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Un mar conflictos

En Arequipa el 14 de marzo de 2014 Natalia una chica de cabello


castaño y mediano, cejas gruesas y alargadas, ojos grandes y negros
como las noche, nariz delgada, sus labios eran delgados y carnosos.
Llevaba puesto unos lentes grandes y feos que ocultaban sus
hermosos ojos, vestía una sudadera roja y ancha, unos pantalones
jean apretados, unas zapatillas blancas. Ella era muy torpe desde que
nació teniendo incontables experiencias que jamás olvidara una de
ellas por ejemplo un día ella viaja con su madre para festejar a la
virgen de Chapí, le encantaba explorar y aventurarse de pequeña y
sin darse cuenta camino más de lo debido y termino perdiéndose, se
volteó y solo vio el cielo nublado, el piso era de piedra habían
arboles alrededor de ella, se escuchaban piar a los pájaros y la bulla
que las personas ocasionaban. Se acercó a un puesto de comida y
paso por ahí intentando bajar para poder encontrar a su madre pero
un agradable anciano calvo la agarro antes de que tire advirtiéndole
en voz no muy baja.
-“¡Niña tonta, no te tires!”
Natalia se asustó y se puso roja por el fuerte grito del anciano,
haciéndole caso al viejo, y se quedó esperando con la señora del
puesto de comida en espera de que alguien se diera cuenta de que
ella no estaba y la vinieran a buscar. Al final la encontraron pero por
aquella experiencia que tuvo se volvió tímida y poco callada.
Siempre recordara ese acontecimiento ya que tuvo miedo que la
dejaran atrás y no soportaba el pensar de alejarse de su madre y su
querido hermano.
***********
Mientras recordaba esos hechos también recordó un vergonzoso
momento que paso ayer y empezó a usar esos horribles lentes debido
a que en los primeros días de clases, accidentalmente en el
laboratorio le prendió fuego al cabello de una de sus compañeras,
por suerte ella reacciono rápido y le hecho agua pero por su culpa la
chica tuvo que cortarse el cabello ya que el cabello estaba dañado.
Para su desdicha toda la escuela se enteró de aquel suceso.
-“Porque solo me suceden estas situaciones vergonzosas, a
mi”
Estaba acostada en su cama mientras recordaba esos incidentes,
cuando de repente se escuchó una voz no muy baja.
-“¡Natalia Elizabeth López Gutiérrez, baja
inmediatamente!”
Era su madre que recién había llegado con dos personas a su lado,
Natalia salió rápidamente de su habitación reconociendo a solo uno
de ellos, poniéndose nerviosa hasta el tope.
Al parecer habían citado a su madre a la escuela, y se había enterado
de todo lo sucedido. Las dos personas que tenía a lado eran Alicia la
chica del cabello quemado que estaba con los ojos rojos de tanto que
había llorado y su madre que tenía fruncido el ceño y de tan solo ver
su cara le dio escalofríos.
-“Me puedes explicar, porque le quemaste el cabello a tu
compañera”
Ella estaba intentando explicar las cosas pero antes de que dijera una
palabra más, fue interrumpida por la madre de Alicia quejándose e
insultando a Natalia.
-“¡Estúpida mocosa! Si esto hubiera sido peor hubieras
quemado a mi hija, habrías dejado una cicatriz enorme”
Natalia sentía mucho arrepentimiento y a la vez miedo no pensó que
las cosas se tornarían así, y solo dejo que le regañara y le insultara
logrando desahogarse con ella. Cuando se fueron, su madrastra le
dijo que se fuera inmediatamente a su habitación.
Pasaron unas horas y la noche llego, observando la bella luna que
brillaba en la oscuridad, de repente se escuchó el sonido de una
puerta abriéndose, el padre de Natalia llego su padre después de un
día cansando de trabajo de acostó en el sofá y prendió la televisión
con el control que estaba en la mesa. La madrastra con el nombre de
Raisha, le conto todo lo sucedido de esa tarde a su padre,
enfureciéndolo y llamando a Natalia.
Natalia salió de su habitación con la cabeza cabizbaja, bajando las
escaleras llegando enfrente de su padre. Fue regañada por segunda
vez, ella solo soporto los gritos y miro a su madrastra que tenía una
cara de felicidad como si le dijera con la mirada.
-“Te lo mereces”
Justo en ese momento apareció su hermano protegiéndola de los
gritos de su padre, sintió un alivio en su interior, su padre se
excedido con sus palabra, hiriendo el corazón de Natalia.
Tuvieron una discusión fuerte entre su padre y su hermano, ella se
culpó por todo lo que paso, absteniéndose a detenerlos y dejaran de
gritarse entre ellos. La noche fue larga, no pudo dormir con todo ese
alboroto, hasta que un momento se paró todo ese bullicio y por fin
conciliar el sueño.
Al día siguiente se despertó como costumbre, se cambió para ir a la
escuela, dudaba si bajar para ir directamente a la escuela después del
gran alboroto de ayer. Decidió salir sin más y no había nadie en
casa estaba todo tranquilo, así que decidió no ir a la escuela y
saltársela después de todo solo era la fiesta de bienvenida. Ella se
dirigió al parque y sentó en un banco y se preguntaba así misma si
estaba bien saltarse un día a la escuela. Ese día había salido con un
polo de color blanco acompañado de un pantalón de buzo y unos
zapatos negros. La banca desafortunadamente estaba rota y se calló,
las personas que estaban alrededor rieron disimuladamente haciendo
que el rostro de la joven se pusiera roja. Natalia se levantó
velozmente y corrió lo más rápido que pudo a la vez que ocultaba su
rostro con una mano. Fue tan deprisa que no noto a que dirección
iba, y al parecer estaba enfrente de su colegio.
-“¿A esto es a lo que se le llama buena suerte?”
Estaba a punto de alejarse del lugar, cuando un profesor que pasaba
la reconoció.
-“Señorita, entre rápido falta 1 minuto para que las
puertas se cierren”
Fue forzada a entrar sin más, camino lento pero la profesora no le
quitaba los ojos de encima como si no quisiera que escape del lugar,
no tuvo más opción que resignarse entrando al salón de clases. El
salón tenía ventanas grandes donde entraban los rayos del sol que
cegó su vista inmediatamente que entro, había una puerta en la
esquina donde llevaba a un balcón, los escritorios alineados con 5
columnas y 7 filas. Su cara mostraba decepción, tuvo que toparse
precisamente con un profesor y no la dejaría salir a pesar de los
trucos que hiciera. Ella escucho a lo lejos como una dijo que toda la
escuela se enteró de todo lo que sucedió.
-“Quiero que la tierra me trague”
Después de la fiesta ella volvió a casa, estaba cansada y al entrar a
su casa vio cómo su hermano tenía un moretón en los ojos y su labio
estaba roto ella dejo tiro sus cosas al piso de inmediato y se dirigió a
donde estaba su hermano.
-“¿Porque tienes esas heridas en tu rostro?”
Él le respondió:
-“No es nada, ve a comer Natalia”
Ella

Era tímida y a veces lenta para comprender algunas cosas. Se


encontraba en una cabina de internet buscando información
para su examen bimestral de la próxima, como si no fuera
suficiente que no pudiera hacer la tarea en casa, a

Desde que nací no tuve la mejor bienvenida al mundo,


mientras crecía siempre estuve al filo de la muerte, por
razones accidentales. Hasta llegue a pensar que el mundo
estaba contra mí o me habían hecho alguna maldición. Me
puse a investigar en una cabina de internet y para mi mala
suerte el dinero que tenia ahorrado lo había utilizado para
materiales de trabajo que tenia en ese momento. Eran
vacaciones de verano tenia mejores calificaciones de la
clase.

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