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Instituto Técnico Profesional

“FACULTAD DE SEGURIDAD MINERA E INDUSTRIAL"

“AÑO DE LA UNIDAD, LA PAZ Y EL DESARROLLO”

CURSO: ANALISIS DE RIESGOS DISERGONOMICO

DOCENTE: Jim Benavente

ALUMNO: Álvarez Jara George Antony

NRC: 00000

FACULTAD: Seguridad Minera e Industrial

AREQUIPA-PERÚ
2023
LA ERGONOMÍA EN EL SECTOR DE LA
CONSTRUCCIÓN
Resumen.

Los riesgos laborales derivados de los aspectos ergonómicos en la construcción no han sido

abordados, hasta la fecha, con la debida intensidad. A pesar de que los daños a la salud causados

por los mismos presentan uno de los mayores índices de bajas laborales registrados como

accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, según desvelan las estadísticas oficiales

sobre esta materia elaboradas por la Administración. En concreto, en España, más del 30% de los

accidentes con baja ocurridos en el centro de trabajo son debidos a los sobreesfuerzos, y más del

75% de las enfermedades profesionales se notifican como trastornos musculoesqueléticos.

Igualmente, de acuerdo con las cifras difundidas por Eurostat, extraídas para el conjunto de la

Unión Europea, en la construcción se producen 3.160 problemas de esta tipología, frente a 2.650

por cada 100.000 trabajadores para el conjunto de los sectores productivos.


LA ERGONOMÍA:

La Ergonomía es un conjunto de técnicas y conocimientos que trata de adaptar los productos, las

tareas, las herramientas, los espacios y el entorno en general a las necesidades de las personas.

A su vez estudia las reacciones, capacidades y habilidades de los trabajadores y trabajadoras,

con la finalidad de conseguir condiciones óptimas de confort y eficacia productiva.

Tiene como objetivo mejorar la eficiencia, la seguridad y el bienestar de los trabajadores; estas

mejoras ergonómicas reducen las demandas físicas del trabajo dando como resultado menos

lesiones o dolencias.

¿Por qué es importante la Ergonomía en la Construcción?

En los últimos años, los problemas asociados a una ergonomía inadecuada en el campo de

la construcción, están adquiriendo un notable crecimiento, debido a las elevadas cifras de

trabajadores que tienen molestias y trastornos musculo esquelético, siendo el sobreesfuerzo físico

una de las principales causas de accidente.

Muchos de los trabajos que se desempeñan en el sector construcción requieren adoptar posturas

penosas y fatigantes (arrodillados, en cuclillas y agachados, así como levantar o mover cargas

pesadas, realizar movimientos repetitivos de manos, brazos y movimientos general), que al

realizar tareas exigen esfuerzos importantes.


Evaluación de la carga física de trabajo:

Las exigencias del trabajo no deben ser superiores a la capacidad del trabajador. Las tareas deben

ser programadas de forma que le permitan realizar los objetivos con la utilización de sus

capacidades, es indispensable entonces conocer su capacidad energética y cuánto un

determinado trabajo demanda de esa capacidad. Exceder esta capacidad puede ocasionar

sobrecargas (o sufrimiento) al trabajador, que pueden resultar en accidentes y baja productividad.

El foco del presente trabajo consistió en medir el costo fisiológico de la tarea por medio de los

latidos cardíacos. La evaluación indirecta de la carga de trabajo basada en la FC registrada

continuamente revela un cuadro general del nivel de actividad durante toda la jornada de trabajo,

y es posible identificar las actividades asociadas a determinados valores de FC. Esto último

constituye un aspecto importante del presente estudio, pues permite identificar exactamente

cuáles son las actividades que el obrero ejecuta y que le incrementan su FC, o sea, las actividades

más pesadas.

Factores de riesgo ergonómico en la construcción

• Posturas Forzadas:

Es habitual adoptar posturas forzadas como flexiones del tronco, posturas de rodillas o en cuclillas,

extensiones y rotaciones. Estas posturas son consecuencias de las tareas que se realizan en
campo, en donde se manejan herramientas y materiales pesados o materiales almacenados que

se encuentran a ras del suelo o en alturas por encima de los hombros.

Para reducir el esfuerzo de la espalda y la fatiga de las piernas, se recomienda, siempre que el

trabajo nos lo permita, trabajar sentado o apoyado, utilizando un banco estable el mismo que

soporte el peso del trabajador.

• Máquinas y herramientas:

La aparición de lesiones musculares, se debe al uso constante de máquinas, herramientas

manuales y portátiles, las mismas que están relacionadas con actividades de atornillar, martillar,

cortar o realizar cargas pesadas.

Tanto el esfuerzo físico, el peso de las herramientas (martillos, taladros, afiladoras) y las

vibraciones que estas generan durante las jornadas de trabajo, hacen que los riesgos de lesiones

musculares afecten a trabajadores de construcción.

Para evitar estas lesiones, se sugiere disponer de espacios adecuados para un buen manejo de

las máquinas y herramientas.

El diseño y la correcta selección de herramientas son aspectos clave para reducir las lesiones y

así como realizar un adecuado mantenimiento a las máquinas y herramientas, ya que si presentara

cualquier desperfecto este puede afectar la seguridad del trabajador e incrementará el esfuerzo

para su manejo.

• Repetitividad:

Muchas de las tareas que se realizan en construcción, están asociadas al uso de herramientas

manuales, tales como picar, abrir zanjas, extender cemento, etc., las mismas que están asociadas

a una elevada repetitividad de miembros superiores (brazos y manos).


• Orden y limpieza:

El entorno donde se desarrollan los trabajos, pueden incrementar los riesgos ergonómicos, debido

al poco espacio disponible, la acumulación de residuos o la mala distribución de las zonas de

almacenamiento de los materiales, los mismos que podrían obstaculizar el transito llegando a

generar accidentes. Por ello se sugiere mantener el área de trabajo libre.

En cualquier caso, la ergonomía puede ayudar a mejorar las condiciones de trabajo y, como

consecuencia, el estado de salud de los trabajadores:

Es muy importante que el trabajador sea capaz de reconocer los riesgos ergonómicos existentes

en su puesto de trabajo para poder llevar a cabo acciones preventivas.


Carga mental en el trabajo hospitalario
INTRODUCCIÓN

El concepto de carga mental de trabajo está adquiriendo cada vez una mayor importancia, debido

fundamentalmente a las nuevas formas de organización del trabajo, y a los avances tecnológicos

e informáticos, que suponen la existencia de mayores exigencias mentales o intelectuales, frente

a las exigencias físicas de los trabajos más tradicionales. En cualquier trabajo, el trabajador tiene

que poner en funcionamiento mecanismos o procesos tanto físicos como mentales. Estos

mecanismos son los que determinan la CARGA DE TRABAJO, que podemos definir como “el

conjunto de requerimientos psicofísicos a los que se somete al trabajador a lo largo de su jornada

laboral”. En la realidad laboral no vamos a encontrar trabajos puramente físicos ni trabajos

puramente mentales, sino que en cualquier tipo de actividad van a estar presentes ambos

aspectos. Sin embargo, desde un punto de vista teórico, sí vamos a diferenciar el trabajo físico del

trabajo mental, según el tipo de actividad que predomine. Es decir, cuando la actividad

desarrollada sea predominantemente física, hablaremos de trabajo físico o muscular, y por lo

tanto, de “Carga Física de Trabajo”, y cuando, por el contrario, la actividad implique un mayor

esfuerzo intelectual, hablaremos de trabajo mental, y en consecuencia, de “Carga Mental de

Trabajo”.
Carga mental:

La carga mental se refiere, según esta definición, al grado de procesamiento de información que

realiza una persona para desarrollar su tarea. Cada vez más, el trabajo, con la aplicación de las

nuevas tecnologías, impone al trabajador elevadas exigencias en sus capacidades de procesar

información. El trabajo implica a menudo la recogida e integración rápida de una serie de

informaciones con el fin de emitir, en cada momento, la respuesta más adecuada a las exigencias

de la tarea. El sistema humano para procesar información tiene unas capacidades finitas, por lo

que las exigencias de la tarea pueden acercarse mucho e incluso sobrepasar la capacidad

individual de respuesta.

Si esta situación se da de manera puntual la persona puede llegar a adaptarse a ella, pero, si por

el contrario, el trabajo exige continuamente un grado de esfuerzo elevado, puede llegar a una

situación de fatiga capaz de alterar el equilibrio de salud de los individuos. Paralelamente a este

concepto de tratamiento de la información como generador de una situación de carga mental, hay

que considerar que, además de los aspectos que se refieren a la propia tarea, deben tenerse en

cuenta otras variables, de tipo organizativo, que pueden facilitar o por el contrario dificultar esta

tarea.

Las características del medio socioprofesional hospitalario son predominantes en la aparición de

la carga mental debida al trabajo: la organización del trabajo, la creciente complejidad de las

técnicas médicas y los problemas jerárquicos son frecuentemente origen de carga mental para el

personal sanitario. En el trabajo hospitalario interviene además otra variable, que en este caso

hace referencia tanto al trabajo en sí como a la organización del mismo; nos referimos al trabajo

nocturno. El hecho de trabajar de noche tiene una serie de consecuencias sobre el equilibrio de

las personas, pudiendo provocar alteraciones a distintos niveles: físico, psíquico y social.
Uno de los principales obstáculos que se plantean es el método a utilizar, pues en cada caso debe

adaptarse a las características propias de la tarea y al entorno, especialmente de tipo organizativo,

en que ésta se realiza.

Factores de la tarea.

El trabajo hospitalario supone la aplicación de unos conocimientos científicos y técnicos, en unas

condiciones que pueden-conducir a situaciones de sobrecarga y, consecuentemente, a

alteraciones patológicas. En este caso la carga mental viene determinada por la necesidad de dar

respuesta inmediata a informaciones complejas, numerosas y constantemente diferentes. No es

necesario resaltar la complejidad de los datos médicos, es suficiente resaltar la complejidad de los

conocimientos que entran en juego, y el hecho de que cada uno no tiene sentido por sí solo, sino

en relación al conjunto de datos. El desarrollo de la tarea en este sector de actividad implica el

mantenimiento constante de un nivel de atención bastante elevado.

A este proceso de tratamiento de información se añaden otros factores que, si bien no son

generadores directos de carga mental, sí inciden en su desarrollo:

● Existencia de situaciones de incertidumbre: a menudo la información de la que se dispone no es

suficiente para decidir qué acción debe emprenderse.

● Existencia de presiones temporales: la evolución de los enfermos exige tener que decidir, en un

momento dado, entre varias posibilidades lo que supone una toma de decisión rápida.
● El tipo de pacientes que se tratan: por un lado podemos considerar la autonomía de los

enfermos, considerada ésta como el grado de dependencia de los demás.

● La gravedad de los enfermos, relacionada con la edad de los mismos: no es lo mismo tratar a

enfermos crónicos o termínales que a enfermos de menor gravedad, y además si los primeros son

jóvenes la carga de trabajo es mayor.

● El trato con pacientes y familiares: supone un trabajo de atención al público, en el que a menudo

se reciben agresiones de tipo verbal llegándose en ocasiones a la agresión física.

Merece especial atención, a este respecto, el trabajo en unidades de vigilancia intensiva, que

algunos autores comparan con las salas de control industrial en cuanto a la complejidad de la

información a tratar, pues en ambos casos debe interpretarse a partir de una serie de señales o

códigos que llegan a través de los monitores.

Factores de la organización:

Los factores que hacen referencia a la organización pueden considerarse desde un doble punto

de vista: por una parte, la coordinación y la distribución de las actividades condiciona la transmisión

eficaz de las informaciones necesarias para el desarrollo del trabajo; bajo este aspecto es

necesario considerar los sistemas de transmisión de información entre estamentos profesionales,

en el cambio de turno y en la coordinación con otros servicios. Por otra parte, los factores de

organización están estrechamente relacionados con el concepto de satisfacción en el trabajo: las

personas tenemos una serie de necesidades y motivaciones que el trabajo debe ser capaz de

satisfacer, por lo menos en parte (pertenencia a un grupo, reconocimiento, seguridad en el


empleo); cuando esto no ocurre podemos considerar que la situación de trabajo es potencialmente

nociva para el trabajador. Por ello, es importante identificar el máximo número de factores

presentes en una determinada situación de trabajo, y valorar hasta qué punto pueden contribuir a

la satisfacción personal o, por el contrario, son susceptibles de influir negativamente en la salud

de los trabajadores.

El horario de trabajo:

El trabajo hospitalario implica un servicio ininterrumpido, durante las 24 horas del día y todos los

días del año, con la obvia existencia de trabajo a turnos y nocturno. Las repercusiones que este

tipo de organización del tiempo de trabajo puede tener sobre la salud de las personas merecen

especial atención. Dichas consecuencias se refieren principalmente a tres tipos de factores.

Repercusiones sobre la vida familiar y social:

La sociedad está organizada para un horario "normal" de trabajo. El trabajo a turnos dificulta las

relaciones tanto a nivel familiar como social, por una falta de sincronización con los demás y por

las dificultades de organización debido a los continuos cambios que produce la alternancia de

horarios creando problemas de índole psicosocial.


BIBLIOGRAFIA

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