Nos comunicamos en atención a la reunión mantenida los ultimos dias de mayo a fin de dejar constancia de lo que allí hemos manifestado: En primer lugar, señalar que como familia, y en especial Amada de 5 años de edad, nos encontramos transitando la adaptación al nuevo entorno de vida, dado que nos mudamos a esta localidad hace tan solo seis meses. Es así que consideramos de máxima importancia acompañar a nuestra hija en sus necesidades, dedicando la atención y los tiempos que resulten necesarios a fin de lograr su más pleno desarrollo. En este punto, la ausencia de un periodo de adaptación a la institución ha resultado de gran complejidad, sin tener oportunidad de desarrollar un proceso paulatino y progresivo de adaptación donde fuera posible acompañar sus propios procesos y tiempos, lo que ha reforzado la necesidad de continuar con la educación de Amada en el seno familiar. Queremos aclarar que como padres, siendo agentes naturales, primarios y principales responsables de la educación de Amada, comprendemos al derecho a la educación como un derecho que contempla la educación integral, para desarrollar y fortalecer la formación integral a lo largo de toda la vida y promover en nuestra pequeña hija la capacidad de definir su proyecto de vida; entendemos que su derecho a la educación incluye su derecho al desarrollo integral, armonioso y permanente, y asimismo dentro del entramado de derechos que tiene nuestra hija Amada, como el derecho al juego, a la salud, al trato digno entre muchos otros. Es así que si bien este establecimiento ofrece una forma de garantizar el ejercicio de este derecho a la educación, como familia asumimos la responsabilidad de brindar a Amada una educación integral, que contemple y equilibre el ejercicio de todos sus derechos, considerando que Amada tiene derecho a que se respete su integridad y dignidad personal y a recibir una enseñanza que considere y valore sus intereses, ritmos y posibilidades de aprendizaje. Asimismo, debemos mencionar nuestra preocupación en torno la oferta escolar existente, donde la jornada propuesta para primaria se extiende a ocho horas diarias, considerando que ello vulnera los derechos de nuestra hija a gozar de tiempo libre, tiempo para su vida familiar y al juego, entendiendo que el juego tiene que ver con crecer asi como tambien forma parte del aprendizaje de la vida. Por todo ello, es que hemos optado por asegurar su educación y decidimos que Amada asista en este primer periodo a espacios de taller de arte , de patin artistico de ingles y espacios de juego y vinculación con otras infancias y familias que favorezcan el pleno ejercicio de la totalidad de los derechos que le son reconocidos y continuar garantizando su acceso a la educación integral en conjunto con dichos espacio, es decir que su educación es llevada adelante tanto en el seno familiar como en comunidad con pares, socializando y compartiendo en dichos espacios en entornos adecuado y conscientes, por otro lado contamos con la guia y acompañamiento de una maestra particular que es personal idoneo recibiendo evaluaciones de forma personalizada respecto de su desarrollo y los avances de sus aprendizajes, propiciando espacios de juego dentro del desarrollo de las planificaciones diarias y ofreciendo opciones de calidad nutricional para la alimentación de la niña. Es muy importante para nosotros, como principales responsables de la salud y la educación de Amada dar cumplimiento a las pautas que la OMS promueve en torno a la alimentación. Es así que en el seno familiar llevamos una alimentación equilibrada donde se evitan los alimentos perjudiciales, por ello buscamos un espacios que acompañen la educación de Amada contemplando y promoviendo la adquisición de alimentos coherentes con los principios básicos de la alimentación saludable establecidos en las recomendaciones de la OMS, a saber: restringir la ingesta de sodio y procurar que la sal de consumo esté yodada; limitar el consumo de azúcares lib