisis
emitidos por el Policlínico “Espíritu Santo”, si bien es cierto que corresponden a
otras fechas, sin embargo lo que si se acredita es que adolezco de “DIABETES
MELLITUS TIPO II” y guardan similitud con el diagnóstico de
“DESCOMPENSACIÓN DIABÉTICA” emitido por el Dr. Juan Fidel Cary Cutipa
al momento de la consulta médica; y, para corroborar mi versión, ofrezco como
medio de prueba adicional a mi favor la copia del Informe Médico de fecha 23 de
Mayo 2014 del policlínico “Espíritu Santo” en el que se deja constancia las fechas
de mi atención médica por el mal que padezco.

4. Para darle mayor sustento al criterio rector


sancionador, en el Considerando 12. se consigna: “Que, de manera consecuente con lo
expuesto en los considerandos precedentes, se determina responsabilidad disciplinaria en el
SO1 PNP Erasmo Edmundo LOBATÓN TORRES, en mérito a los medios
probatorios obrantes en autos y la declaración del administrado, se determina
objetivamente que ha faltado a su centro de labores del Dpto. PNP Servicios Especiales, los
días 10ENE, 11ENE, 12ENE y 13ENE14, CUATRO (04) días consecutivos;
reincorporándose recién a horas 06.00 del 14ENE14, existiendo como descargos
documentos carentes de valor legal y que no justifican el motivo por el cual no concurrió a
laborar los cuatro días consecutivos (…)”; al respecto, debo reiterar que, los PARTES
DE OCURRENCIAS formulados por los Suboficiales que supuestamente
verificaron que NO ME ENCONTRABA EN MI DOMICILIO, NO SE
CONSTITUYEN EN MEDIOS DE PRUEBA IDÓNEOS por sus propias falencias y
por los argumentos expuestos en el Argumento 2. del presente.

5. Con relación a la tipicidad G-34 imputada y


descrita como: “Faltar entre 2 y 5 días consecutivos a su Unidad o no presentarse por
igual plazo al término de sus vacaciones, permisos, comisiones, licencias, sin causa
justificada”, considero que, al momento de decidir la sanción a imponerme no se ha
valorado el requisito esencial de la FALTA DE CAUSA JUSTIFICADA; en mi caso
concreto SI EXISTIÓ UNA CAUSA JUSTIFICADA, como lo fue la cautela y
protección de mi estado de salud, por ser un derecho cautelado en el Artículo 7º de
la Constitución Política del Perú.

4. FUNDAMENTOS DE DERECHO :

1. De los argumentos fácticos y jurídicos


descritos en los Fundamentos de Hecho, sostengo que, la impugnada NO
CUMPLE con el requisito de MOTIVACIÓN contemplado en el Artículo 33º del
Decreto Legislativo Nº 1150 antes descrito, concordante con el Artículo 6º de la
Ley 27444; a mayor abundamiento, invoco a lo resuelto por el Tribunal
Constitucional en la Sentencia Nº STC 0090-2004-AA/TC ( caso JUAN CARLOS
CALLEGARI HERAZO), en cuyo fundamento 31. segundo párrafo dice: “Asimismo, la
motivación debe otorgar seguridad jurídica al administrado y permitir al revisor apreciar la
certeza jurídica de la autoridad que decide el procedimiento; para ello no se debe utilizar las
citas legales abiertas, que sólo hacen referencia a normas en conjunto como reglamentos o
leyes, pero sin concretar qué disposición ampara la argumentación o análisis de la
autoridad, como lo establece el apartado 6.3 del artículo 6º de la norma invocada, que
dispone que "no son admisibles como motivación, la exposición de fórmulas generales o
vacías de fundamentación para el caso concreto o aquellas fórmulas que por su oscuridad,
vaguedad, contradicción o insuficiencia no resulten específicamente esclarecedoras para la
motivación del acto".

2. A mayor abundamiento, considero que en


el presente procedimiento se han prescindido de los Criterios Rectores para la
Imposición de Sanciones contempladas en el Artículo 31º del Decreto Legislativo
Nº 1150 que determina: “Criterios para la imposición de sanciones.-Para determina la
sanción, el superior u órgano disciplinario deberá considerar los siguientes criterios: 1)
Uso del cargo para cometer la infracción; 2) Las circunstancias en que se cometió la
infracción; 3) Las referencias administrativas disciplinarias; 4) La magnitud de los daños
y perjuicios ocasionados; 5) La reparación o resarcimiento oportuno del daño antes de la
sanción; (…) 7) El grado de colaboración para el esclarecimiento de los hechos; y, 8) La
confesión espontánea y sincera”; en mi caso concreto, NO SE HA VALORADO mi
Legajo Personal ni mis antecedentes disciplinarios, en los cuales se aprecia que es
la primera vez que soy sometido a un proceso disciplinario por ante la Oficina de
Disciplina; es decir, NO CUENTO con antecedentes disciplinarios relacionados
con el presente caso; desde el inicio de las investigaciones he colaborado sincera y
abiertamente, no habiendo interpuesto ningún obstáculo; NO HA EXISTIDO
daños ni perjuicios ocasionados.

POR LO EXPUESTO :

A usted, Mi Coronel PNP, respetuosamente


solicito admitir la presente, e invocando a la PLURALIDAD DE INSTANCIAS
contemplada en el Artículo 58º Inciso 2) tercer párrafo del Decreto Legislativo Nº
1150 y, artículo 57º de su Reglamento, elevar el presente juntamente con el
expediente principal, al señor Inspector Regional Sur para su resolución con
arreglo a Ley.

OTROSÍ DIGO: Ofrezco como medios de prueba a mi favor, los mismos del
expediente principal; y, adicionalmente los siguientes:

1. Copia de los Partes de Ocurrencias formulados por el Suboficial Técnico de Primera PNP
Rufo Condori Machaca con fecha 10 de Enero 2014; , Suboficial de Tercera PNP Edwin
Garnica Calloapaza del 11 de Enero 2014, Suboficial de Segunda PNP Edy Gómez Flores del
12 de Enero 2014; y, Suboficial Brigadier PNP Juan Sánchez Valdivia del 13 de Enero 2014.
2. Copia del Informe Médico de fecha 23 de Mayo 2014 expedido por el Policlínico “Espíritu
Santo”, con el que se acredita que adolezco de “DIABETES MELLITUD TIPO II”.
ANEXOS
1.a.- Copia de la Constancia de Identidad Personal Nº 579 por el CIP Nº 31313676.
1.b.- Copia de Documento Nacional de Identidad Nº 29715269.

Arequipa, 23 de Mayo del 2 014.

_____________________________
ERASMO EDMUNDO LOBATÓN TORRES
SO. 1ra. PNP
1. Que, antes de contradecir el fondo de las
cuestiones que han servido de sustento para imponerme la drástica e injusta sanción,
considero pertinente alegar que, toda decisión judicial y/o administrativa debe responder
a la exigencia del principio de motivación, es decir, que exista un razonamiento jurídico
explícito entre los hechos y las leyes que se aplican; en este extremo, el Tribunal
Constitucional ha señalado, en reiterada jurisprudencia, que la necesidad de que las
resoluciones judiciales sean motivadas responde a un principio que informa el ejercicio de
la función jurisdiccional de los justiciables, precisando, en decisión vinculante, que “(...)
En materia penal, el derecho en referencia garantiza que la decisión expresada en el fallo
sea consecuencia de una deducción razonable de los hechos del caso, las pruebas
aportadas y la valoración jurídica de ellas en la resolución de la controversia. En suma,
garantiza que el razonamiento empleado guarde relación y sea proporcionado y
congruente con el problema que al juez penal corresponde resolver (...)”(Fundamento 11 de la
Sentencia recaída en el Expediente Nº 1230-2002-HC/TC – Caso César Tineo Cabrera ); a mayor
abundamiento el máximo intérprete de la Constitución y las leyes, ha sido explícito
respecto del cumplimiento obligatorio del principio constitucional de PRESUNCIÓN DE
INOCENCIA, es así que en la Sentencia de fecha 24 de Noviembre 2004 derivada del
Expediente Nº 2868-2004-AA/TC (caso José Antonio Álvarez Rojas) ha sostenido que: “… un
límite a la potestad sancionatoria del Estado está representado por el principio de
culpabilidad. Desde este punto de vista, la sanción, penal o disciplinaria, solo puede
sustentarse en la comprobación de responsabilidad subjetiva del agente infractor de un
bien jurídico. En ese sentido, no es constitucionalmente aceptable que una persona sea
sancionada por un acto o una omisión de un deber jurídico que no le sea imputable”
asimismo, “El derecho de presunción de inocencia garantiza que toda persona no sea
sancionada si es que no existe prueba plena que, con certeza, acredite su responsabilidad,
administrativa o judicial, de los cargos atribuidos. Evidentemente se lesiona ese derecho a
la presunción de inocencia tanto cuando se sanciona, pese a no existir prueba plena sobre
la responsabilidad del investigado, como cuando se sanciona por actos u omisiones en los
que el investigado no tuvo responsabilidad” (Fundamento 21. Segundo y Octavo párrafos ); y, bajo
el principio de PROPORCIONALIDAD también ha sostenido: “En efecto, como en diversas
oportunidades lo ha recordado este Colegiado, la dimensión sustantiva del debido proceso
administrativo se satisface, no tanto porque la decisión sancionatoria se haya expedido
con respeto de los derechos constitucionales de orden procesal, sino, por lo que al caso
importa resaltar, cuando la sanción impuesta a una persona no se encuentra debidamente
fundamentada, sea irrazonable o excesiva, de cara a las supuestas faltas que se hubieran
podido cometer” (Fundamento 26. Segundo párrafo).
2. Dicho esto, alego que, respecto de la Infracción
administrativa de naturaleza Muy Grave imputada y que se encuentra debidamente
descrita en el Anexo III: Tabla de Infracciones y Sanciones Muy Graves que forman parte
del Decreto Legislativo Nº 1150; en los Considerandos 11. y 12. de la impugnada se realiza
un sustento respecto de los requisitos y presupuestos necesarios para su configuración;
sin embargo, por su magnitud, esta tipicidad previamente debió ser especialmente
analizada, bajo los principios rectores de la potestad sancionadora, especialmente los de
proporcionalidad, razonabilidad y congruencia, toda vez que el Tribunal Constitucional en
la Sentencia recaída en el Expediente Nº 2192-2004-AA-TC. señala que, al momento de
establecer una sanción administrativa, no se debe limitar el análisis “(…) a realizar un
razonamiento mecánico de aplicación de las normas, sino que además se efectúe una
apreciación razonable de los hechos, en relación con quien los hubiese cometido (…)”; a
ello debe adicionarse lo reseñado en la Sentencia derivada del Expediente Nº 1873-2009-
PA/TC. cuando afirma que la disposición de dictar sanciones administrativa, al igual que la
potestad de imponer sanciones penales “(…) derivan del “ius punendi” del Estado (…)”,
por lo tanto, y conforme a este principio, los tipos penales y administrativos genéricos
están prohibidos, y, aunque la administración, a veces se conduzca sobre la base de
estándares deontológicos de conducta, estos son insuficientes por sí solos, pues para
sancionar, la sanción debe sustentarse en análisis concretos, razonables, pormenorizados
y no sobre la base de juicios arbitrarios o totalitarios.

3. Si bien es cierto que, de acuerdo al análisis del


Órgano de Investigación y Decisión, concurrirían los presupuestos configurativos de la
Infracción Muy Grave MG-54, es menester considerar que, el suscrito al momento de la
comisión de los hechos que fueron materia de investigación administrativa, era efectivo
policial en situación de actividad pero desligado de mis funciones, atribuciones y
facultades como funcionario policial POR HABERME ENCONTRADO EN USO DE MI
FRANCO, pero mi condición de policía resulta inevitable por ser un estado inherente e
inseparable de mi persona; por lo que resulta imperativo aseverar que el espíritu del tipo
punitivo administrativo MG-54 “Pertenecer a una organización criminal o cometer delito
flagrante”, fueron establecidos por el legislador para sancionar conductas en las que, un
sujeto infractor, aprovechando precisamente su condición de miembro de la Policía
Nacional del Perú, o utilizando el uniforme o armamento policial, perpetra conductas
que, debidamente investigadas y demostradas, sean calificadas como delito y
consecuentemente objeto de una sentencia condenatoria, máxime que el agravio no
solo es a un individuo, sino a toda la sociedad con desmedro de la Imagen Institucional;
en mi caso concreto, en primer término, NO EXISTE SENTENCIA JUDICIAL
CONDENATORIA por encontrarse el proceso en INVESTIGACIÓN PRELIMINAR por ante la
Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Arequipa; en segundo término, los
hechos así descritos resultan ser totalmente ajenos al servicio policial, por cuanto me
encontraba en uso de mi franco chico, así ha quedado determinado durante el séquito
de las investigaciones disciplinarias ( Considerando 17).

4. Que, tal como lo ha señalado el Tribunal


Constitucional en el Fundamento 4. de la Sentencia recaída Expediente Nº 3943-2006-
PA/TC. “(…) la motivación de las resoluciones judiciales, es una garantía del justiciable,
frente a la arbitrariedad y garantiza que las resoluciones no se encuentren justificadas en
el mero capricho de la aplicación mecánica de la ley, sino en datos objetivos que
proporciona el ordenamiento jurídico y un adecuado razonamiento”; en este sentido, al
momento de emitir la impugnada, el Órgano de Investigación y Decisión, no ha realizado
un análisis desde la perspectiva de dos principios: PROPORCIONALIDAD Y
RAZONABILIDAD, en los que básicamente se debe ponderar la intencionalidad,
reiteración, gravedad y perjuicios causados ( Artículo 31º del D.L.Nº 1150), pues justamente
constituyen principios que enmarcan la prohibición de los excesos no basados en causas
objetivas ni razonadas, lo cual es una evidente arbitrariedad incompatible con el debido
procedimiento, tal como se encuentra sustentado en la Sentencia recaída en el
Expediente Nº 392-96-AA/TC; existiendo al respecto, reiterada jurisprudencia del Tribunal
Constitucional que ha establecido que la facultad de imponer sanciones de orden
administrativo, no supone en lo absoluto que ella sea una potestad discrecional que los
órganos administrativos puedan ejercer sin más límites que su propio criterio, sino que
necesariamente deben adecuarse a los principios de razonabilidad y proporcionalidad, lo
que exige una coherente y razonable proporción entre la denominada falta administrativa
y la sanción prevista; tal es así que el Tribunal Constitucional mediante Sentencia recaída
en el Expediente Nº 1003-1998-AA/TC. en su Fundamento 6. señala: “La aplicación de una
sanción administrativa constituye la manifestación del ejercicio de la potestad
sancionatoria de la Administración. Como toda potestad, no obstante, en el contexto de
un Estado de Derecho (artículo 3º, Constitución), está condicionada, en cuanto a su propia
validez, al respeto de la Constitución, los principios constitucionales y, en particular, de la
observancia de los derechos fundamentales. Al respecto, debe resaltarse la
vinculatoriedad de la Administración en la prosecución de procedimientos administrativos
disciplinarios, al irrestricto respeto del derecho al debido proceso y, en consecuencia, de
los derechos fundamentales procesales y de los principios constitucionales (v.gr. legalidad,
razonabilidad, proporcionalidad, interdicción de la arbitrariedad) que lo conforman”.
5. Ahora bien, la materia que configura el tipo
infractorio imputado en mi contra, lo constituye el haber supuestamente conducido mi
vehículo particular en estado de ebriedad el día 12 de Septiembre 2014, por lo que se me
ha impuesto la Infracción Muy Grave MG-54 “Pertenecer a una organización criminal o
cometer delito flagrante”, por lo que aquí, en estricto rigor para aplicar la potestad sancionadora,
se debió verificar criterios sustanciales de graduación contemplados en el Artículo 31º del Decreto
Legislativo Nº 1150 que regula el Régimen Disciplinario de la Policía Nacional del Perú: 1) Uso del
cargo para cometer la infracción.- El día de los hechos me encontraba en uso de mi franco y NO
OSTENTABA ningún cargo como efectivo policial; 2) Las circunstancias en que se cometió la
infracción.- En este sentido, como ya se argumentó en mi alegato de Defensa de fecha 05 de
Noviembre 2014, quien conducía el vehículo de mi propiedad fue mi amigo Willy Francisco Nina
Quispe quien no fue intervenido policialmente; 3) Las referencias administrativas
disciplinarias.- En mi Legajo Personal se evidencia que NO REGISTRO antecedente administrativo
disciplinarios por infracciones de naturaleza Graves y/o Muy Graves; 4) La magnitud de los
daños y perjuicios ocasionados .- En este extremo, debo alegar que NO EXISTE PERJUCIO
ocasionado, toda vez que judicialmente NO SE HA DETERMINADO responsabilidad penal alguna por
encontrarse en INVESTIGACIÓN PRELIMINAR por ante la Tercera Fiscalía Provincial Penal
Corporativa de Arequipa (Caso Nº 503-2014-4309-0); 5) La reparación o resarcimiento
oportuno del daño antes de la sanción.- Como ya se argumentó anteriormente, AÚN
NO EXISTE DAÑO OCASIONADO establecido judicialmente; 6) Mayor responsabilidad del
efectivo más antiguo en la comisión de la infracción.- Como se desprende de autos, el suscrito fue
el único efectivo policial que participó en los supuestos hechos atribuidos; 7) El grado de
colaboración para el esclarecimiento de los hechos.- El suscrito se ha sometido a todo el
proceso de investigación, tanto policial como administrativo dentro del principio de la BUENA FÉ
PROCESAL, no habiendo interpuesto obstáculo alguno y he concurrido a las diligencias señaladas
por el Órgano de Investigación y Decisión; requisitos que NO HAN SIDO TOMADOS EN CUENTA
al momento de mejor resolver.

6. Respecto del fondo de la impugnada, el criterio


rector del administrador sancionador está orientado a la vulneración de un BIEN
JURÍDICO protegido de la Policía Nacional del Perú: LA IMAGEN INSTITUCIONAL (MG-54);
en este entender, es pertinente acotar que, el Artículo 9º del D.L. Nº 1150 señala: “La
Imagen Institucional es la representación ante la opinión pública del accionar del
personal de la Policía Nacional del Perú. Constituye la base principal de la relación de
confianza y legitimidad que debe imperar entre la institución, su personal y la sociedad en
general” (cursivas, énfasis y subrayados míos); en este extremo, es de verse que este bien
jurídico está orientados al cumplimiento ineludible de las COMPETENCIAS, FUNCIONES y
ATRIBUCIONES contempladas en el Título I Artículos 9º, 10º y 11º del Decreto Legislativo
Nº 1148 Ley de la Policía Nacional del Perú; en mi caso en concreto, debo reiterar que los
hechos materia de investigación y posterior sanción se produjeron cuando me encontraba
en uso de mi FRANCO completamente desligado de competencias, funciones y
atribuciones como efectivo de la Policía Nacional del Perú, por tanto, NO ME
ENCONTRABA UNIFORMADO NI REPRESENTABA a la Policía Nacional del Perú, por ende,
no ejercitaba ninguna LEGITIMIDAD PARA OBRAR como miembro policial.

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