COMO ENSEÑAR UN ESTUDIO BÍBLICO EN CASA

COMO ENSEÑAR UN ESTUDIO BÍBLICO EN CASA

INTRODUCCIÓN:
Existen varias maneras para presentar el Evangelio de Jesucristo, y esta mañana vamos a estudiar
algunas cosas que pueden ayudarles cuando están enseñando un estudio Bíblico en casa.

Hay cinco cosas básicas que vamos a considerar. Si tú puedes aprender estos puntos y ponerlos
en práctica, vas a tener más éxito en tu obra evangelística.

I. EL AMBIENTE – Es bien importante tener un ambiente correcto para enseñar la Palabra de

Dios. Si el ambiente no es adecuado y controlado, tú vas a perder tu tiempo procurando
enseñar el estudio. Sin embargo, tú puedes hacer algunas cosas para mejor el ambiente.
A. Crea un ambiente cómodo. Cuando llegues a la casa es bueno notar algo en la casa que
puedes alabar.
1. Por ejemplo:
(a) El color de la pintura
(b) Los muebles
(c) Los hijos
(d) El perro
(e) Una foto de la familia.
2. Puedes utilizar algo familiar en la casa para crear un ambiente amable.
B. Usa una mesa si está disponible. Una mesa ayuda para crear un ambiente informal, y
esto es el escenario que quieres para el estudio Bíblico. También esto ayuda con los
gráficos si utilizas el estudio Bíblico La Palabra de Dios Expuesta con Claridad.
C. Trae una toalla u otro pedazo de tela. Si estás enseñando un estudio que utiliza los
gráficos, es bueno poner una toalla en la mesa para que los gráficos no se resbalen.
D. Elimina las distracciones. Esto es muy importante porque el estudiante no puede captar
mucho del estudio si algo más está llamado su atención. Por lo general no funciona
solamente ignorar la distracción. Es mejor que reconozcas la distracción y que hagas algo
para removerla o reducirla. En una casa existen varias posibles distracciones.
1. Televisor – pide que se apague.
2. Radio – pide que se apague.
3. Teléfono – pide que se apague si es celular.
4. Niños – el otro miembro del equipo evangelístico puede cuidarlos. Si dos personas
van para dar es estudio, solamente una persona debería enseñar la lección. Entonces,
el otro puede ayudar de otra forma.
5. Mascotas – si los miembros de la familia no pueden controlarlo, el otro miembro del
equipo puede procura hacerlo.
6. Otro adulto – a veces hay otros miembros de la familia que no quieren estudiar, y a
menudo ellos no respetan el deseo de los miembros de la familia que quieren estudiar.
Ellos son la distracción más difícil controlar.
E. Habla claramente en voz alta. Si el estudiante no puede escucharte o entenderte, estás
perdiendo tu tiempo e insultando al estudiante.
F. Ora antes de comenzar. Esto ayuda a crear un ambiente serio para la lección. También
ofrece una oportunidad para escuchar las necesidades del estudiante y presentarlas al
Señor.

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G. Ten las cosas que vas a necesitar. Cuando no tienes todo lo que necesitas para enseñar
el estudio, esto automáticamente produce tensión en tu mente y en el estudiante.
Entonces, piensa en el estudio antes de que salgas de tu casa, procurando considerar
todas las cosas que vas a necesitar.
II. TU ACTITUD – la actitud del maestro es muy importante en el estudio. Si él manifiesta una
actitud brusca, el estudiante va a alistar sus defensas. O si el profesor trata de ser un
sabelotodo, el estudiante va a ser repulsado.
A. Sé humilde – es difícil pelear con un humilde.
B. Sé amable – una sonrisa puede decir mucho al estudiante.
C. Está agradecido – si el estudiante te ofrece algo para tomar o comer, acéptalo con
gratitud si no estás en ayuno y díselo.
D. Sé amigo – un propósito del estudio Bíblico es dar al maestro tiempo para formar una
amistad con el estudiante. Alguien dijo, “No puedes ganar a otra persona por Cristo,
hasta que le ganes para ti mismo.” Por medio de la amistad tú vas a ganar la confianza
del estudiante, y él tiene que confiar en ti para que acepte tu mensaje.
E. Sé honesto – a veces en el estudio el estudiante hace preguntas difíciles. Si tú no sabes la
respuesta correcta, dile que necesitas tiempo para investigar la Palabra de Dios y que le
responderías en la próxima lección. No le digas algo tonto solamente para lavar la cara.
F. Sé sensible al Espíritu de Dios – Dios va a tocar al estudiante por medio de Su Palabra,
entonces el maestro debe ser sensible al Espíritu de Dios. Cuando Dio le toque, el
maestro puede saber el momento y parar la lección para orar. Hay cuatro señales que
necesitas saber.
1. Entusiasmo porque Dios está revelando Su Palabra a la persona.
2. Brillo de ojos porque el estudiante puede ver por primera vez algo en la Biblia.
3. Un rostro serio porque el estudiante está dándose cuenta que debe tomar una decisión.
4. Lagrimas.
G. Recuerda que la oración y preparación personal antes del estudio ayudan mucho en
la manifestación de la actitud correcta y en la sensibilidad espiritual. Si tú puedes ser
sensible y manejar la situación con mucho esmero, es posible que el estudiante reciba el
Espíritu Santo en casa.
III. TU APARIENCIA – el maestro debe parecerse a un maestro, y la apariencia ayuda mucho
con la percepción correcta por parte del estudiante. Es difícil respetar a una persona que no
está bien arreglada. El estudiante va a tomarte más serio si tienes una apariencia profesional.
También tú estás representando el Rey de reyes y Su gloriosa iglesia. La única excepción es
cuando estás utilizando el deporte u otra actividad recreativa para incentivar al estudiante
participar en el estudio Bíblico.
A. Lleva ropa casual. Puesto que tú quieres crear un ambiente informal, necesitas llevar
ropa buena pero casual.
B. Lleva ropa limpia. La ropa sucia huele, y nadie quiere escuchar la lección de alguien
que huele mal.
C. Dúchate. El agua y jaboncillo no cuestan mucho, pero valen mucho.
D. Usa perfume.
E. Cepilla los dientes. Esto va a ayudarte mucho con tu aliento.
F. Péinate el cabello.
IV. LA LECCIÓN – la clave es preparación, preparación, y preparación. Y esto se lleva a cabo
en tres áreas principales: en el estudio, la oración, y la preparación física. Pero después de
prepararte, existen otras cosas que tú puedes hacer para ayudar con la lección.

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A. Llega al tiempo designado para ensañar. Yo sé que estamos en Perú, pero no hay
excusa para atrasarse en todo momento. Si el estudiante se atrasa, tienes que aceptar eso.
Sin embargo, tú debes estar en el lugar designado en la hora designada. Esto muestra que
tú eres una persona que guarda su palabra y esta impresión es muy importante. Si
siempre llegas tarde, el estudiante va a saber que no puede confiar en tu palabra, y esto va
a afectar su actitud en el estudio Bíblico.
B. No enseñas por más de una hora a menos que la persona tenga mucho interés. Si el
estudiante tiene muchas preguntas, esto es bueno porque muestra interés genuino. No
obstante, esto va a utilizar mucho del tiempo del estudio. Entonces, si se extiende mucho
el estudio, es mejor limitar el estudio actual y establecer otra cita donde puedan seguir
estudiando. Recuerden: si el estudiante se cansa de mente, no va a captar mucho del
estudio.
C. Permite que el estudiante lea los versículos. A veces la Biblia manifiesta más de su
poder espiritual en la vida del lector cuando él escucha las Palabras inspiradas por Dios
salir de su propia boca. Sin embargo, muchas personas no pueden leer bien. En este caso
el maestro necesita leer, pero solamente después de haberle ayudado al estudiante a
encontrar el pasaje pertinente.
D. Lleva los bosquejos. Es bueno utilizar los bosquejos para los estudios de las lecciones y
los folletos para los estudios cortos. De esta manera el estudiante va a tener materia que
puede seguir estudiando después del encuentro.
E. Permite que el estudiante te haga preguntas. Las preguntas muestran interés por parte
del estudiante. Entonces, si ellos te hacen preguntas esto es bueno. Sin embargo, ten
cuidado.
1. A veces las personas utilizan las preguntas en un intento de atraparte. Cuando
esto ocurre, la persona por lo general solamente quiere discutir. No te rindas a esta
tentación. La Biblia es para estudiar y obedecer; no es para discutir.
2. También ellos pueden hacerte una pregunta cuando quiere cambiar el tema. Esto
ocurre a veces cuando ellos sienten la convicción de Dios en su corazón.
3. También ellos pueden hacerte preguntas porque quieren ocupar tu tiempo. No
tienen interés genuino en estudiar la Biblia, sino quieren que alguien les escuche.
Cuando alguien les escucha, ellos se sienten más importantes.
F. Responde honestamente a las preguntas. Si tú no sabes responder a una pregunta,
debes decir esto. Y si tú respondes honestamente a la pregunta y después averigua que la
respuesta era incorrecta, necesitas corregir el error en la próxima lección. Debes hacer
todo lo posible para proteger tu integridad y credibilidad.
G. Cuida bien el manual de maestro, el libro de gráficos, y bosquejos. La apariencia de
los materiales es importante. No quiere entrar en una casa para enseñar un estudio
Bíblico con una carta de gráficos manchados, bosquejos rotos y sucios, y una Biblia en
mal estado. Sé profesional.
H. Si tú no puedes ir a enseñar a causa de algo inesperado, comunícate con el
estudiante. Esto no nada más que la cortesía común.
V. LA SALIDA – la manera en que terminas la lección es importante también. Tú quieres salir
dejando al estudiante con mucha expectativa en cuanto a la próxima lección. No quieres
dejarle pensando, “¡Gracias al Señor, por fin salió!”
A. Sal pronto después de terminar la lección. Tú vas a enseñar estudios Bíblicos en las
casas donde hay familias. Debes considerar su tiempo y trabajo.

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B. Establece el día y la hora para la próxima lección. Debes asegurarte que el estudiante
entienda claramente cuando y donde será la próxima cita. Si tú necesitas escribir la
información en un papelito, hazlo.
C. Agradece a la persona por la oportunidad de enseñar la Palabra de Dios en su casa.
El estudiante necesita entender que tú sientes honrado por tener el privilegio de enseñar
la Palabra de Dios en su casa.

Utilizando estos puntos tú puedes ganar un alma.