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MODALIDAD

VIRTUAL

Curso de
Especialización en

ARBITRAJE EN
CONTRATACIONES
CON EL ESTADO
MÓDULO 7

1
Módulo LAUDO ARBITRAL: CARACTERÍSTICAS,
7 EJECUCIÓN Y ANULACIÓN

Preguntas motivadoras

1. ¿Qué debe contener un laudo?


2. ¿Más páginas, mejor laudo?
3. ¿Es el defecto de motivación una causal para
anular laudos arbitrales?

Introducción
En las sesiones virtuales del presente módulo del

curso de Especialización en Arbitraje en

Contrataciones con el Estado se abordará el

capítulo sobre “el laudo”, el cual incluye aspectos

como sus elementos esenciales, características y

estructura.

A continuación, presentamos un texto que

aborda de manera muy sucinta algunos aspectos

esenciales para este módulo.

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Ideas clave
El laudo produce efectos de cosa juzgada.

Todo laudo es inapelable y de obligatorio


cumplimiento. La ley establece que no se puede
revisar el fondo de lo decidido por el tribunal arbitral.

El laudo deberá ser motivado, salvo que el pacto o la


ley establezcan algo distinto.

7.1 ¿Qué debe contener un laudo?

El artículo 56 de la Ley de Arbitraje establece el contenido que debe

tener todo laudo.

El citado artículo dispone que, como regla general, el laudo deberá ser

motivado. No obstante, también admite la posibilidad de que las

partes estipulen que el laudo no sea motivado. Es decir, en este

último supuesto, bastará que el tribunal arbitral decida la

controversia sin necesidad de expresar las razones que sustentan

dicha decisión, pero solamente en el supuesto que las propias partes

hayan pactado que el laudo no sea motivado. Como sostiene Alfredo

Bullard “Con ello la norma rompe la idea, inspirada en una

aproximación procesalista, que los laudos como las sentencias,

deben necesariamente ser motivado, y que la no motivación es una

violación al derecho de defensa. En el arbitraje ello no es cierto pues,

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al admitirse que el laudo puede no estar motivado, se acepta que la

omisión de la motivación no necesariamente viola los derechos de

las partes y que, ocurrida dicha renuncia, no hay afectación al

derecho de defensa” (BULLARD, 2011, PP. 613- 614).

Sin embargo, en el ámbito de la normativa de contratación pública, el

laudo debe ser motivado y no cabe pacto en contrario conforme al

numeral 238.1 del artículo 238 del Reglamento de la Ley de

Contrataciones del Estado, aprobado por D.S. N° 348-2018-EF.

Asimismo, el laudo debe contener la fecha de su emisión y el lugar

del arbitraje. La fecha permite verificar si el laudo se emitió dentro del

plazo para laudar. El no cumplimiento del plazo para emitir el laudo

es causal de anulación, según lo establece el literal g del numeral 1

del artículo 63 de la Ley de Arbitraje.

Finalmente, el tribunal arbitral debe pronunciarse en el laudo sobre

los costos del arbitraje. Si bien las partes suelen plantear los costos

del arbitraje como integrante de sus respectivas pretensiones, por

disposición legal, el Tribunal Arbitral debe pronunciarse sobre la

determinación y distribución de los costos del arbitraje, aunque las

partes hayan omitido solicitarlo.

7.2 ¿Más páginas, mejor laudo?

La normativa de arbitraje no establece un número mínimo ni máximo


de páginas que debe contener un laudo. No obstante, como regla

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general, en el inciso 1 artículo 56 de la Ley de Arbitraje, si establece
que el laudo debe ser motivado, salvo que las partes hayan pactado
que el laudo no sea motivado.

Respecto de la motivación, Mariela Guerinoni, sostiene que “el


administrador de justicia tendrá la obligación de justificar su
decisión conforme a los hechos de cada caso, al derecho que sea
aplicable y a la valoración de las pruebas ofrecidas y admitidas”.
(GUERINONI,2016, PP 118)

Como regla general, no basta con decidir la controversia, no basta con


expresar quién tiene derecho a aquello que se reclama, sino que, el
laudo deberá contener las razones que justifican lo decidido, es decir,
las razones o motivos de la decisión del tribunal arbitral o del árbitro
único, según corresponda.

Un laudo no resulta mejor o peor por la cantidad de hojas que tenga.


Un buen laudo será aquel en el que lo decidido sea congruente con
las pretensiones planteadas por las partes y no exista duda respecto
de lo decidido. Además, según la regla general, cuando el laudo tenga
que ser motivado, deberá establecer las razones, criterios o
justificaciones que determinaron lo decidido por el tribunal arbitral o
el árbitro único.

¿Es el defecto de motivación una causal para anular


laudos arbitrales?

Cuando las partes acuerdan que el laudo no sea motivado, resulta

evidente que no cabe la posibilidad que el Poder Judicial anule el

laudo por falta de motivación.

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No obstante, no existe una posición unívoca en las resoluciones

judiciales o en la doctrina nacional, acerca de si cabe anular el laudo

por defectos de motivación, en aquellos supuestos en los que, como

consecuencia de lo pactado por las partes o en aplicación de lo

dispuesto en la Ley de Arbitraje, el tribunal arbitral o árbitro único

debe motivar el laudo.

Aunque es creciente el número de casos en los que los tribunales

judiciales han realizado una revisión del fondo del laudo, bajo la

excusa de la “indebida motivación”, debemos recordar que

pronunciarse sobre el fondo de la controversia o calificar los criterios,

motivaciones o interpretaciones expuestas por los árbitros en el

laudo, se encuentra prohibido expresamente por el artículo 62 de la

Ley de Arbitraje. Es decir, los tribunales arbitrales que revisan o se

pronuncian sobre estos aspectos están contraviniendo lo establecido

expresamente por la ley.

En el arbitraje no existe posibilidad de apelar. Cuando lo jueces

revisan o se pronuncian respecto de aspectos de fondo están

actuando de manera contraria a lo expresado en la ley y debilitan la

institución del arbitraje. Como sostiene Ricardo Rodríguez:

“El recurso de anulación no tiene por objeto revisar el contenido del


fondo de la decisión, sino de modo exclusivo, revisar, verificar, que el
Tribunal Arbitral no ha incurrido en algún comportamiento al
momento de la decisión, que constituya afectación a ese mínimo que
se considera. Es por ello que el mismo numeral citado puntualiza que

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la decisión jurisdiccional se limita a declarar la validez o nulidad del
laudo, y por ende, está prohibido bajo responsabilidad, pronunciarse
sobre el fondo de la controversia o sobre el contenido de la decisión
o calificar los criterios, motivaciones o interpretaciones expuestas
por el Tribunal arbitral (…)”. (RODRIGUEZ, 2015, P. 54)

En la actualidad, lejos de fortalecer el arbitraje en nuestro país,

algunas de las decisiones de la Corte de Lima han anulado laudos por

defectos de motivación, lo cual contraviene el artículo 62 de la Ley de

Arbitraje que prohíbe expresamente, bajo responsabilidad,

pronunciarse sobre el fondo de la controversia o calificar los criterios,

motivaciones o interpretaciones expuestas por los árbitros en el

laudo.

En esa medida, el Decreto Supremo N° 162-2021-EF incorporó el

numeral 239.3 al artículo 239 del Reglamento de la Ley de

Contrataciones del Estado, a fin de precisar lo siguiente:

“239.3. Conforme a lo dispuesto en el artículo 62 del Decreto


Legislativo N° 1071, Decreto Legislativo que norma el arbitraje,
el recurso se resuelve declarando la validez o la nulidad del
laudo. Está prohibido bajo responsabilidad, pronunciarse sobre
el fondo de la controversia o sobre el contenido de la decisión o
calificar los criterios, motivaciones o interpretaciones
expuestas por el Árbitro Único o por el Tribunal Arbitral.”

7
Conclusiones

Un laudo con mayor número de páginas no

garantiza un mejor laudo. Lo importante es que el

laudo sea claro y congruente en la parte decisoria

y, cuando el laudo deba ser motivado, debe

contener las justificaciones o razones que fueron

consideradas por los integrantes del tribunal

arbitral para concluir lo decidido.

Pese a que la norma prohíbe a los jueces revisar o

pronunciarse respecto de los motivos o el fondo de

lo decidido, existen algunas decisiones de la Corte

de Lima que anulan laudos por defecto de

motivación, supuesto no regulado en la Ley de

Arbitraje.

Sesión virtual

Lo invitamos a que revise los recursos virtuales de


este módulo, los cuales se encuentran disponibles
en la plataforma educativa Paideia PUCP.

Bibliografía

DWORKIN, Ronald
1984 Los derechos en serio. Barcelona: Ariel.

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BULLARD, Alfredo.
2016 Litigio Arbitral. El arbitraje desde otra perspectiva.
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BULLARD, Alfredo.
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2018 La Ley de Arbitraje. Análisis y comentarios a diez
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COLOMER HERNÁNDEZ, Ignacio.


2003 La motivación de las Sentencias: sus exigencias
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