Fiestas y tradiciones de Chiapas que impactan en México

Algo muy distintivo de las festividades o fiestas y tradiciones de Chiapas

es la representación cultural y costumbres que no encontrarás en ningún
otro lugar. Chiapas es el estado con mayor diversidad cultural de todo
México en tema de comunidades indígenas, con unos paisajes preciosos,
una arquitectura única, comida que te dejará siempre queriendo más, y
vestimentas que captan la atención de cualquier persona durante sus
ferias tradicionales. Esto es debido a que Chiapas tiene la población
indígena más extensa de la República Mexicana y unas raíces que aún
prevalecen

Se acostumbra llevar en procesión ofrendas a la virgen y todas las noches

se celebran festivales con baile, cantos, música y poesía. El día 12 de
diciembre hay misas, cohetes, música de viento y gran ambiente en el
templo de la villita y sus alrededores. A veces se presenta la Danza del
Caballito.

Algunas comidas tradicionales son:

 Tamal de bola: En Chiapas se elabora una gran variedad de

tamales y uno de los más populares es el de bola, preparado con
dos masas de maíz de diferente textura, lo que les da un
particular encanto, junto con el chile Simojovel, símbolo
culinario del pueblo chiapaneco 
 Sopa de fiesta:  una buena sopa de fiesta debe tener pan coleto,
pasas, huevos cocidos en rodajas, plátano macho y ejotes. Para
condimentar y colorear se utiliza azafrán, orégano y tomillo.
 Huevos ala chiapaneca: Aparte de los huevos, los ingredientes
principales de la receta son frijoles de olla caldosos y tostadas.
Las tostadas quebradas en trocitos se fríen junto con los huevos
y se agregan los frijoles de olla. Los acompañantes
acostumbrados son rodajas de queso y de aguacate, crema,
rajas de chile y cebolla picada.
 Chimbos: Es un panecillo de harina que se hornea y luego se le
agrega huevo batido. Cuando los panecillos se han enfriado se
les pone miel y canela. Una dulce exquisitez chiapaneca para
cerrar una gran comida
 Mole: El mole chiapaneco se hace con chiles anchos
desvenados y sin semillas para que piquen menos, los cuales se
remojan en un caldo caliente de gallina o guajolote, lo que les da
un rico sabor.