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10.1 LA PROCLAMACIÓN DE LA SEGUNDA REPÚBLICA. LA CONSTITUCIÓN DE 1931.

EL BIENIO REFORMISTA.

LA PROCLAMACIÓN DE LA SEGUNDA REPÚBLICA:


El 30 de enero de 1930, el rey Alfonso XIII retiró su confianza a Primo de Rivera, el cual dimiPó y
fue sustituido por el general Berenguer cuyo objetivo era el de convocar elecciones, pero, al ser
incapaz de prepararlas le sustituyó Aznar, poniendo en marcha los comicios (elecciones)
municipales; fue un intento de volver a la normalidad y se plantearon como un plebiscito.

El triunfo aplastante se produjo en las grandes ciudades, fue para los candidatos republicanos y
socialistas, lo que precipitó la renuncia del rey y la proclamación de la República el 14 de abril de
1931, asimismo, los representantes del Pacto de San Sebastián se constituyeron en un Gobierno
Provisional presidido por Niceto Alcalá Zamora, formado por republicanos de izquierda y
derecha, socialistas y nacionalistas; se convocaron nuevas elecciones a Cortes Constituyentes para
el 28 de junio.

La nueva República contó con apoyo popular, pero se encontró con oposición de grandes
propietarios, la oligarquía financiera, parte del ejército y la Iglesia; por otra parte, el ambiente
social se encrespó debido a la proclamación de una República Catalana Independiente; la CNT
anarquista promovía huelgas, además, los enfrentamientos entre la Iglesia y el nuevo gobierno
fueron inmediatos. Con las elecciones generales a Cortes Constituyentes dieron una clara mayoría
a la coalición republicana-socialista.

LA CONSTITUCIÓN DE 1931:
El jefe de Gobierno, Niceto Alcalá Zamora y los ministros del gobierno provisional, junto con las
Cortes, nombraron inmediatamente a una comisión encargada de elaborar un proyecto de
Constitución aprobada sin consenso en 1931 con los siguientes rasgos donde, se declaró una
soberanía popular en el que los poderes emanan del pueblo; la forma de gobierno era una
“República democrática de trabajadores”; los derechos y libertades eran a la educación, de
carácter civil como el divorcio...; enunciaba un sufragio universal masculino y femenino, por
primera vez en la historia de España; en lo referido a la organización territorial, se establecía el
derecho a establecer Estatutos de Autonomía; existía una separación de poderes, en el que, el
poder legislativo recaía en las Cortes unicamerales, el ejecutivo, en el presidente de la República
y jefe de Gobierno, y el poder judicial en los tribunales de justicia independientes; en cuanto a la
religión se establece un Estado laico en el que había una separación de la Iglesia y el Estado....
Los artículos religiosos provocaron la dimisión de sectores católicos del gobierno por lo que
Manuel Azaña sustituyó en la jefatura del gobierno a Niceto Alcalá Zamora y pasó a ser
presidente de la República.

EL BIENIO REFORMISTA (1931-1933):


El gobierno republicano-socialista emprendió un amplio programa de reformas en un contexto
económico desfavorable debido a la repercusión del Crack de la Bolsa de Nueva York en 1929
que provocó un ascenso en el paro, ante esto tomaron varias medidas:

- En la cuestión religiosa, se dio la oposición del Cardenal Segura, desde el inicio de la


República, arzobispo de Toledo y primado de España que llevaría al resurgimiento de
movimientos populares anticlericales que ocasionó, que se incendiaran conventos y edificios
religiosos; la limitación de la influencia de la Iglesia y secularización se vería plasmado en la
Constitución, en la que no había confesionalidad del Estado; existía una prohibición de

órdenes religiosas y de ejercer la enseñanza; la supresión del presupuesto del culto y clero; se
permitía el divorcio y matrimonio civil; se redactó una Ley de Congregaciones (1933); y la
disolución de la Compañía de Jesús por su voto de obediencia al Papa.

- En la modernización del ejército, Azaña buscó garantizar la fidelidad del ejército al nuevo
régimen republicano y, con la Ley de RePro de la Oficialidad, se exigió el juramento de
fidelidad al nuevo régimen republicano, pudiendo optar, los que se negaron a ello al retiro
voluntario con paga completa; se redujo el número de rangos militares y oficiales. Además, se
colocó al frente de capitanías generales a militares de confianza política, por otra parte, se creó
la Guardia de Asalto, una fuerza de orden pública fiel a la República; esta reforma fue recibida
por los africanistas como una agresión.

- La reforma agraria fue el proyecto de mayor envergadura realizada por la República, con esto
se pretendía poner fin al latifundismo y, en 1932, se aprobó la Ley de Bases de la Reforma
Agraria que buscaba el reasentamiento de los campesinos sin Perra en latifundios
insuficientemente explotados; la aplicación de la ley se la encomendaron al Instituto de la
Reforma Agraria (IRA), pero fue un fracaso y muy pocos campesinos se beneficiaron de esta ley,
provocando la decepción generalizada, aumentando la tensión social.

- Para la reforma de Estado Central, el 14 de abril, en Cataluña, Francesc Macià, presidente de


Esquerra Republicana, había proclamado la República de Cataluña que formaría parte de una
Confederación de Pueblos Ibéricos, sin embargo, acabó con la anulación de esta decisión a
cambio de la formación de un gobierno autonómico provisional, la Generalitat; poco después
el Estatuto de Cataluña fue aprobado en septiembre de 1932, sus primeras elecciones al
parlamento catalán dieron la victoria a Esquerra Republicana y Francesc Macià se convirtió en
presidente de la Generalitat. En cambio, en el País Vasco, nacionalistas del PNV y carlista
aprobaron un proyecto de Estatuto cuya aprobación se retrasó por su incompatibilidad con la
Constitución republicana; y en Galicia, el proyecto de estatuto no llegó a ser
aprobado.

- En la obra educativa, se tenía como objetivo promover una educación liberal, laica y gratuita;
se quería llevar la educación a toda la población y se llevó a cabo con la construcción de
escuelas y contratación de maestros, además se trató de una educación mixta, la religión dejó
de ser una asignatura obligatoria, con esto se quería mejorar el nivel cultural de la población y
se fomentaron las Misiones Pedagógicas.

- La reforma laboral se inició por el socialista Largo Caballero, favoreciendo la posición de


trabajadores y sindicatos, la posición de las empresas, tomando medidas como la Ley de
Contratos de Trabajo, la Ley de Jurados Mixtos, una jornada laboral de 40h, un aumento de
salarios o la creación de seguros sociales. Estas medidas provocaron la limitación de las
organizaciones patronales.







La crisis económica provocada por el Crack de la Bolsa de Nueva York en 1929 hizo que la CNT y
la patronal tuviesen fuertes tensiones sociales, produciéndose huelgas, insurrecciones y
ocupaciones de las Perras, además del progresivo aumento de enfrentamientos frecuentes entre
huelguistas y la Guardia Asalto. Por otra parte, el debate en Cortes del Estatuto de Cataluña y la
Ley de Reforma Agraria provocaron una oposición cerrada en las fuerzas de derecha, ocurrió
también una insurrección militar donde el general Sanjurjo dio un golpe de Estado militar en
Sevilla en agosto de 1932 que fracasó

Los graves incidentes en Casas Viejas en las que la Guardia de Asalto sitió y mató a un grupo de
campesinos anarquistas. Este escándalo llevó al gobierno a la decisión de convocar nuevas
elecciones en noviembre de 1933.

10.2 EL GOBIERNO RADICAL CEDISTA (1933-1935). LA REVOLUCIÓN DE ASTURIAS, EL


FRENTE POPULAR, LAS ELECCIONES DE 1936 Y EL NUEVO GOBIERNO.

EL GOBIERNO RADICAL CEDISTA:


Para las elecciones de 1933, la derecha se había reorganizado, donde antiguos y nuevos grupos
se presentaron a los comicios, por parte de los partidos antiguos, encontramos al ParPdo Radical
de Lerroux de centro derecha, que atrajo a grupos campesinos, comerciantes y propietarios
agrícolas; como nuevos partidos, encontramos a la Confederación Española de Derechos
Autónomos (CEDA) presidido por José M.a Gil Robles, era un grupo mayoritario auspiciado por la
Iglesia católica , con oposición a la reforma religiosa, la agraria y al Estatuto de Cataluña; también
encontramos a la Renovación Española de Calvo Sotelo, monarquico y a la Falange Española,
presidida por José Antonio Primo de Rivera, un grupo minoritario que promovía la agitación
contra el marxismo. En la derecha, se presentaron unidos y organizados, además, los anarquistas
llamaron a la abstención a petición de la CNT, mientras la izquierda se presentó desunida en
múltiples grupos.

En 1933 se convocaron elecciones generales donde pudieron votar las mujeres, teniendo gran
abstención. La victoria fue dada al Partido Radical de Lerroux y CEDA de Gil Robles, inaugurando
así dos años de gobiernos conocidos como el Bienio Negro; la formación de gobierno la dejó,
Alcalá Zamora, en manos del Partido Radical de Alejandro Lerroux, quienes, contaban con el
apoyo parlamentario de la CEDA a cambio de que rectificara las reformas del bienio de izquierda.

Lerroux inició una política de rectificación sobre las reformas del bienio anterior como impedir la
aplicación de la Ley sobre Congregaciones Religiosas y el pago parcial del sueldo de los
sacerdotes por parte del Estado; la paralización de la reforma militar y designación para puestos
clave de militares claramente antirrepublicanos como Franco, Mola o Goded, además de una
amnistía para los participantes del golpe de Sanjurjo en 1932; la paralización de la reforma agraria
con la expulsión de las Perras ocupadas a los jornaleros y su posterior devolución a la nobleza; se
produjo un enfrentamiento a los nacionalismos periféricos, frenando el proyecto de Estatuto de
Autonomía vasco, además de enfrentarse contra la Generalitat catalana presidida por Lluís
Companys, dirigente de Esquerra Republicana de Cataluña; o la paralización de reformas
educativas con la anulación de la enseñanza mixta y la reducción de presupuesto.

Tras estas rectificaciones, se produjo la radicalización del PSOE y la UGT, en donde Francisco
Largo Caballero dejó de colaborar con las fuerzas burguesas y propició la revolución social, por
otro lado, Indalecio Prieto defendía la colaboración con los republicanos de izquierdas. Por lo que
el sector más radical del PSOE y anarquistas produjeron huelgas y conflictos, a los cuales la CEDA
endureció su posición y reclamó una acción en orden público, exigiendo participar en el gobierno
a lo que Lerroux accedió y dio tres carteras ministeriales en el gobierno.

LA REVOLUCIÓN DE ASTURIAS EN 1934:


Esta remodelación del gobierno fue interpretada por la izquierda como el anuncio del triunfo del
fascismo, lo que radicalizó a izquierdas, PSOE, UGT, CNT y el Partido Comunista Español (PCE),
convocando huelgas generales, pero tuvieron un seguimiento desigual.

En Madrid y Barcelona fracasó, Companys dirigió una insurrección con claro matiz
independentista, por otra parte, el presidente de la Generalitat proclamó la República Catalana
dentro de la República Federal Española, que organizó una huelga general, pero fracasó la
insurrección. En Asturias triunfó, y degeneró en una verdadera revolución social que llevó al

gobierno a optar por la represión enviando a La Legión dirigida por el general Franco para
reprimir el levantamiento. La represión duró diez días y el levantamiento fue derrotado.

El balance de la Revolución de octubre de 1934 fue aterrador, más de mil muertos, el doble de
heridos y cinco mil detenidos entre ellos Companys, Azaña, Prieto o Largo Caballero. Además, se
produjo un endurecimiento de su política suspendiendo el Estatuto de Autonomía de Cataluña o
la nueva ley de Reforma Agraria.

ESCÁNDALOS Y CRISIS DEL FIN DEL BIENIO:

Los desacuerdos en el seno del gobierno eran crecientes, las diferencias entre el Partido Radical y,
el cada vez más extremista, CEDA eran evidentes. Gil Robles fue nombrado ministro de Guerra
nombrando militares contrarios a la república y a la democracia para puestos clave como el
nombramiento de Franco como jefe del Estado Mayor. La CEDA presentó un anteproyecto de
Constitución que no llegó a ser votado; por último, el escándalo de corrupción Estraperlo afectó
a altos cargos gubernamentales, y precipitó el fin de la legislatura y la convocatoria de nuevas
elecciones a Cortes en febrero de 1936.

FRENTE POPULAR: LAS NUEVAS ELECCIONES DE 1936


La creciente radicalización se presentó en las candidaturas a las elecciones de febrero de 1936,
donde se hallaba el Frente Popular, un pacto electoral entre Izquierda Republicana, PSOE, PCE,
ParPdo Obrero de Unificación Marxista (POUM) y ERC, además del apoyo de la CNT quien optó
por no pedir la abstención y pide el apoyo al frente popular. En cambio, la derecha no logró
confeccionar una candidatura única para toda España, ni redactar un programa electoral
consensuado, parPdos que se presentaron por su cuenta fueron la Falange, PNV...

La victoria fue para el Frente Popular, donde Manuel Azaña, presidente de la República tenía
como objetivo que Indalecio Prieto ocupara la jefatura del gobierno, pero al existir en el Partido
Socialista diversas tendencias, se formó un gobierno presidido por Casares Quiroga constituido
por republicanos de izquierda.

FRENTE POPULAR: NUEVO GOBIERNO

El nuevo gobierno inició la acción reformista en la que hubo una amplia amnistía para todos los
encarcelados tras la Revolución de Octubre de 1934; la renovación de la reforma agraria en la que
al final los jornaleros se lanzaron a la ocupación de fincas; la Generalitat volvió de nuevo al poder
restableciendo el Estatuto de Autonomía Catalán con nuevos estatutos de autonomía, se aprobó
el Estatuto de Galicia y el del País Vasco estaba prácticamente acabado; y el alejamiento de
Madrid de generales sospechosos de golpismo como Franco, Mola y Goded.

La izquierda tenía posturas revolucionarias mientras que la derecha se basaba en el fin del sistema
democrático, a lo que los partidos de izquierdas y los sindicatos se lanzaron a la movilización
popular a través de acciones revolucionarias; ante esto los partidos de derecha reaccionaron con
absoluto rechazo y desde abril se sucedieron enfrentamientos callejeros, además las
conspiraciones militares contra el gobierno del Frente Popular avanzaban y el 12 de julio se
produjo el asesinato de un Guardia de Asalto, el teniente Castillo, la respuesta llegó a la
madrugada siguiente con el asesinato de José Calvo Sotelo.

El gobierno de Casares Quiroga vio como el 17 de julio de 1936, el ejército de Marruecos iniciaba
la rebelión, el triunfo parcial del golpe daba comienzo a una guerra civil.

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