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RIESGOS ERGONOMETRICOS

TENOSINOVITIS

La tenosinovitis de De Quervain es una afección dolorosa que afecta los tendones de


la muñeca del lado del pulgar. Si tienes tenosinovitis de De Quervain, probablemente
sientas dolor al girar la muñeca, agarrar cualquier cosa o cerrar el puño.
Aunque no se conoce la causa exacta de la tenosinovitis de De Quervain, cualquier
actividad que dependa de movimientos repetitivos de la mano o la muñeca, como trabajar
en el jardín, jugar al golf, practicar deportes con raqueta o levantar a tu bebé, puede
empeorarla.
Síntomas
Los síntomas de la tenosinovitis de De Quervain comprenden los siguientes:
-Dolor cerca de la base del pulgar. --Inflamación cerca de la base del pulgar --Dificultad
para mover el pulgar y la muñeca al hacer algo que implica asir o pellizcar --Sensación
de «agujas y alfileres» o de que el pulgar «se traba» al moverlo
Si la afección continúa demasiado tiempo sin recibir tratamiento, el dolor puede
extenderse aun más en el pulgar, volver al antebrazo o ambas cosas. Pellizcar, asir y
otros movimientos con el pulgar y la muñeca agravan el dolor.

Cuándo consultar al médico

Consulta con el médico si continúas teniendo problemas con el dolor o con el


funcionamiento y si ya has intentado lo siguiente:
No usar el pulgar afectado --Aplicar frío a la zona afectada --Usar medicamentos
antiinflamatorios no esteroides, como ibuprofeno (Advil, Motrin IB u otros) y naproxeno
(Aleve)

Causas

La sobrecarga crónica de la muñeca comúnmente se asocia con la tenosinovitis de De


Quervain.

Los tendones son estructuras similares a cuerdas que unen los músculos a los huesos.
Cuando agarras, sujetas, aprietas, pellizcas o retuerces algo con las manos, los dos
tendones de la muñeca y la parte inferior del pulgar normalmente se deslizan de forma
fluida a través del pequeño túnel que los conecta a la base del pulgar. Repetir un
movimiento en particular día a día puede irritar la vaina que recubre los dos tendones y
provocar engrosamiento e hinchazón que restringen su movimiento.

Otras causas de la tenosinovitis de De Quervain pueden ser las siguientes:

 Lesiones directas en la muñeca o el tendón; el tejido cicatricial puede restringir el


movimiento de los tendones

 Artritis inflamatorias, como la artritis reumatoide


Factores de riesgo

Los factores de riesgo de la tenosinovitis de De Quervain son los siguientes:

 Edad. Si tienes entre 30 y 50 años, presentas mayor riesgo de padecer


tenosinovitis de Quervain que otros grupos etarios, entre ellos, los niños.

 Sexo. La afección es más frecuente en las mujeres.

 Estar embarazada. La afección puede estar asociada con el embarazo.

 Cuidado del bebé. Levantar a tu hijo reiteradamente implica usar los pulgares como
apalancamiento y también puede estar asociado a la afección.

 Empleos o pasatiempos que supongan movimientos repetitivos de la mano y de la


muñeca. Estos pueden contribuir a la aparición de la tenosinovitis de De Quervain.

Complicaciones

Si se deja sin tratar la tenosinovitis de De Quervain, esto podría dificultar el uso adecuado
de las manos y de las muñecas, así como también podría limitar la amplitud de
movimiento de las muñecas.

BURSITIS

La bursitis es un trastorno doloroso que afecta las pequeñas bolsas rellenas de


líquido (bolsas sinoviales) que proporcionan amortiguación a los huesos, tendones y
músculos alrededor de las articulaciones. La bursitis ocurre cuando estas bolsas se
inflaman
La bursitis ocurre con más frecuencia en el hombro, el codo y la cadera. Pero también
ocurre alrededor de la rodilla, el talón y la base del dedo gordo del pie. La bursitis muchas
veces aparece en articulaciones que realizan movimientos repetitivos de forma frecuente.
Síntomas
Si tienes bursitis, la articulación afectada puede: -
Doler o sentirse rígida - Doler más cuando la mueves o la presionas -Verse hinchada y
enrojecida
Cuándo consultar al médico
Consulta con el médico si presentas: -Dolor incapacitante en las articulaciones -
Incapacidad repentina para mover una articulación - Hinchazón excesiva, enrojecimiento,
hematomas o una erupción cutánea en la zona afectada - Dolor agudo o punzante,
especialmente cuando haces ejercicio o te exiges físicamente – Fiebre

Factores de riesgo

Cualquier persona puede padecer bursitis, pero ciertos factores pueden aumentar el
riesgo:
Edad.  La bursitis se hace más frecuente con la eda o pasatiempos. El riesgo de sufrir
bursitis aumenta si tu trabajo o pasatiempo requiere movimientos repetidos o presión en
una bolsa sinovial determinada. Algunos ejemplos son poner alfombras, instalar baldosas
o azulejos, hacer tareas de jardinería, pintar y tocar un instrumento musical.
Otras afecciones. Ciertas enfermedades y trastornos generalizados, como la artritis
reumatoide, la gota y la diabetes, aumentan el riesgo de padecer bursitis. Tener
sobrepeso puede aumentar el riesgo de manifestar bursitis de cadera y rodilla.

Prevención

Si bien no todos los tipos de bursitis pueden prevenirse, puedes reducir el riesgo y la
gravedad de las exacerbaciones al cambiar la forma en la que realizas ciertas actividades.
Por ejemplo:

 Utilizar rodilleras. Utiliza algún tipo de almohadilla para reducir la presión en las


rodillas si tu trabajo o pasatiempo requiere que pases mucho tiempo arrodillado.

 Levantar objetos de forma correcta. Cuando levantes algo, dobla las rodillas. Si


no doblas las rodillas, harás más esfuerzo con las bolsas sinoviales de las caderas.

 Poner sobre ruedas y empujar las cargas pesadas. Al llevar cargas pesadas
haces más esfuerzo con las bolsas sinoviales de los hombros. En su lugar, utiliza
una carretilla o un carrito con ruedas.

 Tomar descansos frecuentes. Cuando hagas tareas repetitivas, altérnalas con un


descanso u otras actividades.

 Mantener un peso saludable. Tener sobrepeso provoca más esfuerzo en tus


articulaciones.

 Hacer ejercicio. Fortalecer los músculos ayuda a proteger la articulación afectada.

 Entrar en calor y estirar antes de actividades extenuantes para proteger de


lesiones a las articulaciones.
EPICONDILITIS

El codo de tenista o epicondilitis lateral es una afección dolorosa del codo provocada


por el uso excesivo. No es de sorprender que jugar al tenis u otro deporte con raqueta
pueda causar esta afección. Sin embargo, varios otros deportes y actividades además de
los deportes pueden ser riesgosos.
La articulación del codo está compuesta por tres huesos: el hueso de la parte superior del
brazo (húmero) y los dos huesos del antebrazo (radio y cúbito). Hay muchas
protuberancias óseas en la parte inferior del húmero llamadas epicóndilos, donde varios
músculos del antebrazo comienzan su recorrido. La protuberancia ósea en la parte
externa (lado lateral) del codo se llama epicóndilo lateral.

La articulación del codo está unida mediante músculos, ligamentos y tendones.


La epicondilitis lateral o codo de tenista afecta los músculos y tendones del antebrazo que
son lo que extienden la muñeca y los dedos. Los músculos del antebrazo extienden la
muñeca y los dedos. Los tendones del antebrazo, a menudo llamados extensores, sujetan
los músculos al hueso.  El tendón generalmente afectado en el codo de tenista se
llama extensor radial corto del carpo (ECRB).

CAUSA
Exceso de uso 

Los estudios recientes demuestran que el codo de tenista suele ser consecuencia del
daño en un músculo específico del antebrazo. El músculo del ECRB ayuda a estabilizar la
muñeca cuando el codo está recto. Esto ocurre, por ejemplo, durante un tiro de fondo en
tenis. Cuando el ECRB está debilitado por demasiado uso, se forman microdesgarros en
el tendón, donde se sujeta al epicóndilo lateral. Esto causa inflamación y dolor.
El ECRB también podría correr un mayor riesgo de daño por su posición. Como el codo
se dobla y estira, el músculo roza contra las protuberancias óseas. Eso puede causar un
desgaste del músculo con el correr del tiempo.
SINTOMAS

Los síntomas del codo de tenista aparecen gradualmente. En la mayoría de los casos, el dolor inicial
es leve y empeora lentamente con las semanas o meses. Generalmente, ninguna lesión específica se
asocia al comienzo de los síntomas.
Los signos y síntomas frecuentes del codo de tenista incluyen los siguientes:
 Dolor o ardor en la parte externa del codo
 Poca fuerza de agarre
 Algunas veces, dolor por la noche
Los síntomas suelen empeorar con la actividad del antebrazo, como sostener una raqueta, girar una
llave o apretón de manos. El brazo dominante suele verse más afectado; sin embargo, ambos brazos
pueden perjudicarse.

Examen médico
El médico considerará muchos factores para hacer el diagnóstico. Entre ellos, cómo se desarrollaron
los síntomas, los factores de riesgos ocupacionales y la participación en deportes recreativos.
El médico le hablará sobre las actividades que causan síntomas y en qué parte del brazo pueden
aparecer estos. Asegúrese de decirle al médico si alguna vez se lesionó el codo. Si tiene
antecedentes de artritis reumatoide o una neuropatía, dígaselo al médico.
Durante el examen, el médico usará una variedad de pruebas para determinar el diagnóstico. Por
ejemplo, el médico podría pedirle que estire la muñeca y los dedos con la resistencia del brazo
totalmente recto para ver si le causa dolor. Si las pruebas son positivas, le indican al médico que
esos músculos podrían no estar sanos.
Pruebas

El médico podría recomendar pruebas adicionales para descartar otras causas del problema.
 Radiografías. Las radiografías brindan imágenes claras de las estructuras densas, como los
huesos. Pueden hacerse para descartar la artritis del codo.
 Exploraciones de imágenes por resonancia magnética (IRM). Las resonancias magnéticas
crean imágenes de los tejidos blandos del cuerpo, incluidos los músculos y los tendones. Se
puede pedir una resonancia magnética para determinar el grado del daño en el tendón o para
descartar otras lesiones. Si el médico considera que los síntomas pueden estar relacionados
con un problema del cuello, podría pedir una resonancia magnética del cuello para ver si
tiene una hernia de disco o cambios artríticos en el cuello. Ambas afecciones pueden causar
dolor de brazo.
 Electromiografía (EMG). El médico podría pedir una EMG para descartar una compresión
de nervios. Muchos nervios pasan por alrededor del codo, y los síntomas de la compresión
nerviosa son similares a los del codo de tenista.

Tratamiento

Tratamiento no quirúrgico

Aproximadamente entre el 80 y 95 por ciento de los pacientes se recuperan con un tratamiento no


quirúrgico.
Descanso. El primer paso para la recuperación es darle un correcto descanso al brazo. Es decir,
dejar o disminuir la participación en los deportes, las actividades de trabajo intenso y otras
actividades que causen síntomas dolorosos durante varias semanas.
Medicamentos. Se pueden tomar medicamentos como paracetamol o antiinflamatorios no
esteroides (AINE), por ejemplo ibuprofeno o naproxeno, para reducir el dolor y la inflamación.
Fisioterapia. Algunos ejercicios específicos son útiles para fortalecer los músculos del antebrazo.
El fisioterapeuta puede realizar ecografías, masajes con hielo o técnicas de estimulación muscular
para mejorar la curación del músculo.
Férula. El uso de una férula centrada en la parte trasera del antebrazo también puede ayudar a
aliviar los síntomas del codo de tenista. Esto puede reducir los síntomas, ya que los músculos y los
tendones descansan.

Inyecciones de esteroides. Los esteroides, como la cortisona, son medicamentos antiinflamatorios


muy eficaces. El médico podría decidir inyectar esteroides en el área de dolor alrededor del
epicóndilo lateral para aliviar los síntomas.
Plasma rico en plaquetas. El plasma rico en plaquetas (PRP) es un tratamiento biológico diseñado
para mejorar el entorno biológico del tejido. Implica obtener pequeñas muestras de sangre del brazo
y centrifugarla (girarla) para obtener plaquetas de la solución.  Las plaquetas son conocidas por su
alta concentración de factores de crecimiento, que pueden inyectarse en el área afectada. Si bien
algunos estudios sobre la eficacia del PRP no han sido concluyentes, otros tuvieron resultados
prometedores.
LESIONES POSTURALES

Las alteraciones posturales más frecuentes son la cifosis, hiperlordosis, escoliosis, y


están influenciados por los factores de riesgo.
Estructurales • Escoliosis • Huesos súper numerarios • Asimetrías • Hipermobilidad
Fisiológicos • Estados de ánimo o de alerta • Dolor • Embarazo
Patológicos • Lesiones • Mal alineación de fracturas • Lesiones vasculares
Ambientales • Frio / Calor
Ocupacionales • Tipo de trabajo • Sedentarismo
Recreacionales • Posiciones típicas de deportes
Edad - Socio-Culturales - Emocionales
EFECTOS DE LA MALA POSTURA
• Dolor musculo esquelético • Restricción articular • Desventajas mecánicas
PRUEBA CON JOVENES — EVALUACION
Toma de muestra: 55 jóvenes
Sexo: 34.6%varones, 65.4%mujeres
Promedio de edad: 19 ± 2.2 años
Promedio del peso: 64 ±15.7 kg.
Promedio de estatura: 167± 1.1cm.
Hiperlordosis lumbar: 40% si presenta
Aumento de la cifosis dorsal: 25.4 % si presenta.
Alteraciones a nivel del hombro: elevado: 58.3%, descendido: 28.3% (asimetría
86,6%), antepulsión 50%
Genu recurvatum: 49% si presenta.
Afección nivel de la rodilla: Valgo 43.6%, Varo 12.5%, Ninguno 39.3 %
Alteración en el pie: hallux valgus 22%. Pie plano: 21.7%. Pie cavo 1.7%
Alteraciones en el tobillo: valgo 29%, varo 12.7%
Test de Adams: positivo 14.3 %, negativo 85.7 %
Asimetría del Triángulo de la talla: 80%
Pelvis: anteversión 40 % retroversión 14.3 %
Alteraciones a nivel de la cabeza y cuello: antepulsión 56,7%
Alteración a nivel de la mandíbula: protrusión 18.3%

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