Cueva de ladrones y casa de oración

Marcos 11:15 Llegaron* a Jerusalén; y entrando Jesús en el templo comenzó a echar

fuera a los que vendían y compraban en el templo, volcó las mesas de los cambistas y
los asientos de los que vendían las palomas; 16 y no permitía que nadie transportara
objeto alguno a través del templo. 17 Y les enseñaba, diciendo: ¿No está escrito: «Mi
casa será llamada casa de oración para todas las naciones»? Pero vosotros la habéis
hecho cueva de ladrones. (LBLA)

En algún momento podemos convertir nuestra casa de oración en cueva de ladrones,

la cueva de Adulam era una cueva de ladrones.

Lucas 10:30 Respondiendo Jesús, dijo: Cierto hombre bajaba de Jerusalén a Jericó, y
cayó en manos de salteadores, los cuales después de despojarlo y de darle golpes, se
fueron, dejándolo medio muerto. (LBLA)

En la historia del Buen Samaritano Hay cuatro ataques que puede haber en una casa,
se cayó en manos de salteadores, se despojó, lo golpearon y lo dejaron medio muerto.
En las casas nos pueden venir estos ataques.

Lucas 12:35 Estad siempre preparados y mantened las lámparas encendidas, 36 y sed
semejantes a hombres que esperan a su señor que regresa de las bodas, para abrirle
tan pronto como llegue y llame. 37 Dichosos aquellos siervos a quienes el señor, al
venir, halle velando; en verdad os digo que se ceñirá para servir, y los sentará a la
mesa, y acercándose, les servirá. 38 y ya sea que venga en la segunda vigilia, o aun
en la tercera, y los halla así, dichosos son aquellos siervos. 39 Podéis estar seguros
de que si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora iba a venir el ladrón, no
hubiera permitido que entrara en su casa.LBLA)

Debemos estar preparados y mantener las lámparas encendidas. Si estamos

preparados para el ataque del ladrón entonces estamos atentos y nos podemos
defender con una victoria. En la cueva de ladrones hay heridas, despojo y abandono,
entonces no hay esperanza.

1. Cruz- Burla y falta de perdón

Lucas 24:39 Uno de los criminales allí colgados empezó a insultarlo: —¿No eres tú el
Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a nosotros! 40 Pero el otro criminal lo reprendió: —¿Ni
siquiera temor de Dios tienes, aunque sufres la misma condena? 41 En nuestro caso,
el castigo es justo, pues sufrimos lo que merecen nuestros delitos; este, en cambio, no
ha hecho nada malo. (NVI)

Este ladrón en la cruz tenía la burla y la falta de perdón, estaba crucificado, pero no
buscaba perdón, le faltaba humildad y buscar perdón. Tener una deuda con nuestros
padres y no pedir perdón nos habla de estos problemas. A veces tenemos
adolescencia espiritual donde pensamos que sabemos de todo, somos burlones e
insolentes.
 2. Zaqueo- Mala fama y corrupción

Lucas 19:1 Jesús entró en Jericó y comenzó a pasar por la ciudad. 2 Había allí un
hombre llamado Zaqueo. Era jefe de los cobradores de impuestos de la región y se
había hecho muy rico. 3 Zaqueo trató de mirar a Jesús pero era de poca estatura y no
podía ver por encima de la multitud. 4 Así que se adelantó corriendo y se subió a una
higuera sicómoro que estaba junto al camino, porque Jesús iba a pasar por allí. 5
Cuando Jesús pasó, miró a Zaqueo y lo llamó por su nombre: «¡Zaqueo!—le dijo—.
¡Baja enseguida! Debo hospedarme hoy en tu casa». 6 Zaqueo bajó rápidamente y,
lleno de entusiasmo y alegría, llevó a Jesús a su casa; 7 pero la gente estaba
disgustada, y murmuraba: «Fue a hospedarse en la casa de un pecador de mala
fama». (NTV)

La multitud no deja que el ladrón sea convertido. Zaqueo tenía una mala fama y
corrupción, se ganó esas características negativas, pero él andaba buscando una
realidad, que la semilla muriera desde adentro, Zaqueo estaba limpiándose. Hay cosas
que controlamos, hay una influencia y hay cosas que no controlamos, queremos que
todo cambie, pero no cambiamos nosotros. Debemos invertir todo el tiempo en lo que
podemos controlar, menos tiempo en la influencia y no invertir nada de tiempo en lo
que no podemos controlar. La corrupción te roba cosas, pero el Señor quiere limpiarte
por su divina Palabra.

3. Judas- Menosprecio por lo ofrecido

Mateo 26:14 Entonces Judas Iscariote, uno de los doce discípulos, fue a ver a los
principales sacerdotes 15 y preguntó: «¿Cuánto me pagarán por traicionar a Jesús?».
Y ellos le dieron treinta piezas de plata. 16 A partir de ese momento, Judas comenzó a
buscar una oportunidad para traicionar a Jesús. (NTV)

Judas Iscariote menospreció lo ofrecido. En una casa a veces no valoramos lo que

hacen las esposas. ¿Será que menospreciamos las cosas buenas? A veces
menospreciamos lo que hacen los demás, mucha gente aburre la paz en su casa y lo
confunde con aburrimiento. La semilla de la alegría es el agradecimiento.

4. Giezi- Escondidas- Doble vida

2 Reyes 5:19 —Ve en paz—le dijo Eliseo. Así que Naamán emprendió el regreso a su
casa. 20 Ahora bien, Giezi, el sirviente de Eliseo, hombre de Dios, se dijo a sí mismo:
«Mi amo no debería haber dejado ir al arameo sin aceptar ninguno de sus regalos. Tan
cierto como que el Señor vive, yo iré tras él y le sacaré algo». 21 Entonces Giezi salió
en busca de Naamán. Cuando Naamán vio que Giezi corría detrás de él, bajó de su
carro de guerra y fue a su encuentro. —¿Está todo bien?—le preguntó Naamán. 22
—Sí—contestó Giezi—, pero mi amo me mandó a decirle que acaban de llegar dos
jóvenes profetas de la zona montañosa de Efraín; y él quisiera treinta y cuatro kilos de
plata y dos mudas de ropa para ellos. 23 —Por supuesto, llévate el doble de la
plata—insistió Naamán. Así que le dio dos mudas de ropa, amarró el dinero en dos
bolsas y mandó a dos de sus sirvientes para que le llevaran los regalos. 24 Cuando
llegaron a la ciudadela, Giezi tomó los regalos de mano de los sirvientes y despidió a
los hombres. Luego entró en su casa y escondió los regalos. 25 Cuando entró para ver
a su amo, Eliseo le preguntó: —¿Adónde fuiste, Giezi? —A ninguna parte—le contestó
él. 26 Pero Eliseo le preguntó: —¿No te das cuenta de que yo estaba allí en espíritu
cuando Naamán bajó de su carro de guerra para ir a tu encuentro? ¿Acaso es
momento de recibir dinero y ropa, olivares y viñedos, ovejas y ganado, sirvientes y
sirvientas? 27 Por haber hecho esto, tú y todos tus descendientes sufrirán la lepra de
Naamán para siempre. Cuando Giezi salió de la habitación, estaba cubierto de lepra;
su piel se puso blanca como la nieve. (LBLA)

El problema de este ladrón es que tenía cosas escondidas, una doble vida. Esto se
nos puede complicar, lo obvio es lo que vemos en nuestro celular y lo que tenemos en
las redes sociales, no debemos tener una doble vida.