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Rompehielos: Llevar una zanahoria, un huevo y granos de café.

Versículo Clave: 2 Pedro1: 5-15

Propósito: Enseñarles que las pruebas y circunstancias no

nos deben cambiar, sino que nosotros debemos de cambiar

las circunstancias.

Un hijo se quejaba a su padre acerca de su vida y cómo las

cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría
por vencido. Estaba cansado

de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro. Su padre, un chef de
cocina, la llevó al lugar de trabajo.

Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre el fuego fuerte.

Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó

zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos

de café. Las dejó hervir sin decir palabra. El hijo esperó pacien

temente, preguntándose qué estaría haciendo su padre. A los

veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y

las colocó sobre un recipiente. Sacó los huevos y los colocó en un

plato. Coló el café y lo puso en una taza. Mirando a su hijo le dijo:

¿”Querido qué ves”? “Zanahoria, huevos y café” fue la respuesta.

Lo hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Él lo hizo

y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara el huevo

y lo rompiera. Al sacarle la cáscara, observó que el huevo estaba

duro. Luego le pidió que probara el café. El sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.
Humildemente el hijo preguntó: “¿Qué

significa esto, Padre?” Él le explicó que los tres elementos habían

enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero que habían reaccionado de manera
diferente: La zanahoria llegó al

agua fuerte, dura, pero después de pasar por el agua hirviéndose

se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al

agua frágil. Su cáscara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua
hirviendo su interior se había endurecido.

Los granos de café, sin embargo, eran únicos. Después de estar


en agua hirviendo, habían cambiado al agua. Cuando la adversidad llega a tu puerta, ¿Cómo
respondes? ¿Cómo eres tú? ¿Eres

una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad

y el dolor te tocan, te vuelves débil, y pierdes tu fortaleza? ¿Eres

un huevo, que comienza con un corazón maleable? ¿Poseías un

espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, un

divorcio, o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te

ves igual, pero ¿Eres amargado y áspero, con un espíritu y un

corazón endurecido? ¿O eres granos de café? El café cambia al

agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua

llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. De

corazón, te deseo que intentes ser como el grano de café cuando

las cosas no vayan bien y puedas lograr que tu alrededor mejore.

Recuerda todo lo que te sucede en la vida es por alguna razón,

sólo necesitas descubrir su motivo y aprender de ello. Y si tienes

fe en Dios no hay mal que por bien no venga.

I. INTRODUCCIÓN

1. Las dos casas del sermón del monte, Mt 7:24-29

a) 24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace,

le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre

la roca. 25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y

golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca. 26 Pero
cualquiera que me oye estas palabras y

no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su

casa sobre la arena; 27 y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con
ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue

grande su ruina. 28 Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su


doctrina; 29 porque les enseñaba como quien

tiene autoridad, y no como los escribas.

II. LA HISTORIA DEPABLO CON SILAS,


HECH. 16:12-40

1. Todo comenzó en Filipos, una ciudad de Macedonia.

a) V12 y de allí a Filipos, que es la primera ciudad de la provincia de Macedonia, y una colonia;
y estuvimos en aquella ciudad

algunos días.

2. Mientras iban a la oración, encontraron a Lidia, que era

comerciante y Dios la alcanzó con el mensaje de salvación

de Pablo.

Hecer discipulos final 2012.indd 82

a) V13-15 Y un día de reposo salimos fuera de la puerta, junto al

río, donde solía hacerse la oración; y sentándonos, hablamos a las

mujeres que se habían reunido. 14 Entonces una mujer llamada

Lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba

a Dios, estaba oyendo; y el Señor abrió el corazón de ella para que

estuviese atenta a lo que Pablo decía. 15 Y cuando fue bautizada,

y su familia, nos rogó diciendo: Si habéis juzgado que yo sea fiel al

Señor, entrad en mi casa, y posad. Y nos obligó a quedarnos.

3. Pero mientras iban a la oración también le salió una muchacha endemoniada, que
molestaba a Pablo por muchos días.

a) V16-18a Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una muchacha
que tenía espíritu de adivinación,

la cual daba gran ganancia a sus amos, adivinando. 17 Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros,
daba voces, diciendo: Estos hombres

son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de

salvación. 18 Y esto lo hacía por muchos días;

b) En el mismo lugar de la oración se presentó Satanás. No te

sorprendas que en el mismo lugar donde vas a orar se manifieste el enemigo. La oración no es
para espantar a los demonios,

es para pelear y vencerlos.

c) Mencionar la experiencia de Cristo y su ayuno.

4. Hasta que Pablo tomó control de la situación y reprende

al demonio, lo echa fuera, pero eso desato un alboroto (lío), Los

amos de esta muchacha que supuestamente les traía ganancias, se vieron sin el negocio.
a) V18b-21 mas desagradando a Pablo, éste se volvió y dijo al

espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella.

Y salió en aquella misma hora. 19 Pero viendo sus amos que había

salido la esperanza de su ganancia, prendieron a Pablo y a Silas,

y los trajeron al foro, ante las autoridades; 20 y presentándolos a

los magistrados, dijeron: Estos hombres, siendo judíos, alborotan

nuestra ciudad, 21 y enseñan costumbres que no nos es lícito recibir ni hacer, pues somos
romanos.

b) Este texto nos enseña que hay negocios que están siendo

alimentados por demonios. A veces no nos damos cuenta de

estas cosas, pero allí están enfrente de nuestros ojos. Usemos

el nombre, cuando haya alguien que nos quiera hacer daño en

nuestro negocio o empleo.

5. Aquí se muestra que son Pablo y Silas….

a) V22-40 Y se agolpó el pueblo contra ellos; y los magistrados,

rasgándoles las ropas, ordenaron azotarles con varas. 23 Después

de haberles azotado mucho, los echaron en la cárcel, mandando

al carcelero que los guardase con seguridad. 24 El cual, recibido

este mandato, los metió en el calabozo de más adentro, y les aseguró los pies en el cepo. 25
Pero a medianoche, orando Pablo y

Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían. 26 Entonces

sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se
sacudían; y al instante se abrieron todas las

puertas, y las cadenas de todos se soltaron.

6. Nuestro carácter cristiano es lo que brindara la salvación

para los perdidos.

a) V27-34 Despertando el carcelero, y viendo abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y
se iba a matar, pensando que los

presos habían huido. 28 Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No

te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí. 29 El entonces, pidiendo luz, se precipitó
adentro, y temblando, se postró a los pies

de Pablo y de Silas; 30 y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo

hacer para ser salvo? 31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y


serás salvo, tú y tu casa. 32 Y le hablaron la palabra del Señor a él y

a todos los que estaban en su casa. 33 Y él, tomándolos en aquella

misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos. 34
Y llevándolos a su casa, les puso la

mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios.

7. Cuando uno mantiene su carácter cristiano, hasta las autoridades lo respetan

a) V35-39 Cuando fue de día, los magistrados enviaron alguaciles a decir: Suelta a aquellos
hombres. 36 Y el carcelero hizo saber

estas palabras a Pablo: Los magistrados han mandado a decir que

se os suelte; así que ahora salid, y marchaos en paz. 37 Pero Pablo

les dijo: Después de azotarnos públicamente sin sentencia judicial,

siendo ciudadanos romanos, nos echaron en la cárcel, ¿y ahora

nos echan encubiertamente? No, por cierto, sino vengan ellos mismos a sacarnos. 38 Y los
alguaciles hicieron saber estas palabras

a los magistrados, los cuales tuvieron miedo al oír que eran romanos. Son siervos del Dios
Altísimo, quienes os anuncian el camino

de salvación. 39 Y viniendo, les rogaron; y sacándolos, les pidieron

que salieran de la ciudad.

8. Realmente eran como el grano de café, porque después

de haber pasado un día en la cárcel y recibir golpes, fueron a la

casa de Lidia a consolar a los hermanos

a) V40 Entonces, saliendo de la cárcel, entraron en casa de Lidia, y habiendo visto a los
hermanos, los consolaron, y se fueron.

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