Materia: Ética y valores en la Educación Superior 2023

Docente: Revollo, María Fernanda Fecha de 1turno 2 turno

Entrega
Estudiante: Apellido, nombre 20/06/2023 X
Ilaluque Huanca Anahi Madeleine
Título Patrocinio de caso con falso testimonio
Pregunta ¿Qué implicancias tiene el involucramiento
elegida del abogado en un caso con falso
testimonio?
Respuesta o La idea central que se propone es…
tesis Anahi, Abogada debe decidir si seguir
patrocinando un caso de violencia sexual
que se encuentra con sentencia a favor de
la víctima pero que fue fundamentado en
una mentira sin ella saberlo previamente.
Palabras clave Patrocinio, Involucramiento, falso,
testimonio, sentencia.
Extensión: Mínimo 3 páginas, máximo 6.
Arial 12, interlineado 1,0)
 PATROCINIO DE CASO CON FALSO TESTIMONIO

Anahi Ilaluque

Introducción
El patrocinio jurídico es un contrato solemne por el cual las partes o interesados
en un asunto, encomiendan a un abogado la defensa de sus derechos antes los
Tribunales de Justicia. (Diario Constitucional, 2023)

En este entendido se comprende que un/a abogado/a desarrollará las funciones

de patrocinar jurídicamente a un sujeto ya sea víctima o denunciado, basándose
en los lineamientos acordados entre ambas partes. Sin embargo, de manera
implícita existen ciertos principios que el/la abogado/a debe seguir durante el
proceso, conforme a lo estipulado por la Ley del ejercicio de la abogacía del 09 de
julio de 2013, que nos establece en su Artículo 4:

 Fidelidad. El ejercicio de la abogacía se rige por la obligación de no

defraudar la confianza del patrocinado ni defender intereses en conflicto
con los de aquél.
 Lealtad. Por la que debe defender los intereses de la persona patrocinada,
así como ser veraz, sin crear falsas expectativas ni magnificar las
dificultades.
 Confidencialidad. La abogada o el abogado debe guardar para sí las
revelaciones de la persona patrocinada.

Haciendo hincapié en el principio de confidencialidad, la norma estipula que el/la

abogado/a debe mantener en reserva las revelaciones de la persona patrocinada y
al mismo tiempo que el patrocinado, habiendo vertido su confianza en su
patrocinante, deben mantener entre sí el principio de lealtad y fidelidad, ya que está
defendiendo los derechos del patrocinado.

Desarrollo
Una vez que especificamos los principios básicos de todo buen abogado en el
ejercicio de su profesión es que, planteamos el dilema ético, donde hace 1 año
(febrero de 2022) llegó a las puertas de la oficina de la Abogada Anahí Ilaluque, una
víctima con las iniciales A.H.C.T, de 24 años de edad, quien presentó un relato
fáctico de hechos refiriendo que fue víctima de un hecho de violación por parte del
señor Juan Pérez, dicho relato fue respaldado con ciertas pruebas que presentó la
misma, como ser informes psicológicos, informe médico forense, y la declaración de
testigos del hecho, es en tal sentido que solicitando el apoyo de la abogada para
realizar el patrocinio respectivo, la misma decidió aceptarlo y continuar con los actos
correspondientes.

El proceso fue desarrollado con total normalidad, sin observaciones por parte del
fiscal, ni del investigador y tampoco del juez. Sin embargo, la parte contraria
fundamentaba fuertemente su inocencia y la no implicancia del hecho,
argumentando que la joven A.H.C.T. presentó la denuncia con la finalidad de
“vengarse” del agresor debido a la culminación de su relación sentimental, dichas
declaraciones fueron declaradas infundadas y descartadas por el fiscal, como por el
juez, se procedió con el avance del proceso, llegando a colectar diversas pruebas
de distintos profesionales expertos en el área.

Llegó el día de la audiencia de juicio oral, donde las pruebas fueron fundamentadas,
con la adecuada intervención de la abogada Anahi Ilaluque, y por la parte contraria,
el acusado mantenía una firme posición de inocencia, argumentando que al solo
tener 2 testigos del hecho y sin tener la suficiente capacidad económica para un
abogado particular, se sometió a la defensa de un abogado de oficio. La audiencia
culminó con el dictamen de la sentencia que estableció una condena de 20 años
para el acusado, mismo solicitó apelar en el tiempo pertinente, pero su apelación fue
denegada y se confirmó la sentencia por 20 años de presidio en la cárcel de
Chonchocoro.

Pasada la audiencia, la joven A.H.C.T, se contacta con la abogada para agradecerle

su dedicación e intervención en el proceso, y faltando únicamente el último paso
para ejecutar la sentencia, la joven decide confesar a la abogada que el hecho fue
inexistente, las valoraciones psicológicas como médicas fueron pagadas y algunas
se solicitaron como favor personal en virtud de que fueran beneficiosas para la
víctima. Es entonces que la abogada se encontró con una encrucijada ética, dado
que por los principios de confidencialidad, fidelidad y lealtad no puede difundir lo
revelado por su patrocinada, y al mismo tiempo los hechos revelados conllevan el
encarcelar una persona inocente, teniendo conocimiento de que lo ocurrido no
existió y sí se trató de una venganza personal en favor de la supuesta víctima tal
como lo refería el supuesto agresor durante todo este tiempo, toda vez que el hecho
ya fue probado y contaba con sentencia y solamente quedaba el último paso: la
ejecución de sentencia.

Es en este entendido que la encrucijada se complica aún más porque la joven

A.H.C.T, refiere que solamente reveló el hecho a la abogada y que, si la misma
decide difundirlo, la joven también tomará represalias en contra de la integridad y la
familia de la abogada, puesto que la joven cuenta con una gran red de contactos
que obtuvo mientras trabajaba en el gobierno.

Conclusión
Toda vez que los hechos conllevan amenazar la integridad de la abogada, no
solamente ética sino física y psicológica, se plantea la encrucijada en divulgar los
hechos revelados por la joven y transgredir los principios de confidencialidad,
fidelidad y lealtad, al mismo tiempo que poner en riesgo su salud y entorno. Por otra
parte existe fuertemente la situación de no apoyar e incentivar un proceso donde
una persona inocente será encarcelada durante 20 años, a pesar de que ya tenga
una sentencia condenatoria y solo falte un paso para ejecutar el proceso.

De la misma manera, el Código de Procedimiento Penal Boliviano establece en su

Artículo 286º que tendrán obligación de denunciar los delitos de acción pública:
 1. Los funcionarios y empleados públicos que conozcan el hecho en ejercicio
de sus funciones; y,

2. Los médicos, farmacéuticos, enfermeros y demás personas que ejerzan

cualquier rama de las ciencias médicas, siempre que conozcan el hecho en
el ejercicio de su profesión u oficio.

La denuncia dejará de ser obligatoria si diera lugar a la persecución penal propia,

del cónyuge, conviviente o pariente dentro del cuarto grado de consanguinidad o por
adopción, o segundo de afinidad, o cuando los hechos fueron conocidos bajo
secreto profesional.

Todo ello es analizado fuertemente por la abogada, sin embargo, se llega a la

conclusión de que, las/os abogadas/os en el Estado Plurinacional de Bolivia deben
ser ejemplo de verdadera representación de la justicia, no solamente ante el ojo
público sino en el ejercer de funciones diarias. Dado lo mencionado, la abogada
decide dar a conocer al juez lo revelado por la supuesta víctima, y en tal sentido
afrontar las consecuencias, debido a que estaría en juego la libertad del acusado.
Dicha declaración fue escuchada por el juez quien dispuso tener una reunión con el
fiscal antes de consumar la ejecución de sentencia y se planteó un recurso de
casación que reaperturó el caso y con ello la revisión de dicha sentencia.

Si bien la joven A.H.C.T. tuvo conocimiento de esta revelación, la abogada decidió

tomar previsiones con las debidas medidas de protección dado que lo revelado puso
en riesgo su vida y la de su familia. Existió cierta dilación en los actuados pero dado
que el caso se reaperturó, se brindó la oportunidad al supuesto agresor, de que
pueda defenderse en libertad, tomando la responsabilidad de obtener el apoyo de
un abogado particular. El caso fue viralizado por redes sociales por lo que la red de
apoyo tanto de la abogada como del supuesto agresor se incrementó y se continuó
con la defensa.

Finalmente, puedo argumentar que se tomó la decisión de revelar el caso

vulnerando los principios de confidencialidad, legalidad y fidelidad, explicando esta
decisión con un ejemplo simple, en la rama de la psicología se establece el principio
de secreto profesional, salvo que la vida de la víctima esté en peligro, en esos casos
puede vulnerarse ese derecho. Tomando este planteamiento decidí que la mejor
opción es revelar el secreto incluso a pesar de que mi integridad se encuentre en
peligro, toda vez que el cargo de conciencia de encarcelar a una persona inocente,
es algo impagable con lo que una persona no puede vivir tranquilo, y al mismo
tiempo, confiar en que la buena fe es un respaldo de manera conjunta con la
veracidad, la verdad siempre sale a la luz y aun mas cuando se pretende dañar a las
personas.