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Escuela Normal “Pablo García

Avalos” Licenciatura en
Educación física.

Curso: "Pensamiento pedagógico"

Dr.: César Morales Díaz

Tema: ensayo  

Unidad III Tendencias actuales


del pensamiento.

Alumno:
Muñoz Vasconcelos Iván de Jesús

Semestre: 6 grupo: A
Numero de lista: 12
Introducción

En el ámbito de la educación, el pensamiento pedagógico contemporáneo ha


experimentado un proceso de constante evolución y transformación a lo largo de
las últimas décadas. Las teorías y enfoques tradicionales han dado paso a nuevas
tendencias que buscan adaptarse a los cambios sociales, tecnológicos y culturales
de la actualidad, así como a las necesidades y demandas de una sociedad en
constante cambio.

En esta introducción, exploraremos algunas de las tendencias más relevantes del


pensamiento pedagógico contemporáneo. Estas tendencias, muchas de las cuales
se han desarrollado en respuesta a los desafíos y oportunidades surgidos de la
era digital, están impulsando una transformación profunda en los sistemas
educativos en todo el mundo. Se enfocan en la adopción de metodologías
innovadoras, el fomento de la participación activa de los estudiantes, la
personalización del aprendizaje.

Una de las tendencias más destacadas es el enfoque de la Escuela Nueva, que se


basa en la idea de que los sistemas educativos modifiquen y mejoren los métodos
de enseñanza de una sociedad, eliminando la enseñanza tradicionalista donde
solo el maestro es el protagonista. Mediante esto se promueve la participación
activa de los estudiantes en la resolución de problemas y la construcción de
significado a partir de experiencias concretas. Se busca fomentar el pensamiento
crítico, la creatividad y la capacidad de trabajar en colaboración, brindando a los
estudiantes las herramientas necesarias para enfrentar los desafíos.

Otra tendencia importante es el pensamiento de la diferencia y pensamiento de la


ternura, en la cual su enfoque está centrado en el estudiante, que sitúa al alumno
en el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje. Este enfoque reconoce la
diversidad de los estudiantes y busca adaptar la educación a sus necesidades
individuales. Se promueve la personalización del aprendizaje, utilizando métodos y
recursos flexibles que permitan a los estudiantes avanzar a su propio ritmo y
desarrollar sus talentos y habilidades únicas. Además, se fomenta la participación
activa de los estudiantes en la toma de decisiones sobre su propio aprendizaje,
promoviendo la autonomía y la responsabilidad.

La integración de la tecnología educativa es otra tendencia relevante en el


pensamiento pedagógico contemporáneo ya que d uno de esos ejemplos es el
lugar que tuvo la pedagogía en la sociedad durante la pandemia, tomando como
base lo anterior mencionado. La era digital ha transformado la forma en que
vivimos y trabajamos, y también ha impactado significativamente en la educación.
La tecnología ofrece una amplia gama de herramientas y recursos que pueden
enriquecer el proceso de enseñanza-aprendizaje, fomentando la participación, la
motivación y la creatividad de los estudiantes. La implementación de aulas
virtuales, plataformas educativas en línea y recursos multimedia interactivos son
solo algunos ejemplos de cómo la tecnología está cambiando la forma en que los
estudiantes aprenden y los maestros enseñan. estos serán los puntos claves a
hablar en este ensayo y la relación que tienen en la educación fisica.
Escuela nueva

La idea de una Escuela Nueva ha tenido un profundo impacto en la forma en que


se concibe la educación en todo el mundo. Esta corriente, surge a finales del siglo
XIX y principios del XX, dicha corriente o tendencia pedagógica propuso un
enfoque innovador y revolucionario para la enseñanza para el aprendizaje, ya que
uno de sus aspectos clave es la integración de la educación física como parte
fundamental del proceso educativo.

La educación física, en el contexto de la Escuela Nueva, se considera mucho más


que simplemente una actividad recreativa o deportiva. Se entiende como una
disciplina que promueve el desarrollo integral de los estudiantes, fomentando su
bienestar físico, mental y emocional. La Educación Física se convierte en una
herramienta para el desarrollo de habilidades motoras, la adquisición de
conocimientos sobre el cuerpo humano y la promoción de hábitos saludables, por
lo que, adquiere un carácter pedagógico, siendo concebida como una oportunidad
para la formación de valores y actitudes positivas. A través de la práctica de
actividades físicas y deportivas, se busca promover el trabajo en equipo, el
respeto mutuo, la tolerancia, la responsabilidad y el espíritu de superación. Estas
cualidades son fundamentales para el desarrollo personal y social de los
estudiantes, y la Educación Física se convierte en un espacio privilegiado para su
cultivo.

Además, se busca proporcionar a los estudiantes un espacio en el que puedan


explorar y experimentar con su cuerpo, desarrollando habilidades motrices y
coordinativas, así como la capacidad de expresarse a través del movimiento.

Pedagogía crítica y su impacto.

Pero la integración no solo es un aspecto que abarca en las nuevas tendencias


actuales, sino también, en el aspecto de darle la oportunidad a los alumnos de
tener una autonomía critica para poder aprender. En el ámbito de la educación
física, la pedagogía crítica ha tenido un impacto significativo, desafiando los
enfoques tradicionales y promoviendo un cambio hacia una práctica más inclusiva,
participativa y emancipadora. Esta corriente propone una mirada crítica hacia las
estructuras de poder y desigualdad presentes en la sociedad, y busca generar
conciencia, empoderamiento y acción transformadora en los estudiantes.

La pedagogía crítica en la educación física busca superar las concepciones


limitadas y estereotipadas de esta disciplina, que a menudo se centran
únicamente en el rendimiento físico y la competencia deportiva. En cambio, se
enfoca en la educación corporal integral, reconociendo el cuerpo como un espacio
de aprendizaje, expresión y empoderamiento. La educación física desde una
perspectiva crítica busca desafiar las normas de género, los estereotipos
corporales y las desigualdades socioeconómicas presentes en el ámbito deportivo
y promover una participación equitativa y accesible para todos los estudiantes.

Un aspecto fundamental de la pedagogía crítica en la educación física es la


reflexión crítica sobre las prácticas y discursos dominantes en el campo. Se busca
cuestionar y problematizar las formas tradicionales de enseñanza y evaluación, así
como las representaciones mediáticas que perpetúan estereotipos y exclusiones.
La pedagogía crítica promueve una educación física que valore y respete la
diversidad corporal, las capacidades individuales y las diferentes culturas y
tradiciones corporales.

De igual forma, la pedagogía crítica en la educación física fomenta la participación


activa de los estudiantes en la toma de decisiones y en la construcción de
conocimiento. Se promueve el diálogo, la colaboración y el empoderamiento de los
estudiantes, brindándoles espacios para expresar sus opiniones, explorar su
identidad corporal y tomar decisiones informadas sobre su participación en
actividades físicas. La pedagogía crítica en la educación física también busca
vincular las experiencias de los estudiantes con su realidad social y cultural,
promoviendo la conciencia crítica y la acción transformadora en relación con los
problemas y desafíos presentes en el ámbito físico y deportivo.

Pedagogía de la diferencia
Gracias a que la pedagogía critica dio lugar a las opiniones y considera las
necesidades del estudiante, también abre paso al reconocimiento y la valoración
de la diversidad como elemento enriquecedor en el ámbito educativo. Esta
perspectiva considera que cada estudiante es único, con sus propias
características, habilidades, intereses y necesidades, y busca crear un entorno
inclusivo que responda a esta diversidad. En relación con la educación física, la
pedagogía de la diferencia tiene un impacto significativo al promover la
participación, el respeto y la equidad en el ámbito de la actividad física y el
deporte.

La pedagogía de la diferencia en la educación física busca superar los enfoques


tradicionales que privilegian ciertas habilidades o características físicas, y que
pueden excluir a aquellos estudiantes que no se ajustan a estos estándares. En
cambio, se enfoca en crear oportunidades y adaptar la enseñanza para que todos
los estudiantes, independientemente de sus habilidades físicas, género,
capacidades o antecedentes culturales, puedan participar y disfrutar de la
educación física.

En primera estancia, la pedagogía de la diferencia promueve la inclusión de todos


los estudiantes en las actividades físicas y deportivas; adaptando las actividades y
los espacios para garantizar que cada estudiante pueda participar según sus
propias capacidades y necesidades. Esto implica proporcionar opciones y
alternativas para que los estudiantes encuentren actividades físicas en las que se
sientan cómodos y puedan desarrollar sus habilidades y talentos individuales.

Además, la pedagogía de la diferencia en la educación física fomenta el respeto y


la valoración de la diversidad corporal, desafiando los estereotipos y las normas
de belleza impuestas socialmente, y promover una visión inclusiva y positiva de
los cuerpos de todos los estudiantes. Esto implica fomentar la aceptación y el
respeto por la diversidad de formas, tamaños y capacidades corporales, y
promover una cultura corporal positiva basada en el bienestar y el respeto mutuo.

Pedagogía de la ternura
Para lograr que logremos que dicha pedagogía pueda ser apreciable y aplicable,
no solo se necesita el fomentar los valores, sino también, el desarrollo de la
empatía y el afecto como elementos fundamentales en el proceso educativo. Esta
perspectiva reconoce la importancia de establecer relaciones afectivas y
respetuosas entre docentes y estudiantes, y promueve un ambiente educativo
basado en la ternura y el cariño. En el contexto de la educación física, la
pedagogía de la ternura tiene un impacto significativo al fomentar el bienestar
emocional, la confianza y el disfrute de la actividad física.

La pedagogía de la ternura en la educación física va más allá de la simple


transmisión de conocimientos y habilidades físicas, como he mencionado
anteriormente, de igual manera se preocupa por el desarrollo integral de los
estudiantes, enfocándose en establecer vínculos afectivos positivos entre
docentes y estudiantes, creando un ambiente seguro y acogedor donde los
estudiantes se sientan valorados y respetados. Esta relación afectiva propicia un
clima de confianza y apertura, permitiendo a los estudiantes explorar su cuerpo y
sus habilidades físicas de manera libre y sin temor al juicio.

Igualmente, la pedagogía de la ternura en la educación física promueve el


autoconocimiento y el autocuidado, animando a los estudiantes a escuchar sus
necesidades físicas y emocionales, respetando sus límites. Por lo que es
necesario fomentar la práctica de actividades físicas que promuevan el bienestar y
la salud, para que se brinden espacios para el descanso y la relajación. Esta
perspectiva busca contrarrestar la presión y la competitividad excesiva,
enfatizando en el placer y el disfrute de moverse y estar activo.

Pedagogía y pandemia un pensamiento en construcción

Dicha pedagogía de la ternura fue de vital importancia por que aun que ya era algo
que se usaba en la práctica, nunca había tenido mucho impacto, como lo tuvo
durante el covid-19, que ha afectado al mundo entero y ha tenido un impacto
significativo en el ámbito educativo; la pedagogía ha tenido que adaptarse
rápidamente a esta nueva realidad. En este nuevo rumbo, la educación física
también ha experimentado cambios y desafíos, por lo que la reflexión sobre el
papel de la pedagogía en tiempos de pandemia está en constante construcción.

La pedagogía en tiempos de pandemia se enfrenta a la necesidad de replantearse


y reinventarse, buscando nuevas formas de enseñanza y aprendizaje que se
ajusten a las restricciones y limitaciones impuestas por las medidas de salud y
seguridad. En relación con la educación física, esto implica encontrar alternativas
a las actividades físicas y deportivas presenciales, y buscar formas de mantener la
motivación, el bienestar y el desarrollo integral de los estudiantes a través de la
actividad física.

La educación física durante la pandemia ha visto un aumento en la importancia de


las tecnologías de la información y la comunicación. La enseñanza a distancia, el
uso de plataformas virtuales y las clases en línea se han convertido en
herramientas fundamentales para mantener la continuidad de la educación física.
Los docentes han tenido que adaptar sus prácticas pedagógicas, ofreciendo
clases virtuales, proporcionando rutinas de ejercicios en video, y promoviendo la
participación activa de los estudiantes desde sus hogares.

Sin embargo, es importante reconocer que la educación física en línea presenta


desafíos particulares. La falta de interacción física directa, la limitación del espacio
y los recursos disponibles en casa, así como la necesidad de mantener la
motivación y el compromiso de los estudiantes son aspectos que requieren una
atención cuidadosa por parte de los docentes. La pedagogía en tiempos de
pandemia en la educación física debe buscar estrategias que promuevan el
aprendizaje significativo, la participación activa y el bienestar emocional,
adaptándose a las condiciones y necesidades individuales de los estudiantes.

Además, la pedagogía en tiempos de pandemia en la educación física también


debe abordar las desigualdades existentes. La brecha digital, las diferencias en el
acceso a espacios adecuados para la práctica física, y las disparidades
socioeconómicas pueden afectar la participación y el aprendizaje de los
estudiantes. La pedagogía debe asegurarse de ser inclusiva y equitativa,
brindando apoyos y adaptaciones a aquellos estudiantes que enfrentan mayores
dificultades, y promoviendo una participación de todos los estudiantes,
independientemente de sus circunstancias.
Conclusión

Con base a lo reflexionado anteriormente, el pensamiento pedagógico


contemporáneo se caracteriza por una serie de tendencias que buscan
transformar la educación para adaptarla a las necesidades y desafíos de la
sociedad actual. Estas tendencias incluyen el enfoque constructivista del
aprendizaje, el enfoque centrado en el estudiante, la integración de la tecnología
educativa y el enfoque en el desarrollo de habilidades, la opinión y el sentir de los
alumnos. Estos enfoques están impulsando una revolución educativa que tiene
como objetivo formar ciudadanos críticos, creativos, colaborativos y adaptables en
el mundo globalizado y digitalizado en el que vivimos.

A su vez debemos fomentar valores, actitudes, habilidades motoras, expresión


creativa y trabajo en equipo. Al hacerlo, establecemos las bases para una
educación más completa y enriquecedora que busca formar individuos
equilibrados y preparados para enfrentar los desafíos de la vida, como las
desigualdades presentes en el campo. Promoviendo una educación física más
inclusiva, participativa y emancipadora, que valore la diversidad corporal,
cuestione los estereotipos y promueva la justicia social.

De esta forma, como educadores podemos crear un ambiente educativo basado


en la confianza, el respeto y la valoración de las emociones. Sin hacer de lado que
sin importar las situaciones que presenta la sociedad, adquiriendo nuevas
experiencias y conocimientos, que se van generando para la mejora de los
aprendizajes y mejores prácticas. Es necesario que los docentes y los
especialistas en educación física compartan sus experiencias, investiguen y
colaboren en la creación de estrategias pedagógicas efectivas y pertinentes para
los diferentes tipos de contextos, mediante el uso de tecnologías, para así
adaptarse a las restricciones y la atención a las desigualdades, que siempre serán
los aspectos centrales en la construcción de una pedagogía efectiva y significativa.

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