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MAESTRÍA EN

TRUJILLO
EDUCACIÓN CON
BENEDICTO
XVIEN
MENCIÓN
GESTIÓN Y
ACREDITACIÓN
EDUCATIVA

Política
educativa y
Certificación MÓDULO 01
de la Calidad S1
Dra. Ana
María
Macarlupú 2023

Asmat

MÓDULO 01
Espacio
Unidad I
para el
texto
POLÍTICAS EDUCATIVAS
1. CONCEPCIONES
Ante la pregunta qué son las políticas educativas, se tiene una gran variedad de
respuestas depende de las diferentes concepciones de la disciplina que se
aborde.
a. “Política educativa o política educacional es un término que alude a la acció n
del gobierno de un país en materia de educació n y enseñ anza, como a
aquella rama de la ciencia política que se ocupa de estudiar esa acció n”
(García Garrido, 1996:478)
b. Son medidas que adopta una autoridad de la sociedad para la educació n de
sus miembros, con el propó sito de hacer avanzar a su pueblo.
c. Es la acció n que se ejerce en el á mbito de la sociedad política integrada por
el estado y la sociedad civil , para la bú squeda de la mejor sociedad.
d. Es un conjunto de medidas que pretenden crear una base legal para la
realizació n de los objetivos de la educació n.
e. Conjunto de principios, objetivos y fines que orientan la acció n educativa a
nivel estatal y también a nivel de instituciones privadas.
f. Es un acció n organizada con el propó sito de desarrollar la educació n de un
pueblo, calculando las posibilidades y virtualidades de la comunidad y sus
relaciones con el mundo.
La política educativa trata de las directrices que señ alan los Gobiernos para
organizar la educació n de un país.

Las políticas educativas se enmarcan dentro de las políticas pú blicas. Este


ú ltimo término se presta a distintas formulaciones; está s tienen en comú n que
son acciones y medidas dirigidas por el Estado, en distintas á reas de su
competencia con la finalidad de atender los intereses y derechos de la
població n. En el caso de las políticas educativas, se trata de atender sus
derechos; a desarrollar capacidades humanas a través de una educació n que se
inscribe dentro de un proyecto social, político e ideoló gico así como de
garantizar la atenció n del servicio educativo.

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La política educativa debe entenderse como el conjunto de orientaciones
prioritarias y lineamientos o directrices que da el gobierno a través de sus
instancias respectivas para normar y promover el desarrollo humano del país.
La política educativa constituye una norma o pauta de cará cter general , que sirve para
guiar el pensamiento y la acció n individual y colectiva de los encargados de su
ejecució n, sin llegar a ser por sí misma una decisió n.
La política es el factor que condiciona la conducta de quien o quienes toman la decisió n
con la intenció n de concentrar los esfuerzos y recursos institucionales en una direcció n
determinada dando lugar a la estrategia , que es la categoría conceptual y operativa,
consecuencia de la política.

POLÍTICA
DECISIÓN ESTRATEGIA
EDUCATIVA

En un sentido má s amplio la política educativa se explicita en las normas constitucionales


y legales que el gobierno pone en vigencia o aplica en el sector educativo. Es necesario la
existencia de un proyecto definido y coherente con el Estado en el á mbito educativo que
comprenda tanto los fines a largo plazo como los objetivos concretos a corto y mediano
plazo, y, por lo tanto el consecuente conjunto de medios legales financieros, organizativos,
humanos, de infraestructura y equipamiento que posibiliten el logro de los fines y
objetivos en ese sentido debe asumirse que las políticas educativas no solo son a nivel
nacional sino también intitucional.

2. FUNDAMENTOS DE LA POLÍTICA EDUCATIVA


Cualquier política se concibe tomando en cuenta tres orientaciones bá sicas dentro
de otras y que se podrían formular en las tres interrogantes: El para qué, el qué y
el có mo. En este sentido las fuentes filosó ficas que sustentas las inquietudes se
pueden inscribir en:
El humanismo El para qué
El Racionalismo El qué
El constructivismo El Có mo

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El Humanismo, el ideal del ser humano que persigue descubrir el humanismo en
un principio fundamental e imprescindible para la política educativa. L a
concepció n de ser humano es el fin hacia el cual tenderá n los esfuerzos y las
acciones educativas que se deriven de una política. El humanismo ilumina el
propó sito final de la educació n, por lo tanto trata de dar respuesta a la permanente
pregunta ¿para qué ? de cualquier política educativa.
El Racionalismo, la visió n del Racionalismo en la educació n, a la que se adhiere esta
propuesta de fundamentos de la política educativa, procura que todos los
participantes, mediante procesos activos, desarrollen el razonamiento y la facultad
de relacionar las ideas de manera consciente, coherente e intencionalmente,
obtengan inferencias, descubran las relaciones entre ideas y puedan ordenar
conceptos de acuerdo a los cá nones que la ló gica exige.
La educació n a lo largo de la historia ha tenido sus bases en fuentes filosó ficas base
de las génesis de la estructura de las disciplinas científicas y sociales, por lo que no
es posible desconocer el impacto de la filosofía en la política educativa de estos
tiempos, las mismas que como se sabe se sustenta en Descartes con sus énfasis en
dar a la razó n preeminencia sobre los sentidos en el proceso del ser humano de la
aprehensió n del conocimiento, de su dominio en las disciplinas del conocimiento y
en utilizar un método riguroso.
El constructivismo, concebido inicialmente como una epistemología, intenta
explicar la génesis, el origen del conocimiento y la forma en que el sujeto transita
de un estado de menor desarrollo a otro mayor. Propone que el conocimiento no se
trasmite, sino que el sujeto debe construirlo interiormente. Para la construcció n
del conocimiento intervienen muchos mecanismos, especialmente la acció n del
sujeto sobre el medio y la respuesta de este medio a la acció n del sujeto, es decir al
establecimiento de un diá logo entre el individuo y el medio para lo cual existen de
construcció n en el interior del sujeto que acomodan el conocimiento a su
pensamiento.

3. NATURALEZA Y FINES DE LA POLITICA EDUCATIVA

Por: Dr. Carlos Augusto Echaiz Rodas.

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Definir con precisió n lo que es una política educativa es tarea compleja y que en
muchos casos genera discrepancias entre los educadores, porque no diferenciamos
con claridad los términos: política y educació n. Cuando nos referimos a la política
inmediatamente pensamos en aspectos relacionados a la democracia, al gobierno o
en otros casos, pesamos en las ideologías de los partidos políticos y cuando nos
referimos a la educació n lo vemos como una actividad que se realiza en la escuela
para formar a los hombre, a los ciudadanos, pero no vemos esta actividad
estrechamente vinculada al Estado, a pesar de que ésta actividad es fundamental
en toda sociedad y es tarea bá sicamente del Estado; entonces hablamos de política
estatal, en otros casos, de política local, política interior, política econó mica,
política exterior o política educativa, vale decir que la acció n del gobierno es
mú ltiple y no solamente tiene que ver con la política educativa de un país, sino con
todos los aspectos de la sociedad.
Resulta muy importante, cuando hablamos de política educativa, tener claridad de
su concepció n, de la naturaleza de la misma, de sus fines y objetivos. Consideramos
que es punto de partida de todo gobernante, de todo grupo político que pretende
llegar al poder, fijar las políticas educativas que desarrollará en su gestió n para
lograr los cambios estructurales que contribuyan a las mejores condiciones de
vida, desde luego, al desarrollo econó mico, social, cultural, científico del país.
Conocer la naturaleza y los fines de la política educativa va a permitir direccionar
la acció n del gobierno hacia el logro de objetivos nacionales, de lo contrario se
puede realizar muchas acciones pero no se logrará n los fines prioritarios.
Nadie, ningú n peruano, por má s bajo nivel cultural que tenga, desconoce o niega
que la educació n sea el pilar de desarrollo de los pueblos, que la educació n sea lo
má s importante y que los Estados a través de sus gobernantes deban atender
prioritariamente este derecho. Todo padre o madre de familia no escatima
esfuerzo alguno por dar a los hijos una educació n preferente, de calidad, que le
permita lograr su plena realizació n en el futuro, pero esta aspiració n a veces es
má s distante y muchas veces se queda solamente en intenciones y en aspiraciones
frustradas; ¿a qué se debe ello?, podemos decir que, dentro de los principales
factores está la improvisació n de muchas gobernantes que llegan al poder,
desconocen la real importancia de la educació n, está n muy lejos de identificar la
naturaleza, los fines y los objetivos de la educació n, entonces, este derecho social y

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fundamental llega a los usuarios de la educació n sin las características que exige
una verdadera política educativa. Los responsables de dar este servicio tienen
necesariamente que saber que la política educativa como ciencia social tiene fines,
objetivos y que estos fines y objetivos deben ser coherentes a los intereses y
necesidades de la població n y por lo tanto, tener presente que la multiplicidad de
fines presenta diferentes ramificaciones para atender la demanda educativa.
Educació n debe ser el sector donde los gobernantes deben tener mucho cuidado
que la conducció n de este sector esté en manos de expertos en el tema, de
personas que realmente aspiren a lograr un país pró spero, una sociedad con
ciudadanos innovadores, que contribuyan a su desarrollo, a vivir en paz y en
armonía, que su actuació n se vea caracterizada por la prá ctica constante de
principios éticos y morales y que el respeto sea una constante en todos los actos de
sus vidas. La política educativa debe admitirse como el conjunto de medidas,
conjunto de lineamientos que debidamente diseñ ados deben constituir la acció n
del gobierno como tarea fundamental, obligatoria y prioritaria en aras de construir
una sociedad sin brechas sociales. De allí, la responsabilidad, primero del Estado,
secundado por la Sociedad civil en general para contribuir a una educació n de
calidad, donde cada vez exista menor pobreza. Menos desigualdad.
Las políticas educativas por lo tanto son fundamentales, podríamos decir que de
ellas depende el éxito o el fracaso de los gobernantes. Un gobernante que priorice
la educació n como uno de los principales actos de gobierno, con seguridad que no
solamente haría historia como uno de los mejores gobernantes, sino que
contribuiría a formar una sociedad pró spera, activa, diná mica, transformadora,
que harían de nuestra patria un país desarrollado, un país culto, a la altura de los
países desarrollados. Los gobernantes, dentro de sus ofertas electorales no deben
hacer propuestas que má s tarde se conviertan en frustraciones. Al elaborar los
planes de gobierno deberían diseñ ar políticas reales, objetivas y concretas, que
favorezcan a los actores, con acciones sostenibles a mediano y largo plazo.
Las políticas educativas deben ser diseñ adas, implementadas, desarrolladas,
evaluadas por especialistas y técnicos que nada tengan que ver con la política
partidarista nacional o local; por lo tanto las personas a quienes se encargue la
tarea de diseñ ar las políticas educativas de un pró ximo gobierno, deberían ser
profesionales de la especialidad, de reconocida trayectoria que no persigan

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intereses personales o de grupo, que su ú nico interés sea el desarrollo sostenido
del Perú , de lo contrario las políticas educativas no alcanzan la característica de
acciones que permitan la solució n de los grandes problemas de la educació n
peruana y por ende el país . La relació n que debe existir entre política y educació n
debe ser estrecha, no se puede ver a la educació n como una acció n de poca
trascendencia y que por lo tanto debe postergarse. La Constitució n política del
Estado peruano señ ala que la educació n es un derecho social y por lo tanto es
deber del Estado priorizar su atenció n. Las políticas educativas tienen que
adoptarse en funció n a las necesidades de la població n, con líneas consistentes, con
una normatividad precisa, teniendo en cuenta que el Perú es un país con una
població n muy heterogénea, donde los usos y costumbres, las formas de vida, las
características geográ ficas, los medios de comunicació n, la diversidad climá tica,
exigen políticas educativas coherentes a dichas características; por lo que tiene que
diferenciarse y dimensionarse las políticas educativas a nivel nacional, a nivel
regional, a nivel local e inclusive a nivel institucional. Para la efectividad de las
mismas, ellas tienen que articularse siempre teniendo como eje central las políticas
educativas nacionales y al Ministerio de Educació n, como su ente rector. Las
políticas educativas, por su naturaleza, por sus fines y por sus objetivos deben
diferenciarse en cuanto a su diseñ o, a su implementació n y a su ejecució n. La
complejidad de los problemas sociales en muchas comunidades seguramente,
exige políticas educativas, en algunos casos, a corto plazo. De acuerdo a su
naturaleza, otras, a mediano plazo y las de mayor envergadura tienen que
proyectarse como políticas educativas a largo plazo. Los fines de las políticas
educativas en la població n urbana no son igual a las políticas educativas de las
zonas rurales. No es correcto hablar de políticas educativas de gobierno, sino de
políticas educativas de Estado.
Las políticas educativas de Estado deben contribuir a la solució n de la
problemá tica educativa del país, dando prioridad a las de mayor urgencia. No debe
influir para nada los aspectos políticos, partidaristas o de oportunismo político, no
es correcto construir o aprobar el funcionamiento de una escuela a 50 metros de
distancia de otra escuela ya funcionando, cando existen comunidades con una gran
cantidad de alumnos en edad escolar que para poder realizar sus estudios tienen
que desplazarse a grandes distancias, muchas veces por caminos de herradura,

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soportando las inclemencias del tiempo. Al diseñ ar las políticas educativas resulta
importante tener en cuenta los indicadores, evaluar la relació n causa efecto, hacer
diagnó sticos para lograr verdaderos cambios en la diná mica del desarrollo, la
planificació n, implementació n y ejecució n son etapas que aseguran el éxito de toda
política educativa consistente, porque va a permitir lograr resultados esperados,
de lo contrario se puede caer en la improvisació n y lo má s delicado, se puede llegar
a la inversió n cuantiosa de recursos econó micos sin los resultados esperados.
Finalmente, es necesario señ alar que el diseñ o de una buena política educativa
exige conocer la historia de la educació n, hecho importante, para no repetir los
errores que cometieron anteriores gobernantes, para perfeccionar o rediseñ ar
aquellas políticas que así lo ameriten y formular aquellas que sean necesarias de
acuerdo a la relació n espacio temporal en que nos encontremos.

ACTIVIDAD 1:
En equipos de trabajo, luego de dar lectura a la Naturaleza y fines de la política
educativa, responden las preguntas planteadas elaborando un informe escrito.
1. ¿Por qué la educació n constituye el pilar del desarrollo de un pueblo?
2. Establezca diferencias entre políticas pú blicas y políticas educativas.
3. ¿Por qué las políticas deben responder a las necesidades y aspiraciones
sociales?
4. Las políticas educativas de Estado son las mismas que las políticas
educativas de gobierno. Argumente su respuesta.
5. En los ú ltimos diez añ os, las políticas educativas en el Perú han logrado
satisfacer las necesidades y expectativas de la població n, ¿por qué?

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

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IYANGA, A. Política educativa: naturaleza, historia, dimensiones y componentes
actuales
Recuperado de: https://books.google.com.pe/books?
id=ykucEGFHINoC&pg=PA112&dq=Concepciones+de+la+pol
%C3%ADtica+educativa&hl=es&sa=X&ved=2ahUKEwiG9ZqM1s_6AhX3rJUCHeY4DLUQ6AF6BA
gQEAI#v=onepage&q=Concepciones%20de%20la%20pol%C3%ADtica%20educativa&f=false

ECHAIZ, C. (2019) Naturaleza y fines de las políticas educativas.


Recuperado de:
http://www.usmp.edu.pe/iced/carpeta-2019-1/pdfs/materiales/de/5/diseno-aplicacion-
evaluacion-politicas-educativas.pdf

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